TEMA 1

EDAFOLOGÍA. EVOLUCIÓN DE ESTA CIENCIA Y

DEL CONCEPTO DE SU OBJETO DE ESTUDIO.
RELACIÓN DE LA EDAFOLOGÍA CON OTRAS
CIENCIAS.

La edafología o ciencia del suelo estudia la formación,

características, evolución y repartición de los suelos en la superficie
de la corteza terrestre, así como su uso racional.
El objeto de estudio de la edafología es el suelo, por tanto,
según como se defina el suelo variarán los límites y la forma de
estudio de esta ciencia. El concepto de suelo ha variado a lo largo del
tiempo, según el aspecto más importante que se haya formado para
su definición.
Ya en el neolítico, el hombre prefería asentarse en lugares que
tuvieran agua y suelo fácil de trabajar y fértil para cultivar los
vegetales de los que se alimentaban. El hombre consideraba al suelo
como medio para el desarrollo de las plantas y cuando las condiciones
les eran adversas y el suelo no les ofrecía lo que necesitaban,
abandonaban esos suelos y recurrían al nomadismo. Desde que se
inició la agricultura, el hombre ha ido adquiriendo conocimientos que
aumentaron con la expansión de la agricultura a regiones y suelos
distintos. Hay innumerables citas sobre el suelo en la Biblia, en los
tratados de la Roma antigua y en la Edad Media (en los tratados
árabes sobre la naturaleza).
A pesar de la importancia del suelo en la vida humana, los
conocimientos aportados por la agricultura del suelo fueron escasos
hasta finales del siglo XIX, cuando comenzó a estudiarse de manera
racional aplicando métodos y técnicas de otras disciplinas mucho más
desarrolladas desde un punto de vista utilitario. Así, dentro de los
estudios de la cobertera se puede mencionar a Berzelius (1803), que
llamó al suelo “laboratorio químico de la naturaleza, en el cual tienen
lugar las reacciones de descomposición y de síntesis”. Liebig
consideró al suelo como una especie de tubo de ensayo, en el cual
uno puede introducir nutrientes para las plantas. Para otros autores
contemporáneos como Fallou el suelo es una roca descompuesta, más
o menos desintegrada, distinta y separada de la roca nativa compacta
con una adición de materiales orgánicos. La roca cambiaba y el suelo
como tal ya no pertenecía a la roca madre, si no que era una
formación geológica por si misma (su criterio era estrictamente
geológico). Werner, Berent y Lang postularon que el suelo es el
producto geológico de una roca alterada en contacto con el aire. En la
última década del siglo XIX el geólogo ruso Dockuchaev dio una
concepción naturalista del suelo al descubrir que las distintas
unidades paisajísticas definidas por un cierto clima y vegetación
estaban correlacionadas con distintos tipos de suelos individualizados
por características diversas. A partir de este momento el suelo
empieza a ser considerado como un cuerpo natural con morfología
propia resultante de la acción del clima y la vegetación sobre una
roca con determinadas condiciones topográficas y durante un cierto
período de tiempo. Con estas ideas Dockuchaev admitía que el suelo
es el producto resultante de estos factores:
• Clima.
• Roca Madre.
• Seres Vivos (Flora y Fauna).
• Topografía.
• Tiempo.
El elemento mínimo que se puede considerar suelo es complejo
de definir ya que cambia en sus márgenes de un modo continuo hacia
otros tipos de suelo con características distintas. El suelo ocupa un
volumen que viene localizado en el espacio con el aire libre por arriba
y el sustrato geológico por debajo. El suelo varía en las tres
direcciones del espacio en desarrollo, propiedades y características
intrínsecas. Además el suelo varía con el tiempo, por tanto debe
considerarse variable en las 4 dimensiones. En esta capa superficial
transitan los residuos y productos de descomposición de materia
orgánica viva o muerta y los elementos procedentes de la atmósfera
(gases).
La formación y evolución del suelo por los factores ambientales
conduce a la formación de capas sucesivas de color, textura, espesor
y en general características distintas que reciben el nombre de
horizontes; el conjunto de horizontes de un suelo constituyen el perfil
edáfico, que es bidimensional. Las características de los horizontes
están gobernadas por una serie de factores relacionados entre sí. Por
consiguiente el suelo es algo que varía y que hay que considerar
como un ente dinámico en constante evolución. El perfil edáfico es el
primer paso para la constitución del suelo, pero para un estudio
completo no es suficiente ya que sólo tiene dos dimensiones, y por
tanto es el continuo suelo el que debe ser estudiado permitiendo así
el conocer sus características. La unidad de estudio del suelo es el
pedón, que se define como una columna de suelo con suficiente
material de cada horizonte para una caracterización en el laboratorio.
Es un prisma hexagonal con una superficie de 1-10 m2 dependiendo
de la variabilidad de sus horizontes. El concepto de pedón amplia el
de perfil edáfico al incluir una tercera dimensión estableciendo unos
límites de volumen que se deben considerar. Un cuerpo de suelo que
conste de más de un pedón se denomina polipedón, el cual
suministra la unión esencial entre las unidades básicas del suelo y las
unidades del sistema taxonómico del suelo. El polipedón se define
como uno o más pedones contiguos similares comprendidos todos
ellos dentro de un intervalo definido de un solo tipo de suelo. Se trata
de un cuerpo real físico y limitado por el no suelo (roca dura,
autopista, edificación…) o por pedones de carácter distinto. El tamaño
mínimo de un polipedón es de 1 m2, pero el máximo no se establece
ya que puede ser muy amplio (20 m2-151 km2). El polipedón es la
unidad de clasificación y sirve para cartografiar los suelos.
La definición actual de suelo lo considera como la materia
mineral no consolidada sobre la superficie terrestre originada por
factores ambientales (material original, clima, organismos y
topografía) que actúan durante un periodo de tiempo y que difiere del
material original del que deriva en determinadas propiedades físicas,
químicas, biológicas o en otras características.

RELACIÓN DE LA EDAFOLOGÍA CON OTRAS CIENCIAS

EDAFOLOGÍA Y LAS CIENCIAS DE LA TIERRA
• Petrología y Mineralogía: presentan una relación muy
estrecha porque los suelos se desarrolla siempre a partir de
una roca madre, que poco a poco se va meteorizando hasta
constituir un suelo, por tanto, todas las técnicas para
estudiar estas ciencias se emplean en edafología como el
microscopio de difracción de rayos X.
• Geomorfología: la topografía influye mucho en la formación
de un suelo, ya que a partir de un mismo suelo original se
pueden formar suelos diferentes dependiendo de ella. En los
procesos edafológicos se forman nuevos minerales. El tipo de
suelo también influye en la topografía, ya que suelos
deleznables formados por arcillas y limos son fácilmente
erosionables.
• Climatología: existe una interdependencia con ella. Por una
parte, el clima es el factor más importante en la formación
del suelo. Los climas agresivos producen alteraciones
importantes (simas) y los climas fríos producen escasa
alteración apareciendo suelos pocos desarrollados; la
precipitación tanto en cantidad como en distribución
temporal y la variabilidad de la temperatura va a influir
mucho en el suelo. Por otra parte, estudios recientes
muestran que el suelo actúa como sumidero de CO2
atmosférico, ya que hay suelos capaces de almacenarlo e
inmovilizarlo al convertirlo en carbonato inorgánico,
influyendo así en las variaciones climáticas.

EDAFOLOGÍA Y CIENCIAS DE LA VIDA

Las plantas viven en el suelo y dependiendo del tipo de suelo
aparecerán unas plantas u otras. La fauna vive en el suelo o sobre él
de modo que influye en su vida (sobre todo en la mesofauna y la
microfauna). Además, en el suelo hay gran cantidad de
microorganismos y su estudio es muy difícil. Por definición si no hay
vida no hay suelo, ya que todos los organismos al morir van a parar al
suelo donde sufren procesos de descomposición, también pueden
aparecer sustancias nuevas por síntesis como el humus.
 EDAFOLOGÍA Y LAS CIENCIAS APLICADAS
• Ciencias técnicas que se emplean en el aprovechamiento del
suelo con diferentes fines.
• Agricultura: suelos para cultivo de la uva que se destina a la
fabricación del vino pueden ser necesarios suelos muy
arcillosos como los vertisoles, los vinos de alta gradación
necesitan suelos con elevado contenido en CaCO3 como los
suelos calizos. Para un cultivo de cítricos se necesitan suelos
bien aireados con elevada concentración de hierro.
• Silvicultura: los robledales necesitan suelos ácidos.
• Ingeniería: antes de realizar cualquier obra se debe tener un
claro conocimiento de las características edáficas del lugar.

EDAFOLOGÍA Y LAS CIENCIAS FUNDAMENTALES

• Química: las leyes del equilibrio químico y los procesos red-
ox ocurren en el suelo.
• Física: el suelo presenta una serie de poros, grietas que le
otorgan una determinada densidad, por ello se habla de una
densidad aparente y una densidad real del suelo, esto influye
en propiedades como la escorrentía y la permeabilidad.
• Matemáticas: muchas propiedades del suelo se expresan en
formulas matemáticas.
• Estadística: para comprobar la relación entre parámetros del
suelo.
• Informática.

TEMA 2
NOCIONES FUNDAMENTALES Y ESQUEMA
GENERAL DE LA FORMACIÓN DEL SUELO.
El suelo es la fina capa de material fértil que recubre la corteza
terrestre, en la cual se asienta la vida. El suelo es un ente natural
organizado e independiente con unos constituyentes, propiedades y
génesis, que son resultado de la actuación de una serie de factores
activos (tiempo, seres vivos, clima y relieve) sobre un material pasivo
(roca madre). Por tanto, el suelo resulta de la transformación de los
materiales litológicos bajo la influencia de factores biológicos y
ambientales que evoluciona constantemente a lo largo del tiempo. En
definitiva, el suelo es un medio altamente complejo caracterizado por
unos constituyentes que resultan de la interacción de la litosfera,
atmósfera, hidrosfera y biosfera. De la biosfera obtiene los restos
orgánicos, de la hidrosfera el agua, de la atmósfera el aire y de la
litosfera los constituyentes inorgánicos. De esta interacción salen los
componentes del suelo y provoca que el suelo sea un sistema
disperso (Wiegner) que en su composición tiene una fase sólida con
una parte orgánica y otra inorgánica, una fase líquida compuesta por
agua denominada solución del suelo y una fase gaseosa compuesta
por aire.
La fase sólida está formada por los productos de la
descomposición de la roca y por minerales de nueva síntesis con
tamaño diverso (arcilla, limo, arena, grava…). Todos estos materiales
pueden sufrir transformaciones que otorgan propiedades al suelo.
Además existe una parte orgánica, ya que al suelo caen los residuos
vegetales y animales en proporción variable. Estos restos sufren
transformaciones que dan lugar a nuevas sustancias con grado de
dispersión variable.
La fase líquida está formada por el agua y la dispersión del
suelo. El agua de lluvia cuando llega al suelo disuelve el material
constituyendo la solución del suelo, que está formada por partículas
en suspensión en función del material original (roca madre).
La fase gaseosa está formada por todos los gases que rellenan
fisuras, poros, grietas cuando el agua se infiltra, evapora o es
absorbida por las plantas. A mayor profundidad disminuye el O2 y
aumenta el CO2 por la respiración radicular y la de otros organismos.
La fase líquida y gaseosa presentan una relación inversa y
varían mucho de modo que no sirven para caracterizar el suelo; para
caracterizar un suelo se utiliza la fase sólida.

CONSTITUYENTES DEL SUELO

CONSTITUYENTES INORGÁNICOS DEL SUELO
Proceden de material litológico de la roca madre, a partir del
cual se desarrolla el suelo por un proceso que se denomina
meteorización, el cual engloba todos los procesos de transformación
física y química del suelo, como consecuencia de los cuales algunos
constituyentes de los productos resultantes pasan a la solución del
suelo, ya sean cationes (Na+, K+, Mg2+, Ca2+…), aniones (SO4-2, Cl-2,
NO3-, HCO3-…) u oligoelementos (Cu, Zn…), que se encuentran en
proporción muy pequeña en los minerales primarios formadores de
rocas y que se liberan al descomponerse. También aparecen
materiales que no se alteran o que su alteración es muy escasa
constituyendo un residuo inalterado, que forma las fracciones gruesas
del suelo (gravas, arenas e incluso limos); estos componentes que no
sufren alteración influyen en las propiedades físicas del suelo, pero
muy poco o nada en las propiedades químicas. Hay constituyentes a
partir de los cuales se originan los minerales de la arcilla por el
proceso denominado arcillización; estas arcillas tienen propiedades
coloidales y le dan la fertilidad al suelo ya que adsorben bases y
nutrientes que ceden lentamente a la solución del suelo para que se
nutran las plantas. Esta arcilla puede aparecer de tres modos:
• Herencia: la arcilla existía en la roca madre antes de la
formación del suelo como en las margas que están formadas
por CaCO3 y arcilla. Las arcillas de las margas de la Región
de Murcia, que son de origen miocénico, suelen tener mucha
montmorillonita que aumenta de volumen al humedecerse y
disminuye de volumen al secarse, éste material puede pasar
al suelo a partir de las margas y pueden formar suelos
denominados redosoles calcáricos.
• Transformación:
o Transformación por degradación: cuando un filosilicato
pierde algún componente transformándose en otro,
como por ejemplo la pérdida de Potasio que transforma
a la Mica en Ilita y ésta a su vez en Vermiculita por la
pérdida de más Potasio.
o Transformación por agradación: por ejemplo cuando la
Mica gana Aluminio se convierte en Clorita alumínica.
• Neoformación: ante procesos de alteración muy intensos se
liberan los elementos constituyentes del mineral primario (Si,
MgO, Fe2O2…) y se combinan entre sí para dar un nuevo
mineral, cuya estructura es muy diferente del mineral
primitio. La Ortosa (Feldespato potásico) en climas
ecuatoriales, que se caracterizan por lluvias constantes y
temperatura elevada, se transforma en Caolinita. Estas
arcillas constituyen coloides de arcillas caracterizadas
porque son partículas eléctricamente negativas formando
coloides electronegativos.

CONSTITUYENTES ORGÁNICOS DEL SUELO

Proceden de restos vegetales y animales que sufren un proceso
de descomposición que tiene dos vías:
• Mineralización: los restos orgánicos por este proceso tienden
a constituir sustancias que pasan a la fase sólida, líquida o
gaseosa como el CO2, NH4+, NO3-, H2O, PO4-3, HPO4-2, H2PO4-,
Ca+2, K+....
• Humificación: la materia orgánica forma compuestos
húmicos de muy diverso grado de polimerización y
constituyentes, éstos se denominan coloides del humus y
reciben los nombres de huminas, ácidos húmicos, ácidos
fúlvicos y ácidos himatomelánicos según su estructura.
Constituyen un grupo de sustancias cuya composición y
estructura no se puede adscribir a grupos conocidos de la
 química orgánica tradicional, son más bien sustancias con
una composición muy compleja que se originan a partir de la
materia orgánica en medios edáficos exclusivamente. El
humus en conjunto se comporta como partículas coloidales
de pequeño tamaño cargadas negativamente.

Los coloides arcillosos y los húmicos dan las propiedades

químicas más importantes al suelo otorgándole fertilidad. Entre los
minerales de la arcilla se establecen uniones íntimas por medio de
cationes como el Hierro, Aluminio o Calcio, formando los denominados
complejos arcillo-húmicos. Estos complejos tienen una gran
importancia en el desarrollo y estabilidad de la estructura del suelo y,
por tanto, influyen en diferentes propiedades relacionadas con su
estructura. Los compuestos generados por la meteorización de la roca
madre, los obtenidos por la mineralización de componentes orgánicos
y los constituyentes orgánicos de la materia viva pasan a la solución
del suelo, y de ahí pueden ser adsorbidos por los coloides del suelo,
lavados por la lluvia o asimilados por las plantas.
Se establecen relaciones de equilibrio entre la solución del suelo
y las plantas, que vienen regidas por las propiedades de cambio
iónico del suelo, las cuales consisten en que los coloides del suelo
pueden adsorber cationes muy diversos y pueden ir cediéndolos de
forma progresiva al suelo y de ahí pasar a la planta según los vaya
necesitando. Si no hay coloides en un suelo, éste quedaría
desprovisto de base para la nutrición de las plantas después de la
meteorización.
La pérdida de elementos solubles por lavado se denomina
lixiviación, si afecta a sales poco solubles como el CaCO3 se denomina
descarbonatación, normalmente este CaCO3 no se pierde sino que se
transporta a horizontes más profundos en los cuales se acumula por
un proceso denominado calcificación. Cuando el elemento afectado es
el yeso a este proceso se le denomina gipsificación. Si el lavado
afecta a sales más solubles que el yeso, como los cloruros, se
denomina salinización. El lavado que afecta a bases solubles se
denomina desbasificación. Hay sales que pasan al suelo y se
inmovilizan por la hidrólisis que sigue a su oxidación, como el Fe+2 de
pirosenos y anfiboles que por la meteorización en condiciones
aerobias se oxida a Fe+3, el cual se puede hidratar dando lugar a un
material amorfo de color amarillento denominado Limonita
(Fe2O3·nH2O), la cual puede deshidratarse dando lugar a un material
pardo (proceso denominado empardecimiento) debido a que el hierro
cristaliza Goethita (Fe2O3·H2O) y si se deshidrata aún más queda como
un material rojizo (proceso que se denomina rubefacción) Hematites
(Fe2O3).
El Aluminio, al igual que el hierro, suele permanecer inmóvil en
el suelo, pero en casos de bajas temperaturas, precipitaciones
abundantes y vegetación acidófila se produce la polsolización
(formación de polsoles), en la que Hierro y Aluminio forman complejos
pseudosolubles con componentes orgánicos y migran acumulándose
en profundidad.
 La arcillización a pH ligeramente ácido (6-6.5) después de
haberse descarbonatado y desbasificado el perfil se puede traslocar
la arcilla por movilización mecánica acumulándose en profundidad, a
este proceso se le denomina Ilimerización.

TEMA 3
EL SUELO COMO ENTE NATURAL DINÁMICO.
INICIACIÓN A LA ORGANIZACIÓN
MORFOLÓGICA DE LOS SUELOS: HORIZONTES
GENÉTICOS.
La formación del suelo por la influencia de los factores
ambientales (clima, topografía, tiempo, orogenesis…) contribuye a
que se den procesos de edafogénesis tanto generales (meteorización,
humidificación…) como específicos (gipsificación,
descarbonatación…). El resultado de estos procesos es la formación
de capas sucesivas de textura, estructura y/o color específicos que se
denominan horizontes, el conjunto de los cuales se conoce como
perfil. Las características de un perfil se deben estudiar tanto desde
un punto de vista macromorfológico como analitico.
Los símbolos utilizados para designar los horizontes son en
primer lugar letras mayúsculas (H, O, A, E, B, C, R) que indican los
horizontes principales, que son horizontes genéticos que indican
formas de evolución de un suelo a partir de la materia original. Se
usan en segundo lugar letras minúsculas (b, t, m, k…) como sufijos
para caracterizar los horizontes principales en términos de modo de
evolución. Aparecen también cifras árabes como sufijos para indicar
una subdivisión vertical de un horizonte (H1, H2, H3…). Se usan
también cifras arábigas delante de las letras mayúsculas para indicar
discontinuidades litológicas.

HORIZONTES GENÉTICOS
• Horizonte H: dominado por la acumulación materia orgánica
sin descomponer o parcialmente descompuesta que aparece
en la superficie del suelo; además, suele encontrarse
saturado de agua durante períodos prolongados de tiempo o
estuvo saturado y en la actualidad está drenado
artificialmente. Es un horizonte característico de turberas
(pantanosas o semipantanosas donde cae gran cantidad de
vegetación típicamente hidrófila). Este horizonte se
encuentra en la parte superior de suelos minerales o a
cualquier profundidad bajo la superficie si está enterrado.
• Horizonte O: dominado por material orgánico compuesto por
hojarasca no descompuesta o parcialmente descompuesta
que se han acumulado en la superficie del suelo. Se puede
encontrar tanto sobre suelos de tipo mineral como de tipo
orgánico. Este horizonte no se encuentra saturado de agua
durante periodos prolongados, su fracción mineral ocupa un
porcentaje pequeño del volumen de material (generalmente
mucho menos de la mitad). Es frecuente en suelo de bosques
o en zonas de vegetación continua, pero caducifolia;
además, se puede encontrar en la superficie o enterrado a
cualquier profundidad.
• Horizonte A: horizonte mineral formado en la superficie o
bajo un horizonte O. Se encuentra en regiones de climas
áridos o semiáridos y cálidos; el horizonte superficial es
menos oscuro que el horizonte subyacente y sólo contiene
una pequeña proporción de materia orgánica, presenta una
morfología diferente a la del horizonte C debido
fundamentalmente a los procesos de meteorización. Buena
parte de la estructura original ha desaparecido, se
caracteriza por una o más de las siguientes características:
o Acumulación de materia orgánica humificada,
íntimamente remezclada con la fracción mineral y que
no presenta características de los horizontes B o E.
o Propiedades que resultan de las labores de labranza,
pastoreo o una acción antrópica en general.
o Morfología diferente del horizonte B o E subyacente
por procesos de meteorización superficial de la roca
madre.
• Horizonte E: horizonte mineral cuyo rasgo principal es la
pérdida por lavado de arcilla, materia orgánica, Hierro,
Aluminio o una combinación de estos, dejando en el
horizonte una elevada concentración de arena y limo,
 además de haber desaparecido buena parte del material
original. Es un horizonte eluvial o de lavado, ha perdido gran
parte de los constituyentes, suele estar debajo de un
horizonte A/O y siempre encima de un horizonte B. Está
mucho más coloreado que los horizontes adyacentes (color
gris ceniza) y se le denomina horizonte álbico.
• Horizonte B: horizonte mineral de profundidad, la estructura
de la roca madre está destruida por completo o en gran
parte y además posee uno de los siguientes caracteres:
o Concentración Iluvial: acumulación de arcilla, Yeso, Fe,
Al, CaCO3, SiO2…
o Concentración residual de óxidos de Hierro o Aluminio
con relación al material original.
o Alteración del material original con formación de
arcilla, liberación de óxidos o desarrollo de una
estructura (bloques, prismática, granular…) originada
por las variaciones de volumen en el contenido de
agua en el suelo.
Los horizontes B pueden ser de acumulación/iliviación o de
alteración:
o Bw: horizonte de alteración moderada.
o Bs: horizonte de alteración muy fuerte.
o Bt: horizonte de acumulación de arcilla.
o Bh: horizonte de acumulación de humus.
o Bk horizonte de acumulación de CaCO3.
• Horizonte C: horizonte mineral o capa de material poco
consolidado y poco afectado por la edafogénesis, no tiene las
propiedades de ningún otro mineral. Presenta materiales
geológicos que se pueden disolver al ponerlos en agua 24
horas o romperse si están humedecidos. Pueden presentar
acumulaciones de CaCO3 (Ck), Yeso (Cy) u otras sales más
solubles (Cz).
• Capa R: roca consolidada continua que subyace en algunos
perfiles de suelos, es lo suficientemente coherente cuando
está húmeda para no permitir que se cave con una azada.
Puede contener grietas, pero son escasas y poco profundas
no permitiendo que se desarrollen raíces.

HORIZONTES DE TRANSICIÓN
Estos horizontes aparecen cuando el límite entre horizontes
inmediatos es difuso, existiendo una zona de transición de
características intermedias y se nombran con dos letras mayúsculas
(AB, BA, BC, CB…), donde la primera letra indica el horizonte principal
al cual se parece más el horizonte de transición. Hay un tipo especial
de horizonte transicional que se da cuando el límite es con la roca
madre subyacente y el límite es claro.
 Las letras sufijo son letras minúsculas que se añaden a las
letras mayúsculas para clasificar el horizonte principal. Son muy
variadas e indican el proceso más importante que ha ocurrido en ese
horizonte. En ocasiones, pueden existir dos símbolos que se combinan
entre sí para indicar propiedades que se dan simultáneamente en el
mismo horizonte. Las letras utilizadas como sufijos para calificar los
horizontes principales son las siguientes:
• Xc: horizonte con acumulación en forma de concreciones,
normalmente se utiliza en combinación con otro para indicar
la naturaleza del material concrecionado (cs: concreciones
de sesquióxidos; ck: concreciones de CaCO3).
• Xn: horizonte nátrico (de acumulación de Sodio).
• Xs: horizonte con alteración muy intensa y acumulación de
sesquióxidos de Hierro y Aluminio.
• Xg: horizonte con manchas de color, resultantes de
variaciones del estado de oxidación-reducción en horizontes
sometidos estacionalmente a hidromorfía. Se da en
horizontes encharcados o saturados en agua al menos una
época del año. Cuando el suelo está encharcado el Hierro se
encuentra como Fe+3 y cuando no está encharcado se
transforma a Fe+2.
• Xh: horizonte mineral con acumulación de materia orgánica
(humus). Se emplea para definir un horizonte de lavado con
posterior acumulación de humus, se puede observar en
suelos denominados polsoles (Bh) o en suelo de bosque (Ah).
• Xm: horizonte fuertemente consolidado, se suele representar
con otra letra para decir la naturaleza del elemento
cementante.
• Xp: horizonte alterado por la acción de labranza (sólo se
observa en horizontes superficiales).
• Xt: horizonte con acumulación iluvial de arcilla, es decir, se
ha producido un lavado de arcilla en el horizonte superior.
• Xw: horizonte de alteración moderada con neoformación de
arcilla, liberación de óxidos de Hierro o un cambio en la
estructura.
• Xy: horizonte con acumulación de yeso.
• Xz: horizonte con acumulación de sales más solubles que el
yeso (haluros).
• Xk: horizonte de acumulación de CaCO3, que puede ser en
forma de micelios, manchas pulverulentas, concreciones…

Las cifras sufijo se emplean para subdividir verticalmente los

horizontes principales, numerando cada una de las subdivisiones de
manera consecutiva, comenzando siempre por la parte superior del
horizonte.
Las cifras prefijo se utilizan para distinguir discontinuidades
litológicas.
 TEMA 4
MORFOLOGÍA Y DESCRIPCIÓN DE SUELOS.
PROPIEDADES OBSERVADAS E INFERIDAS.
METODOLOGÍA PARA EL ESTUDIO
MACROMORFOLÓGICO DEL SUELO.
Para estudiar un suelo, primero se observa
macromorfológicamente con caracteres más o menos observables y
que reflejan la acción de los procesos formadores del suelo, estos
procesos dan información de las condiciones ambientales que dieron
lugar a estos procesos, pudiendo deducir clima y vegetación del
momento de la formación del suelo. Las características observables
de un suelo son las relacionadas con su disposición en horizontes
(espesor, composición…) y observables en el campo (color, estructura
y consistencia). A veces estos procesos permiten interpretar o incluso
predecir el comportamiento de las plantas y la tendencia del suelo
frente a cambios de uso o actuaciones tecnológicas. La morfología se
puede observar también por técnicas analíticas en el laboratorio
(químicas, físicas) u otras observaciones (microscopio de lámina
delgada, microscopio petrográfico, lupa…). Las características
morfológicas permiten conocer información del suelo rápida y
económicamente.

PROPIEDADES OBSERVADAS E INFERIDAS

Las relaciones existentes entre características morfológicas y
otras propiedades de interés como la utilización del suelo o la
edafogénesis permiten la inferencia.
 Una prospección edafológica adecuada tiene en consideración
propiedades relacionables con la formación del suelo y con su
tendencia en el uso del suelo.
• Límite del horizonte: es el espacio o amplitud en el que hay
un cambio de horizonte:
o Abrupto:
 Si el cambio se produce en menos de un
centímetro puede indicar laboreo (Ap) formando
la denominada “suela de labor”, en la cual donde
no llega el arado no entran las raíces ni el agua.
 Un suelo muy antiguo no presenta horizontes
intermedios.
 Contacto lítico.
o Irregular:
 Con lenguas o interdigitaciones: puede indicar
actividad de la macrofauna y la mesofauna.
Amplias suturaciones que se corresponden con
árboles arrancados por el viento.
 Con lenguas o interdigitaciones de contacto
abrupto, pueden ser zonas de lavado preferente
y e agua percolaba por una grieta o cavidad.
• Espesor del horizonte: sobre todo en los epipedones
(horizontes superficiales) está relacionado con el crecimiento
de las plantas, cuanto mayor es el horizonte A mayor es el
crecimiento de la flora. Un horizonte A muy potente (50
centímetros) puede deberse a gramíneas, apareciendo
horizontes A1, A2, y A3; siendo el horizonte A3 el que tiene
más materia orgánica ya que en los horizontes superiores se
ha mineralizado por acción del arado.
• Profundidad del suelo: distancia hasta que alcanza la roca
madre, a mayor profundidad mayor es la probabilidad de
enraizar, mayor es la disponibilidad de agua y nutrientes y
muestra también la actitud del suelo para uso agrícola.
• Color: es fácil de observar y medir en el campo (tablas de
color). Puede indicar muchas cosas:
o Color oscuro:
 Minerales melanocratos y materia orgánica.
 Humificación (materia orgánica).
 Minerales ferromagnesianos (pirosenos,
anfiboles, micas…).
 Material original (los esquistos tienen color gris
negruzco).
 Óxidos de Hierro o Manganeso (Pirolusita: MnO2)
dan color negruzco, sobretodo en suelos
hidromorfos.
 Lapilli, cenizas de un magma básico (Basalto)
que dan lugar a los Andosoles.
o Color claro:
  Minerales leucocratos.
 Arenas cuarzosas (Cuarzo).
 Caliza (Calcita).
 Yeso.
 Materiales volcánicos ácidos (Pumitas y Riolitas).
 Cloruros (Halita: NaCl; Silvina: KCl).
o Rojo o Amarillo:
 Por óxidos de Hierro (Limonita: amarillento;
Goethita: pardo; Hematites: rojizo).
 El suelo encharcado no tiene oxígeno y los
compuestos de Hierro y Magnesio se reducen
dando colores grises que indican reducción, si
aparecen manchas rojas indica procesos de
oxido-reducción.
• La presencia de elementos gruesos es representativa de
muchas cosas, como de la disminución de volumen de suelo
que pueden explorar las raíces. Presentan también
dificultades para la mesofauna y para el laboreo. Además de
tener menor tendencia a la compactación y a la
cementación.
• Textura: los suelos arenosos gozan de buenas propiedades
físicas, pero malas propiedades químicas y en los suelos
arcillosos ocurre justo lo contrario. Los suelos arenosos son
permeables, bien aireados pero con baja fertilidad química y
los arcillosos son muy compactos, pesados pero con mayor
fertilidad química.
• Estructura: los suelos bien estructurados tienen buena
aireación, el movimiento del agua es fácil y presentan menor
erosión.
• Consistencia: resistencia que ofrece un agregado de un suelo
a romperse cuando recibe cierta presión. Si un suelo es muy
compacto y consistente se impide el paso de las raíces,
pierde aireación, adquiere gran adherencia…
 TEMA 5
DESCRIPCIÓN DE LOS HORIZONTES DEL SUELO
EN EL CAMPO: PROPIEDADES MÁS
IMPORTANTES.
Antes de proceder a la toma de muestras se efectúa una
descripción macromorfológica del suelo. Las características se
recogen en una ficha de campo. La descripción completa del perfil es
laboriosa:
• Número de perfil.
• Fecha.
• Situación.
• Coordenadas UTM
• Datos de la zona:
o Altitud.
o Pendiente (1-6).
o Posición fisiográfica (meseta, cuenca…).
o Geomorfología circundante.
o Macrotopografía: para lo que se utiliza un libro de
claves de FAO.
o Vegetación, cultivos…
o Régimen de humedad: hay unos regímenes
establecidos (serico, salinico…).
o Régimen de temperatura: en tablas.
o Material original: la roca madre que formó el suelo
(marga, caliza…).
o Condiciones de humedad del suelo.
o Drenaje: velocidad de infiltración del agua en el suelo,
está muy relacionado con la textura.
o Pedregosidad: referido a la superficie.
o Afloramientos rocosos.
o Sales: se pueden observar solamente si el suelo está
seco.
o Clase y tipo de erosión.
• Esquema morfológico del perfil.
• Horizontes:
o Color: se usan claves tanto en seco como en húmedo.
o Manchas: se observan características como la
abundancia, tamaño, nitidez, contraste, color… y se
observan tablas y gráficos para saber el porcentaje de
superficie que está ocupado por las manchas.
o Textura: se determina en el laboratorio por
sedimentación y se puede estimar en el campo con el
suelo seco y húmedo haciendo un cordón e intentando
arquearlo, que viene determinado por la presencia de
arcilla. Se clasifica en el triángulo de textura.
• Estructura: según la forma y tamaño de los agregados al
separar las unidades estructurales de un suelo seco. Los
suelos que carecen de estructura son consecuencia de que
las partículas del suelo permanecen sueltas y no en forma de
agregados (arena). Existen agentes cementantes como
óxidos de Hierro, humus, CaCO3, arcillas… que unen las
partículas formando agregados que se pueden observar en
los suelos secos más o menos agrietados. Las formas pueden
ser redondeadas con estructura grumosa formada por
arenas, limos y arcillas o fragmentadas con mayor cantidad
de arcilla dando agregados cúbicos, prismáticos,
laminares…. Existen tablas para definir la clase y tipo de
estructura:
o Clase: según el tamaño (fina, gruesa…).
o Tipo: según la disposición de los agregados:
 Laminar: generalmente aparece en superficies de
suelo, pero pueden aparecer también en
profundidad en los fluvisoles (se forman por el
deposito sucesivo de materiales aluviales en las
frecuentes avenidas que sufren de cualquier
curso hidrográfico).
 Prismática: Típica de horizontes con acumulación
de arcilla (horizonte árgico). Están formados por
grietas que resultan de la desecación del suelo.
 Columnar: presentan la parte superior
redondeada, es característico de horizontes
arcillosos o fuertemente saturados en Sodio, que
forman el horizonte nátrico en suelos
denominados solonets.
 Agregados equidimensionales:
• Angulares: tienen aristas rectas y sus caras
son más o menos rectangulares, típico en
horizontes Cámbicos (Bw).
• Poliédricos: tienen aristas agudas y caras
redondeadas característico de zonas áridas
o semiáridas, típico de horizontes A
ócricos, horizontes Bk y horizontes Ck.
 Agregados granulares: constituyen agregados
redondeados más o menos esféricos y poco
porosos. Típicos de suelos biológicamente
activos en la superficie con abundante material
orgánico. Característico del horizonte A móllico.
 Agregados grumosos: agregados muy porosos,
embeben gran cantidad de agua que utilizaran
las plantas más tarde. Horizonte A con mucha
materia orgánica y CaCO3. Característico de
zonas áridas en horizontes A móllico con
cobertura vegetal densa.
• Consistencia: estabilidad de la estructura, se determina en
seco y en húmedo. Es la resistencia que ofrece un agregado
o suelo a romperse cuando se le somete a una presión. Dos
características muy relacionadas miden la consistencia del
suelo, son adhesividad (se mide humedeciendo el suelo y se
observa si se queda adherido al dedo tras presionar o no) y
la plasticidad (se mide intentando formar un cordón
húmedo).
• Cutanes: recubrimientos del suelo que pueden ser de arcilla
o de óxidos de Hierro.
• Cementación: expresa la capacidad de algunas sustancias de
unirse al suelo con gran cohesión, dando lugar a capas
endurecidas.
• Poros: se mide abundancia y tamaño.
• Fragmentos rocosos: se debe medir su abundancia, tamaño,
forma y naturaleza, lo cual se debe hacer partiendo el
fragmento con un martillo.
• Nódulos minerales: se forman por la reprecipitación de
sustancias que se han disuelto en los horizontes superiores
del suelo y han sido transportadas a profundidad en la
solución del agua, donde posteriormente han reprecipitado
en cantidad suficiente como para cementar fuertemente
algunas partes o la totalidad del horizonte subyacente.
También pueden recibir el nombre de concreciones y pueden
ser de CaCO3, Silicio, óxidos de Hierro..., y en general,
cualquier sustancia capaz de disolverse y volver a precipitar.
A veces la acumulación es tan grande que puede haber una
fuerte cementación, que dará lugar a una capa endurecida
(costra caliza). El color de estos nódulos varía según sus
componentes, puede ser rojizo (óxidos de Hierro), marrón
rosáceo (arcilla), rojo (Hematites), pardo (Goethita)... y
suelen tener una forma redondeada, a veces casi verrugosa.
• Contenido en carbonatos: se mide efervescencia con HCl
diluido al 10%.
• Manchas y sales: si el suelo está seco las sales se pueden
detectar por la presencia de manchas. Para el Yeso es difícil,
ya que tiene una conductividad muy baja y no sirve el
conductivímetro. La presencia de Yeso se puede inferir por la
vegetación, ya que hay vegetación que sólo aparece en
suelos yesíferos.
• Capas endurecidas: cementan lo que encuentren al precipitar
masivamente formando costras que impiden la penetración
de las raíces (costra caliza Ckm; Horizonte petrocálcico;
óxidos de Hierro: Horizonte pláquico que es de poco espesor;
costras ferruginosas: Horizonte petroférrico; Yeso endurecido:
Horizonte setogípsico...). Puede tener estructura aglomerada
(es una masa), vesícular (esponjosa) o isolítica (nódulos
esféricos cementados).
• Restos de actividad humana: plásticos, vidrio, ladrillos,
carbones, restos arqueológicos...
• Rasgos de origen biológico: agujeros, canales dejados por
gusanos (krotovinas), mudas de insectos huecos dejados por
las raíces al descomponerse...
• Raíces: se mide abundancia y tamaño.
• Límite: pueden ser transicionales (más de 12 centímetros),
graduales (entre 5 y 12 centímetros), netos (entre 2 y 5
centímetros) o bruscos (menos de 2 centímetros).
• Observaciones: para anotar cualquier cosa interesante que
no se pueda recoger.
 TEMA 6
MÉTODOS DE MUESTREO DEL SUELO. TOMA DE
MUESTRAS INALTERADAS: DETERMINACIÓN DE
PROPIEDADES FÍSICAS. OBTENCIÓN DE
MONOLITOS.
La toma de muestras es la etapa más importante en el estudio
del suelo, por muy buenos y sofisticados que sean los métodos de
laboratorio que se van a emplear, los análisis sirven de poco si las
muestras no son homogéneas y representativas del material a
utilizar, es decir, deben coincidir con la media teórica ya que el error
cometido en el laboratorio es de 3 a 6 veces menor que el producido
en la toma de la muestra. La descripción de un perfil no es completa
si no va acompañada de datos de laboratorio.
El perfil del suelo debe de constituir un ejemplo típico de los
suelos de la zona que se pretende estudiar y las muestras se suelen
obtener de este perfil. Existen tres tipos principales de muestras a
tomar de un suelo para su estudio en el laboratorio y se obtienen
según los distintos métodos de muestreo de suelos:
• Muestras con estructura alterada: se toman del perfil
después de haber delimitado los horizontes, se deben
colocar las muestras en bolsas de plástico grueso con cierre
hermético y no echar piedras, ya que es necesario echar 1-
1’5 kilogramos de tierra fina que se obtiene de un tamiz de 2
milímetros, ya que por debajo de 2 milímetros el agua
muestra su capacidad de adhesión. Estas muestras se
emplean para estudios químicos como la determinación de
carbonatos, salinidad, cationes y aniones, Nitrógeno y
Carbono orgánico, estudios fisicoquímicos como pH y físicos
como granulometría y mineralogía (arenas, limos y arcillas).
Se debe muestrear de abajo hacia arriba. En los límites no se
muestrea, a no ser que el límite sea progresivo formando un
horizonte intermedio. A veces se toman muestras de capa
arable para estudios agronómicos de 0-30 centímetros de
profundidad (aunque se pueden hacer ambas cosas). Para el
estudio de la capa arable se hace un cuadrado en la
superficie de suelo de 10-20 metros de lado y se toma una
muestra en cada esquina y una central (un total de 5
submuestras).
• Muestras con estructura intacta:
o Caja Kubiena: se toma una caja Kubiena de cada
horizonte, son cajas rígidas estandarizadas de 6 x 8 x 4
centímetros, se embeben en resinas transparentes que
endurecen el suelo y al ser transparentes permiten que
se pueda cortar el suelo formando laminas delgadas
para estudiar la micromorfología del suelo, que permite
observar rasgos edáficos que pasarían desapercibidos.
 o Cilindros metálicos: se utilizan para determinaciones
físicas como la densidad aparente, porosidad,
permeabilidad, liberación de agua...
• Muestras tomadas intactas del perfil completo: se pueden
utilizar cajas metálicas o de madera alargadas de dos o más
metros de profundidad (tamaño estándar de 15 x 8 x 100-
200 centímetros) o métodos adhesivos con el fin de obtener
el perfil completo. Esto no siempre se puede hacer
dependiendo de la pedregosidad del suelo o de su textura,
para lo que se utilizan resinas que sirven de cementantes de
partículas. Actualmente se están empleando métodos
autoadhesivos, impregnando el suelo de una sustancia
cementante. Este método se suele utilizar para museos y
para hacer estudios de permeabilidad y lavado del suelo.

TEMA 7
DETERMINACIONES ANALÍTICAS DEL SUELO EN
EL LABORATORIO.
Dentro de los métodos que se utilizan en el laboratorio hay unos
que se denominan generales y otros que se denominan específicos.
Aunque los métodos generales también varían en el sentido de que
un análisis como la salinidad es un análisis específico, pero como en
el sureste español aparecen gran cantidad de sales se vuelve un
análisis general.

DETERMINACIONES GENERALES
DETERMINACIONES FÍSICAS
• Color: tanto en seco como en húmedo según las tablas.
• Consistencia.
• Granulometría: por el método de sedimentación utilizando la
ley de Stockes (v=k· r2). Se utiliza para conocer el porcentaje
de arena, limo y arcilla de un suelo. Es un análisis sencillo
pero muy lento.
• Humedad del suelo: en una olla de presión se le comunica
una presión negativa para extraer el agua utilizable por las
plantas.
• Densidad aparente: en este método el volumen real es el
que ocupan las partículas de suelo y el volumen aparente es
el que ocupan las partículas de suelo más el espacio
ocupado por grietas y poros. Para estudiar la densidad se
utiliza el picnómetro.
• Permeabilidad o Conductividad hidráulica: es la capacidad
del agua para atravesar el suelo, estos conceptos están
relacionados con la capacidad de infiltración (m/s2).
 DETERMINACIONES QUÍMICAS
• Carbono orgánico.
• Nitrógeno total: para evaluar la relación Carbono/Nitrógeno
(de gran importancia para conocer el tipo de humus).
• pH en agua y en KCl: para medir la acidez real (agua) y la
potencial (KCl 1M).
• Carbonato cálcico total y activo.
• Capacidad de cambio catiónico: se utiliza para ver la
fertilidad del suelo. Es la capacidad de ceder bases (Ca +2,
Mg+2, K...) a la solución del suelo y de ésta a las plantas y se
corresponde con la cantidad máxima de cationes que el
suelo puede fijar y se representa en centimoles de carga
positiva por kilogramo (cM/Kg). A mayor cantidad de arcilla y
humus mayor es la capacidad de intercambio, ya que son
capaces de captar los cationes e ir cediéndolos lentamente a
la solución del suelo.

DETERMINACIONES ESPECÍFICAS
Dependen del tipo de suelo:
• Sustancias húmicas: se realiza en suelos con gran cantidad
de materia orgánica. Las sustancias húmicas están
compuestas por:
o Ácidos fúlvicos.
o Ácidos húmicos.
o Ácidos himatomelánicos.
o Huminas.
Se pueden separar con pirofosfato sódico y tratamiento con
ácidos y alcohol.
• Contenido en Yeso: se realiza en zonas áridas o semiáridas,
ya que aparecen suelos como los gipsisoles caracterizados
por tener un horizonte de acumulación de Yeso.
• Contenido en fosfato asimilable: se realiza en estudios
agrícolas, sólo el fosfato asimilable es soluble.
• Otros elementos asimilables: Cobre, Zinc, Manganeso.... Las
plantas los necesitan en pequeñas cantidades; Zinc y
Manganeso se utilizan para determinar la fertilidad.
• Extracciones secuenciales: para detectar si un suelo está
contaminado (aparecen elementos que a altas
concentraciones son tóxicos). En los alrededores de antiguas
explotaciones mineras aparecen suelos con altas
concentraciones de Plomo, Zinc, Cadmio o Mercurio. Aparte
de medir la concentración de estos elementos en el suelo se
debe estudiar si aparecen inmovilizados o libres. La
extracción se puede dividir en dos partes:
o Agua destilada: se extraen los más tóxicos.
o Otros agentes extractantes: específicos para las
distintas formas que aparecen los elementos.
 MÉTODOS DE GABINETE
Análisis de resultados y estudio de la localización del suelo:
• Mapa de suelos.
• Análisis hídricos según los estudios y meteorología más
cercanos. De este modo se pueden estudiar los regímenes de
humedad del suelo para hacer una clasificación.
• Programas informáticos para clasificar y evaluar los suelos.

TEMA 8
TÉCNICAS AVANZADAS EN EL ESTUDIO DEL
SUELO.
Son técnicas especializadas que permiten profundizar en el
estudio de la organización del suelo y en la naturaleza de sus
constituyentes. Las técnicas empleadas para estudiar como se
encuentran asociados los constituyentes del suelo y sus relaciones
necesitan utilizar muestras inalteradas, las cuales se van a estudiar
en un microscopio de polarización (100-700 aumentos) o en el
microscopio electrónico (100000 aumentos). La microscopia
electrónica informa sobre génesis y procesos edáficos del suelo.
Existen técnicas mineralógicas para identificar los constituyentes
inorgánicos del suelo (minerales).

ESTUDIO MICROMORFOLÓGICO
• La materia orgánica indica fertilidad, da color oscuro al suelo.
Cantidades normales de materia orgánica en el suelo están
en torno al 1-2% y puede llegar al 6-8% como máximo. Los
 suelos naturales tienen más materia orgánica que los
cultivados, ya que estos últimos se mineralizan debido a la
mayor aireación.
• NPK: índice que mide nutrientes esenciales para las plantas
(Nitrógeno, Fósforo, Potasio). El Fósforo se estudia por
colorimetría (cuanto más fósforo hay más fértil es un suelo).
El Sodio, Magnesio y Potasio se extraen conjuntamente y se
miden por absorción atómica. El Hierro, Cobre, Manganeso y
Zinc también se extraen conjuntamente y se miden por
absorción atómica, en general cuanto mayores sean sus
niveles más fértil es el suelo.
• Nitrógeno: es un macronutriente esencial, suele estar muy
relacionado con el Carbono, presenta unos valores normales
de 100-200 miligramos de Nitrógeno por cada 100 gramos
de suelo. El Nitrógeno y el Carbono suelen disminuir al
aumentar la profundidad.
• Relación Carbono/Nitrógeno: es un calculo posterior, se
deben poner en las mismas unidades y el resultado no tiene
unidad, sirve para diferenciar tipos de humus:
o Relación C/N = 20-50: humus Moor; poco evolucionado,
parecido a la materia orgánica.
o Relación C/N ~ 20: humus Moder.
o Relación C/N < 10: humus Mull; muy evolucionado
(característico en sureste español).
• CaCO3: en el sureste español los suelos son muy calizos, por
tanto es una determinación rutinaria en la región.
o CaCO3 activo: es la fracción más fina del total inferior a
50 micromoles y es la más reactiva.
• pH: da idea de la acidez o basicidad del suelo. A pH básico la
mayoría de los elementos se encuentran precipitados (como
en el sureste de España donde el pH típico es de 7-8 debido
al CaCO3).
o pH en ClK: en esta medida de pH cuanto más se parece
al pH del suelo en el agua quiere decir que está más
saturado en bases como Potasio, Calcio, Magnesio y
Sodio; y cuanto más se distancia del pH en agua
significa que aparecen protones o incluso Al+3. En el
sureste español es característico que sean iguales o
que varíen en décimas.
• Capacidad de cambio del suelo (D ó CCC): es la capacidad
del suelo para intercambiar iones (nutrientes) con la solución
del suelo. Da una idea de la fértilidad del suelo (A mayor
capacidad de cambio del suelo mayor fertilidad). Esta
propiedad depende de las cantidades de materia orgánica y
de arcilla.
• Conductividad eléctrica: indica la salinidad, suele ser
negativa en el suelo. Una conductividad de 1-2 decisiemens
por metro indica pocas sales en ese suelo, pero un valor
 mayor de 2 decisiemens por metro significa que la salinidad
es alta y se procedería a la
determinación de los iones más
frecuentes (Cl-, SO4-2, NO3-, CO3-2, HCO3-,
Na+, K+, Ca+2, Mg+2) en miligramos o RAS = Na
+
miliequivalentes por litro. Ca+2 + Mg+2
o Razón de absorción de Sodio 2
(RAS): calculo posterior a la
medida de la conductividad eléctrica. Indica la
predominancia de Sodio, ya que dota al suelo de la
alcalinidad (valores de 15 o mayores son demasiado
altos).
• Porcentaje de sales solubles: solamente se realiza en
muestras yesíferas, la cantidad de yeso se determina por
turbidimetria (se miden los aniones sulfato).
• Retención hídrica: cantidad de agua que retiene el suelo
entre dos presiones que son:
o 0’33 atmósferas: se corresponde con el agua útil que
pueden tomar las plantas.
o 15 atmósferas: punto de marchitamiento permanente.
• Granulometría: da el porcentaje en gránulos de:
o Arcilla: gránulos de menos de 2 micrómetros.
o Limo: gránulos entre 2 y 50 micrómetros:
 Limo fino: entre 2 y 20 micrómetros.
 Limo grueso: entre 20 y 50 micrómetros.
o Arena: gránulos entre 50 micrómetros y 2 milímetros.
• Textura: da idea de la permeabilidad, capacidad de retención
hídrica, aireación, facilidad de laboreo... Un suelo fértil tiene
una estructura compensada (franca), ya que la arena tiene
buenas propiedades físicas y la arcilla tiene buenas
propiedades químicas.

UNIDADES DE ORGANIZACIÓN DEL SUELO

 • Peds: agregados individuales naturales de un suelo formados

Ped
primari
o

Pedotúbu Nódulo
lo Ped
secundar
Vacíos
io

Cámara Ped
Skeletan Cristalari terciari
es as o Ped
secundar
io
Concrecion
es

Granos Cután
esquele de
to Argilan Cámara
es
por un grupo de partículas primarias separadas de los peds
contiguos por huecos o cutanes.
• Matriz o masa basal:
o Plasma: material capaz de ser o haber sido movilizado,
reorganizado y/o concentrado por el proceso
edafogenético.
o Granos de esqueleto: se reconocen en el microscopio
de polarización y se estudia su abundancia y forma.
o Huecos: lugares que quedan sin nada y constituyen la
porosidad del suelo. Tienen diferentes denominaciones:
 Vacíos de empaquetamiento de peds o grano
simple como los skeletanes.
 Vesículas: poros de paredes redondeadas y
curvas a modo de burbujas.
 Cámaras: irregulares o pulidas, que pueden estar
conectadas a canales.
 Canales: huecos alargados y cilíndricos por
donde pueden emigrar y solubilizarse en
suspensión sustancias del suelo.
• Rasgos o caracteres edafológicos:
o Cutanes: modificaciones de la textura o estructura de
las superficies naturales del suelo debidas a la
concentración de sus sustituyentes o a las
modificaciones “in situ” del plasma (partículas más
finas del suelo).
 Según posición:
• Cutanes de cámara.
 • Cutanes de granos.
• Cutanes de canales.
 Según composición:
• Argilanes: constituidos por arcillas.
• Ferriargilanes: constituidos por óxidos de
Hierro y arcillas.
• Organanes: constituidos por materia
orgánica.
• Manganes: constituidos por óxidos de
Manganeso.
• Sescanes: constituidos por sesquióxidos de
Hierro y Aluminio.
• Skeletanes: constituidos por granos de
esqueleto (arena fina).
• Silanes: constituidos por Sílice.
• Salanes: constituidos por sales más
solubles que el Yeso.
• Calcanes: constituidos por CaCO3.
o Pedotúbulos: antiguos canales cilíndricos rellenos de
material más fino que puede llevar incluso pellets
fecales. Cuando son de gran tamaño se denominan
crotolinas.
o Glébulas: concentraciones de determinados
constituyentes del suelo que se forman por la
precipitación de sustancias que anteriormente estaban
en disolución, estas sales en disolución tienden a
reprecipitar formando:
 Nódulos: no se reconoce una organización
interna en la médula, como las de Hierro
(Hematites o Goethita).
 Concreciones: se suelen formar en
precipitaciones sucesivas de CaCO3.
 Pápulas: concreciones de estructura laminar.
o Pellets fecales: deyecciones de organismos del suelo,
normalmente de la mesofauna (insectos, anélidos...)
que se pueden reconocer al microscopio.
o Cristalarias: precipitaciones de sustancias que
aparecen en el techo de las cámaras.
Todos estos rasgos dan indicios de procesos que puede haber
sufrido el suelo:
• Ilimerización: translocación de arcillas formando argilanes.
• Calcificación: acumulación de CaCO3 en el suelo.
• Bioturbación: Perturbación de la estructura del suelo por los
seres vivos.
Con estos procesos se pueden reconocer horizontes diagnostico.
 TÉCNICAS DE IDENTIFICACIÓN DE MINERALES EN EL
SUELO
La parte inorgánica de los suelos está constituida por diferentes
minerales que provienen de la roca madre o son resultado de los
productos de reacción y meteorización de la misma. No existe ningún
método que identifique al conjunto de minerales, si no que es
necesario realizar diferentes técnicas analíticas. Estas técnicas sólo se
realizan con fines científicos y objetivos muy concretos para conocer
la génesis, estudios geotérmicos, estudios para la construcción de
autovías, embalses, pantanos..., para conocer el comportamiento del
suelo desde el punto de vista de agentes contaminantes (para
conocer si los puede fijar y retener).
Para comenzar a identificar minerales de la muestra del suelo
se eliminan las sustancias cementantes (materia orgánica, CaCO3,
óxidos de Hierro y Aluminio...) y después se separan las distintas
fracciones granulométricas. Para extraer la arena se agita la muestra
en una suspensión de agua destilada y a las 4 horas y 48 segundos a
una temperatura de 20º C se puede extraer la arena quedando en
suspensión el limo y la arcilla, después se deja precipitar y a las 8
horas sólo queda en suspensión la arcilla habiendo sedimentado el
limo.
Las arenas se montan en láminas y se estudian con el
microscopio petrográfico, pero los limos y las arcillas son demasiado
pequeños. La fracción de arcilla, debido su pequeño tamaño, es la
más difícil de estudiar y por ello se emplea la difracción de rayos X
que es muy resolutiva para identificar los filosilicatos presentes en
ella. La arcilla en suspensión se coloca en un porta, se evapora el
agua y se queda una fina lámina, ahora se deja incidir un haz de
rayos X que la muestra difractará de modo que dará un diagrama con
una serie de picos que se denomina difractograma específico de cada
mineral, aunque hay minerales de difractograma muy parecido. Entre
estos minerales de difractograma muy parecido se encuentran los
filosilicatos, para identificarlos se recurre a un tratamiento previo
antes de la difracción, ya sea saturación en Potasio o Magnesio,
solvatación en Etilenglicol, tratamiento térmico de 550º C o
tratamiento con ácido sulfúrico al 20%.

ANÁLISIS TÉRMICO
Normalmente el estudio de difracción necesita completarse con
el Análisis Térmico Diferencia (ATD) o el Análisis Térmico Gravimétrico
(ATG), consisten en calentar la muestra en un horno con una
velocidad de calentamiento conocida hasta temperaturas próximas a
1000º C lo que provoca un cambio en su estructura inicial
perdiéndose agua y reconstruyéndose o recombinando las sustancias
dando productos distintos del original.

ESPECTROSCOPÍA DE ABSORCIÓN INFRARROJA

Se utiliza para geles amorfos del suelo que no se detectan por
difracción de rayos X.
 MICROSCOPÍA ELECTRÓNICA
La microscopía electrónica de transmisión (MET) sirve para
identificar minerales de la arcilla por su forma, pero son muy pocos
los filosilicatos con una forma especial y la microscopía electrónica de
barrido (MEB) es capaz de mostrar la organización de la arcilla en tres
dimensiones.

PORCIÓN DE LIMOS
La porción de limos es más pequeña que la de arena y, por
tanto, se le aplica el microscopio de polarización. Como son más
grandes que la arcilla se puede aplicar la difracción de rayos X
moliéndolo en un mortero de ágata y cribando el resultado por un
tamaño de poro menor de 2 micrómetros.

TÉCNICAS AVANZADAS PARA ESTUDIO DE LA MATERIA

ORGÁNICA
La materia orgánica se puede fraccionar para su estudio en
ácidos fúlvicos y ácidos húmicos. Para su estudio se utiliza la
espectrometría infrarroja, diferentes grupos funcionales como
hidroxilo, metilo, amida, quinona... se pueden comparar con
sustancias húmicas procedentes de diferentes suelos. La
espectroscopía en el visible permite identificar sustancias húmicas.
La espectroscopía de resonancia magnética nuclear (RMN)
identifica componentes y estructuras del humus. Es la más resolutiva
que existe en la actualidad y es capaz de diferenciar:
• Ácidos húmicos.
• Ácidos fúlvicos.
• Huminas.
• Ácidos Himatomelánicos.
 TEMA 9
NOCIONES BÁSICAS SOBRE LA
NOMENCLATURA DE SUELOS.
• Horizonte A móllico: horizonte
caracterizado por un contenido en Húme S
materia orgánica mayor del 1%, do eco
tiene un color muy oscuro. El espesor Crom < 3.5
debe ser mayor de 10 centímetros a
sobre roca dura consolidada, de 20 Value < 3.5 <
centímetros si el conjunto 5.5
de horizontes del suelo V = SS = Ca+2 + Mg+2 + Na+ +
(solum) es menor de 75 K+ T
centímetros o mayor de
25 centímetros si el solum es mayor de 75 centímetros. Es
un horizonte bien desarrollado de suelos saturados en bases.
Además, debe tener un grado de saturación (V) mayor del
50%, siendo T la capacidad de intercambio catiónico.
• Horizonte A úmbrico: caracterizado por propiedades
comparables a las del móllico, pero con un grado de
saturación inferior al 50%.
• Horizonte A ócrico: el cajón desastre, es un horizonte
demasiado claro, con poca materia orgánica o demasiado
delgado para ser un horizonte móllico o úmbrico; también
aquel horizonte A duro y masivo cuando se seca (mala
estructura).
• Horizonte A hístico: alto contenido en materia orgánica
formado en situaciones de saturación de agua durante
periodos muy prolongados, es el horizonte típico de turberas.
• Horizonte B árgico (Bt): acumulación suficientemente intensa
de minerales de la arcilla que han sido translocados o
movilizados mecánicamente (en suspensión) a lo largo del
pérfil y que debe cumplir una serie de características macro
y micromorfológicas que atestigüen el proceso de
ilimerización o translocación de la arcilla.
• Horizonte B nátrico (Btna): tipo especial de horizonte B
árgico afectado por la presencia de Sodio, lo cual se refleja
en la estructura columnar del horizonte y el Sodio de cambio
 (S) es mayor del 15%. Además tiene un pH muy básico (9-
9.5).
• Horizonte B cámbico (Bw): de alteración moderada del
material original puesta de manifiesto por un cambio en la
estructura del horizonte o en otras características como el
lavado de carbonatos.
• Horizonte B espódico (Bh/Bhs): formado por la acumulación
suficientemente intensa de materiales amorfos activos
constituidos por materia orgánica y Aluminio, puede
presentar Hierro o no.
• Horizonte B ferrálico (Bs): como el horizonte B cámbico, pero
con alteración más intensa, el material original está
fuertemente transformado con alto contenido en
sesquióxidos de Hierro y Aluminio y pocos derivados de la
arcilla, en caso de que los hubiera serían derivados de la
caolinita, ya que es el único que tolera el pH ácido que
caracteriza este horizonte. Es un horizonte característico de
climas ecuatoriales con fuertes lluvias y temperaturas altas.
• Horizonte E álbico: fuertemente lavado, muy decolorado,
blanquecino y arenoso debido a la pérdida de arcilla, óxidos
de Hierro... Lo único que resiste el lavado son las partículas
arenosas (cuarzo, feldespatos...) que son leucocratas.
• Horizonte C cálcico (Ck): de acumulación secundaria de
CaCO3, pero al igual que árgico, espódico y ferrálico debe
cumplir unas condiciones estrictas. Debe tener un espesor
mayor o igual de 15 centímetros y un contenido en CaCO 3
mayor o igual al 15%, que además debe ser un 5% mayor
que en el horizonte inferior (como mínimo).
• Horizonte C petrocálcico (Ckm): horizonte cálcico
fuertemente cementado y endurecido, originado por una
acumulación masiva de CaCO3 que le da una consistencia
pétrea (costra caliza).
• Horizonte C gípsico (Cy): de acumulación secundaria de
yeso, debe tener un espesor mayor de 15 centímetros, un
contenido en yeso un 5% mayor (como mínimo) que el
horizonte C subyacente y el producto del espesor en
centímetros por el porcentaje del contenido en yeso debe ser
mayor de 150.
• Horizonte C petrogípsico (Cym): horizonte gípsico totalmente
cementado debido a una precipitación muy intensa de yeso.
• Horizonte sulfúrico: muy ácido con pH inferior a 3.5, que se
forma por oxidación de materiales sulfurosos. Aparece en
suelos de escombreras mineras.

MATERIALES DIAGNÓSTICO
• Materiales antropogeomórficos: no consolidados producidos
por el hombre, como las escombreras mineras o el escombro
de obras.
 • Materiales calcáreos: dan efervescencia con ácido clorhídrico
al 10%.
• Materiales flúvicos: sedimentos fluviales, marítimos o
lacustres.
• Materiales gipsídicos: con un 5% de volumen más de yeso.
• Materiales sulfurosos: contienen Azufre en forma de sulfuros
y CaCO3 (en menor cantidad).
• Materiales tróficos: material piroclástico fino no consolidado.

EXCURSIÓN
PERFIL 1: REGOSOL CALCÁRICO EN CASAS DE LOS
BAÑOS
Marga del Mioceno poco evolucionada y muy fácilmente
erosionable (bad lands). El horizonte A es ócrico y mide 15
centímetros aunque a veces falta, está formado a partir de un
material no consolidado. Se forman pináculos de erosión ya que las
raíces de las plantas sujetan el suelo, pero no a su alrededor, por ello
aparece una erosión laminar, en surcos y en cárcavas (en este orden).
La marga es una roca sedimentaria formada por CaCO 3 y arcilla a
partes iguales, el CaCO3 no se lava ya que es muy impermeable y el
agua solo llega 15 centímetros como máximo con vegetación
xerofítica. Estos suelos a veces tienen Yeso (Mioceno) haciendo que
hayan suelos con sales en las vaguadas; además, están
caracterizados por un escaso y débil proceso de humificación en
superficie.
No presenta agua de infiltración,
Horizonte A
sólo hay de escorrentía y por ello no
ócrico
puede evolucionar el suelo. El relieve es
característico por la lluvia escasa y
abundante y aparecen plantas xerofíticas
con gran cantidad de raíces. Las Horizonte C
cárcavas se pueden convertir en
abarrancamientos de 15 o 20 metros de
profundidad. Piping se denomina al
proceso por el cual el agua se infiltra llegando a la marga donde hace
galerías y formará cárcavas. Son suelos de baja fertilidad ya que las
arcillas absorben el agua, sólo sirve para olivo, almendro...

PERFIL 2: CALCISOL PÉTRICO EN LOMAS DE LA

TERCIA
Se encuentra al pie de relieves de
glacis, en los que lo más importante son Horizonte
los lavados superficiales y A
subsuperficiales en los que el agua va
cargada de Ca+2(HCO3-)2 y precipita como Horizonte Ckm
CaCO3 cementando el material que
encuentra y formando las costras calizas
en el Mediterráneo. Aparece asociado a superficies geomorfológicas
de glacis al pie de la montaña con 5-8% de pendiente y vegetación de
esparto, tomillo y romero.
El calcisol pétrico no sirve para cultivo debido a la costra caliza,
aunque ésta se puede romper y cultivar leñosas de secano como el
almendro y el viñedo. Esta costra caliza ha servido para construir las
casas antiguas.
PERFIL 3: FLUVISOL CALCÁRICO EN LA RAMBLA DE LA
MURTA
Terrazas de una rambla, suelos poco evolucionados con capas
intermitentes de arenas y gravas dejadas
por la rambla. No se observan procesos Horizonte
edáficos excepto por la humificación del A
horizonte A. Presenta varios horizontes C Horizont
(gravas, arenas, gravas... en e C1
deposiciones sucesivas), estos horizonte Horizont
podrían contener materiales orgánicos e C2
en mayor cantidad que en las capas
superiores. No tienen materiales finos ya Horizont
que estos se los llevó la riada. e C3
Es un fluvisol con CaCO3 por lo que
se denomina fluvisol calcárico, el CaCO3 no es de acumulación sino
que el material lo tenía ya. Los fluvisoles son muy fértiles y aparecen
en la vega de todos los ríos (son los suelos de cultivo por excelencia).

PERFIL 4: CALCISOL LÚVICO EN EL CABEZO DE LA

CRUZ
Es un suelo muy evolucionado que ha sufrido descarbonatación
y desbasificación para lo que son necesarias intensas precipitaciones.
Tiene un pH entre 6.5 y 7, circunstancias en las que se produce la
translocación de la arcilla, que es
coetánea a la meteorización de Horizonte
minerales de Hierro, lo que indica que A
primero tuvo que haber una etapa Horizont
lluviosa para que se formasen los óxidos e Bt
de Hierro y etapas secas para que se
Horizont
fijase la arcilla, proceso que se da en un
e Ck
clima mediterráneo muy húmedo. Es un
Horizonte
paleosuelo de periodos más húmedos del
Ckm
cuaternario con sus cuatro períodos
glaciares que en Europa se tradujeron en periodos pluviales, suelo
típico de zonas subtropicales. En él se ha producido el proceso de
rubefacción y el de translocación de arcilla de los niveles inferiores y
actualmente se está produciendo la humificación (incorporación de
materia orgánica).
Presenta un horizonte A Ócrico muy oscuro que no efervesce
(sin CaCO3) y un horizonte transicional con más características de
horizonte B de 5 centímetros de potencia; bajo este horizonte
transicional aparece un Bt (árgico) rojo que no efervesce, aunque la
parte baja está carbonatada en los últimos 10 centímetros (horizonte
transicional), presenta una estructura poliédrica, angular, que se debe
al alto contenido en arcilla (55-60%) y sin embargo en el horizonte A
sólo aparece un 15%. El color rojo del horizonte B se debe a los óxidos
de Hierro en forma de Hematites (Fe2O3). Aparece un horizonte Ck
que produce efervescencia por la presencia de CaCO3, bajo el que se
observa un horizonte Ckm que es una costra caliza en profundidad. El
horizonte Ck está bastante descarbonatado por un lavado de CaCO3
total que ha dado lugar a la costra caliza en profundidad, el CaCO3
comienza en el horizonte Bt en baja proporción, más en el horizonte
Ck y mayor aún en el Ckm. Tiene un 2-3% de materia orgánica que
decrece en profundidad.
Es un suelo fértil a conservar por ser un paleosuelo con
vegetación muy distinta a la actual.

PERFIL 5: CALCISOL HÁPLICO EN LA PALMA

Horizonte Ap es un epipedón ócrico (color demasiado claro), que
presenta mayor concentración de materia orgánica en los niveles
inferiores debido al laboreo (2-3%), por lo que también es más oscuro
en esos niveles; presenta vegetación natural (esparto) con un aparato
radicular más potente de lo que se puede ver fuera ya que es de una
zona semiarida; la presencia de esta vegetación se debe a que el
lugar iba a ser una zona arada pero no
lo es, tiene una elevada potencia (50 Horizonte
centímetros). El color es más oscuro Ap
que el de los horizontes inferiores y Horizonte
tiene un 32-33% de CaCO3. Horizonte Bw
Bw de 25 centímetros de potencia con
38-39% de CaCO3 y acumulaciones de
CaCO3 en forma de manchas blanco-
rosadas; además de presentar un 1% Horizont
de materia orgánica y alteración e Ck
moderada por óxidos de Hierro que lo
dotan de un color pardo. El horizonte C
es cálcico formado por el material original, llega hasta los 2 metros de
profundidad y presenta manchas de CaCO3 que en muchos lugares
forman nódulos de CaCO3 que se rompen con la mano. La
descarbonatación ha sido parcial de modo que el contenido en CaCO 3
va incrementándose en los niveles inferiores llegando al 50% en este
horizonte.
Este suelo es un calcisol háplico, tiene buena textura y un pH
ligeramente básico (7.5-8) no llegando a ser alcalino, lo que lo hace
un suelo fértil.

PERFIL 6: PHAEOZEM LÉPTICO EN CABEZO VENTURA

Afloramiento volcánico de rocas de la familia de las andesitas,
aparecen muchas plagioclasas con pirosenos y anfíboles. Es un
leptosol volcánico con la capa R en
Horizonte
superficie y el horizonte A menor de 10
A
centímetros o muy oscuro con gran
cantidad de materia orgánica, muy A/R
potente (30-40 centímetros) y debajo la

Roca
Madre
capa R con un horizonte A con el R mezclado (A/R). Debido a la gran
cantidad de materia orgánica (por el pastoreo) las plantas son
nitrófilas. El epipedón es de tipo móllico sin CaCO 3 porque las rocas
son silíceas. La roca madre tiene manchas blancas de CaCO3 por
alteración en superficie, ya que presenta plagioclasas cálcicas que
liberan Ca+2 que se recombina con el CO2 en forma de H2CO3 dando
iones HCO3- que se combinan con el Ca+2 para dar CaCO3, producido
por una carbonatación en profundidad. Este proceso se observa en los
afloramientos volcánicos y metamórficos con zonas ácidas ya que si
no el Ca+2 sería lavado.
El horizonte A no presenta CaCO3, pero presenta concentración
elevada de materia orgánica y pH 7, siendo un suelo muy fértil. Es de
tipo móllico con color oscuro y saturación en bases del 50%. Este
suelo es para conservación.

PERFIL 7: SOLONCHAK EN SALADAR DE LA MARISMA

DEL CARMOLÍ
Contiene gran cantidad de sales, la concentración es mayor
conforme disminuye la distancia al mar. En verano el suelo tiene un
color blanco y manchas del mismo color por evaporación del agua,
este color se debe a las sales. Se pueden observar cristales de Yeso,
presentan CaCO3 con la misma
concentración en profundidad que Horizonte A
en superficie, ya que se deben a ócrico
las avenidas.
El horizonte Azi es ócrico,
presenta CaSO4, MgCl, NaCl, Horizonte C
CaCl2..., presenta un color más
oscuro que el horizonte Czi debido
a que presenta más materia
orgánica que no se ha podido lavar
y tiene una potencia de 15-20 centímetros; horizonte sálico con una
abundante cantidad de sales. El horizonte Czi tiene un color rojizo y
una potencia de 20-25 centímetros.
Son suelos a conservar, ya que son sistemas en equilibrio con
su medio natural, la vegetación se presenta en bandas y son capaces
de absorber nitratos, fosfatos, metales pesados... de modo que no
lleguen al mar.