Enfoque

Criminológico

1Naturaleza y dinámica del delito de

Violación en Nicaragua
1999 - 2008

Pocos delitos causan un impacto tan profundo en el individuo como la violación

sexual. Sus secuelas implican no sólo los hechos de facto, como el ultraje
físico, psíquico y emocional impregnados en la víctima, sino que trascienden a
elementos coercitivos de carácter socio-cultural por medio de tabúes
condenatorios de todo lo relacionado al ámbito sexual.

De esta manera, la presión para la víctima de violación viene no sólo de

superar el impacto del hecho en sí mismo, sino también en enfrentar los
prejuicios y estigmas que acarrea la reacción social, punto clave en términos de
una alta cifra negra y su consecuente impunidad.

A pesar de que en términos conceptuales deductivos y penales, la violación

sexual implica necesariamente un acto de violencia – en sus distintas
expresiones – que doblegue a la víctima, su naturaleza no siempre implica
agresión alguna, sino que muchas veces su tipificación se ve supeditada a
elementos de carácter subjetivo que suprimen su peligrosidad1.

Naturaleza penal del concepto

La violación ha sido sancionada desde el Código de Hammurabi2 – primer

cuerpo legal conocido de la historia – atendiendo las relaciones de poder
existentes. El Derecho Canónico3 solamente castigaba la violación cuando la
mujer era virgen, de lo contrario no lo consideraba como delito o pecado ().

A diferencia de las medidas de control en la sociedad antigua, enla

postmoderna, marcada por un latente trasfondo humanista, la pena de muerte
se ha vuelto execrable de manera casi generalizada, aplicando en su
equivalencia penas que implican cada vez más extendidas privaciones de
libertad.
1
Aludiendo a un sentido de victimización voluntaria, donde el hecho se consuma con
consentimiento de las partes involucradas directamente, pero que es denunciado
por un tercero.
2
En el Código de Hammurabi de los babilónicos y caldeos se sancionaba de manera
enérgica, la agraviada, la sociedad y los dioses eran las víctimas. La sanción
aplicada al violador era la pena de muerte mediante ahorcamiento en público.
3
El derecho canónico sancionaba la violación con la pena de muerte, pero tenía
como requisito que la víctima fuera virgen y ser desflorada, si ésta no reunía estas
características no se consideraba como tal, sancionándose con penas más leves.

1
 Análisis Criminológico

En Nicaragua, según el Código Penal vigente, en su artículo 167, el delito de

violación es consumado cuando se tenga acceso carnal o se haga acceder o
introduzca a la víctima o la obligue a que se introduzca dedo, objeto o
instrumento con fines sexuales, por vía vaginal, anal o bucal, usando fuerza,
violencia, intimidación o cualquier otro medio que prive a la víctima de
voluntad, razón o sentido, sancionándose con una pena de 8 a 12 años de
prisión.

Aludiendo estrictamente al concepto penal del delito, los casos registrados no

tendrían otra criminogénesis más que la consumación del hecho mediante el
uso de la violencia en cualquier circunstancia, sin embargo, una parte
significativa de las denuncias tienen una esencia diferente.

Naturaleza real del concepto de violación en Nicaragua, caracterización

del delito

En una muestra, tomada de los partes diarios de la actividad delictiva durante

los primeros tres meses del 2009, se pueden extraer datos interesantes
respecto a la tipología de ésta forma criminal y su concepto real en contraste
con el penal.

Se pueden extraer 5 tipologías de la naturaleza en que se desarrolla el delito

de violación:

1- Con violencia, referida al uso de la fuerza física y psicológica (amenazas

verbales) para subyugar a la víctima.
2- Con intimidación, en referencia al uso de algún tipo de arma, sea de
fuego, blanca, cortopunzante o contundente, para infundir miedo en la
víctima y obligarla a someterse.
3- Con consentimiento, cuando la “víctima” accede voluntariamente a
sostener relaciones sexuales con su “victimario” o bien a marcharse con
él.
4- Bajo efectos de licor-drogas, que se da cuando la violación se consuma
cuando la víctima se encuentra bajo los efectos del alcohol o algún otro
tipo de droga que limita su reacción motora.
5- Capacidades diferentes, que es el aprovechamiento del victimario sobre
alguna condición física o mental que padece su víctima.

Como ya se ha indicado anteriormente, y aunque suene paradójico, el delito de

violación en Nicaragua no siempre implica violencia. En muchos casos la
“victimización” resulta de manera voluntaria, es decir, el contacto carnal se da
por mutuo consentimiento (Ver cuadro 1).

Cuadro 1: Naturaleza de las violaciones sexuales

2
 Enfoque
Criminológico

Naturaleza Frecuencia Porcentaje

Con violencia 170 55%
Con intimidación 39 12.6%
Con consentimiento 76 24.6%
Bajo efectos de licor-droga 15 4.8%
Capacidades diferentes 7 2.3%
Se desconoce 2 0.6%
Total 309 100%

Lo que ocurre en los casos tipificados como violación con consentimiento es

que la víctima – en la mayoría de los casos, adolescente – accede, ya sea a
sostener relaciones sexuales o marcharse a convivir con su “victimario”, siendo
denunciado por una tercera persona, representado generalmente por un
familiar de la supuesta afectada (Ver cuadro 2).

Cuadro 2: Rangos de edad por naturaleza de la violación

Rangos de Naturaleza
edad Con Con Con Licor- Capacidades Se
Violencia Intimidación Consentimiento drogas diferentes desconoce
0-5 8 0 0 0 0 0
6-10 26 2 3 0 1 0
11-14 70 7 66 2 1 2
15-20 40 18 7 9 1 0
21-25 9 6 0 2 2 0
26-30 4 1 0 0 0 0
31-35 6 2 0 1 1 0
36-40 3 0 0 0 1 0
41-50 2 2 0 0 0 0
Más de 51 0 1 0 0 0 0
ED 2 0 0 1 0 0

Sin embargo, más allá de la conceptualización y por menores que envuelven el

delito de violación, el hecho de que la mayoría mantienen su naturaleza
violenta, alcanzando el 67.6% (Ver cuadro 1), induce a resaltar la necesidad
que tiene el análisis de la violencia criminógena de este tipo de delito.

En este sentido, “la importancia que se concede al concepto de violencia en la

dinámica del delito de violación es tal que, incluso, se considera que la
sexualidad inherente a la violación adopta una forma apócrifa o meramente
instrumental de verificación. Puede decirse que durante dos décadas -y aun
hoy- la Victimología de la violación ha agrupado sus esfuerzos en la aclaración
de dos premisas fundamentales: "la violación no es un acto que retribuya en
grado alguno la sexualidad de la víctima" y "la violación no es un acto
substancialmente sexual para el autor".”()

Se vuelve interesante ésta última afirmación de la autora, en el sentido de que

el fin esencial del victimario no radica exclusivamente en su satisfacción sexual,
3
 Análisis Criminológico

como inicialmente se puede inferir, sino en otros sucedáneos más ligados a la

violencia con que se ejecuta, la que en la sociedad nicaragüense encuentra su
núcleo más concreto en una enraizada cultura patriarcal.

Es posible inferir entonces que, la violencia con que se ejecuta el acto de

violación, más que representar un medio para satisfacer una necesidad
concreta del victimario – como puede ser el caso de otras formas criminógenas
que buscan solventar carencias materiales, o alimenticias, como los robos – es
la expresión vívida de un proceso de socialización tradicionalmente lleno de
expresiones de dominación, sometimiento, inequidad y violencia.

El ejercicio de la violencia está muy arraigado en la cultura y

tradiciones patriarcales que atribuyen como valor el poder y
control de los hombres sobre sus parejas.()

Otro aspecto que es importante tomar en cuenta es la zonificación del delito,

que, a pesar de que se encuentra bastante balanceado en su ocurrencia
urbano-rural (Ver cuadro 3), según su contexto toma formas muy diferenciadas.

Cuadro 3: Violaciones por Zona

Zona Frecuencia Porcentaje

Urbana 185 60.8
Rural 119 39.2
Total 304 100

A tenor de lo anterior, la diferenciación de la dinámica que adquiere el delito, en

términos comparativos, es la siguiente (ver cuadro 4):

Cuando es con violencia o intimidación, se torna predominantemente urbano,

aunque también es la dinámica que despunta en el campo.

En los casos que se dan con consentimiento, la zona rural supera ligeramente
a la urbana, sin embargo, en las denuncias originadas del campo la tónica
prevaleciente es la de la víctima – generalmente, menor de edad – huyendo
con su victimario, mientras que en la ciudad resultan de la víctima accediendo a
sostener relaciones sexuales con su victimario, generalmente, su novio o
conocido.
El delito que se comete bajo efectos de licor o algún tipo de droga es
predominante en el área urbana, donde el acceso a dichas sustancias es más
fácil y no existen algunas restricciones culturales del campo, como la que limita
la vida social de las mujeres.

Por último, en el caso de las violaciones perpetradas a personas con

capacidades diferentes, la dinámica es indiscutiblemente rural, lo que se podría

4
 Enfoque
Criminológico

explicar debido a que en ese contexto las víctimas son dejadas sin tutela en
sus hogares4 y en esas circunstancias se enfrentan a una situación más
riesgosa que en la ciudad.

Cuadro 4: Dinámica de las violaciones por zona

Zona
Dinámica
Urbana Rural
Con violencia 106 61
Con intimidación 28 10
Con consentimiento 37 38
Efectos de licor-droga 12 3
Capacidades diferentes 0 7
Se desconoce 2 0

Comportamiento de las denuncias de violación

De 1999 a 2005, es decir, en un período de siete años, la tasa de variación en

el delito de violación mostró, contrario al crecimiento paralelo de la demografía
con la criminalidad, una tendencia decreciente de casi el 3%. De hecho, la
violación tiene la particularidad de ser la única tipología delictiva de
significancia5 que mostró una dinámica de ese tipo (Ver gráfico 1).

Gráfico 1

En ese mismo período los niveles de esclarecimiento mantenían un promedio

del 90%, sin embargo, a partir del año 2005 al 2007 descendieron
considerablemente (Ver gráfico 1), lo que sucedió debido a que se vieron
encontrados dos hechos que resultaron estadísticamente antagónicos: por un
lado, la ampliación de la red de Comisarías de la Mujer6, expresión policial que
por su acercamiento a la comunidad, ha demostrado la eliminación de barreras
que obstaculizaban la denuncia de la expresión delictiva en cuestión7; por otro
lado, la puesta en marcha de la Fiscalía como filtro para confirmar el delito,
significó el punto clave del desplome en las cifras de esclarecimiento.

Gráfico 2
4
Esto porque las personas de la casa se van a realizar sus labores de campo y las
dejan solas, además, a diferencia del contexto urbano, donde existe en cierto
sentido más sensibilidad en cuanto al cuido de éstos por el nivel educativo, en el
campo hay más discriminación y rechazo.
5
Con esto se quiere decir que hubo otros delitos de menor impacto, como la estafa,
que también presentaron variaciones negativas.
6
De 2005 a 2008 las Comisarías crecieron de 23 a 32 expresiones a nivel nacional,
un crecimiento del 39.1%.
7
Se deduce que por este hecho, las denuncias sobre violación incrementaron en ese
mismo período un 46.5%.
5
 Análisis Criminológico

Según las estadísticas oficiales, en los diez años estudiados se han registrado
14,222 denuncias por violación, con un total de 14,377 víctimas, de las que el
47.05% corresponden a menores de 14 años (Ver gráfico 2). Esa cifra de casi
el 50% de víctimas adolescentes y pre-adolescentes refleja una serie de
hechos preocupantes:

– En cuanto a la víctima, embarazos de alto riesgo por la precocidad de la

relación sexual; trastornos fisiológicos y psicológicos más pronunciados,
etc.

– En cuanto a la realidad nacional, incremento de las tasas de deserción

escolar; posible incremento de la mortalidad materna e infantil, etc.

Conclusiones y recomendaciones

podemos recapitular tres aspectos:

1. El delito de violación, al menos en el último decenio, mantuvo una

dinámica relativamente pasiva, con estabilidad en su registro de
denuncias y esclarecimiento, sin embargo, a partir de 2005 su
incremento ha sido constante, por lo que se hace necesario que las
instituciones que conforman el engranaje y enlace de Seguridad
Ciudadana-Comunidad, fortalezcan medidas preventivas de base que
detengan su actual comportamiento ascendente.

2. Al predominar la victimización de menores de edad, afecta áreas

sociales, culturales y económicas que van más allá de una realidad
micro, razones que lo convierten en un problema de nación.

3. La naturaleza violenta e intimidatoria del delito de violación, en el caso

de Nicaragua, enraizada en patrones hereditarios que han venido siendo
transmitidos generacionalmente, sugiere la necesidad de superar
medidas punitivas que se limiten únicamente a la reclusión, sino que se
incluya como eje fundamental el tratamiento psicológico para imbuir un
corte en ese hilvanado cultural.