La lectura es un proceso de emisión y verificación de
predicciones que conducen a la construcción de la comprensión del texto. Resumir un texto invita a la reflexión y comprensión del contenido, de tal manera que se puedan sacar a flote las ideas principales de las secundarias diferenciándolas en un momento dado. Para esto es necesario que el lector tenga la capacidad de hacer predicciones antes de iniciar la lectura. Deberán tomarse en cuenta cierto número de características: qué tipo de texto, su estructura, subtítulos, negritas, subrayados, ilustraciones e informaciones que aporta el lector. Una vez predicho o anticipado el contenido será más fácil para el lector la comprensión del mismo. Inconscientemente, el lector conforme lee, va haciendo sus propias predicciones, se hace preguntas y va resumiendo la lectura, de esta manera se pueden captar incoherencias o desajustes. La persona que no es capaz de hacer esto, es porque no está capacitada puesto que no aprendió a leer de la forma adecuada, cuando esto sucede, la lectura es disfuncional. Antes de iniciar una lectura es necesario poseer las estrategias y técnicas adecuadas; debe de ser voluntario y placentero, debe de haber una motivación. Siendo esta la primera estrategia que se debe de tomar en cuenta al momento de enseñar o aprender a leer: la motivación, donde el niño debe de reconocer: 1. Los objetivos. 2. Que sienta que es capaz. 3. Que piense que puede hacerlo. 4. Que tiene los recursos necesarios. 5. Que tiene la posibilidad de pedir y recibir ayuda precisa. 6. Que encuentre interesante lo que se propone que haga.
En pocas palabras, que el niño sienta el placer de leer, aclare
sus dudas, que reúna información necesaria y que lea a su antojo, que está motivado ya que cuando esto sucede se obtienen mejores resultados. La segunda estrategia se basa en el conocimiento y realización de los objetivos de la lectura haciéndose la pregunta ¿para qué voy a leer? Dentro de los objetivos de la lectura está lo siguiente: 1. Obtener una información precisa. Algún dato interesante. 2. Seguir instrucciones. De un juego, una receta, etc. 3. Obtener información de carácter general. Seleccionando lo propuesto. 4. Leer para aprender. Subrayar, resumir, sintetizar. 5. Leer por placer. Valorar y criticar lo elegido. 6. Comunicar un texto a un auditorio. Comprender a quien va dirigida. 7. Practicar la lectura en voz alta. Entonar, comprender y leer con fluidez. 8. Dar cuenta de lo comprendido
Como tercera estrategia, activar el conocimiento previo, auto
preguntándose sobre el tema, recordar información, asociar ideas. En la cuarta estrategia, se establecen predicciones del texto basándose en las ilustraciones, título, encabezados, etc. La quinta estrategia se basa en promover la lectura del texto basándose en preguntas a los alumnos para de esta manera activar inconcientemente los conocimientos previos de los alumnos, es necesario hacerse las preguntas antes, después y durante la lectura para desechar o aprovechar las predicciones.