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Por otra parte, el Banco de Germoplasma es una pieza fundamental para acceder al logro de
la propagación de especies, pues muchas de ellas están desapareciendo junto con la
variación natural de sus poblaciones, la cual que ha sido el motor de su evolución durante
largos periodos de tiempo. En este sentido, el mantenimiento de los recursos genéticos y su
diversidad es un requisito indispensable para el desarrollo sano de la humanidad, pues
puede llegar a ser fuente de diversos recursos aún no aprovechados.
La familia Cactaceae es, en todo el territorio nacional en general y en el estado de
Querétaro en particular, una de las más sometidas a la destrucción. Sus poblaciones están
gravemente diezmadas por los constantes saqueos y la destrucción de su hábitat. Lo anterior
ocurre a tal grado que, en ocasiones, sólo existen escasísimos individuos en el campo o,
pero aún, son ya sólo simples registros en los libros.
La destrucción de estos recursos genéticos, bien puede ocurrir por hechos tan fortuitos, pero
también tan comunes, como, la quema de una parcela, su preparación para las labores
agrícolas, el pastoreo, la apertura de un camino, la construcción de una presa, etc. De esta
manera, genes y complejos genéticos que llevaron largos periodos evolutivos para formarse
caen en el proceso de la extinción prematura de origen antropogénico. La extinción
consumada conlleva la pérdida de un patrimonio mundial con consecuencias ecológicas y
económicas que seguramente reducirán en el futuro el bienestar del hombre y arriesgarán la
continuidad evolutiva del planeta.
Una manera sencilla, pero redituable de conservar los recursos genéticos es la preservación
mediante refrigeración de las semillas, constituyendo este almacén un reservorio de
germoplama.
Otra de las tareas fundamentales de esta coordinación es la promoción y difusión del Jardín
Botánico, así como el diseño de los programas de educación ecológica de carácter formal y
no formal relacionados con la enseñanza de la botánica económica y el aprecio por la
naturaleza, respectivamente.
Dentro de esta sección de trabajo se ofrece atención a los visitantes del jardín, que
actualmente promedian 800 personas por mes, y entre los que destacan grupos de escolares
desde jardín de niños hasta nivel licenciatura, sin dejar de resaltar la asistencia de grupos de
especialistas y aficionados al estudio de las cactáceas tanto al nivel nacional como
internacional.
Coordinación de Investigación Científica
En el interior de esta coordinación se define el marco teórico, metodológico y conceptual
del Jardín Botánico, así como las líneas de investigación que se han de desarrollar y los
alcances de su impacto social y científico, las bases para su operación se fundamentan en
los conceptos básicos de la Biología de la Conservación y se busca aplicarlos en la
conservación in situ y ex situ de las especies vegetales de la región, es decir, en su hábitat y
en las colecciones del Jardín Botánico, respectivamente.
Este conjunto de especies también puede ser considerado como una sección de las
colecciones del Jardín Botánico y en él se han registrado, hasta ahora un total de 232
especies, clasificadas en 166 géneros y 70 familias botánicas. Estos registros han sido
respaldados por 440 ejemplares de herbario y las familias botánicas mejor representadas
son Asteraceae (mirasoles y aceitillas) con 33 especies, Poaceae (pastos) con 28 especies,
Solanaceae (hierbamora y tomatillos) con 13 especies y Fabaceae (huizaches y frijolillos
silvestres) con 12 especies.
Misión y Futuro
Actualmente el Jardín Botánico Regional de Cadereyta es una institución patrocinada por el
Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Querétaro (CONCYTEQ) y el inicio de sus
actividades se remonta al año de 1990, cuando se firmó un convenio de colaboración entre
el municipio de Cadereyta, el ejido de Fuentes y Pueblo Nuevo y el CONCYTEQ, para que
en once hectáreas de terreno ejidal se construyeran sus instalaciones.
La misión del Jardín Botánico es servir al desarrollo estatal a través de sus contribuciones
al conocimiento científico de los recursos vegetales, y para conducir nuestro quehacer
técnico y científico hacia el cumplimiento de está misión, se ha establecido como primera
instancia de su operatividad un Plan Maestro de Manejo y Desarrollo, el cual es una
primera versión de lo que pretende ser una acción sostenida para llevar al instituto a
convertirse en un elemento contundente e impulsor de la conservación local, pero con
proyección y reconocimiento nacional e internacional.
Un paso esencial hacia la proyección del jardín en el ámbito nacional fue su inscripción en
la Asociación Mexicana de Jardines Botánicos como miembro oficial, es decir, que es uno
de los 51 jardines botánicos mexicanos que en su quehacer incorporan todas las actividades
esenciales de un jardín botánico formal, que son: Conservación, Investigación, Propagación
y Difusión. De manera complementaria, se ha registrado ante la Secretaría de Medio
Ambiente y Recursos Naturales como una Unidad de Manejo y Aprovechamiento de Vida
Silvestre (UMA), lo que avala nuestra labor como custodios de las especies que conforman
nuestras colecciones y otorga legalidad a nuestras tareas de reproducción de plantas
silvestres.
En cuanto a los resultados más importantes generados por la institución en el último año,
destaca la entrega de 10, 000 ejemplares botánicos al Herbario Estatal "Jerzy Rzedowski
Roten" de la Universidad Autónoma de Querétaro, los cuales que servirán para ampliar el
conocimiento y la documentación de la flora estatal; adicionalmente, el Jardín Botánico ha
participado en diversos foros nacionales e internacionales, entre los que destacan el II
Congreso Mundial de Jardines Botánicos efectuado en Barcelona en abril de 2004 y el IV
Congreso Mexicano de Cactáceas y Suculentas, realizado en la ciudad de Guadalajara en
mayo del mismo año. Complementariamente, como producto de las actividades científicas
y de difusión se han publicado algunos artículos de carácter técnico e informativo en
revistas como el Boletín Amaranto (de la Sociedad Mexicana de Jardines Botánico), la
Revista Cactáceas y Suculentas Mexicanas (de la Sociedad Mexicana de Cactología), el
boletín NAKARI (de la sociedad Jalisciense de Cactología) y próximamente en la revista
italiana Cactus & Co.