Colegio Decroly Americano

Literatura Universal
Ligia Lpez
Keila Aragn

Aura: Capitulo VI
Descubres que la mujer que amas es una anciana, no sabes con quien
pasaste la noche. Muy aturdido ves a la anciana y le preguntas, en donde se
encuentra Aura la mujer que mas amas y la razn por la cual estas en esa
casa. La anciana sin aclarar nada se retira del lugar; tu quedas mas confundido
por estas acciones. Caminando hacia tu recamara, los pensamientos y la duda
invaden tu mente. No sabes que accin tomar o que pensar sobre la situacin
ya que se te dificulta concentrarte. En eso un pensamiento invade tu mente, no
sabes si abandonar la casa o esperar a Aura. Despus de pensarlo varias
horas decides salir de tu habitacin para buscarla; ella no esta en la casa. Al
ver que ella no esta en la casa, decides salir para poder seguir buscando.
Estando en la puerta, volteas al lado izquierdo, te ves en el espejo pero no eres
tu, es un anciano parecido al difunto esposo de Consuelo. Aterrado intentas
salir de la casa pero algo lo impide, es imposible atravesar la puerta. La
anciana de repente aparece y le dice: -Una vez entraste nunca podrs salir,
causaste esto al acostarte conmigo. Tu muy aturdido te preguntas porque dijo
conmigo mientras a la nica mujer que has visto dentro de la casa es a Aura.
Sin decir nada la anciana te aclara que Aura era una joven como tu, ambiciosa,
y con un futuro por delante, al ver el anuncio en la prensa hizo lo mismo que tu
vino y se quedo para siempre. Pasaron meses cuando Aura apareci, tu lleno
de alegra le preguntas que en donde estaba y porque se haba ido. Ella te dice
que siempre estuvo contigo pero gracias a la maldicin que tenia encima, ella
tuvo que salir a cazar almas jvenes para poder seguir viva. Esa noche Aura y
tu deciden pasarla juntos, la toman como un reencuentro. Al estar acostados
volteas a ver a Aura y solo ves a la anciana, muy asustado te alejas y le
preguntas que en donde esta Aura, ella muy tranquila te dice que se encuentra
en la otra habitacin. Tu muy aturdido sales corriendo hacia la otra habitacin y
solo te ve a ti mismo, a Felipe Montero. Al verte all volteas hacia un espejo y te
ves con arrugas y pelo blanco. La anciana se acerca y te dice cuando ests
con Aura tambin estas conmigo, Aura y yo somos una, tu y mi difunto esposo
igual. Ella te dio a entender que ahora eres la versin joven de su difunto
esposo, y que tienes la misma maldicin que Aura. Ese es el precio de querer
estar con la mujer que amas. Y as vivimos de ahora en adelante.