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Porta Primes © In de diseio de Sersio Fernénde: Bravo a edicién: 1976 stituto Nacional Hidalgo y Matamoros Printed in Mexico ‘osofia de la Universidad de Munich, Alemania, y en 1970 icenciatura én filosofia y letras de la Universidad de Valea fispaiia. Después de un periodo de trabajo en un provecro sarrollo de area en la region de Kwango, Republica de pire, en 1970, y de actuar como docente en la Repiblice de B lego a México para cursar estudios de pos- grado en la Universidad Iberoamericana, donde recibie ls ae. tria en antropologia social a fines de 1974, presentando cone Preliminar del trabajo aqui publicado, ‘Al empezar su estudio en sociolingiistica, en 1973, su pri- acion necesaria para llevar de los estudios mesoame- fener un conocimiento la sociolingitistica. Inmediata. mente tuvo que enfrentar los dos problemas que se le presentan * cualquier estudiante de habla castellana que entre cn enc {apo ide estudio; en primer lugar, faltan estudios sintétions sobre el campo: no hay obras clasicas, ni textos moderns que lingitistica en forma didactica. Para conocer el Campo se deben consultar docenas de articulos dispersos, cada No de los cuales representa una pequefia parte de lo que es Ie sociolingiistica. En segundo lugar, la mayor parte de les waa 10s criticos para la comprensién del tema no han sido tradueidos or lo que dominar el campo requiere tambien do- el francés y el alemin, Al enterarse de los problemas para la adquisicién de un cono- gimicnto de 1a sociolingiistica, el tema de la tesis de Francieeg Sinches-Marco fue cambiando de un estudio en bose a een 5 lingitistica, a un estudio de la sociolingiiistica; sus lecturas se diigieron, cada vez més, a investigar el desarrollo del campo como base para poder interpretar el trabajo actual El presente libro es el resultado de una redacci6n del trabajo que fue presentado como tesis. Contiene un estudio historico, desde el siglo xrx, del desarrollo del campo que hoy conocemos con el nombre de “sociolingiiistica’. El énfasis de la presenta- cin esta en los trabajos de los personajes que representan la cumbre de la sociolingiiistica en su época; en cierto sentido es el estudio del linaje de los sociolingiiistas de hoy. No es un libro escrito para lingitistas profesionales interesados en los detalles del desarrollo de la metodologia cientifica del campo, sino para todo aquel que quiera conocer el desarrollo del pensamiento sociolingitistico: los conceptos, las teorias, la vision del mundo de los participantes de este proceso. En’ este sentido, es una obra dil como guia de la literatura que el estudiante puede usar ‘como base para estudios posteriores y de mayor profundidad. Este volumen es la primera publicaciéa que aparece como resultado del Programa de Lingiiistica del Centro de Investiga- siones Superiores del Instituto Nacional de Aatropologia Historia (CIS-INAH), que inicié sus actividades en octubre de 1973. Una de las funciones del programa es la de preparar estudiantes para la aplicacién de las teorias, técnicas y puntos de vista lingilisticos a las sociedades y culeuras mesoamericanas. Agradecemos a Francisco Sanchez-Marco el haber afrontado la gran cantidad de trabajo que fue necesario para producir esta contribucién Nicuotas A. HorKins J. KaTHRYN JosseRAND Introducci6n ‘when practitioners of a social science field such as anthropology study its history, they should learn co be historians, but not forget 10 be social scientists Dans Hvaes, 1963, p. 70. Aunaut & titulo de este trabajo sefiala de manera general el campo estudiado, creo conveniente comenzar delimitando los objetivos pretendidos. Desde el inicio, mi primera intencién fue la de concentrarme en un estudio que desentrafiara el contenido s métodos de esa reciente rama de la lingiistica que se ha bautizado con nombre de “sociol El curso de las lecturas y pesquisas modificé répidamente plan previsto. La dificultad principal con que uno se encuentra al enfrentarse con la soci ygilistica es la ambigiiedad y falta de campo. Se trata de una nueva corriente que todavia no ha sistematizado de manera suficiente el aspecto © y que avanza por medio de muchos y muy diversos estudios analiticos de distintas situaciones y context inque desde el punto vista metodolégico hu- biera sido valido centearme en el analisis de la sociolingiiistica considerada como realidad énoma, crei no sélo util, sino también necesario, investigar la historia de la lingiiistica ¢ ir descubriendo las diferentes tendencias, corrientes y autores que de diferente manera, unas veces remota y otras mas directa, han ido posibilitando lo que hoy conocemos con el nombre de so- ciolingiiistica. Inmediatamente surgié el-problema de delimitar el campo del andlisis. Las relaciones “lenguaje-cultura”, precursoras de los intereses sociolingiisticos, tienen una larga historia que se Femonta hasta Ia antigiedad. Se trataba, por tanto, de un campo de estudio que rebasaba los limites de este trabajo, Por todo ello decidi tomar un punto de partida mis accesible ue, por otra parte, tiene una influencia directa sobre el naci, miento de la sociolingiiistica. Me refiero a la aparicién tematica de la antropologia lingitstica a finales del siglo pasado, en los Estados Unidos de Norteamérica. El surgimiento de figures te. les como Boas y Sapir sefala el comienzo de un nuevo enfoque tly Ssignificativo en el estudio de las relaciones lengusje. cultura. Dicho enfogue, aunque suftié notables influerciae cambios de perspectiva, es una constante que llega hasta nave, » diversificada en diferentes tendencias, una de las cua les es precisamente la sociolingtiistica Me parece importante recalcar desde un principio el sentido del andlisis de la antropologia lingiistica estadounidense, que ‘ocupa gran parte de este trabajo. El enfoque con que he afton. tado dicho estudio sdlo se entiende si se tiene presente el inte, és sociolingitistico que estuvo en el origen de todo el traba, De esta forma se comprenderin tanto la insistencia en algutios femas como Ia ausencia de otros, indispensables en un esta, dio cuyo aiicleo estuviera en la misma antropologia linguiscee [UL intencion es la de decectar en la historia de la antropologia lingtiistica los momentos y las tendencias que, de un © one manera, han conformado y posibilitado el campo de la socio. lingiistica Sélo si se tiene en cuenta este interés sociolingiiistico, que Penetta en forma muchas veces latente en el curso de’ este analisis, se entendera el sentido de los capitulos dedicadoe al estudio de la escuela de Paris y de la lingtiistica rusa. Se uate de dos enfoques diferentes del de la antropologia lingiistica cour dounidense, en Ia manera de concebir las relaciones entre ol lenguaje y la sociedad. El movimiento denominado escuela de Patis ' resulta impor- 8, €n especial Alf Sommerfele, denomin, 0 centrado en Paris como The French Se unto puede consultarse el an Linguistics", 1961 11 movimiento of Linguistics. Sobre este o de Sommerfele “The French School of 8 nte desde el punto de vista de la sociolingiistica por ser pio- 0 en lo referente a la influencia de las concepciones sociold- as sobre los estudios lingiisticos. La influencia de personali- lades y teorias tan determinantes como las de Auguste Comte y Emile Durkheim tuvo eco inmediato en lo que respecta a la apertura de nuevos horizontes en el campo de la lingiistica. En resumen, el nacimiento de la sociologia aporta una nueva pers- pectiva que pone de relieve la importancia del factor social y precisamente, al descubrir la importancia de este nuevo plan- te0, hubo una serie de lingtlistas que decidieron incorporarlo al campo de anilisis. De esta manera se constituyé la escuela de Paris, cuya importancia ha sido muchas veces menospreciada en historia dea linge, Respecto al andlisis de la -comienzo que sus objetivos son mas limitados, Dicha tem. dencia no aporta nuevos enfoques ni, siquiera, una concepcién sistematica de las relaciones lenguaje-sociedad. La raz6n que me incliné a incluir su an jo fue mas bien de tipo histérico. En efecto, el desarrollo de la lingiistica rusa en este siglo constituye un’ ejemplo de una de las dimensiones més importantes de la sociolingiistica: la importancia politica del lenguaje. Las teorias de Nicolai Marr y, més tarde, la famosa critica de Stalin, parten de una base politica que analizar la esencia social del lenguaje, asi como las funciones que cumple en las estructuras sociales. Creo ademas importante el estudio de la lingiistica rusa porque analiza desde una plata- forma sociol6gica ~el materialismo dialéctico— diferente a la de Durkheim y la sociologia francesa, la interaccién entre leaguaje y sociedad Finalmente, falta referirse a la ultima parte de este estudio, investiga el desarrollo de la sociolingiistica en el curso de la liktima década. Cuando ya se han analizado los autores, los en- fogues y las corrientes que posibilitaron su apariciéa, resulta mas facil concretarse al estudio de lo mas peculiar y original aportado por esta nueva te de la lingtifstica Una vez explicado, en lineas generales, el campo y el proceso seguidos en este estudio, seria quiza conveniente apuntar las Fazonés que guiaron la eleccién del tema, En primer lugar result decisiva la carencia de introducciones sistematicas al 9 Sidi de Ia sociolinguistica en lengua castellana. Quiza debido a0 reciente de esta ciencia o a su confinamieno alas fronterns los Unidos de Norteam la sociolingiistica re- falta, todavia hoy, terreno extraio al lector de hablacareliane Pot otra parte, me parecié importance analizar en foros seen, matica el desarrollo del estudio de las relaciones Tenguaje- Guinita, ya que se trata de un tema que incluso en la biblionrafa Gitadounidense se ha estudiado de una manera parcial y ecpora, ica: No adsquate general history of anthropology, cand theres none at all for linguistic antbrop remains t0 be done.t lio sino también en su mismo enfo- Sonchee io, Hubiera resultado arriesgado lanzarse a una inven. coe analitica sin estar respaldado por una teoria adecusas X unaue ya comienzan a aparceer estudios mas sistema, sobre la misma teoria sociolingitistica, ere! necesria, dedicarme analicentl® de sintesis hiscorica que posibilite fururos trobarce analiticos en el campo. Respecto a la metodologia seguida, creo haber sido ya su Quiero ane ,cxplicito al delinear Ia génesis de este «abein Rulsto, sin embargo, destacar a importancia de los comeaSy bistoticos en que pretendo enmarcat los diferentes avogcens ¢l desarrollo de los estudios lenguaje-cultura, No me queda ya sino apuntar las dificultades que encontré en Siaautso de la investigacion, Por una parte, las derivados ae Le largo de 2, cnfoaues tan diversos con que se ha analizado, a la largo de la historia, el tema de las relaciones enere al Tenguaje y ta cultura o la sociedad. Dentro de este pluralema gran veces ustdo por las diferentes condiciones historicas, mucha aba dificil encontrar el hilo conductor que asesurarc social y cultural del lenguaje E.ott© campo generador de dificuludes, muchas veces insal- vables, es Ia falta de una adecuada bibliografia. Coms apuntaba * Hymes, 1963, p. 99. 10 is crib, I carenca de trabajos en espaol sobre el tema que ‘ocupa es casi absoluta. Ademés, Ia bibliografia inj sinter a etn a espaol: Por todo ello he esmerado en presenta un scopo bbliogrifico de temas cionados con Is sociolingisica, que ayude a conocer Ios hilog een abeyance tees publcados hasta 7-H entato biligrico que aparece al final de cada capitulo 2 BEG OH CtE lee petite ec ae cnee aquellos EPCS ae eee! Jo ulsera cerminar ests introduccon sin expesar mi ara clone aide esr inte aren especial al cis-iaH- que contribuyeron a la génesis de este trabajo. forma especial deseo mencionar a los doctores Nicholas A. ayuda y consejo la realizacién de este estudio hubiera do mucho més dificil ¢ incluso, quiz, imposible. |: La antropologia lingitistica estadounidense Biv ste primer capitulo me ocupo del anilisis de las relaciones Jenuaje-cultura a lo largo de la historia de Ia antropologia esta- nnidense. La importancia de este estudio estriba en que es fecisamente esta corriente la que, en su desarrollo mas re- iente, origin6 el surgimiento de la sociolingiistica. Divido el capitulo en tres partes que corresponden a los tres riodos mas caracteristicos, tanto de la lingtiistica como de la ropologia lingiiistica estadounidenses, a lo largo del siglo xx Desde Franz Boas, y quiza antes, desde W. D. Whitney y Daniel Brinton, hasta la aparicién de la sociolingiiistica, el enfo- Y la atencion hacia la antropologia lingiistica han sido muy jet50s. Hubo épocas en las que el estudio de los lenguajes genas polarizé el campo de Ia lingtiistica. En otros tiempos, especialmente cn la era bloomfieldiana, la antropologia lingiis- 2 qued6 relegada a un segundo plano. Debido a las caracteristicas peculiares de cada una de las tres tes en que divido el capitulo, comienzo siempre por analizar Cl contexto historico de las diversas épocas. De esta forma re- ita mas facil centrar y comprender las concepciones de los ingiiistas que estudio. a primera parte da cuenta de lo que podriamos considerar como el nacimiento de la antropologia lingtistica. El segundo neriodo se centra en cl anilisis de la época bloomfieldiana. nalmente, en la tercera parte, analizo el desarrollo de la lin- wiistica y su relacién con la antropologia durante la segunda guerra mundial y el periodo de la posguerra. LA ANTROPOLOGIA LINGOISTICA HasTA 1925 Contexto bistérico Para entender el contexto en que se movi mericana a partir de mediados del siglo x1X es preciso tener en cuenta algunos datos muy significativos. Por una parte, la pri- mera revista consagrada a temas relacionados con Ia ciencia lin- glistica no aparecié hasta 1920. Se trata del International Journal of American Linguistics, fundado por Boas con el objeto de difun- y comunicar los diferentes hallazgos en el estudio de las lenguas indigenas. Por otra parte, en lo referente a la lingiiistica general habia tres obras principales que seguian siendo norma para los lin giiistas: el estudio de William Dwight Whitney publicado en 1875, The Life and Growth of Language, la Introduction to the Study of Language de Leonard Bloomfield, 1914, y finalmente el librito Language de Edward Sapir, que se publicé en 1921, Nin- guno de estos estudios era plenamente satisfactorio. El libro de Whitney era ya un tanto anticuado, el de Bloomfield estaba demasiado influido por las teorias psicolégicas de Wundt y el de Sapir era un manual de divulgacién para el gran publico. Una de las razones que hacen mas explicable la escasa pro- liferacién de estudios consagrados a la ica general es el enfoque de la antropologia, y por ende de la lingiistica norte- americanas, que se dirigia hacia las culturas indigenas. La ne- cesidad urgente de conservar los datos mas importantes de so- ciedades y cultiras en vias de extincidn acaparo la arenci6n de antropélogos y lingiistas ‘Al tener presente esta situacién se comprende mejor la des- proporcidn entre los muchos trabajos consagrados a la descrip- in de las lenguas indoamericanas y aquéllos dedicados a temas de lingiiistica general. Mientras en Europa el ambiente lingitis- roblemas tedricos que iban a dar ori- gen a diversas escuelas lingiiisticas, en Norteamérica, por el la preocupacién fundamental se confinaba a los pro especiales de transcripcién y descripcion que presenta- De hecho, desde mediados del siglo xix existia una tradici6n ‘en el estudio de los lenguajes indios y en su clasifica~ y Brinton pueden ser considerados precursores en. stitimas décadas del siglo x1x las concepciones domi es en el campo de la antropologia lingitistica estadouni se resumian en un libro publicado por John Powell en Introduction to the Study of Indian Languages. No hay que flvidar que el interés preponderante era el de reducir Ia enorme iversidad de lenguas indgenas a unos principios clasificatorios {que pusieran un cierto orden en el caos lingti Powell propone precisamente una nueva tipologia cl lenguas indigenas. Li season de Powell result revoluctonaia incluso en 1880. base de interpretacién evolucionista dejaba entrever la jerte influencia que tuvo en sus ideas Lewis Henry Morgan. No ha de extrafiarnos que en un ambiente fuertemente influi- por las ideas de Charles Darwin, como era el de finales del sinlo xix y comienzos del xx, se aceptara la interpretacién evolu- nista en la clasificacion de las lenguas. Un patente ejemplo : ello es Whitney, quien se declara convencido del “progreso fe las lenguas desde los niveles inferiores a otros superiores De todas maneras el impulso definitivo en el estudio de las nguas indigenas hay que atribuirselo a Franz Boas, no s6lo por 1 compendio de las lenguas indigenas, Handbook of American Indian Languages, sino por la influencia determinante que tuvo bbre sus discipulos, como Edward Sapir, Alfred L. Kroeber Leonard Bloomfield. De las ensefianzas de Boas se deriva prec nente la “antropologia lingiistica”, corriente caracteristica de ingiiistica estadounidense. vw reciso subrayar una vez mas cémo, dentro del ambien- te norteamericano, los temas lingiiisticos nacen en estrecha co- ‘exidn con investigaciones etnoldgicas, Esto es tan cierto que si se pensara en caracterizar brevemente a la lingiiistica norteame- ficana de fines del xix habria que hablar de una “lingitstica incropol6gica’ En efecto, si nos remontamos en el tiempo, podemos vislum- brar una continuidad histérica que nos lleva desde los proble- mas y direcciones planteados hoy en la lingtifstica antropol6- 15 gica hasta las orientaciones que ya comenzaban a surgir en el siglo xrx, Dejando a un lado el anilisis de otros temas lingiiisticos, por otra parte secundarios en esta época, voy a tratar de clasificar los diferentes intereses y tendencias que empezaron a aparecer en el campo de Ia antropologia lingtistica del siglo x1x. Creo, por otra parte, que dicha clasificacién puede resultar iluminadora en cl momento de analizar a los diferentes lingtiistas-antropologos que habrian de llevar hacia adelante esta tradicion, Un primer foco de interés de la lingiiistica antropologica de mediados del xrx lo constituyen las cuestiones referentes al ori gen del lenguaje, asunto éste muy discutido en épocas anterio. Fes, aunque casi siempre desde el punto de vista filosofi De todas maneras este interés por el origen del lenguaje fue perdiendo actualidad ya en el siglo xix y en las primeras decades del xx. Los intereses en este terreno fueron orientandose mas bien hacia el problema de la prioridad entre el pensamiento y el lenguaje. En este sentido la obra de Benjamin Lee Whorf, que aremos més tarde, resulta muy significativa. Una nueva expresion de esta problematica vuelve a aparecer én la antropologia reciente, cuyo interés no es ya el del origen del lenguaje sino el del origen de la capacidad del habla, Cues tién compleja que requiere un enfoque interdisciplinario, en el que no puede faltar la aportaciéa de la lingtifstica Un segundo punto de interés de la lingtiistica del siglo xix son los anilisis de tipo hist6rico y comparativo. Es ya habitual deft_ air a la lingitistica de esa época como hist6rico-comparativa, Se trata de una disciplina que pretende ser exacta y objetiva y que logra constituirse en una especialidad. Una de sus caracteristicas Principales es la intencién de basarse en datos empiricos para la Teconstruccién de diversas lenguas. El objetivo de esta tendencia es la reconstruccién de la prehistoria de Jos pueblos indocuropeos a través del estudio y la comparacién detallada de las diferentes lenguas. En su co. mienzo, la lingiistica comparativa se ciié al campo de las len. guas indocuropeas, obviamente relacionadas entre si, Por la comparacion de diferentes formas se pretendia reconstruir el desarrollo hist6rico de las lenguas hasta llegar al tronco comin Al aplicarse al estudio concreto, este método histérico- 16 n rodujo aportaciones muy importantes, que condi- Bip eee ee salen ieee ae legs a formular una teoria general sobre los diferentes procesos de cambio en el lenguaje. Se encontraron ciertas regularidades en los cambios, las leyes de Jacob Grimm, que indujeron a pensar en unos principios generales independientes de la voluntad Humana, algo asi como leyes naturales de las que dependian los ingiisticos. Un ejemplo de ello es la co- lamados “neogramaticos”, uno de cuyos princi- los fandamenales esl regularidad en el cambiorfonésco, par propio de esta corriente comparativista cener una vsde’orgiaice del lengunje. Se considetsoa a tx versus lenguas como organismos naturales y se sacaba la con- clusion de que Ja lingiiistica era una ciencia “natural”, con e! mismo método que las demés ciencias naturales. Asi, primero August Schleicher y después otros lingtistas tabajaron en la formacion de arboles genealdgicos que fueron dando razén del arentesco de las diferentes lenguas. ° Pafista tendencia que, a primera vista, puede parecer aurnoma y alejada de la antropologia linguistica, no lo fue en la practica. De hecho, a partir de todos los datos lingiisticos proparlon dos por los andlisis comparativos, pudieron reconstruirse ele- mentos muy diversos de las antiguas culturas y comunidades indoeuropeas. x El eercer foco de ateacién se. polariz6 en, torno a la posible importancia de las diferencias existentes entre los diversos len- ,iiéndose ala formas y asus diferentes tipos, Pero, con del siglo xx, los intereses se concentraron mas bien en Ectaiem eager sorza on sigifcados 1 lenguajes diversos. Esta corriente modificé algunas posicio- eunien Ci eecane cancion al elaborar una visidn de las relaciones lenguaje-cultura diferente a tipélogos anteriores. 2 estudio de las diferencias existentes entre diversos lenguajs, segin el posible significado mental y cultural aue podian impli car dichas diferencias. Durante alsin tiempo ésts trataron de explicarse como resultado de la € Pero, a comienz del xx, con la aparicién de Boas, fue perdiendo prestigio ese 7 tipo de interpretaci6n, tanto en antropologia como en lingitistica is tomaron como objeto de su estudio la tipologia iferentes procesos gramaticales y de las funciones diver. sas que se encontraban en cada lenguaje. Se trata, en fin, de una corriente muy fecunda dentro del campo de la ancropologia lingiistica, ya que trabajé sobre un terreno tan id6neo como es el de la enorme diversidad de los lenguajes is Un cuarto foco de atencién fue el relativo a todas las cues- tones referentes a la fonética. Aunque en aquel contexto hist. rico resultara quiza un punto menos importante que los anterio. tes, sin embargo se sinti también la necesidad prictica de los conocimientos fonéticos, especialmente en muchos problemas relacionados con las comparaciones y en la solucién de enigmas con que se enfrentaban antropdlogos y misioneros al topar con Jenguajes sin escritura, Hacia 1860 y en la década siguiente comenzaron a aparecer los primeros fundamentos de lo que mas tarde se convertitia en tuna parte muy importante de la ciencia lingiiistica. Los objetivos iniciales fueron més bien de tipo pragmitico, y de esta manera las investigaciones se dirigieron hacia la elaboracién de sistemas de transcripcién fonética que tuvieran la suficiente elasticidad como para adaptarse a una gran diversidad de sonidos. Los nue~ vos sistemas fonéticos dieron su fruto de inmediato, ya que petmitian obtener datos mucho mas objetivos y exactos que los que se lograban anteriormente, Este campo resulté también propicio para la incubacién de un Gerto relativismo lingiistico debido a los numerosos criterios diferentes que podian emplearse ~y de hecho se empleaban_ en los diferentes lenguajes para reconocer rasgos fon: Y, como iltimo foco de atencién, aunque en cierta manera engloba a los anteriores, esta la preocupacién por el estudio de las Ienguas de los pueblos indigenas. La principal tarea de la antropologia en esa época era la reconstruccién del pasado no escrito de las diferentes culturas y grupos indigenas. De aqui el auge que experimentaba la antropologia linglifstica como in: trumento idoneo pata el logro del fin pretendido, En un primer paso se persiguié la clasificacion de los diferen- tes lenguajes en familias que reflejasen de algiin modo una 18 ara ello tuvo que inten- cierta unidad de cultura y costumbres. Para ello tuvo que int ase Deena eO Re od Jenguajes mas antiguos, desde ace tiempo extinguidos. En este campo se emplearon a iy judo muchas de las técnicas que ya habian sido Sn Hey ‘on los lenguajes indoeuropeos. De todas maneras hubo i 1amiento y avance de las diferentes técnicas descrip- ‘ivas, tanto en lo referente a los sonidos como a la estructura de noe ir 6 al estudio de las ero el motivo fundamental que imp lenguat indigeass fue de po exrolbpltn. Soldier eld nio de los diferentes lenguajes se lograba descubrit concep. 10s importantes dentro de la cultura, asi como conocer €l esi de vida y muchas de las tradiciones orales y miticas que s¢ encuentran en odas las sociedades. one, Todas estas diferentes corrientes, a menudo vacilantes guras, que fueron surgiendo en la segunda mitad del siglo xx y Comigazos del siglo xx, explican en gran parte las orieataci : osiciones, asi como los focos de atencion en los que habrian die cenerar su trabajo los cientificos mas interesados en el campo ‘ica antropolégica. inse- as relaciones lenguaje-cultura de la espués de haber esbozado el desarrollo y el contexto de Tngharis eaadoontiense bupecel weiney exend Sela a s més detallado de los autores que ca- fa lingiistica de esa Epoca cativo el que Hay que considerar como dato altameate signi ice an tres antropélogos directamente relacionados tnundo germinico, bien por nacimieato 0 por ascendencia, quienes enfatizaron el estudio de la cultura dentro de la antro- Pologia estadounidense, Tanto Franz Bons como Edward Sevie Y Alfred L. Kroeber son, en iltimo término, eibutarios de la cin alemana establecida por J. G. von Herder y més earde ¢ Wilhelm von Humboldt. Por tanto no se puede calificar de bicrario el ver ciertas reminiscencias de la doctrina in de Humboldt en la manera peculiar en que estos s conciben las relaciones lenguaje-cultura. ced $0 Primera época en que se e temitica las relaciones lengua-cultura figura de Boas. No s6lo cre6 ms origin6 una fuerte trad sstudian de forma més sis- resulta muy importante la un nuevo enfoque, sino que ade- habria de perdurar durante la antropologia lingilistica Aunque tanto Sapir como Kro SEN ess Sy reber enfatizan aspectos diver- xxto general de las relaciones | lo caracteristico de estos aute ided ln wadiciog meaennetstieg de estos autores esau fidelidad a la tadicon ca en la manera de concebir la area y ; gia lingtistica, que es caracteristica Boas, Sapir y Kroeber, contrasara con el desarrollo ponericg ic esta disciplina, que consideraré mas adelante no ef tado que he seguido en el estudio de los autores citados if le detectar y analizar temas o enfoques mas o menos comunes, sino el de estudiar la forma particular en que cade autot se ha planteado y resuelto, en el contexto y el ambiente tistorico en que le toc6 vivir, el problema del lenguaje consi. derado como parte de la cultura y la socieda. Todavia en esta poca no se lograba una sistematizacin com- pleta del campo de la ai le la antropologia lingiiistica. Aunque la con- Cepcién de Boas sefala una direccién, eada autor pol ou ieee cion anterior y su situacidn concreta, aporta enfoques originales us enriquecen la linea trazada por Boas. De esta manera se va formalizando poco a poco el estudio de las relaciones cate et lene eae 4 Poco el estudio de lasrelacionesexistentes Franz Boas ee ae We iglo xix y comienzos del siglo xx) tan denses, resulta determinance la figura de tens eae a auien se suele deci que comienza la etnologin moder hon oa pease €s el inicio de una nueva etapa que rompe Seataienae ae ete es en el ambiente antropolégico * Hymes, 1964, p. 7. No pretendo esbozar sistematicamente las ideas y concepcio- nes antropolégicas de Boas. De todas maneras, el punto focal de nuestro anilisis, la antropologia lingiifstica, iluminara de forma ecta las mayores contribuciones de Boas al campo de la inceopologia. .. Bl empefio fundamental de Boas tuvo siempre como punto ‘de partida el estudio de las culturas indigenas americanas; sus primeros contactos con este campo fueron vacilantes y se cen traron demasiado en el aspecto externo de las_culturas. En efecto, Boas pensé durante un tiempo que el enfoque geo- fico era el mas adecuado para comprender la diversidad de las culturas. No obstante muy pronto, y como resultado de sus primeros trabajos sobre el terreno, llegé a la conclusion de que no seria posible lograr una visién completa del mundo indigena un estudio profundo de cada cultura. Y a esta tarea consagré en forma ejemplar. toda su actividad. ‘Aunque los hallazgos de Boas y su descripcién de diferentes culturas fueron no solo muy importantes sino incluso a veces decisivos, su mayor contribucién a la antropologia estadouni- dense consistié en crear una tradicién, una nueva forma de concebir el trabajo antropoldgico. ¥ como prueba de esta afir- macién basta citar a antropélogos y lingiistas como Sapir, Whorf, Kroeber, Swadesh y Bloomfield, muchas de cuyas con- cepciones se derivan claramente de Boas, cuya tradicién conti- niga hasta nuestros dias. En el punto que ahora nos interesa, el de Ja antropologia lingiistica, es preciso ver en primer lugar el acceso de Boas a este campo del estudio de la cultura, Deciamos més arriba qu Boas se consagré al estudio empirico de muchas de las tribus indigenas norteamericanas, intentando desentrafar los diferen: tes rasgos culturales. En seguida cayé en la cuenta de que toda descripcién de una cultura que ignore el lenguaje y la literatura del pueblo sera, no solamente superficial, sino que a la vez se prestara facilmente a concepciones falsas de muchos rasgos cul- turales. Este es precisamente el origen de su interés por el lenguaje y de su concepcidn de la lingiiistica como una parte de la antropologia. En este contexto és preciso hacer notar que Boas era un autodidacta en el campo de la lingiiistica. Fue el contacto con las au es ly aan ip y ; ela. Y quiza haya eee a paca ee he pice aia ae estadounidense, uae interpretacion evolucionista soste fica aon be Fi ear una nueva tipologia clasi de acuerdo con otros principio: romper con la enida or Powell y Brinton y icatoria de las lenguas indigena izinales, tie culo introductorio al Handbook of que se convirti6 en el punto de arranque Comenz6 proclamando la nee diversidad de categorias grama cada lengua. En este sentido a zaban categorias propias de los lenguajes indocuropete frentarse al estudio de las lenguas indigenas, Eoce eespaaen cultural constiuia interpretaci6n evolucionista. genes va corrient idad de respetar y reconocer la ticales propias y peculiares de acd a las metodologias que u Metodologia Boas divide el estudio d ts ide ede ngs ecg dice por una parte todo lo referente a la descripe ion ee ee rai iad con cee, t P F ius eng finalmente, todos los Procesos gre ica a ue estructuran la expresin de los Pensamier fina ai, EI principio m 6 de Boas eee dil ae waoloaeD fundamental de Boas es el de ice! i ‘mpiricamente a cada lengua con el minimo oate le Ponchos ey as Pole tar los lenguaje le ificaciones superficiales indigenas de las clasificacion, ; in clasi si y de ordenarlos, Taconcepcién de Boas se fundamenta en la lenguaje tiene su propio sistema gramatical original y adap- ss de su cultura. Por eso, la tarea del antro- logo y del lingiiista consistira en lograr descubrir esas catego- s peculiares y en ver cémo se forman y como expresan las ones entre las ideas. ¥ todo ello con sumo cuidado de no roducir nociones o elementos de anilisis propios de otra cultura, ‘Asi podemos explicarnos por qué Boas prefirié el método de contacto directo con informantes nativos dentro.cle su propio ambiente cultural. Siempre pens6 que éste era el nico método que garantizaba una cierta objetividad en la descripcién de los fferentes tipos de lenguajes y culturas. Por ello también atri- buy6 una importancia fundamental al trabajo de campo reali- -opio ambiente cultural de la sociedad cuya lengua ‘Muy pronto comenzaron a crear escuela los métodos de Boas que, por otra parte, representaron una saludable critica a gene- faciones y teorias que se creaban sin un adecuado anilisis empirico que las legalizara. Un conocido ejemplo de ello es la célebre conversacion mantenida entre Boas y Sapir. Parece ser que Sapir le comenté a Boas una serie de conclusiones a las que habia llegado en sus ani ricos y éste, por su parte, se content6 con citarle ejemplos de lenguas indigenas en las que no se verificaban los principios defendidos por Sapir. Fruto de esta conversaci én de Sapir hacia la necesi- id del estudio directo del mayor ntimero posible de lenguas indigenas, Relaciones raza- -culcura do lo re a las posibles relaciones entre la raza, la len- gua y la cultura concentraba la atencion y las discusiones a c mienzos de este siglo. No hay que olvidar, como deciamos mas arriba, que las teorias de Darwin y de Morgan seguian teniendo gran importancia y fundamentaban la posicién evolucionista en lo referente al desarrollo tanto de las razas como de las lenguas y culturas. Entre los antropélogos estadounidenses de fines del siglo xix se dejaba sentir claramente la concepci6n evolucionista 23 ice intl tansformacién de las sociedades a parti de los Franz Boas, quizd debido a su pasado cultural clar Berminicoo a su preparacion en elcampode lance ee {eo hay que olvidar que durante cierto tiempo se consanre al estudio de Ia fisica), se caracteri26 desde un comienso cate ceurempordneos por la sobriedad cientifica. Y, en nombre le Ga Hor, se alz6 contra las exageraciones que, quizd fomenue das por el ambiente, cometieron algunos antrepdlonee city SES sere Mee WieBowell4llerdotione gh cece Hidiculo las posiciones evolucionistas. Muestra de ello ce Lene guiente afirmacién de McGee:* no The savage stands strikingly coe to sub-buman species ine of mentality as wel as in bodily babits and bod vrsenaee et Seria erréneo pensa i ei ‘© Pensar que Boas se opuso a las teorias evolue Clonee a poess £8 realidad, se declaré contra ciertas aplice, Giones del método comparativo, también entonces de mein ‘ue le parecian poco rigurosas : ero la polémica no fue el método cos método con que Boas combatié fichas posiciones exageradas. Su misma inclinacion empitica lo evo mas bien a reunir los resultados de sus miiltiples investiga- lenguajl 7 Pasat asi su posicién de que tanto la raza como'el -nguaje y el tipo de cultura no estén e meee tipo de cultura no estan estrecha y permanente- Hoas Sostiene una cierta independencia evolutiva de los tre aspectos citados, posicién que fundamenta en toda una soe de detallados andlisis mediante los que Pe ranetae continuidad de una raza sin conti bien continuidad en I fe evolucionisca. Por el contrario, cts aac yntrario, piensa que la interaccion de diferentes aspectos, tales como el ecologico 0 * Chr. M. Harris, 1968, pp. 250-289, § McGee, 1901, p. 13, * Boas, 1911b, p. 154. 24 histérico, no permite crear cuadros evolutivos que se desa- rrollaran de una forma regular y constante: 1 think shat even the differentiation of the more important subdivi- sions of the great races antedates the formation of the existing linguis- tic families." Esta posicién de Boas ataca la costumbre -bastante extendida en aquel entonces- de pretender deducir determinados niveles de evolucion cultural a partir de determinados tipos de desarro- llo lingiistico y viceversa. Contra esta posicién alza Boas su merodologia, conforme a la cual considera necesario analizar exhaustivamente cada caso concreto antes de poder Megara afirmaciones generales. Ademés, defendié una cierta relacién, por lo demas evidente, entre el Ienguaje y la cultura. Un ejemplo patente de ello es su estudio sobre los esquimales. Al analizar las diferentes palabras que usan éstos para referirse a la nieve, Boas esta afirmando la manera en que el vocabulario refleja una cultura determinada. De todas maneras, no creia que la relaci6n entre la lengua y la cultura fuera reciproca. Si pensaba que la forma del lenguaje es modelada por el estado de la cultura, pero en cambio no creia que un determinado nivel de cultura estuviera condicionado por los rasgos morfolégicos del lenguaje. De aqui nace precisamente el relativismo con que se ha califi- cado la posicion de Boas, y que podriamos definir como su actitud de observar todo lenguaje adaptado a la cultura y a las sidades y circunstancias de la sociedad que lo habla, Esta postura de Boas es muy importante porque rechaza toda Ja concepeién anterior, y muy en concreto la de Powell, segiin la cual existen lenguajes primitivos incapaces de servir en estadios culturales mas avanzados. Boas piensa, por el contrario, que todo lenguaje posee una cualidad esencial que lo hace apto para satisfacer las necesidades de la cultura y de la sociedad que lo habla. De hecho, la posicién de Boas en el ambiente cultural de comienzos del siglo xx era muy valiente. Seguian surgiendo mu- chas explicaciones de las diferencias del lenguaje basadas en * Boss, 191 interpretaciones raciales y ambientales, e: cionistas. Aqui, la tactica seguida por recopilar much la misma capacidad como ‘nsamiento y el mismo potencial para desa- tenidos culturales mas avanzados, ediaramente le planteaba esta inerpre- de explicar la diversidad de los lengua Con este fin desarrollé su teor los Jenguajes. Lo original de esta aportacién se centra en los ¢o ceptos de necesidad y utilidad, que constituyeron ¢ la explicacién boasiana de la variabilidad lingiistica, De esta manera rechaz6 Boas la opinion de que los lenguales primitivos tenian u a tales sonidos o incluso la ar a generalizaciones. Su opinién es que cada lenguaje posee la misma capacidad, y que su grado de desarrollo se explica a partir de las necesidades que poste la acion lingilistica a er el interés de Boas por la investigaciéa lin- ghistica es preciso ver con clatidad los méviles que generaron su sreneeo antropologico. Robert Lowie * los sintetiea certera- mente cuando afirma que la meta de Boas era averiguar como es la vida aborigen vista por dentro, i. EI método que siguié Boas para alcanzar su objetivo ha sido criticado durante muchos aos por una gran parte de. gos. Su empefio por lograr una documentacion lo va posible de las diferentes culturas lo minuciosa recoleccién de datos, sin que la mayoria d Se preocupara por sintetizarlos en una visin de conj éste es precisamente el blanco de las criticas, unas certeras y iempre ha resultado mas sugestivo y brillante moverse a nivel de generalizaciones ¢ ideas que den razon de los diversos aspectos de las culturas. Pero hay qué jue, en Ia época de Boas, y aun hoy, dichas ge muchas veces resultan subjetivas y a menudo dad, por no tener como base una adecuada y recoleccin de datos. Hay que reconocer también que Ia tendencia an Boas lo llevé, quizé en demasia, hacia el anilisis empirico. Pero, 6n hist6rica.” No tienen en cuenta que la preocupacién por conservar muchos d los rasgos culturales y las costumbres de diferentes tribus y dades en vias de extincién polarizaba la atencion de a siglo xix. Por otra lar la proliferacién de generalizaciones superficiales, y aun falsas, que quiza jugaron Parte importante en su reaccin analitica En este contexto resulta mas explicable el interés de Boas por el estudio de las lenguas habladas en las sociedades que investi- gaba. Para él la lengua constituye uno de los rasgos culturales mis aptos de ser estudiados con la mayor objetividad. Pero no solo esto, sino que, como sefialaba mas arriba, considera esen- cial el anilisis lingiistico dentro de la investigacién etnolégica Porque la lengua tefleja la mayoria de los rasgos culturales de un pueblo. Aunque la formacién lingiistica de Boas es en su mayor parte autodidacta, logra sintetizar sus ideas de forma brillante y clara famoso articulo introductorio al Handbook de las lenguas corigenes. Voy a considerar brevemente algunas de las princi- pales ideas expuestas en esa introduccién, que nos permiten percibir las preocupaciones lingiiisticas de Boas. Comienza Boas insistiendo en la necesidad practica del estu- dio de las lenguas indigenas. Su labor como antropélogo, que considera esencial el trabajo de campo y la recoleccion directa datos, lo llev6 rapidamente a sentir la dificultad del trabajo con gente que habla un idioma totalmente diferente. La comu- nicaci6n se vuelve fragmentaria y parcial, de forma que resulta casi imposible captar las concepciones mas generales cultura. * M. Harris, 1968, pp. 250-289, Durante mucho tiempo se habia pretendido remediar dicho problema con el uso de intérpretes que conocieran ambas len. Buas, la nativa y la del investigador, Precisamente Boas era re. conocido en el ambiente antropologico por la calidad «de los intérpretes con que trabajaba. Sin embargo, fue el primero en expresar su insatisfaccién por los resultados obtenidos mediante este método. Pensaba que, aun cuando se trabaje con los inter. Petes en su propio ambiente, muchas veces no son fieles en la transcripcion de sus observaciones. Por otra parte, el material Gon que s¢ trabaja ya no es genuino, puesto que se compone de datos filtrados, de segunda mano. Es més, Boas se preocupé por comparar materiales obtenidos por diferentes observadores y antropdlogos y llegé a la conclusién de que son mejores y mae fleles los datos obtenidos por aquellos que conocen la lengua de la sociedad que investigan. Por todo ello insiste Boas en la necesidad de aprender los idiomas nativos. Le parecen indispensables para comprender de manera adecuada tanto las creencias como las costumbres de los Pueblos, ¥ ciertamente, la mayor parte de los antropdlogos con experiencia de campo reconocen que muchas veces el material mas significativo proviene de conversaciones informales y casuales, que presuponen el dominio del idioma nativo. Pero, junto a la necesidad practica, defiende Boas la necesi- dad de un estudio te6rico de las diferentes lenguas como algo indispensable para el avance de la etnologia. Esta afirmacion ‘que, tomada aisladamente, puede parecer ~artir del mismo concepto que tiene Boas d ejemplo de ello es la definicién que sigue: the science dealing with the mental phenomena of the life of the beoples of the sworld, El lenguaje, al constituir una de las manifestaciones més im- Portantes de esta vida mental, pertenece con pleno derecho al campo de la etnologia tal como es concebida por Boas. Gracias a esta aportaci6n comenz6 a considerarse el estudio del lenguaje como una de Jas ramas més importantes del campo etnolégico. No se concebia una visién etnolégica completa sin © Boas, 1911, p. 63 un conocimiento préctico del lenguaje. ¥ la raz6n Gltimd siste en que los mismos conceptos que ilustran los lenguajes nanos responden a los diversos fenémenos etnolégicos. Ademis, este interés notorio en Boas -y més tarde en su lo Sapir por retacionas Ia lingietiea con las investiga: nes antropoldgicas, habria de tener una inmediata repercu- 2a luis de yascalov de catalog estadounidense tra palmaria de ello ¢s la estrecha colaboracién y asocia~ cién de la antropologia y Ia linguistica que, durante largo tiempo, comparten el mismo departamento en las universidades norteamericanas. A veces se olvida que no se trata de una cir- cunstancia casual, sino que es el fruto de ese trabajo conjunto que Ilevaron a cabo lingitistas y antropélogos, muchas veces unidos en la misma persona, en el extenso territorio de las lenguas indigenas. Conelusién sealed dabldarsts Us othe lo los pioneros en los diversos campos de la cien- be eu ab ortactica orl luso paradig- miticas, que conmovieron las bases en que se apoyaba la inves- tigacién vigente, se hacen rutinarias y comunes "tides quid ot pichlcmg conse tea analizar la impor- tante posicién de Boas en el campo de la antropologia lingtiis- tica. Sus aportes nos parecen hoy poco menos que evidentes € incluso nos resulta a veces dificil imaginar cémo en su tiempo revistieron el caracter de proposiciones revolucionarias, Por todo ello es necesario hacer un esfuerzo de ambientacién hist6rica para comprender la importancia capital que tuvo la aficmacién fundamental de Boas, de que es necesario describir cada, lengua empleando términos propios y dejando a un lado os esquemas preconcebidos. No olvidemos la revolucin que supuso en el campo de la docencia el que Boas, fiel a sus convic- ciones, empleara métodos empiricos de instruccién, no par- ia estructura de cada lenguaje a partir ilisis de textos originales. 29 Muchas otras fueron las contribuciones de Boas al campo de lingitistica: normas para la investigacion histo. Y parentesco de las lenguas, caracter incons. Giente de los fenémenos lingii yar una vez mas la imporcancia di le la aportaci6n de Boas al problema de las relaciones lenguaje-cultura. Por una parte se tats de la primera concepcién importante en este campo que opologia norteamericana, Por otra parte, la fcoria de Boas origind una tradicién continuada por eminentes 08, como Sapir, Whorf y Kroeber. Incluso. puede irmarse que la concepcion de Boas contiene en germen lag ideas que mas tarde, al evolucionar y sistematizarse, ce converte rian en la famosa hipstesis Sapir-Whorf, Hay que reconocerle ademas a Franz Boas el acierto de dejar Claramente asentados unos principios basicos en la antropolowia ingliistica. Acierto tanto mas valioso si se tiene en cuente el ambiente de confusién ideolbgica en que se debatié Boas, Por todo ello, no es exagerado afirmar que con él comienms won ‘nueva etapa en el campo de la antropologia linguist Edward Sapir que Franz Boas, también Edward Sapir nacio en tierras germanas. De todas maneras muy pron Hos, pas6 a los Estados Unidos de Norteamérica, donde haben de recibir toda su formaciin académica, Hay que dejar sentado desde un principio que Sapir se con- virti6 en un discipulo predilecto de Boas. La profunda influen, sia de su maestro nunca se borraria de las concepciones sa s, el contacto con Boas fue lo que determind su etés por la lingtiistica general y la antropolo, en una nota cronolégica escrita a la muerte de §; § narra tuna significativa conversacion, a la que aludiamos mis arriba, entre Sapir y Boas, y que supuso una nueva orientacion en log intereses del discipulo. Ya por entonces Sapir habia recibido en la Universidad de Columbia una formacion lingiiistica tradicional, centrada ale, dedor de 1a filologia germana. Por ello su impresién fue grande ™ Swadesh, 1939, 30 cuando Boas, con ejemplos tomados de los lenguajes rechaz6 todas las concepciones de la lingiiistica tradicional que los dogmas os en los andlisis de Jos lengu: jes indoeuropeos, se convertian de repente en afirmaciones parciales y de valor relativo. J A partir de ese momento el interés predominante d estudi Sapir se centeé deci lo el conjunto de la cultura humana y en los diversos sistemas simbélicos que la manifiestan. De todas maneras ~y es la opinion de Ch, Baude- Sapir sigui6 siendo ante todo ui ta, No deja de ser significativo, sin embargo, que la mayor obra, inconclusa, de Sanit talaga The Pavebelgy af Culies Concepcién lingistica De ninguna manera deben reducirse los teabajos lingiiisticos de Sapir a la influencia boasiana. Mi Sapir 90 solamente Hlevé adel flujo de Boas en dos ingitistica de Sapir. En primer éticos tomados de ha- blantes nativos, y a partir de los cuales se intenta estudiar de manera inductiva los lenguajes vivientes. Para Sapir, en efecto, los sonidos del lenguaje no pueden set entendidos si se los considera en términos puramente mecnicos, Nada mejor para s conclusiones de un célebre articulo es- crito en 1923: The whl aim and spr of this ape ashen tsa tat phonic benomena are not physical phenomena pet se, however nee. tary may bene tthe pan ebay ober pe embodiment. The present discussion is really a special illustration of ‘the necessity of geiting bebind the ence data of any typeof expre " Baudelot, 1967, p. 8 in order to grasp the intuitively felt and communicated forms which alone give significance to such expression. "® La segunda gran influencia de Boas se refleja en la importan- cia dada por Sapir al estudio de los lenguajes en su contexto cultural y social. David Mandelbaum,'* compilador de los arti- culos de Sapir, insiste varias veces en este rasgo sin el cual, segiin él, no se comprenderia la obra de éste. Por tanto, para entender la concepcidn lingitistica de Sapir, es preciso tener en cuenta dos aspectos: por una parte la mirada analitica de lingilista, con la que se acerca a los datos del le guaje y, por otra, su concepcién de la lingiiistica como una Sapir deja a un lado los problemas relaciona- dos con Is lingiistica pura en los que habia estado interesado durante una gran parte de su formacién, y se concentra ahora en el anilisis de las relaciones que unen al lenguaje con la cultura. Creo que Baudelot ilustra en forma sugerente algunos de los, aspectos en que se centran los estudios de Sapir:'® ~ Ia influencia reciproca de las categorias gramaticales sobre s conceptos culturales y de los modelos sociales sobre las tructuras lingilisticas; la incidencia de los préstamos lingiiisticos sobre los es- quemas intelectuales y las transformaciones que provocan sercepcién del universo; isis comparado de las mutaciones lingiiisticas y de 5 cambios culturales: la significacidn social de los cambios individuales y dialec- la descripcién de los comportamientos lingiiisticos, vistos como conductas sociales: la interaccién de las lenguas y culturas; el analisis de los rasgos culturales contenidos en cada palabra. Quizd fuera preciso aiiadir a esta sintesis de Baudelot otros dos aspectos que se reflejan en los escritos de Sapir. Por una 9 Sapir, 1925, p. 51 parte, la relacién del lenguaje con el medio ambiente, es decir, que podriamos denominar la ecologia del lenguaje; por otra, las implicaciones politicas del lenguaje y su repercusion en el ontexto nacional e internacional. Toda esta concepcién de Sapir tiene como trasfondo una firmacion explicitada por él mismo en 1933:"" Language is a great force of socialization, probably the greatest thas exits. By this is meant not merely the obvious fact that significant ‘octal intercourse is hardly possible without language but that the ‘mere fact of a common speech serves as a peculiarly potent symbol of the social solidarity of those who speak the language. Una vez que Sapir llega a esta concepcidn del lenguaje le resulta poco comprensible que existan lingiistas que vivan con- jos en el campo de la “‘lingiifstica pura”. Ahora ve mas bien la lingiistica y al estudio del lenguaje como una guia para el estudio cientifico de una cultura dada. Es més, llega a afirmar que a su parecer es imposible comprender los rasgos de una cultura sin dejarse guiar por el simbolismo lingtiistico. Por otra re, el lenguaje, tomado como material etnol6gico, Gene so- re los otros datos etnoldgicos la gran ventaja de constituir un 4s homogéneo y coherente y, sobre todo, mas estable; cualidades todas que incluso facilitan su andlisis. En definitiva, el influjo de Boas resulto a la larga determi- ite en las investigaciones lingiisticas de Sapir, que acabaron tomar una orientacién particular, en la que el contexto ural y social resultaba particularmente importante, Relaciones lenguaje-cultura En este campo es donde mas claramente se reconoce la pro- funda huclla dejada por las concepciones de Boas en su disci- pulo. La importancia de este cema tan enfatizado por Boas ia reflejada en un capitulo de Language, en el que Say iza las relaciones existentes entre el lenguaje, la raza y la cultura.” '« Sapie, 1933: citado de Mandelbaum, 1949, p. Sapir, 1921, pp. 221-235, Los resultados de las investigaciones de Sapir en este terreno confirman las hipétesis de su maestro. Por una parte, aquél llega alaconclusién de que no existe necesariamente una correlacion entre lengua, raza y cultura. Tanto las razas como las lenguas y las culturas se entrecruzan, Ademés, sus historias difieren mu- cho entre si. No hay, por tanto, correspondencia o correlacion centre la forma de la cultura y la forma del lenguaje. Tampoco se puede deducir de una forma concreta de cultura un tipo de Tenguaje que le corresponda. Es mas, Sapir llega a la afirmacion explicita ' de que, en su opini6n, no existe una verdadera rela- ion causal entre la cultura y el lenguaje. 'Y sin embargo Sapir, como Boas, piensa que el contenido mismo del lenguaje esta intimamente relacionado con la cul- tura. Mis atin, ye en el vocabulario un indice grafico de la manera en que una lengua refleja la cultura de la que es expre- sion, En un articulo publicado en 1929 ' expresa Sapir de forma muy concisa y sintética toda su concepcion en lo que respecta a las relaciones lenguaje-culeura: Language isa guide 1 ‘social reality. Though language isnot ordi- narily thought of as of essential interss to the students of social wien- «et powerfully conditions all our thinking abont social problems and Drocese Human beings... are very much atthe merey ofthe parca lar language which bas become the medium of expresion for their society. Estas ideas reflejan el ambiente creado por la famosa intro- ducciéa de Boas al Handbook of American Indian Languages,"® en la que explicitamente se afirmaba cémo la investigacién lin- gilistica es una parte esencial del anilisis cultural. Otro aspecto que nos revela la importancia del estudio del lenguaje para el conocimiento de las culturas es el relacionado con el difusionismo cultural. En este campo existe una pequeia divergencia de matices en la forma en que Boas y Sapir conci- ben el difusionismo relacionado con la evolucida de los lengua 8 Thid,, 1921, p. 233 Mandelbaum, 1949, p. 162. s.*! Se trata de diferencias de detalle, puesto que ambos admi: nel hecho del difusionismo cultural. Sapir se da cuenta de que son muchos los objetos culturales jue se han ido difundiendo en conexién con su terminologia.®® este sentido, un estudio sobre la distribucion y la extension dichos términos puede resultar muy importante para cono- cer el desarrollo y las influencias sufridas por las diferentes culturas. Prefigurando incluso el desarrollo que varios decenios mas de iba a tomar la sociolingiistica, Sapir recomtienda al socié- logo que analice las diferencias lingiiisticas encontradas en cada comunidad. Para él tales diferencias no son sino expresiones de la forma en que una cultura 0 sociedad se organiza.*® Con el tiempo esta idea habria de dar cohesién y estimulo a toda una serie de anilisis que acabarian configurando el nuevo campo de sociolingitistica Pero no terminan aqui las indagaciones de Sapir en torno al contexto cultural en que vive el lenguaje. Hay otros aspectos que llamaron su atencién y uno de ellos fue la manera en que se comportaban tanto el lenguaje como la cultura frente blema del cambio. En este campo Sapir llega a la conclu: que los elementos de la cultura cambian més rapidamence que los del lenguaje, y que son ademas los elementos de la cultura los que van continuamente recreando el lenguaje."* Por otra parte observa Sapir ** cmo, precisamente por causa de los cambios, llega un momento en'que las formas del len- guaje dejan de simbolizar las de la cultura. Los cambios cul- turales se han producido més répidamente que los del lenguaje, creando una pasajera desarmonia. Y enfatizo lo de pasajera porque es conviccién de Sapir que, a pesar de la diferencia en el ritmo de los procesos, todo cambio importante en la cultura va acompaiiado por un cambio correspondiente en la lengua. * fr. Swadesh, 1951 * Sapir, 1929, citado de Mandelbaum, 1949, pp. 162-163, "hid, p. 163. Un desarrollo amplio de esta afiemacién de Sapir se encuentra en el articulo: 2 sment", publicado por Sapir en 1912 y editado 'D. Mandelbaum, 1949, pp. 89-103, is la funcionalidad del lenguaje dentro de cada cultura, No admite comparacién de las lenguas en ter. minos de avanzadas y retrasadas 0 de mas 0 menos evoluciona- das. Piensa, por el contrario, que cada lenguaje responde a una situacion cultural concreta, y que debe ser examinado con los instrumentos de andlisis apropiados sin pretender aplicar al es- tudio de unos lenguajes ~los nativos americanos, por ejemplo Jos esquemas lingilisticos de lenguas diferentes, como las in- doeuropeas. Sapir observa casos concretos en los que se ejemplifican sus ideas y asi toma el ejemplo de nuestra cultura, que tiene como bases ¢ instrumentos indispensables los términos abstractos sin los cuales nuestro pensamiento dificilmente podria expresarse. Pero, a la vez, dichos términos abstractos son menos e incluso Poco frecuentes en otras lenguas que responden a culturas mas pragméticas. Every languase, we may conclude, posseses a complete and psychologi- cally satisfying formal orientation, bus this orientation is only felt in the unconscious of its speakers ~is not actually, that is, conscousl, own by them." Finalmente Sapir analiza otros aspectos mas externos del len- guaje. Se fija en la lengua como vehiculo de rasgos culturales descubre algo que le parece importante para el cientifico soc el andlisis de formas especiales del lenguaje, tabiies y formulas esotéricas, en cada cultura, asi como la funcién que cumplen dentro del contexto social. Resumiendo con palabras de Swadesh *? la concepciéa de Sapir a propésito de las relaciones lenguaje-cultura, hay que decir que Sapir aprendié muy pronto a ver a la lingiistica como tuna ciencia social y que su interés por la antropologia cultural y la psicologia estuvo completamente integrado con su interés por la lingtiistica 2 Sapir, 1924, citado de Mandelbaum, 1949, p. 155. # Swadesh, 1939, p. 133 36 Relaciones lenguaje-politica Apenas se ha hablado de este aspecto de la obra de Sapir. Sin embargo, hoy en dia, cuando cada vez resulta mas evidente la estrecha conexién del lenguaje y la politica y cuando incluso en muchos sitios el lenguaje pasa a simbolizar un arma politica, resulta interesante analizar el pensamiento de Sapir a este res. ecto. Sapir ® estudia el problema de las influencias de unas lenguas sobre otras. Pero se trata de influencias unilaterales 0, en termi sologia actual, de “imperialismos culturales”. Las lenguas de las naciones que se han convertido en centros de irradiacién cultu- ral ejercian antiguamente una clara influencia sobre los paises colindantes. Y en nuestra época este problema-ha adquirido escala universal debido a la difusién de los nuevos medios de comunicaci6n, para los que han desaparecido las fronteras, Considera Sapir que el tipo de influencia mas importante es el de préstamos de palabras a través de las fronteras lingiiisti- cas; 79 de esta manera, tal como indicébamos mas arriba, resulta posible, a través del andlisis de las palabras, reconstruir la difu- sién cultural Ante esta situacién de invasién cultural el pueblo agredido iende a convertir su lenguaje particular en la expresion de su ‘onalismo. La lengua comienza incluso a tomar ciertos carac- fetes misticos y simbdlicos. Piensa Sapir °° que las actitudes represivas con respecto a las Jenguas y dialectos de los pueblos subordinados aparecen por vez primera en la politica europea mas reciente, En otro lugar 1 se remonta, sin embargo, hasta la formacién de las grande Jenguas nacionales de Europa hacia el fin del periodo medieval. ‘Observa entonces el nacimiento de influencias politicas y socia- les que comienzan a amenazar el statu: de los dialectos regio- es. Bl lenguaje de la corte crece en prestigio y comienza a ifundirse a costa de los dialectos locales. Llega un momento en que el habla local se hace vergonzosa pues ya carece del presti- gio que tiene el lenguaje estandarizado. De esta manera, se fue 1949, p24 Ibid, p. 30. ‘Sapir, 1931, citado de Mandelbaum, 1949, p. 86, formando la concepcién que ve un lenguaje primario caracteris- tico de la nacién, y diversas formas locales de habla que no pueden reflejar la cultura y que se consideran como variantes degeneradas de la norma primaria a Ret se Sabie lg eine ee 8 doa dco , mas atin, las lenguas regionales, surgen como una necesidad en grupos sociales circunscritos y homogéneos. Los dialectos no son una forma bastard del lenguse sino simplemente la forma socializad de es tendencia universal de vriacin en el habla Ea lo dis ;presa la peculiaridad de la comunidad que Y como sintesis final de I ) las concepciones sapirianas a las que mis tarde volveremos, puesto que Peoria trientes precursoras mas importantes de la sociolinguistica, voy a transcribir unas palabras de Benjamin i pemmateas aed pela jamin Lee Whorf, discipulo Sapir ha hecho mas que cualquier otra persona por inaugurar Is aproxmacon ligt al pewamint y conser qv ea demostrar la importancia de la lingiistic: nap ANGEL demos i aistca para la entropologia y Alfred Kroeber Ouro de los dscipulos de Boss fue Kroeber, quien continu la linea trazada por su maestro, poniendo un énfsis especial en el estudio y el anilisis de los diferentes rasgos culturales. En el aspecto que aqui nos interesa considerar, el de las rela- jones lenguaje-sociedad, Kroeber acept6 los enfoques de Boas, que ya eran tradicional en la antropologia estadouni- lense. Pero es preciso tener en cuenta que incluso antes de fecibi las enseaanzas de Boas, ya se habia desperado en Kroe- ber un interés especial por la lingtstica * que fue precisamente “que lo orient hacia el campo de la antropologia y lo llevé més tarde a considerar las ensefanzas de Boas. ‘ id. p. 83. 2 hoi 1956y, cin del vein expla de ™ Kroeber, 1952, p. 173. Aidt haps ney 38 Este interés personal de Kroeber estaba centrado principal- mente en las relaciones historicas existentes entre las lenguas. ‘Ademés, este mismo interés fue el causante de que Kroeber 10 solamente se contentara con seguir las ensefianzas de Boas sino {que las llevara hacia adelante de una forma original. Por todo llo se lo debe considerar como uno de los pioneros en lo que respecta al estudio del lenguaje dentro de su contexto cultural. Mientras que mas tarde, con el auge de la sociologia, las relaciones lengua-cultura y el mismo nacimiento de la sociolin: bdistica més explicita, habrian de gitar basicamente en torno al Estudio de sociedades contemporaneas con sus problemas ca- tacteristicos de estratificacidn social, en esta época, por el con- trario, el enfasis se pone en culturas homogéneas y general- mente iletradas que exigen, naturalmente, un método particular de anilisis. ‘Lo que le interesaba primeramente a Kroeber era el estudio de las culturas y, secundariamente, la lingiifstica en cuanto que Constituye uno de los aspectos mas importantes de la cultura ‘Siguiendo a Boas, Kroeber observa a cada cultura como algo nico e irrepetible. Por ello hay que acercarse a cada una en sus propios términos, sin querer catalogarla mediante cinones to Paados de culturas diferentes. De aqui que el lenguaje de cada Cultura resulte especialmente importante, puesto que refleja lo propio de cada sociedad. "Al enfrentarse al estudio de las culeuras indigenas, y espe cialmente de las radicadas en California, Kroeber se encuentra Con el problema, ya afrontado por Boas, de la falta de documen- tos escritos, Por otra parte, se desconocian todavia los avances decisivos que més tarde aportarfa la arqueologia y que permiti rian clasificar temporalmente los datos culturales. Por todo ello Kroeber se enfrenta con un conglomerado de datos culturales heterogéneos, muy dificiles de clasificar. Frente a este reto recurre a la lingiistica como instrumento gue le permita ordenar el caos de los materiales etnologicos Muy pronto el estudio de los origenes de los parentescos y de la difusion de los términos se convierte en guia indispensable para lasificar Jos datos y llegar a una comprensién mas plena de las culturas indigenas. Este enfoque peculiar nos explica que Kroeber no se quedara 39, en el ambito de las generalizaciones culturales sino que se viera obligado a recurrir a los estudios analiticos, ocupandose de pro- blemas fonéticos asi como de todo lo referente a la incorpora- cin y derivacién de términos. No obstante, detras de estos estudios se hallaba siempre la preocupacién por llegar a la com- prension de una cultura particular. Incluso, como nota Dell Hymes,"* se da ya en Kroebs que de forma marginal, un interés por la variacién social refle. jada en el habla. Precisamente es éste el punto central de su estudio sobre los dialectos de Yurok.* De todas formas, en aquella época el énfasis especial de los estudios lingiiistico- antropologicos estaba centrado en lo que el mismo Kroeber lamé dimensién lingifstica del parentesco, Relaciones lenguaje-cultura En el caso particular de Alfred Kroeber, como bien sefiala R. Beals,.” el interés central que lo condujo al campo de la antro- pologia fue su empefio por explicar las diferencias de conducta observadas en las diferentes sociedades. Ante este problema ens6 que s6lo mediante el estudio de las diferentes culeuras se podria dar raz6n de la diversidad de conductas. Ya dentro del campo de la cultura se expetimenta una cierta sensaci6n de desconcierto ante la multitud de datos y caracteres tan diversos ¢ incluso heterogéneos. Ante este marasmo de rasgos culturales, Kroeber cayo en la cuenta de que el lenguaje 5 uno de los mas regulares y persistentes; ademis, en su em- pefio por clasificar y reducir a una unidad los datos etnologicos, vio en el lenguaje un modelo a seguir, ya que su homogeneidad ¢s la mas consistente que se puede encontrar dentro del campo de Ia cultura. Por todo esto llegé a la conclusién de que si alguien desea conocer bien la cultura de una sociedad es preciso que domine primeramente su lengua. No setia justo, sin embargo, pensar que Kroeber identifica al Jenguaje con la cultura, En un importante anilisis publicado en 3% Hiymes, 1964, p. 694. 3% Kroeber, 1960 % Beals, 1968, p. 455. 40 160 ** trata precisamente de las diferencias existentes entre 1 nguaje y la cultura reflejadas en el enfoque diverso con que se jan ambos. Por otra parte, el lenguaje es menos permeable atlas influencias, y esté a la vez més condicionado por su pasado, que otros rasgos culturales. Por ello en el estudio del lenguaje, principalmente de las lenguas indoeuropeas, se utiliza el andlisis, las relaciones genéticas, mientras que el estudio de la cultura se sigue basando en especulaciones elaboradas a partir de algu- ce en eae, intima que se da entre lenguaje y cultura. El mismo Kroeber ™ se da cuenta del hecho, mas tarde analizado en profundidad por la sociolingiiistica, de que el auge de las civilizaciones leva consigo el establecimiento de una especie de supralenguaje que se convierte en el lenguaje del gobierno y de las clases presti- Darn ilustea de forma. defiaitiva era concepcién respecto a las relaciones del lenguaje con la cultura, nada mas sugerente que unas palabras de L. Bloomfield, seleccionadas por el mismo Kroeber en su famosa recoleccién de los conceptos y definicio- nes de cultura:*? Every language serves as the bearer of a culture. If you speak a lan- ‘guage you take part, in some degree in the way of living represented by that language. Lingiiistica y antropologia la parte consagrada al estudio de las ideas de Boas conside- rabamos la necesidad de conocer el lenguaje nativo para com- prender una cultura concreta. Kroeber es fiel a su maestro en este punto y recalca la necesidad del antropélogo de dominar la lengua nativa. Es mas, se trata, segiin Kroeber, de una de las relaciones més evidentes y a la vez mas importantes de todas las existentes entre la lingiiistica y la antropologia. 9, 1952, pp, 230-231 Al La dinica diferencia que ve Kroeber entre el lingitista y el antropdlogo consiste en que este tiltimo analiza lenguajes que en su gran mayoria son iletrados. De aqui que el antropdlogo lingiiista tenga que abandonar muchas veces los métodos histo- ricos tradicionales de la lingiiistica, basados en el andlisis de textos, para refugiarse en el método comparativo, empleando Ginicamente lenguas vivas. La importancia de Boas y Sapir -y también de Kroeber- en el ‘campo de la lingitistica antropolégica radica en haber enfatizado la dimensi6n lingiistica del parentesco. Precisamente a partir de Kroeber surgiria en la ancropologia estadounidense una nueva tendencia centrada en el anilisis formal de los términos de pa- rentesco. La explicacién de las relaciones de parentesco basada cn las instituciones y practicas sociales resultaba incompleta ¢ insatisfactoria. Era preciso crear un nuevo sistema de légica clasificatoria, que muy pronto encontré acogida en el campo antropolégico, Respecto a las relaciones de la lingiistica y la antropologia, el interés de Kroeber se concentré en la metodologia lingiiistica y en la posibilidad de su aplicacién a la antropologia y al estudio de las culturas. Para Kroeber la etnologia y la lingiiistica son interdependien- tes. Por una parte no resulta posible explicar la situacién de los Ienguajes de una regién sin conocer previamente las distribu- ciones taciales ¥' culturales de dicha region. Pero, por otra, la etnologia depende de la lingiistica, tal como lo hemos expli- cado repetidamente. Asi pues, las relaciones entre ambas cien- cias son sumamente complejas y inicamente se podra abarcar la toralidad de la cultura o sociedad estudiada mediante una labor de caracter interdisciplinatio. De todas maneras es preciso subrayar que el interés primor- dial de Kroeber en este campo estuvo polarizado por el intento de traspasar los métodos lingiiisticos, que le parecia ordenaban de una forma suficiente los elementos de las lenguas, al campo antropoldgico, donde se sentia vivamente la necesidad de poner orden dentro del caos de los miiltiples datos etnoldgicos. Muy significativa es la cita que recoge * en un an # MacRae, 1958, p. 311, citado en Kroeber, 1960a, p. 16. Cita de la 166, p. 180. cado en 1960 y que resume su punto de vista sobre k de lograr una clasificaciéa adecuada en el campo d Lo que, con toda probat momento no es un Newton ai un Darwi elabore una clasificacién manejable de las estructuras sociale del grado y variedad de las pautas y sucesiones de las instituc Metodologia linguiistica Dentro de la lingiiistica, el interés de Kroeber se concentra en el aspecto metodolégico. Su preocupacién fundamental al en- frentarse al campo de la cultura era la de encontrar un modelo que le permitiera tratar de forma cientifica el material humanis- tico. Y, de todas las ciencias sociales, es en l encuentra la actitud y el método mas parecidos al de las ciencias, naturales. Kroeber piensa que la precision y el rigor de los métodos lingiisticos deben trasponerse al campo de la antropo- logia. "fl acercamiento de Kroeber al lenguaje fue de tipo hist6rico; por ello concuerda con Ch. Hockett al considerar ala lingitistica como Ia historia natural del lenguaje. En lo concerniente a la historia, la tarea del lingitista sera la de discernir ¢ interrelacio- nar las formas del lenguaje, asi como buscar los modelos forma- les y las estructuras del mismo, E] antropélogo lingiiista tiene que partir de la base de que la investigaci6n lingiiistica es intrinseca a la antropologia. En un segundo paso su labor debe ser la de buscar analogias y pun- tos de contacto entre los modelos lingiisticos y los cultura- les, asi como la de encontrar la mejor manera de integrar los datos etnoldgicos en el estudio comparativo de los Como su enfoque va dirigido fundamentalmente hacia la biisqueda de un modelo formal que clasifique y unifique la mul- titud de datos, Kroeber esta, en cierto modo, de acuerdo con el anilisis puramente formal de la lingtiistica, defendido por Bloomfield. Sélo si se deja a un lado el componente semantico y_se presta atencién a los modelos y relaciones formales logra- rin regularizarse los fendmenos lingitisticos, e incluso se podra 43 alcanzar un cierto grado de predictibilidad, caracteristico de todo empefo cientifico. En este sentido hay que considerar a Kroeber inmerso en el ambiente que surgio alrededor de las teorias de Bloomfield, Kroeber participa de muchas de las ideas bloomfieldianas en su biisqueda de ese rigor cientifico que pretende traspasar al campo del estudio de la cultura.® 11 is clear thas to operate sucesfully as @ linguist one does not have either to personify or refy languages or to endow them with a subs- tance oftheir own. One analyses and synthesize, so lomg as results are forthcoming, as if one's data constituted a self-contained system That ultimately they are not wholly self-contained is obvious Y esta posicién, de igual manera que la de los lingiliscas bloomfieldianos, tiene una repercusin inmediata en lo refe- rente al problema del cambio linguistico. Desde un primer momento Kroeber se da cuenta de que n es posible explicar los cambios linguisticos dentro de su propio mbito, sino que es necesario recurrir a marcos explicat amplios. Son los mismos trueques de valores sociales dentro de una determinada sociedad los que provocan los cambios lingiis- ticos. Por eso, aunque en sus ani giistas tratan al Ienguaje como un campo auténomo ¢ independiente, deben set siempre conscientes de que en realidad lo que estn haciendo es delimitar su campo, dejando a un lado la investigacién de la causalidad de los cambios. Por todo ello, y en contra de lo sostenido por muchos de los lingiiistas del siglo xrx, es preciso tener en cuenta la analogia existente entre los cambios lingiiisticos y los culturales y no pretender, como a menudo se defendia, que son causas acciden- tales las que provocan los cambios lingiisticos. Debido a los enfoques particulares sostenidos en el siglo x limitaban a investigar la naturaleza y la forma de los cambios lingiiisticos, pero no legaban a formular una explicacién causal de los mismos Esta posiciGn decimondnica es, en gran parte, sostenida por * Kroeber, 1949; citado de Krocher, 1952, p. 126. 44 Bloomfield y su escuela. Se limitan a la descripcién formal y dejan a.un lado la explicacién causal por considerarla asunto de psicdlogos. En esta opinién se refleja el estado en que se encon- traba la ciencia lingiistica en aquel entonces: los principios de causalidad lingiiistica se consideraban como algo oscuro ¢ predecible que, al mismo tiempo, introducia la desarmonia en el estudio de las lenguas. El mismo Bloomfield reconocia explici- tamente el atraso de la ciencia lingiiistica en lo referente a la causalidad. Esta es la raz6n que lo lleva a dejar de lado el pro- blema. Quizd el asunto de fondo que sustentaba estas posiciones y también, naturalmente, la de Kroeber, era el reconocimiento de que las Causas que provocan los cambios lingiisticos, bien sea en la forma o en el significado, superan el nivel propiamente lingitistico y se esconden tras préstamos. difusiones, movimien- tos culturales.... En una palabra, y usando una expresién de Kroeber, las causas lingiisticas son oscuras, conflictivas y nu- merosas. Reconociendo la limitacién de la ciencia que todavia no habia encontrado la metodologia ni el instrumental necesario para el ilisticos, los lingilistas, y Kroeber entre ellos, se inclinaban por dejar este asunto de lado y cefirse a la descripcién formal de los s, campo en el que si habian logrado rigor y objetividad Y, de hecho, la aportacién mas original de Kroeber en su aspecto lingiiistico gira en torno a la trasposicidn de estos méto- dos lingitisticos, rigurosos y objetivos, al terreno de la antropo- por ejemplo, son famosas sus clasificaciones areales de las culturas, siempre concebidas con criterios lingiisticos, en contraposicién con los acercamientos exclusivamente ecolégi- cos tan en boga por aquel tiempo. En toda su obra Kroeber refleja la preocupacién por una clasificacién sistematica més apta en el estudio de la cultura y también del lenguaje. Aunque la lingiistica estaba més avanzada en este aspecto, aquél todavia no se sentia del todo satisfecho con los progresos logrados. Biste fue el contexto que impulsé a Kroeber hacia la biisqueda de enfoques estadisticos mediante los cuales lograran clasifi- 45 carse tanto los datos etnogrificos como los lingiisticos. Su lucha fue ardua, ya que tanto los antropélogos como los lingiiistas, amparados en el carécter humanistico de sus respectivas cien- cias, miraban con recelo los métodos mas matematicos. Es més, la lingiiistica operaba con cierto éxito, influida tam- bién por las teorias de Darwin, a partir de una base genética, de tal manera que no se sentia la necesidad de una taxonomia general sistematica. Sin embargo, Kroeber opinaba que, aun si se aceptaba el acercamiento evolucionista, era preciso, en un primer momento, lograr una clasificacidn que sirviera de base. 'Y mas en concreto, para lograr el acercamiento hist6rico a los lenguajes le fue preciso intentar una comparacién que tuviera en cuenta los intercambios genético: En este punto precisamente surgen las mayores divergencias entre Kroeber y su maestro Boas. El reproche principal de Kroeber es que Boas nunca logra una clasificacién sistemética. ‘Aun admitiendo la magnitud del paso dado por Boas, respecto a los lingiiistas anteriores, en la interpretacién de las lenguas, Kroeber no esta de acuerdo en su actitud de diferir la taxono- mia de las lenguas. Boas basaba principalmente su actitud en el hecho de que, sin contar con documentos historicos, resulta muy dificil determi- nar qué es lo original de cada Ienguaje y qué lo tomado como préstamo; cudles son los elementos desarrollados por la propia historia y cuales los provenientes de influencias ajenas. De aqui su recelo frente a las reconstrucciones genéticas ya que, segin 1, los movimientos de difusi6n y la influencia de unidades ge- néticas diferentes en su origen alteraban la reconstruccién lin- Bilistica Kroeber da un paso més hacia adelante sin dejarse vencer por Ja mag le las dificultades que a clasificacién de los intercambios genéticos entre las lenguas. Y 1no s6lo esto, sino que da también los primeros pasos para lograr una estadistica del léxico, germen de la posterior glotocronolo- gia de M. Swadesh, por medio de la cual intenta lograr una cronologia mas exacta de los datos lingtiisticos y culturales. En resumen, lo que le interesa de manera preponderance es método lingtiistico, su rigor y objetividad, y la forma de tras nerlo a los datos culturales. Sdlo a partir de este enfoque es 46 posible comprender la interrelacién de la lingiiistica y de la antropologia en la obra de Kroeber: 1 fel thatthe study of both culture and language isin crying need in its own right, of far mare systematic classification of therr mall- Jarious phenomens, Perhaps we have had a surplus of bright ideas land a shortage of consistent ordering and comparison of our data De esta manera Kroeber representa un paso hacia adelante en la tradicidn comenzada por Boas y Sapir. Los mécodos de acer- camiento a las lenguas indigenas se van mejorando: Las relacio- nes de la cultura con el lenguaje se precisan cada vez més. En el caso de Kroeber es la misma metodologia de la ciencia lingiiis- tica la que se intenta trasponer al campo etnologico. Este intento, que polariza su obra, es la causa de que su trabajo mas importante no esté dedicado directamente a analizar las interacciones de las lenguas y Jas culturas, sino més bien a sentar las bases y los fundamentos metodoldgicos que permitan afrontar dicho tipo de andlisis con mayor garantia de objetividad. Esta ¢s la aportacién mis significativa de Kroeber al campo de la lingiistica antropo- Logica. Comentario bibliogréfico Existen varios libros y articulos valiosos que pueden a un primer acercamiento a la lingiiistica del siglo xix y comienzos del xx. Un buen resumen de la lingiifstica del siglo xx es el logrado por H. Pedersen en su libro The Discovery of Language. Mas centrado en el campo de la cultura y de la antropologia lingtiis- tica, puede ser util The Rise of Anthropalogical Theory, de Marvin Harris. En este tiltimo libro son de particular interés para el campo que ahora nos ocupa los capitulos dedicados al evolucio- nismo y al anilisis de la posicién de Boas frente a él. También es conveniente consultar los trabajos de Francis Dinneen, An Introduction to General Linguistics y de R. H. Ro- bins, A Short History of Linguistics. Ambos libros dan una vision general del desarrollo de la lingiistica #1 Kroeber, 1960a, p. 17 Respecto al campo mis especifico de la antropologia lingiiis- tica es necesario consultar dos importantes articulos. El primero fue escrito por Dell Hymes, “Notes Toward a History of Lin- guistic Anthropology” y el segundo por Floyd Lounsbury, “One Hundred Years of Anthropological Linguistics.” Finalmente habria que mencionar la recopilacién de Dell Hymes, Language in Culture and Society, en la que se reproduce gran parte de los articulos més importantes que fueron mar- cando las diferentes etapas en la historia de la antropologia lingiistica, EI mejor acercamiento a la concepcién boasiana del lenguaje dentro de su contexto cultural es la “Introduction” al manual de los lenguajes amerindios, escrita por el mismo Boas, Se trata de un texto que puede ya considerarse como clisico en el campo de la antropologia lingiiistica Ottos textos de Boas que pueden ayudar a comprender su posicién con respecto al lenguaje son las sintesis publicadas en forma de capitulos en The Mind of Primitive Man y en laGenerel Anthropology. Otcos articulos més analiticos fueron recopilados en Race, Culture and Language. Para ubicar a Boas en el contexto antropologico estadouni- dense hay que referirse a alguno de los trabajos citados an- teriormente, En especial interesante es el capitulo que le con- sagra Dinneen en su historia de la lingiistica, asi como la referencias de Hymes y Lounsbury en los articulos mas arriba comentados. Una indicacién especial merece el amplio estudio que dedica Marvin Harris a la persona y la obra de Boas en The Rive of Anthropological Theory. Dicho anilisis contiene material e ideas valiosas pero, al mismo tiempo, Marvin Harris es injusto en muchas de sus criticas y enfoques, que no nacen siempre de una profunda comprensién de Boas sino que, mas bien, pretenden justificar las teorias del propio Harris. Otro estudio que completa la personalidad de Boas en sus miiltiples facetas es el editado por Walter Goldschmide, que recopila una serie de articulos que ponen de relieve la impor. tancia e influencia de Boas en diferentes campos de la antropo- logia estadounidense. ‘Como una primera introducci6n a la concepcién de Sapir en 48 lo referente a las relaciones existentes entre el lenguaje y la cultura puede consultarse su libro Language. Se trata de una sintesis con pretensiones introductorias al campo de la lingiiis- tica y con un capitulo referido especialmente al estudio de las relaciones de! lenguaje y la cultura. Para un anilisis mas profundo de la concepcién de Sapir es necesario conocer la recopilacién editada por David Mandel- baum, Selected Writings of Edward Sapir in Language, Culture and Personality. Habria que seitalar como més significativos los si- guientes articulos: “Language”, de 1933, que es una breve sinte- sis muy acertada de la concepcién de Sapir sobre el lenguaje; “Dialect”, publicado en 1931 y en el que Sapir estudia el pro- ceso que da lugar a los dialectos asi como las consecuencias que este fenémeno trae consigo. En “Language and Environment’, de 1912, Sapir analiza la relacién existente entre los cambios culturales y los lingitisticos. Especialmente valioso es su articulo publicado en 1929, “The Status of Linguistics as a Science”, en el que analiza cémo el lenguaje debe ser considerado como guia en el estudio de la realidad social, Si se pretende conocer el puesto y el papel que le correspon- den a Sapir dentro de la lingiiistica estadounidense habra que consultar los libros de Dineen, asi como el editado por Leslie Spier ef al., que pretende ser una contribucidn al recuerdo de Sapir. Asimismo se puede mencionar el articulo publicado por Dell Hymes en 1963, Respecto a la famosa hipétesis conocida con el nombre de Sapir-Whorf (aunque nos ocuparemos de ella mas detenida- mente) hay que referirse tanto a Language in Culture, editado por Harry Hoijer, como a la introduccién de John Carroll que aparece en la recopilacidn de los articulos de Whorf, Lenguaje, pensamiento y realidad. Entre las obras de Kroeber seria conveniente comenzar con la lectura del capitulo consagrado al lenguaje en su Antropologia General. Se trata de una introduccién sin mayores pretensiones pero que sitda al lenguaje dentro del contexto cultural Ota obra importante en lo referente a Ia relacién del len- guaje con la cultura es The Nature of Culture, coleccién de una serie de articulos significativos publicados por Kroeber a lo largo de su vida. También es preciso consultar An Anthropologist 49 Looks at History, que es también una recopilacién péstuma de articulos en los que se encuentran ideas valiosas tanto sobre el lenguaje como sobre la cultura. Respecto a los nuevos métodos clasificatorios que introdujo Kroeber en el campo de la lingiistica es interesante el articulo ‘Statistics, Indo-European and Taxonomy”, publicado en la re- vista Language en 1960. Pueden consultarse también dos articulos muy conocidos que sitdan a Kroeber en el contexto lingiiistico de su época, a la vez que resumen su obra. Me refiero al articulo publicado por Dell Hymes en la revista Language de 1961 y mas tarde reproducido en Language in Culture and Society, editado por el mismo Hy- mes, El segundo articulo importante es el que publicé Ralph Beals sobre la persona y la obra de Kroeber en la International Encyclopedia of Social Sciences. La LINGUISTICA ESTADOUNIDENSE DESDE 1925 |ASTA LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL Contexto bistirico El aio 1925 es muy significativo en el desarrollo de la lingtiis- tica estadounidense. La creacién de la primera Linguistic Society of America constituiria un paso decisivo en la organizacion y sistematizacion de unos estudios que hasta 1925 se encontraban ispersos y desorganizados, a pesar de las valiosas aportaciones individuales. No existia un lugar donde todos los lingiiistas pu- dieran reunirse, ni una reunion dedicada enteramente a la dis- cusion lingiistica, ni una revista dedicada a nuestro tema, Los enfoques y trabajos de notables lingiiistas anteriores a 1924 no habian enido la difusién, y por tanto la repercusion, deseable dentro del ambiente linglistico. Faltaban todavia las cestructuras externas: las sociedades lingiisticas, las revistas ade- cuadas, las catedras universitarias que perpetuaran en escuelas veiamos en la seccién anterior, hasta 1924 la lingiistica se habia girado esencialmente en torno a dos cam- podriamos llamar lingiistica general y la lingitistica 1a de lenguajes indigenas. De todas maneras, habia a época en que comenzaba a sentirse en forma mas necesidad de un trabajo conjunto que agrupara los , en su mayoria aislados, de quienes estaban interesa- ‘campo del lenguaje. o, en cierta manera, la escuela sociolégica de Paris y la de Copenhague. Por otra parte, en Praga comenzaba a rse un grupo de lingiiistas con ideas parecidas respecto al de la lengua, este contexto tiene lugar, en 1924, el nacimiento de la c Society of America, que tendria una importancia crucial lesarrollo posterior de la lingiistica estadounidense. En a Language, que constituiria durante mucho tiempo la via ipal de difusién para los anilisis lingiisticos estadouni- 's afios més tarde, en 1928, surge una nueva asociacion ica, Linguistic Institute, que comienza a trabajar estre- e conectada con la Linguistic Society, preocupandose mente por la organizacién de cursos que mantuviesen to de las iltimas investigaciones a los lingiiistas estadouni- nses. Los resultados de este trabajo conjunto se dejan sentir seguida, de manera que ya en 1946 puede escribir Bloom- que realmente el lingiiista de mas edad aprende a menudo colega mas joven y tiene la suprema satisfaccién profesio- de saber que la préxima generacién marcha adelante a partir ite de lo que se sabe hoy. Por otra parte, en 1934, se cred también el Summer Institute of Linguistics que prolongaria de forma institucionalizada el tra- de los lingtiistas interesados en los lenguajes indigenas, Los imos perseguidos por dicha institucién son de caracter ictico, ya que se proponen el estudio de los lenguajes indige- © Wid, p.2. ‘nas para poder evangelizar de manera mis adecuada en las cul- turas indias. En unos pocos afios se institucionalizan los esfuerzos aisla- dos de los lingiiistas estadounidenses. Y, dentro de este mar- co, apenas esbozado, va a discurtir el desarrollo de la lingiiistica norteamericana hasta la época de la segunda guerra mundial. Es preciso tener en cuenta también cémo Ilegan hasta los Estados Unidos de Norteamérica otras corrientes de la lin- gilistica europea. Asi, a tradicién de geografia lingiiistica creada en Francia por Jules Gilliéron tiene su reflejo en el Linguistic Atlas of New England, que se comienza en 1926 bajo la direc- cién de Hans Kurat Por otra parte, y para completar este breve esbozo de la lingitistica estadounidense anterior a la segunda guerra mundial, hay que mencionar los trabajos de Einar Haugen. La enorme cantidad de inmigrantes que legan a los Estados Unidos de todas partes del mundo y que rapidamente se enfrentan al pro- blema del bilingtismo, constiuye un campo que se presta a los mas variados anilisis lingiiisticos. Asi Haugen escribe certeros estudios tanto sobre el bilingiiismo en general, como sobre el noruego-americano y sobre los préstamos de palabras, Una vez delineadas las diferentes corrientes lingiisticas voy a fijarme ahora en el influjo ejercido por los més importantes lingitistas. La historia de la lingtiistica estadounidense de este siglo se caracteriza por la influencia decisiva de algunos lingiiis- tas, como Boas, Sapir, Bloomfield y Noam Chomsky, que de- terminan el posterior desarrollo de la ciencia lingtiistica. Mas gue de escuelas, como las surgidas en Europa, hay que hablar de tradiciones, nacidas en las ensefianzas de los lingiistas arriba mencionados. Antes de la segunda guerra mundial el esfuerzo mas impor- tante de la lingtiistica estadounidense giraba en torno a las ense- fanzas de Sapir y Bloomfield. Dell Hymes ** habla de la First Yale Sebool que, desde 1931 hasta 1939, gira en torno a Sapir. En efecto, un grupo numeroso de lingtiistas ~entre los que se cuentan Leslie Spier, Harry Hoi- jer, Morris Swadesh, Carl Voegelin, Mary Haas, Benjamin Lee Whorf, George Trager, Stanley Newman y Murray Emeneau- +8 Hymes, 1972b. 52 \rededor de Sapir y constituyen una tradici6n muy stica norteamericana, 5 ** sintetiza en cinco puntos los rasgos esenciales que a esta First Yale Schoo: develop the methods of the nascent structural linguistics and to test their application in the analysis of both exotic and il known languages; To sustain the profession of linguistics, where almost no recog- nition existed so far as departments, chairs, specific courses, und autonomy of the discipline were concerned; To continue to rescue disappearing languages; To pursue proof and establishment of genetic relationships among languages; To relate the sults and metbodsof linguistic inquiry 10 otber things, to ather disciplines in the humanities and social scien- es; 10 particular problems within these disciplines, such as cultural symbolism and patterning of personality and verbal art; and to practical affairs, such as education. > que estas cinco caracteristicas compendian todas las \cias coexistentes dentro de la First Yale School. Segiin los y las épocas variaba el énfasis en los diferentes puntos; é tidad entre los s de Sapir. ¥ quiza uno de los rasgos que mas sirvieron ntificacién de la escuela creada por Sapir fue el interés nente hacia los datos culturales y sociales que surgian de nvestigaciones lingiisticas, asi como el interés por relacio- las caracteristicas lingtiisticas con las culturales. nso que no seria del todo exacto creer que los miembros que reflejaran modelos culturales 0 situaciones sociales. Es icién inaugurada por Boas y desarrollada por Sapir la que asta Ia segunda guerra mundial en la First Yale School. pr otra parte, también antes de la década de 1940, hay un hecho que va a resultar decisivo para el posterior desarrollo de Ibid., pp. 230-231 33 la lingitistica estadounidense. Me refiero a la publicacién, en 1933, de Language, de Leonard Bloomfield. El libro de Bloomfield se convirtié desde su apari ‘manual de lingiistica general con el que se formarian generaciones de lingiiistas estadounidenses. Bloomfield deja a un lado la influencia de W. Wundr, tan notoria en su primer libro, y tiende a mantenerse en un nivel de observacion lo mas objetivo posible, que gira en torno a la descripcién puramente sincrOnica de la lengua. Sélo partiendo de esta base, pensaba Bloomfield, se podia fundamentar el estudio histérico de las lenguas con un minimo de objetividad. El énfasis del andlisis lingtifstico sincrénico provocado por las teorias de Bloomfield en lo que respecta a los Estados Unidos de Norteamérica, se debia también, en cierto modo, a las exi- gencias del problema de las lenguas amerindias. No hay que olvidar que Bloomfield no era un lingiiista que tinicamente filo- sofara en su esctitorio sobre los aspectos tedricos de la lingiiis- tica; antes bien, siempre reconocio la influencia que tuvieron sobre él tanto Boas como Sapir y que lo llevé al estudio de algunas lenguas indigenas. Pues bien, dichas lenguas indigenas, or su originalidad y marcada diferencia respecto a los tipos indoeuropeos, suscitaban graves problemas tanto en lo refe- rente a la transcripcion como a las descripciones gramaticales. Por todo ello Bloomfield vefa la necesidad de un anilisis sin- lo las teorias de Whorf en su verdadero lugar dentro del nbiente estadounidense. Prueba de ello es el siguiente juicio Hymes:** Sut a proper assesment of bis (Whorf's] place in the bistory of an- a a ibe lading end, fora simt alma sol representative of some of its principal linguistic objectives, genera taxonomy and semantic description, and, through bis advocacy anc research, as a major contributor to progress in both. La concepcién lingiiistica de Benjamin Whorf Conociendo ya el ambiente de la “lingiiistica estructural” des- cendiente de Bloomfield podemos imaginar el impacto y la re- “¢ la afirmacion de Whorf, de que la lingiiistica sencialmente 1a investigacin del significado." De hecho, do el andlisis cientifico desde el punto de vista lingiistico llevade a eabo por Whot! con le lengua hopi tiene como fin la c ién del significado. Pa el el lenguaje en su funcién es comparable a cualquier ciencia. Por eso rechaza a quienes piensan que el lenguaje ¢s simplemente una técnica de expresion. Ante todo, el lenguaie tiene como misién organizar y canalizar las experiencias. De festa manera, hasta el pensamiento humano tiene una amplia funcién lingistica; es decir, el lenguaje forma, mas que ex- presa, nuestras ideas. Y de aqui no hay sino un paso a la afirma- Gin del mismo Whorf de que los modelos lingitisticos juegan el papel predominance en el proceso de aculturacion. Partiendo de estas premisas y recogiendo la tradicién asen- tada ya por Boas y Sapir, Whorf critica por absurda la tendencia tan extendida de utilizar términos derivados de la gramética tradicional indoeuropea: sustantivo, verbo ..., para analizar otras lenguas diferentes. Cada lengua responde y conforma una '0 Hiymes, 19646, p. 119. 81 Whorf, 1956a, seccioa TL a que product visin particular del mundo y, por tanto, el trabajo de la lingi , ajo de la lingiis- tica debe ser el descubrir lo particular y tipico de cada lenguaje. Estas ideas de Whorf se han concentrado en dos principios 0 potesis que resumen fundamentalmeate su concepcién lin- ties es epcion |i el relativismo lingiistico 0 hipétesis Sapir-Whorf que en la critica de Lévi-Strauss se refleja en gran me- su metodologia antropolégica también peculiar, no por os aceptada. 3 ric Lenneberg" hace girar su critica en torno ala teoria de la fica. En primer lugar critica el método de Whorf en cuanto que se basa en las incertidumbres y las desi- idades con que se encuentra al traducir de un idioma a otro a ilustrar las diferentes conceptualizaciones. Insiste ademas idea de Lévi-Strauss, de que es a partir del analisis de los hos lingiiisticos que llega a la idea de que los lenguajes fectan a la conducta no-lingiistica. Y, finalmente, critica a orf por generalizar sus ideas con vistas a fundamentar sus s de Lenneberg. Sin embargo, no me convence el punto de vista desde el cual este autor lanza su critica. Pienso que su visidn demasiado analitica no logra considerar en todo su con- ‘0 la aportacién de Whorf, De todos modos creo atinada su ién central, compartida ademis por Roger Brown, de Ia evidencia de la craducci6n literal no establece directa- la relatividad lingiiist Brown"? ahonda en este tiltimo punto y piensa, con cierta taz6n, que la idea de relatividad esta ya implicitamente asumida % Lennebers, 1953. * Brown, 1958, p. 233. en las premisas subyacentes a las traducciones de Whorf. conclusién de Brown es que las tesis de Whorf no estin probi das. Cosa tan cierta como su contraria, ya que nadie ha demas trado definitivamente que la teoria de Whorf no pueda defer derse, En definitiva, son muchas las criticas y no siempre carecen razon. Las ideas de Whorf, como decia antes, constituyen n esbozo y una sugestidn que una teoria homogénea. De tod ‘maneras, creo que toda la polémica surgida en torno a Whorf ng debe disminuir en lo mis minimo su papel importante y tinica dentro de la antropologia estadounidense, especialmente en Id roferente a las relaciones lenguaje-cultura, Morris Swadesh A diferencia de Whorf, Swadesh no se distingue por sus con cepciones originales en lo referente al problema de las relacio= nes lenguaje-culcura. Es, mas bien, un fiel continuador de la tradicién creada por Boas y, sobre todo, por Sapir. ‘Aunque no fue un hombre de ideas sugerentes, resulté pio- nero en muchos de los aspectos metodolégicos. Por una parte ogra sistematizar los lenguajes indigenas a partir de bases fo- ‘némicas; por otra, reelabora de una manera original los métodos de acercamiento lingiistico a la prehistoria De todas maneras resulta siempre dificil analizar el aporte de Swadesh a la lingiistica estadounidense, ya que en gran parte fue su humanismo, su dedicacién constante, su honestidad y stu ayuda a ottos cientificos lo que caracteriz6 su mayor contribu- cidn a la lingiistica norteamericana. La obra lingiiistica de Morris Swadesh constituye uno de los logros més importantes surgidos de la tradicién de Sapir. Desde sus inicios en la lingitistica aparece junto a Sapir, primero como estudiante y luego como colaborador. Es mas, el aprecio de Sapir por su discfpulo fue muy grande, como lo sefala el hecho de que pusiera como condicién para aceptar la cétedra de Yale el que tanto Swadesh como Stanley Newman trabajaran con él. Ya en Yale, Swadesh ayuda a su maestro Sapir en varias investigaciones. Siguiendo la tradicidn de Sapir se consagra al 82 le diversos lenguajes indigenas y desde el comienzo da ‘h importancia al trabajo de campo. Todos los veranos, a le 1930, los dedicé a la recopilacién directa de datos. Al afios se encontr6 con valiosos materiales de los mas ruajes indigenas, desde el nootka hasta el esquimal, ‘esta base Swadesh se interesa en un problema de ‘ualidad desde la época de Powell y Boas: Ia clasifica- Ienguajes indigenas amerindios. Para ello no se con~ in cl metodo tradicional de analizar las relaciones entre rentes lenguas, sino que se remonta a la prehistoria, cen logear una relacién mas exacta de las diferentes ro de esta tradicién de anilisis de los lenguajes ricanos el trabajo de Swadesh result6 pionero en muchos \s, Especialmente conocida ¢ importante es su contribu- \ teoria fonolégica, Fue el primero en publicar ® una hcripcibn sistematica de una lengua indigena basada en prin- onémicos. Por otra parte, en un articulo aparecido en logra la primera sistematizacion valiosa del método fo- ‘ste aporte resultaria decisivo en el futuro desarrollo \etistica como disciplina aut6noma en los Estados Uni- orteamérica. En base a estos trabajos y a otros poste- tes, Dell Hymes * no duda en califi- Ifa Swadesh como el lider de la primera generacién que co- desarrollar el andlisis lingiiistico moderno en los Esta- sui parte Swadesh siempre fue consciente de la gran in- y de que su obra solamente se le dentro de la tradicién e influencia de su maestro Ed- jones lenguaje-cultura Isle es otro de los rasgos en que Swadesh continus la tradicion por Boas y Sapir. Nunca se contents con el puro andlisis de las estructuras de Ia lengua. Por el contrario, siempre estuvo atento a los rasgos sociales y culturales que surgian en el analisis de la lengua. Asi, incluso en muchos de sus estudios fonéticos pueden encontrarse anilisis ecnograficos importantes. Siguiendo la tradicién antropolégico-lingtiistica, Swadesh continta afirmando que el lenguaje es uno de los rasgos cultura les mas profundos y persistentes. De esta conviccion emana su. aplicada consagracion al estudio de diferentes lenguas indige- ‘nas, materia en la que solamente Kenneth Pike puede igualarlo, A pesar de que las actitudes predominantes en el ambiente lingiiistico estadounidense posterior a la guerra eran diversas, Swadesh siguid defendiendo que el estudio del significado es Parte integral ¢ inseparable del lenguaje. En un articulo publi. cado en, 1948 expone muy claramente la divergencia de sus puntos de vista con los enronces reinantes: Between the fact that meaning is an inseparable aspect of language and the fetish that anything related to the mind must be ruled out of science... It is characteristic of the linguistic mechanists that they have great confidence in the scientist and none in the native speakers of the language.” Esta cita constitaye un indice significativo de cémo la posi- ion de Swadesh respecto al estudio de la lengua diferia de la de muchos de los lingiistas contemporaneos, que se concentraban en Ia metodologia y en el simbolismo de las formas. La preocu- acidn de Swadesh era, por el contrario, la de aplicar la lingtiis. tica a los problemas humanos por una parte, y, por otra, la de hacer til ¢ inceligible Ia ciencia del lenguaje, de tal manera que pudiera llegar hasta el hombre de la calle. Algunos de sus libros " son ejemplos claros de esta preocu- paci6n. Procura dejar a un lado los tecnicismos, sélo accesibles a los especialistas, y no pierde nunca de vista al hombre “no- cientifico”, que se convierte en su principal interlocutor. Por otra parte, Swadesh siempre reconocié la evidente inter- accion entre el lenguaje y los factores sociales, Es mas, afir. maba que el mismo desarrollo del lenguaje esta ditigido por % Swadesh, 1948. * El lenguaje y la vida bumana, 1966, también Le nueva filolgfa, 1941, y, sobre todo, Orientacione lingtistcas para maestro: en zanas indigenas, 1910. 84 sociales. A este respecto resulta muy ilustrativo su and- re la relacién de los factores sociologicos que influyen 4 extinci6n de diversas lenguas."® Pero, sin llegar al extremo la desaparicién de las lenguas, siempre se intereso por la én y adaptacin del vocabulario a los diferentes niveles de asi como por la influencia de los lenguajes y culturas intes en el desarrollo de la propia lengua. sde decirse, como resumen, que para Swadesh el método stico era, ante todo, un modo prictico de tratar con el No eran las preocupaciones teéricas el punto focal de nterés, sino que sus esfuerzos iban més bien dirigidos a la rensién directa de las diferentes lenguas y culturas. Lo 0 €s que de esta preocupacion, que podriamos considerar po practico, se derivaron precisamente contribuciones muy ates a la metodologia lingilistica © quizael punto mas importante de la obra de Swadesh ie en su acercamiento lingtifstico a la prehistoria, materia la que desarrolla una metodologia original. El anilisis de los dos prehistéricos de muchas culturas indigenas era un pro- na muy vivo en la antropologia norteamericana. Al no exis- documentos graficos se requeria la utilizaci6n de métodos fectos que descifraran los trazos del pasado que, de alguna era, se conservaban en las costumbres de los diferentes La contribucién de Swadesh a este problema es decisiva. Por ia parte sigue la idea de Sapir de que la diversidad de los lenguajes emparentados entre si est relacionada con el tiempo y de que cuanto més difieran entre si los lenguajes emparenta- dos tanto més lejano en el tiempo fue el desmembramiento de tronco comin. Swadesh une esta idea con la del uso estanda- rizado de un vocabulario basico. En efecto, era sabido desde uo que las palabras mas basicas se encuentran en todos los €S, que normalmente no pasan prestadas de una lengua a ptra y que duran por lo general mas tiempo que otras. Asi, muchas veces, se ha empleado la comparacidn de este vocabula rio bisico para probar el diferente grado de relacién entre las lenguas. Swadesh, 19486, A este método gloto-cronologico lo lama Swadesh “léxico- estadistico” y lo describe de la siguiente manera: El método gloto-cronolégico que tratamos aqui es léxico- -que se basa en la cuenta de palabras parecidas entre yocabularios de lenguas emparentadas, segin el criterio Siguiente bajo condiciones semejantes, mientras menor es el nlimero de concordancias, mayor ha sido el tiempo de separa- an de los dialectos."* Sheu ‘Asi pues, este método de Swadesh se basa esencialmente en el ritmo relativamente constante de sustituci6n en el vocabula- rio basico. Partiendo de esta idea se logré establecer relaciones centre lenguas separadas desde tiempos muy remotos, y también descubrir detalles de culturas muy antiguas, asi como establecer contactos prehistoricos hasta entonces desconocidos. Es facil comprender el interés inmediato que suscitaron entre los antropélogos estos trabajos llevados a cabo con la metodo- logia de Swadesh. En seguida vieron en el método el instru mento preciso para situar en el tiempo las separaciones prel toricas de los diferentes grupos étnicos. No es éste el lugar adecuado para analizar més detallada- mente el gran influjo que tuvo el método léxico-estadistico de Swadesh. Basta con sefalar una larga y muy detallada reseia que escribid Dell Hymes *? sobre el des método aso- Giado al nombre de Swadesh Si es importante, por el contrario, resaltar una vez més la importancia de la obra de Swadesh dentro de la lingiiistica y la antropologia norteamericanas. Quiza su modestia intelectual, su deseo de acercamiento al hombre de la calle y su alejamiento, ideol6gico y durante grandes temporadas fisico, del ambiente ingiiistico estadounidense de posguerra, no permitieron dar a la figura de Swadesh el relieve que se merecia. Por todo ello es sumamente significativo que uno de los mejores conocedores, sino el mejor, de la historia de la lingitistica antropologica Baa cage ate acne RTS eA Oua sb 19606, p. 129. " Hymes, 196 86 Let me say only that 1 believe his work s0 be the most significant since that of Sapir for an understanding of the linguistic prebistory of the wwarld.®* Kenneth Pike porte a la antropologia lingiiistica adquiere un matiz especial la obra de Pike. Su interés por todo lo relacionado con el Jenguaje y la cultura cuvo un origen practico, instrumental. En un primer momento Pike se enfrent6 con la dificulrad weniente de la falta de un método que permitiera reducir a ‘nomenclatura comin los sonidos provenientes de diversas, jenguas. A esta tarea consagré gran parte de su vida, y logr6 ymo resultado un método que muy pronto se hizo popular inere los lingiistas interesados en las Ienguas indigenas, ‘La segunda contribucion fundamental de Pike al campo de la atropologia lingiiistica fue la de considerar al lenguaje como re de una teoria unitaria de la estructura de la conducta jumana. El lenguaje no constituye una entidad autonoma; es reciso verlo reflejando la estructura cognoscitiva y el contexto icural en el que se mueve el hablante. S6lo de esta manera dra lograrse una comprensién completa de las dimensiones s profundas de la lengua. Esta concepcidn de Pike contribuiria, mas tarde, a la aparicion le un nuevo acercamiento al fendmeno del habla, que se cono- ceria como “la etnografia” de la comunicacién. La contribucién original de Kenneth Pike a la lingiiistica esta- Jounidense no se entiende sin el marco institucional en el que se origina: el Summer Institute of Linguistics Dicha institucién, nacida en 1934, fue la primera que se de- “6 en Norteamérica a la lingiistica aplicada. Eran muchos los misioneros protestantes que se consagraban en aquellos afios a la evangelizacion de los indigenas, tanto en los Estados Unidos como en otros paises. La primera dificultad con que se topa- ban en su trabajo era la de la lengua. Dejados a si mismos, sin los mas minimos conocimientos de lingiistica, era mucho el tiempo que perdian en aprender los idiomas y a veces no logra~ m Hiymes, 1972b, p. 264 87 ban incluso dominarlos totalmente. Junto a este problema sur- gia el del choque cultural, que constituia un serio obstaculo para la transmisin del mensaje cristiano. Estos inconvenientes dieron origen a la creacién del Summer Institute of Linguistics, mediante el cual se pretendia instruir y capacitar a los misioneros para su trabajo y, al mismo tiempo, lograr traducciones adecuadas de la Biblia a los diferentes idio- mas indigenas. Pike ~junto con Nida- fue director del Summer Institute due rante muchos afios. Todos los veranos se organizaban sesiones cuyo fin primordial era, por una parte, instruir a los misioneros en las diferentes técnicas del andlisis descriptivo y, por otra, profundizar en las relaciones de la lingiiistica y la antropologia con la sieuacidn de contacto cultural que se produce en la labor misionera. La formacién lingiistica de Pike debe mucho a Leonard Bloomfield y a Edward Sapir. De Sapir aprendié a dar impor- tancia a los trabajos de campo y también a considerar ala lengua dentro de su contexto cultural. Por otra parte, muchas de las ‘écnicas descriptivas empleadas por Pike continéan la tradicién creada por Bloomfield, aunque ciertamente no se lo puede con- siderar entre los seguidores ortodoxos, como Gleason y Hoc- kert, de las ideas de Bloomfield. Pike defiende la necesidad de emplear criterios semanticos en los analisis, cosa que contradice las ideas de la tradicién bloomfieldiana. Por otra parte, y de forma sistematica, Pike se opone a la idea bloomfieldiana de considerar las particulas lingiisticas (fonemas, morfemas ...) en si mismas. Piensa que, si se pretende un verdadero andlisi aguistico, es preciso considerar a las particulas en su contexto, es decir, en su dimensién dindmica. Durante mucho tiempo el nombre de Pike estuvo asociado a los avances mas notables que se produjeron en la lingiiistica estadounidense dentro del campo de la fonética, Su obra clisi- ca en esta rama de la lingiiistica sigue siendo manual funda- mental para los estudiantes e interesados en la transcripcion de sonidos. La necesidad practica con que se encontré Pike en sus contac- tos con muy diversas lenguas indigenas lo forz6 a trabajar en la % Pike, 1943. 88 nvencién de un método que le permitiera reducir la variedad nmensa de sonidos extraios a un niimero limitado de fonemas ue pudieran representarse mediante letras del alfabeto.'” ¥ ésta es, sin duda alguna, una contribucién muy importante den- tro de la lingiiistica estadounidense. El lenguaje y la estructura de la conducta humana Bl otro problema al que dedica Pike gran parte de su tiempo es el de la traduccién. También a partir del problema practico que representa la version de textos a lenguajes indigenas crea toda 1a teoria que, partiendo de los asuntos relacionados directa- mente con la traduccién, acaba por ser una obra monumen- 11°" acerca de la estructura de Ia conducta humana. n ahondar en la teoria de Pike a este respecto, que por cierto resulta oscura por cuestiones relacionadas con la termino- logia, es necesario indicar algunas lineas mas generales que muestran su concepcién unitaria de la conducta humana, in- cluido el lenguaje. e Pike parte de lo que considera un éxito relativo de los méto- Jos de andlisis lingiiistico e intenta, no solo extender dicho método al andlisis de otros datos culturales, sino integrar ambos anilisis en un solo armaz6n. Su objetivo es lograr un andlisis general de la conducta humana fundamentado en la lingiistica Creo que para aclarar de forma definitiva su pensamiento es preciso ver cOmo expresa él mismo su propdsito: “The thesis which for the past sven years | have been exploring is the following: that every purposeful activity of man is structured, and ‘hat certain basic characteristics are common to every such activity, 50 that ib sbould be possible ro develop a sheory and a tecnique which twould pass without a jar from the study ofthe structure of one kind of activity of man to thas of any other kind. De aqui se deducen claramente las ambiciosas metas que per- sigue Pike y que resolverian de manera definitiva el problema "Pike, 1947. » Pike, 1954-1960. 181 Pike, 1956, p. 659. de las relaciones lenguaje-cultura. Con dichas teoria y eécnica intenta llegar a unas constantes que le permitan descifrar las estructuras de las diferentes actividades humanas, como ser‘an, €n nuestro caso, las de la conducta verbal y no-verbal, Pero se le plantea inmediatamente el problema de que no le sitven las técnicas bloomfieldianas de anilisis, puesto que res. Ponden a una nocion estatica de las particulas (fonemas y mor. femas), que se consideran como ladrillos yuxtapuestos co neq estructura permanente. Pike piensa que en toda actividad humana y, por tanto, en el Tenguaje, existe ciertamente lo que él llama un physical coors. num, que respondetia a la nocién bloomfieldiana de estruceuca Permanente. Pero a la vez observa que dentro del continuum ae dlan “olas” de actividad, con sus altos y bajos. Fs decir, gene Feacciona frente a la conducta humana en su propia cultura como si se tratara de una secuencia, pero de una secuencia que consta de particulas separadas de actividad. Y a veces se olvida uuno de que existe un estado de transicion entre las diversas olas de actividad. Es mis, existe un tercer punto de vista que es preciso tener en cuenta en el andlisis del lenguaje: el contexto y el memory reser. soir segiin el cual hay que interpretar el texto. Solo de esta manera entran en el andlisis los elementos dindmicos y funcio. nales que pueden permicirnos lograr una interpretacion ades cuada del conjunto del lenguaje y de toda actividad humana fe sistema ‘de anilisis que, como vemos, se desprende de 1 teoria més general de la conducta humana, es llamado anélic sis tagmémica” cuando se aplica al lenguaje, ya que el tagmema §¢ /gunidad gramatical fundamental. Elson y Pickets,diseipulos de Pike, definen el tagmema de la siguiente maners:"*® Tis hagnene, at a grammatical unit is te crrdation ofa gramma- sical function ar slot with a class of mutually substiturable items scurring in that slot. This slotclass corvelation has a distribution within the grammatical hierarchy of a language Como decia mas arriba, en la identificacién de los tagmemas tiene Pike en cuenta tanto la funcién semantica como la fancion y Pickert, 1962, p. 57 is que propone responde a su conviccién de is adecuado de la estructura de la con 'ana tomando como base el continuo fisico del 10s mas arriba, Hay que tener siempre en cue! ue los nativos reaccionan en su propia conducta, ae A este andlisis lo llama Pike emic (phonemic) en contraposicion al anilisis esic (phonetic). solita easton matin’ 1 be sever fe oettion ck oped to ‘emic’ units and classifications, which are.\™ Toda esta terminologia complicada de Pike responde a un esfuerzo muy original, mediante el cual pretende estructurar su conviccién de que la integracién de los eventos verbales y no- verbales sélo puede lograrse por medio de una teoria unitaria de Ja estructura dé la conducta humana. ta cae conclusién a la que llega Pike después de haberse enfrentado a una multitud de problemas practicos en la traduc- cin de conceptos de una lengua y cultura a otra diferente. No basta una traducci6n palabra por palabra o incluso oracién por oracién. Es preciso tener acceso primero a la cultura ajena y entonces tomar en cuenta unidades todavia mayores que la ora- ciéa, como son la historia, el contexto social, el econémico Y, aplicando su conclusién al campo de la lingiiistica, habra que decir que siempre sera preciso tener en cuenta los factores extralingiisticos en el momento de elaborar la descripcion de una lengua, La dificultad aparente con que uno se encuentra al enfre: tarse con las ideas de Pike se reduce, en gran parte, a la termino- logia empleada. Su esfuerzo es valido y, en muchos casos, sus aportes han resultado muy valiosos. De todas maneras su in- fluencia se ha visto, en gran parte, restringida al marco del Instituto Lingilistico de Verano. Hymes, 19640, p. 14. Comentario bibliogréfico Para la comprensién de esta época de la lingiiistica general y antropolégica estadounidense gue arranca de la segunda guerra mundial puede ayudar el articulo de Robert Hall "American Linguistics, 1925-1950", citado anteriormente. Dicho articulo da una vision panoramica de las tendencias y corrientes que han. aparecido en las iiltimas décadas dentro de la lingilistica esta- dounidense. En este mismo sentido considero importante el libro editado por Christine Mohrman, Alf Sommerfelt y Joshua Whatmough, Trends in Enropean and American Linguistics 1930-1960. Esta setie de articulos proporciona un contexto més amplio, dentro del cual la lingiiistica estadounidense adquiere su verdadera di- mensién. Otro libro interesante es el editado por Martin Joos, Readings in Linguistics L. Joos recopilé los articulos mas significativos en el desarrollo de la linguistica descriptiva de los Estados Unidos de Norteamérica desde 1925 hasta 1956. Es un libro muy dil puesto que nos permite recorrer la historia mas reciente de la lingiiistica estadounidense en los textos originales. No hay que olvidar dos articulos importantes a los que me referia mas arriba y que constituyen un resumen del desarrol de la lingiistica antropoldgica estadounidense; se trata del ticulo de Dell Hymes, “Notes Toward a History of Linguistic Anthropology” y de “One Hundred Years of Anthropological Linguistics”, escrito por Floyd Lounsbury Ta mejor introduccién a las teorias de Whorf es la lectura de sus mismos articulos, editados en un solo volumen por su amigo John Carroll: Lenguaje, pensamiento y realidad. Los articulos en ios que Whorf explicita de forma mas concisa su concepci6n lingiiistica son los siguientes: “Consideracién lingiiistica del pensamiento en las comunidades primitivas’, escrito en 1936; “Discusién de la lingiistica hopi”, tambien de 1936; “Algunas categorias verbales de la lengua hopi”, publicado en 1938; “Ciencia y lingiistica”, de 1940, y finalmente “La lingiiistica como ciencia exacta”, escrito asimismo en 1940. Como biografia de Whorf debe conocerse el articulo que publicé John Carroll como introduccién a los articulos del 92 Inismo Whorf. Creo importante el conocimiento de la vida de Whorf, ya que ilumina muchas de sus concepciones lingiisticas. Respecto al impacto y a las discusiones suscitadas en el do de la lingiistica estadounidense por la concepciéa whor- | es conveniente leer la obra editada por Harry Hoijer, Language in Culture, Se trata de una recopilacién de ponencias iversos autores con sus correspondientes discusiones, que jan toda la gama de reacciones causadas por las ideas de rf Otros articulos que conviene conocer si se quiere tener una completa de la importancia y el alcance de Whorf en el campo de la lingiiistica son el publicado en 1960 por Joshua man, “A Systematization of the Whorfian Hypothesis” y el ‘George Trager, “The Systematization of the Whorf Hypo- Una aplicacién’ muy personal y sugerente de la hipstesis Sapir-Whorf se encuentra en el andlisis de Dell Hymes, “Two ‘pes of Linguistic Relativity”, publicado en Sociolinguistics, li- 9 editado por William Bright ea 1966. De los numerosos libros y articulos escritos por Swadesh a lo largo de su vida convendria conocer en primer lugar aquellos en que se resume la aportacidn de Swadesh a la ciencia fonética: The Phonemic Principle”, publicado en 1934 y “The Phonetics También deben leerse los articulos que se refieren al aporte inal de Swadesh en la reconstruccién de la prehistoria: “Dif- sional Cumulation and Archaic Residue as Historical Explana- de 1951; “Lexico-Statistic Dating of Prehistoric Ethnic ontacts”, publicado en 1952 y “Linguistics as an Instrument of Prehistory”, de 1959. Respecto a la concepcién de Swadesh en el campo de la len- ua y la cultura son importantes dos de sus libros: el primero, Estudios sobre lengua y cultura, recoge una serie de articulos importantes de Swadesh que expresan su forma de ver las rela- ciones existentes entre la lengua y la cultura. El segundo libro, EL lenguaje 9 la vida humana, pretende ser una introduccion al alcance de todo pablico sobre el tema expresado en el titulo. ‘Quizé la introduccién mis completa a la obra de Morris Swadesh sea el libro editado por J. Sherzer, The Origin and 93 Diversification of Language. Es patticularmente importante el articulo escrito por Dell Hymes, que revela el Iugar ocupado por Swadesh dentro de la antropologia lingiistica. ‘Acerca del anilisis de las caracteri importantes en lo que se refiere al método y a las innovaciones aportadas por Swadesh seria conveniente conocer el articulo escrito por Dell Hymes, “Lexicostatistics So Far”. De la que podriamos considerar como la primera época de Pike, en la que estuvo mis concentrado en los problemas de la iagilistica descriptiva, son importantes dos obras: Phonetics, es- rita en 1943 y Phonemics: A Technique for Reducing Languages to Writing, Ambos libros resumen la valiosa aportacién de Pike al problema de la reduccidn de los diversos lenguajes a.ua alfabero comin, Respecto al periodo posterior, en el que Pike estudi6 el enguaje como parte integrante de la conducta humana, es in- dispensable el conocimiento de su monumental obra Language in Relation to a Unified Theory of the Structure of Human Bebax Para ubicar la obra de Pike, asi como su significado dentro del contexto de la lingtiistica estadounidense, puede resultar dil la lectura del articulo de Robert Hall, “American Linguistics, 1925-1950", asi como alguno de los comentarios de Dell Hy- mes en Language in Culture and So Unanalisis mis general de la teoria de Pike se encuentran el libro editado por Ruth Brend, Kenneth Pike: Selected Writings, trabajo ail, ademas, porque recoge los textos mis significativos de la obra de Pike. 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