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Surge sin embargo, la interrogante sobre de que manera opera el régimen legal cuando las
mercancías son comercializadas, fuera de la zona libre, esto es, como puede vender, que
tiene que facturar, etc.
Para entender este caso se requiere precisar un poco sobre lo que es una zona libre o zona
franca. El convenio revisado de Kyoto de la Organización Mundial de Aduanas (OMA),
organismo no gubernamental rector de prácticas recomendables en el ámbito aduanero-
administrativo, establece que zona franca “significa una parte del territorio de una Parte
Contratante donde cualesquiera bienes introducidos generalmente se les considera, en
cuanto a derechos e impuestos de importación concierne, como si estuviesen fuera del
γ
territorio aduanero”. Esta definición de la OMA establece las bases conceptuales por las
cuales se afirma que una zona franca es una ficción jurídica enmarcada en el concepto de
territorio aduanero especial o lo que se conoce como territorio no aduanero. Esto significa
Convenio Revisado de Kyoto. Anexo D. Organización Mundial de Aduanas.
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que sobre la base del concepto de extraterritorialidad, las mercancías CCyT importadas en
la zona libre, hipotéticamente, se encuentran como si estuviesen situadas en el extranjero,
por lo tanto, una venta desde la zona libre al resto del territorio nacional, equivale a una
exportación a Venezuela.
Así, el distribuidor, al realizar el pedido, deberá, contratar con un agente aduanal, pagar el
costo de la mercancía del seguro y del flete, pagar los aranceles correspondientes de
importación, el impuesto al valor agregado y cualquier otro recargo.
Puede darse el caso, sin embargo, de que el componente, ya sea un teclado, un case o un
scanner, sea fabricado en parte con insumos importados de terceros países y en parte con
insumos o productos fabricados en la zona libre o provenientes de la Comunidad Andina,
caso en el cual, el comprador ubicado fuera de la zona libre pagará aranceles sólo por los
componentes importados de terceros países, quedando exentos los fabricados dentro de la
zona o en la Comunidad Andina, siempre y cuando estos últimos estén respaldados por sus
correspondientes certificados de origen.
Siglas para identificar Culturales, Científicas y Tecnológicas.
Son terceros países todos aquellos que no han suscrito tratados de libre comercio con Venezuela, tales como
USA, Canada, Paises de Europa, Asia y Africa, en tanto que los integrantes de la comunidad Andina son
Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela.
2) Posibilidad de constituir una empresa que comercialice los productos de
SERVICOMP.
La empresa SERVICOMP tiene varios años constituida en el mercado como una empresa
que presta servicios relacionados a la computación e informática, y con el funcionamiento
operativo que se inició en la zona libre, dicha empresa realizó todos los trámites pertinentes
para operar como beneficiario de la zona, para lo cual recibió o esta por recibir la
autorización que lo acredita como tal.
Al Cambiar la Razón Social de la Empresa, indefectiblemente cambia también el Registro, por lo que queda
sin efecto el registro a nombre de SERVICOMP de Sergio Chaustre para emitir un nuevo registro a nombre
de SERVICOMP C.A.
Ambas consideraciones son factibles, por lo que sería difícil recomendar la decisión más
adecuada, sin embargo, todo depende de la intención y los objetivos del empresario, así, si
lo que se desea es que SERVICOMP sea una empresa totalmente independiente de la
comercializadora aún cuando exista cierta vinculación, se recomienda constituir una nueva
compañía, y si en realidad se desea convertir la empresa en Compañía Anónima, un aporte
de capital y consiguiente conversión sería suficiente para lograrlo, al fin y al cabo, con
cualquiera de las dos alternativas se incurre en los mismos costos de constitución y registro,
así como también en los mismos trámites y procedimientos administrativos, aunque para el
caso de la nueva empresa se incurriría en mayores gastos por local, equipo, personal, etc.
Toda marca de la que se quiera tener propiedad y derecho exclusivo debe satisfacer tres
requisitos intrínsecos como lo son:
1. Originalidad: Radica fundamentalmente en el peso y fuerza distintiva que tenga la
marca al momento de compararla con las marcas de productos iguales o semejantes
en el mercado, también radica en la cantidad de elementos diferenciadores más que
en las similitudes al momento de efectuar la evaluación con las marcas de la
competencia. Cuando existen elementos comunes entre marcas de productos iguales
se dice que la marca, aún y cuando reviste novedad, carece de originalidad por
coincidir elementos gráficos y/o fonéticos con marcas previamente usadas en el
mercado para los mismos o productos análogos.
2. Novedad: Significa que la marca debe ser distinta de otra ya existente en el
mercado, por cuanto debe servir para distinguir los productos y no para crear
confusión entre ellos.
3. Especialidad: su fundamento reside en que la especialidad de la marca sólo se puede
aplicar a un grupo determinado de productos de una industria o de un comercio. De
ahí que dos personas distintas puedan registrar una misma marca para productos
comprendidos en distintas clases. La especialidad constituye un elemento
importante de la marca y ella se basa en la clasificación vigente del Acuerdo de
Niza de 1957 sobre la clasificación internacional de productos y servicios que
contempla 35 marcas de productos y 7 marcas de servicios.
Además de los requisitos anteriores se debe satisfacer dos requisitos de orden legal, cuales
son:
1. Licitud: La marca no debe estar constituida por elementos de interés común, como
por ejemplo, el uso de la bandera, de los estados, de sus escudos de armas, el
emblema de la cruz roja, los escudos de familia, el nombre de terceras personas sin
su autorización, etc.
2. Veracidad: La marca no debe tener sugerencias o indicaciones que puedan inducir
al público en errores en cuanto a la procedencia o calidad de las mercancías o
servicios amparados con las mismas, o que aporten confusión en la selección del
producto, o bien porque se hagan señalamientos falsos en la misma. En tal sentido,
el artículo 35 de la Ley de Propiedad Industrial señala que no podrán estamparse en
las marcas, menciones de diplomas, medallas, premios y otros signos que hagan
suponer la existencia de galardones obtenidos en exposiciones, salvo que se pueda
acreditar la veracidad de tales alegatos.
Toda persona interesada en adquirir los derechos sobre una marca debe inscribirla ante el
organismo competente para que se otorgue la concesión del registro. El registro de la marca
en el SAPI (Servicio Autónomo de la Propiedad Intelectual), le confiere a su legitimo
propietario los siguientes derechos consagrados tanto en la Ley como en la Decisión 344:
1. Derecho al uso exclusivo de explotación por el titular del mismo;
2. Deber de explotación de la invención o uso de la marca por el titular; y,
3. Deber de terceros de abstención de explotación o uso del respectivo derecho, sin
consentimiento del autor o titular del derecho.
Para obtener la titularidad de la marca se debe acudir al SAPI y solicitar una búsqueda
computarizada a fin de investigar los antecedentes marcarios, dicha búsqueda arroja
resultados inmediatos y a continuación se procede a presentar una solicitud en el formulario
FM.02 con la que se inicia el procedimiento administrativo de derecho de prioridad,
satisfaciendo los requisitos de los artículos 87 y 88 de la Decisión 344 del Acuerdo de
Cartagena, cuales son:
a) Identificación del peticionario
b) Descripción clara y precisa de la marca
c) Indicación de los productos en la clase que solicita
d) Comprobante de pago de la tasa establecida
e) Presentación Poder, en caso de haberse otorgado mandato especial
f) Reproducción de la marca en caso que contenga elementos gráficos.
Cabe destacar esta primera solicitud es posible modificarla si se refiere a aspectos
secundarios.
Se procede entonces al examen de forma que realiza el SAPI para verificar el cumplimiento
de los requisitos formales en un plazo de 15 días. Si no se cumplen los requisitos, se
otorgan 30 días para subsanar los errores después de haber sido notificado. Si no presenta
errores, se publica la solicitud en el boletín oficial para que terceros interesados presenten
objeciones (si las hay). Se otorgan 30 días para que terceros legitimados formulen las
Se refiere a la Clasificación Internacional del Arreglo de Niza de Productos y Servicios para el registro de
marcas, según la cual, el registro de marcas para equipos de computación se asigna a la clase 9.
observaciones, si estas surgen, se introduce un escrito de defensa contra terceros que se
oponen a la solicitud de registro en un plazo igual de 30 días después de la publicación. Si
no surgen observaciones se procede a un examen de fondo de otros 30 días hábiles para el
estudio de las condiciones intrínsecas de la marca, para luego publicarse la decisión. Si se
niega el registro, se anuncia recurso de reconsideración en un término de 15 días, y ante una
nueva negación se interpone recurso jerárquico. Si se concede el registro se otorgan 30 días
para cancelar los derechos de registro correspondientes y obtener el certificado de marca, el
cual tiene una vigencia de 10 años, renovable por períodos iguales indefinidamente.