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LOS ANTECEDENTES HISTORICOS SOBRE LA REIVINDICACION

MARITIMA BOLIVIANA.

Títulos historico de Bolivia sobre el MAR

La soberanía marítima de Bolivia está inscrita en el origen antiquísimo del Tawantinsuyo, que
había alcanzado su mayor esplendor, el cual a fin de una mejor administración se había dividido
en las cuatro grandes regiones geográficas: Chinchasuyo, Antisuyo, Contisuyo y del lado del Sur
el Collasuyo, donde se fundaría la República de Bolivia. Desde épocas milenarias radica ya la
base natural y positiva posesión de acceso marítimo.

Antecedentes Históricos

Virreinato del PERÚ

Establecida por España en 1542 Audiencia de Charcas


Ley de recopilación de las Indias 9 y 12
18 abril de 1548; Pedro de la GASCA definió los limites en el paralelo 25° , más al norte Valle
COPIOSO como de marcación mas al norte de Chile . Así confirma la carta de Don Pedro de
Valdivia conquistador de Chile, al Emperador Pedro de VALDIVIA en octubre de 1550, la cual
hace mención textual del paralelo 25° posesión que fue sistemáticamente reconocida por los
mapas en el mundo, hasta 1880. (PAPOSO en el paralelo 25°).

Virreinato del Río de la Plata

Desde 1776 la audiencia de Charcas que dependía de dicha Audiencia, pasó a formar parta del
Virreinato del Río de la Plata

Bolivia se independizó en 1825 y en 1829 el presidente Andrés de Santa Cruz fundó la provincia
de Antofagasta.

Observamos que Chile nunca cuestionó la soberanía marítima de Bolivia estipuladas en sus
Constituciones políticas de 1822-1823 y 1833.

Antes de la denominada Guerra del Pacifico, Chile limitaba al norte con Bolivia, el desierto de
Atacama (132.000 km2) de por medio, el tratado del 10 de agosto de 1866 fijado como límite
septentrional para Chile en el paralelo 24°.

En 1879 Chile tenía una superficie de 576 mil kilómetros cuadrados, La guerra del Pacífico
que se inició ese año y finalizó en 1883, se saldo con el apoderamiento por parte de Chile de más
de 450 kilómetros de costa y más de 220 mil kilómetros cuadrados, pertenecientes a Bolivia y al
Perú. Este último perdió las extensas provincias del Tarapacá y Arica, el primero la de
Antofagasta cuyo territorio limitaba con el Océano Pacífico.

En realidad esta acción expansionista e invasora, sin declaratoria de guerra, comenzó el 14 de


febrero de 1879 precisamente en territorio boliviano y con la ocupación de Antofagasta por
tropas chilenas trasladadas por vía marítima, fue una guerra de conquista propiciada por una
pujante y agresiva burguesía chilena, la cual contó con el incondicional respaldo económico y
militar de Inglaterra, potencia imperial de la época.

El 5 de abril de 1879 Chile declaro la guerra simultáneamente a Bolivia y al Perú, la contienda


fue desigual, Chile se havia armado anticipadamente a la medida de sus aspiraciones.

Chile se apodero de la provincia de Antofagasta y Bolivia perdió su litoral. Es claro que Bolivia
vencida, esa cláusula le fue impuesta con el poderoso argumento de las armas, como nos relata;
Santiago Carrillo. Chile pudo de esa manera limitar al norte con el Perú y en eso fue previsor
Lima jamás ha renunciado a la eventualidad de recuperar los que fueron sus territorios sureños,
como relata el escritor chileno Hérnan Úribe.

EL DENOMINADO TRATADO DE “PAZ Y AMISTAD” DE 1904

En 1880 se firmó entre Bolivia y Chile un Tratado de Tregua y en 1904 se firmo el funesto y
nefasto “TRATADO DE PAZ Y DE AMISTAD”, el cual Bolivia tuvo que firmarlo con el fusil
sobre el pecho, con amenazas de nuevas invaciones.
El 13 de agosto de 1900Abraham Koning, Ministro Plenipotenciario de Chile de esa época
escribía una nota al Gobierno boliviano, en los siguientes términos:

“Terminada la guerra, la nación vencedora impone sus condiciones y exige el pago


de los gastos ocasionados. Bolivia fue vencida, no tenía con que pagar y entregó el
Litoral.“ ... Es un error muy esparcido y que se repite diariamente en la prensa y
en la calle, el opinar que Bolivia tiene derecho de exigir un puerto en
compensación de su Litoral. No hay tal cosa: Chile ha ocupado y se ha apoderado
de él CON EL MISMO TITULO QUE ALEMANIA ANEXO AL IMPERIO LA ALSACIA
Y LA LORENA ...”
Nuestros derechos nacen de la victoria, la ley suprema de las naciones” ... “Que el
Litoral es rico y vale muchos millones, eso ya lo sabíamos. Lo guardamos porque
vale, que si nada valiera no habría interés en su conservación.”

Despues de casi un siglo y medio de enclaustramiento, Chile continua utilizando como


argumento, que el asunto de la mediterraneidad de Bolivia es un asunto resuelto por el “Tratado
de Paz y Amistad” de 20 de octubre de 1904. “Que siendo los tratados la base de la estructura
jurídica internacional, no deben revisarse.” Estas maniobras dilatorías solo tienden a perpetuar
el más que centenario enclaustramiento de Bolivia. Recordemos a los anteriores gobiernos
chilenos, asi como al actual gobierno de la senora Bachelet, que los tiempos han cambiado que
un Estado no tiene el derecho de mantener una situación que perjudique tan claramente a otro
Estado, no se puede aceptar un criterio de fines del siglo XIX para mantener esta situación, es
un anacronismo de hablar de Integración regional y continental sin antes resolver el mas que
centenario enclaustramiento de Bolivia.
Referente a la posición “rigurosamente legalista” de Chile que parte del principio que “siendo los
tratados la base de la estructura jurídica internacional, no deben ni pueden ser revisados o
modificados”. Observamosque en materia de tratados existen dos principios en derecho
Internacional clásico que parecen funcionar de manera contradictoria, pero en realidad son
complementarios:

1° PACTA SUND SERVANDA


Los tratados deben ser cumplidos en los términos estipulados

2° REBUS SIC STANTIBUS


Las modificaciones de los tratados se hacen necesarias, cuando las condiciones
que los condujeron a su adopción resultan sustancialmente alteradas. (Camacho
Omiste, enero 2000).

El historiador boliviano Manuel Frontaura Argandeña, presento un excelente análisis sobre la


licitud del tratado de 1904, anotó que el objeto de los tratados debe ser, según los principios del
derecho internacional, “posible y lícito”. En apoyo de su afirmación, cita al venezolano Simón
Planas Suárez, de la Asociación de Derecho Internacional de Londres, quien estableció que “los
tratados internacionales han de tener un objeto lícito y ser, consiguientemente,
física, moral y jurídicamente posibles”. A su vez, el internacionalista argentino Lucio M.
Moreno Quintana, en su Tratado de Derecho Internacional, dijo que “todo vicio en la
expresión del consentimiento motiva la nulidad del acto”.
Por su parte, el internacionalista chileno Miguel Cruchaga Tocornal, en sus Nociones de
Derecho Internacional (Madrid, 1925), sostuvo que “hoy los tratados se suscriben no sólo
con el deseo de respetar recíprocamente los derechos de los Estados, sino de servir
al progreso de la humanidad”. Frontaura Argandoña comentó que el Tratado de 1904
sirvió para estrangular a Bolivia. “Cuando mediante un tratado se enclaustra a toda
una nación, se comete la inmoralidad de poner cadenas al progreso de la
humanidad”.
La Carta de la OEA, a su vez, indica que “ningún Estado podrá aplicar o estimular
medidas coercitivas de carácter económico y político para forzar la voluntad
soberana de otro Estado y obtener de éste ventajas de cualquier naturaleza”.

Cabe destacar, que el Senado boliviano de la época rechazó por mayoría de 10 votos en contra y
5 a favor el mencionado tratado, pero una Cámara de Diputados dócil lo aprobó por 37 a favor y
20 en contra.
El patriota e ilustre historiador chileno Cástulo Martinez escribío en su libro” Chile Depredador”
que “Todo tratado celebrado entre países es un documento, susceptible de errores por lo tanto
pueden ser revisables, la historia demuestra que varios acuerdos fueron revisados, corregidos y
mejorados para ambas partes”
En ese contexto, cita un hecho que sucedió el 16 de junio de 1978 cuando el gobierno de los
Estados Unidos de Norteamérica y el de Panamá celebraron dos nuevos tratados sobre el Canal
de Panamá, corrigiendo de esta manera los defectos de un anterior tratado vigente hasta esa
fecha. Esa situación sucedida entre los Estados Unidos y Panamá, además otras experiencias en
Europa, demuestra que todo tratado puede ser revisado para ser mejorado.
Entre Chile y Bolivia según dan cuenta los datos históricos, se procedió a revisar el Tratado de
1866 firmando después un nuevo y más corregido Tratado en el año 1874.

CHILE NO CUMPLE, Y NUNCA CUMPLIO EL TRATADO DE 1904


La mayoría de las autoridades chilenas afirman “que el Tratado de 1904 es el mejor tratado del
mundo, en lo relativo al Libre Tránsito”.
• En virtud del tratado de “Paz y Amistad” Bolivia se vio obligada de ceder su Litoral a cambio
de compensaciones que Chile debía cumplir pero que nunca cumplió ni cumple el irrestrictito y
libre tránsito que a perpetuidad estipula el mencionado tratado.

1.- Las exportaciones bolivianas pagan un costo elevado por pasar la frontera. La circulación de
mercaderías no es gratuita. El libre tránsito se incumple invocando argumentos administrativos,
sanitarios, de seguridad y otros. Por otra parte las autoridades e instituciones hacen cobros
excesivos a los transportistas bolivianos.

También se hacen cobros arbitrarios por el servicio de transferencia de contenedores en tránsito


y por el traslado de contenedores vacíos desde el puerto hasta los depósitos navieros. Desde la
concesión del Puerto de Antofagasta a la empresa Antofagasta Terminal Internacional (ATI), el
1° de marzo del 2003, las tarifas de porteo de minerales a granel boliviano, han aumentado en
un 26 % por tonelada. A esto se suma el doble manipuleo de la carga desde el centro de acopio
de Portezuelo – cerca a Antofagasta – hasta el puerto, que representa un costo adicional de 2
USD/ton. Más el costo de almacenaje. Debido a este encarecimiento, VARIAS EMPRESAS
BOLIVIANAS SE HAN VISTO OBLIGADAS A DEJAR DE EXPORTAR MINERALES.

2.- En ocasiones especialmente sensibles para Bolivia, se ha incumplido el Libre Tránsito de


manera flagrante, y especialmente dañina a los intereses de Bolivia. Por ejemplo, durante la
Guerra del Chaco de Bolivia con Paraguay, Chile - que se había declarado neutral en el conflicto
decreta, el embargo del transporte de armas y cargas hacia Bolivia.
Luego está la manipulación política del tratado y la intromisión en los asuntos internos de
Bolivia, así, después de la Nacionalización de Minas en Bolivia el 31 de octubre de 1952, con una
medida administrativa unilateral .Chile inmovilizó de esta manera los embarques de minerales
bolivianos a los mercados mundiales.

3.- En muchas ocasiones las protestas laborales y paros en los puertos chilenos que no dejan de
ser legítimos, pero que afectan el tránsito de mercancías de y hacia Bolivia. Por otra parte con el
proceso de privatización de sus puertos en que está empeñado el actual gobierno chileno, los
derechos y obligaciones bolivianos de libre tránsito, que son también obligaciones
internacionales del Estado de Chile, estipulados en el Tratado de 1904 y las Convenciones de
1912 y 1936, no pueden ser transferidos a un agente privado. Se trata de responsabilidades
intrínsecas del Estado chileno desde las perspectivas del Derecho Internacional. Las empresas
privadas concesionarias no pueden ser sucesoras de las obligaciones que el Estado de Chile tiene
con el Estado boliviano.
4.- Además con la privatización de los Puertos de Antofagasta y Arica han incrementado los
costos de las exportaciones de minerales, lo que incide fuertemente en la competitividad de este
sector productivo boliviano. Sector muy importante en Chile y que no sufre esas dificultades de
competitividad, por otra parte la licitación de todos los sitios de atraque establece un monopolio
que incrementará, como los monopolios suelen hacerlo, los costos y los servicios en este puerto
en el que la carga de Bolivia constituye el 80% de la carga movilizada.

5.- En base al Tratado de 1904 se ha construido una agencia aduanera boliviana Administración
de Servicios Portuarios ASP-B. Que se encarga de supervisar el tránsito y almacenaje de y a
Bolivia. La privatización de los puertos limitará también las potestades de ASP-B.
Los únicos puertos que funcionan para Bolivia son los de Antofagasta y Arica. Según el tratado
debían buscarse otros puertos que lo hagan. Asimismo no se respetan los derechos de propiedad
de ciudadanos bolivianos en territorios chilenos. Los propietarios bolivianos de las salitreras del
Toco eran obligados a presentarse a defender sus derechos por el término de 4 meses a partir de
la imposición de una ley relativa a esto.

6.- Chile concedió a Perú, país que tiene abundancia de costas, las siguientes prerrogativas;
Agencia Aduanera, Muelle de Atraque, Estación Terminal para Ferrocarriles, observamos que
Bolivia debería recibir el mismo tratamiento y nunca fue así.

Repercuciones económicas y sociales del enclaustramiento

El enclaustramiento marítimo es uno de los problemas históricos de resolución pendiente,


ningún Gobierno ni institución estatal boliviana han promovido una investigación científica
sobre el impacto económico que tuvo sobre el desarrollo del país la pérdida del Litoral

En Chile nunca se ha debatido a profundidad que la riqueza que fue boliviana es la que le ha
permitido sentar las bases de su desarrollo. No son explicables los avances económicos de Chile
sin pensar en el salitre y, especialmente, el cobre. En ese país el cobre es el sustento de la
economía. Aún hoy, con la alta diversificación de las exportaciones chilenas, la venta del cobre
sigue siendo de un tercio del total (7.300 millones sobre 20.000 millones de dólares).

Las minas de cobre se hallan ubicadas especialmente en la segunda región chilena, antiguo
territorio boliviano, donde se encuentran las minas de Chuquicamata (el yacimiento más grande
de este mineral en el mundo). Si bien existen muchas empresas mineras privadas que extraen
cobre, la empresa estatal aporta al fisco más de mil millones de dólares anuales.
Chile se convirtió en el primer exportador mundial y en el segundo productor de cobre después
de Estados Unidos. Chile, hasta la fecha, ha exportado más de 20 millones de toneladas de
cobre, cifra difícil de ser evaluada con precisión, se establece que, este nivel de exportación es
comparado con las reservas de todo el continente asiático, equivalente a cerca de 1.5 millones de
toneladas a las que habría que agregar las reservas de toda Europa Occidental, calculadas en 2.3
millones de toneladas y de la ex Unión Soviética que representan alrededor de 16 millones de
toneladas.

Basados en esa información disponible es posible establecer que en el último siglo Bolivia perdió
o dejó de percibir 300 mil millones de dólares por la exportación del cobre, por los impuestos y
utilidades derivados de la explotación de ese mineral, por la magnitud de la inversión extranjera
orientada a esos yacimientos y por el elevado coste que ahora le supone en la importación y
exportación de productos hacia y desde nuestro país
"El cobre ha desempeñado un rol principal en la economía chilena durante el siglo XX", según el
investigador Patricio Meller. Dicha afirmación no es para menos. Sólo entre 1960 y 2000, las
exportaciones totales de cobre del vecino país alcanzaron a superar los 95 mil millones de
dólares. Si a eso se agrega un promedio de 6.000 millones año entre 2001 y 2003, y pese a la
baja de su cotización en el mercado mundial, se sostiene que las cifras superan los 107 mil
millones de dólares. Un 80 por ciento de esa cifra proviene de la actual segunda región de Chile,
antiguo territorio boliviano.

Según el Banco Central de Chile, las transferencias de la Gran Minería del Cobre (GMC) al
Tesoro General de la Nación entre 1980 y 1999, lo cual incluye impuestos más utilidades,
registró un promedio de 1.050 millones de dólares al año, lo que equivale a que en dos décadas
la explotación y exportación de ese mineral le generó a la economía de ese país no menos de
20.000 millones de dólares.

Siempre según datos oficiales chilenos, el sector privado del cobre contribuyó a las
exportaciones en el período 1994-2000 alrededor de 6.000 millones de dólares, lo cual implica
un promedio anual de 1.000 millones de dólares.
Haciendo referencia siempre al cobre, la inversión privada en la década de los 90 alcanzó a no
menos de 12.500 millones de dólares, equivalente a un dos por ciento del PIB de Chile. La cifra
es mucho más alta si se toman en cuenta las décadas precedentes

A partir de datos oficiales del Banco Central de Chile, de investigaciones realizadas por
estudiosos de la minería del país vecino y de algunas cuantas estimaciones hechas por
economistas bolivianos, es posible concluir que Chile se incorporó con fuerza al mercado
mundial gracias a los recursos naturales de Bolivia.

COMPETITIVIDAD
Los altos costos de transporte y servicios portuarios afectan negativamente la competitividad de
los productos bolivianos en el comercio internacional y dificultan la expansión de su comercio
exterior, que se concentra principalmente en el intercambio con los países vecinos.

Bolivia tiene dificultad para proyectarse hacia la Cuenca del Pacífico, una de las cuencas de
mayor desarrollo económico y comercial del mundo en las últimas décadas.

La mediterraneidad limita la competitividad de la economía boliviana, incidiendo


negativamente en la atracción de inversiones extranjeras y en la captación de procesos de
transferencias de tecnología.

Entre otras actividades, se pueden mencionar el transporte carretero, el transporte ferroviario,


el uso de puertos y el turismo.

Los costos de transporte y servicios portuarios exigidos por Chile deben pagarse en moneda
dura, lo cual representa un apreciable drenaje de divisas en favor de Chile.

• Un alto porcentaje de recursos está destinado al pago de servicios de transporte y seguro.

• Los países mediterráneos pierden 0,7 por ciento en sus tasas de crecimiento.

• Encierro limita la competitividad de la economía boliviana y afecta a las inversiones.

Estudios realizados por diversos organismos internacionales demuestran el impacto negativo


que tienen los sobre costos económicos que pagan los países mediterráneos, principalmente
Bolivia, que pierde más de 4.000 millones de dólares aproximadamente cada año.
Los estudios del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de la Conferencia de las Naciones
sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), sigla en inglés, realizados en 1994 y 2001, establecen
que un alto porcentaje está destinado al pago de servicios de transporte y seguro. Bolivia encima
se ve perjudicada por su diversa y difícil geografía.

Entre otras actividades, se pueden mencionar el transporte carretero, el transporte ferroviario,


el uso de puertos y el turismo. Los costos de transporte y servicios portuarios exigidos por Chile
deben pagarse en moneda dura, lo cual representa un apreciable drenaje de divisas en favor de
Chile.

BIBLIOGRAFIA.

Libro : Historia Bolivia o Chile

http://www.contexto.org/pdfs/bolivia.pdf
Se estima que Bolivia pierde cerca de un ocho por ciento del PIB por enfrentar su falta de acceso
al Pacífico, lo cual, en términos generales, significa unos 700 millones de dólares anuales. Eso
quiere decir, subraya Villegas, que en una década se perdieron alrededor de 7.000 millones de
dólares y en doce décadas y media (1879-2004), la suma alcanza a cerca de los 100 mil millones
de dólares

La mediterraneidad le ha producido a Bolivia una pérdida millonaria y un daño de gran


intensidad. Se señala, que de acuerdo al análisis del economista Jeffrey Sachs, los países sin
acceso al mar pierden 07 puntos porcentuales en tasas anuales de crecimiento. Aplicando el
criterio de Sachs, sólo en 1997, se habrían perdido 593 millones de dólares en el PIB. boliviano,
ya que la tasa real de crecimiento del PIB de 4,19 por ciento hubiese llegado a 4,89 por ciento y
en los últimos 10 años se habrían perdido más de 4.000 millones de dólares.

La industria del cobre hasta antes de 1971, año en el cual se produjo la nacionalización de ese
mineral en el Gobierno de Allende, represen- taba el 75 por ciento del total de exportaciones
aportaba el 30 por ciento de los ingresos tributarios de ese país. Hoy, con 4.7 millones de
toneladas exportadas cada año, que representan el 35 por ciento de la producción mundial de
cobre representa un 40 por ciento de las exportaciones; nada amenaza con que vaya a dejar de
ser la principal generación de divisas de la economía chilena.

Al carecer de una costa soberana, Bolivia no pudo entrar en contacto con las principales
corrientes migratorias del siglo XIX y de principios del siglo XX, que históricamente se
concentraron en los bordes de Sudamérica.
Un segundo grupo de efectos se traduce en los altos costes de la importación y exportación de
productos, la incidencia en el PIB nacional es mucho mayor si se toma en cuenta el impacto que
el contrabando que proviene de ese país tiene en la economía boliviana, cuyos cálculos
conservadores giran alrededor de los 1.000 millones de dólares al año.

El mejor remunerado en ese país para profesionales, ejecutivos y obreros, subraya el


investigador Meller, es justamente el sector minero, los datos de la investigación, tomados
directamente del Banco Central de Chile, se encargan de confirmar que la gran industria del
cobre generó en el período 1960-2000 un promedio total de 45.000 fuentes de trabajo. El
mismo investigador señala que las fuentes de trabajo en la mediana y pequeña minería del cobre
alcanzaban a unas 6.000 en la década de los 90.

APOYOS INTERNACIONALES
Acaso se olvida la cancillería chilena que hay antecedentes a favor de la demanda de Bolivia. En
1979 al cumplirse el centenario de la guerra, la Organización de Estados Americanos (O.E.A)
respaldó la salida al mar por 25 votos a favor y en contra el solitario de Chile, existen
actualmente 11 resoluciones de la OEA a favor de la causa boliviana. En 1983 los cancilleres y los
movimientos de los No Alineados apoyaron, de nuevo, sin vacilaciones la petición de La Paz.

En le transcurso de estos últimos años la demanda boliviana ha recibido del presidente Hugo
Chávez F., ex presidente Jimmy Carter, del propio ex secretario general de la ONU, Kofi Annan
en su momento el gobierno de Cuba cuando el Presidente Fidel Castro R., dijo que “Cuba apoya
la demanda boliviana porque es justa”, hasta el Vaticano se pronuncio en sentido favorable a
Bolivia, La China. El canciller de Brasil, Celso Amorim quien adujo que “si bien es un problema
bilateral, lo es también de interés regional”, el día 13 de este mes en visita realizada por la
Presidenta de Chile Señora Bachelet a Cuba, quien tuvo un encuentro con el ex presidente de
Cuba, el Comandante, Fidel Castro Ruz dijo:

"Bolivia sufrió una extraordinaria humillación histórica en aquella contienda. No sólo le


arrebataron la costa marítima y la salida al mar, sino que privaron a ese país, de origen
auténticamente americano, sobre todo aimaras y quechuas, de extensos territorios muy ricos
en cobre que constituían la mayor reserva del mundo, que habiendo sido explotadas durante
130 años, hoy su producción se eleva a 5, 364 millones de toneladas anuales y aporta a la
economía chilena alrededor de 18 mil 452 millones de dólares anuales", también se refirió a:
"Otros valiosísimos minerales y productos naturales, algunos ya agotados y otros nuevos de
altísimos precios, han aparecido. No se sabe cuáles de ellos eran chilenos y cuáles bolivianos",
de esta manera el líder cubano, sacudió conciencia de los países sudamericanos y el mundo,
condenando tan gigantesca injusticia y que en estas condiciones es imposible de construir una
verdadera integración Latino Americana.

El Presidente de Bolivia Evo Morales en su visita a Rusia agradeció la solidaridad y el apoyo del
líder de la Revolución cubana e invito a la comunidad internacional apoyar la demanda
boliviana, la reacción del gobierno chileno no se dejo esperar, a través de su vicecanciller ,
aduciendo que en si el tema no se trata de forma bilateral no se podrá proseguir avanzando en la
denominada agenda de 13 puntos, una vez más observamos que la postura chilena es dilatoria, y
pone al desnudo su objetivo final que es de enterrar para siempre la reivindicación marítima
boliviana, con esta actitud Chile es observado como un país que sólo mira hacia los Estados
Unidos y Europa, abandonando cualquier esfuerzo de integración regional y continental.

EL ACTA DE LOVAINA
Seminario Bolivia – Chile – Perú

En el 14 de septiembre del 2006 se desarrollo Bélgica, auspiciada a la Pontifica Universidad


Católica de Lovaina, este proyecto tuvo su origen en una manifestación organizada por el Comité
de Solidaridad para Bolivia, presidido por el eminente intelectual, el Profesor François Hautart,
ante la embajada de Chile en Bélgica, el 23 de marzo de año 2004, fue desde ese momento que
comenzamos a elaborar estrategias que nos permitieran hacer conocer el injusto
enclaustramiento, del cual Bolivia es victima, todo este proyecto conto con el asesoramiento del
abogado Reynaldo P. Estrada Aspiazu, ex juez al merito, y actual Director Distrital del Consejo
de la Judicatura en el Distrito en La Paz, Bolivia.

Fue así que la Prestigiosa y pontifise Universidad Católica de Lovaina, se constituyo en la piedra
angular de este proyecto, realizamos un trabajo mancomunado preparando dicho conclave,
durante dos años y medio, que organizamos, desde la perspectiva que la demanda marítima era
justa, y la satisfacción de la reivindicación marítima boliviana emergía como un factor clave en
la construcción de los lazos de cooperación que faciliten la integración regional y su desarrollo.

Este seminario duró del 9 al 14 de septiembre del año 2006, deseamos mencionar el invalorable
y muy ponderable esfuerzo realizado por los ilustres profesores de la Universidad Catolica de
Lovaina; el Rector, Bernard Coulie, los eminenstes profesores: M.Molitor, F.Hautart, F. Debuys,
P.Lowenthal, M. Munting, C. Duqué, así como los consejeros Isabel Yepez, Jorge Magasich,
Marcelo Estrada Iturri y mi persona.

Los resultados fueron positivos en el sentido, que este diferendo fue tratado de forma trilateral
con representaciones académicos de los tres países Chile, Perú, Bolivia y como mediadora la
prestigiosa Universidad Católica de Lovaina.

Empero, hubiéramos deseado que se aborde el tema histórico, imaginamos mal resolver un
problema sin abordar el mismo, otro elemento que desgraciadamente no se trato es el aspecto
jurídico, ese punto nos hubiera servido a entender de que forma se concibió el mal llamado
tratado de “Paz y Amistad”, también, se abordo el tema de algún tipo de compensación por
parte de Bolivia a Chile. Es INCONSEVIBLE en pensar en algún tipo de “compensación” y por
último en la elección de ciertas personas que componían les respectivas delegaciones que no
necesariamente eran las mas acertadas en participar en dicho concleve.

Finalmente, consideramos, que la REINTEGRACIÓN marítima de Bolivia es un DERECHO


y no se trata de una simple aspiración o un anhelo como lo consideraron las delegaciones de
académicos y humanistas de Chile y Perú, en su conjunto a excepción del Sr. Alberto Adrianzen
Merino, de nacionalidad peruana.

CONCLUCIÓN
El enclaustramiento de nuestra nación tiene profundas implicancias sociales (además de las
económicas y culturales), observamos, que la gran mayoría de los gobiernos chilenos, mantienen
de forma deliberada nuestro encierro, haciendo de Bolivia una prisión a cielo abierto, la postura
chilena opta por una actitud seudo legalista, ya que en reiteradas ocasión Chile modifico y
transgredió distintos tratados, esto en función de sus interés del momento, por otra parte en la
actualidad la postura chilena es totalmente retrograda, no acorde con nuestros tiempos,

La creciente gravitación de Bolivia en el contexto del Cono Sur es una cuestión de tiempo, ya que
la geografía ha colocado a nuestro país en un punto tan estratégico que nada que sea realmente
importante podrá prescindir de Bolivia, esto siempre y cuando el actual gobierno sepa darle la
utilidad y oportunidad del caso y medida que se van desarrollando los Corredores
Interoceánicos que unen a Norte y Sud y sobre todo a Este con Oeste, sirviendo de nexo entre las
economías más grandes de la región.

También, Bolivia por el peso específico de sus grandes reservas energéticas (gas y petróleo) se
convierte de una manera natural, en el centro de Integración Energética no solo de la sub
región, sino del continente (energía, hidrocarburos, telecomunicaciones, transporte continental
e intercontinental) conjuntamente con los países grandes que cuentan con este recurso (gas,
petróleo) y que, en el marco democrático e integracionista que esta en construcción en el
continente, no será difícil que se encuentren consensos basados en intereses comunes.

Una actitud inteligente y oportuna por parte de Chile que cuenta con más de 4.700 km. de costa,
sería sin duda más acertada que la obcecación que caracteriza a las recalcitrantes posiciones
chilenas o a aquellas que siempre han estado declarándose abiertas al diálogo, por afuera,
mientras en los hechos se niegan al contacto.

Empero, el acercamiento que se viene propiciándose desde la llagada al Gobierno del


Presidente, Evo Morales Ayma, así como las urgentes e imperiosas necesidades energéticas que
Chile requiere, no tiene que servir, o ser la excusa para que este último busque acercamiento con
Bolivia, estos temas tienen que ser tratados por separado, tanto el tema marítimo como la
integración energética.

El ilustre escritor chileno, Tomás Moulian se refiere de este tema en estos términos:
“Nada deben tener que ver nuestros gestos de reconciliación con Bolivia con los
negocios del gas “. Tienen razón aquellos que dicen que los reclamos políticos no son solo un
asunto contra Chile. También revelan la postura de ciertos grupos que pretenden que esa gran
riqueza no represente solo el negocio de las transnacionales, sino la posibilidad de un polo
nacional de desarrollo, Moulian continua su reflexión diciendo: “Hay pues que separar
ambas cosas”. “Tenemos con Bolivia una deuda histórica. El verdadero gesto
patriótico consiste en reconocerla”.

En el marco del actual proceso de integración y de desarrollo es absolutamente imposible seguir


postergando la solución del problema boliviano, la negativa de Chile para superar. El diferendo,
es un obstáculo determinante para la integración regional y continental, es inútil hablar de
integración este conflicto trasciende sin duda el ámbito bilateral y se convierte en problema
multilateral, es evidente que se trata de un tema bilateral, sin embargo es importante que el
Presidente Morales encabece esta demanda a nivel internacional, pidiendo respaldo a algunos
países para que estos a su vez estos presionen a Chile para que ponga fin de una vez por todas a
este ignominioso enclaustramiento del cual Bolivia es objeto.

No pretendemos la revisión del tratado de forma general, ni tampoco la devolución de más de


450km de costa, usurpados por Chile, ni mucho menos una indemnización por de la explotación
de los gigantescos recursos naturales, que sentaron las bases de desarrollo del agresor y
condenaron a la miseria a el agredido, sostenemos simplemente que se trata de un tratado que
produce efectos nefastos y realmente asfixiantes para nuestro país, tratado injusto,
asimétrico, impuesto por la fuerza y la intimidación, también consideramos que la posición
chilena no es acorde a nuestros tiempos y a los objetivos integracionistas basados en la
hermandad, solidaridad y complementariedad, que persigue el actual gobierno boliviano.

Ponderamos y apoyamos, como muchas instituciones y personalidades de nuestro país, el


trabajo realizado durante mas de una década por los patriotas, Señores Victor Hugo Chavez S.
y Wilfredo Chavez S, los cuales sostienen en su libro “ Demanda marítima Bolivia” que
Bolivia puede demandar a Chile ante la Corte Internacional del Haya ya que esta instancia es
competente para conocer y resolver las cuestiones que lleguen a suscitarse con motivo de la
inteligencia y de la ejecución del tratado de “Paz y Amistad “suscrito en el año 1904, siendo una
consecuencia plenamente exigible, este precepto contenido en el articulo 12 del mencionado
tratado

Por otra parte, observamos que en el Tratado de 1904, Bolivia no cede soberanía de sus
territorios ocupados, en consecuencia, mal se podría decir en el ámbito público que Bolivia cedió
su soberanía. “Bolivia no cede soberanía, sólo dominio.

Además se omite definir en qué quedan los territorios comprendidos entre los paralelos 23 y 24,
donde se encuentran las poblaciones Antofagasta, Mejillones y la Mina de Caracoles. No se
conoce nada de definiciones en cuanto a cesión boliviana y tampoco está definido en el Tratado
de 1904.

Ante la perenne y retrograda posición chilena el gobierno boliviano tendría que estudiar una
posible demanda ante el tribunal de Haya ya que se esta constituyendo como la única
alternativa posible que queda a nuestra nación

Desgraciadamente en el transcurso de estos 130 años de enclaustramiento Bolivia nunca tuvo


una política de Estado referente al tema marítimo, y que es muy dificultoso para el actual
Gobierno armar estrategias en un tiempo relativamente corto, sin embargo, nos llama la
atención ciertas declaraciones del Canciller boliviano, señor David Choqueuanca, en sentido de
tratar el tema de nuestra reintegración marítima, como una “aspiración”, según sus propios
términos, y no tratar el tema, como un derecho legitimo imprescriptible e irrenunciable, por
otro lado anuncio la posibilidad de reanudar relaciones diplomáticas con Chile, la eventual de
venta de gaz al país trasandino, obviando el referéndum del 2004, olvidando que uno de los
detonadores del desencadenamiento de la crisis de octubre del 2003, fue justamente la
intención del gobierno del ex presidente Sanchez de Lozada, de vender gaz a Chile, aplicar la
llamada “diplomacia de los pueblos”, en el marco de la “confianza mutua”……, que Bolivia no
tiene que chantajear a Chile…., consideramos que todos estos argumentos que esgrime la
Cancillería boliviana, carecen de fundamento, es por tales desaciertos e incoherencias, que urge
la necesidad de crear un Viceministerio Marítimo, o una Comisión Marítima compuesta por
expertos en esta materia, la cual tuviera también que tratar el tema del agua ( Quetana, río
Lauca), otro atropello viejo de más de cien años que Bolivia tiene pendiente con Chile.

Recientemente, de forma muy irresponsable el vicecanciller Hugo Fernández Araoz, acaba de


concertar con su par chileno, Alberto Van Klaveren, nuevos estudios, durante cinco años, para
las emanaciones de agua del cantón Quetena, que el gobierno chileno desvío descaradamente
desde hace mas de 108 años y le dio el nombre de Río Silala, que por cierto no figura en
ninguna carta anterior al tratado de 1904 este nuevo plazo acordado “generosamente” por el
vicecanciller, Fernandez, beneficia a las empresas privadas que seguirán vendiendo agua a
Antofagasta, Iquique, Calama y Mejillones, así como a compañías mineras, todo esto en
detrimento del departamento de Potosí, que hasta el día de hoy no se ha beneficiado ni de una
sola botella del agua boliviana embazada y comercializada por las empresas chilenas, el Dr.
Andres Soliz Rada sostiene que: “La Cancillería tuvo fama de pro chilena y antiboliviana. No
imaginábamos que las ONG a cargo de élla tomaran el mismo camino ». Desgraciadamente,
mencionadas aseveraciones, hasta prueba de lo contrario, no hacen más que confirmarse.

Por lo expuesto, creemos que el gobierno boliviano tiene que actuar con extrema cautela,
armando un verdadera y responsable estrategia ya que todos los gobiernos que se sucedieron en
la Moneda, aplicaron con estricto cumplimiento, la doctrina Portales, en detrimento y desmedro
de nuestro pueblo, dicha doctrina ejercida y desplegada no sólo en el siglo XIX sino, extendida al
siglo XX por la doctrina de Pinochet y hasta el siglo XXI seguirá siendo política de Estado en
Chile.

El actual gobierno chileno a la cabeza de su Presidenta, la Señora Bachelet, tiene la oportunidad


histórica de convertirse en uno de los principales constructores de la integración de la Gran
patria Latinoamericana, hacía un mundo más justo y solidario, eso siempre y cuando su
sepa responder a la altura a los desafíos presentes, y que la solución definitiva de este
centenario enclaustramiento debe servir para acercar más a los pueblos y afianzar su destino
común, en el marco de una amplia perspectiva inscrita en el paradigma de “cultura de paz”
para toda la región

Bolivia está abierta al diálogo con Chile, siempre lo ha demostrado, ahora más que nunca, con
miras hacia un futuro común, cumpliendo con el compromiso histórico, que se trazo el actual
gobierno, trabajar, en aras de la integración del continente y por el bien estar de los pueblos.
Llego la hora que el actual gobierno chileno y su pueblo asuma con honestidad y con la
responsabilidad histórica que le corresponde, en aras del porvenir de América Latina, actuando
a la medida de las circunstancias que exige el siglo XXI.

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