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Y EN C U EN TRO DE DOS M U N D O S
G e o r g e s Ba u d o t *
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Y son muy abundantes los testimonios de que en Mesoamrica pas lo mismo, tanto por los abundantes porten
tos y profecas que anunciaron la llegada de los espaoles,
como por el grandsimo relieve que pudo cobrar en un mo-
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Notas
1 Fray Diego Durn: Historia de las Indias de Nueva Espaa e islas de la Tierra Firme, Mxico,
Editorial Porra, 1967, Tomo II, p. 233.
2 Ibid.
3 Ibid.
4 Francisco del Paso y Troncoso, Leyenda de los Soles continuada con otras leyendas y noticias.
Relacin annima escrita en lengua mexicana el ao 1558. Florencia, Tip. de Salvador Landi,
1903; Walter Lehmann, Die Geschichte der Konigreiche von Colhuacan und Mexico, Stuttgart,
1938, p. 322-327; Cdice ChimaIpopoca. Anales de Cuauhlitln y Leyenda de los Soles, trad, de
Primo Feliciano Velzquez. Mxico, UNAM, 1975; Miguel Len-Portilla, La filosofa nhuatl
estudiada en sus fuentes, Mxico, UNAM, 1966,p. 100-112; por fin conviene destacar el estudio
de Roberto Moreno, Los cinco soles cosmognicos, Estudios de Cultura Nhuatl, vol. VII,
Mxico, UNAM, 1967, p. 183-210.
5 Historia de los mexicanos por sus pinturas en Teogonia e historia de los mexicanos. Ed. de A.
M. Garibay, Mxico, 1965, p. 69: 4. En el segundo cielo dicen que hay unas jujeres que
no tienen carne, sino huesos y dcense tezauhcihuah, y por otro nombre, tzitzime. Y stas
estaban all para cuando el mundo se acabase, que aqullas haban de comer a todos los
hombres. Subrayamos que en el Cdice Borgia, (ed. Seler, Mxico, FCE, 1963), p. 72, el
centro, encrucijada donde se unen los cuatro rumbos de espacio, est marcado por el rostro
de las Tzitzimime.
6 Jacques Soustelle, LUnivers del Aztques, V: La pense cosmologique des anciens Mexicains,
Paris, Hermann, 1979, p. 165. (La traduccin es nuestra).
^ Diego Muoz Camargo, mestizo, hijo de espaol extremeo y de su madre amerindia
tiaxcalteca, fue educado enteramente por su padre y a la espaola. De ah deriva el que se
sintiera y tuviera por espaol.
Diego Muoz Camargo, Historia de Tlaxcala, Mxico, 1982, p. 154.
9 Ibid., p. 514.
10 Ibid., p. 508.
Cdice Florentino, ms. 218-220, coleccin Palatina. Biblioteca Medicea Laurencia
de Florencia. Reproduccin facsimilar publicada por el Gobierno Mexicano, Secretara de
Gobernacin, 1979, Lib. XII, cap. VII.
12 Ibidem.
*3 Ibidem.
Cdice Florentino, cap. XVI. Tambin puede verse ibidem, cap. XII: era como si
balbucearan, y lo que decan era jerigonza.
15 Fray Ramn Pane, Relacin acerca de las Antigedades de los Indios, ed. de Jos Juan
Arrom. Mxico, Siglo XXI, 1974, pp. 87-88.
Ibidem, p. 53.
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