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El documento describe la actividad profética de varios profetas bíblicos como Isaías, Jeremías y Ezequiel, cuyos ministerios duraron décadas. También menciona a Abdias cuyo mensaje profético fue breve. Explica que los profetas recibían mensajes de Dios a través de visiones, audiciones y, en tiempos antiguos, trances inducidos por música y danza, como ocurrió con Saúl y Zacarías.
El documento describe la actividad profética de varios profetas bíblicos como Isaías, Jeremías y Ezequiel, cuyos ministerios duraron décadas. También menciona a Abdias cuyo mensaje profético fue breve. Explica que los profetas recibían mensajes de Dios a través de visiones, audiciones y, en tiempos antiguos, trances inducidos por música y danza, como ocurrió con Saúl y Zacarías.
El documento describe la actividad profética de varios profetas bíblicos como Isaías, Jeremías y Ezequiel, cuyos ministerios duraron décadas. También menciona a Abdias cuyo mensaje profético fue breve. Explica que los profetas recibían mensajes de Dios a través de visiones, audiciones y, en tiempos antiguos, trances inducidos por música y danza, como ocurrió con Saúl y Zacarías.
La de Isaias duro muy probablemente menos de medio siglo y aunque
algunos momentos ignoramos por completo lo que hizo, podemos decir que durante toda su vida ejercio el oficio de profeta. Algo parecido sucede con Jeremias, Ezequiel. Abdias presenta el lado opuesto. Solo se le atribuyen 21 versos y los tres ultimos probablemente no son suyos. Mucha gente imagina que el profeta establece una relacion de forma intima, como lo sugieren algunos pasajes de Jeremias, o mediante una manifestacion sobrecogedora de la divinidad, como ocurre en el capitulo 6 de Isaias.Visiones y audiciones son los terminos mas frecuentes utilizados por los profetas para referirse a los cauces por los que se les comunica el Senor. Pero existe otro medio muy distinto, al menos en tiempos antiguos, el trance, provocado por la musica y la danza. Nuestra sensibilidad acepta facilmente que el Espiritu Santo venga sobre Zacarias y profetice entonando el Benedictus. Pero nos desconcierta que el mismo espiritu de Dios invada a Saul y se ponga a Danzar, llegando incluso a quitarse la ropa y quedar tirado por tierra, desnudo (1 Samuel 19:23-24).