LOS SIGNOS DEL JUBILEO

1. El cuerno o shofar: es un pequeo cuerno de carnero,

utilizado como instrumento musical. Con ste se convocaba
a los israelitas para celebrar el Jubileo en honor del
Seor.


2. La Puerta: en las iglesias llamadas jubilares se destaca una
puerta a travs de la cual deben pasar todos los que deseen celebrar
el Jubileo. Este signo recuerda que Jesucristo es la Puerta de
salvacin: Yo soy la Puerta: el que por m entre, se salvar (Juan
10,9)


3. La peregrinacin: peregrinar durante el Jubileo nos
recuerda que nuestra Patria definitiva es el cielo; hacia ella
caminamos viviendo la fe, la esperanza y la caridad.



4. La Sagrada Escritura: en todas las celebraciones
jubilares se destaca el Libro Santo de la Palabra de Dios. Durante
el Jubileo somos invitados a acercarnos ms frecuentemente a las
enseanzas contenidas en la Biblia.



5. El Papa: es quien declara que un ao es jubilar. Durante el
Jubileo oramos de modo especial por l. Es un tiempo propicio
para acrecentar nuestro amor hacia el sucesor del apstol
Pedro y Pastor de toda la Iglesia.



6. Los sacramentos: a travs de la Reconciliacin y de la
Santa Comunin recibimos todas aquellas gracias que Dios nos
ofrece durante el ao del Jubileo. En estos sacramentos somos
perdonados, renovados y unidos ntimamente a Jesucristo.

7. Las indulgencias: son dones especiales que Dios regala a
su Iglesia en el ao jubilar. Tienen que ver con el perdn de
nuestros pecados, la conversin de nuestra vida y la
salvacin de nuestras almas. A travs de ellas somos
fortalecidos por el Espritu de Dios y animados para seguir
caminando hacia el cielo.



8. La caridad: la generosidad de Dios nos lleva a
compartir con los hermanos ms pobres y necesitados aquello
que de l recibimos. El Jubileo es un ao para acrecentar
nuestra capacidad de reconocer a Cristo en los hermanos, de
modo especial en quienes sufren. Les aseguro que todo lo que
hicieron por uno de estos hermanos mos ms humildes, por m
mismo lo hicieron (Mateo 25,40)




9. La devocin a la Virgen Mara: en el ao jubilar nos
acompaa el amor y el ejemplo de vida de la Madre de Jess.
En todas las celebraciones del Jubileo ella ora con nosotros y
nos ayuda a unirnos ms firmemente a su Hijo Jesucristo.