er
CONVERSACI
pero nunca llegué a transoribir las palabras del poeta, que hoy me sonarian si cabe
més llenas de sentido y emocién, y la cinta magnetofénica, con dos horas largas de
charla, se me quedé en el cajén de los proyectos como tantas cosas importantes que
algin dla, si el azar y la necesidad tejen su red, me veria en el punto de hacerlas;
me habia propuesto, en la mafiana del entierro civil de Ange! Gonzélez, transcribir la
entrevista y comprobar esa cercana reserva que tenia su voz: me parecia la mejor
forma de homenaje a un poeta que, a pesar de todas las apariencias, no ha muerto.
Ha muerto el amigo, el compafiero de farra, el devoto amante, el sutil merodeador
de la realidad que era Angel Gonzdlez: el poeta, ya les digo, sigue vivo. Las cenizas
que esparcieron sus cémplices mas cercanos son las cenizas del amigo, no las de
Quien supo decir el éspero mundo en solucién de armonia, Basta con que abran
sus libros, amigos lectores, para que las palabras respiren, para que un tiempo
distinto a este cobre vida en sus vidas. Me habfa propuesto, ya digo, quedarme en
casa, aplicado en el licor del ayer, que sabe a memoria y amistad, dandole forma
a aquella conversacién que, recuerdo, comenzé en las luces de Rubén Dario, tan
coruscantes, y acabé en el mismo antes de ayer de la poesfa, que casi es hoy
yes atin todavia; pero al final, ya se sabe, a uno le puede el momento, la fatige
del momento: gme perdonarfa acaso no estar donde deberia estar, diciéndole
adi6s a quien, sin exageracién ni imprecisién ninguna, puedo llamar grande?
Hace tres afios, con motivo de su 80 cumpleajios, la revista Clarin me propuso hacerle
una entrevista a Ange! Gonzélez. Se la hice, en la cafeteria del Hotel EI Magistral,‘Uno va a un entierro con la sensacién definitiva del golpe
de tlerra, del silencio que pesa y cae. Se encuentra alll con
amigos con la misma sensacién de pérdida: algo de nosotros
mismos, que no sabemos, se queda para siempre en la
ladera del cementerio de El Salvador, frente a esa ciudad
‘que nos gustaria, como en el poema, convertir en yegua para
darle una palmada sonora en sus nalges. La discrecién es
una cualidad que derrama a manos lenas quien posee el don
de la grandeza, Seré Oviedo una ciuded repipi, adocenada y
pija bajo un cielo gris, tod lo que quieren, pero sabe estar
y Ser. (Quien esta sin ser ni esté ni es.) Mientras entraba
por las puertas del cementerio soné mi movil. Era Pepe
Feito. gSabia yo que Angel Gonzdlez, en 1965, habia estado
fen Helsinki visitando con él al general Lister? Alf habien
coincidido, en una fotografia que prometie ensefiarme, con
Bertrand Russell. No, no lo sabia, podriamos hablar de ello
un dia de estos. |Sé atin tan poco de la vida, tan poco de las
cortientes profundes que se mueven bajo la transparencia
de [a realidad! Poco a poco, me fui avercando al lugar de
la ceremonla, tan poco ceremaniaso: @ Angel, sin dua, le
hubiese gustado (aunque estoy seguro aue, de poder, habria
eaitado el paso y se habria ido, con la musica a otra parte, a
‘tomarse por ahf un vermd eucaristico y rebelde). Lola Lucio y
Juan Benito Argiells, @ una distancia cariosa, observaban
el cortejo; José Luis Suarez, Pimpe, y Luis Mugueta templaban
su dolor como dos paisanos, Ilevandolo por dentro (les
pregunté por Faustino Alvarez, y me dijeron que estaba un
poco mas alld, pero no lo vi y bien que me pesé); Alfonso
CONVERSACIONES
Iglesias me saludé con un guifio; os chicos de la prense,
como se decfa antes, hacian su trabajo salpicando la pena
de sonoros flashes de silencio. Estdbamos todos y no estaba
ninguno pues no estaba ya quien todos quisiéramos que
estuviese. Of la vor de José Luis @arefa Martin recitando un
oema; 2 un lado, sentado sobre una cripta, José Manuel
Caballero Bonald refrenaba su pena por el amigo perdido:
no sé por qué imaginé que estaba componiendo en su
desesosegado silencio unos versos, enjoyados y preciso
como todos los suyos, por si se daba el caso incierto de
la eteridad y algin aa futuro, tras la muerte segura y la
improbable resureccién, habia oportunidad de compartir, en
una noche que fuese de la vida su mais perenne simbolo, sa
broma tan graciosa de la admiracién que esta inteligencia.
OF entonces la ditima carta, la Gitima carta de Angel
Gonzalez a su esposa, Susana Rivero, en la vor estremecida
de Luis Gare‘a Montero; quien muere amando no se muere del
todo, pues se queda en quienes ama, en quienes lo amen,
para siempre y mas, +Algin dia habria de suceder esto, trata
de ser feliz, un beso muy largo. Poco @ poco todos se fueron
yendo a su costumbre: nosotros nos fuimas, por los caminos
de este enero tan transparente, al restaurante El Chato, en
Santa Maria de Piedramuelle, Angel Gonzélez sabria deciles
or qué.
Dias mas tarde, a peticién generosa e insistente de José
Luis Garcia Martin, me puse a transcribirlas palabras de la
entrevista. El pudor,y la téenica literaria, me impide ahora
hablar de mis Kégrimas.CONVERSACIONES
—Acabo de leer tu br, La poesia y us circunstancias, y
ne descubierto en é! una vsin apasionada y epasionante de la
poesia espafola de! siglo xx. Po certo, me parece un manual
excelent, un libro que vale por muchos cursos univesiaros.
—Bueno, me alegra que te haya gustado. Como eritco,
‘como en casi todo en esta vida, ful un autodidacta. La ver.
dad es que ensefiar literatura en Nuevo Méjico me obligé @
escribir estos articulos. Cuando ensefias repites la lectura de
tun autor, de un poeta, vas viendo cosas, vas reflexionando
sobre las intuiciones que se te ocurren. Una y otra vez, afio
‘tras afo, volva sobre los mismos poetas y el resultado, creo
Yo, e5 este libro. Yo no soy un erudit ni he pretencido nunca
ser, Son iterpretaciones personales, lecturas personales.
—gOrees que un poeta lee de manera distnta?
—Yo creo que si. Un posta lee de manera dstinta a co-
imo lo hace, por ejemplo, un erulto, un catedrético, El poeta
yo creo que hace una lectura mass absoluta, con més implica-
Clones con el resto de la vida y con el resto de la Iiteratura,
—Percibo en tus estudoscrticos muchas afnidades elect
vas, una vertiente casi miltante, Te interes, sobre todo, quella
poesia que provende a lo lar, que se aja de! hermetismo.
—Defiendo la poesia como realidad e luminacién. No me
interesa la oscuridad, no me interesa el hermetismo, Simple-
mente es la poesta que me interesa a mi, le que yo aspiro a
hacer y es la que, en cierto modo, se puede medi. Porque lo
‘que es muy oscuro, muy hermético, no tiene para mi el don
de la sugerenciay, por lo tanto, no veo nada en ella. No en-
tiendo qué puede traer la confusi6n a un mundo que ya es
confuso de por sf
Cul es at uo le raz por ls que un poeta escrbe No creo que el tema salve la
sieos conus, balbucee y galas?
=Sineeramente creo que no saben hacer ota cose. Es poesia. Un poema de tema
aside sencillo. Y que cuando intentan hacer otra cosa no social o politico puede ser
les sale. Mir, ah est el caso de Gamoneda, un poeta cu-
ya obra responde a estas caracteristicas oscuras y herméti- muy malo o muy bueno. Lo
as, Una poesia que tiene mucho to dltimamente, que te- :
ne actos y deste, no 0 nego, pero ala que no le veo mismo te digo de un poema
consistencia, Gamoneda, cuando era poeta social. de tema reli: ri Los
Recverdo ahora su Blues castelnos un iro que me a e080
usté... enemigos de la poesia social
—éSI? Pues @ mi no me parecia un buen poeta social, eee .
simplemente, no me parece que se las arreglase muy bien argiiian que simplemente
on el discurso que exige la poesia, Gamoneda se ha que-
Jado, ha dicho que el grupo generacional del 50 lo ha exclui- con buenas L nciones no
4o... No sé. Me parece simplemente que no era un buen poe- se hacia buena poesia. Ni
ta realista, Ahora ha encontrado otro tono, y va sacando co- z
185, peo a mi no me interesan demasiado, con buenas ni con malas.
4 CLARIN