La Ascensin

del Seor

La Ascensin del Seor, es

uno de los smbolos cristianos
que ms pone de manifiesto la
necesidad de hacer como
adultos el camino de fe.

La madurez de la fe implica:
1)hacernos testigos de la reconciliacin;
2)recibir la fuerza de lo alto;
3)caminar sin reclamar la compaa fsica
de Jess;
4)el gozo y la perseverancia en la
oracin.

-Testigos de la Reconciliacin:
El reconciliado consigo
mismo, con los dems
y con Dios, no se
queda mirando al
cielo, se compromete
en la construccin de
un presente y un futuro
basados en la
fraternidad y la
solidaridad.

-Recibir la fuerza
de lo alto:
Jess ha prometido enviarnos al Espritu Santo,
a quien llama fuerza de lo alto, y qu bueno!,
porque estamos acostumbrados a confiar
solamente en nuestras propias fuerzas. Que esta
fuerza sea de lo alto quiere decir que puede
movernos para ir ms all de nuestras miras y
comprensiones tan cortas del mundo.

-Caminar sin la presencia fsica de Jess:

Nuestro camino de fe no puede ser infantil, como

si necesitramos ser conducidos de la mano. La
nica presencia fsica de Jess que necesitamos
los cristianos la encontramos en el rostro vivo de
Cristo en las personas y especialmente en los
necesitados de este mundo.

-El gozo y la perseverancia en la oracin:

La oracin har que
hallemos a Dios en todas
las cosas y en todas las
circunstancias de la vida.
La oracin que entabla
un dilogo de amistad
con Dios nos sensibiliza
y hace parecernos a
Jess.

Si queremos experimentar la madurez de

la fe que nos plantea la Ascensin del Seor
necesitamos adquirir una capacidad de
pensar y actuar comprometidos con la vida y
la dignidad de todas las personas. Slo as
sentiremos la presencia del Espritu Santo
como fuerza sanadora y transformadora en
lo que somos y hacemos.

Jess, el Seor resucitado, est lleno de

vida junto al Padre.
Ese es tambin nuestro destino final.
A una vida crucificada, pero vivida con
madurez de fe en el Espritu de Jess, slo
le espera la resurreccin.
Un da, todo alcanzar en Dios su plenitud.

ORACIN
Hay muchos que ven el
cielo, el transparente color
de las nubes y la perpetua
agitacin de los mares.
Pero sus ojos no alcanzan
a descubrir al Seor, que
tiene a leyes eternas sujeta
la Creacin.
Ten piedad de ellos Seor!

No veo lo que ellos ven, ni

ellos lo que veo yo. Ellos ven
la luz del mundo. Yo veo la
luz de Dios.
Gracias Seor!
Siempre que ellos murmuran:
Pobre ciego!, digo yo: Pobres
ciegos!, que no ven ms luz
que la luz del sol!...
Ten piedad Seor!
Amn