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Os gp ont qS< V. Policia, gobierno y racionalidad Exploraciones a partir de Michel Foucault! La racionalidad de lo abominable es un dato deta historia contempordnea (Foucault 19816236) La cuestin consiteen conocer cémo exin racionalizadas las relacones de poder. Planteare este cuestion esta tnic forma de evitar que otras insitucones, con lox mamas objetivos 1 los mismos efeos, ocupen su lugar (Foucault 19932:305) Policia y gobierno demarcada por la interseccién de las tres palabras que configu- ran su titulo, a través de unas notas “genealégicas”. La genealo- ia, tal como ha sido presentada y ejercitada por Michel Foucault =cuyos trabajos constituyen el punto de partida de las presentes “exploraciones”, en tanto “historia del presente” (Foucault 1989:37), se configura como un anilisis que parte de la identificacién de una problemitizacién? en la actualidad y a partir de alli explora su proce- dencia y emergencia (Foucault 1992s). Como sefiala Robert Castel, se parte de la conviccién de que el presente refleja una combinacién de elementos heredados del pasado y de innovaciones actuales, de allt Fé capitulo pretende abordar a problematizacién vagamente 1 Fabia onginlment en Miximo Sz (2005) i, vile denous. Ena spina FCUNL Eons 2. Porprblemaacié’ eendemosaursuend a Michel Fovenl”.no ere ‘notin deen che premotor nats det dae don choo ae tous Esl ene ce pics dcr y no dcr ue fac agree “io ene jocg cavern lady ovolsean como um abe pr hee” {Fovewit 1984670: ver mmuen Fouca 19814360) pee 225 Inseounidadp1eeoCi0. 4.00 en que:"[a}nalizar una prictica contemporinea significa observarla desde el punto de vista de la base histOrica de la cual emerge: significa enrai- Zar nuestra comprensién de su estructura actual en la serie de sus transformaciones previas. El pasado no se repite a st mismo en el pre- sente, pero el presente juega ¢ innova utilizando el legado del pasado” (Castel 1994:238). De esta manera es posible cuestionar y reformular presuntas continuidades y discontinuidades, de forma tal de generar tuna “diagnosis” sobre los limites y las posibilidades de la actualidad (Dean 1999:46; Rose 1999:55-60). Se pretenden presentar algunas indagaciones del pasado, provisorias ¢ inacabadas, que esperamos pue~ ddan brindar herramientas para pensar criticamente el presente En este texto trataremos la actividad policial como una prictica gubernamental. Empleamos aqui Ia idea de “gobierno”, tal como fue incipientemente desarrollada por Michel Foucault a fines de la déca~ da del setenta como una forma de renovar sus reflexiones precedentes en torno al “poder” (De Marinis 1999:75; Garland 1997:175). En un sentido to, por “gobierno comprendemos las técnicat y procedi- rientos destinados a dirigir Ia conducta de los hombres” (Foucault 1994a:125). En un texto publicado originalmente en inglés en 1982, Foucault se referia al cardcter equivoco del término conduct que quie- re decit, al mismo tiempo, conducit a otros y comportarse dentro de ‘un campo de posibilidades mas o menos amplio. Gobernar es the con- duct of conduct."El ejercicio del poder consiste en guiar la posibilidad de Ia condueta, ordenando sus posibles resultados, Bisicamente el poder es..una cuestién de gobierno...modos de accién, més © menos pensados y calculados, que estin destinados a actuar sobre las posibili- dades de accién de otras personas. Gobermar, en este sentido, es estruc~ turar el campo de acciones posibles de los otros” (Foucault 1982:221, 1998b; 284; ver también Dean 1999:10-11; Miller y Rose 1992:175). En esta clave, el gobierno s6lo se ejerce sobre sujetos “libres” y sélo en Ja medida en que son “libres” ~al menos en un sentido rudimentario Y primario de ser seres vivientes y pensantes que poseen una capaci- 3. Sane Beneslogi” como “eines, ver Burhel (1996-30-34; Dean (1999:40-4) 226 Foucault (19928, 1996a, 19960); O'Malley, Sheating y Weir (1997:505-508), ——L nlicagobiemne ysaconaldad. Exloracones. parr de Michel Foucault dad fisica y mental (Dean 1999:13). Liberad y gobierno dejan de apa- recer de esta manera como mutuamente excluyentes la libertad es la precondicidn y el soporte permanente del ejercicio del gobierno Garry, Osborne y Rose 1996:8; Foucault 1982:221, 1998b:284-285; Miller y Rose 1992:174; Rose 1999:69-97), Pero también la libertad «5 la posibilidad de reversion estratégica de las relaciones de gobierno a través de la resistencia, de las “contra-conductas” (Gordon 19915). Dice Foucault en una de sus lecciones del Collége de France en 1979: El rasgo distintivo del poder consiste en que decerminados hombres pueden decidir mis o menos totalmente sobre la conducta de otros hhombres, pero nunca de manera exhaustiva o coerctiva. Un hombre ‘encadenado y apaleado est sometido ala fuerza que se ejerce sabre él pero no al poder. Pero si se le puede hacer hablar, cuando st dlkimo recurso habria podido ser callarse prefiriendo su muerte, es porque se le ha obligado a comportarse de una manera determinada, Su liberead ha sido sometida al poder y él ha sida sometido al gobierno. Si un individu puede permanecer libre, aunque su liberad se ves muy limitada,e] poder puede someterio al gobierno, No existe poder sin resistencia o rebelidn en potencia (Foucaule 1993a: 304, 1998b: 284)°. Creemos que en estas reflexiones de Foucault se encuentra uno de los Puntos de partida! para un estilo de pensamiento que supera el ancl Je obsoleto del anilsis del poder politico en torno a la idea de“ tado" como “macroanthropos”, propia de la Glosofiay el derecho pol 4 En clave de Foucault esta nocin de gobserno no eapica excusvamene als acio- ss dingy 2 geiur lt acciones de los tos sino umbién + aqullas dexinadss 3 fobernane a sf mimo (ver: Dean 199912; Foucault 19546, 1996, 1998; Rove 1990-4345), 5 _Enalgino de or dkimos textor exits por Foucault aparece sugerida una certs dfe- rencisién entre poder/goberno y dominacié, empeaimente en una entrevts rai 2ada en 1984, dealada "La deca del cuidado de s como prcica dela Ubertad” En ete texco Foucault re refers 2 lor “eden de domacién® como un spo de reaetn de pader"inmév y fp" que impide“eoda reersbilidad del movment” yen ls ques pelts de libertad no exten, exizen slo uniaterlmente 0 etn muy eines lindas Foucault 1998b: 275, 285,292 ver De Marin 199983-84, Rose 1999). {6 um evando no eel dno al argo dela Histor def teors social y politics de lor Silos XIK y XX, vee al respecto Melos (1992, 2002, 227 nsequcdac ocevencito yeolca 228 tico del siglo XIX (Rose 1999:1). Gobernar aparece aqus como “una dimensién heterogénea de pensamiento y accién” que no se encuen- tra circunscripta a un dominio especifico definido a través de la pala- bra “Estado”. Esto no quiere decir que no se reconozea en lo que ccominmente se denomina e! “Estado” un elemento importante “his- tGricamente especifico y contextualmente variable” de las relaciones de gobierno (Gordon 1991:3; Miller y Rose 1990:3; Rose 199945, 17-18), Sefala Foucaule: Las formas y las situaciones de gobierno de unos hombres por otros ten una sociedad dada son miikipls; se superponen, se entreeruzan, se limitan y a veces se anulan, ota se refuerzan, Es un hecho indudable ‘que al Estado en las sociedades contemporineas no es sélo una de las formas 0 uno de los lugares de ejercicio del poder, sino que de cierta manera todas las otas formas de relacién de poder se tefieren a al ero no es porque cada una se derive de él, Es mis bien porque se ha producido una estatizacién continua de las relaciones de poder (Foucsule 1982:224) ara Foucault no es necesario, por ende, partir de una definicién acerca de la naturaleza y las funciones del Estado ~una “Teoria del Estado” en el sentido tradicional de esta expresién— para analizar las relaciones de gobierno’. De acuerdo al autor francés: "fell Estado no tiene esencia. El Estado no es un universal, el Estado no es en si mismo uns fuente auc6- noma de poder; el Estado no es otra cosa que los hechos; el perfl.el des- glosamiento mévil de una perpetua estatalizacién” (19932:309), Se tata, en definitiva, de una “realidad compuesta y una abstraccién mitificada” (Foucault 19912:25; ver Miller y Rose 1992:176-178)' 7 Foscaleselaba en est sentido: "hago quero y debo hace Is economia de una teo- el Estado del mismo modo que se puede yse debe hacer la economia de na comi= 4 indagets” (19938-308) 8 Para Foucauk no hay ningin epo de diconomundad mater o metodoldges entre lor snilss enum nivel micro y en un nivel macro © mol delat relaciones de pobier, por lo que ambos no deberian openers (Gordon 19914 Rose 19988-6), sun eusne tb reconace en diveros eos I necerad de gue el ani tenga sempre vn sentido -cendent (por empl, Foucault 200135) La imagen, de raiz weberiana y familiar para nuestra actualidad, de la insticucién policial como el “aparato del Estado” que detenta junto ccon la administracién de justcia~ el “monopolio de la coaccién fii legitima” con respecto a los “asuntos interno” ~por oposicién a la ins- sstucién militar y los “asuntos externos"= y cuya misién se dectina generalmente como la “prevencién, deteccién e investigacion de los delitos” y el “mantenimiento del orden piblico”, se funda en una invencién politica historicamente reciente, un proceso que es posible ubicar entre los sighos XVIII y XIX en Europa Occidental. Esta imagen familiar pone en el centro de la definicién de lo que la policia es, la po- sibilidad del uso de la violencia. Frente a ell se abre un inguiecud: sc6~ ‘mo se pueden pensar las pricticas de la institucién poticial como acti- vvidad de gobierno frente a esta centralidad de la violencia?,zes el uso de la violencia una forma de actuar que estructura el campo de las ac~ ciones posibles de los ots, Jos sujetos que son sti objeto?, zno es mis bien una forma de actuar que anula la capacidad de accién de los suje~ tos que son su objeto ~y en el limite, puede anular su misma existencia? Foucault explicitamente rompe con cualquier sinonimia entre go- bierno y violencia -como vefamos sugerido més arriba~:"[ujna rela- cién de violencia actéa sobre un cuerpo 0 sobre cosas...Su polo opues- to sélo puede ser Ia pasividad” (Foucault 1982:220, 1993a:304). El gobierno, en tanto conduccién de la conducta, por lo tanto, no tiene como su principio o su naturaleza a la violencia lo mismo podtia decirse,segiin el autor francés, del “consentimiento”. Sin embargo, eto rno implica que en la puesta en juego de una relacién de gobierno se excluya el uso de la violencia -ni, por otto lado, la obtencién del con sentimiento, Por el contrario, “nunca puede darse sin el uno o la otra ya menudo sin ambos a la vee”, en tanto “instrumentos y resultados” (Foucault 1982:220-221). De esta forma es posible inscribir la poten Gialidad y la efectividad del uso de la violencia en una prictica guber- rnamental ~como la actividad policial~ que la inchaye como instrumen~ to/resultado y, al mismo tiempo, la excede (Rose 1999:10, 24)" 9 mene sntido rent inereate el ejemplo plnteado por Michell Dean con epee to a a pens de muerte, Sepurimente ln geeuein de este cag legal implica na 229 (nseguaidad. peevenciin y ania 230 En este capitulo se trata de analizar la institucion policial desde el punto de vista de las relaciones de gobierno, Los dispositivos insttu- ionales ~o inclusive, como en este caso, “estatales"~ constituyen espa~ ios en los que es posible observar en forma clara y definida el fan~

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