Análisis sobre la representación del hombre

en la novela Como Agua para Chocolate.

No debe ser sorpresa el hecho de que en esta novela, siendo una novela
completamente femenina, encontremos al hombre en posiciones secundarias y de menor
importancia. En esta, la presencia de la mujer se puede ver en todo momento, cuando la
presencia del hombre casi no se nota.

Para analizar la representación del hombre primero considero que debemos notar
a las mujeres con papeles de hombres en esta novela. Al ser poca la presencia del
hombre hay varios personajes femeninos que hay que analizar como “mujeres que toman
papel del hombre”. La dueña de la casa, Mamá Elena, es una mujer fuerte,
independiente, dominante, y la vez protectora, sin ninguna necesidad para los hombres
tomando ella entonces la posición del hombre de la casa. Este tipo de representación lo
notamos también en Gertrudis, quien demuestra estas mismas cualidades pero en una
mujer más buena que Mamá Elena. Esta toma el papel del hombre no solo al unirse al
ejército sino también en convertirse en la Generala, una posición de líder, donde logra
dominar a los hombres. Ya presentadas las mujeres con posición masculina, se puede
discutir entonces la representación del hombre en la novela.

Se puede decir que el hombre realmente no aporta nada importante en la novela

sin embargo, la novela nunca sería igual sin estos, por lo tanto, son importantes en la
novela. Se puede también decir que cada uno de los hombres representa algo único que
solo este tiene, representado cada uno algún aspecto de las necesidades femeninas.

Pedro, el amor verdadero de Tita, simboliza lo prohibido, la pasión, el fuego. No

es un hombre muy fuerte, por lo menos en la presencia de Mamá Elena, cuando
demuestra ser obediente, tímido, y sobre todo, cobarde.

El doctor John Brown, aunque Mamá Elena dice que no necesita de los hombres,
es el que cuida de la salud de la familia. El representa la salvación o recuperación, la
inteligencia, y la comprensión. El toma compasión sobre Tita, ayudándola, curándola,
cuidándola, y más que nada queriéndola.

Podemos discutir las diferencias entre estos dos hombres, pero son bastante
obvias, mejor aun es discutir la conexión entre ellos. Tita es la conexión entre ellos dos.
Ella se confunde entre estos dos hombres, no sabiendo si el amor verdadero lo tiene en la
pasión de Pedro, o en la compresión y amistad de John. Ambos personajes son
presentados incompletamente, solo demostrando parte del personaje completo. Esto hace
que el lector solo vea que estos dos hombres son completamente opuestos uno al otro.
Tita se puede quedar amada incompletamente si se va con uno solo de ellos.

El sargento Juan, el que se lleva a Gertrudis y luego se casa con ella, es muy
diferente a ambos Pedro y John, representando el la rebeldía, y la fuerza, también
representando la sexualidad.

Los bandidos son hombres abusadores, y desconsiderados, son malos y por esta
razón es que le demuestran a Mamá Elena que ellos son más fuertes que ella. Esta es la
única ocasión donde algún hombre es más fuerte que Mamá Elena.

Hay otro hombre muy importante en la novela, pero que no se ve en ningún

momento, el mulato de Mamá Elena, que representa el amor prohibido, la fuerza, y la
rebeldía, el ritmo y la sexualidad (todas las cosas que representa Gertrudis).

Hay también dos relaciones que se pueden comparar y son la de Mamá Elena y el
mulato y la de Gertrudis y el Sargento Juan. Ambas relaciones son rechazadas por la
sociedad “correcta” a la que Mamá Elena quiere pertenecer y representar, la de Mamá
Elena por estar con un Mulato y la de Gertrudis por estar con un revolucionario. Una
gran diferencia entre las dos relaciones es el hecho de que Mamá Elena lo esconde y lo
guarda en secreto mientras Gertrudis lo demuestra con orgullo.