"COMO TENGO LA RAZÓN TE DOY CON EL TAZÓN"

Las familias de hoy enfrentan división,

contienda, adulterio, turbación, divorcio,
intolerancia e incomprensión.

El sueño del Señor se ha acabado, ya no

hay amor, las mujeres lloran por sus
esposos, los esposos lloran por sus
mujeres, los padres lloran por los hijos y los
hijos por sus padres.

Hay caos, las familias viven un infierno, pero tenemos la salida y es la

restauración.

Para ello, tienes que hacer todo lo que el Señor te diga. Jesús hizo tu hogar,
Él lo creó y es el único que sabe cómo organizarlo.

Si estás dispuesto a obedecer la voz del Señor, lo primero que tienes que
hacer es perdonar y amar.

PERDÓN: Todos nos ofendemos, no hay una relación en la tierra que no

tenga conflictos. Algunas agresiones son más fuertes que otras (infidelidad,
inmoralidad, injusticia o violencia) pero aún así tienes que perdonar.

Para ello, debes empezar por sanar la herida, no puedes dejar pasar por alto
la ofensa porque entonces te llenarás de ira, enojo y rencor.

Tampoco puedes tomar una actitud en la que digas "Hazme que te haré y
dime que yo te diré", pues abrirás camino al espíritu de venganza.

Ante las ofensas hay que actuar de dos maneras, arrepiéntete por el daño
que has causado y perdona.

Tienes que dejar ir libre a tu cónyuge, es como si hicieras borrón y cuenta

nueva.

El perdón no es condicional, el Señor te lo ordena porque cuando no lo haces

vienen verdugos y se roban tu bendición.

AMOR: La Biblia dice que el amor nunca deja de ser, pues no depende de tu
estado de ánimo, ni de tus frustraciones, de la apariencia física o de las
circunstancias pasajeras.

Cuando conoces a una mujer y te gusta físicamente se llama

enamoramiento. Todo se basa en las emociones y en lo que ven tus ojos.

Este sentimiento es un gancho que te lleva a hacer un pacto frente al altar y

es entonces que viene el verdadero el amor incondicional, el amor que nunca
deja de ser.

Ese, es el AMOR AGAPE que se caracteriza porque está en la voluntad y no

en los sentimientos.

Nos es el amor Eros, ese amor sexual o físico, tampoco es el amor filial que
se basa en la afinidad. Es un AMOR a pesar de.

PERMITE QUE TU MATRIMONIO SEA UNA LUZ QUE BRILLE EN MEDIO

DE LAS TINIEBLAS Y NO PARTE DE LAS TINIEBLAS.