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Realizan homenaje a la escritora

Mara Luisa La China Mendoza en el


Palacio de Bellas Artes
El da del mar, Estbamos t y yo y Ojos de papel volando fueron los tres cuentos de la escritora y
periodista Mara Luisa La China Mendoza, que la actriz de cine, teatro y televisin, Lilia Aragn dio lectura
y dramatiz al pblico que se dio cita en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.

La actividad se realiz en el contexto del ciclo Leoluego existo que realiza el Instituto Nacional de Bellas
Artes y que en esta ocasin rindi homenaje a La China Mendoza, quien el pasado 17 de mayo celebr su
cumpleaos 86.
Antes de iniciar la lectura, Lilia Aragn celebr que La China Mendoza estuviera presente en la lectura y

coment que para ella era un honor leer su obra, por ser una mujer ligada a los recuerdos ms preciados
de su vida.

Este evento es una fiesta, un encuentro de amigos para celebrar a La China. Eres un cono de la cultura y
por eso leerte en voz alta en Bellas Artes es un regalo que comparto con el placer de transmitir tus
palabras tan gozosas, destac.
A travs de la lectura de El da del mar, Estbamos t y yo y Ojos de papel volando, el pblico pudo
conocer que la obra de La China Mendoza est cargada de metforas, fantasas, sus gustos personales,
pasiones y temas que le divierten, le han interesado o inquietado.
Entre otros, las frutas, las flores, los perros bilinges, los paisajes, el mar, la lluvia, el sol, las nubes, el
sexo, los viajes, la risa, los amantes imposibles, las mujeres que odian el mundo, el destino, la traicin y
el amor.
Al finalizar la lectura de estos textos, Mara Luisa La China Mendoza subi al escenario y con su
caracterstico sentido del humor dijo sentirse contenta, emocionada, nerviosa, apenada y hasta fuera de
foco por estar en Bellas Artes viviendo un domingo extraordinario.

Fue una lectura un poco exhaustiva y por


eso creo que despus de esto ya nadie me
va a leer. Pero ahorita nos vamos a tomar
un tequila y a disfrutar del recuerdo de una
juventud que ya se fue, que es mi obra.

Estoy dando las gracias porque creen


todava que escribo. An nadie me habla
del Premio Nobel para corroborarlo, pero
tengo otros laureles nacionales. Vivimos
quiz el final del planeta y an tenemos
fuerzas para reunirnos aqu, una maana
dominical generalmente polvosa e
irrespirable, para mostrar que somos muy
felices y que leemos.

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