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éE! por qué de los limites? Disciplinar para un adecuado desempefio en la vida. Responsabilidad de padres y maestros do dénde termina’ el permiso y comienza Iq’ prohibido. ¥ Tampoco es acertada Ig actitud sobreprotec- jora de los adultos, pues limita ta independercia ¢ iciones, fomenta 1a 2El por qué de los limites? 4a ausencia de limites forma nifios inseguros,) erviosos, onsiosos, desorganizados, desor- | , denadosi Por tanto, Jos adultos tienen la posi- es s nifio, crea inhi bilided“de ayudar al nifio @ que controle sus” y “1°! nifor 4 ; ; facilita'la rearesién a etapas anteriores del de reacciones, 2 que elobore fos situaciones cony ; ° ass sorrollo: Tonto la sobreproteccién, come lo impot comprefisién, ¥ a que se ocupe de acuerdo a j sous i sicién excesiva de norn.as, 3on posiciones inadeq sus interesea, Fi — . evades, Esta dima refiere @ enfrentar-al nifio, os limites son necesarios y demondados pqr i : : = ee frecuentemente con frustraciones lo que gencra 163 ios para poder frenar lo impulsividad que : é ; , una conducta destructiva, agresiva, sin control f eTde silos inismos no pueden éoAlfbloq Es por . te del Por ello es imprescindible desde el adulto ello que requieren primeromenie del agente j t brindar seguridad, afecto y firmeza, de estey extemo para que imponge normatives y regu- nifio!pued sdurez”¢ le, hosta tanto se internlice ese agente regula. ede.e! nifio'pueds lograr.una buend rhedured °"y dor y pueda darse el autocontrol emocional, es decir una personalidad integra= El limite es lo necesidad de un espacio parag “29 con v1 adecuado sentido de fa realidad y ¢ eloboror positivas relaciones inter} ; crecer y crecr; marca el continente dentro det P erclones literparsonalps Ely " Ite ner limites le tran: ii cughel nifio puede moverse fibremente, sobieng “°9vlto al poner limites le transmite al nifio una — ¥ ‘organizacion personal y un orden social, ine- £ grados de prohibitionesy pgrmisos. La disciplina es indispensable para el desarrollo individual y socicy Disciplinar es una funciéd importante de los padres, @s ensefiar reglas y poner limites o los # &ctos de to vida de un hijg. Un nifio que respetay la disciplinu.sera-un adulfo que” se impondid, Wisciplina por si. mismo. y podid desempefarsel adecuadgmente gn'la vida. 7 ‘iplina es un proceso continuo, comienzay und misma, $e basa Follre tos valores personaleg tonstruidés en el-lazo afectivo con.un otrosig: ¢ jificativd. El desarrollo emacional del nifio de perde'de los lazo8 afectivos que lo ligan a sus {padres los padres deber| ensefiarles a sus hijos t ta expresor sus emociones sin gritar, sin golpearf sin enfurecerse, brindéndéles recursos més elg- Uborados. Es asf que el intercambio de puntos de vista, el respetar pensamientos, la posi dad de toma de decisiones, contribuye al def sartollo de la autonomig. La cual se adquier¢ aproximadamente @ los 5 afios y requiere dep tiempo, paciencia y presencia de un adulto qué yeduzea su poder y no pierda de vista el penf samiento infantll. Es decir, los padres ayudan b desde que el nifio nocg, peniendo horarios de fun sano desarrollo emocional del hijo, a travé¢ comida, de suefio, luego, a medida que el nifig crece, acompaiia las conductas, fos comiportat mientos y las rélaciones con los otros, y mas tar- ? de se transforma en cutodisciplina. § Cuando un nifio crece sin disciplina tiene difi- cultades en respetar los derechos de los otros, en el control sobre sus actos, en el express adecuadamente sus emociones, en el desarrollo de la autoestima y suele adquirir patrones de conducta negatives. La cutonomia y 1a obediencia! ‘como dos tipos de moral? Es esperable que el cdulto ayude ol nifiog @ comprender sus conductes, a reflexionar soy bre sus actos para obtener fa autonomia, No se logra alcanzar la conducta moral del nifio castigando lo malo y premiando lo bueno. Los premios y castigos pueden ser efectivos a cor- to plazo y desalientan al nifio a juzgarse a si mismo, lo mahtiene obediente en el momento y dependiente siempre de los otros. {a autonomtymaral, elyser gobernado port del amor, de Ja disciplina firme y constante, delf reconocimiento de valores y esfuerzos?.a partir de un buen ejemplo, generando una indepen-f dencia progresiva.! La! obediencia, sin conciencia_ni_comprensién del por qué, no favorece el aprendizaje de nor- mas, solo responde a evitar al castigo o ser pro- j miodo por el otro: Siguiendo lo desarrollade por Piaget, J. al respecto, podemos sostener lo siguiente. La etapa correspondiente a la primera infan- cia en cuanto at desarrollo moral es Ia hetg- ronomia, que remite a ser gobernedo por Igs otros. Consiste en la aceptacion unilateral po? parte del nifio de lo que establéce el adult, Feconociendo a éste como autoridad. Dicha éu-t toridad (debe siempre ir acompafiada de unc: enseficnza que posibilite el logro posterior de fa autonomia ‘ Enlaretucién del paclrecomofigurade autoridad yelhijo que obeclace, debe clestacarse lei Opera f Génbesadcenelmutuerespeto,lomarcaciénlégica{ ceherente y una obediencia racional con la res-$ peciiva comprensién dé la pauta dada. Esto difie- re totalmente del rigido autoritarismo, del padre que es Ia ley, en vez de aquel que la ejerce. Dado que la normatividad es un constructo teérico inte- riorizado en el adulto, quien va a representar la ley y el sostenimiento de la misma frente al nifio. Y asi luego las reglas externas deben ser internali- zadas comprensiblemente por el nifio construyén- dose Ia regla moral para poder autoregirse el yo voluntariamente. Hay ciertas consignas que en el momento en que son dadas por el adulto, su contenido, no tiene sentido inmediato en el juicio del nifio, pkro resultan necesarias para su cuidado y forma- cién de hébitos; tales como delimitar espacios y tiempos para cada una de las actividades, proteger del peligro, generar conductas en re- lacién a Ja alimentacién, higiene, modales, etc Elimite ayuda a controlat aquellos aspectos ¢ Ue su conducta que él nifio no puede dominar? por ‘si mismo. Ejercer un contro! sobre sus actos. ‘con ayuda de los adultos le permite al nifo Ir ig. xorporar normas y valoreg. Es entonces indispen- sable la autoridad del adulto para contribuir a 1a construccién de la autonomia en ifio, de ahi la insistencia en la importancia de su presencia, (a implementacién de castigos arbitrarios ‘lexibles atenta contra la integrided psiquica del iniio y no contribuye con su desarrollo moraly Es asi que podemos hablar He és tipos ag sordioned. Las lomadas explatorias ‘que se cap _ractetizan por una mayor coaccién y una relat “don arbitrarla-entre la sanciéa y el acto saz Gionadb. ‘A partir de éstas él fifo combia no implicandg, {condueta para evitar el las cvalesitiene una relacién légica 0 natural cop el acto sancionadg; aqui el ddulto ejerce su ag- toridad de manera que el nifio entiende él por ? qué debe reparar sy conducta, feniendo asi Ia? idad de actuar voluntariamente ‘construt posibil yendo sus propias réglas morales. Estas ultimas son las esperables a ejercer por los adultos. Rigidez ~ flexibilidad, restriccién = permisi dad, son extremos de fa incomprensién. Las anfi- nomias que hay que superar Ser conveniente no caer en el empleo de una disciplina rigida, desafectiva, que conlle- va la desvalorizacién del nifio, en la recurrente frustracién, en la incomunicacién, como tam- poco en una permisividad, en un dejar hacer; no hay que posicionarse ni desde un autorita- rismo estricto ni desde la ausencia de limites. Con la voluntad de dejar hacer se logran nifios inadaptados, inmaduros afectivamente y sin re- cursos para aceptar la realidad. Con el exceso de limites se producen nifios sobreadaptados que responden a'lo que los demas esperan de ellos, y no a lo que creen y desean, la posicién adecuada se orienta hacia to comunicacién, la cual mejora la calidad de los vinculos, trayendo como consecuencia el inter- cambio de ideas, donde los adultos no deben imponer su palabra como Ley y los nifios si de- ben exigir razones, lo que refleja de ambos la Posicién activa en el proceso. Disciplinar con firmeza tighifica AGFle “Gl HAS 108 limites justoy con amor y sabiduri8,/que remiten-a sv incomy «pletug esto requiere la estabilidad emocional de los adultos responsables en la educacién de esos nifios. Los cuales necesitan un buen hogar, figuras parentales con las que puedan:identi- ficarse y un medio emocional estable que les proporcione la posibilidad de realizarse. Comt partir con el nifio tristezas y alegrias permite que desarrolle su sentido de realidad: Comunit cor el afecto cotidianamente implica dedicarle, tiempo y espacig, brindéndole el interés nece- sario a sus pensamientos, sentimientos y dando- le importancia a sus juegos, actividades, intere- ses y deseos, Los limites deben ser incorporados paulatinamente y sostenidos, esto facilitaré al nifio su aceptacién y posibilitard Hevarlos a la Jes son fos limites y Ia conduéta que se esperaf ) del nifig. Se debe explicitar los motivos de las ) decisiones, brindar Io. razén por la cual debg eceptar un limitg, lo que permite senitirse con-p siderado como persona. La autoridad compar-/ tida, con-respeio mutus, resulta en dedicacisn’ y esfuerzo una tarea mds ardua y larga, pero! desarrolla en él nifio sentimientos de seguridad y dmor, le permite tomar iniciativas, ser creatig Yo, independiente y auténomo, tomar decisiones ; pot si mismo.)Un nifio disciplinado pone de ma- nifigsto su tolerancia a la frustracién, motoriza distintas olternativas para manejar sitvaciones confictivas y busca diferentes maneras de lo- grar el objetivo cuyo fin es la satisfaccién. En el seno familiar los padres que poseen un poder absoluto basado en la Verdad para im- poner limites, terminan generalmente aplicando castigos fisicos y morales, cohibi: ndo y asustando al nifio. La consecuencia de este método es que a través del temor el nifio se somete, acata, pero no es autoresponsable de sus actos y ante la cusen- i « . . . >» » - cia del adulio no cumple las normas, Le autoridad impuesta genera efectos inmediatos pero desa- rrolla sentimientos de temor, humillacién y some- timiento. La imposicién de una idea correcta que resulte incomprensible para el nifio solo le ensefia a estar de acuerdo con el adulto en poder. La importancia de adultos presentes en la realidad de los nifios. La influencia de los padres sobre los hijos es mayor en los primeros afios de vide, dado que los pequefios obedecen con sumisién y cumplen para no perder el amor y la proteccién en los primeros afios de vida. Con posterioridad, el debate y consenso en la vida familiar, es otra forma de disciplina basada en el respeto mu- tuo, que motiva al nifio a comportarse de ma- préctica. Se debe informar claramente cué-y nera adecuada, esperada poé los otros, sin set forzado. Los limites establecidos fundados en of fFespeto y ta-confianza,.cuando-son-aceptadosy gpor el nifio, perduran a través det tiempo. Lay Identificacién’y'el. amor con’sus padres posibil toran-tavaceptacion-de tos timites impuestos. La disciplina describe un proceso de ensefian- za y aprendizaje por el cual el nifio desarro- lla un comportamiento adecuada, aceptable y apropiado en su crecimiento hacia la madurez. La intencién de los adultos es que devenga una persona autodisciplinada en cuanto aprenda las normas de conducta. Pero este disciplinar implica un proceso conti- nuo y se pone de manifiesto, no solo ante com- portamientos inaceptables sino también ante los comportamientos aceptabies, los esperados por el adulto, El objetivo de la disciplina consis- te en ayudar al nifio en el desarrollo del auto- control, de la confianza en si mismo; es algo que los adultos hacen con y para el nifio, més que algo hecho al nifio para frenar sus comporta- mientos indeseables. Los limites son enunciados que hacen referen- cia @ cuales son los comportamientos que seran aceptables y cudles no; enunciarlos le indica al nifio la existencia de un orden y evita qde deba adivinar qué es lo que se espera de él. Los limites deben estar relacionados en forma{ ¢lara con la seguridad y proteccién de él mis-y mo, de sus pares y del medio que lo roded. Se deben dar gradvalmente en tanto cantidad y comprensién segun la edad evolutiva del nifio, Es importante para ello dar consignas claras, breves y concisas; no exigir més de lo que el nifio puede hacer. Los"padres duben estar presentes para ayoy dar al'nifio @ sentirse bien corisige mismo, dads que la autovaloracién es la propia. vision que éada vie posee de si mismo comé ser"humanop — y esta vision esté determinada por la valoracién que han hecho en cada uno las personas més decisivas e importantes en Ia vida del nifio, los padres; cuando un hijo es querido, respetado y valorado, aprende a quererse, respetarse y con- fiar en s{ mismo. Reconocer y elogiar sus logros y esfuerzos, lo hardin sentirse reconocido, y a partir del reconocimiento de los otros es que se cons- iento, la autoestima y asi truye el avtoreconocit la autonomia. El nifio necesita, més alla de unc postura justa y firme, ternura, buenos modales, conocimiento y comprensién de sus problemas. Limites; Responsabilidad de; 3, tarea compar padres y muestv dae Actualmente se establece una tensd relaciény entre padres y docentep por lo responsabilidad y de Io puesta de limites. La cual plantea tensio-t nes entre ambos generande un conflict. Por lo general finan a echarse culpas y o delegay responsabilidades. Pero la ausencia de limites se interpreta como una falla educativa y se im- j plica tanto a padres como a docentes, Entonces es esperable que ambos deban concebirse como una comunidad con una misién en comén, en co- laboracién, éste es un primer paso fundamental hacia fa cooperacién, Padres y docentes “debe y ‘rian unificar sus mensajes en la formacién dé1s8 nifios. Fl dinbito escolar y el familiar deberian contenerse uno a otro, compensando las mutuas imposibilidades y responsabilidades. Los padres son los principales responsables de la educacién de sus hijos y lejos de ser espectadores de lo que se hace en la escuela, son miembros de la comunidad educativa. El entorno familiar es el primero con el que entra en contacto el nifio, por eso es fundamen- tal el rol de los padres. Hay modalidades fami- liares de puesta de limites que impactan en el desarrollo emocional y social de los nifios, infi- riendo directamente en el ambito escolar. La es- cuela cumple respecto a la familia una funcién supletoria. El rol del docente no es el mismo que el de los padres, sus criterios, sus dmbitos de ac- jereses son difere cién, sus perspectivas e es, sin embargo comparte la misién e influye en la educacién y socializacién del nifio. La tarea de formarjcon esta materia prima que es el nifio en constitucién, un migmbro futurd de una sociedad civilizado, les concierne sobre todo @ los padres. Si esto no es trabajado en e! Gmbito familiar y los padres no se hacen res- ponsables de dicha funcién, se produce en los maestros, que son los encargados de reforzar” Ja funcién paterna en el ambito escolar, proble- mas de manejo y orientacién del nifio. La familia opera cronolégica y significativa- mente primero, y la escuela después; Si bien tie- nen objetivos distintos, se debe constrvir un conti- nvo entre estos dos agentes, teniendo que operar como constructores de sentido para el nifio que no puede constrvirlo solo, déndole un lugar, otor- éndolo en su de- géndole confionza y acompaf sarrollo; donde padres y maestros se posicionan como figuras de autoridad, la que no indica limi- tar, bloquear, restringir, prohibir, ubicar al sujeto como incapez, subsumido, subordinado, desvalo- rizéndolo; la outoridad debe estar sostenida en razenes y no,en imposiciones ilégicas las cuales no pueden ser interiorizadas por el sujsto. La disciplina forma parte del proceso educa- tivo. Disciplinar es ensefiar reglas y poner limites a todos los actos de la vida de una persona; es una responsabilidad importante de padres y docentes. Un nifio que respeta la disciplina seré un adulto que se impondré disciplina por si mis- mo y podré desempefiarse adecuadamente en la vida, Cuando un nifio crece sin disciplina no respeta los derechos de los otros, no tiene control sobre sus actos, no sabe expresar adecuada- mente sus emociones, no desarrolia Ia autoe! y adquiere patrones de conducta negatives. La dis las toreas més importantes que debe apren: pling es un proceso continuo, y una de el nifio, es a convivir con otros; debe atravesar el proceso de socializacién a cargo de padres y do- centes. Por tanto, el aprender a convivir empieza temprano en el mundo familiar, lvego continéa y £ se refuerza en el dmbito escolar, y se prolonge al mundo social més amplio durando toda la vida.

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