Vous êtes sur la page 1sur 1

147

Y es menester que la silfi.lo de formas elegantes sufra las

muecas del dolor.

Fdiz suerte, destino bendecido, alegra digna de los ngeles,

Si la cadena de oro de la verdadera piedad se enlaza con

las rosas del amor:

Mas no afectes devocion para obtener favores los ojos de

un sr creado:

Este es el crimen mortal del hipcrita, y te expone la c-

lera en el otro mundo.

El dolo de tu corazon es como t mismo, una extraa pues-

ta prueba en la tierra,

As es, vela su alma, la alhaja de su cofrecito:

Que sea hija de Dios, fin de que traiga una bendicion so-

bre tu casa.

Una bendicion superior las riquezas, y que trae en su

compaa la satisfaccion:

Que sea heredera del cielo, fin de que te ayude en tu ca-

mino:

Pues los que estn una en la f, combaten dos manos

contra el mal.

Ten cuidado de que no te prefiera Dios, por temor de que

no caiga en la idolatra:

Sin embargo, asegrate de que te ama; pues su corazon es

un corazon de mujer;

Y es preciso que la triple naturaleza de la.humanidad est

unida con triple cadena,

Alma, espritu, cuerpo, piedad, estimacion, afeccion.

Cuan bella es la modestia! Ella encanta todos los que la

contemplan:

Mas una palabra, una mirada, puede destruir esta llama

que t slo pertenecia.

No afectes desden la hermosura; nadie est exento de su

influencia:

Sin embargo, no la mires como una perla preciosa: se des-

vanece como el arco-ris.

Generated on 2014-11-04 13:40 GMT / http://hdl.handle.net/2027/nyp.33433074948500


Public Domain, Google-digitized / http://www.hathitrust.org/access_use#pd-google

Si el carcter es dulce, menudo sucede que las facciones

llevan la sea.

La sonrisa tierna de la que os ama, vale ms que un res-

plandor efmero.

Vous aimerez peut-être aussi