Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
EL SEORO
Por: ALEJANDRO CASTRO ROSAS.
Prohibida su lectura a las mujeres.
(A menos que quieran vivir bien).
Alguna vez te has preguntado quin le dio el poder
que tiene al diablo? Cmo lo obtuvo? Quin se lo
dio?
Hay quienes incluso cree que el poder se lo dio Dios,
esto es equivocado, el poder que detenta el diablo en
la tierra se lo robo a su verdadero dueo, su verdadero
dueo es el hombre, este poder se lo dio Dios a Adn y
el diablo se lo robo por medio de la mujer, Cmo es
esto? Vamos a ver!
En toses dijo Dios: Hagamos el hombre a nuestra
imagen conforme a nuestra semejanza; y seoree en
los peces del mar, en las aves de los cielos, en las
bestias, en toda la tierra y en todo animal que se
arrastra sobre la tierra Gnesis 1:26.
Como podrs ver Dios le dio el seoro, la autoridad al
hombre, en las aguas, en el aire y en la tierra y ms
adelante le dijo: Llenad la tierra y sojuzgadla, y
seoread los peces del mas, en las aves de los cielos,
y en todas las bestias que se mueven sobre la
tierra Gnesis 1:28.
Cuando Dios le dio el seoro de la tierra al hombre
todava no haba hecho a la mujer, esto es ms
adelante en Gnesis 2:18 Y dijo Jehov Dios: No es
bueno que el hombre este solo; le har ayuda
idnea para el.
La razn por la que Dios hizo a la mujer fue para
hacerle ayuda idnea a l hombre, no para que ella
ejerciera seoro sobre l.
Las cosas estaban as: El Seor en la tierra era el
hombre, el diablo estaba descielado en la tierra, es
decir la tierra era su prisin y no tena ningn poder. Es
ms la calidad del diablo era la de una bestia ms en la
tierra, de hecho no era ms que una serpiente, por lo
que Adn tenia seoro sobre de l; pero veamos que
sucedi; pero la serpiente era astuta, ms que
todos los animales del campo que Jehov Dios
haba hecho; la cual dijo a la mujer: Con que Dios
os ha dicho: No comis de todo rbol del huerto? Y
la mujer respondi a la serpiente: del fruto de los
arboles del huerto podemos comer.
Pero del fruto del rbol que est en medio del
huerto dijo Dios: No comeris de l, ni le tocareis,
para que no mueran.