TALLER SOBRE NUEVAS TECNOLOGÍAS DE INFORMACIÓN Y

COMUNICACIÓN

“El blog aplicado a la práctica profesional”

Estos son los errores más comunes que se encuentran en blogs, que impedirán que
crezca su popularidad:

• Tener una temática poco clara o dispersa (salvo que se especifique claramente
su carácter generalista).
• No ofrecer un formulario o enlace de suscripción por email.
• Usar una plantilla estándar, demasiado repetida, y sin personalizar.
• No ofrecer recursos de navegación por el contenido (tags, buscador, entradas
recientes y/o populares).
• No mostrar información del autor, o autores, del blog (perdiendo ese
“enganche” personal).
• Demasiadas categorías/tags o ninguna (no sé que es peor).
• Escribir sin criterio alguno de frecuencia de publicación (escribe poco o mucho
pero mantiene un ritmo, el que sea).
• No publicar al menos una vez a la semana (tu blog parecerá abandonado).
• Comentarios cerrados (sin conversación no tienes un blog, tienes un púlpito, y
te alejas de tu audiencia).
• No participar en la conversación surgida en los comentarios
• No ofrecer enlaces para compartir los posts en las redes sociales y/o
agregadores.
• No promocionar uno mismo el contenido en las redes sociales más populares.
• Posts demasiado largos y sin recursos de formato o imágenes que “alivien” la
lectura.
• Demasiados posts telegráficos, o miniposts (si tienes poco que contar usa
Twitter, no necesitas un blog).

• Copiar contenido de otros sitios (tu blog será prescindible).

• No enlazar a otros blogs (es un básico de la Web 2.0, y atrae atención y tráfico).
 • Demasiados enlaces externos (con lo que tu blog pierde popularidad,
provocando la sensación de que el verdadero contenido interesante está
“fuera”)
• Ausencia de contenido multimedia (otro básico de la Web 2.0).

Fuente: CyberPrensa.com

Un artículo de blog se caracteriza por incluir al menos uno de estos tres tipos de
contenidos:

Información: Quizá sea la información el contenido más buscado en la Red, por eso
abundan los blogs que sólo incluyen este tipo de contenido. La información se ofrece
generalmente en forma de noticia, pero también se puede completar con una
investigación sobre la base de la noticia.

Experiencia: No siempre se ofrece la experiencia personal que se tiene respecto al

contenido de un artículo de blog, sea o no sea una noticia, pero creo que resulta
importante para la credibilidad del contenido, pues la experiencia ayuda siempre a
matizar ese contenido.

Opinión: Tanto la experiencia como la opinión que tenemos de un contenido

fomentan el aspecto personal de un blog, que es una de sus características distintivas.
Deberíamos expresar simpre nuestra opinión sobre un asunto, por muy complicado
que parezca, pues no sólo los expertos tienen derecho a ello.

Con estos tipos de contenido se pueden hacer muchas cosas, pero no cualquier cosa.
Por ejemplo, nadie publicaría una tesis doctoral en un blog. Entonces, en un blog
tienen cabida todos los contenidos que cumplan con los siguientes requisitos:

Una publicación fragmentada. Por tanto, los textos tienen que ser de extensión
reducida y de pretensiones limitadas. Cada artículo forma parte de un todo, que es el
blog.

Una publicación frecuente, pues la lectura de un blog se realiza de forma rápida y su

fragmentación pide esa frecuencia.

Un tono coloquial y poco académico, con un lenguaje apropiado a esa característica

personal que tiene todo blog.

Los enlaces
Los enlaces sirven generalmente para ampliar la información dirigiendo al lector a
otra página o documento, o para indicar la procedencia de dicha información. Hay
dos tipos principales de enlaces:

Los que se incluyen en el flujo del texto y están subrayados para que se sepa que son
enlaces.
Los que se colocan fuera del texto principal, generalmente al final en una sección
aparte. A estos enlaces se los suele llamar enlaces de interés o relacionados.

Los enlaces se suelen utilizar para los siguientes objetivos:

Ampliar la información que ofrecemos.

Confirmar la información dada con otros documentos publicados en la Red.

Definir términos que pueden resultar difíciles de comprender.