SENTENCIA TRAS UNA DENUNCIA ESCOLAR EN JEREZ DE LOS
CABALLEROS
Prisión para una monitora que maltrató a una niña de 3 años
El fallo judicial fija 2,5 años de cárcel y el pago de 10.500 de
indemnización. Para que la menor comiera, la acusada la ataba a la silla o le tapaba la nariz. REDACCION meridaextremadura.elperiodico.com (21/06/2006)
El Juzgado de lo Penal número 1 de Badajoz ha condenado a María
Josefa Rodríguez Cordobés, técnica de Educación Infantil en el centro de educación Infantil Espíritu Santo, de Jerez de los Caballeros, a 2,5 años de prisión, como autora de un delito de lesiones psíquicas a una niña de 3 años. También se le inhabilita para el ejercicio o cargo público, profesión u oficio relacionado con la educación durante el mismo periodo de la condena.
Además, deberá indemnizar a Antonia Gómez Galván, madre de la niña
maltratada, al pago de una indemnización de 10.500 euros en concepto de lesiones psíquicas.
En la sentencia se considera probado que entre octubre del 2003 y
enero del 2004, en días no concretados, la acusada, que es personal laboral de la Junta, cometió en el centro de educación Infantil actos contra la integridad física y psíquica con la menor de tres años.
Concretamente, le apretaba la nariz para obligarla a comer, le
tiró del pelo para que se inclinase hacia adelante, le cerró la boca para que comiera, la encerró en una habitación sola cuando no quería comer y le hizo ingerir alimentos que no le gustaban, además de propinarle tortazos para corregirla y atarla con su baby a la silla para que no se moviera mientras comía.
Los psicólogos la examinaron y comprobaron los daños psíquicos que
sufría la niña: trastorno adaptativo con síntomas de miedo; ansiedad, pánico a la acusada, deficiencias en el lenguaje; obsesión compulsiva por la limpieza y pesadillas. Los médicos lograron estabilizarla en septiembre del 2004.
El fiscal solicitó tres años de cárcel y 19.050 euros de
indemnización a la madre. La acusación particular también solicitó tres años y la defensa la absolución o la pena mínima, seis meses de prisión. La sentencia puede ser recurrida