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La romanización de la Península Ibérica comenzó después de que los romanos derrotaran a los cartagineses, quienes habían estado conquistando territorio en la península. La conquista romana tomó casi 200 años y se enfrentó a diferentes niveles de resistencia en las distintas regiones. Para el siglo I a.C., sin embargo, la lengua, cultura, derecho y organización política romanas se habían impuesto en la mayor parte de la península, aunque el norte mantuvo por más tiempo sus costumbres locales.
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53 Pdfsam 84915226 Pharies David a Breve Historia de La Lengua Espanola
La romanización de la Península Ibérica comenzó después de que los romanos derrotaran a los cartagineses, quienes habían estado conquistando territorio en la península. La conquista romana tomó casi 200 años y se enfrentó a diferentes niveles de resistencia en las distintas regiones. Para el siglo I a.C., sin embargo, la lengua, cultura, derecho y organización política romanas se habían impuesto en la mayor parte de la península, aunque el norte mantuvo por más tiempo sus costumbres locales.
La romanización de la Península Ibérica comenzó después de que los romanos derrotaran a los cartagineses, quienes habían estado conquistando territorio en la península. La conquista romana tomó casi 200 años y se enfrentó a diferentes niveles de resistencia en las distintas regiones. Para el siglo I a.C., sin embargo, la lengua, cultura, derecho y organización política romanas se habían impuesto en la mayor parte de la península, aunque el norte mantuvo por más tiempo sus costumbres locales.
A mediados del siglo III aC, el poder de Roma se extiende por toda la Pennsula Italica, pero no mas alla de ella. Su dominio en la cuenca
del Mediterraneo comienza con la primera guerra punica
(es decir, contra los cartagineses), que estalla en 264 cuando e stos ocupan la ciudad siciliana de Massana, y termina en 241 cuando los romanos consiguen hacer capitular al enemigo despues de una larga guerra terrestre alrededor de esta ciudad. Como resultado de esta guerra,
Roma anexiona Sicilia, Cerdena y Corcega,
y los cartagineses se comprometen a indemnizar a los romanos con una gran cantidad de oro. trae consigo, indirecLa necesidad de pagar esta indemnizacion
tamente, la segunda guerra punica,
porque, con el n de compensar estas perdidas, los cartagineses deciden conquistar y explotar His haban buscado comercio. Estos pania, territorio donde antes solo esfuerzos llegan a su apogeo cuando el general cartagines Anbal emprende una conquista militar sistematica de la Pennsula, al principio contra los pueblos de la meseta central y luego, en 219, contra la ciudad de Sagunto, cuyos habitantes son aliados de Roma. Tras ocho meses de asedio, cae esta ciudad, desencadenando al mismo tiempo la segunda guerra entre las dos grandes potencias. En 218, Anbal, dejando tropas en Hispania, atraviesa los Pirineos y luego los Alpes con un ejercito formado por cincuenta mil hombres (de los cuales muchos son mercenarios hispanos), nueve mil caballos
y treinta y siete elefantes. Por las dicultades del viaje, el numero
de soldados se ve reducido a veintiseis mil al llegar a Italia, pero aun as Anbal consigue derrotar a las fuerzas romanas en diversas ocasiones durante su campana, que dura varios anos. No obstante, ya para 209 se ve en dicultades y tiene que abandonar sus esfuerzos denitivamente cuando los romanos, tras haber tomado Cartagena
y Cadiz en 206, atacan y conquistan la capital punica,
Cartago, en por esta guerra los cartagineses tienen 202. Como indemnizacion mas oro, entregar su ota y ver anexionado por los que pagar aun
romanos todo su territorio exterior: Hispania y la costa de Africa.
Medio siglo mas tarde, al ver que los cartagineses van recuperando su poder comercial y militar, Roma ataca a Cartago de nuevo, como
La Pennsula Ibrica hasta el siglo XIII 37
parte de la tercera guerra punica
(149146 aC), que termina con la
destruccion total de la ciudad y la absoluta supremaca romana en
el Mediterraneo. La derrota de los cartagineses signica que los romanos ya no tienen que disputar el dominio de Hispania con otra potencia colonizadora. No signica, sin embargo, que hayan podido apoderarse La conquista romana de este territorio de la Pennsula sin oposicion. comienza en 218 con la llegada de las fuerzas romanas a Ampurias, pero no se completa hasta 199 anos mas tarde, en el ano 19 aC. romana en Hispania vara mucho La resistencia a la dominacion a region (ver mapa 2). En las costas mediterraneas y ande region daluzas y en el valle del Betis (hoy conocido como Guadalquivir), la de la autoridad y cultura romanas es intensa y temprana imposicion (197 aC). Poco tiempo despues, se consolida el dominio del valle del Ebro. La mayor parte del interior de la Pennsula se ve conquistada durante una campana militar romana que transcurre entre 155 y 133 aC, terminando las incursiones con la cada de la principal ciudad celtbera, Numancia. Los romanos consiguen doblegar a los pueblos de la Cordillera Cantabrica en una campana que dura de 29 a 19 aC,
bajo el mando de Agripa (Fear 2000:31). Aun as, la dominacion
de los romanos no llega nunca a ser muy fuerte en el norte de la Pennsula, donde pueblos como los astures, los cantabros y los vas de las costumbres cones resisten durante largo tiempo la imposicion romanas, incluida su lengua. Es signicativo que sea e sta la zona donde varios siglos mas tarde se desarrolla el romance castellano. En el resto de la Pennsula, sin embargo, el proceso de romani si bien lento y difcil, es completo. Se impone no solo la lenzacion, gua trada por soldados, colonos y administradores sino tam civil y militar, el derecho, la educacion, las bien la organizacion tecnicas agrcolas e industriales, el sistema de carreteras, e incluso, (Lapesa 1981:55; Dietrich y Geckeler hasta cierto punto, la religion 1990:124). Una vez apaciguadas las regiones y conquistados los pueblos, la prosigue sin coacciones ni esfuerzos sistematicos de romanizacion parte de los romanos (Kulikowski 2004:89). Bastan las estructuras sociales y polticas que erigen para asegurar el gradual desplazamiento de las lenguas y costumbres locales. El factor principal