MUERE ACTEN

Ayer, pasadas las 15:00 horas, muri Acten en la montaa en la

que sola cazar. Tras ser convertido en ciervo, fue atacado por su
propia jaura y muri debido a las numerosas heridas que le
infringieron los perros.
Teresa Rodrguez Manso, 2 B

Despus de estar toda la maana

cazando con sus compaeros, Acten
se adentr en un valle consagrado a
Diana, la diosa cazadora. En el
extremo ms recndito del bosque, se
encontraba la gruta en la que se
relajaban Diana junto a sus ninfas,
despus de un da de cacera.
Mientras ella se baaba, Acten entr
en la gruta. Las ninfas, desnudas
como estaban, empezaron a chillar y a
rodear a Diana con sus cuerpos para
evitar que el joven la viera. Pero fue
inevitable.
Diana, enfurecida, lo convirti poco a
poco en un ciervo asustadizo, que
huy al bosque.
Sus perros, que estaban cazando, al
verlo, corrieron tras l. Finalmente, lo
alcanzaron, jaleados por los antiguos
compaeros del joven.
Tras echarse encima y clavarle los
dientes una y otra vez, Acten muri
descuartizado.

La muerte de Acten de Tiziano. National Gallery.

Londres

Unos minutos antes de que entrara Acten en

la gruta, empezamos a or pasos, pero no le
dimos importancia; cremos que era un
animal. Nunca haba visto a Diana tan
enfadada, nos contaba una de las ninfas que
se encontraba con la diosa en la gruta.

IMPACTANTE
TRANSFORMACIN
HUMANA
Hace apenas unas horas, se ha producido la transformacin
de Adonis en anmona. Los hechos sucedieron en el bosque.
Su novia nos cuenta que lo encontr con una gran herida en
la pierna, producida por el colmillo de un jabal que, al
parecer, no ha querido hacer declaraciones. Fran Cano, 2 D

Mosaico de Adonis, Triclinium, Villa de Carranque

Eran las ocho de la maana Supuestamente, ella le aplic unos

cuando

el

joven

Adonis,

el polvos,

con

los

que

consigui

fallecido, daba un paseo con su transformar al fallecido en una

novia Venus.

anmona, una ligera flor de color

La chica nos cuenta que estaban rojo.

en el bosque, recostados, cuando
ella se tuvo que ir. Al cabo de un
rato, escuch un grito y se acerc

apresurada.
Antes de irse, Venus le advirti
que no se enfrentara a jabales ni
a

leones;

pero

evidentemente,

el
ignor

joven,
sus

recomendaciones.
Segn el testimonio de la diosa,
cuando lleg al lugar, Adonis ya
se encontraba sin vida y con una
gran mancha de sangre en el
suelo.

John William Waterhouse, El despertar de Adonis. Coleccin

privada