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La secularización

Los límites de su validez


Alfonso Pérez-Agote Universidad Complutense, Madrid

resumen La noción de secularización, como incompatibilidad entre modernidad y religión, ha sufri-


do sucesivas limitaciones a su validez, desde que la sociología importara este vocablo.
palabras clave cambio cultural u cambio religioso u modernidad u racionalidad u religión u
secularización

Introducción
La idea de secularización de la sociedad ha sufrido intenta explicitar la variedad de aspectos que se han
múltiples transformaciones históricas. Como noción recubierto con el término. Un tercer epígrafe está de-
sociológica, la secularización es el proceso propio de dicado a enunciar las que dentro de la sociología han
las sociedades modernas a través del cual las ideas y las sido las excepciones a la regla de la incompatibilidad
organizaciones religiosas pierden influencia social; esta entre modernidad y religión. Al final, el caso que fue
pérdida es debida al desarrollo de la racionalidad, la la regla, Europa occidental, se ve convertido en excep-
ciencia y la tecnología que acompaña al proceso de ción, como se ve en el epígrafe cuarto. En el siguiente
industrialización y urbanización. Se trata de un proce- epígrafe, el quinto, se describen algunas de las cues-
so complejo que comprende una pluralidad de dimen- tiones que la llegada a Europa de población inmi-
siones individuales, sociales y políticas de la religión grante con religiones otras que las propias y la
(Tschannen, 1992). La tesis de la secularización de la necesaria consideración de la totalidad del planeta en
sociedad debe mucho a las ideas ilustradas sobre el la era global plantean a la sociología. En el sexto, dado
progreso de la razón humana. Y se desarrolla como que el debate sociológico sobre la secularización ha
argumento teórico durante el siglo XIX, dentro de la sido productivo, se intenta construir un marco analíti-
reflexión sobre el paso de la tradición a la modernidad co del cambio religioso. Por último, se hacen algunas
que inaugura la sociología. Esta reflexión sobre el dec- consideraciones abiertas sobre la validez actual de la
linar de la religión en la sociedad moderna es propia noción de religión.
de la sociología europea y tiene una vigencia universal
dentro de ella hasta algo entrada la segunda mitad del
siglo XX. La idea de secularización no tuvo éxito en La idea de secularización en la
los Estados Unidos, debido al diferente modelo de sociología
modernización seguido por un país formado por suce-
sivos flujos migratorios que llevaron consigo dife- El término secularización tiene una larga historia antes
rentes confesiones religiosas. En los Estados Unidos de entrar en la sociología. Etimológicamente la pala-
hubo que regular muy pronto la coexistencia de una bra secularización proviene del vocablo latino saecu-
pluralidad de credos religiosos, no habiéndose conoci- lum, que fue utilizado por San Agustín y los primeros
do nunca, por lo tanto, una iglesia nacional. padres de la Iglesia como sinónimo de mundo tempo-
En el primer epígrafe se establece el significado que ral. Luego fue empleado en la Edad Media por el dere-
el término secularización alcanza en la sociología hasta cho canónico para indicar el abandono de la regla de
la segunda mitad del siglo XX. En el segundo, se su orden por parte del monje, quien de esta forma

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regresaba al mundo, se secularizaba. El vocablo entró comprender los cambios en el papel que la religión
en la esfera jurídico-política en los prolegómenos de juega en la sociedad. Marx y Engels mantuvieron,
la Paz de Westfalia de 1648, para indicar el paso de con respecto a la religión, una posición filosófica y
determinadas instituciones del ámbito religioso al política derivada, por un lado, de la ilustración y, por
ámbito secular, es decir temporal. La Ilustración, en el otro, de la aproximación de Ludwig Feuerbach en
el siglo XVIII, fue el movimiento que hizo entrar en su libro La esencia del Cristianismo, quien pensaba en
el terreno del pensamiento la idea de la progresiva la alienación religiosa como proyección ilusoria,
desaparición de la religión de la faz de la sociedad. Y hecha por el hombre, de su ser incompleto e imper-
la sociología, en el XIX, desarrolló esta idea en sus fecto. La religión para Marx y Engels obscurecía la
análisis de los procesos de construcción de las percepción del mundo social, era un medio utilizado
sociedades europeas modernas. por la clase dominante para legitimar su poder e
La Ilustración, dice Nisbet, ‘nunca fue capaz de impedir la rebelión de la clase dominada. La religión
ver la religión más que como una trama de supersti- tendría un final próximo, con la toma, por parte de
ciones, locuras y tiranías del espíritu; como un fenó- la clase obrera, del poder político; el materialismo
meno … del que se podía esperar que con el tiempo dialéctico ocuparía su lugar, como alternativa cientí-
desapareciera, dadas una influencia suficiente de la fica y progresista de la visión religiosa del mundo
educación y la contemplación de los portentos de la (Hervieu-Léger y Willaime, 2001: 10–11). Para
ciencia. Para los “philosophes” la religión y más espe- Durkheim en la religión se encuentra la forma
cialmente la Cristiandad era mucho menos algo que primera de ese espíritu común que hace que la
había que comprender en sus raíces que algo que sociedad se mantenga unida en su conjunto. La
destruir tan pronto como fuera posible.’ Y ‘desde el sociedad es ‘un conjunto de ideas, de creencias, de
final del S. XIX hasta la mitad del S. XX, casi todo sentimientos de todos los tipos que se desarrollan por
pensador sociológico esperaba que la religión desa- los individuos’ (Durkheim, 1967: 79). ‘Estudiar la
pareciera con los inicios del S. XXI’ (Nisbet, 1974: religión es, por tanto, remontar a las fuentes del vín-
157–8). culo social para poder pensar mejor la refundación
Durante todo el siglo XIX todas las ciencias posible de este vínculo en una sociedad que ha llega-
sociales emergentes colaboraron activamente en el do a ser laica’ (Hervieu-Léger y Willaime, 2001:
proceso de construcción nacional de las seculares 155). En su gran obra sobre la religión, Les formes élé-
sociedades occidentales europeas. La participación de mentaires de la vie religieuse, publicada en 1912,
los sociólogos en ese proceso es el motivo por el cual Durkheim (2007) estudia las religiones totémicas
la secularización fue tematizada en términos de pro- australianas pero su preocupación iba más lejos, pues
ceso social irreversible pero nunca como ideología o quería saber cómo construir esa unidad moral en una
como proyecto y movimiento políticos. Como bien sociedad laica, la francesa, que acababa de promulgar
han visto los antropólogos del secularismo (Asad, la ley de 1905 que institucionalizaba definitivamente
2003; Navaro-Yashin, 2002), ‘el laicismo (secularism) la separación entre la Iglesia y el Estado. Por ello en
no es una posición política desencantada que con- esa obra hablaba con frecuencia de esa nueva unidad
siste en principios abstractos, y la promoción del moral que era la Nación. En su introducción de
laicismo (secularism) no es un motivo inocuo para la 1920 a sus ensayos sobre sociología de la Religión,
neutralidad pública con respecto a la pluralidad de Weber se pregunta por el encadenamiento de circun-
creencias y visiones del mundo. El laicismo (secular- stancias que condujeron a que en Occidente
ism) es llevado a cabo por actores sociales con intere- aparecieran ciertos fenómenos que se insertan en una
ses específicos que se asocian a él con estilos de vida dirección evolutiva de alcance universal. La raciona-
concretos, emocionalmente se identifican con él, y lo lización de la conducta se produce en una serie
sacralizan en una imagen del Estado y de los padres grande de esferas, como la ciencia, el arte, la
fundadores, performativamente muestran su adhe- economía, el derecho, el Estado ... (Weber, 1988: 1).
sión al mismo, y se movilizan en contra de los Para Weber la religión mantenía relaciones complejas
movimientos religiosos a través de estrategias com- con la racionalización. La religión podía inducir
plejas’ (Gorski y Altinordu, 2008: 73). Como dice comportamientos racionales o irracionales, dependi-
Beckford (2003), muchos de los primeros sociólogos endo del contexto social. El ascetismo intramundano
‘estuvieron involucrados en los planes políticos y del puritanismo calvinista llegó a ser un impulso para
prácticos para aclarar, obstaculizar o ayudar al declive la racionalización de la economía y de la vida. La
de la importancia de la religión’. eliminación del carácter mágico del mundo no fue
Los sociólogos más importantes del siglo XIX y llevado tan lejos por la piedad católica como lo fue
de principios del XX profetizaron el declive futuro de por la religiosidad puritana (Weber, 1988: Ch. I). La
las instituciones religiosas, pero también nos propor- racionalidad instrumental, el cálculo, la previsión de
cionaron un aparato conceptual y analítico para las consecuencias, son elementos de comportamien-

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to incompatibles con una visión mágica del mundo. propia religión. Mientras, en el mundo católico, para
Pero para Weber, como ya hemos visto, el cambio interesarse por el mundo era preciso situarse contra
producido en Occidente tenía consecuencias para la religión y la iglesia católicas. En el primer caso, el
todo el mundo, ya que suponía el inicio de un cam- hombre religioso se seculariza. En el segundo, el
bio evolutivo de carácter universal (Hervieu-Léger y hombre, para interesarse por el mundo, tiene que
Willaime, 2001: 89–108; Ritzer, 1992: Ch. 7; abandonar la religión (Berger, 2001; Martin, 1979;
Turner, 1996). Precisamente la afirmación de este Weber, 1988). La desacralización o desecantamiento
sentido evolutivo del capitalismo occidental y de su (en el sentido weberiano) del mundo es el tercer tipo:
carácter universal, está sufriendo en nuestros días los el irreversible proceso de racionalización llevará a una
más severos ataques, como veremos, desde la ciencia visión del mundo en términos de nexos causales
social, llegándose al extremo de calificar la idea de explicativos. La culminación de este proceso sería
secularización como parte de una ideología y de un una sociedad totalmente racional en la cual los fenó-
proyecto político propio de aquella época. menos de lo sobrenatural y de lo misterioso no
En los años setenta del siglo XX Bell (1977) nos jugarían ningún papel. El cuarto tipo se refiere a la
advertía de que ya no se podía admitir una noción secularización como separación de la sociedad con
simple y lineal de la secularización como inexorable respecto a la comprensión religiosa que la había con-
desaparición cuantitativa de las creencias religiosas, formado, en orden a constituirse ella misma en una
sino que debíamos contemplar la secularización realidad autónoma y, consecuentemente, a relegar a
como algo complejo y múltiple, y no necesariamente la religión a la esfera privada de la vida. La culmi-
universal. Había llegado el momento de discutir la nación de este proceso sería una religión de carácter
asunción de que las relaciones entre modernidad y puramente interior, sin influencias en las institu-
religión son necesariamente conflictivas. Para ciones ni en la acción corporativa, y una sociedad en
algunos, en un extremo, la tesis de la secularización la que la religión no sería visible fuera del grupo reli-
debía abandonarse definitivamente (Stark, 1999); gioso. Este tipo de secularización alcanza todo su
para otros, en el otro extremo, seguía siendo válida sentido en relación con la teoría de la modernización
aunque requiriera una cierta revisión. Y en el medio, como progresiva diferenciación de funciones, de la
cada vez más eran los que proponían la revisión de las que se hablará más tarde. El quinto tipo es la secula-
relaciones de la religión con su entorno social: ‘la rización como transposición de determinadas formas
religión moderna es elástica y sin embargo está suje- institucionales religiosas al ámbito mundano. En este
ta a influencias culturales; no se trata simplemente de sentido se habla de la transposición de la ética protes-
que sobreviva o decline, sino que se adapta a su tante en el espíritu del capitalismo, de la visión de la
entorno a través de complejos caminos’ (Wuthnow, revolución marxista como una transposición de la
1988: 475). escatología judeo-cristiana, de la consideración del
psicoanálisis como una secularización de la confe-
sión. Como último tipo, la utilización de secula-
Las dimensiones de la secularización rización como sinónimo de proceso de
modernización de una sociedad.
El término secularización ha sido utilizado dentro de La tipología evolutiva que Bellah (1964) cons-
la sociología en una variedad de sentidos más o truye nos habla de la importancia de una serie de
menos precisos, todos ellos relativos a una decaden- aspectos que están implícitos en la noción de religión
cia de la religión. Shiner (1967) trazó un pequeño y de cambio religioso que maneja la sociología euro-
catálogo de seis tipos de perspectivas que los sociólo- pea. Esta tipología está sustentada por la idea de una
gos daban a la noción de secularización. El primer progresiva diferenciación funcional de la sociedad en
tipo es el de la secularización como ‘declive de la general y en particular sobre el eje del desarrollo de
religión’: los símbolos, doctrinas e instituciones reli- la diferenciación simbólica, basado en la idea funda-
giosas previamente aceptados pierden prestigio e mental de Voegelin (1956) de que la sociedad evolu-
influencia. Hace referencia a un declinar cuantitati- ciona desde formas compactas de simbolización
vo, visto desde el punto de vista de las creencias y hacia formas diferenciadas. Bellah distingue cinco
prácticas de los actores sociales. El segundo tipo es el tipos históricos fundamentales. Los dos primeros son
de secularización como conformidad con este las religiones primitiva y arcaica, correspondientes a
mundo: proceso por el cual la atención religiosa se formas poco diferenciadas de sociedad. En el tipo
retira de lo sobrenatural y se interesa progresiva- primitivo no existe organización religiosa diferencia-
mente por lo mundano. En relación con este tipo, es da, Iglesia y Sociedad son una misma cosa. Y en el
interesante resaltar que en el proceso histórico de tipo arcaico la organización religiosa está amalgama-
Europa occidental, la Reforma protestante supuso un da con otras estructuras sociales. En ambos tipos,
interesamiento en el mundo llevado acabo por la primitivo y arcaico, se da un monismo cosmológico.

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Precisamente, la ruptura de este monismo, el des- nivel de diferenciación de la sociedad de que habla-
cubrimiento de un campo de realidad religiosa, es la mos, se puede llegar a utilizar la categoría religión de
principal característica de la religión histórica, el ter- forma etnocéntrica, como veremos en el epígrafe sép-
cer tipo. Ello supone la aparición del rechazo de este timo.
mundo, de lo mundano, caracterizándose la acción
religiosa como aquella que es necesaria para la sal-
vación. Encontramos ya una organización religiosa Las excepciones sucesivas a la regla
diferenciada de la organización y jerarquía políticas. de la secularización
Y ello implica que el problema de la legitimación del
poder político entra en una nueva fase: aparece la La tesis sociológica de las relaciones contradictorias
posibilidad de que los actos políticos puedan ser entre modernidad y religión ha pasado por una serie
enjuiciados en términos religiosos. La religión mo- de periodos históricos, en cada uno de los cuales se
derna temprana es el cuarto tipo. El advenimiento de señala una excepción a la regla. Hasta la época con-
la modernidad religiosa deriva de la Reforma temporánea, en que la secularización llega a conver-
Protestante, cuya característica fundamental es el tirse en la excepción y la pervivencia de la religión en
colapso de la estructuración jerárquica de los dos la regla. La primera excepción a la regla de la secula-
mundos. La salvación no deberá ser buscada a través rización fue la que fuera señalada por el propio de
del retiro de este mundo sino en el centro de las Tocqueville en De la démocratie en Amérique
actividades mundanas. El quinto y último tipo, la (1835–40). Frente a la tesis generalizada y des-histo-
religión moderna, es caracterizado por Bellah genéri- rizada de que la religión y la modernidad son incom-
camente como el colapso del dualismo, tan crucial en patibles, de Tocqueville (1981) señalaba el caso de los
las religiones históricas. Pero ello no significaría la Estados Unidos como excepción. El excepcionalismo
vuelta al monismo arcaico o primitivo. Bellah carac- religioso de este país era una parte del llamado excep-
teriza la moderna simbolización religiosa, en el nivel cionalismo americano (Ross, 1984; Tyrrell, 1991).
del mundo intelectual, por el profundo análisis de la Además de por su fuerte vitalidad y activismo reli-
propia naturaleza de la simbolización. Kant estaría giosos, los Estados Unidos como sociedad industria-
en la base de esta reflexión al haber revelado que no lizada, urbanizada, racionalizada, está también
se trata de dos mundos sino de tantos como formas caracterizada por sus ‘periódicas renovaciones públi-
haya de aprehenderlos. En el nivel de la religiosidad cas o masivas de la vida religiosa y, derivado del puri-
de masas, no está claro si los individuos necesitan de tanismo, por la difusión de elementos religiosos en
una armonía cognitiva, de una coherencia interna en otros contextos sociales. ... Las tres principales ori-
sus creencias. entaciones religiosas, el protestantismo, el catolicis-
El carácter evolutivo de esta tipología hace que mo y el judaísmo, no sólo llenan un nicho
debamos ser cautos. Es más valiosa para comprender importante como proveedores de la identidad social,
el proceso seguido por las sociedades occidentales sino también han encontrado en los Estados Unidos
que para los seguidos por otras sociedades; pero para un marco histórico excepcional’ (Tiryakian, 1993:
todos los casos tiene un fuerte interés analítico. 40).
Incluso dentro de contextos occidentales la institu- El desarrollo económico de algunos países del
cionalización y el significado de la religión cambia a Pacífico asiático (Japón, Corea, Singapur, etc.) ha
lo largo del tiempo. En particular, la religión como constituido una buena razón para replantearse las
institución separada de las otras instituciones ha sido relaciones entre religión y modernidad. Estos países
el resultado de un proceso histórico. Cuando obser- con economías actualmente tan potentes se han occi-
vamos otras sociedades no occidentales puede ser que dentalizado. Pero no es menos cierto que estos países
en ellas la religión no esté separada de otras institu- por muy occidentalizados que estén no son occiden-
ciones, como la cultura, el conocimiento, la política. tales. Por ejemplo, Dore ha mostrado cuáles son las
En las actuales sociedades occidentales, cuando indi- diferencias sustanciales entre Occidente y Japón,
viduos con diferentes tradiciones religiosas entran en diferencias que serían el secreto del milagro japonés.
contacto se da una fuerte posibilidad de incompren- Y al hacerlo ha mostrado que el individualismo no es
sión y de tensiones. En Francia, por ejemplo, cuan- una condición necesaria para la modernidad (Dore,
do una joven de origen inmigrante lleva el velo 1992). Son países que han incorporado su tradición
islámico, para los franceses es portadora de un sím- a la modernidad. Lo cual nos lleva a decir que el
bolo religioso. Pero cuando le prohíben a esa joven valor de la teoría clásica no estaba tanto en su capaci-
llevarlo en la escuela, para ella le están prohibiendo dad descriptiva de la realidad como en su capacidad
un símbolo indiferenciado que es religioso, cultural, analítica de sociedades históricas.
familiar y político, todo a la vez. En el fondo de esta De la consideración del caso de estos países
cuestión radica el que si no tenemos en cuenta el acabados de citar, y del de las dos grandes economías

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asiáticas contemporáneas, India y China, ha nacido de Francia), de los países protestantes del Norte, que
una de las claves para repensar la teoría de la secular- lo son menos (con las excepciones de la República de
ización en nuestros momentos: repensar, a la vez, la Irlanda y de Irlanda del Norte) (Davie, 2001:
teoría de la modernización. Las revisiones más 108–9). Es decir que dándose en ambas partes un
recientes de esta teoría convergen hacia la idea, hace proceso de secularización, éste ha sido anterior y más
tiempo explicitada por Eisenstadt (1998, 2000, fuerte en el Norte que en el Sur, con las excepciones
2001), de que los caminos a través de los cuales se señaladas.
alcanza la modernidad pueden ser múltiples. Las Los países católicos del sur de Europa constituyen
‘pautas modernas, en muchas formas radicalmente una zona con mayores resistencias a la moderni-
diferentes de las europeas originarias, ocurrieron no zación religiosa y política, estando ambas dimen-
sólo en sociedades no occidentales; ... también lo siones ampliamente conectadas; además el análisis de
hicieron –y en verdad antes que en los casos citados– los países de este área ha dado lugar a formulaciones
dentro de la trama de la expansión occidental, en teóricas interesantes, en términos de cultura religiosa
sociedades en las cuales se desarrollaron fórmulas (Hervieu-Léger, 2003), religión implícita (Nesti,
occidentales de institucionalización, prácticamente 1990), religious ground bass (Bellah, 1980), religión
en estado puro: en las Américas’ (Eisenstadt, 2001: difusa (Cipriani, 1989). El caso de Francia es espe-
4–5). cial: en las clasificaciones, unas veces es incluida
entre los países de tradición católica (Davie, 1996)
mientras que otras es considerado como un país
Europa: la regla se transforma en aparte, el del laicismo por excelencia (Stoetzel,
excepción 1983).

En la actualidad se da una convergencia (Berger,


1992; Davie, 2001; Hervieu-Léger, 1996, 2001; Las religiones otras, los países otros
Martin, 1996) hacia la consideración de Europa
‘como la única área geográfica y cultural (quizá junto El rápido proceso de desarrollo ocurrido en una serie
con Canadá) en la cual el esquema típico ideal de la de países utilizando ciertos elementos de su cultura
secularización como expulsión de la religión puede tradicional como recurso productivo, ha llevado a
aplicarse, en oposición a los otros continentes, com- ciertos sociólogos a plantearse la posibilidad de que
prendidos los Estados Unidos’ (Hervieu-Léger, 2001: existan otros caminos distintos al seguido por
7). Paradójicamente, Peter L Berger (1967), uno de Europa occidental para modernizarse. La teoría prag-
los más relevantes teóricos contemporáneos de la mática de las modernidades múltiples lleva a romper
secularización, ha llegado en estos tiempos al sigu- con la idea de la necesaria crisis de la religión para
iente diagnóstico sobre la situación de la religión en alcanzar la modernidad. En nuestros días, la eviden-
nuestro planeta en general y en Europa en particular: cia cada vez más relevante de que vivimos en un
‘El mundo actual es masivamente religioso; es todo mundo globalizado, y el progresivo desarrollo del
menos el mundo secularizado que había sido anunci- análisis sociológico en cada vez más partes del plane-
ado por tantos analistas de la modernidad. Existen ta, hacen que la sociología se esté planteando la
dos excepciones a esta proposición. ... La primera cuestión de las relaciones entre modernidad y
excepción, aparente, es Europa Occidental, donde la religión en relación con otras religiones no cristianas
vieja teoría de la secularización parece todavía apli- y con otras sociedades distintas de la occidental.
carse. ... La otra excepción es mucho menos Por un lado nos encontramos con las cuestiones
ambigua: existe una sub-cultura internacional, la de planteadas como consecuencia de las últimas oleadas
la gente que ha recibido una educación superior de de inmigración, particularmente la musulmana, lle-
tipo occidental, en particular en humanidades y gadas a los países de Europa occidental. En los últi-
ciencias sociales, que está, en efecto, secularizada’ mos años, particularmente a partir de los atentados
(Berger, 2001: 24–6). del 11 de septiembre de 2001 que conmocionaron al
Grace Davie, basándose en las encuestas de 1986 mundo, se ha producido una gran cantidad de lite-
y de 1990 del EVSSG (European Values Systems Study ratura sobre el fundamentalismo islámico. Se ha lle-
Group) propone como tendencia general en Europa gado a pensar en la posible incompatibilidad entre la
el debilitamiento progresivo de la práctica religiosa, religión musulmana y la organización democrática
de la adhesión institucional y de la aceptación de las de la sociedad. Sobre todo desde la ciencia política,
creencias religiosas tradicionales. Pero a renglón se han intentado especificar las condiciones que
seguido añade que la diferencia más evidente que se deben cumplir una religión y una organización
da en el interior de Europa es la que separa a los país- política para que se produzcan la ‘tolerancias geme-
es católicos del Sur, más religiosos (con la excepción las’ (twin tolerations), es decir, ‘los límites mínimos

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de libertad de acción que de alguna manera deben ser pasa con la diferencia entre Europa y Norteamérica?
elaborados por las instituciones políticas en relación Esta brecha se explica por la fortaleza del Estado de
con las autoridades religiosas, y por los individuos y bienestar (de alta seguridad) en Europa y la persisten-
grupos religiosos en relación con las instituciones cia del laissez-faire (baja seguridad) en los Estados
políticas’ (Stepan, 2000: 37). Casanova (2005: 89) Unidos.’
ha comparado ‘el discurso contemporáneo mundial Nuestra principal conclusión es que debemos
sobre el Islam como una religión fundamentalista y pertrecharnos de instrumental analítico para acer-
antidemocrática’ con ‘el viejo discurso sobre el catoli- carnos a las variadas situaciones en las que la religión
cismo que predominó en las sociedades anglo-protes- se encuentra a lo ancho del mundo y a lo largo del
tantes, en particular en los Estados Unidos’. tiempo. Desde la perspectiva del cambio religioso, la
Por el otro lado, la emigración de poblaciones noción de secularización debe desembocar en marcos
musulmanas a Europa ha producido fuertes conse- analíticos evitando así la idea de universalidad y de
cuencias. Ciertas reivindicaciones religiosas se han transhistoricidad, y la pretensión teleológica. Ello es
convertido en conflictos políticos sobre la religión necesario por la capacidad para adaptarse al cambio
(Göle, 2006). Ciertas prácticas culturales en relación que ha mostrado la religión y, por esta misma razón,
con la discriminación sexual, la ablación, el velo, y el por la variedad de situaciones y procesos que se dan
matrimonio no libremente escogido han dado lugar en el mundo dada esta capacidad.
a mucha literatura (Benhabib, 2002; Scott, 2007;
Shweder et al., 2002). La cuestión del velo musul-
mán en Francia y en Turquía ha dado lugar a intere- Hacia un marco analítico del cambio
santes trabajos (de Galembert, 2009; Gökariksel y religioso
Mitchell, 2005). Fetzer y Soper (2005) han com-
parado cómo afecta el modelo de relaciones Dobbelaere (2002) diseña un marco analítico en tres
Iglesia–Estado al grado de adaptación de los inmi- niveles: macro, meso y micro. La secularización socie-
grantes musulmanes en Gran Bretaña, Francia y tal, nivel macro, se refiere a las relaciones entre
Alemania. Por otro lado, con la migración se ha pro- sociedad y religión, y en concreto al proceso por el
ducido una profunda transformación de la cultura cual la religión es empujada hacia zonas cada vez más
(Wieviorka, 1998) y de la religiosidad (Cesari, 2004; marginales de las sociedades modernas occidentales.
Roy, 2004; Tietze, 2002) musulmanas originarias, así Esto produce, por un lado, una ruptura de la unidad
como un gran incremento de las funciones sociales del cosmos sagrado tradicional, y, por el otro, la
que cumple la religión (Pérez-Agote y Santiago, progresiva liberación de esferas concretas de la vida
2009). social de la tutela religiosa a la que estaban someti-
Y, por último, cabe decir que la existencia del das. Esta dimensión de la secularización entra de
World Values Survey ha posibilitado el análisis de la lleno en el campo del proceso de diferenciación
situación religiosa de algunos países de los que hasta social (Dobbelaere, 2002: 29). Por otro parte, el pro-
ahora no poseíamos información sociológica sis- ceso de secularización societal, como proceso de
temática, lo que, a su vez, posibilita análisis compara- racionalización de las esferas de la vida, ya que no se
dos. Gorski y Altinordu (2008: 65) nos ofrecen una detiene en el campo puramente económico, alcanza
visión del amplio abanico de conclusiones derivadas: también a la propia religión, de manera tal que la
‘A primera vista, los datos no sugieren disminución; dimensión organizativa de ésta, nivel meso, propende
por el contrario, indican aumento (Antoun y a una progresiva racionalización y a su adaptación a
Hegland 1987, Sahliyeh 1990). Esto ha permitido a los cambios; es la propia religión, y su organización,
Berger y otros argumentar que el mundo se encuen- la que se seculariza y se adapta a los cambios
tra actualmente en un período de des-secularization (Dobbelaere, 2002: 35). Por esta razón, esta dimen-
(Berger 2001, Karner y Aldridge, 2004). Norris e sión ha sido denominada por Luckmann (1967)
Inglehart (2004) rechazan esta visión y desarrollan secularización interna. La dimensión individual,
una defensa ingeniosa de la teoría de la secula- nivel micro, hace referencia al proceso por el cual las
rización. Por un lado, dicen, los crecientes niveles de creencias y las prácticas religiosas de los individuos
seguridad existencial de algunos países y segmentos van decreciendo sustantivamente, así como va dis-
de población han dado lugar a la disminución de los minuyendo la capacidad de la religión y de la Iglesia
niveles de religiosidad; por el otro lado, los altos para determinar el comportamiento de éstos.
niveles de religiosidad siguen estando correlaciona- La dimensión individual de la secularización nos
dos con altas tasas de fertilidad. Si los niveles agrega- habla de las relaciones entre tres niveles institu-
dos de la religiosidad están aumentando, en su cionales de la vida religiosa. La decadencia de la
opinión, éste es el resultado de las fuerzas demográ- religión en la esfera individual implica pérdida de
ficas, no de una posible des-secularization. Pero ¿qué importancia de una institución concreta constituida

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por una religión histórica concreta y de la Iglesia a las privatizadas formas de la religión, tan caracterís-
correspondiente; pero no implica necesariamente la ticas de la sociedad (cristiana) moderna, en la que el
caída de la religiosidad (creencia en Dios, experiencia poder y el conocimiento ya no son significativa-
religiosa, etc.); si subsiste la religiosidad decayendo la mente generados por las instituciones religiosas’
religión y la Iglesia, el individuo tendrá que construir (Asad, 1983: 237). Veinte años después, Asad va más
su sentido de la vida y verificarlo intersubjetiva- lejos y piensa que la consideración de la religión
mente; la religiosidad estaría así des-institucionaliza- como una esfera separada de la vida social no tiene
da. sentido fuera de la noción de secular. En una
Cada una de las tres dimensiones tiene una cierta sociedad islámica no tiene sentido hablar de la
independencia analítica e, incluso, empírica, ya que religión como esfera separada de la política. Lo secu-
pueden seguir procesos diferentes y hasta contradic- lar es una creación de las sociedades occidentales
torios. Pero también están relacionadas entre ellas. Y, como parte del proyecto de modernización a escala
precisamente, al establecer las posibles relaciones planetaria. Y así el secularismo sería el proyecto occi-
teóricas entre las tres estamos construyendo un dental de separar la religión del resto de la vida social;
instrumental muy interesante desde el punto de vista un proyecto para las sociedades occidentales tanto
analítico. como para las otras. Pero esta separación no ha exis-
tido siempre en Occidente, como en el caso de la
Cristiandad medieval (Asad, 2003: 1–17).
La religión, como una esfera Pero para Asad tampoco está claro que exista en
diferenciada, es una categoría las sociedades occidentales contemporáneas. Lo
problemática intenta mostrar cuando habla de la posición teórica
de José Casanova sobre las relaciones entre religión y
Pero en nuestros días la consideración del caso política. ‘Casanova apunta tres elementos de la tesis
europeo como uno entre otros casos, más que como de la secularización que se han considerado –al
la vía que necesariamente debe seguirse, afecta no menos desde Weber– esenciales para el desarrollo de
sólo al área de la religión sino a muchos otros cam- la modernidad: (1) la creciente diferenciación estruc-
pos. Algunos conceptos básicos de la ciencia social tural de los espacios sociales que se derivan de la
están tardando más que otros en ser revisados; es lo separación entre la religión y la política, la economía,
que sucede con el de religión. Peter van der Veer y la ciencia, y así sucesivamente; (2) la privatización de
Hartmut Lehmann observan que ‘Es importante la religión en su propio ámbito, y (3) la importancia
darse cuenta de que tanto “nación” como “religión” social decreciente de la creencia religiosa, el compro-
se conceptualizan como categorías universales en la miso y las instituciones. Casanova sostiene que sólo
modernidad occidental y de que su universalidad se los elementos (1) y (3) son viables.’ Para Casanova ‘la
encuentra precisamente en la historia de la expansión des-privatización de la religión no es una refutación
occidental. La modernidad del concepto de nación de la tesis si se da en formas que son consistentes con
debe debatirse poco, más allá de mencionar la los requisitos básicos de la sociedad moderna,
relación entre las ideas de “nación” y la “etnicidad” incluyendo el gobierno democrático. En otras pala-
planteada en la referencia al “nacimiento” de la bras, aunque la privatización de la religión ... es parte
misma palabra nación. La modernidad del concepto de la secularización, no es esencial a la modernidad.’
de religión, tal como se aplica en la era moderna al Y Asad añade que la posición de Casanova ‘no es
hinduismo, al sintoísmo, al Islam, pero también al totalmente coherente. Si la religión vuelve efectiva-
cristianismo, es un lugar común mucho menos acep- mente a la esfera pública ... los elementos (1) y (3) se
tado en las ciencias sociales (Van der Veer y encontrarán por lo mismo debilitados.’ Con la entra-
Lehmann, 1999: 4). da legítima de la religión en los debates sobre la
La crítica más radical de la noción de religión es economía, la educación, y la ciencia, el principio de
la crítica planteada por Talal Asad. Este autor inten- diferenciación estructural no se sostiene. Y con ‘los
ta mostrar la imposibilidad para la ciencia social de compromisos apasionados que generen estos debates,
hacer una definición universal, transhistórica de la no tiene mucho sentido medir la importancia social
religión. Toma para ello, a modo de ejemplo, la de de la religión a través de indicadores tales como el de
Clifford Geertz (1973) como sistema de símbolos. asistencia a la iglesia’ (Asad, 2003: 181–2).
Asad ya había criticado con anterioridad esta defini- ‘En gran parte del pensamiento evolutivo del
ción, a la que acusaba de que ‘con su énfasis en los siglo XIX la religión era considerada como una
significados ... omite la dimensión esencial del poder, condición humana a partir de la que el derecho
... hace caso omiso de las diversas condiciones moderno, la ciencia y la política emergen y se con-
sociales para la producción de conocimiento.’ Y ‘su vierten en independientes. En este siglo [el XX], la
plausibilidad inicial deriva del hecho de que se parece mayoría de los antropólogos han abandonado las

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Pérez-Agote La secularización

ideas victorianas evolucionistas, y muchos han cues- política, con la excepción del caso europeo. En forma
tionado la idea racionalista de que la religión es sim- separada y desde la perspectiva general, se pasa revista
plemente una primitiva, y por tanto anticuada, al devenir de las grandes religiones históricas. Y, por
forma de las instituciones que hoy encontramos en otro lado, se considera el caso europeo como
su forma más verdadera (derecho, ciencia, política) excepción y se consideran las diferentes elementos
que configuran la transformación religiosa de la
en la vida moderna. Para estos antropólogos del siglo
China contemporánea.
XX, no es un modo arcaico de pensamiento científi- Casanova J (2006a) Secularization revisited: A reply to
co, ni de cualquier otro esfuerzo secular; hoy, es, por Talal Asad. En: Scott D, Hirschkind C (eds) Powers
el contrario, un espacio distintivo de la práctica y la of the Secular Modern: Talal Asad and His
creencia humanas que no se puede reducir a Interlocutors. Stanford, CA: Stanford University Press,
cualquier otro. De esto parece deducirse que la esen- 12–30.
cia de la religión no debe ser confundida con, por En este trabajo José Casanova responde a la crítica
ejemplo, la esencia de la política, aunque en muchas que Talal Asad (2003: capítulo 6) le hace sobre las
sociedades las dos se pueden superponer y entrelazar’ relaciones entre religión y política. Casanova piensa
(Asad, 2002 [1982]: 115). que sus posiciones no son tan distantes y que sus
Para Asad las relaciones entre religión y política propias razones para reconstruir la teoría de la
nunca han dejado de existir del todo, ya que él con- secularización son la mismas que Asad tiene para
rechazarla como un mito. Para Casanova la vía del
sidera que la religión siempre está mezclada con la rechazo de Asad es la vía foucaultiana de la
política, con el poder, incluso cuando están constitu- aproximación genealógica a los conceptos, mientras
cionalmente separadas en los países occidentales. que la suya es la más clásica de la sociología histórica.
Asad hace suya la idea de que ‘el dominio público no Tal vez la vía de Asad va hasta la crítica misma de las
es simplemente un foro para el debate racional, sino nociones de modernidad y democracia.
un espacio de exclusión. ... La esfera pública es un Casanova J (2006b) Rethinking secularization: A global
espacio necesariamente (no sólo de forma contin- comparative perspective. Hedgehog Review 8: 7–22.
gente) articulado por el poder’ (Asad, 2003: 183–4). Casanova distingue, dentro del término
Y cita a Robert Wolff (1969: 52) cuando habla de la secularización, tres tipos de significación. En primer
esfera pública: ‘Si un interés está fuera del círculo de lugar la secularización como declive de las creencias y
lo aceptable no recibe atención alguna, y sus defen- prácticas religiosas. En segundo lugar, la
secularización como privatización de la religión,
sores son tratados como chiflados, extremistas, o considerada como posible tendencia histórica y como
agentes extranjeros.’ condición normativa de la democracia moderna. Y,
en último lugar, la secularización como
Lecturas sugeridas autonomización de las diferentes esferas seculares con
respecto a la religión. El autor pasa revista a las
Asad T (2003) Formations of the Secular: Christianity, relaciones entre los tres aspectos que se establecen por
Islam, Modernity. Stanford, CA: Stanford University la sociología norteamericana y por la sociología
Press. europea, en función del distinto lugar ocupado por la
Asad parte de la distinción entre lo secular, como religión en las sociedades respectivas.
categoría epistemológica, y el secularismo, como una Davie G, Hervieu-Léger D (eds) (1996) Identités
doctrina política. En la primera parte de la obra religieuses en Europe. Paris: La Découverte.
intenta establecer las bases para lo que debe ser una Es una obra dedicada al análisis de la religión en
antropología del secularismo. La segunda, la más Europa. Tras una revisión general del modelo
relevante para este trabajo, trata de varios temas entre europeo, una puesta en cuestión de la teoría de la
los que destaca el de las relaciones de la religión con secularización (hecha por David Martin) y un análisis
el secularismo y la construcción de los estados- de las diferentes herencias religiosas en Europa, el
nación; es aquí donde aparece la crítica radical de libro pasa revista a diferentes países europeos:
Asad a la noción misma de religión, como categoría Alemania, Suiza, Dinamarca, Grecia, Francia, Gran
derivada del proceso histórico de construcción de los Bretaña, Bélgica, Italia y España. Se analiza también
estados nacionales occidentales y usada por el de la significación de la aparición de nuevos
movimiento político al que llama secularismo. La movimientos religiosos y la influencia de la
tercera parte es un análisis concreto de la sociedad unificación europea en el devenir de la religión.
egipcia bajo la colonización. Dobbelaere K (2002) Secularization: An Analysis at Three
Berger P (ed.) (2001) Le Réenchantement du monde. Levels. Brussels: PIE-Peter Lang.
Paris: Bayard. Es un intento de trazar un esquema para el análisis
Berger, uno de los grandes teóricos de la del cambio religioso derivado de las tres diferentes
secularización, dirige una obra colectiva realizada facetas o niveles que el autor considera componen la
bajo la idea general de que en la gran mayoría de las teoría de la secularización. El primer nivel es la
sociedades contemporáneas la religión goza de buena secularización societal, que supone la progresiva
salud y tiene una influencia muy fuerte en la esfera separación de la religión con respecto a las otras

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Pérez-Agote La secularización

esferas de la sociedad, como la política, la ciencia, la definida en tres etapas. La primera se propone
economía, etc. El segundo nivel es el individual, que establecer los requisitos institucionales y políticos
implica el declinar del compromiso religioso, de las mínimos que debe cumplir un sistema político para
creencias y de la prácticas. El tercer y último nivel se ser considerado una democracia; estos requisitos
refiere a la secularización de las propias vienen definidos por lo que llama las ‘tolerancias
organizaciones religiosas, proceso por el cual éstas se gemelas’ (twin tolerations): los límites mínimos a la
adaptan a la modernidad. libertad de acción que deben establecerse por las
Eisenstadt SN (2000) Multiple modernities. Daedalus instituciones políticas en relación con las autoridades
129(1). religiosas, y por las autoridades y grupos religiosos en
El concepto de modernidades múltiples trata de relación con las instituciones políticas. La siguiente
evitar, de forma pragmática, el carácter teleológico y etapa es la pregunta por la posibilidad de que las
universalista de la noción de proceso de democracias europeas cumplan con las tolerancias
modernización establecida por la sociología y basada gemelas, por lo que la experiencia histórica europea
en el análisis del proceso en las sociedades debe ser evitada. La tercera etapa consiste en hacerse
occidentales. En todas las sociedades modernas hay las dos primeras preguntas en relación con los países
rasgos comunes que las distinguen de sus respectivas influenciados por tradiciones religiosas como el
formas tradicionales, pero éstos se producen en Confucianismo, el Islam o el cristianismo ortodoxo
formas múltiples, diferentes. Y en algunos casos se da oriental.
una congruencia de las formas modernas con la Tiryakian EA (1993) American religious exceptionalism:
tradición histórica, de manera tal que las relaciones A reconsideration. Annals of the American Academy of
entre modernidad y tradición pueden ser diferentes Political and Social Science 527 (May): 40–54.
en los diferentes países. El excepcionalismo religioso americano se sitúa
Gorski PS, Altinordu A (2008) After secularization? dentro de lo que en general se conoce como el
Annual Review of Sociology 34: 55–85. excepcionalismo americano. La vitalidad religiosa de
Se trata de una revisión general de la teoría de la los Estados Unidos se considera una característica
secularización, de su validez para los países nacional distintiva desde que de Tocqueville así la
occidentales y de sus dificultades de aplicación para definiera. Esta vitalidad se renueva de forma
las religiones no cristianas y para los países no periódica y se extiende cada vez a nuevos contextos
occidentales. Los autores pasan revista en sociales. Por otra parte, se considera que el peso de
profundidad a las diversas posiciones mantenidas por las tres grandes orientaciones religiosas
los científicos sociales sobre las relaciones entre la –protestantismo, catolicismo y judaismo– es también
religión y la política democrática, es decir, sobre si la excepcional.
exclusión de la religión de la esfera pública es una
condición de la democracia. Gorski y Altinordu
consideran el secularismo como un movimiento Referencias
político y una ideología, para después constatar la
existencia de una variedad de formas de existencia de Antoun RT, Hegland ME (1987) Religious Resurgence:
la secularidad. Al final, se hacen consideraciones Contemporary Cases in Islam, Christianity, and
sobre las posibles estrategias teóricas a la hora de Judaism, Syracuse, NY: Syracuse University Press.
analizar los procesos religiosos en las sociedades Asad T (1983) Anthropological conceptions of religion:
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La secularización es un fenómeno que ocurre dentro anthropological category. En: Lambeck M (ed.) A
del cristianismo. La teoría de la secularización está Reader of Anthropology of Religion. Malden, MA:
basada en cuatro componentes. El primero está Blackwell, 114–132.
constituido por los acontecimientos históricos Asad T (2003) Formations of the Secular: Christianity,
cruciales de cada país, dentro de los cuales está el Islam, Modernity. Stanford, CA: Stanford University
grado de éxito alcanzado por la Reforma Protestante. Press.
El segundo componente está constituido por las Beckford JA (2003) Social Theory and Religion.
pautas (patterns) resultantes, siendo las principales la Cambridge: Cambridge University Press
pauta anglo-sajona, la norteamericana, la latina y la Bell D (1977) The return of the sacred? The argument
rusa. El tercer componente se refiere a los elementos of the future of religion. British Journal of Sociology
calvinistas e ilustrados, en relación con el proceso de 28(4): 419–49.
modernización. Y el último componente es la Bellah RN (1964) Religious evolution. American
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El autor parte de la pregunta sobre si todos los Benhabib S (2002) The Claims of Culture: Equality and
sistemas religiosos que existen en el mundo son Diversity in the Global Era. Princeton, NJ: Princeton
compatibles con la democracia. Su respuesta está University Press.

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Pérez-Agote La secularización

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Alfonso Pérez-Agote es catedrático de Sociología de la Universidad Complutense de Madrid.


Es coordinador del GERICR (Groupe Européen de Recherche Interdisciplinaire sur le
Changement Religieux). Entre sus libros encotramos: La nueva pluralidad religiosa (2009),
Religión y política en la sociedad actual (2008), The Social Roots of Basque Nationalism (2006) y
La situación de la religión en España a principios del siglo XXI (2005). [email:
aperezag@cps.ucm.es]

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