Vous êtes sur la page 1sur 3

II.5.

2 BAHÍA DE MONTEVIDEO

Antecedentes históricos

Con una extensión de doce quilómetros desde el Muelle de Escala hasta la Punta del Rodeo, la
Bahía de Montevideo fue, hasta las primeras décadas del siglo, el escenario natural y el marco
donde se desarrollaban las actividades más relevantes de la época.
El desarrollo más importante de la Ciudad Vieja se generó en el sector norte de la misma, al abrigo
de los fuertes vientos del sudeste.
El otro sector residencial por excelencia, el Prado, se conectaba con el estuario a través del arroyo
Miguelete, hasta el parque y la playa Capurro, la principal estación balnearia durante muchos
años.
También los barrios obreros se apoyaron en la Bahía.
Villa Cosmópolis y el Pueblo Victoria ocuparon la zona oeste de la misma; el primero en la falda
del Cerro y el segundo entre los arroyos Miguelete y Pantanoso.
Asimismo, se instalaron allí los grandes equipamientos de la época: el Puerto en su origen y más
tarde el Ferrocarril, junto con la industria más importante del momento: los frigoríficos.
Dicho proceso continuó más tarde, con la instalación de la Usina de Generación Eléctrica y la
Refinería de la Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland (A.N.C.A.P.).
Hacia 1900, Montevideo se extendía en un radio de dos quilómetros en torno a la Bahía.
Posteriormente, clubes deportivos como el Guruyú, el Rowing y el Nacional de Regatas, también
se emplazaron en su perímetro.
A partir de 1920, con el crecimiento demográfico de la ciudad y cambios en las preferencias y
comportamientos sociales del sector de población con mayores ingresos, comenzó el fuerte
desarrollo urbano hacia el este, que aún continúa y trasciende los límites departamentales.
Por otra parte, el pujante desarrollo industrial del país a partir de la década del 30 y la implantación
mayoritaria de tales instalaciones en zonas como La Teja, Aguada, Capurro y arroyo Seco,
vinculadas directamente a la Bahía o indirectamente a través de los arroyos, generó un proceso
continuo de contaminación progresiva de sus aguas.
El gran crecimiento del Puerto, y con él, la expansión de la zona periportuaria -muelles privados y
depósitos de cuero y lana-, junto con el desarrollo de las instalaciones de la Administración
Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland (A.N.C.A.P.) y Usinas y Transmisiones Eléctricas
(U.T.E.), y la implantación de industrias en el borde oeste, completaron un cinturón de grandes
equipamientos que cerraron la Bahía al resto de la ciudad.
En las décadas del 60 y 70, cambios en los sistemas productivos y de transporte a nivel nacional,
provocaron el abandono de las instalaciones de la industria frigorífica en la zona, generando la
aparición de grandes áreas de deterioro y equipamientos en desuso.
Desde 1985, con el nuevo trazado de los accesos a Montevideo de las rutas Nº 1 y Nº 5, y su
conexión con la rambla Baltasar Brum, se abrió una nueva perspectiva de la ciudad y su Bahía.
Valorización de la situación presente
El panorama que ofrece esta nueva perspectiva evidencia su situación actual, altamente
deficitaria:
• Existencia de un cinturón industrial con un alto grado de obsolescencia y subutilización,
fruto de la evolución tecnológica y de los cambios en los escenarios económicos producidos
en los últimos cincuenta años.
• Existencia de numerosos terrenos de propiedad estatal -Administración de Ferrocarriles del
Estado (A.F.E.), Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland (A.N.C.A.P.),
Usinas y Transmisiones Eléctricas (U.T.E.)-, con construcciones que, en muchos casos,
representan un gran acervo arquitectónico, con índices de deterioro.
• Existencia de grandes equipamientos, vinculados a estos organismos, ubicados en relación
directa con el espejo de agua, que interfieren en la relación Bahía-Ciudad.
• Reciente implantación de depósitos de contenedores en el lado sur de la rambla Baltasar
Brum, que se han transformado en un cierre visual hacia la Bahía.
• Presencia de elementos contaminantes, originados en: El vertido de desperdicios
industriales a los arroyos Miguelete y Pantanoso, sin tratamiento previo. La evacuación
directa a la Bahía de los sistemas de saneamiento Paraguay-Piedras Blancas, Miguelete,
Belvedere y Cerro.
• Tejidos contiguos a la Bahía con diversas carencias ambientales, afectados, además, por
procesos de deterioro progresivo y ausencia de dinámica urbana: Cerro, Bella Vista, Arroyo
Seco, Aguada, Ciudad Vieja.
• Trazado de los accesos al Puerto, que actúa como elemento de segregación de los tejidos
urbanos contiguos.

Oportunidades

No obstante su situación crítica actual, el entorno de la Bahía mantiene intactas sus


potencialidades naturales, constituyendo una alternativa viable de reequilibrio de la ciudad.
Paisaje urbano singular y altamente identificatorio.
Importante contribución ambiental y de recuperación ciudadana del acceso litoral, en el futuro.
Excelente accesibilidad y ubicación urbana estratégica.
Importante stock de tierra disponible y edificaciones en desuso.
Parcelario especial que, por sus dimensiones únicas en la ciudad, habilita el desarrollo de Planes
Especiales.
Proximidad a la centralidad principal. Cobertura total de servicios y equipamientos.
A sus valores potenciales, se suma un proceso ya iniciado de revitalización del área:
La localización de la Terminal de pasajeros y vehículos automotores (ferry) de la compañía
Buquebus constituye una puerta de acceso a un millón de personas al año; las propuestas del
Plan Fénix -en el marco del Programa Nacional de Recuperación Urbana-, con sustitución de usos
para la Estación Central General Artigas y la playa de maniobras de A.F.E., anuncian nuevas
inversiones públicas y privadas en La Aguada; el inicio de la construcción de la Torre de las
Comunicaciones de A.N.TEL para su nueva sede, integra un nuevo elemento de referencia
urbana; la recuperación de las aguas de la Bahía -prevista por el Plan de Saneamiento III-, es un
objetivo alcanzable en un futuro cercano; la recuperación de la rambla barrial del Cerro
desencadena un proceso de apropiación ciudadana de las zonas costeras.
La recuperación del protagonismo de la Bahía en la vida ciudadana, como espacio público
calificado para la población, representa un factor desencadenante de procesos de renovación
urbana en los barrios contiguos, e implica la apertura de posibilidades de transformación, que van
más allá del área estrictamente considerada.
Objetivos Los objetivos principales perseguidos en el Área de Promoción Bahía de Montevideo
son:
• Recuperar su histórico protagonismo urbano potenciando su utilización ciudadana mediante
el conjunto de transformaciones previstas.
• Potenciar la función residencial y densificar la ocupación y uso de sus edificaciones,
atendiendo especialmente a las de mayor significación edilicia y patrimonial.
• Mejorar la articulación y relaciones puerto-ciudad mejorando la accesibilidad y posibilitando
la utilización ciudadana de sectores del ámbito portuario sin menoscabo de su funcionalidad
ni riesgos.
• Impulsar la difusión de los efectos positivos que la recuperación de esta significativa parte
de la ciudad tendrá sobre los tejidos urbanos adyacentes.
• Impulsar la recuperación y reciclaje de los edificios de mayor valor simbólico y
arquitectónico existentes en número importante en el sector urbano objeto de este proyecto
estratégico.

Vous aimerez peut-être aussi