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Razn de amor Annimo

Quien triste tiene su corazn venga a or esta razn. Oir razn acabada, hecha de amor y bien rimada, un escolar la rim que siempre damas am; mas siempre tuvo crianza en Alemania y en Francia; mor mucho en Lombarda para aprender cortesa.

En el mes dabril, despus yantar Estaba bajo olivar. Entre las ramas de un manzanar un vaso de plata vi estar. Lleno estaba de un claro vino que era bermejo y fino. Cubierto estaba de tal manera que no le tocase la solanera. Una dama all lo haba puesto, que era seora del huerto, para cuando su amigo viniese,

de aquel vino a beber le diese. Aquel que tal vino bebiese en la maana cuando comiese, y de ello bebiese cada da, nunca ms enfermara.

Encima del manzanar otro vaso vi estar; lleno estaba de agua fra que en el manzanar se naca. Bebiera de ella de grado, Mas tuve miedo fuera encantado. Sobre un prado puse mi testa que no me hiciese mal la siesta; apartme las vestiduras: no me hiciese mal la calentura. Llegume a una fuente perennal, nunca hombre vio otra tal: tan gran virtud en s tena, que del frescor que all sala cien pasadas alrededor no sentirais el calor. Toda hierba que bien ola, la fuente cerca la tena: all la salvia, all las rosas

y el lirio, y las violas tantas hierbas all haba, que nombrarlas no sabra. Pero el olor que all sala a un muerto resucitara. Tom del agua un bocado y todo me sent refrescado. En mi mano cog una flor, sabed que no fue la peor, y quise cantar el fino amor.

Mas vi venir una doncella, nunca vi otra tan bella: blanca era y bermeja, cabellos cortos sobre la oreja, frente blanca y lozana, cara fresca como manzana; nariz igual y derecha nunca la visteis tan bien hecha, ojo negros y rientes, boca a razn y blancos dientes, labios rojos, no muy delgados, en verdad, bien proporcionados, por la cintura delgada, bien echa, proporcionada. El manto y el vestido, de seda era su tejido;

un sombrero lleva en la testa: que no le hiciese mal la siesta; unos guantes lleva e la mano: sabed no se los dio villano.

De las flores viene tomando, en alta coz de amor cantando, y deca: -Ay, mi amigo, si me ver ya ms contigo!Quitse el manto de los hombros besme la boca y por los ojos; tan gran placer de verme haba que ni aun hablar no me poda. -Dios seor, seas loado cuando conozco a mi amado! Ahora mi bien tengo conmigo Cuando conozco a mi amigo!

Ocho siglos de poesa en lengua castellana. Editorial Porra

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