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De: Salvador Estrada Esparza <seemx7@yahoo.

com>
Asunto: Re: LOS ATEOS LE RESPONDEN A CALDERÓN
A: "Enlace Latinoamericano" <enlace_mexico@gruposyahoo.com>
Fecha: domingo, 9 agosto, 2009, 4:06 pm

Saludos.

En respuesta al correo del compañero Ernesto acerca de:

“Los Ateos le responden a Calderón” (“Rechazan postura de Calderón sobre religión y


drogas”: http://www.jornada.unam.mx/2009/07/13/index.php?section=opinion&article=002a2cor ),

comentaré en azul (libre, no panista) lo siguiente:

“La Jornada 27 de junio de 2009

No creer en Dios hace a la juventud esclava de narcos, señala Calderón

Según el mandatario, la falta de “asideros trascendentes” como es que los jóvenes “no creen en
Dios, porque no lo conocen”, es caldo de cultivo para las adicciones.
…se refirió a que estos jóvenes “tienen poco que creer; que no creen en la familia, que no tuvieron;
que no creen en la economía o en la escuela; que no creen en Dios, porque no lo conocen”.
Se quejó de que estos jóvenes no creen en la sociedad ni en quien la representa, lo que hace un
caldo de cultivo para quienes usan y abusan de este vacío espiritual de nuestro tiempo.”
( http://www.jornada.unam.mx/2009/06/27/index.php?section=politica&article=003n1pol )

Según de lo que aquí se desprende, las causas de que existan los que usan y
abusan de los jóvenes, así como de la nula o poca creencia de éstos en lo comentado
por este señor, se debe a su falta de “asideros trascendentes”, en específico, el “no
creer en Dios”, lo que, contrario sensu, el creer en Dios, eliminaría dicho “caldo de
cultivo”, pues ya tendrían estos imberbes un buen “asidero trascendente”.

Esto también me recuerda a Fox:

Presidente Fox pide rezar a la Virgen para lograr recuperación económica

MÉXICO DF, 30 Jun. 01 (ACI).- Frente a la crisis de recesión que atraviesa Estados Unidos y que
afecta seriamente a México, el Presidente de este país, Vicente Fox, pidió a los fieles rezar
especialmente a la Virgen de Guadalupe para que la nación norteamericana se recupere.
El Presidente Vicente Fox manifestó que los mexicanos "necesitamos ir a la Basílica y rezarle a la
Virgen de Guadalupe para que Estados Unidos se recupere" de la desaceleración que padece y señaló
que la situación por la que atraviesa la economía estadounidense está retrasando el auge económico
que prometió para México. (http://www.aciprensa.com/notic2001/junio/notic1294.htm )

De acuerdo a estas declaraciones foxistas, la economía de México la determina la


economía norteamericana, y la economía norteamericana está determinada por el que
los mexicanos recemos, especialmente a la Virgen de Guadalupe. Según de lo que de
aquí se desprende, y conforme a la policrisis nacional y norteamericana de esa fecha a

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la actualidad, los fieles mexicanos no rezaron; luego entonces, la culpa de las crisis
(todas) es de los mexicanos porque no rezamos a la Virgen ni fuimos a la Basílica.

Y qué decir del difunto Carlos Abascal, cuando fue secretario de trabajo de Fox:

¿Las mujeres en su casa?

Para el 8 de marzo de 2001 (Día Internacional de la Mujer) [Abascal] provocó la primera


controversia al pronunciar un discurso que fue calificado de “misógino” por diversas agrupaciones
feministas.
“El reconocimiento de la inmensa dignidad de la mujer no puede pasar por su masculinización, ni
por su generización en contra de su propia originalidad femenina”, dijo en un acto oficial. Reconoció
que la igual dignidad entre los sexos “justifica” plenamente el acceso de las mujeres a las funciones
públicas “en la medida de lo posible”, pero “no como un proceso de competencia de sexos, ni como un
tema de cuotas de poder por porcentajes poblacionales”.
Al mismo tiempo, quiso “poner bien en claro que la mujer tiene una misión propia en la
estructura de organización de la vida pública: ella está llamada a ser el corazón, el eje de la
estructura familiar con todo el contexto de afectos, derechos, deberes y valores. Es este un hecho de
orden natural irrenunciable e insustituible, en el que el papel del hombre es corresponsable y
complementario”.
Luego del desacuerdo que generaron tales declaraciones, el funcionario pretendió justificarlas
mediante el documento “Qué espera México de las mujeres”, en el que argumenta que fue inspirado
por el pensamiento de Juan Pablo II. En él advierte que el feminismo es la rebelión del sexo femenino
contra sí mismo, contra su condición de regazo natural del hombre y de toda la humanidad, y eso no
puede producir más que desastres morales y sociales, tales como “el llamado amor libre, la
homosexualidad, la prostitución, la promiscuidad, el aborto y en fin, la destrucción de la familia".
(http://www.notiese.org/notiese.php?ctn_id=490 )

Entonces, de acuerdo a la “inspiración de que fue objeto por Juan Pablo II”, el
papel de la mujer se debe circunscribir al hogar, ya que éste es el centro de la
estructura familiar y la mujer es el “centro del centro”. Quedándose la mujer en el
hogar, habrá “afectos, derechos, deberes y valores”. Ése es un “orden natural”, no
observarlo implica ir contra natura lo que acarrea desastres morales y sociales.

Las conclusiones de lo dicho por la “Santísima Trinidad panista” serían:

1. Hay “caldo de cultivo para las adicciones” y nihilismo en sentido negativo,


porque los jóvenes no creen en Dios porque no lo conocen (Calderón).

2. Las crisis se deben a que los mexicanos no van a la Basílica a rezarle a la Virgen
(Fox).

3. La mujer que no se encuentra en su hogar es la responsable de los “desastres


morales y sociales” (Abascal).

Aquí cabría un espacio, pues según el pensamiento calderoniano, también se


entendería que habría que rezarle a la Luna para que Tabasco ya no se inunde como
en 2007: ¿O no?: http://www.youtube.com/watch?v=MRQAKO0Hhms

2
Haciendo a un lado esta retahíla de estupideces bizantinas, medievales e
irracionales de los personajes aludidos, lo que resulta en realidad es el culpar de
manera estólida a sujetos (y objetos) de las faltas e incompetencia propia de estos
siniestros seres, por el incumplimiento de su papel de mandatarios al cual están
plenamente obligados, culpando irresponsablemente a otros de la esencia de las
problemáticas, de las causas de los efectos: Son ellos los directamente culpables, los
responsables de todo lo que a terceros achacan. Tienen un rol (obtenido de jure o de
facto), el cual no sólo no han cumplido (velar por el Bien Común), sino que han sido
los causantes de los descalabros económicos, sociales, culturales, ambientales, de
salud, etc., por no combatirlos a la altura de las altas responsabilidades que ostentan:

Artículo 25 constitucional. Corresponde al Estado la rectoría del desarrollo nacional para


garantizar que éste sea integral y sustentable, que fortalezca la Soberanía de la Nación y su régimen
democrático y que, mediante el fomento del crecimiento económico y el empleo y una más justa
distribución del ingreso y la riqueza, permita el pleno ejercicio de la libertad y la dignidad de los
individuos, grupos y clases sociales, cuya seguridad protege esta Constitución.

Culpan a sujetos sociales (mandantes) de sus torpezas, prescribiendo, además


barbaridades misóginas y retrógradas como una “supuesta solución”. No puede ser
de otra manera ya que se pliegan, como lacayos que son, al diktat del capital a través
de las directrices que les determinan la OMC, el BM y el FMI, así como las
corporaciones nativas y extranjeras: Esas son las causas de los desastres nacionales
y no otras. Constantemente violan y cambian la Constitución Federal, leyes que de ella
emanan, así como todo lo normativo que no interese a las criminales ambiciones de
sus amos. No es de sorprender que constantemente hablen de la “necesidad de
reformas estructurales”, lo que es lo mismo a la pérdida de derechos y garantías que
costaron sangre, sudor y lágrimas al sacrificado pueblo mexicano: Que no nos vengan
con sus “recetas celestiales”: ¡No somos imbéciles!
Además de lo anterior, lo que hacen notar los compañeros “Ateos Mexicanos”
(amén de otras cosas), es el dar a entender Calderón, que la no creencia en Dios, es
ser delincuentes, lo cual tiene que demostrar. El no hacerlo, lo convierte en un fanático
e intolerante vocinglero calumniador, injurioso y difamador.
Es el artículo 24 constitucional el que da el derecho de la libertad de culto, libertad
que este señor nos debe de garantizar y no abusar del cargo que ostenta para denigrar
a los no creyentes, ni hacer proselitismo “divino” con sus torpes excusas:

Artículo 24. Todo hombre es libre para profesar la creencia religiosa que más le agrade y para
practicar las ceremonias, devociones o actos del culto respectivo, siempre que no constituyan un delito
o falta penados por la ley.

Quizás este señor malinterprete este numeral, suponiendo que todos “debemos de
creer en algo religioso”, pues como explícitamente no se dice nada de los no
profesantes de culto alguno, ha de suponer que todo mexicano es un creyente. Sin
embargo, el espíritu de ese artículo engloba también a los no creyentes (“profesar o
no creencias religiosas”), pues la tarea educativa del Estado así lo demuestra con las
fracciones I y II del artículo 3° Constitucional, en cuanto a la competencia educativa y
cómo debe de ser ésta, y de la cual, Calderón es el principal responsable:

3
I. Garantizada por el artículo 24 la libertad de creencias, dicha educación será laica y, por
tanto, se mantendrá por completo ajena a cualquier doctrina religiosa;

II. El criterio que orientará a esa educación se basará en los resultados del progreso científico,
luchará contra la ignorancia y sus efectos, las servidumbres, los fanatismos y los prejuicios.

Asimismo, el señor Calderón no es nadie para, soterradamente, argüir la creencia en


un dios por parte de la gente, ya que, como lo documenta el comentario de la Tesis
aislada de jurisprudencia en materia constitucional N° 336742, Quinta Época: “…la
misión del Estado se limita a permitir, pero no a fomentar religión alguna…”; lo que,
al relacionar jurídicamente esto con las fracciones constitucionales en comento,
Calderón viola flagrantemente la garantía constitucional enmarcada en el tercer
párrafo del artículo 1°, al, con su nefasto proceder, echar por la borda el carácter laico
del Estado, discriminar las opiniones y preferencias de la gente, así como el
menoscabar sus derechos y libertades:

“Queda prohibida toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, la edad,
las discapacidades, la condición social, las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las
preferencias, el estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga por
objeto anular o menoscabar los derechos y libertades de las personas.”

Más claro ni el agua. Al violentar los aludidos preceptos, Calderón falta al mandato
constitucional que, se supone, juró atropelladamente respetar:

“Artículo 87. El Presidente, al tomar posesión de su cargo, prestará ante el Congreso de la Unión
o ante la Comisión Permanente, en los recesos de aquél, la siguiente protesta: "Protesto guardar y
hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella
emanen, y desempeñar leal y patrióticamente el cargo de Presidente de la República que el pueblo me
ha conferido, mirando en todo por el bien y prosperidad de la Unión; y si así no lo hiciere que la
Nación me lo demande."”

Ya se lo estamos demandando, y no sólo por las situaciones aquí comentadas.

Resumiendo: La “Santísima Trinidad panista” es violadora de las garantías


individuales que la Constitución Federal confiere, lo cual es motivo de demandarles su
cumplimiento pleno o aplicarles el siguiente artículo constitucional 39, libremente
interpretado por el pópolo vía jacobina, y no por el girondino candado del artículo 41:

Artículo 39. La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder
público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el
inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno.

Que estén bien.

Atte: Prof. Salvador Estrada Esparza.

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