Vous êtes sur la page 1sur 1

1.

La resurreccin no es el retorno de Jess a esta vida, Jess ya no vuelve a esta tierra, ni entra de nuevo en la historia humana, ni lo que acontece es que Jess revive. No. Jess resucita. Es decir, trasciende el espacio y el tiempo. Por eso, trasciende las condiciones de esta vida. Y as inaugura las condiciones de otra vida. Nada sabernos, ni podemos saber, de lo que es o cmo es esa nueva vida. Lo nico que podemos decir es que se trata de la plenitud de la vida, O sea, es una vida sin limitaciones y que, por tanto, coima todos los anhelos de vida que los humanos sentimos, aunque ni nos demos cuenta de que tales anhelos estn en nosotros. 2. Todo esto quiere decir obviamente que la resurreccin no es un acontecimiento histrico, sino que es una realidad que se sita ms all de la historia. La resurreccin ha sucedido. Y sucede. Pero no en nuestro mundo, sino ms all de nuestro mundo. Como es lgico, esto no es conocible por la razn o por los sentidos. Esto slo es el alcanzable por la fe. Es, por tanto, algo expuesto siempre a la oscuridad, a la duda, a los sentimientos de inseguridad. Por eso la fe en la resurreccin (la de Jess y la nuestra) es el clmen de la fe cristiana. 3. Por lo dicho, se comprende que el relato de Mateo es una especie de figuracin histrica que no sabemos si realmente ocurri tal como aqu se cuenta. Y es un relato que no coincide con lo que cuentan los otros evangelios, que ponen las apariciones a los discpulos, no en Galilea, sino en Jerusaln. Estas contradicciones responden a experiencias y teologas distintas, cosa que no tiene importancia. Lo que importa es la afirmacin del Resucitado.

Vous aimerez peut-être aussi