La última lección

La verdad el libro si me gusto, pensé que sería aburrido porque se trataría de algo
de la universidad, pero fue como una motivación, muchos de las lecciones me
gustaron, eran como 60 pero en se me gusto la lección donde dice que cuando era
niño quería pintar su cuarto y le pidió permiso a sus papas, pero su mama no
estaba muy convencida pero su papa si, empezó a pintarlo, lo que me sentí
identificado porque yo también de chico pinte mi cuarto bueno hice dibujos del
ying-yang, no sabía que significaba pero a mí me gustaba.

Lo que el pinto fue la formula de y me quede así perplejo, porque

esa es la fórmula que me enseñaron en la secundaria y se me quedo grabada

hasta ahora.

Otra lección que me gusto mucho y sentí feo (De esa si me acuerdo el nombre)
enamorar a una pared de ladrillos, fue cuando se empezaros a enamorar, le invito
un trago a una jay, y el la sentía atractiva y él le regalo como sus pases de vuelo o
puntos que se acumulan, para que fuera a su casa pero ella después le dijo que
no, así que fue a buscarla y cuando la encontró ella le dijo que no lo amaba y él se
sintió muy mal y por eso el titulo de la lección.

No podemos cambiar las cartas que la vida nos ha repartido, pero sí cómo
jugamos nuestra mano, no recuerdo en que lección viene, pero me motivo mucho
esa frase porque a veces pasamos por momentos difíciles y no sabemos qué
decir.
Pregúntate si estas invirtiendo el tiempo en cosas adecuadas, con eso empecé a
saber organizar mí tiempo y hacerlo en cosas que realmente valgan mi tiempo.

Cada día hay algo que nos recuerda por qué vale la pena vivir, eso tiene toda la
razón, porque si preguntáramos a cualquier persona cual es su motivación en la
vida o porque soporta (sea el caso) su tedioso trabajo, claramente respondería su
familia, hijos