Th
Colonias de la Nueva Inglaterra:
Massachusetts
A través de los aiios, los historiadores han visto a los individuos de
la sociedad puritana de Massachusetts de dos maneras: como fand-
ticos 0 como iniciadores de los derechos individuales en América.
He ahi la paradoja: en realidad fueron ambas c
Los dos primeros documentos de esta seccién (1641-1647) ates-
tiguan la preocupacion de los puritanos por el respeto a la vida, la
libertad y la educacién. El Conjunto de privilegios no sélo afirma
los derechos esenciales ingleses sino que proporciona disposiciones
humanitarias, muchas de ellas adelantadas para su tiempo. La ley
de educacién fue en verdad muy avanzada al establecer el primer
sistema de educacién publica.
En cambio, el tercer documento (1654) es —he ahi la paradoja—
un discurso apasionado en el que, en un resumen de su gobierno,
Edward Johnson se pronuncia a favor de las ‘‘virtudes’’ de la into-
lerancia hacia otras religiones. La separacién de la Iglesia y el Estado
les parecia abominable segtin las Escrituras.
Otra faceta de la evolucién de la colonia de Massachusetts tuvo
que ver con su expansion por tierra indigena. Aun cuando habian
declarado, con arrogancia, que tenian derecho a la tierra no culti-
vada, los puritanos habian respetado mas 0 menos el tratado de paz
con Massassoyt, jefe de los wampanoagas, y su derecho al territo-
tio. Después de su muerte, su hijo Metacom o Felipe le sucedié y se
dedicé a reunir, entre sus wampanoagas y otras tribus, una fuerza
suficiente para combatir a los ingleses. De ahi la proclama que publi-
camos (1675), en la que pedia ayuda contra los desmanes ingleses.
En junio de 1675, Felipe se lanz6 a la guerra y logr6 asolar una
gran parte de los noventa establecimientos de la Nueva Inglaterra.
35EUA: Documentos de su historia politica
Los colonos no pudieron conseguir ayuda externa y en Nueva York,
Ja colonia mas cercana, su gobernador Edmund Andros traté de
aprovecharse para conseguir una parte de Connecticut. Lograron
derrocar a Felipe y sus huestes porque treinta afios antes se habia
establecido una confederacién de ayuda militar entre las colonias
de Nueva Inglaterra. No slo derrotaron a los wampanoagas sino
que los exterminaron. El poder indio en Nueva Inglaterra se termi-
n6 para siempre. Ese mismo afio, como veremos mas tarde, Natha-
niel Bacon condujo a los virginianos contra los indios Powhatan.
Ocho afios después, el 23 de octubre de 1684, Inglaterra anulé
la cédula original de Massachusetts segun la cual la colonia habia
sido practicamente autéroma. En 1686, en un esfuerzo por contro-
lar la politica colonial, los Lores encargados del comercio estable-
cieron el Dominio de Nueva Inglaterra. Este incluia Massachusetts,
New Hampshire, Connecticut, Rhode Island, Nueva York y Nueva
Jersey. La Corona nombré como gobernador a Edmund Andros,
quien ademas de haberlos traicionado durante la guerra del ‘“‘rey’’
Felipe, result6 poco apropiado para el puesto. Las colonias resin-
tieron la pérdida de sus cédulas y el que se les dejara sin Asamblea
de Representantes. La revolucién de 1688 que derrocé a Jacobo II
en Inglaterra les brind6 la oportunidad para acabar con el Dominio
pues éste representaba al monarca depuesto. Las colonias recupera-
ron su antiguo sistema de gobierno, acabando asi con el experimen-
to para consolidarlas y dominarlas. El resumen de autor andnimo
publicado aqui nos da la versién popular de lo sucedido (1689).
36Iv
Colonias de la Nueva
Inglaterra: Connecticut
La fundacién de Massachusetts tuvo lugar en 1630. Pese a todas sus
cualidades, la intolerancia religiosa 0 su método de gobierno eran
escandalo para algunos de sus habitantes. El reverendo Thomas
Hooker decidié, por tanto, cambiarse con un grupo de feligreses a
un establecimiento en el que la autoridad del gobierno se apoyara
en la voluntad del pueblo. Eligieron Hartford, junto al rio Connec-
ticut, en donde al afio siguiente fueron atacados por los indios pe-
quodas. William Bradford, a la sazon gobernador de Plymouth,
nos dejé un interesante resumen de la guerra (1637) por medio del
cual nos enteramos de que los colonos utilizaban el viejo método
espafiol de aprovecharse de las rencillas entre las tribus.
Aunque inicialmente Connecticut era administrado por comi-
sionados enviados desde Massachusetts, en 1639 ya habia suficiente
espiritu de independencia para establecer su autonomia. El reve-
rendo Thomas Hooker y John Haynes formularon la estructura de
gobierno llamada ‘“‘las Resoluciones fundamentales”’ (1639). Estas,
aunque basadas en el voto de todos los habitantes no fueron total-
mente democraticas porque la gente podia elegir pero sdlo los diri-
gentes de la Iglesia, gobernar. De cualquier manera, el que en “das
Resoluciones”’ se estipulara que las autoridades serian escogidas
por todos los habitantes fue en si un gran logro democratico.
Mientras tanto, un nuevo establecimiento se fund6 (1638) en
New Haven. Era una comunidad estrictamente biblica con leyes del
Antiguo Testamento. Su legislacién social, severa hasta la exagera-
cién, pasé en 1650 a ser parte del Cédigo de la Corte General de
Connecticut. Aun cuando en la primera seccién retomaron la preo-
cupacién de Massachusetts en cuanto al respeto por la vida, la li-
53BUA: Documentos de su historia politica
bertad y la propiedad de su gente, las leyes de Connecticut incluian
la sentencia de muerte (1650). Constituyeron un verdadero estado-
policia en donde hasta los juegos inocentes estaban prohibidos. Es-
tablecieron toda clase de multas con la finalidad de regular y
dominar la vida de los habitantes.
John Winthrop hijo, que habia establecido el pueblo de Say-
brook (también en la regi6n de Connecticut) decidié organizar los
establecimientos dispersos en una sola colonia. En 1662 consiguid
una cédula real para unificarlos; con ella tenian el derecho de elegir
a su gobernador.
La colonia de Connecticut siempre form6 parte integral de la vi-
da de Massachusetts ya que ambas tenian fundamentos puritanos.
En 1643 formaron la Confederacién de la Nueva Inglaterra para
presentar un frente unico a los indios y dirimir sus disputas sobre
limites. La actitud de ambas ante la Revolucién Puritana en Ingla-
terra fue de apoyo. Por tal motivo rompieron relaciones con Virgi-
nia y Maryland, que pertenecian al partido del rey, y si no les
declararon también la guerra quizd fue porque Nueva Holanda las
separaba. Ese periodo de guerra civil en Inglaterra dio a las colo-
nias la oportunidad de manejar sus asuntos y adquirir el habito del
autogobierno.
Con el regreso de Carlos II al trono, la autonomia de Nueva In-
glaterra se vio un tanto cuanto restringida. Massachusetts perdid
mucho, pues como hemos visto, Connecticut se convirtié en colo-
nia separada en 1663 y New Hampshire en 1679. Juntas sufrieron
el intento de creacién del Dominio de Nueva Inglaterra y la rebelién
contra el gobernador Andros.
54v
Colonias de la Nueva
Inglaterra: Rhode Island
Roger Williams fue un hombre adelantado a su tiempo. Llegado a
Nueva Inglaterra en 1631 pronto se encontré en desacuerdo con los
intolerantes jefes de la iglesia puritana porque Williams sostenia
que la bendicién divina se daba a la libertad de conciencia y no a
una sociedad intolerante. Pedia la separacién Iglesia-Estado en una
oligarquia religiosa y el derecho de los indios a su tierra.
Williams hubo de abandonar Massachusetts y establecerse, jun-
to con sus seguidores en un pedazo de tierra, donado por los indios
narrangasetts, al que Ilamé Providence. Para consolidar su esta-
blecimiento formulé un plan de gobierno (1640) en el que, de acuer-
do con los colonos, se daba cardcter tolerante a su colonia.
Cuatro afios después, Roger Williams volvié a la defensa de la
libertad de conciencia (1644) por medio de un panegirico religioso.
Varios ministros puritanos habian defendido la necesidad de la in-
tolerancia y Williams contesté no sélo afirmando su doctrina sino
haciendo ver la necesidad de la separacién de la Iglesia y el Gobier-
no civil. Toda persecucién por razones de conciencia era contraria
a la doctrina de Cristo.
Esa segunda proclama de Williams es muy avanzada: los funda-
mentos del poder civil se encontraban en la ciudadania por lo que
ésta podia organizar el tipo de gobierno que mas conviniera a su
condicién. Ademas determiné que era la poblacién quien otorgaba
a los magistrados el poder de gobernar la Iglesia por lo que el
pueblo tenia el derecho de supervisar que ésta cumpliera con su
deber.
A la altura de un Bartolomé de Las Casas, Roger Williams de-
claré que los gobiernos de las diferentes tribus indigenas tenfan la
69EUA: Documentos de su historia politica
misma legalidad que todos los demas gobiernos. Su declaracion fi-
nal fue y es excepcional: que los indios debian regirse de acuerdo
con sus conciencias ‘‘indias 0 americanas’’ y no la inglesa. Sostenia
que ellos eran los verdaderos dueifios de su tierra y que se les debia
comprar. Como solia decir, la tentacién del ‘‘dios-tierra’”’ de sus
compatriotas era tan perversa como la del ‘‘dios-oro”’ de los espa-
fioles.
Otros disidentes religiosos pronto siguieron sus pasos: William
Coddington fundé Newport y Samuel Gorton establecié Warwick.
Igualmente, Ann Hutchinson fund6 un establecimiento en Rhode
Island; no estaba de acuerdo con la teologia de sus compatriotas de
Massachusetts; no creia que el buen comportamiento fuera sefial
segura de predestinacion. Las cuatro fundaciones se unieron en una
colonia formada por cédula real otorgada a Williams en 1644.
Asi fue como los establecimientos de Rhode Island se convirtie-
ron en la colonia de la mas perfecta tolerancia y pionera de la sepa-
racién Iglesia-Estado. En medio de la intolerancia y la rigidez de
sus vecinos, Rhode Island era un oasis de libertad. La diversidad
de las fundaciones inglesas en Norteamérica empez6 con un esta-
blecimiento que rompié con los canones puritanos. De ahi que
siempre la consideraran como ‘‘la colonia inmoral’’ y atin en caso
de guerra con los indios se negaran a permitirle la entrada a su Con-
federacion.
70VI
Colonias Centrales: Nueva
York
Entre las colonias inglesas de la Nueva Inglaterra y las de Virginia
y Maryland estaban holandeses y suecos.
Los holandeses Ilegaron a las costas de Norteamérica buscando
lugares donde establecer pequefias factorias desde las cuales comer-
elar pieles con los indios y situar sus pesquerias. La suya fue una
empresa netamente comercial ya que en Holanda no existian pro-
blemas religiosos. Desde la primera década de los 1600, fincaron
pequefios poblados que iban desde la costa norte de Massachusetts
hasta Delaware y Nueva Jersey. Sin embargo, el establecimiento
principal fue la fundacién en 1624 de Nueva Holanda y la ciu-
dad de Nueva Amsterdam. La Compafifa Holandesa de las Indias
Occidentales puso ahi su base y para lograr la colonizacién de la
tibera del rio Hudson ide6 el sistema de ‘‘patrones’’. Estos se com-
prometian a llevar cincuenta colonos como minimo a cambio de
grandes extensiones de tierra a lo largo del Hudson. A esos hom-
bres les dieron poderes semifeudales pues eran casi soberanos en
sus posesiones (7 de junio de 1629). Fue asi como se organizé una
Oligarquia comparable a la de las colonias inglesas del sur. La
Compafiia conserv6 para si la fundacién de Nueva Amsterdam y el
derecho a supervisar los asuntos de la colonia por medio de un go-
bernador.
Los dos primeros gobernadores fueron prudentes en sus relacio-
hes con los indios, pero el tercero, William Kief, se metié en
problemas y finalmente en una guerra. Tuvo que construir una em-
pulizada, en lo que se Ilamé después Wall Street, para detener la
entrada de los indios a la isla. Era tan ineficiente, que algunos de
us compatriotas se unieron para enviar un escrito a la sede de la
719EUA: Documentos de su historia politica
Compaiiia en Holanda (1650). En él se quejaban de la ineficacia
y corrupcion de las autoridades enviadas por la Compajiia. No per-
donaron a Kief que los hubiera metido en una guerra con los indios
y que no velara por ia seguridad de los colonos. En cuanto al go-
bierno de Peter Stuyvesant, los colonos se quejaban de gastos inne-
cesarios y confiscaciones arbitrarias. En septigmbre de 1650
Stuyvesant firmé el Tratado de Hartford mediante el cual cedia las
posesiones holandesas en Connecticut a los ingleses. En cambio re-
dobl6 sus fuerzas en Delaware, arrancada a Suecia.
Sin duda que la endeble situacién de Nueva Holanda preparé
el triunfo de la invasién inglesa de 1664. La colonia cambié su
nombre por el de Nueva York y conserv6 su lengua holandesa y el
sistema de ‘‘patrones’’. Para ese entonces Nueva Amsterdam era ya
una colonia poliglota y de muchas religiones.
Durante toda la colonia, Nueva York estuvo bajo las ordenes
de un gobernador y un consejo nombrado por la Corona, mas una
asamblea elegida por los hombres libres. Aunque Nueva York pros-
pero enormemenie, siempre hubo tensidn entre la Asamblea y las
autoridades coloniaies (1756).
Una alianza con los indios iroqueses habia abierto la parte cen-
tral de la colonia a los ingleses, pero en 1756 empezo la guerra con
los franceses que debfa durar hasta 1763. La frontera de la colonia
fue asolada por indios y franceses durante toda la contienda.
80Nueva Jersey
La colonia llamada Nueva Jersey por los ingleses fue hasta 1664
parte de la Nueva Holanda. La tierra entre los rios Hudson y Dela-
ware fue cedida por el duque de York a dos de sus amigos, Lord
Berkeley y Sir George Carteret. Como éstos eran también duefios
de las Carolinas, pronto perdieron interés en la nueva colonia. Ber-
keley vendié su parte en 1674 a una colonia cudquera, que por lo
consiguiente se afilié a Filadelfia.
William Penn fue quien redacté las Concesiones y Acuerdos
(1677) en los que se garantizaban muchos de los principios cuaque-
ros de gobierno civil. Fue la constitucién mas liberal de todas las
colonias, con jurado popular, libertad de conciencia, derecho de
habeas corpus* y asamblea representativa.
La porcién oriental de Jersey fue colonizada por presbiterianos
escoceses y puritanos de Nueva Inglaterra, pero dependian econd-
micamente de Nueva York. La desorganizacién propiciada por el
poco interés de Sir George Carteret en su posesion dio por resulta-
do una proliferacién de establecimientos que hicieron de Jersey oc-
cidental una regién tan compleja, racial y culturalmente, como
Nueva York. Sin embargo, mientras que en esta ultima regién los
holandeses seguian siendo el grupo dominante, en Jersey no domi-
naba grupo alguno.
Para poner fin a la desorganizacién, las autoridades de ambas
Jerseys pidieron ser colonia real en 1702.
“Derecho de todo ciudadano, detenido o preso, a comparecer inmediata y pi-
blicamente ante un juez o tribunal para que, oyéndole, resuelva si su arresto fue 0
no legal (N. del C.).
91EUA: Documentos de su historia politica
WILLIAM PENN: CONCESIONES Y ACUERDOS
PARA NUEVA JERSEY OCCIDENTAL (13 DE
MARZO DE 1677)*
Que las concesiones siguientes constituyen la ley comun o de dere-
chos fundamentales de la provincia de Nueva Jersey Occidental.
Que la ley comtin de derechos y privilegios fundamentales de
Nueva Jersey Occidental es expresamente acordada por los conce-
sionarios 0 propietarios de los fundos; que constituye el fundamen-
to del gobierno y que no podra ser alterada por la autoridad
legislativa ni por la libre Asamblea, mds adelante mencionada y
constituida, sino que dicha autoridad legislativa se constituye de
acuerdo con estos fundamentos para promulgar leyes que respeten
y sostengan sus principios y para no promulgar ninguna ley que se
oponga, difiera o se aparte en lo mas minimo de dichos principios,
bajo cualquier pretexto 0 alegato. . .
Que ningiin hombre ni conjunto de hombres sobre la Tierra ten-
dra poder o autoridad para gobernar las conciencias de los hombres
en materia de religién; por lo tanto se acepta, acuerda y ordena que
ninguna persona en absoluto dentro de ila mencionada provincia,
en ningin momento 0 momentos, de aqui en adelante, podré de
ningiin modo o con cualquier pretexto ser puesta en entredicho, 0
castigada en lo mds minimo, 0 afectada, en su persona, fortuna
0 privilegios por sus opiniones, juicios, fe o creencia en Dios, mate-
rias de religién. Por el contrario, todas y cada una de las personas
podran, en ocasiones, y todo el tiempo, tener y gozat libre y total-
mente de sus propios juicios, del ejercicio de sus criterios en materia
de creencia religiosa, en toda la extensién de la provincia.
Que ningiin concesionario o propietario 0 habitante de dicha
provincia de Nueva Jersey Occidental podra ser condenado O priva-
do de la vida, de un miembro, de la libertad, de sus tierras y de sus
propiedades, o ser afectado de cualquier manera en sus privilegios,
libertades 0 concesiones por cualquier monto, sin el debido proceso
*En The Annals. . ., vol. I, p. 262-264.
92
I. El mundo colonial inglés, (1607-1763)
y juicio celebrado por doce honrados y autorizados vecinos, elegi-
dos entre los que primero se hayan establecido. Que, en todas las
causas y procesos que se litiguen, la persona o personas acusadas
podran objetar a cualquiera de dichos vecinos sin presentar razén
alguna (no excediéndose de treinta y cinco) y, en caso de alegar una
razon valida, en contra de cada una de las personas designadas para
este servicio. . .
Que ningun concesionario, propietario, vecino o habitante de
dicha provincia podra ser arraigado, arrestado o encarcelado por
o en razén de deudas, obligaciones, o por la causa que sea (excepto
en caso de felonia, crimen o traicién) antes de que tal persona,
hombre o mujer, haya recibido en su ultimo domicilio, si se encon-
trare en la dicha provincia, una citacién personal (0 citaciones) pa-
ra presentarse en una corte de justicia de dicha provincia, asi como
una explicacién completa y clara de la causa de la demanda, entre-
gadas por un funcionario autorizado legalmente, nombrado e ins-
talado con ese propésito.
Que en cada corte deberd haber tres comisionados y jueces que
asistiran con los doce vecinos escogidos, para tomar conocimiento
de todas las causas y asesorar en asuntos legales a los doce vecinos
escogidos; y que dichos jueces deberan pronunciarse en tales juicios
de acuerdo con los dictados de los doce jurados a los cuales compe-
te emitir el juicio. . .
Que cualquier persona o personas cualesquiera sean, que pre-
senite o prosiga alguna acusacién o delacion en contra de otros, por
injurias o dafios que competan a lo criminal, 0 que prosiga la acu-
sacién por cualquier otra causa, no siendo traicién, crimen o felo-
nia que se exceptuian, tendra derecho a ser el unico rector de su
propio proceso y tendra pleno poder para perdonar o exonerar a
lao a las personas que la ofendieron, tanto antes como después del
juicio y de la sentencia; y podra perdonar y desistirse de la senten-
cia, multa y castigo aplicados a la o a las personas que la ofendie-
ron ya sea personalmente o de otro modo. . .
Que en todos los tribunales publicos de justicia, dedicados a jui-
cios civiles o criminales, cualquier persona o personas, habitantes
de dicha provincia podran acudir y permanecer en dichos tribunales
escuchando y presenciando todos y cualquier juicio en particular
que ahi se promuevan, para que la justicia no se Ileve en secreto ni
93EUA: Documentos de su historia politica
de manera disimulada, pues se intenta y resuelve que, con la ayuda
del Sefior y de acuerdo con nuestros privilegios y derechos funda-
mentales, todas y cada una de las personas que habitan esta provin-
cia, pueden ser libres de la esclavitud y la opresién, hasta donde
esté en nuestras manos.
94
Vill
Colonias Centrales:
Pennsylvania
A mediados del siglo diecisiete aparecié en Inglaterra una nueva
secta religiosa: los cudqueros*. Sus seguidores fueron perseguidos
por pacifistas y rebeldes a los dictamenes del gobierno; por ese mo-
tivo muchos de ellos decidieron irse a las colonias. Perseguidos
también en la Nueva Inglaterra, como ya dijimos, un grupo com-
pré a Lord Berkeley en 1675 los terrenos de Nueva Jersey Occiden-
tal que habia obtenido el duque de York.
Entre tanto, William Penn obtuvo del rey Carlos I una dona-
cién de tierra al oeste del rio Delaware. Publicé un prospecto sobre
la nueva colonia que distribuy6 por toda Europa. Para regular la
venta de terrenos y organizar la ciudad de Filadelfia, Penn edité las
Concesiones y Condiciones (1681) que también regulaban el trato
con los indios. William Penn, utilizando su propio dinero e inver-
siones de cudqueros ricos, establecié una colonia donde los cudque-
ros pudieran obtener refugio y vivir segtin sus principios.
Unos cuantos afios después (1685), Penn publicé una relacion
de lo que acontecia en Filadelfia. Hizo saber al mundo que su colo-
nia estaba compuesta de muchas nacionalidades que vivian en paz
“como gente de un mismo pais’’. En cuanto a sus vinculos con los
indios Delaware, explicé que les habia comprado la tierra y vivian
en buena amistad con ellos. La colonia se distinguié por su gobier-
no relativamente democratico, su gran medida de tolerancia religio-
sa y su politica pacifica hacia los indios.
A la concesion que Penn habia recibido de Carlos II se afiadié
la compra al duque de York de lo que habia sido Nueva Suecia, lla-
*Crefan en una iglesia sin clero, eran pacifistas y pensaban que los indios
eran los duefios del territorio. Se distinguian por lo sencillo de sus costumbres,
95EUA: Documentos de su historia politica
mada Delaware. Habia sido fundada por la Compaiiia de la Nueva
Suecia en 1638 con fines comerciales: pesqueria y comercio de pie-
les. En 1655 sus vecinos de la Nueva Holanda decidieron invadirlos
y anexarse su tierra. Cuando en 1664 Nueva Holanda fue tomada
por los ingleses, Nueva Suecia pas a ser parte de Nueva York hasta
su venta a William Penn en 1682.
Varios grupos de sectas protestantes radicales Ilegaron a
Pennsylvania, entre ellos los menonitas alemanes que fundaron
Germantown. Como resultado de una propuesta para importar es-
clavos a Pennsylvania, como era costumbre en otras colonias, los
menonitas alemanes promovieron una resolucidn en contra de tal
medida (18 de febrero de 1688). ‘Aunados sus esfuerzos a los de los
cudqueros, la colonia decidiéd no aceptar esclavos.
La comunidad de Pennsylvania pronto prosperé. Por razones
de conciencia, los cudqueros decidieron que el gobernador (en au-
sencia del propietario) no fuera cudquero para que asi pudiera
actuar con mas libertad en materia econémica y politica. Sin em-
bargo, insistieron en que su proceder hacia los indios fuera, no obs-
tante los desmanes de éstos, pacifica y conciliatoria. Para ello los
comisionados, siempre cudqueros, realizaron con los indios innu-
merables tratados de paz (septiembre y octubre de 1736).
En todas las guerras coloniales provocadas por las contiendas
europeas los cudqueros se negaron a pelear, al igual que en los en-
cuentros con los indios. Sin embargo, conforme llegaban miles de
inmigrantes de todas partes de Europa, el descontento hacia la poli-
tica pacifista crecié. A fines de noviembre de 1755 un grupo de ale-
manes Ilegaron a Filadelfia desde la region fronteriza para quejarse
de las continuas y violentas incursiones indias.
En 1754 empezo la guerra francoindia* en las fronteras de
Pennsylvania, Maryland y Virginia. Para 1756 hasta los cudqueros
se habian dado cuenta que era imposible continuar gobernando de
acuerdo con los principios de su religién. A principios de ajio, el
gobernador y el Consejo decidieron declarar la guerra a los indios
delaware y shawnee por lo que unos meses después los cudqueros
prominentes en el gobierno presentaron sus renuncias. De ahi en
*La guerra de los Siete Afios entre Francia e Inglaterra llamada en las colonias
guerra francoindia porque los indios peleaban como aliados de los franceses.
96
I. El mundo colonial inglés, (1607-1763)
ena Ja politica br Pennsylvania fue netamente inglesa. Durante
inco afios los cuaqueros habian tr: ,
1CO ‘atado de mant I
paz con los indios y habian fr: i yen las
on Ic ‘acasado. Por ser el uni
colonias inglesas es di Gespucs conte
igno de conocerse. Ocho afios d é i
. espues conti-
pape pe cudqueros tratando de proteger a los indios ante las pro-
7 ae las de los otros colonos (13 de febrero de 1764),
a nea la colonia cudquera de William Penn no consiguié vi-
Hose se de pacifismo como tampoco establecer una utopia reli-
+ 8€ convirtid, en cambio, en un éxito mundano.
97x
Colonias del Sur; Maryland
La fundacién de Maryland fue uno de los casos mas sorprendentes
de las colonias inglesas en Norteamérica. Fue una donacién de Car-
los I (1632) a la familia Baltimore, la primera colonia de ‘‘propieta-
rio” en la historia de las colonias y como tal un retroceso al sistema
feudal de baronfa. Afios después hubo varias mas, pero ninguna de
las cédulas otorg6 tantos poderes a su poseedor como la de Mary-
land. Basada en la cédula del Palatinado de Durham, un feudo de
la Corona, concedia poderes similares a los que la Corona espafiola
daba a sus ‘‘adelantados’’ y que el rey inglés sélo habia otorgado
a contadas personas en Inglaterra.
Por medio de la cédula, el rey Carlos I permitiéd que Lord Balti-
more fuera la autoridad legal, lugar que el rey ocupaba en las otras
colonias. Podia ademas escoger el sistema de gobierno que quisie-
ra, por lo que Baltimore dio rienda suelta a su fantasia: cred un sis-
tema basado en el feudalismo. La tierra se dividié en sefiorios con
derechos cuasi feudales para legislar y recibir tributos. Ademas,
Baltimore pretendié crear una nobleza colonial que dominaria la
vida de su colonia.
El motivo principal de la fundacién fue crear un refugio para
los catélicos que eran perseguidos desde tiempos de Isabel I. Dado
el sistema neofeudal con que se organizé la colonia, era de esperar-
se que el catolicismo fuera la religién oficial. Sin embargo no fue
asi; Lord Baltimore deseaba la Ilegada de muchos colonos, por lo
que, por motivos pragmaticos, decidié aceptar todas las religiones
cristianas. Para asegurar la paz y bienestar de su colonia promulg6
la Ley de Tolerancia (1649).
113EUA: Documentos de su historia politica
La poblacion aumenté rapidamente y con ella las plantaciones
de tabaco se multiplicaron.
Los supuestos sefiores feudales se convirtieron en ricos terrate-
nientes en un mundo que trataba de imitar la vida rural inglesa.
Cuando la guerra civil inglesa (1642-1659) trastornd todas las rela-
ciones coloniales, la Asamblea representativa tomo su lugar carac-
teristico en el gobierno de las colonias inglesas.
114x
Colonias del Sur: Virginia
Se ha hecho referencia en paginas anteriores, a la fundacion de Vir-
ginia. Como primer asentamiento inglés en Norteamérica, estable-
cid el patrén para las fundaciones subsecuentes. Sus comienzos
fueron muy dificiles y la colonia estuvo a punto de fracasar. La sal-
vo la bondad de la tierra para el cultivo del tabaco.
La poblacién aumenté de manera considerable, por lo que la
Compaiiia fundadora ordeno al gobernador convocar a una asam-
blea segun la tradicion britanica. Aun cuando ésta fue en un princi-
pio poco independiente, su mérito consistis en ser el primer
ejemplo de gobierno representativo en la América inglesa (30 de ju-
lio de 1619). Es interesante leer que desde su primer documento ini-
cid lo que seria una constante en todas las legislaturas, la peticién
de mayores poderes para el gobierno colonial.
A raiz de la matanza de ingleses Ilevada a cabo por los indios
powhatan (22 de marzo de 1622), el rey Jacobo I acusé a la Com-
pajifa propietaria de no proteger a los colonos y revocé su cédula.
Virginia pas6 a ser propiedad de la Corona pero su legislatura per-
sistid.
Durante la guerra civil de Inglaterra (1642-1659), Virginia pro-
clamé su lealtad al rey Carlos I y cuando los parlamentarios
ganaron la guerra, declaré su fidelidad a Carlos II, en ese momento
rey en el exilio. Aunque el gobierno victorioso quiso imponerse en
Virginia, ésta se goberné casi en forma auténoma hasta la restaura-
cién de la monarquia en 1660. Durante los 18 afios de guerra civil
y gobierno parlamentario, Virginia doblé su poblacién debido al
éxodo hacia esa regién de numerosos ingleses partidarios de la mo-
narquia. De ahi resulté que su sociedad se convirtiera paulatina-
123EUA: Documentos de su historia politica
mente al igual que Maryland en una copia de la vida rural de clase
media alta inglesa.
Su economia se basaba fundamentalmente en la produccién de
tabaco por lo que la mano de obra de los esclavos africanos era
muy importante. Por ese motivo, entre 1660 y 1669 vieron la necesi-
dad de legislar acerca de los esclavos que trabajaban en sus planta-
ciones. Como se ve, los consideraban como propiedades a merced
de sus amos.
A medida que se desarrollé la colonia se formé una clase gober-
nante que restringié el voto a quienes poseyeran cierta cantidad de
tierra. La expansién continud a costa de los indios quienes no sdlo
se sublevaron en 1622 sino también en 1644. Al contrario de los co-
lonos de la Nueva Inglaterra que habian logrado dominar a los in-
dios, los virginianos no pudieron y los ataques continuaron sobre
todo contra los asentamientos lejanos a la costa.
Un grupo de colonos habitantes de la frontera con los indios pi-
di con insistencia la proteccién del gobierno de Virginia. Enel do-
cumento que presentamos (1676), los comisarios enviados a inves-
tigar las causas de la rebelion de Bacon nos exponen claramente la
situacion.
Liberada del peligro indio, la colonia continu6 su desarrollo.
En una sociedad de plantaciones y de esclavos, Jos virginianos bus-
caron imitar la vida de los caballeros ingleses del medio rural. Sus
feudos eran sus plantaciones.
124i.
XI
Colonias del Sur: las
Carolinas
eee
Como atestigua el documento de William Byrd (1728-1729), comi-
sionado para establecer la frontera entre Virginia y las Carolinas,
la region estaba habitada desde finales del siglo XVII por varios
grupos dispersos de virginianos y cudqueros, hostiles al gobierno de
sus colonias. Franceses y espafioles habian fracasado en colonizar
la comarca por su dificil geografia y la fiereza de los insios tus-
carora.
Aunque en 1629 Inglaterra habia intentado una fundacion, ésta
se Ilevé a cabo mas de treinta afios después, cuando Carlos II
regresd al trono de Inglaterra. Asi como otorgé donaciones de
tierra a su hermano, el duque de York, ya William Penn, también
lo hizo a ocho de sus amigos que le pedian la tierra al sur de Vir-
ginia.
Los propietarios, al parecer, publicaron (1666) una pequefia
descripcién de la tierra, llamada Carolina, y enumeraron los privi-
legios que otorgarian a sus colonos. Concedieron libertad de con-
ciencia, derecho a elegir una ‘Asamblea General que con el gober-
nador y su Consejo tendria todo el poder de legislar e imponer
impuestos, etc. Si esa especie de constitucién se hubiera puesto en
practica, Carolina hubiera sido un lugar de democracia y prospe-
ridad.
Sin embargo, nuevamente la geografia estuvo en contra. Las
dos fundaciones que surgieron, Albemarle al norte y Charleston al
sur, ademds de estar a una gran distancia, posefan clima y condicio-
nes malsanas.
Como ya hemos dicho, en un esfuerzo por salvar el proyecto Sir
Ashley Cooper, uno de los propietarios, pidid a John Locke que re-
135EUA: Documentos de su historia politica
dactara una constitucién para el gobierno de la region. Este ided
un curioso documento que pretendia instituir un segundo experi-
mento (Maryland fue el primero) neofeudal en las colonias inglesas
de Norteamérica. Fue el segundo intento para crear una nobleza co-
lonial con sefiorios y siervos. De esa manera creia asegurar la colo-
nizacién de la region, pues todo aspirante a un titulo de propiedad
debia llevar un cierto ntimero de personas.
Ni qué decir que la constitucién de Locke fue un gran fracaso.
Al igual que en Maryland, la geografia impidio el triunfo del neo-
feudalismo. Los diversos grupos de habitantes congregados alrede-
dor de Albemarle, al norte de las Carolinas, se negaron a aceptar
las asignaciones geograficas necesarias para establecer los sefiorios.
Los propietarios fallaron al no poder proporcionar un gobierno es-
table y eficiente por lo que el norte de Carolina se desarroll6 muy
lentamente. Ademas, fueron atacados duramente por los indios
tuscarora.
El asentamiento de Charleston en Carolina del Sur se empezd
a desarrollar en 1680, cuando un grupo de protestantes franceses
legaron a establecer el cultivo del gusano de seda. Escoceses, ale-
manes y suizos arribaron después. Desde el principio, el gobierno
unificado de ambas regiones result6, otra vez por razones geografi-
cas, un fracaso. En 1712 se nombraron dos gobernadores y en 1729
Jorge II compré la regién y la hizo colonia real; desde ese momento
las dos colonias empezaron a prosperar. |
Lugar de plantaciones y de negros, form6 parte integral de la
vida de las colonias del sur. Como Maryland y Virginia, las Caroli-
nas trataron de crear un mundo copiado de la campifia inglesa,
mundo ficticio por basarse en diferentes condiciones socioecondmi-
cas y, sobre todo, en la esclavitud.
136
I. El mundo colonial inglés, (1607-1763)
ANONIMO: OPORTUNIDADES PARA LOS
COLONOS EN CAROLINA (1666)*
Carolina es una provincia agradable y espaciosa del Continente
Americano. La tierra presenta diversos matices al igual que en to-
dos los paises del mundo. La que queda cerca del mar es arenosa
y arida, aunque esta Ilena de arboles altos, que producen buena ma-
dera para emplear en varios usos; los conocedores creen que este
suelo arenoso es una de las causas de que el lugar sea saludable.
Unas veinte 0 treinta millas rio arriba, donde han construido un
pueblo llamado Charles Town, abunda un suelo tan rico como en
ninguna parte del mundo...
Por consiguiente, si cualquier persona trabajadora o ingeniosa
tuviese deseos de compartir las bienaventuranzas de este pais, per-
mitaseles abrazar la primera oportunidad, ya que obtendria las ma-
yores ventajas.
Los privilegios principales son los siguientes:
Primero. Todos tienen completa y amplia libertad de conciencia,
de manera que ningin hombre habra de ser molestado o puesto en
tela de juicio en materia de religion; pero todos habran de obedecer
al gobierno civil, adorando a Dios segtin su propia costumbre.
Segundo. Existe libertad de impuestos en todos los vinos, las
sedas, las pasas de uva, las grosellas, los aceites, las aceitunas y
las almendras que se cultiven en la provincia durante siete afios,
después de que cuatro toneladas de cualquiera de dichas mercancias
hayan sido importadas en un solo cargamento.
Tercero. Cada hombre libre y cada mujer libre que se transporte
a si mismo y a sus sirvientes para el 25 de marzo proximo en este
aiio de 1667, obtendra: para él, su esposa, sus hijos y sus sirvientes:
100 acres de tierra para él y para a cada uno de sus herederos de
por vida, y 50 acres para cada sirviente y esclavo,** pagando a lo
sumo 1/2 d. por acre por afio en lugar de todas las exigencias de los
sefiores propietarios, siempre y cuando todo hombre esté armado
de un buen fusil de calibre maximo de 10 libras de pélvora y 20 li-
*En The Annals..., vol. 1, p. 240-242.
**100 acres equivalen a 40.4 hectdreas y 50 a 20.2. (N. del C.).
137hit i ee os
EUA: Documentos de su historia politica
i i es, con
bras de municiones y provisiones para todos para nig aires
el fin de que les sirvan mientras las cosechan en a ro ibis
Cuarto. Cada sirviente, al terminar su plazo, hal foe ev
de la nacién 100 acres de tierra para ély sus ineie mie SO
van, pagando solamente 1/2 d. por acre al afio; y las ee Tee
acres de tierra en las mismas condiciones. ‘Sus ae ae peal
bran de proporcionarles dos trajes de vestir y herra Ae tps!
que mejor puedan. trabajar, de acuerdo oor las eet pat
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to. Habran de tener un go pa
adios ellos mismos para cepeiorarse de ae ee ea geet
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an debidamente ejecutadas; A A
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tendra poder para establecer impuesto alguno, nl a Able:
ley alguna sin el consentimiento ta Leases 7 a Ae a
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. Habran de elegir anualmente, ¢ a
sgitgnisiro de hombres, seguin sus divisiones, para Se rota
san la Asamblea General junto cone gobernadory ae eeioe ie
ini tar leyes y ¢s' t 1
co poder sera el de decret Saal
Dain ee proporcionat el bienestar comin, cuando la necesid:
jiera. : onal
lo TEE son los privilegios mas importantes y fundamn ee mas
los propios y honorables sefiores Peo a pr os ealtcied
i i— ispuest 1
terés proceder asi— estar al s i
oe vileglo cute pueda considerarse ventajoso para el biene:
lonia. : | sa
* ‘Siubiera, por lo tanto, algiin hermano mio oon x
re de gentiles, cuyo espiritu se eleve por encima Ee a
aie sin embargo la dificil usanza de nuestro pais ae eed
thitido una fortuna adecuada, seguramente no a ; cia mts
i espiritu,
igualar su fortuna a su sangre y _ a
aired fuera de la ley que demasiados de nuestros soveht a
Tleros siguen para mantenerse de acuerdo con 7 ee ia ee aa
a pesar de ser duefios de pequefias propiedat ou in aa Be
cuantos sirvientes y un poco de ganado se puc eae ie
ran propiedad, aunque por nacimiento no se ce ‘a a a Ol
aigina de la tierra de sus antepasados; mas su i a sida ed
promoverlo de tal manera que se convierta en Je! re
realmente famosa.
138
1. El mundo colonial inglés, (1607-1763)
Los que se encuentren aqui atormentados, preocupados por ver
cémo se hacen merecedores de ganar lo suficiente para vivir, o que
con su trabajo apenas logren conseguir una subsistencia pasable,
haran bien en ira ese lugar, donde cualquier hombre, con sdlo estar
dispuesto a pasar dificultades regulares, puede estar seguro de con-
seguir una muy cémoda existencia y podra alcanzar una posicién
tal que aumentara su fortuna por encima de lo que jamas habria
podido esperar en Inglaterra. Que ningtin hombre se preocupe al
pensar que podria ser sirviente cuatro 0 cinco afios, pues yo os ase-
guro que muchos darian dinero para que sus hijos sirvieran durante
siete afios, para que se esforzaran tanto como lo harian los sirvien-
tes de la plantacién. Ademas habra de considerarse que tan pronto
como se venza el plazo de esclavitud, tendrd tierras y herramientas
y le dardn vestimenta; estara en camino del progreso.
Por lo tanto, todo artifice, como los carpinteros, carreteros, eba-
nistas, toneleros, tabiqueros, herreros o diligentes jornaleros que
estén dispuestos a mejorar su fortuna y a vivir en un pais por demas
agradable, saludable y fructifero, en el que los artifices gozan de
gran estimacién y se emplean con la mayor civilidad y cortesia imagi-
nables, podrdn notar que existe una oportunidad, ofrecida actual-
mente por la Virginia Fleet (Flota de Virginia), de donde Cape Fear
esta tan sdlo a tres o cuatro dias de viaje, por mar, y entonces, un
poco de ganado entregado en Virginia daré para comprar provisio-
nes a un precio mucho menor que si se llevaran desde aqui. Ade-
mas, se ahorraria el flete de dichas provisiones, que serian mds
frescas y no requeririan traslado de Virginia hasta alla.
Si cualquier sirviente 0 mujer soltera siente deseos de ir alla,
pensard que esté en la Edad de Oro, cuando los hombres pagaban
dote por sus esposas, puesto que con sélo comportarse civilmente,
yno pasar de los cincuenta afios de edad, uno u otro hombre hones-
to la compraria para hacerla su esposa.
Aquellos que deseen mds informacién o los sirvientes que estén
considerando ser contratados, que se presenten con el sefior Matt-
hew Wilkinson, ferretero, donde el cartel de Three Feathers (Tres
Plumas), en la calle de Bishopsgate: Alli podran informarse cuando
estardn listos los barcos y qué deberdn llevar consigo.
139EUA: Documentos de su historia politica
WILLIAM BYRD: EL PERITAJE SOBRE LA
FRONTERA ENTRE VIRGINIA
Y CAROLINA (1728-1729)*
9 de marzo. Los peritos comenzaron temprano su trabajo esta ma-
fiana y marcaron la linea a través de la plantacién del sefior Eyland,
hasta las riberas del Rio del Norte. Cruzaron el rio en la piragua
y desembarcaron en el pantano de Gibbs, que media una milla de
ancho y era bastante firme. Atravesaron lentamente el pantano, sin
mucha dificultad, hasta llegar a las tierras altas, que prometian ser
més fértiles que cualquiera de las otras tierras que habian visto por
estos lugares. Pero esta tierra firme no duré mucho antes de que
llegaran a la temible ciénega con la que habian sido amenazados.
Tampoco la encontraron ni una pizca mejor de lo que se la habian
pintado. Los castores y las nutrias la habian hecho intransitable pa-
ra cualquier otra criatura. ..
No les hacia feliz a estos valerosos fronterizos cobijar a los es-
clavos fugitivos, aunque los deudores y los criminales habian en-
contrado muchas veces indulgencia semejante. Pero si el gobierno
de Carolina del Norte habia fomentado esta politica tan poco ami-
gable con la intencién de aumentar su poblacién, no logré mas de
lo que la antigua Roma hizo antes que ellos: formar una ciudad que
sirviera de refugio a todos los acreedores y fugitivos, un infame co-
mienzo con el que crecié para convertirse con el tiempo en sefiora
de gran parte del mundo. Y considerando cémo la fortuna se delei-
ta produciendo grandes cosas de las pequefias, ,quién sabe si Caro-
lina pueda en un momento dado, llegar a ser la sede de algun otro
gran imperio?...
16. Este dia la linea se extendié una milla y media y dieciséis
varas mds alld.
Esto fue una gran novedad para la hermandad de Carolina del
Norte, que vive en un clima en el que ningun clérigo puede respirar
mejor de lo que lo harian las arafias en Irlanda...
Algo puede decirse de los habitantes de esta provincia: es que
no se preocupan por ninguna religidn, son los menos supersticiosos
*Tomando de History of the Dividing Line en ibidem, p. 375-379.
140
I. El mundo colonial inglés, (1607-1763)
de cualquier pueblo viviente, no distinguen el domingo de los de-
mas dias, igual que lo hacia Robinson Crusoe, lo cual les da gran
ventaja, si es que tienen el don de ser industriosos. Sin embargo,
celebran tantas fiestas cada semana que su desatenci6én por el sépti-
mo dia no contiene crueldad alguna para con los sirvientes 0 el ga-
nado...
La noticia de que nuestros peritos habian salido del Dismal (la
Calamidad) aumento en mucho la cantidad de gente que llegé, por-
que les daria oportunidad de adivinar, al menos, el lugar aproxima-
do por donde pasaria la linea fronteriza, por medio de la cual
podrian fornfarse algun juicio para saber si pertenecian a Virginia
o a Carolina. Aquellos que habian ocupado las tierras que estaban
dentro de los disputados limites sentian gran angustia de que pudie-
ran encontrar que quedaban en Virginia; porque habiendo sido esto
realizado contra una orden expresa de ese gobierno, los titulares te-
nian mucha razon para temer haber perdido sus tierras, si éste fuera
el caso. Pero sus aprehensiones terminaron cuando comprendieron
que todo el territorio que habia sido motivo de controversia, seria
mas bien dejado dentro de Carolina.
La mayoria de las casas en esta parte del pais son cabafias de
madera, techadas con tejas de pino o ciprés, de tres pies de largo
por uno de ancho. Estan colgadas sobre tablados con clavijas y las
puertas también giran sobre visagras de madera y tienen cerraduras
de madera, de modo que la construccién se termina sin clavos y sin
ninglin otro trabajo de herreria. Asimismo colocan las estacas
sin usar para nada clavos y, efectivamente, quedan mucho mas se-
guras que las que estan clavadas. Hay tres rieles ensamblados a los
postes, de los cuales el mas bajo sirve de alféizar, con una ranura
en medio suficientemente grande como para recibir el extremo de
las estacas. La parte central de la estaca descansa contra el interior
del riel siguiente y la parte superior de éste se trae hacia adelante
y hacia el exterior del de mas arriba. Este entrelazado de las estacas
por adentro y por afuera hace que se sostengan firmes y que sea
mucho mas dificil desbaratarlas que cuando estan clavadas a la ma-
nera comun.
A tres 0 cuatro millas de Edenton, el suelo parece ser un poqui-
to mas fértil, aunque muy dividido por tierras pantanosas, que pa-
recen tender hacia Dismal (la Calamidad). Este pueblo esta situado
141UA: Documentos de su historia politica
en el lado norte de Albemarle Sound, a unas cinco millas de distan-
cia. Una abertura sucia corre a todo lo largo de la parte trasera, lo
cual durante el verano es una molestia fétida y engorrosa que pro-
vee en abundancia esa plaga de Carolina, mosquitos.
142
XI
Colonias del Sur: Georgia
Entre el extraordinario mosaico de los establecimientos ingleses en
Norteamérica, destaca la original fundacién de Georgia (9 de ju-
nio de 1732). Ya en el siglo xviil, época de los reyes Hannover, las
persecuciones religiosas habian pasado un poco de moda en Ingla-
terra. En cambio, los ingleses, siempre preocupados por alguna
causa, se interesaban en la suerte de los deudores que segtin la ley
debian ir a la carcel; varios fraudes escandalosos habian aumenta-
do su grupo considerablemente. Otro motivo de preocupacién con-
sistia en el creciente pleito con Francia y, por el Pacto de Familia,
con Espajfia. El territorio de Carolina del Sur se extendia hasta la
frontera con Florida por lo que ahi también habia encuentros
anglo-hispanos. El tercer motivo de preocupaci6n consistia en la
necesidad de encontrar un nuevo sitio que proveyera a Inglaterra
de sedas y frutos citricos.
Por todas estas razones, el rey Jorge I] aceptd gustosamente el
proyecto de James Oglethorpe y sus socios para fundar un refugio
para deudores y le encargé la defensa del territorio en contra
de ataques espafioles. Oglethorpe a su vez publicé una relacion de
las intenciones de su sociedad para fundar la colonia de Georgia
(1733). La ultima colonia inglesa que se fund6 en Norteamérica fue
una verdadera empresa mercantil: los socios y todos aquellos que
quisieron ayudar al establecimiento depositarian sus donaciones en
el Banco de Inglaterra donde se Ilevaria una cuenta exacta de lo in-
vertido. A cambio, la poblacién de la Gran Bretafia se beneficiaria
al adquirir un nuevo mercado donde vender sus manufacturas y ad-
quirir materias primas. Fue un experimento filantrépico-mercantil
extraordinario.
143EUA; Documentos de su historia politica
Georgia se fund6 en 1732; siete afios después empezo el conflic-
to anglohispano denominado la ‘‘guerra de la oreja de Jenkins’.
Espafia vio la oportunidad de eliminar la nueva colonia y se lanzé
contra el recién construido fuerte de Saint-Mary. Oglethorpe avan-
z6 hasta San Agustin en Florida, de donde tuvo que retroceder. Las
fuerzas espafiolas invadieron Georgia y fueron derrotadas por los
coionos en la batalla del Pantano Sangriento. La “‘guerra de la ore-
ja de Jenkins” se fundié con la de la sucesién austriaca, Ilamada
en las colonias ‘‘guerra del rey Jorge”. La guerra se cambié hacia
el norte y Georgia tuvo un respiro para desarroliarse. Se integrd
perfectamente al mundo ‘‘semifeudal’’ de las colonias del sur.
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