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Escrito N°: 1 Sumilla: Demanda de Habeas Corpus. AL JUZGADO PENAL DE TURNO COMPETENTE DE LIMA: ALBERTO FUJIMORI FUJIMORI, identificado con DNI. N°10553955, sefialando domicilio real en el Establecimiento Penal de Barbadillo — Ate, y como domicilio procesal fa Casilla N°7823 del Colegio de Abogados de Lima, Av. Santa Cruz N° 255, Miraflores, Lima, a Ud. digo: |. PETITORIO: Que, al amparo del parrafo final del articulo 25° del Codigo Procesal Constitucional y el articulo 200” inciso 1) de la Constitucién Politica del Estado, recurro a su despacho a fin de interponer DEMANDA DE HABEAS CORPUS. (especificamente HABEAS CORPUS CONEXO) a mi favor, frente a la vulneracién de mi derecho a un debido proceso (que entre otros comprende los. principios de presuncién de inocencia, de imparcialidad, el principio acusatorio, y el derecho de defensa, a probar, al contradictorio, a la igualdad sustancial en el proceso, a no ser desviado de la jurisdiccién predeterminada ni sometido a procedimientos distintos de los previstos por la ley, y a la observancia del principio de legalidad procesal penal) con consecuente afectacién a mi libertad individual, por lo que reponiendo las cosas al estado anterior de la afectacién constitucional denunciada, conforme a lo estipulado en el articulo 1° del Cédigo en mencién, solicito: 1.- Se declare NULA Y SIN EFECTO LEGAL alguno la Sentencia emitida por la Sala Penal Especial de la Corte Suprema de Justicia de la Republica con fecha 07 de abril de 2009, en el Expediente N°A.V.-19-2001 que resolvié CONDENARME a 25 afios de pena privativa de la libertad como autor mediato de los delitos de Homicidio Calificado - Asesinato y Lesiones Graves, calificandolos expresamente como crimenes contra la Humanidad, segin el Derecho Intemacional Penal, y como autor mediato del delito de Secuestro Agravado. 2.- Se declare NULA Y SIN EFECTO LEGAL aiguno la Sentencia de vista emitida por la Primera Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de la Reptiblica con fecha 30 de diciembre de 2009, recaida en el Expediente N°19-2001-09-A.V., que declaré NO HABER NULIDAD en la Sentencia emitida por la Sala Penal Especial Suprema con fecha 07 de abril de 2009. 3.- Se ORDENE la realizacién de un nuevo Juicio Oral a cargo de otros Jueces Supremos que brinden garantfas de imparcialidad y respecto al derecho constitucional a la defensa, a los principios constitucionales a la presuncién de inocencia, tipicidad, al principio acusatorio, y en general a un debido proceso. 4. Se ORDENE la inmediata libertad del suscrito por haber excedido todo plazo de detencién. \, DEMANDADOS: La presente accién de hdbeas corpus es interpuesta contra: 2.1.- La SALA PENAL ESPECIAL de la Corte Suprema de Justicia de la Republica integrada por los sefiores Jueces Supremos CESAR SAN MARTIN CASTRO, VICTOR PRADO SALDARRIAGA y HUGO PRINCIPE TRUJILLO. 2.2.- La PRIMERA SALA PENAL TRANSITORIA de la Corte Suprema de Justicia de la Repiblica integrada por los sefiores Jueces Supremos DUBERLI APOLINAR RODRIGUEZ TINEO, JULIO ENRIQUE BIAGGI GOMEZ, ELVIA BARRIOS ALVARADO, ROBERTO BARANDIARAN DEMPWOLF y JOSE ANTONIO NEYRA FLORES. Los referidos Magistrados demandados deberén ser notificados en la sede de la Corte Suprema, 2° Piso del Palacio de Justicia, Av. Paseo de los Héroes Navales s/n, Cercado de Lima. Asimismo, la presente accién constitucional deberd entenderse con el Procurador Publico a cargo de los asuntos judiciales de! Poder Judicial sito en Av. Petit Thouars N° 3943 — San Isidro, de conformidad con lo estipulado en el articulo 7° del Cédigo Procesal Constitucional. Il. PROCEDENGIA DEL HABEAS CORPUS: Como se advierte del texto constitucional (Articulo 200° inciso 1), el habeas corpus procede contra el hecho u omisién por parte de cualquier autoridad, funcionario 0 persona que vuinera o amenaza la libertad individual y los derechos conexos. En el presente caso, la presente accién de habeas corpus tiene sustento en el pérrafo final del articulo 25° del Cédigo Procesal Constitucional, segtin el cual, PROCEDE EL HABEAS CORPUS EN DEFENSA DE LOS DERECHOS CONSTITUCIONALES CONEXOS CON LA LIBERTAD INDIVIDUAL, ESPECIALMENTE CUANDO SE TRATA DEL DEBIDO PROCESO y la inviolabilidad del domicilio. Sobre la procedencia del habeas corpus en defensa de derechos constitucionales conexos con la libertad individual como ocurre con el derecho al debido proceso, el Tribunal Constitucional ha sefialado en la STC 06204- 2006-PHC/TC (Fundamentos Juridicos N°s. 2, 3 y 4): «2. En nuestro ordenamiento constitucional, el derecho fundamental al debido proceso goza de una doble proteccién en lo que se refiere a Jos procesos constitucionales. En efecto, por un lado, es pasible de ser tutelado a través del proceso constitucional de amparo, pero también a través del proceso constitucional de habeas corpus. En el primer caso, es decir en el proceso de amparo, 1a tutela procesal efectiva no exige necesariamente conexién con otto derecho fundamental a efectos de su proteccién, en el sentido del artfeulo 37.°, inciso 16, del Cédigo Procesal Constitucional. En el segundo, por el contrario, el derecho fundamental a Ia tutela procesal efectiva precisa de su vinculacién con el derecho fundamental a la libertad personal, en cuyo caso, el habeas corpus, tal como dispone el articulo 25.°, inciso 17, del Cédigo Procesal Constitucional, es el proceso constitucional idéneo para su proteccién. 3. Con respecto a este segundo supuesto, la Constitucién (articulo 200.%, inciso 1) y el Codigo Procesal Constitucional (articulo 25.%, inciso 17), acogiendo una concepcién amplia del proceso de habeas corpus, han previsto su procedencia, tanto para la defensa de los derechos conexos con la libertad personal, como, especialmente, cuando se trata del debido proceso y la inviolabilidad del domicilio, respectivamente. De abi que se admita que también dentro de un proceso constitucional de hibeas corpus ¢s posible que el juez constitueional se pronuncie sobre una eventual vulneracién del derecho fundamental al debido proceso; pero para ello es necesario que exista, en cada caso concreto, conexidad entre aquél y el derecho fundamental a Ja libertad personal. 4. Asi también lo ha establecido este Tribunal en sentencia anterior (Exp. N.° 3390-2005-HC/TC, FJ 5), al precisar que (..) si bien el proceso de habeas corpus no tiene por objeto proteger en abstracto el derecho al debido proceso (...) habida cuenta *de* que se han establecido judicialmente restricciones al pleno ejercicio de la libertad locomotora, tras 1a imposicién de la medida cautelar de detencién preventiva, el Tribunal Constitucional tiene competencia, ratione materiae, para evaluar Ia legitimidad constitucional de los. actos judiciales considerados lesivos. » En mi caso, existe conexidad entre la violacién del derecho al debido proceso y la vulneracin del derecho a la libertad personal, toda vez que el suscrito se encuentra actualmente privado de su libertad a mérito de las dos sentencias penales que impugno, las cuales han sido expedidas con violacién de los imparcialidad, tipicidad, e! principio acusatorio, y el derecho de defensa, que precisamente integran el principios del juez natural, presuncién de inocencii derecho a un debido proceso, por lo que resulta procedente el habeas corpus. ‘Asimismo, el segundo parrafo del articulo 4° de! Codigo Procesal Constitucional sefiala que «EI hébeas corpus procede cuando una resolucién judicial firme vulnera en forma manifiesta la libertad individual y la tutela procesal efectivay y que «Se entiende por tutela procesal efectiva aquella situacion juridica de una persona en la que se respetan, de modo enunciativo, sus derechos de libre acceso al 6rgano jurisdiccional, @ probar, de defensa, al contradictorio e iqualdad sustancial en el proceso, ano ser desviado de la jurisdiecién predeterminada ni sometido a procedimientos distintos de los previstos por Ia ley, a la obtencién de una resolucion fundada en derecho, a acceder a los medios impugnatorios regulados, a la imposibilidad de revivir procesos fenecidos, a la actuacién adecuada y temporalmente oportuna de las resoluciones judiciales y a la observancia del principio de legalidad procesal penal». Efectivamente, en mi caso tenemos que: 4. Se afecto el principio — derecho al JUEZ NATURAL y el PRINCIPIO DE LEGALIDAD PROCESAL PENAL porque se permitié mi juzgamiento por Jueces Superiores y no por Jueces Supremos Titulares conforme se desprende de la garantia constitucional prevista en el articulo 100° de la Constitucion Politica del Estado. 2. Se afectd la PRESUNCION DE INOCENCIA porque desde antes del inicio del juicio oral, los Magistrados demandados, estaban convencidos que el suscrito era culpable de los delitos que se me imputaban, juagandome en tales circunstancias, esto es, sin respetar mi derecho a que se presuma mi inocencia, sino que por el contrario, solamente procuraron fa actuacién de pruebas y la aplicacién de teorias juridicas que justifiquen la sentencia condenatoria que finalmente dictaron. . Se afecté el PRINCIPIO DE IMPARCIALIDAD porque desde antes del inicio del juicio oral y durante el transcurso del mismo, los Magistrados que integraron la Sala Penal Especial de la Corte Suprema de Justicia de la Repiilica, en lugar de procurar la realizacin de un juzgamiento sin favorecer a ninguna de las partes, favorecieron exprofesamente al persecutor de la accién penal (Ministerio Publico) buscando la forma de emitir, si o si, una sentencia condenatoria en mi contra; es decir, realizaron un juicio de fachada porque, primero, poniéndose a favor del Ministerio Publico consiguieron que modifique la acusacién fiscal por una que les facilite dictarme una sentencia condenatoria, y segundo, porque aparentando la existencia de un juicio justo, desde el inicio tenian la nica y firme decisién de condenarme por los delitos imputados, para lo cual siempre se dedicaron unica y exclusivamente a conseguir teorias y fundamentos que permitan declarar mi culpabilidad, como efectivamente ocurri6, . Se afect6 el PRINCIPIO ACUSATORIO porque se me juzgé y condend por crimenes contra la humanidad segiin el Derecho Internacional Penal que no fueron materia de la acusacién fiscal que sustenté el juicio oral. Se afecto el DERECHO DE DEFENSA porque al no haberse indicado en el auto apertorio de instruccién, en la acusacién fiscal y en el auto superior de enjuiciamiento que el suscrito estaba siendo procesado y juzgado por crimenes contra la humanidad segun el Derecho Internacional Penal y tampoco indicarse previamente cual era la norma de Derecho Internacional Penal supuestamente vuinerada, se me impidi6 ejercitar debidamente mi derecho de defensa para tener la posibilidad de demostrar en el respective proceso penal que no habia cometide tal ilicitud. Se afecto mi DERECHO A PROBAR porque al no habérseme imputado fa comisién de orimenes contra la Humanidad segin el Derecho Internacional Penal, no pude presentar algiin medio probatorio tendente a desvirtuar la comisi6n de tales crimenes. 7. Ademés de los supuestos indicados precedentemente, también se vulnera mi DERECHO AL DEBIDO PROCESO porque no habiéndose autorizado mi extradicién para ser juzgado y sentenciado por la comisién de crimenes contra la humanidad segtin el Derecho Internacional Penal, se me encuentra responsable y sanciona por tales crimenes. Las referidas vulneraciones evidencian una clara violacién del contenido constitucionalmente protegido por el derecho al debido proceso, afectacién que ha significado directamente la violacién de mi libertad personal puesto que me encuentro privado de libertad por orden de las indicadas sentencias arbitrarias. IV. FUNDAMENTOS DE HECHO Y DERECHO: 4. Por Sentencia emitida en segunda y titima instancia por la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia de la Reptblica de Chile con fecha 21.09.2007, y conforme al “Tratado de Extradicin entre Chile y el Pert suscrito en Lima el 05 de noviembre de 1932, se concedi6 mi Extradicion solicitada por el Pert a Chile, a efectos de que sea juzgado en nuestro pais por los delitos de Homicidio Calificado, Lesiones Graves y Secuestro Agravado previstos en los articulos 108°, 121° y 152° del Cédigo Penal peruano, correspondiente a los casos identificados como Sétanos SIE, Barrios Altos y La Cantuta. 2. El primer parrafo del articulo VIII del “Tratado de Extradicién entre Chile y el Pert” que sustenté mi extradicion establecis que «La extradicion acordada por uno de los Gobiemos al otro, no autoriza el enjuiciamiento _y castigo del extraido_por delito_distinto del que sirvié de fundamento a la demanda respectiva, ni la entrega a otra Nacién que lo reclame. Para acumular a la causa del mismo individuo un crimen 0 delito anterior que se hallare comprendido entre los que dan lugar a la extradicién, sera necesario ef consentimiento especial del Gobierno que hizo Ia entrega del delincuente’. . El Estado Peruano no solicits que mi extradicién se efectue por crimenes contra la humanidad segtin el Derecho Internacional Penal, siendo que la extradicién concedida por la Republica de Chile tampoco autoriz6 mi juzgamiento por dichos crimenes internacionales, por lo que, solo podia ser juzgado y sentenciado por los delitos comunes materia de extradicion (Homicidio Calificado, Lesiones Graves y Secuestro Agravado previstos en los articulos 108°, 121° y 152° del Cédigo Penal Peruano), sin adicionarse a la imputacién ni considerarse en la Sentencia, ningun otro delito © agravante previsto en el Derecho Penal Peruano o en el Derecho Intemacional Penal. . El articulo XI! del Tratado de Extradicién también requeria que a la demanda de extradicion de acomparie «copia legalizada de la ley penal aplicable a la infraccién que motiva la demanda y del auto de prisién». Tal exigencia est orientada a que el pais requerido (Republica de Chile) pueda evaluar, entre otros, que el hecho imputado constituya también un delito conforme a su legislacién, que existan suficientes elementos Probatorios que permitan apreciar su comisién y que los mismos no hubiesen prescrito. En el presente caso, el Perti solo solicité la extradicion a efectos de que mi juzgamiento sea realizado por los delitos de Homicidio Calificado, Lesiones Graves y Secuestro Agravado segiin el Cédigo Penal peruano, Pero nunca se me atribuyé delito o calificacién agravante consistente en que algunos de dichos ilicitos constituya también ‘crimenes contra la humanidad segin el Derecho Internacional Penal” (también denominados delitos de lesa humanidad), por lo que, durante el proceso de extradicion nunca se debatié respecto a ello pues no se present6 argumento ni prueba alguna tendente a acreditar crimenes contra la humanidad. 6. Frente a un pedido de extradicién, los Estados deben evaluar si los delitos imputados por los cuales se est requiriendo extraditar a una persona, también constituyen delito en el pals requerido. Se trata del Principio de Doble Incrimina , Seguin el cual el Estado requirente tipifica los hechos en una norma penal que sustenta la extradicion y que sera la norma imputada en el proceso penal en caso de ser concedida; dicha tipificacién permite al Estado requerido que evalie si el hecho descrito también constituye delito seguin la legislacion de este Ultimo, y de ser positiva la evaluacién, concederd la extradicion a efectos de que se proceda al juzgamiento en el Estado requirente tnicamente por los hechos y el delito expresamente imputado. 7. En mi caso, la propia Sentencia que concedié la extradicién con fecha 21.09.2007, hizo el anélisis pertinente y aplioé el Principio de Doble Incriminacion, para determinar cual era el hecho y delito que se me imputaba, y conforme a ello, conceder la extradicién a efectos de que se proceda a mi juzgamiento por los hechos y delitos espectficamente indicados, 8. Sobre el Principio de Doble incriminacién y los limites que para el Estado requerido implica conceder la extradicion, en la Sentencia extraditoria del 21.09.2007 se indicé: «QUINTO: Que, por otro lado, es jurisprudencia de esta Sala que "la doble incriminacién no s6lo apunta a la identidad de los hechos, sino que también a la figura tipica por la cual se solicita la extradicién. De este modo el adagio en cuestién se complementa con aquél de la especificacién que se contiene en los articulos 365, N°3°, del Cédigo de Bustamante y 5°, letras a) y b), de la Convencién de Montevideo, que obliga al Estado reclamante a individualizar con exactitud el delito que se atribuye al requerido, con el fin de evitar que sea juzgado posteriormente por una figura delictiva distinta, todo fo cual encierra un estatuto de garantias para los requeridos” (Sentencia C.S, Ro! N°3.129, 5 de junio 10 de 2005). DE ESTO SE COLIGE QUE EL SUJETO EXTRADITADO SOLO PUEDE SER JUZGADO_O PENADO POR EL DELITO AUTORIZADO AL CONCEDERSE LA EXTRADICION, de manera tal que ese enjuiciamiento no puede ampliarse a hechos nuevos o distintos de los que especificamente motivaron el pedido, o bien, en su caso, someterse a la ejecucién de una condena distinta». 9. Como podemos apreciar, la propia Sentencia de extradicién, en su Quinto Considerando, establecié que no se puede juzgar y condenar por una figura delictiva distinta y sélo podia ser juzgado o penado por et delito autorizado al concederse la extradicién, siendo que en mi caso, no se ha concedido extradicion por supuestos orimenes contra la Humanidad segin ef Derecho Intemacional Penal 0 por delitos de lesa fumanidad. 10.Nétese que conforme a la legislacién peruana, la persona que fuese condenada por delitos comunes, como aquellos por los cuales se solicits mi extradicion, tiene acceso no solo a beneficios penitenciarios sino también la posibilidad de ser beneficiario de un indulto humanitario, en tanto que la calificacién de crimenes contra la humanidad segan el Derecho Intemacional Penal o la imputacién de haber cometido delitos de lesa humanidad, en la practica, impide acceder a tal gracia presidencial, con lo cual la ejecucién de la condena misma se agrava pues se sanciona bajo un delito, agravante o calificacién juridica no autorizados en la extradicién, que al constituir crimenes contra la humanidad o delito de lesa humanidad, limitan la posibilidad de acceder a beneficios durante la etapa de ejecucién de sentencia. 11. Debe tenerse en claro la distincién entre los delitos de lesiones graves, homicidio agravado (asesinato) y Secuestro contemplados en el Cédigo Penal peruano, con los delitos de lesiones graves, asesinato y secuestro que constituyen crimenes contra la humanidad segin el Derecho intemacional Penal o delitos de lesa humanidad. ll 12.Delitos como el homicidio agravado (asesinato), el secuestro y las lesiones graves son consideradas como crimenes contra la humanidad segiin el Derecho Internacional Penal o delitos de lesa humanidad: 1) son cometidos contra una poblacién civil; y, 2) son ataques generalizados 0 sistematicos, de modo tal que los actos aislados 0 cometidos al azar no pueden ser considerados incluidos en esta tipificacién (véase al respecto el articulo 7° del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional)*. 13.Segin el Cédigo Penal peruano, los delitos de asesinato, lesiones graves y secuestro, no requieren para su comisién, como parte de su descripcién tipica —no tipifican- que hayan sido cometidos “contra una poblacién civil” y/o que sean resultado de ‘ataques generalizados 0 sistematicos”, por lo que al concederse !a extradicién al Pert, solo por los referidos delitos, no podia extenderse los extremos de la imputacién a fin de comprender un delito, agravante 0 calificacién juridica mayor 0 distinta @ la concedida o a hechos que no sustentaron la extradicion otorgada, como ocurre con los hechos referentes a que se habia atacado una poblacién civil 0 que se habian producido ataques generalizados 0 sistematicos. 14.No fue materia del debate planteado en el proceso de extradicion ni de la Sentencia extraditoria, que los delitos imputados, constituyan crimenes contra la humanidad o delitos de lesa humanidad, por haberse cometido en contra de una poblacién civil y ser resultado de ataques generalizados 0 sistematicos. 15. Incluso, conforme al Derecho Internacional Penal, los crimenes contra la 1 De acuerdo con la doctrine nacional e internacional, os erfmenes contra la humanidad o delitos de lesa humanidad, obedecen a conductas atroces que infiecen un dafio singular a la dignidad de la humanidad, que tisne como destinatrios a la poblacion civil o parte de ella, dentro de un plan con caracteres generales y sisteméticos por parte del Estado o tributarios de éste. Segin Ia doctrina ‘mayoritaria en estos delitos existe un plus de injusto que los diferencia claramente de los delitos comunes perseguibles. por el Estado, constituido por la persona quien los realiza y el contexio en que se materializan (contra poblacin civil y mediante ataques generalizados o sistemséticos), lo cual los eualifiea para ser objetos de imprescriptbilidad y persecucién intemacioral. 12 humanidad son ‘imprescriptibles’, sin embargo, del tenor de la Sentencia de Extradicién emitida por la Corte Suprema de Justicia de Chile se observa que, al realizar su evaluacién respecto a si habian prescrito 0 no los delitos que se atribulan, los Jueces chilenos no consideraron la imprescriptibilidad propia de tales crimenes, sino que los analiza como delitos comunes sin tal calificacién juridica pues asi habian sido Planteados en la demanda de extradicién, y como tal fija los plazos aplicables segin la legislacién chilena para verificar si se habia producido la prescripcién o no. En ningdn extremo de la Sentencia de extradicion se indica que tales delitos sean imprescriptibles por constituir crimenes contra la humanidad del Derecho Intemacional Penal. 16.No deben confundirse los crfmenes contra la humanidad (0 delitos de fsa humenidad), con la violacién de derechos humanos, pues si bien ambos constituyen ilicitos graves y en ambos se afectan derechos fundamentales de las personas (como la vida, la integridad fisica y la libertad), los primeros precisamente se distinguen porque necesariamente deben cometerse contra una poblacién civil y mediante ataques generalizados o sistematicos, lo que no se requiere en un supuesto de violacién de derechos humanos. 17.Habiéndose autorizado la extradicién solo por la comisién de delitos comunes (Homicidio Calificado, Lesiones Graves y Secuestro Agravado) que no fueron calificados como crfmenes contra la humanidad, el Poder Judicial solo podia juzgarme y sentenciarme, en los casos identificados como Sétanos SIE, Barrios Altos y La Cantuta, por los delitos respecto de los cuales se habia solicitado y concedido la extradicién, sin adicionar algin nuevo delito, agravante o calificacién juridica que altere los limites contenidos en la Sentencia de extradicién. 18.En consecuencia, el respeto del derecho constitucional al debido Proceso y a no ser sometido a procedimiento distinto del previamente establecido, previstos en el articulo 139° de la Constitucién Politica del 13 Estado, implicaba que en respeto del Tratado de Extradicin suscrito entre el Pert y Chile y conforme a la Sentencia de Extradicion emitida por la Corte Suprema de Justicia de Chile, el Poder Judicial de! peruano Gnicamente debia juzgarme y sentenciarme por los delitos respecto de los cuales se concedié la Extradicién. Ese es el procedimiento previamente establecido (Juzgamiento y Sentencia en el Pert por los delitos autorizados en la Sentencia extraditoria), por lo que una Sentencia que condena bajo calificaciones juridicas distintas a las evaluadas, y considera responsable por crimenes cuyo juzgamiento no han sido autorizado, es una Sentencia que viola el debido proceso. 19.Una vez concedida la extradicion, mi juzgamiento en el Pert correspondia a la Sala Penal Especial de la Corte Suprema de Justicia del Peri, la que debia estar integrada exclusivamente por Jueces ‘Supremos de la Republica, puesto que el articulo 100° de la Constitucién Politica de! Estado, establece que los ex Presidentes de la Republica sean investigados y juzgados Unica y exclusivamente por Jueces Supremos, a fin de evitar presiones 0 influencias sobre ellos. 20.Precisamente, los Jueces Supremos, en tal condicién, ostentan el mas alto rango en la judicatura peruana, y como tal, son menos propensos a ceder a presiones 0 influencias por parte del poder politico. Légicamente, me estoy refiriendo a los Jueces Supremos “Titulares" y no a aquellos que sin haber sido nombrados por la autoridad competente para designar a jueces titulares (actualmente, el Consejo Nacional de la Magistratura), han sido promovides provisionalmente y sin mayor justificacién, al cargo de Jueces Supremos provisionales. 21. El articulo 100° de la Constitucién Politica del Peri al establecer, dentro del procedimiento preestablecido, la competencia de Jueces Supremos como jueces naturales para poder procesar a un ex Presidente de la Republica, se esta refiriendo necesariamente a Jueces Supremos 14 Titulares, y no a aquellos jueces de rango inferior que por decisién tnica € incuestionada de alguna autoridad del Poder Judicial, los promueve para el desemperio de tal funcién. 22.Los Jueces Supremos Titulares brindaran mayor garantia de un juicio imparcial frente a las presiones del goblemo y del poder politico y mediatico en general, sobre todo de quienes fueron mis adversarios Politicos cuando fui Presidente Constitucién de la Repiblica, y solo Procuran que pase mis Uitimos dias en una prisién. 23.No cuestiono el hecho de que, a fin de afrontar la carga procesal existente en la Corte Suprema de Justicia de la Reptblica del Perti pueda asignarse a Jueces Supremos provisionales o supernumerarios Para que puedan integrar las Salas Supremas, sino que, en el caso de los ex Presidentes de la Repliblica y otros altos funcionarios para los cuales la Constitucién ha previsto la figura del antejuicio politico, es imprescindible, para garantizarles un juicio justo, que el mismo sea realizado por Jueces Supremos Titulares y no por quienes provisoriamente desempefian tal cargo o se encuentran interinamente desemperiando funciones en la Corte Suprema peruana. 24.Una interpretacién en contrario del articulo 100° de la Constitucién Politica del Estado permitiria que, por ejemplo, tres Jueces Superiores sean promovidos provisionalmente como Jueces Supremos para Juzgar @ un ex Presidente, un ex Ministro, un ex Congresista u otro alto funcionario de! Estado protegido con el antejuicio politico, burlando de esta manera la garantia concedida por nuestra Constitucién actual que Tequiere que tanto la instruccion como el juicio oral sea realizado por Jueces Supremos, entendiéndose como tales a quienes fueron “nombrados” por autoridad competente conforme a la Constitucién, esto es, Jueces Supremos Titulares. 25.El derecho al Juez Natural y a no ser desviado de la jurisdiceién is predeterminada por la ley, constituyen manifestaciones del derecho al debido proceso, y se encuentran acorde con el articulo 8.1 de la Convencién Americana sobre Derechos Humanos, segiin el cual, toda persona tiene derecho a ser ofda, con las debidas garantias y dentro de un plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la ley. 26.Refirindose al derecho a no ser desviado de la jurisdiccién predeterminada por ley, que a su vez comprende el derecho al Juez Natural, Tribunal Constitucional en el Fundamento Juridico N°13 de la STC 00813-2011-PA/TC consideré: de este derecho plantea dos exigencias muy coneretas: en primer we quien juzgue sea un juez u drgano con potestad jutisdiccional, izindose asi la interdiccién de ser enjuiciado por un juez excepeional 0 por una comisién especial creada exprofesamente para desarrollar funciones Jurisdiccionales 0 que dicho juzgamiento pueda realizarse por comisién o delegacién, 0 que cualquiera de los poderes piiblicos pueda avocarse al conocimiento de un asunto que debe ser ventilado ante Srgano jurisdiccional; y, en segundo Iugar, que la jurisdiccién y competencia del juez sean predeterminadas por la ley, lo que comporta que dicha asignacién debe haberse realizado con anterioridad al inicio del proceso y que tales reglas estén previstas, en una ley orgénica, conforme se desprende de una interpretacicn sistemética de los articulos 139° inciso 3 y 106° de la Constitucién». 27.De esta manera, la competencia de los Jueces Supremos establecida por la Constitucién Politica del Peri para el juzgamiento de un ex Presidente de la Republica, no puede ser delegada a Jueces Superiores bajo el argumento de una promocién provisoria conforme a la cual a los jueces se les asigna interinamente un rango superior, lo que si bien puede servir para cubrir transitoriamente plazas vacantes y coadyuvar a la descarga procesal, no cumple con las exigencias y garantias que contempla el articulo 100° de la Constitucion a favor de los altos funcionarios del Estado que gozan de antejuicio politico, 28.Frente a la disposicién constitucional referida, ni la Ley Organica del 16 Poder Judicial ni ninguna otra norma legal puede vaciarla de contenido, come ocurriria al permitir que quien no tiene nombramiento constitucional como Juez Supremo (quien no es Juez Supremo Titular) pueda investigar y juzgar a quien goza de antejuicio politico. 29.La Sala Penal Especial Suprema a la cual correspondié mi juzgamiento estuvo integrada por los sefiores Jueces CESAR SAN MARTIN CASTRO, VICTOR PRADO SALDARRIAGA y HUGO PRINCIPE TRUJILLO. 30.Los sefores VICTOR PRADO SALDARRIAGA y HUGO PRINCIPE TRUJILLO no podian haber integrado la Sala Penal Especial Suprema encargada de mi juzgamiento porque en esa fecha tenfan la calidad de Jueces Superiores que provisoriamente fueron promovidos pero que, en realidad, no eran Jueces Supremos, siendo que por mandato constitucional (articulo 100° de la Constitucién) el suscrito debia ser juzgado por JUECES SUPREMOS TITULARES, siendo ellos los tnicos jueces naturales que podian investigarme y juzgarme. 31.Como he indicado, el citado articulo 100° de ta Constitucién Politica establece un regia integrante del debido proceso en razén de mi condicién de ex Presidente de la Reptblica, disponiendo que mi Juzgamiento sea realizado por Jueces Supremos verdaderos (titulares), estos son, légicamente, los designados como tales por el Consejo Nacional de la Magistratura y no por aquellos que interinamente fueron promovidos provisionalmente por otro érgano o autoridad administrativa sin facultades constitucionales para nombrar jueces titulares. 32.Por tal razén, al no haber sido los sefiores VICTOR PRADO SALDARRIAGA y HUGO PRINCIPE TRUJILLO, verdaderos’ Jueces Supremos, se ha vuinerado el principio - derecho al Juez Natural y seguido un procedimiento distinto al establecido en las propias normas constitucional y procesal penal, dado que el articulo 139° inciso 3) de la 7 Constitucién Politica del Estado, al contempiar el derecho a la ‘observancia del debido proceso y la tutela jurisdiccional, garantiza que ninguna persona pueda ser desviada de la jurisdiccién predeterminada por la ley, ni sometida a procedimiento distinto de los previamente establecidos, ni juzgada por érganos jurisdiccionales de excepcién ni por comisiones especiales creadas al efecto, cualquiera sea su denominacién. Notese que en mi caso, las reglas del procedimiento (para el juzgamiento de Presidentes y Altos Funcionarios Publicos que gozan de la proteccién del antejuicio politico), han sido establecidas por la misma Constitucién Politica. 33.En este orden de ideas, también se ha vulnerado el principio de legalidad procesal penal que, conforme al Tribunal Constitucional (Fundamento Juridico N°15 de la STC 08957-2006-PA/TC) garantiza a toda persona el estricto respeto de los procedimientos previamente establecidos, al prohibir que ésta sea desviada de la jurisdiccién predeterminada, sometida a procedimiento distinto 0 juzgada por 6rganos jurisdiccionales de excepcién o por comisiones especiales. 34.El derecho constitucional a un debido proceso también garantiza el derecho a ser juzgado por un Juez Imparcia®. De acuerdo al Fundamento Juridico N°8 de la STC 04298-2012-PA/TC, el principio de imparcialidad judicial posee dos acepciones: a) la Imparcialidad subjetiva, que se refiere a evitar cualquier tipo de compromiso que pudiera tener el juez con las partes procesales o en el resultado del proceso; y, b) la Imparcialidad objetiva, que esta referida a evitar la influencia negativa que puede tener en el juez la estructura del sistema, restandole imparcialidad, es decir, si el sistema no offece suficientes : En la STC 03899-2010-PHCITC, Fundamento Juridico N°8 el Tribunal Constitucional reconoce ‘que el derecho a un Juez Imparcial constituye un elemento del debido proceso: weabe sefalar que el derecho a ser juzgado por un Juez imparcial constituye un elemento del debido proceso reconacido ‘expresamente en el articulo 8° inciso 1, de a Convencién Americana sobre Derechos Humanos, ast ‘como en el articulo 14°, inciso 1, del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Politicos, los cuales ‘forman parte del derecho nacional en virtud del articulo 55° de la Constituciény. 17 Constitucién Politica del Estado, al contemplar el derecho a la observancia del debido proceso y la tutela jurisdiccional, garantiza que ninguna persona pueda ser desviada de !a jurisdiccién predeterminada por la ley, ni sometida a procedimiento distinto de los previamente establecidos, ni juzgada por érganos jurisdiccionales de excepcién ni por comisiones especiales creadas al efecto, cualquiera sea su denominacién. Nétese que en mi caso, las reglas del procedimiento (para el juzgamiento de Presidentes y Altos Funcionarios Piiblicos que gozan de la proteccién del antejuicio politico), han sido establecidas por la misma Constitucién Politica. 33.En este orden de ideas, también se ha vuinerado el principio de legalidad procesal penal que, conforme al Tribunal Constitucional (Fundamento Juridico N°15 de la STC 08957-2006-PA/TC) garantiza a toda persona el estricto respeto de los procedimientos previamente establecidos, al prohibir que ésta sea desviada de la jurisdiccién predeterminada, sometida a procedimiento distinto o juzgada por 6rganos jurisdiccionales de excepci6n o por comisiones especiales. 34.El derecho constitucional a un debido proceso también garantiza el derecho a ser juzgado por un Juez Imparcia. De acuerdo al Fundamento Juridico N°8 de la STC 04298-2012-PA/TC, el principio de imparcialidad judicial posee dos acepciones: a) la Imparcialidad subjetiva, que se refiere a evitar cualquier tipo de compromiso que pudiera tener el juez con las partes procesales o en el resultado del proceso; y, b) la Imparcialidad objetiva, que esté referida a evitar la influencia negativa que puede tener en el juez la estructura del sistema, restandole imparcialidad, es decir, si el sistema no ofrece suficientes 2 En la STC 03899-2010-PHCITC, Fundamento Juridico N°8 el Tribunal Constitucional reconoce {que el derecho a un Juez Imparcial constituye un clemento del debido proceso: «abe seflalar que el derecho a ser juzgado por un Juez imparcial constituye un elemento del debido proceso reconocido ‘expresamente en el articulo 8°, inciso 1, de la Convencién Americana sobre Derechos Humanos, asi como en el articulo 14%, inclso 1, del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Politicos, los cuales forman parte del derecho nacional en virtud del articuto 55° de la Constituctén. 18 garantias para desterrar cualquier duda razonable. 35.Se vulnera el derecho a un juez imparcial cuando quien juzga es una persona que se encuentra, en téminos procesales, “prejuiciada’ o “contaminada" por tener una apreciacion preconcebida y prejuiciosa del imputado, © por tener hacia él, sentimientos de rencor, animadversién, enemistad, rechazo, antipatia, ojeriza, resentimiento, inquina, odio, aversion 0 tirria, todo lo cual, aunque ese mismo juez no lo acepte o reconozca, no le permite emitir una decision imparcial sobre la acusacién ni brinda garantias de un juicio justo. 36.Durante el ejercicio del cargo de Presidente Constitucional de la Reptblica, conforme a la voluntad popular nacional mayoritaria plasmada en elecciones generales fiscalizadas por observadores y corganismos internacionales, un grupo de Jueces del Poder Judicial, sobre la base supuesta de que el suscrito ejercia un gobierno que habia intervenido politicamente dicho Poder de! Estado y atribuyéndome permanentemente que habia atentado contra la democracia, la Justicia y el estado de derecho en el Peri, y que era el autor de diversos actos de violacién de derechos fundamentales, se cre6 una Asociacién destinada a enfrentarse a mi Gobiemo y al suscrito, la cual autodenominaron Asociacion de Jueces para la Justicia y la Democracia - JUSDEM. 37.Dentro de la éptica de la autodenominada Asociacién de Jueces para la Justicia y la Democracia - JUSDEM, el susctito era, sin dudas ni murmuraciones, el autor de una serie de violaciones de derechos fundamentales, siendo precisamente sus casos emblematicos, los conecidas como Barrios Altos y La Cantuta. Los integrantes de dicha Asociacién fundaban sus acusaciones enarbolando Sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en las cuales se seflalaba que, en tales casos, se habla producido la violacisn de derechos fundamentales protegidos por la Convencién Americana de Derechos 19 Humanos (recordemos [a diferencia entre violacién de derechos humanos y delitos de lesa humanidad®), sin embargo, a efectos de que su Despacho tenga conocimiento debido de los hechos, debo aclarar que ni la Corte Interamericana de Derechos Humanos ni la Comision Interamericana de Derechos Humanos, nunca me declararon como autor © responsable de dichos actos*, sino que dispusieron que el Estado Peruano investigue y sancione a quienes fueran responsables. 38.Los organismos internacionales como la Comisién Interamericana de Derechos Humanos y la Corte Interamericana de Derechos Humanos se limitan solo a determinar las responsabilidades de los Estados, mas no asi la responsabilidad de personas, las cuales recién se establecen dentro del propio Estado y siguiendo un proceso judicial debido; por lo que mal hacian los integrantes de la autodenominada Asociacién de Jueves para la Justicia y la Democracia, en sostener que el suscrito era el autor o responsable de las violaciones de derechos fundamentales en los casos Barrios Altos y La Cantuta. 39. El suscrito nunca ordené la realizacién de tales crimenes, y si se Produjeron, no fue por algun mandato o disposicién mia sino que tanto la autoria intelectual como material corresponde a otras personas que ya 2 En este tltimo caso, la distincién radica en que los delitos se cometen mediante un ataque generalizado y sistemitico contra una poblacién civil, 4 Dela Sentencia de la Corte interamericana de Derechos Humanos emitida en el caso Barrios Altos vs. el Pert se observa que, durante el Gobierno del ex Presidente Valentin Paniagua, el Estado Peruano se allané a la denuncia presentada en su contra, y la Corte determin6 que el Estado Peruano era el responsable do las violaciones de derechos humancs que se habia producido, por lo cual resolvi6 (Punto § del Fallo): «Declarar que ef Estado del Peri debe investigar los hechos para determinar las personas responsables de las violaciones de los derechos humanos a los que se ha hecho referencia en esta Sentencta, asi como divulgar piblicamente los resultados de dicha investigacién y sancionar a los +responsablesn. De mado similar, en la Sentencia de la Corte Interamericana recaida en él caso Cantuta vs. el Peri se advierte que, el Estado Peruano se allané parcialmente a la denuncia presentada, y que la Corte determino que el Estado Peruano era responsable de las violaciones de derechos humanos denunciadas, y {que correspondia al Estado (Punto 9 del Fallo) «realizar inmediatamente las debidas diligencias para completar eficazmente y levar a término, en un plazo razonable, las investigaciones ablertas los roceses penales incoados en la jurisdicetén penal comiin, asi como activar, en su caso, los gue sean necesarios, para determinar las correspondientes responsabilidades penales de todos los autores de los hhechos cometidos (...)». Como se observa, en ninguno de los casos, Ia Corte Interamericana me declar6 responsable de los casos Barrios Altos y La Cantuta, sino que mand6 a realizar y continuar con las respectivas investigaciones. 20 fueron sentenciadas. 40. Los integrantes de la Asociacién, aun sin la existencia de juicio previo, siempre estuvieron convencidos de que el susctito era el autor de tales hechos, y asi lo asumian y difundian en sus diversas manifestaciones piblicas, cuando se referian a mi Gobiemo y a mi persona, como un violador de derechos fundamentales en los indicados casos. 41. Como para los integrantes de la Asociacién de Jueces para la Justicia y la Democracia, el suscrito era autor de los crimenes de La Cantuta y Barrios Altos -sus casos embleméticos-, resulta claro que al momento de puesto que ya tenian y tienen una posicién fijada frente a tales sucesos fervenir en el juicio oral y emitir Sentencia, nunca serfan imparciales funestos. Concluir en una Sentencia que soy inocente de tales imputaciones atentaria contra su origen. Serfa negar sus propias afirmaciones y creencias cuando, desde el inicio y sin juicio previo, ya me consideraban como responsable de los casos Barrios Altos y La Cantuta, sin menor respeto por el principio constitucional de presuncién de inocencia. 42. En esas circunstancias, es claro que los integrantes de dicha Asociacién se encontraban “contaminados" en términos procesales, y no constitulan personas idéneas para participar como Jueces en el juicio, puesto que como he indicado y era de piiblico conocimiento en el Poder Judicial peruano, asumian inobjetablemente, desde el inicio, que yo era responsable de los indicados crimenes. 43.Debo dejar en claro que no estoy pretendiendo que en este proceso constitucional se emita un pronunciamiento sobre la autorla de los delitos materia del proceso penal cuestionado, sino que desoribo las circunstancias que rodearon al juicio, que demuestran que ningtin Juez integrate de la autodenominada Asociacién de Jueces para la Justicia y la Democracia - JUSDEM, brindaba las garantias de un juicio imparcial 21 en los casos de Barrios Altos y La Cantuta, puesto que ya se encontraban prejuiciados al haber prejuzgado y concluido, antes del Juicio oral, que era el autor de los hechos imputados. 44.El sefior Juez VICTOR ROBERTO PRADO SALDARRIAGA, a la fecha de Juzgamiento, integraba la autodenominada Asociacion de Jueces para la Justicia y la Democracia - JUSDEM, la misma que como he indicado es una organizacién exprofesamente creada por un grupo de jueces antifujimoristas para enfrentarse al Gobierno que el suscrito habia venido ejerciendo y al cual calificaron de violador de derechos humanos, siendo Barrios Altos y La Cantuta, sus casos emblema, por lo que se trata de un juez que, en términos procesales, se encontraba contaminado, por tener una posicién predeterminada y prejuiciada respecto de la responsabilidad penal del suscrito en dichos casos. 45.El Principio constitucional de Presuncién de Inocencia se encuentra contemplado en el articulo 2° numeral 24 literal “e” de la Constitucion Politica, y establece que «Toda persona es considerada inocente mientras no se haya declarado judicialmente su responsabilidad». En los casos La Cantuta y Barrios Altos, la intervencién en el juicio de cualquiera de los Magistrados de la Asociacién de Jueces para la Justicia y la Democracia, resultaba vulneratoria del principio de presuncion de inocencia, puesto que como he indicado, ellos asumian a priori que el suscrito era culpable de tales crimenes. 48. Por otro lado, debe sefialarse que el sefior Juez CESAR SAN MARTIN CASTRO ~quien presidia el Tribunal (Sala Penal Especial) habia sido anteriormente expulsado del Poder Judicial por mi persona mediante Decreto Ley N°25446, que lo cesé en su cargo de Juez del Distrito Judicial de Lima y le cancelé su titulo, en una decisin que si bien generé controversia, tuvo una amplia y mayoritaria aceptacion en la poblacién del Peri, por los serios cuestionamientos que ya existian contra la Judicatura de ese entonces. 2 47.Durante la etapa de Juzgamiento el suscrito, no solo se encontraba sujeto a la decision de dos jueces sin competencia para juzgarme (Jueces Prado Saldarriaga y Principe Trujillo), cuya permanencia en la Corte Suprema dependia de la decisién que adopten sobre mi caso dada su provisionalidad de! cargo*, uno de ellos, con una probada concepcion prejuiciosa respecto a mi responsabilidad en los casos materia de proceso (Juez Prado Saldarriaga), siendo que ademas, el Tribunal (Sala Penal Especial Suprema) se encontraba presidido por Quien, por mi decision, habia sido anteriormente expulsado de! Poder Judicial 48.Es decir, mi libertad y mi vida qued6 en manos de un Tribunal de Justicia Presidido por quien yo ‘habia sido defenestrado del Poder Judicial. Légicamente, los sentimientos de animadversién, rencor, odio y resentimiento hacia mi persona, eran consecuencia natural, que las maximas de la experiencia permiten apreciar con nitidez, Corresponde a la naturaleza humana, tener dichos sentimientos y hasta buscar venganza frente quien adopté y ejecutd una decisién perjudicial en contra, por lo que de modo alguno, un Juez en tales condiciones puede brindar la més minima garantia de imparcialidad, dado que subjetivamente est prejuiciado. 49.El Juez CESAR SAN MARTIN CASTRO fue ptiblicamente cuestionado al conocerse que integraria la Sala Penal Especial que me juzgaria, pero disimulé no tener algin tipo de resentimiento, odio o énimo de venganza hacia el suscrito por haberlo expulsado del Poder Judicial, y aparent6 brindar garantias de un supuesto ‘juicio imparcial’ ante la opinién publica nacional y extranjera, sin embargo, nadie se imaginaba y yo desconocia que, poco a poco, paso a paso, iba materializando su venganza por la deshonra suftida al ser expectorado del Poder Judicial en tales Una decisién o voto a mi favor hubiera significado su retorno inmediato a la Corte Superior de origen, dada la presiéa mediatice y politica que existia para que se me condene, 23 circunstancias, por haberle cancelado su titulo de Juez y sacado de la Magistratura a la que muchos afios después, recién, volverfa, 50.Es asi que el Juez San Martin Castro, subrepticiamente, y a ocultas de todos, junto a sus aliados, fue preparando el camino para la futura condena que me impondria, luego de aparentar un juicio supuestamente ‘Justo’, cuando la decision de condenarme ya estaba adoptada, y solo se esperaba el momento oportuno para hacerla publica a través de una Sentencia, lo que evidencia un absoluto desprecio por la justicia y la inobservancia del principio de presunci6n de inocencia. 51.EI juez César San Martin Castro, conocedor que los téminos de las acusaciones fiscales hasta entonces emitidas y que la Sentencia de extradicién dificultaba su intencién de materializar una Sentencia Condenatoria contra el suscrito, coordiné con integrantes del Estudio Benitez, Mercado y Ugaz (al que anteriormente habia pertenecido y el mismo que particip6 activamente en diversas investigaciones y procesos Penales en mi contra), para que el Ministerio Publico, representado por la Fiscalia Suprema Penal, aprovechando la Sentencia de extradicion que limitaba tos margenes de la imputacién, reformule su acusacién por una que le facilite la condena. 52.La elaboracién de la acusacién fiscal, y en su caso, su reformulacién, corresponde unica y exclusivamente al Ministerio Publico a través del Fiscal competente. De ninguna manera se puede permitir que la parte acusadora (Fiscal) se confunda con quien juzga (Juez), puesto que ello también demostraria la violacién del derecho a un Juez Imparcial y del principio constitucional de imparcialidad que integran el derecho a un debido proceso. 53.La atribucién del Ministerio Publico para elaborar y reformular su acusacién fiscal, obedece a la materializacion de! Principio Acusatorio. El Tribunal Constitucional ha establecido al respecto que: «/a vigencia del principio acusatorio imprime al sistema de enjuiciamiento 24 determinadas caracteristicas: a) Que no puede existir juicio sin acusacién, debiendo ser formulada ésta por persona ajena al érgano jurisdiccional sentenciador, de manera que si el Fiscal no formula acusacién contra el imputado, e! proceso debe ser sobreseido necesariamente; b) Que no puede condenarse por hechos distintos de los acusados ni a persona distinta de la acusada; c) Que no pueden atribuirse al juzgador poderes de direccién material del proceso que cuestionen su imparcialidad» (Fundamento N°5 de la STC 02005-2006- PHC/TC; Fundamento N°4 de la STC 04620-2009-PHC/TC; Fundamento N‘4 de la STC 01409-2011-PHC/TC). 54.El respeto del Principio Acusatorio permite afirmar, sucintamente, que el Fiscal no puede ni debe consultar con el Tribunal respecto a los alcances de su acusacién fiscal, y que el Tribunal no puede determinar o definir, directa o indirectamente el contenido de la acusacién fiscal que sustenta el juicio. 55.Es asi que, como garantia de imparcialidad y respeto de! principio acusatorio, el Juez César San Martin Castro, en su condicién de Presidente del Tribunal Jurisdiccional que me procesaba y juzgaba (Sala Penal Especial Suprema), tenia el deber y la obligacién de mantenerse ajeno a la elaboracién-reformulacién de la nueva Acusacion Fiscal, sin ‘embargo, ha quedado en evidencia que fue é! quien directamente influyé en los términos de la imputacién que contenia, con la Unica finalidad de facilitar la condena en mi contra. 56.El Juez César San Martin Castro no solo se convirtié en mi juzgador, sino que violando toda garantia_ minima de imparcialidad, subrepticiamente se convirtié también en mi acusador, lo que no esta permitido dentro de un proceso debido, donde deben distinguirse claramente al acusador del juzgador, constituyendo la primera una atribucién exclusiva del Ministerio Publico. 25 57.Asimismo, los integrantes de la Sala Penal Especial, violando toda gerantia de imparcialidad, a través del Juez San Martin Castro, desde antes de que se inicie el juicio oral, procuraban la busqueda de todo tipo de teorias orientadas a sustentar una sentencia condenatoria en mi contra. Los Magistrados de la Sala Penal Especial no buscaban teorfas U opiniones juridicas respecto a determinar culpabilidad o inocencia en iuicio, sino que conforme se desprende de diversos correos electrénicos intercambiados con amigos del Juez San Martin, Gnicamente se cifieron 2 obtener tesis de imputaci6n que sustenten mi culpabilidad, puesto que Su Unico y real objetivo era condenarme a como dé lugar. 58.1 Juez César San Martin carecta absolutamente de toda imparcialidad, Subjetiva y objetiva, porque conforme ha quedado demostrado mediante a difusion de! programa periodistico televisivo “Sin Medias Tintas" emitido por Frecuencia Latina el dia domingo 22 de diciembre de 2013, a través de diversos correos electronicos redactados por él y por las respuestas de sus destinatarios, han permitido verificar que cuando se realizaba mi juzgamiento, 61 ya estaba buscando las argucias orientadas @ acomodar a priori, los fundamentos para una sentencia condenatoria en mi contra. Este programa amplifica y completa la noticia que revelara el Diario “El Correo" e! 01 de Diciembre de 2010 respecto a la existencia de un email de fecha 17 de abril de 2008 que ditigia desde Espana al Perl el abogado peruano Gonzalo del Rio Labarthe (Abogado del Estudio Benitez, Mercado y Ugaz) al juez supremo César San Martin. En aquella ocasién ya se percibia una clara intervencion del remitente dentro de un proceso penal que se encontraba juzgando su destinatario, El procesado era el ex Presidente del Peri: Alberto Fujimori Fujimori. 59. Existen cuatro correos electrénicos que denotan la falta de imparcialidad del Juez César San Martin: 1-Correo del 11 de marzo de 2008, escrito por el magistrado San Martin dirigido a su amigo, el abogado Gonzalo de! Rio. 26 2.Correo del 17 de abril de 2008, escrito por Gonzalo del Rio en respuesta a su amigo, el juez supremo San Martin. 3.-Correo del 16 de mayo de 2008, escrito por el magistrado San Martin dirigido a su amigo, el abogado Juan Carlos Sandoval. 4.-Correo del 20 de mayo de 2008, escrito por el abogado Gonzalo del Rio ditigido a su amigo, el juez supremo San Martin. 60. De éstos correos electrénicos no queda ningtin atisbo de duda, respecto de la conspiracién de una condena en mi contra, catorce meses antes de dictada la sentencia, donde los involucrados elucubran, de la forma mas cruel y diabolica, como saltarse las pruebas para poder finalmente ‘sentenciarme a veinticinco afios de pena privativa de la libertad. 61.EI suscrito se encontraba en pleno juicio oral, y cuando recién se ‘empezaban a actuar las pruebas tendentes a demostrar si era culpable 0 inocente de los cargos que se me imputaban, el_mencionado magistrado supremo ya tenia la _malévola intencién a priori_de gondenarme y s6l jenciaba de los artificios para justificar su decisién predeterminada; lo que violaba su deber de imparcialidad y, consecuentemente, mi derecho constitucional a ser juzgado con respeto del debido proceso y de la tutela jurisdiccional efectiva 62.La Sentencia condenatoria dictada en mi contra por la Sala Penal Especial de la Corte Suprema, presidida por el Juez Supremo César San Martin y quien actué como Vocal Ponente, data del dia 07 de abril de 2008, sin embargo, ya desde el mes de marzo del afio 2008, en un juicio oral apenas iniciado, el mencionado magistrado intercambiaba correos electrénicos con abogados radicados en el extranjero, a efectos de maguillar de legalidad la condena que finalmente me dict6. 63.El dia 11.03.2008, mas de un afio antes del dictado de la Sentencia en mi contra, el Juez Supremo César San Martin escribié un correo electronico desde su cuenta csanmar@pucp.edu.pe a su amigo Gonzalo a7 del Rio Labarthe (qdelri@hotmail.es), con el titulo de “urgente”, En tal oportunidad, el Juez César San Martin le transmite a su amigo Gonzalo del Rio, una serie de inquietudes con relacién a la imputacién fiscal que se habia emitido en mi contra, dejando en evidencia que é! ya habia decidido condenarme, pero que buscaba la “tesis” mas adecuada para ocultar su prejuiciada decision, con malévolo propésito de venganza personal, manifestando que él se orientaba por la tesis de la autoria mediata, la cual incluso le relevaria de mayores rigores de prueba. Esto, el juez supremo San Martin lo elucubraba porque a la vista del ‘expediente, no contaba con suficientes indicios ni elementos de prueba Para dictar una sentencia condenatoria. Asi, se sefialé en dicho correo electrénico: ; “Te pido un favor, tengo varias dudas respecto de lo que ha hecho la Fiscalia y antes de decir algo o mover algo en razén de la situacién en concreto, necesito que te juntes con ef Negro Juancarlos [Juan Carlos Sandoval] y con la gente del Seminario de Penal, me vean tanto la acusacién como los medios de prueba que se anexan en dicha acusacién. Mis dudas son respecto del titulo de imputacién y las posiciones dogméticas respecto de la autorla mediata y la coautoria. Como entender ambas teorlas, sobre todo en la que considero més a la, de la autoria mediata —me releva de maj le prueba-, de cara a lo que significan los medios de prueba que anexa la fiscalia y si en verdad estamos en una linea correcta de. juzgamiento. Te pido por favor esto con urgencia pues de lo contrario se puede joder el tema pues se esté convocando a varios peritos que van a establecer la linea indiciaria como elemento de juicio valedero y eficaz a fin de determinar la posible responsabilidad penal del chino. A su vez, a fin de yr como se puede enderezar el tema si hubiera alain e urgencie.” 64, De la gréfica expresién: "de lo contrario se puede joder el tema”, se puede claramente deducir que con la acusacién fiscal de coautoria se 28 conduciria el proceso hacia mi absolucién, por lo que, a esas alturas del Juicio urgia a su interlocutor " a fin de ver como se puede enderezar el tema si hubiera algtin erro’ 65.Es decir que el Juez San Martin, mas de un afio antes de la sentencia, ya consideraba que el suscrito era autor mediato; que la tesis de la “autorila mediata” era la mas aceptable porque le permitiria relevarse de mayor rigurosidad de prueba. Ergo, el juez San Martin reafirmaba que no contaba con pruebas para condenarme. 86.E! dia 17.04.2008, esto es, casi un afio antes de la Sentencia dictada en mi contra, el abogador Gonzalo del Rio Labarthe (del Estudio Benitez, Mercado y Ugaz) le responde al Juez Supremo César San Martin, precisamente, brindandole argumentos forzados para sustentar la condena basandose en la tesis de la “autoria mediata”. Asi concluy6: “Mantuvieron una imputacién a titulo de autoria mediada (coautoria). Pero reformulada en los términos de la acusacién. Si AF es miembro de Ja organizacién, asume activamente su participacién y tiene conocimiento de para qué fue formada. Es responsable a titulo de autorla mediata por los hechos cometidos por la org porque ejerce ef dominio funcional de aquella” 67.E| abogado Juan Carlos Sandoval (jc.sandovai@ua.es) también le contesté al Juez Supremo César San Martin, y puso en evidencia que ellos encaminaron a la Fiscalia a efectos de que pueda sustentarse debidamente_la_acusacién fiscal_en_mi contra, es decir, se convirtieron en jueces y acusadores a la vez. En tal oportunidad, Juan Carlos Sandoval, le manifesté al Juez San Martin: ‘La _idea es sacarnos de encima la necesidad de la prueba de las Ordenes". (que bien se articularon en su momento cuando la Fiscalia cambié su titulo de imputacién). " Se cambié oportunamente el titulo de imputacién" 29 (puesto que si se pretendia llevar adelante la imputaci6n fiscal ini ia, por coautoria, estaba muerto el caso). Bien jugado con mi gente de la defensoria y con los amigos alertaron a la Fiscalia pues de | contrario nos ibamos al traste. Loh AF os el autor mediato, El hombre de atrés. Por lo que, no hay duda que se debe enfocar el caso bajo estos Miveles de concrecién teérica y fundamentalmente, legado el momento, eludir reglas de pruebas explicitas a fin de poder determinar bajo reglas de indicio, que bien pueden ser dadas por técnicos en la materia (amicus) y Hegar a establecer lo que se quiere por reglas de indicio. I documento en extenso le envio luego, Je” 88.EI texto de! email grafica la intencién de la conspiracién para Condenarme, con las interjecciones y frases siguientes: “Sacarnos de encima la necesidad de la prueba", “Se cambi6é oportunamente el titulo de imputacién", “Bien jugado con mi. gente de la defensoria y con los amigos", “De lo contrario nos ibamos al fraste", “AF es el autor mediato. E/ hombre de atras", " Eludir reglas de pruebas explicitas”, “Llegar a establecer lo que se quiere por regias de indicio". 69.Lo anterior nos muestra, sin lugar a dudas, una conspiracion urdida para condenar a un procesado, que de antemano ya era considerado culpable, mas de un afic antes de culminado el juicio oral, con absoluto menosprecio de la prueba que dentro del proceso penal se actuaria, La Unica prueba que el magistrado César San Martin Castro camuflaba entre el fabricado montaje de actuacién de pruebas que por 30 obligacin procesal debia “debatirse" en el juicio oral, era la de la convocatoria de peritos (amicus) pues se los habia convocado Gnicamente para maquillar la farsa de la prueba en la condena: “Bajo la linea indiciaria como elemento de juicio valedero_y eficaz"...) 70.Asi queda en evidencia que el Juez San Martin participd de una 71 72, 73. gravisima conspiracién delictiva en mi contra; coludiéndose con ta parte acusadora (Ministerio Publico) para que modifique su acusacién que le Permita condenar al procesado y con el voto de los otros dos magistrados de la Sala, obviamente en connivencia en ésta conspiracién. La imparcialidad se muestra como aquel principio que garantiza que el Juez esta impedido de identificarse con las pretensiones de alguna de las partes o de sustituirse en el lugar de las mismas; su actuacién sera siempre de naturaleza neutral. Neutralidad que estuvo siempre ausente en el Magistrado César San Martin, quien construy6 un tinglado con visos de legalidad para condenarme mucho antes de la actuacin Probatoria dentro de un proceso penal, en la etapa de un juicio oral que debe ser garantista, con debate y contradiccién de la prueba. EI magistrado denunciado César San Martin Castro hizo tabla rasa de todo principio de la justicia y se burlé de los millones de ciudadanos de éste pais que siguieron con interés el proceso penal en mi contra dirigido Por el mencionado Juez Supremo que aparentaba ser un juez probo, correcto e imparcial que valoraba la actuacién procesal de la prueba que se glosaba dentro de! proceso. En el fondo se trataba de un montaje teatral de juicio oral, pues él ya habia urdido el tinglado y decidido ef fallo. .Este diabélico como maquiavélico tinglado tejido por el Juez San Martin tiene todas las caracteristicas de una conducta criminal: asesinar 31 mediante un legi a un inocente en pris 74.EI Juez no puede bajo ninguna circunstancia, adelantar opinién 0 juicio de valor respecto a la responsabilidad penal de un imputado. Si lo hace con anticipacién y prejuicio elucubrando una condena, deja de ser juez Para convertirse en el verdugo del acusado, al haberse quebrantado ¢! principio constitucional de imparcialidad, el Juez San Martin desde e! inicio del proceso penal, a sabiendas, se encontraba deslegitimado, 78-Si bien cualquier magistrado puede recurrir en consulta para fundamentar una sentencia a diversas fuentes bibliogréficas, asi como a [a Jurisprudencia comparada y a la opinién de juristas expertos: sin embargo silo hace, debe esperar que haya concluido el proceso y que Se haya agotado la prueba y el debate contradictorio, que se haya ofdo 'a requisitoria oral con los cargos formulados por el Ministerio Pdblico y los descargos expuestos en el Alegato del Abogado Defensor. En atencién al principio de imparcialidad e independencia en su funcién, debe poner en consulta sobre ambos platos de la balanza, las dos Linieas hipdtesis que puede contener un fallo: la condena en la hipétesis de culpabilidad y la absolucién en Ia hipétesis de una absolucién, Ademas que debe obligatoriamente, consignar las consultas en su Sentencia, es decir, citar las fuentes y los términos en que se formularon los cuestionamientos y los fundamentos en que se expusieron las respuestas. 76.Nada de esto hizo el juez supremo San Martin. Lo que hacia no era consular los aleances dogmaticos y doctrinarios de un proceso penal donde é! era el juzgador, no, nada de eso, é! conspiraba una condena y Se comportaba como parte enemiga, en la causa donde intervenia como juzgador. En ningtin momento efectué consulta sobre la posibilidad de una declaracién de inocencia. Preparé toda una farsa para lograr el Propésito de la condena con la que coroné su decisién pre concebida, Es decir su comportamiento linda con lo criminal pues su conducta 32 cumple toda la fase del iter criminis: la fase interna constituida por la ideaci6n, la deliberacién y la resolucién criminal y la fase externa materializada en los actos preparatorios, los actos de ejecucién, la consumacién y el agotamiento criminal. 77.Asi nos hizo asistir a un proceso penal que sélo fue un remedo de imparcialidad, objetividad y de garantia procesal. El pais y el mundo apreciaron por la television la obra teatral mas grande de un juzgador, pues catorce meses antes, sin contar el tiempo que duraron los actos preparatorios que ejecuté antes de tener bajo su jurisdiccion mi caso penal, él ya tenia redactada la condena y hasta mi forma de Participacién en el crimen, bajo los parémetros de una teoria novisima, sujeta a necesaria comprobacién objetiva con la prueba que se acte en el proceso, por su alto contenido de subjetividad. Asi apareci condenado como AUTOR MEDIATO EN APARATOS OGANIZADOS DE PODER. Existen contenidos integros de la sentencia que han sido sacados de los Correos electrénicos. Para determinar que el razonamiento de la condena tiene sustento vital en los mismos, nos basta con leer el parrafo 673 de la sentencia como ejemplo. 78.Un magistrado no puede guiar su condena bajo el raciocinio Parametrado de terceros ubicados en otro continente, que no participan en el proceso penal, que no observan, escuchan ni valoran la prueba que se glosa en la causa y lo mas grave de esta abominable farsa: que la sentencia condenatoria se cocina catorce meses antes de concluido el proceso penal. 79.Otra mentira o media verdad es el hecho de pretender hacemos creer que los confabuladores de la condena, con los cuales el juez denunciado se asocié ilicitamente para condenarme antes de concluido el proceso penal son eruditos, cientificos o maestros de la ciencia penal y de la dogmética doctrinaria. Nada més irreal. Estos no figuran en la ciencia penal como autores de ningun tratado doctrinario, no han sustentado las. 33 bases de ninguna teoria nueva ni han analizado con rigurosidad académica las existentes. Son abogados con estudios de posgrado, que consultaban a su vez con autoridades administrativas dentro del organigrama de una Universidad extranjera, cuyas credenciales tampoco la hacen brillar ni destacar en el mundo como especializada en derecho penal. 80.Es probable que los que conspiraron junto con el juez denunciado formaban una cofradia o una secta con apariencia de legalidad bajo el nombre de "Seminario", asi como es probable también que habria existide algin tipo de colaboracién de extranjeros por parte de grupos que bajo la fachada de una ONG defensora de derechos humanos, financian todo tipo de persecucién contra quienes combaten al terrorismo en el mundo. 81.Debe tenerse en cuenta que los mencionados conspiradores de la condena que se dicté en mi contra, por el propio contenido de su correspondencia aparecen jugando de mala forma mucho antes del juicio oral, pues intervinieron en la Fiscalia y en la Defensoria (Procuraduria), logrando la mutacién de los cargos de inicial imputacion criminal, de coautoria a autoria mediata, que los relevaba de mayor rigor probatorio, lo que les permitié sustentar la condena 82.Sefior Juez, una vez concedida mi Extradicién y ya en el Pert fui entregado a las fauces de los que gestaron el Complot: el fiscal y los jueces que me enviaron a la carcel al condenarme a veinticinco afios de prision. 83. Nunca en el Pert ni el mundo ha sucedido algo semejante. Jamas la condena a un Presidente de la Repiiblica se urdié en una conspiracion allende fronteras. La Historia del Pera, juzgaré en su momento el tino y el equilibrio con el que se comporte el juez constitucional, en el unico objetivo que debe servir de norte a lo denunciado: la biisqueda incondicional de la verdad y de la justicia que por casi ocho afios de mi vida se me ha venido negando y que me tiene en la carcel condenado por un delito que no se probé que yo Io hubiera cometido. 84,Debo hacer presente que si bien la conspiracién ilegal y anticonstitucional la dirigié personaimente el Magistrado César San Martin Castro a través de su correspondencia, no es menos cierto que no es dificil suponer que no actud a espaldas de los otros dos magistrados supremos que conformaban la Sala Penal de Juzgamiento, los sefiores: Victor Roberto Prado Saldarriaga y Hugo Herculano Principe Trujillo. Siendo lo mas probable es que éstos hayan sido manipulables subordinados en jerarquia jurisdiccional y participes de ta farsa con pleno conocimiento que su entonces Superior Jerarquico y Presidente de la Sala Penal Suprema que me juzgaba, cocinaba la condena mientras ellos se sumaban a la pantomima del juicio oral supuestamente garantista, fingiendo que seguian la secuencia del proceso y valoraban la prueba, cuando de antemano conocian que se urdia una condena prejuiciada y pre-fabricada adrede. Corresponde al Consejo determinar la forma cémo también formaron parte activa de la escandalosa trampa juridica, definiendo solamente si la conducta de éstos fue por comisién o por omisién. 85.Como se ha indicado, luego de la extradicion se procedieron a fijar los marcos del enjuiciamiento al que seria sometido, para lo cual la Fiscalia Suprema en lo Penal emitio el Dictamen N°2275-2007-1* FSP-MPFN del 29.10.2007, en el cual se reformularon las acusaciones fiscales anteriores, calificandose los hechos y formuléndose acusacién, en los casos Barrios Altos y La Cantuta, por los delitos de asesinato y lesiones graves previstos en los articulos 108° incisos 1) y 3), y 121” incisos 1), 2) y 3) del Cédigo Penal, respectivamente, mientras que en el caso ‘Sétanos SIE, el hecho fue tipificado como delito de secuestro agravado, previsto en el articulo 152° inciso 1) del Codigo Penal, atribuyéndoseme ser autor mediato por dominio de la organizacién. 35 88.La Acusacién Fiscal reviste especial relevancia debido a que determina un marco para el ejercicio de las facultades del Tribunal de Justicia que llevard adelante e! Juzgamiento, puesto que no podré juzgar y menos condenar a una persona por hechos o violacién de normas penales (nacionales 0 internacionales) que no han sido materia de acusacién; con ello se procura garantizar al imputado el debido ejercicio de un derecho de defensa. 87.La defensa no puede ser justa ni adecuada si una persona es juzgada y condenada por una supuesta violacién de normas penales nacionales o intemacionales, si tal vulneracién no fue materia de la imputacién contenida en la acusacién fiscal. 88.La Acusacién Fiscal constituye, en tal sentido, una “garantia’ y un “limite”. Garantia de que el acusado no seré condenado por hechos o violaciones de normas penales nacionales o internacionales que no se encuentren debidamente enmarcadas por el Ministerio PUblico en la acusacién. Limite porque el juez no puede condenar por hechos 0 normas penales nacionales o internacionales distintas a las contempladas en la acusacién. 89.No obstante, lo anterior, y a pesar de que la acusaci6n fiscal que sustentd el juicio oral no me imputé ta comisién de delitos contra la humanided segin el Derecho Intemacional Penal 0 delitos de lesa humanidad como también se les conoce, y menos aun cité las supuestas normas de! Derecho Internacional Penal que segiin la Sala Penal Especial habria infringido, al ser condenado por delitos de homicidio calificado y lesiones graves, los Jueces demandados integrantes de la Sala Penal Especial, explicitamente sefialaron en el fallo de su Sentencia, que tales delitos, en este caso especifico, constituian crimenes contra la Humanidad segiin el Derecho Internacional Penal. 90.En las Sentencias cuestionadas via la presente accién de habeas 91 36 corpus, se me atribuye la vuineracién de una norma internacional consuetudinaria y se invoca como sustento juridico, entre otros, el Estatuto de Nuremberg (que por primera vez establecié la nocién de “ctimen contra la humanidad’) y la mas reciento norma contemplada en el atticulo 7° del Estatuto de Roma de la Corte Penal internacional. Notese que ambas normas del Derecho Internacional Penal, y en general las normas internacionales consuetudinarias a que se alude, exigen que para exista un delifo de lesa humanidad, se produzca un ataque sistemdtico o generalizado contra una poblacién civil o parte de ella. En mi caso, la acusacién formulada no me atribuy6 haber cometido algun crimen contra la humanidad conforme a las normas intemacionales consuetudinarias, ni conforme a los Estatutos de Nuremberg y de Roma, y sin embargo, se me impone una condena sobre la base de que vulneré tales disposiciones internacionales penales. 92.En el Considerando 714° de la Sentencia emitida por la Sala Penal Especial Suprema, que me encuentra responsable por crimenes contra la humanidad, se realiza todo un examen sobre los aspectos objetivos y subjetivos requeridos para que se constituya un crimen contra la humanidad, tomando como base el articulo 7° del Estatuto de Roma, pero como ya he indicado, la Sentencia de extradicién no autorizo mi juzgamiento y condena por tal ilicito, y tampoco la acusacién fiscal me lo atribuyé, no pudiendo hacerlo en ningtin caso, puesto que a mérito de la sentencia extraditoria, debe limitarse a fa figuras juridico penales indicadas en esta titima, las mismas que Unica y exclusivamente versan sobre delitos plasmados en el Cédigo Penal, y no sobre delitos previstos en normas internacionales que contienen sus propios y diferenciados elementos tipicos, objetivos y subjetivos, siendo el mas relevante de ellos, como se ha indicado, la existencia de un ataque generalizade o sistematico contra la poblacion civil 37 93.La imputacién o calificacion de {os indicados crimenes contra la Humanidad segun el Derecho Internacional Penal (que en realidad constituyen delitos auténomos expresamente previstos en la legislacién internacional) han significado una situacién juridica agravada para la ejecucién de la pena que se me ha impuesto. Efectivamente, es de piblico conocimiento que tanto el “induilto humanitario" como el “arresto domiciliario” que solicité, respectivamente ante el Poder Ejecutivo y ante el Poder Judicial, han sido ambos rechazados bajo el argumento de que he sido condenado por “delitos de lesa humanidad" o “delitos contra la humanidad’. 94.Al no imputarseme en la acusacién fiscal la comisién de “crimenes contra la Humanided segtin el Derecho Intemacional Penal’ de la cual he sido considerado responsable por la Sala Penal Especial, no pude presentar mis alegaciones (derecho de defensa) ni oftecer medios probatorios idéneos (derecho a probar) destinados a desvirtuar tal imputacién respecto a la comisién de un delito de lesa humanidad que tiene sus propios elementos tipicos objetivos y subjetivos, especificamente, a desvirtuar la accién tipica, puesto que, en todo caso, no existié ningtin ataque sistematico o generalizado en contra de una poblacién civil. 95.Sobre este punto adquiere mayor importancia el principio acusatorio, el mismo que tiene relevancia constitucional puesto que implica la vulneracion del derecho a la defensa que también es parte del debido proceso (STC 01939-2004-HC/TC), lo que se ha producido al habérseme condenado por un delito internacional que no fue materia de acusacién fiscal 96.Los delitos de homicidio calificado (asesinato) y lesiones graves pueden constituir delitos comunes como también crimenes de lesa humanidad segun el articulo 7° numeral 1 del Estatuto de Roma — Corte Penal 38 Intemacional, y en ese ultimo caso, no es suficiente que se acredite la comision de tales ilicitos del Cédigo Penal, sino que los mismos adquitiran relevancia y constituirian delitos de lesa humanidad “cuando se cometan como parte de un ataque generalizado o sistemético contra una poblacién civil y con conocimiento de dicho ataque”. 97.De esta manera, para poder coneluir si los referidos delitos constituyen delitos de lesa humanidad (crimenes contra la humanidad), es necesario que se someta al contradictorio (debate judicial) la imputacién referente a que existla un “ataque generalizado o sistematico contra una poblacion civil” y que el mismo se efectué “con conocimiento de dicho ataque”. 98.Debo resaltar que el mismo Estatuto de Roma que regula el procedimiento ante la Corte Penal Internacional cuando se investigan los denominados delitos de lesa humanidad, el imputado tiene un cabal ejercicio del derecho de defensa, y se le pone en conocimiento que se le est imputado un delito de lesa humanidad a efectos de que pueda alegar y probar dentro del proceso (articulo 65° del Estatuto de Roma); sin embargo, en mi caso, no se me acusé por la comisién de crimenes contra la humanidad de los cuales fui encontrado responsable segtin Sentencia de la Sala Penal Especial. 99.La Sentencia emitida por la Sala Penal Especial fue elevada, via recurso de nulidad, a la Primera Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de la Republica, integrada por los Jueces DUBERL/ APOLINAR RODRIGUEZ TINEO, JULIO ENRIQUE BIAGG! GOMEZ, ELVIA BARRIOS ALVARADO, ROBERTO BARANDIARAN DEMPWOLF y JOSE ANTONIO NEYRA FLORES 400. _De los referidos Magistrados, solo el Juez DUBERL! APOLINAR RODRIGUEZ TINEO era Juez Supremo Titular, mientras que los demas integrantes (JULIO ENRIQUE BIAGGI GOMEZ, ELVIA BARRIOS ALVARADO, ROBERTO BARANDIARAN DEMPWOLF y JOSE 39 ANTONIO NEYRA FLORES) no eran realmente Jueces Supremos sino Jueces Superiores que provisionalmente fueron promovidos, por lo que no podian intervenir en el proceso dada la garantia prevista en el articulo 100° de la Constitucién Politica que establece como Juez Natural a un verdadero Juez Supremo y no a quien provisoriamente desempefiaba tal condicién. 401. Asimismo, el Juez JOSE ANTONIO NEYRA FLORES, en garantia del principio de imparcialidad y el derecho a un Juez Imparcial, no debia conocer del proceso penal, por integrar la antifujimorista Asociacién de Jueces para ia Justicia y la Democracia - JUSDEM, creada exprofesamente para enfrentarse a mi Gobierno. 102, Ei Juez JULIO BIAGGI GOMEZ también se encontraba procesalmente “contaminado" y ‘prejuiciado” en mi contra, porque también fue expulsado del Poder Judicial por el suscrito mediante Decreto Ley N°25446, por lo que es evidente su resentimiento, rencor, odio y sentimiento de venganza. 103. Los integrantes de la Primera Sala Penal Transitoria Suprema inobservaron mis reclamos referentes al derecho a la defensa y a probar, respecto a que no podfa ser responsabilidad de la comision de crimenes contra la Humanidad porque tales infracoiones no fueron materia de acusacién fiscal alguna, y que por tanto, no se habian otorgado debias garantias para mi defensa y mi derecho a probar. 104. Por lo anterior, las Sentencias cuestionadas son arbitrarias, vulnerando diversos principios — derechos integrantes del debido proceso, con la consecuente afectacién a mi libertad personal; y, por tanto, corresponde declararse su nulidad y ordenarse el inicio de un nuevo juzgamiento a cargo de jueces imparciales, disponiéndose ademas mi inmediata libertad por haber transcurrido en exceso todo plazo de detencién preventiva. 40 Vv. FUNDAMENTOS JURIDICOS: Constitucion Politica del Estado: Derechos fundamentales de la persona Atticulo 2.- Toda persona tiene derecho: 24. Ala libertad y a la seguridad personales. En consecuencia: e. Toda persona es considerada inocente mientras no se haya declarado judicialmente su responsabilidad. Principios de la Administracién de Justicia Articulo 139.- Son principios y derechos. de la funcién jurisdiccional: 3. La observancia del debido proceso y la tutela jurisdiccional. Ninguna persona puede ser desviada de la jurisdiccion predeterminada por la ley, ni sometida a procedimiento distinto de los previamente establecidos, ni juzgada por érganos jurisdiccionales de excepcién ni por comisiones especiales creadas al efecto, cualquiera sea su denominacién 14. EI principio de no ser privado del derecho de defensa en ningun estado del proceso. Toda persona sera informada inmediatamente y por escrito de la causa o las razones de su detencién. Tiene derecho a comunicarse personalmente con un defensor de su eleccién y a ser asesorada por éste desde que es citada o detenida por cualquier autoridad. Cédigo Procesal Constitucional: Articulo 4.- Procedencia respecto de resoluciones judiciales El amparo procede respecto de resoluciones judiciales firmes dictadas con manifiesto agravio a la tutela procesal efectiva, que comprende el acceso a la justicia y el debido proceso. Es improcedente cuando el agraviado dejé consentir Ia resoluci6n que dice afectarlo. El hébeas corpus procede cuando una resolucién judicial firme vulnera 4l en forma manifiesta la libertad individual y a tutela procesal efectiva. Se entiende por tutela procesal efectiva aquella situacién juridica de una persona en la que se respetan, de modo enunciativo, sus derechos de libre acceso al rgano jurisdiccional, a probar, de defensa, al contradictorio igualdad sustancial en el proceso, a no ser desviado de fa jurisdiccion predeterminada ni sometido a procedimientos distintos de los previstos por la ley, a la obtencién de una resolucién fundada en derecho, a acceder a los medios impugnatorios regulados, a la imposibilidad de revivir procesos fenecidos, a la actuacién adecuada y temporalmente oportuna de las resoluciones judiciales y a la observancia del principio de legalidad procesal penal. Vi. VIA PROCEDIMENTAL: La presente demanda debe ser tramitada a través de la via sumarisima y urgente del hébeas corpus, conforme se desprende del articulo 200° inciso 1) de la Constitucién y a los articulos 1°, 2°, 4° y 31° del Cédigo Procesal Constitucional. Vill. MEDIOS PROBATORIOS Y ANEXOS: 4-A. Tratado de Extradicién entre Chile y Pert suscrito en Lima el 05.11.1932 conforme al cual se concedié mi extradicién al Peri. Este Tratado fija limites que debid respetar el Peri al efectuar mi juzgamiento, pudiendo sentenciarme dnicamente por los hechos y delitos especificamente autorizados, sin agregar nuevos delitos, agravantes © calificaciones juridicas que perjudiquen o agraven la imputaci6n factica 0 juridica 4-B. Sentencia de Extradicién emitida por la Corte Suprema de Justicia de la Republica de Chile del'21 de setiembre de 2007 y que corre en el Expediente N°19-2001-09-AV, que obra en el archivo del Juzgado 42 ‘Supremo de Instruccién de la Primera Sala Penal Transitoria de la Corte ‘Suprema de Justicia del Peri, a donde debe oficiarse con el fin que se remita a su despacho en copia certificada. En ésta sentencia se que autorizé mi juzgamiento Unicamente por los delitos de Homicidio Agravado, Lesiones Graves y Secuestro Agravado, pero no por delitos contra la Humanidad segtin el Derecho Penal Internacional. 4-C. Decreto Ley N°25446, mediante el cual, el suscrito ces6 del Poder Judicial a los Jueces César San Martin Castro y Julio Biaggi Gomez, disponiendo la cancelacion de sus titulos como jueces. 4-D. El contenido de los Correos electrénicos que obran en el video propalado por el programa de investigacién periodistica “ Sin Medias Tintas” del Canal 2 Frecuencia Latina, Atenci6n Sefior Aldo Mariétegui, a través de los cuales se evidencia que el Juez César San Martin Castro fue remitente y destinatario de diversos correos electrénicos, a través de los cuales mostraba su Unica y exclusiva intencién de emitir una Sentencia condenatoria en mi contra, para lo cual incluyé en la reformulacién de la acusacién fiscal y procuré, nicamente, la obtencién de tesis y fundamentos juridicos que sirvan para mi condena. Con tal fin solicito oficiar a dicho Canal pidiendo que remita copia de dicho video. Asimismo, en calidad de medios probatorios solicito que a fin de verificarse si los demandados integran la Asociacién de Jueces para la Justicia y la Democracia - JUSDEM, asi como su dnimo antifujimorista, solicito que: 4. Se OFICIE a la Asociacién de Jueces para la Justicia y la Democracia — JUSDEM para que informen si los sefiores Jueces demandados integran © han integrado dicha Asociacién, debiendo informar su fecha de afiliacion y desafiliacion. 2. Se OFICIE a la Asociacién de Jueces para la Justicia y la Democracia — 4B JUSDEM a fin de que remita copias de sus comunicados y notas de prensa emitidos desde su fundacién hasta el 31 de diciembre de 2001. Se recabe e! Expediente N°19-2001 de la Sala Penal Especial de la Corte Suprema de Justicia de la Repiiblica, en el cual se me proces6 por los delitos de Homicidio Agravado, Lesiones Graves y Secuestro Agravado, el mismo que se encuentra concluido, por lo que no existe impedimento legal alguno para su remision a este Juzgado. POR TANTO: A usted Sefior Juez, solicito admitir la presente demanda, tramitarla de acuerdo a su naturaleza y en su oportunidad declararla fundada, conforme a los términos planteados en el petitorio. Lima, 31 deloctubre de2014. Alkete Fyoor! aa - 10553955

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