Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
IV.
Yo confieso lo que Dios me dice: no temas, porque yo estoy contigo; no te desalientes, porque yo soy tu Dios, te fortalecer, ciertamente te ayudare, si te sostendr con la diestra de mi justicia (Isaas 41:10) Por lo tanto yo no soy un enfermo, porque mi Seor sana todas mis enfermedades (salmo 103:3) Yo no estoy atado por que yo soy ms que vencedor por medio de Cristo Jess que me amo (romanos 8:37) Yo no carezco de poder por que recibirn poder despus de que haya venido sobre vosotros el Espritu Santo (hechos 1:8) Yo no carezco de paz; dado que siendo justificado por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro seor Jesucristo (romanos 5:1) Yo no padezco necesidad de ninguna cosa porque sol y escudo es el seor Dios; gracias y gloria da el seor; nada bueno niega a los que andan en integridad (salmo 84:11) Yo no soy derrotado por ninguna obra malvada por que el seor me librara de toda obra mala (2 Timoteo 4:18) Yo no le temo a ningn tipo de plaga porque la palabra dice no te suceder ningn mal, ni plaga se acercara a tu morada (salmo 91:10) Yo no estoy huyendo del diablo porque yo estoy resistiendo al diablo, y el huira de mi (Santiago 4:7) Yo no puedo ser encadenado por el pecado, por los demonios o por el temor porque al Dios a quien sirves con perseverancia, El te librara (Daniel 6: 16) Yo no me encuentro en una batalla perdida porque el seor peleara por vosotros mientras vosotros os quedis callados (xodo 4:14) Yo no soy oprimido por las tentaciones de este mundo, circunstancias ni problemas porque yo estoy echando todas mis preocupaciones sobre Cristo Jess, por que el cuida de mi (1 Pedro 5:7) Yo no puedo dejar de ver a Dios por que bienaventurados son los de corazn puro porque ellos vern a Dios (Juan 15:11) Yo me alimento de la palabra y ella es en mi como fuego consumidor por que su palabra en mi interior se vuelve un fuego ardiente que me cala hasta los huesos (jeremas 20:9) Yo soy un deposito de la sabidura eterna y la hablare por que palabras no me faltan, el espritu que hay en mi me obliga a hablar (Job 32:18)