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I

Que pasa cuando se que no estas para mi,

A donde has ido que no estas donde te deje,

Al costado sur de mi recuerdo,

Instalada en el rincón más apartado de mi memoria,

Lleno de oscuridad y una soledad tan sombría.

II

Quisiera decirte cuanto te extraño,

Y no seria la cuenta de los días sin verte,

O la ultima ves que tome tu mano y dije Te amo,

Seria como tratar de cuantificar cuanto te extraño,

No la cantidad de extrañarte

Si no el sentimiento de extrañarte,

Decir que te extraño de aquí a la Luna es mentir,

No cabe el sentimiento,

Aun sobra el universo,

Y aun así no cabria el sentimiento;

Tendrías que estar en mí,

Y no lo digo, en mi mente, si no físicamente,

Y es que podría hacer un tratado,

Imagina…

“La teoría de extrañarte”,

Tal como “La teoría de la Felicidad”,

Esa que no termine de leer, porque quise sentirla


A tu lado.

Trato de decirte cuanto te extraño

Y me pregunto si alguna ves lo entenderás,

Peor aun, no se si te enteraras…

Es mejor dejarlo hasta aquí

Y no torturarme más.

III

Aquí es donde me gusta estar,

Y aunque muchas veces me veas,

Créeme, realmente no estoy,

Y es que me encuentro en mi mundo,

No tan lejos de aquí,

A veces,

Y otra más distante que el sol,

Visitándome o buscándote a ti.

Me miras, y te preguntas

¿Qué pienso?

Y simplemente habré abierto las puertas de mí

Para dejarte entrar o escaparme yo.

No es que quiera callar,

O que no tenga nada que decir,

Si tan solo pudiera decirte con palabras

Lo que mi alma siente,

Sin dejar que mis labios asesinen


A mis pensamientos.

IV

Soñarte,

Vida mía,

Es llamar a la melancolía,

Es saberte mía,

En una noche oscura y fría.

El tiempo pasa,

Y estas tan sola,

En ese rincón, tan sola,

El tiempo pasa, los días, los meses los años,

Y estas tan sola en ese rincón,

El tiempo pasa, la lluvia cae, el sol brilla

Y a las hojas se las lleva el viento,

Y estas tan sola,

En ese rincón de mi alma… Soledad.

VI

Como explicarte…

Que vienes tras de mí,

En cada paso mío, en cada suspiro,


Cada ves que respiro, tu me sigues, aferrada,

Como la sombra que no me deja,

Ni en sueños ni despierto.

VII

Soledad,

Arriba, abajo,

De un lado y de otro,

En mi mesa de noche, en mi lámpara

Y en mi cama,

En mis bolsillos vacios,

Estas aquí.

Y aun dentro de mí.

VIII

Hoy vi el fantasma de tu pasado,

Y me lleno de melancolía,

De distantes días, y

¡Ah! Soledad, de no verte más que en sueños,

Y supe que no eras tú,

Era yo,

Y esa necedad de verte donde no estas.

IX

Mariposas a todo lo largo

Y ancho,
Dentro de mí,

Que suben y bajan,

Revolotean y se abrazan,

Se funden en sí,

Mariposas,

Unas tú otras yo,

Todas formando un conjunto,

Una palabra, un sentimiento,

Mariposas,

Todo simplemente amor.

Cerrar mis ojos,

Tan solo como eso,

Si fuera así de posible

No pensar en ti.

Y dejar de respirar

Para no sentir tu presencia

Y el aire que huele a ti.

Si fuera posible

Evitar que la soledad

Me sepa tan solo a eso,

Porque estas aquí.

Siempre,

Aunque no te llame,

Vienes a mí
Disfrazada de soledad.

XI

Lo que sea,

No importa que sentir,

Que estas paredes contengan mi cuerpo

Mis ganas y mis ansias.

Lo que sea

Que me sujete a estar aquí.

Una triste canción y un cigarro que me llena de humo

Y le da formas,

En el viento,

A mi imaginación, a mi soledad.

XII

Te quiero,

No por tu fidelidad,

Porque no soy el único en tenerte,

Porque estas, inevitablemente a mi lado,

Compartiendo mi tiempo,

Mis noches, mi cama y mi mesa,

Compartiendo mi vino y todo el tiempo cuando

No esta ella.

Te quiero

No porque seas la dueña


De mis días y todo mi tiempo.

Te quiero, porque estas aquí,

Inevitablemente,

Querida soledad.

XIII

Sentir tu presencia,

Es sentir el mundo, el aire el cielo y el sol,

Todo lo que es mi mundo,

El roce de una hoja con el viento.

Sentir tu presencia,

Amiga,

Es sentir que estas cerca de mí,

Aunque tú no me mires a mí.

Sentir tu presencia, es contemplar tus ojos,

Aunque el fuego de tu mirada

No me queme a mí.

Sentir tú presencia,

Es verte a cada paso, a cada instante

En cualquier parte…

Y al cerrar mis ojos.

XIV

Yo no quiero que me dejes de soñar,

Yo no quiero que aun pienses en mí,

Yo no quiero,
Que pienses en volver,

Yo no quiero una manzana antes de cenar,

Yo no quiero,

Marcharme al pasado,

Y encuentres soledad,

No quiero esta vida sin ti.

XV

El no verte trae un poco de paz

En medio de la tormenta de tu ausencia,

Porque estas en mi mente

En calma, esa que pierdes con tu presencia

Y los arrebatos que traes contigo,

Esas ganas locas de amarte y de fundirte en mi piel,

Llevarte siempre donde voy,

Como cuando te llevo en mi mente.

XVI

Hoy no estas donde todos creen verte,

¡Locos¡

Sí supieran que sus ojos los engañan.

Que es tu reflejo a quien hablan,

No saben que estas a mi lado

Donde nadie más que yo te ve,

Donde mi corazón te habla


Y mi mente te abraza.

XVII

Ebrio de tanto extrañarte,

De creerte lejos,

Y esquiva de pronunciar mi nombre,

De sentirte fría e indiferente

A estas ganas necias de verte,

XVIII

Estoy cuando menos

Con una parte de lo que te llevaste,

Con todo lo que quise que te llevaras,

Yo, tan solo,

Esto que me dejaste,

Todo el recuerdo tuyo

Y las ganas de amarte,

Esa necia manía de amarrarte a mis pensamientos

Y evitar que huyas de mí cada tarde, cada noche,

Cuando más se me acentúa la melancolía.

XIX
Hablando de olvidos,

Hay uno que se me olvido,

Aquel que no recuerdo donde deje,

El mismo que se me perdió con el paso de los días

Y el ligero correr de los años,

Fácil lo deje en el ayer,

Por no pensar en mañana.

Hablando de olvidos,

Se me ha olvidado olvidarte ya…

XX

Tú me das miedo,

Porque temo perderme en el abismo de tu mirar,

Y enredarme en la maraña que es tu pelo,

Y saber que de ahí no podre salir,

Tú me das miedo,

Saber que necesitare más de tu piel,

Más de tus labios y tus caricias,

Cada día,

Tú me das miedo,

Porque me amas y te amo

Un poco cada día, más.


XXI

Te escucho en el viento,

Con cada roce de las hojas

Cada ves que se agita una flor, una rosa, una margarita,

Te escucho en el viento,

Cabalgando en las ondas que mecen los trigales, el pasto

Y los olivares,

Te escucho en el aleteo de las mariposas,

En la lluvia que cae,

Te escucho en abril, primavera mía.

XXII

Estas aquí,

Inevitable, a mi lado,

En mis más oscuras horas,

En el remanso de mis tardes soleadas,

En el ajetreo que empieza el lunes

Y llega, hasta cansada la semana.

XXIII

Nadie como tú
Y es que no quiero equivocarme

Alguien que entienda de caricias,

Que aprecie cada amanecer,

Con tu forma de amar,

Que sueñe después de soñar

Que sepa volar y con los dos pies aterrizar,

Con quien anochecer,

Que tenga mañana, más que ayer,

Alguien que contenga tu Luz.

XIV

Estas apretando mis ideas,

Mis pensamientos,

Estas apretándome el corazón

Y metiendo mariposas dentro de mí,

Estas ocupando su espacio,

Lentamente, como pasa un domingo sin futbol,

Estas acabando mi paciencia

Y mi soledad,

Decirte que me divierto a tu lado, es mentir,

Porqué hablas más de la cuenta, y aun eso me gusta de ti,

Me gusta como ríes, como callas,

Me gusta el tono de tu vos, la expresión de tus ojos,

Aun más, me gusta que no necesites compartir,


Y aquí me pregunto si pensaras en mí…

XXV

Te extraño cuando callas,

Porque estas como ausente

Mirando, que se yo,

Que ves mas allá?

El sol, la luna,

XXVI

Quiero de ti,

Tu sonrisa y el tono de tu vos,

Tus miradas cuando te enfadas

Y las palabras de tus labios,

El humor de tus malos ratos,

Tu soledad.

Quiero de ti

El calor de tus brazos

La miel de tus labios

Verme en tus ojos

Y saber que suspiras por mí.

XXVII

Te sueño,
Cuando bailan las hojas con el viento,

Cuando el trigo crece y germina,

La lluvia cae y moja el suelo,

Cuando nace un niño y se renueva la esperanza.

Te sueño,

Con el pasar de los días

Y el ligero correr de los años,

Te sueño cuando duermo

Y aun despierto

Te sueño más

XXVIII

Pensar que aun te amo

Es torturar mi alma,

Porque he tratado de convencerla de que te deje de amar,

Que ya no pienso en ti,

Que el aire no trae tu aroma,

Que no despierto pesando en ti,

Ni duermo abrazando el recuerdo de tu cuerpo.

Hay tantas cosas que he olvidado de ti,

El color negro de tus ojos,

El contorno de tu cintura,

El tono de tu vos,

Tus costumbres y manías,

Tú forma de dormir y de amar…


He tratado de convencerme que te he dejado de amar…

XXIX

Me amas, cuando abres los ojos,

Cuando despiertas a la vida

Que hay a tu al redor

Cuando vuela tu imaginación

Y se instala en el lado sur

De mi alma y a la derecha de mi corazón.

Justo donde nuestras almas se encuentran…

XXX

Del cielo un angelito ha descendido,

Cantando canciones de cuna

Y en tu vientre se ha dormido,

Sonríe el niño mío,

Cuando sale el sol,

Cuando la luna brilla,

Sabe él que sus padres esperan el noveno mes.

XXXI
Lo mejor de ti, esta en mi memoria

La mejor sonrisa, la mejor caricia,

La mirada que cautiva, que enternece,

Que enamora.

Lo mejor de ti, va conmigo,

Dentro de mi, en el fondo de mi alma

En el centro de mi recuerdo.

Como el murmullo del mar dentro de un caracol,

Como se grava el sonido del viento en los bosques,

Lo mejor de ti va dentro de mí.

XXXII

Hay canciones que en el momento

Definen lo que sientes,

Que sin querer el compositor sintió, exactamente,

Lo que llegaste a sentir en ese momento.

Por alguna mágica coincidencia, alguien pudo sentir lo que ya alguien

Sintió,

Es decir el amor es universal y conlleva una serie de

Sensaciones que tarde o temprano todos sentimos,

Cualquiera que sea nuestra condición, nuestro idioma,

Nuestra cultura, o nuestra propia forma de sentir,

En fin…

Sentimos Amor!
XXXIII

Osita de mi vida,

Quisiera bajarte las estrellas

Y hacerte un collar del cual también prenda la luna,

Quisiera escribirte mil versos y

Decirte cosas bellas,

Llevarte a la cama miles de rosas,

Quisiera darte tantas cosas,

Y por ello te he entregado lo mejor que he hallado…

Nuestro Osito.

XXXIV

Ahora que estas en mi alma,

dentro de mí,

instalada en el centro de mi corazón,

en el meridiano de mi pensamiento,

con lo mejor de ti y con ese pedacito nuestro

que es el amor,

que llena un mundo, un universo,

que inicia y da vida,

te amo,

por lo que eres,

por quien soy,

porque el sol brilla, porque el cielo es azul,

la lluvia cae y el agua moja…


te amo.

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