CARRERA TECNOLÓGICA
El dominio total de los combustibles fósiles en los medios de transporte parece finalmente destinado a ser abalado por la joven propulsión eléctrica, que se hace sentir cada vez más en una serie de aeronaves livianas proyectadas principalmente para el adiestramiento de pilotos. Con sus livianos y ultra sofisticados motores eléctricos avanzados de accionamiento directo de las hélices para un rango de 50 kW a 2 mW, la empresa alemana Siemens AG abrió el camino para esta quiebra de paradigma. Dio origen a modelos prontos para ser fabricados en serie, como el esloveno Pipistrel Alpha Electro, de la misma forma que también impulsó una verdadera revolución en curso, la de las aeronaves eVTOL, para el transporte aéreo urbano.
DESAFÍOS TECNOLÓGICOS
Para Siemens, no existen dudas con relación a la aceptación gradual de la propulsión eléctrica, juzgada por los alemanes como “el futuro estándar de gran parte del transporte aéreo, dentro de 45 o 50 años”. Por ahora, salvo raros casos, Siemens desarrolla una serie de prototipos de los más diferentes rangos de potencia para viabilizar proyectos de alas fijas de demostración de la versatilidad de la propulsión eléctrica, como el “E-Fan” de Airbus (una aeronave con dos unidades de hélices carenadas montadas en la cola), o el ya conocido Extra 330LE acrobático (ahora, con motorización eléctrica) y el Magnus eFusion, para citar algunos. Los resultados están sucediendo. El Extra con un motor Siemens de 260 kW, por ejemplo,
