Al contrario, la inconveniencia, en tal materia, de los conceptos muy simples, consiste
en que son verdaderos smbolos que substituyen al objeto simbolizado por ellos, y no exigen de nosotros esfuerzo alguno. Considerndolos de cerca, se vera que cada uno retiene slo del objeto lo que es comn a este objeto y a otros. Se vera que cada uno expresa, mejor que la imagen, una comparacin entre el objeto y aquellos que se le semejan. Pero como la comparacin ha descubierto una semejanza, y sta es una propiedad del objeto, y una propiedad tiene todo el aire de ser una parte del objeto que la posee, fcilmente nos persuadimos que, yuxtaponiendo conceptos a conceptos, recompondremos el todo del objeto con sus partes, y que obtendremos por as decir un equivalente intelectual. tales conceptos, colocados en hilera, nunca nos darn sino una recomposicin artificial del objeto, del que slo pueden simbolizar ciertos aspectos generales y en cierto sentido impersonales. Por esta razn es intil creer que con ellos se capta una realidad cuya sombra se limitan a presentar.
hay tambin un peligro muy grave. Pues el concepto
generaliza al mismo tiempo que abstrae. El concepto slo puede simbolizar una propiedad especial volvindola comn a una infinidad de cosas. Siempre la deforma ms o menos por la extensin que le da. Una propiedad, repuesta en el objeto metafsico que la posee, coincide con l, por lo menos se amolda a l, adopta los mismos contornos. Extrada del objeto metafsico y representada en un concepto, se alarga indefinidamente y sobrepasa al objeto, ya que, de aqu en adelante, debe contenerlo juntamente con otros. Los diversos conceptos que nos formamos de las propiedades de una cosa dibujan, pues, a su alrededor otros tantos crculos cada vez ms amplios, pero ninguno se aplica exactamente sobre ella. (Bergson, Introduccin a la metafsica)