MAVAUD,
LA
NVOUOYA
Gabriela Rabago Palafox
Este es Manolito, preocupado Felipe y su pandilla, Susanita,
or los negocios.
iCONOCES A MAFALDA?
A MAFALDA NO LE GUSTA
LA SOPA Y TIENE UNA
TORTUGUITA. TAMBIEN
TIENE MUCHOS AMIGOS Y
UN GLOBO TERRAQUEO
QUE LA PREOCUPA
Miguelito espera una llamada, Guille, el hermano de Mafalda.
55 SITEGREENS |7éY ENTONCES PARA
— QUE CUERNOS
CAMBIAMOS
4
[;PERO MIGUELITO‘..
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INO ME VAS A
QUERER MANS?UNA TIRA COMICA EN SERIO.
EL AUTOR ES QUINO.
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[ZMECONTS MT PAPA QUE
(CUANDO ELIBA A LA ESCUELA,
A LOS CHICOS QUE ERAN
BROS BARA APRENDER,
EL MAESTRO LES BEGABA.
EN
RA
DABAI
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LOS QUE NO QUERIAN
CLASP, LOS PADRES LES.
N UNAS PALIZAS “TREMEN:
AS! QUE LA INFANCIA\
DE MiPAPA FUE UN +
URRES ROUND.
falda es una nifia co-
imo ti. Es tu vecina de
‘continente, pues vive
en la Argentina, un
ais donde —como
en México— se ha-
bla espafiol. De mo-
do que ta y Mafal
da, platicando, se entenderian a las
mil maravillas. Vive Mafalda con sus
paps en un edificio de apartamien:
tos, va a la escuela todos los dias
—tbien peinada y con uniforme, por
supuesto—, odia la sopa y quiere a
su mascota —una tortuguita a la que
lleva a pasear al parque, para que le
dé el aire fresco de la mafiana, los
sdbados.
Mafalda, sabrés, es una niita —o
piba, como dicen en Argentina—
gordezuela, fetica, con cara de alubia
Cocida y terribles ojeras de bolsa
Pero lo importante, lo que a ti y a mi
nos ha de interesar de veras, es que
or boca de Mafalda puede hablar
cualquier nifio latinoamericano, cual:
quier nia —té, por ejemplo— que
de pronto se extrafia ante un montén
de cosas incomprensibles y no halla
fa manera de preguntar a los adul
tos
“gPor qué en este pais los obreros
son morochos (morenos) pobres y no
Tubios lindos y con auto, como en
Norteamérica?”, inquiriré Mafalda. Y
5 que para ella no hay razén que
justifique tantas y tan profundas di:
ferencias. Mafalda quisiera poder in-
ventar un mundo nuevo, en el cual
no existieran las guerras, ni la gente
pobre, desvalida o enferma, Sabe, sin
embargo, que eso es imposible; asi
que se acomoda lo mejor que puede
al planeta Tierra con todas sus tribu-
laciones,
Una puede asomarse al universo
de Mafalda a través de los cuadritos
de la tira cémica ideada por Quino,
cuyo verdadero nombre es Joaquin
Lavado Tej6n. En las historietas di
bujadas por Quino, una se encuentra
con un ambiente familiar, en el que
figuran lo mismo nifios que adultos;
el autor no tiene dificultad en reunir:
los, ni el encanto se pierde cuando
aparece el malacara de don Manolo
el abarrotero, a quien Manolito —su
retofio— ayuida con los encargos
Manolito es gran amigo de Mafal
da, es un gallego de tamafio econd-
mico, bastante bestia y bueno como
un pan; detesta la “maldita peluque
ria" y tiene una paciencia infinita
para soportar las bromas y maldades
de Susanita, que no lo puede ver ni
en pintura. Esta Susanita —siempre
la Haman asi, en diminutivo— es
otra nifia con’ cabeza de alubia, de
cabello rizado y genio levantisco.
Luego estan Felipe, Miguelito, Liber:
tad_y Guille, el hermano de Mafalda.
Son los miembros de una pequefia
pandilla en la que el bien més pre-
ciado es la amistad. Se quieren ver-
daderamente, ActUan, piensan, hacen
y deshacen lo mismo que un chiqui
Hlo que una puede encontrarse a la
vuelta de la esquina,
Mafalda es una piba inteligente y
libre. Es carifiosa y responsable, Las
cosas que dice divierten y hacen re-
flexionar. Sia veces grita y deja es-
capar una palabrita medianamente
gorda —cuernos y recuernos, idiota,
jdemonios!,, ;pucha! (caramba)—, lo
hace por desahogar alguna contrarie-
dad que la ha puesto de malas, pero
no por ofender realmente. Los nifios
son asi.
Después de 10 afios —y un po-
quito més— de haber sido inventa:
da, las aventuras de Mafalda se pu-
blican en mas de ocho idiomas
distintos: italiano, portugués, aleman,
francés, finlandés, espafiol, danés,
holandés y aparecen en los diarios
y revistas de muchas ciudades, en el
mundo entero,
Mafalda es una buena cosa que
leer, sobre todo si a ti te gustan los
libros de historietas. Ast sabrés de
los acontecimientos que afectan la
vida de estos muchachitos argenti
os, y comprenderés por qué Mafalda
es una papusita, es decir, una nifia
linda, encantadora, a la que se antoja
besa, justo en sus amplias me: gy
jllas de frijol.
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