Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Dada la reducida confiabilidad de los indicadores oficiales, se hace cada vez más
necesario recurrir a fuentes de origen privado. Así, el Centro de Investigación y
Finanzas confecciona, a través de diez series de indicadores relacionados, un Índice
Líder que busca anticipar la evolución de la actividad económica. La información,
que se encuentra disponible a febrero pasado, muestra que el indicador agregado
registró una nueva caída: 1.7% respecto de enero y 21.5% en términos
interanuales.
En consecuencia, el interrogante principal pasa por saber que puede pasar con el
consumo privado. En este sentido, las perspectivas no son alentadoras. El
comportamiento actual y esperado de la masa salarial, y del crédito apuntan en una
dirección de gran moderación o de virtual estancamiento. En estas condiciones, a
las que cabe sumar el impacto del predominio de expectativas negativas, es
previsible que el consumo privado exhiba, durante 2009, un estancamiento o un
moderado retroceso.
De mantenerse, en lo que resta del año, esta fuerte divergencia entre crecimiento
de los gastos primarios y los recursos totales, no sería descartable que el resultado
financiero fuera negativo. De ahí que, entonces, sea esperable algún tipo de ajuste
en las cuentas públicas; en particular, a partir del segundo semestre, una vez que
se conozca el resultado del proceso electoral.
Mientras tanto, durante los meses previos al comicio, las autoridades continuarían,
sin cambios de importancia, con su actual orientación en materia de ingresos y
gastos. Por el lado de los ingresos, apostarían al aumento estacional de los recursos
que se produce entre los meses de abril y junio; y seguirían “pisando” las
devoluciones y reintegros del IVA con el novedoso argumento de que existe poca
transparencia en dichas operaciones.
Que el fondo federal solidario tenga un impacto positivo sobre las comprometidas
finanzas provinciales depende de lo que la Nación haga con los gastos que,
actualmente, financia con las retenciones que ahora coparticipa. Si el Estado
Nacional no le transfiera a las provincias esos gastos, entonces la situación
financiera del sector público nacional, excluidas las provincias, presentaría un
deterioro aún mayor.
Sin embargo, las reservas del Banco Central disminuyeron en algo más de 200
millones. La explicación de tal divergencia se encuentra en que, por un lado,
aumentaron durante marzo los depósitos en dólares, aunque se estima que ello
podría explicar un incremento de las reservas en 500 millones. Por ende, para que
el Banco Central haya perdido un monto tan reducido de reservas, es necesario
asumir que la entidad está tomando deuda con el BIS.
Durante marzo el tipo de cambio mostró una fuerte tendencia alcista (superior al
30% anual). En cambio, en los primeros días de abril muestra una suave tendencia
declinante.
En efecto, tanto los precios como las cantidades exportadas serán inferiores a las
registradas en igual período del año pasado. A ello cabría adicionar el impacto de la
tendencia a una mayor retención de granos por parte de productores y
exportadores.