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Malformaciones digestivas en el recién nacido


M.I. Armadá Maresca y T. Alonso Ortiz

Introducción • Peritonitis meconial.


Las malformaciones congénitas del aparato • Defectos de pared.
digestivo son un capítulo pequeño en fre-
cuencia pero importante por su variedad. Posnatal
Estas alteraciones pueden dar clínica a cual-
• Vómitos.
quier edad, algunas ya desde el nacimiento o
la infancia, mientras que otras aparecen como • Distensión abdominal.
una imagen insospechada o se manifiestan en • Ausencia de eliminación de meconio.
la edad adulta.
Vamos a referirnos sólo a aquellas malforma-
ciones que detectamos en el recién nacido o Malformaciones digestivas más
en el periodo neonatal. frecuentes en el recién nacido
Clasificarlas no es fácil. Con un sentido
didáctico las vamos a clasificar según la Boca
región anatómica afectada.
Labio leporino y paladar hendido
Desarrollo fetal y madurativo El labio leporino puede variar desde una peque-
neonatal ña muesca labial hasta una separación com-
Hacia las 28 semanas de edad gestacional, el pleta que se extiende al suelo nasal; puede ser
desarrollo morfológico del tracto digestivo uni o bilateral.
está prácticamente completo. Pero el periodo El paladar hendido puede afectar sólo la úvula
entre las 28 y las 38 semanas de gestación es o extenderse a lo largo del paladar blando y
crucial para la maduración de procesos bio- paladar duro.
químicos y fisiológicos, que no sólo son nece-
sarios para la digestión y la absorción, sino El problema es la nutrición, que hay que
también para la propulsión del contenido hacerla muy cuidadosa por riesgo de aspira-
intraluminal a lo largo del intestino. ción. El tratamiento es quirúrgico.

Clínica más frecuente de las Síndrome de Pierre Robin


malformaciones digestivas Constituido por micrognatia, glosoptosis y
paladar hendido. La mandíbula hipoplásica
Prenatal impide el anclaje normal de la lengua y tien-
de a caer hacia atrás ocluyendo la vía aérea;
• Polihidramnios. por ello deben colocarse en decúbito prono

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Protocolos diagnósticos y terapéuticos en pediatría

para que la lengua caiga hacia delante. La ali- Las otras malformaciones (fístula sin atresia)
mentación debe ser cuidadosa colocando la suele revelarse precozmente por la aparición
lengua adecuadamente. de signos respiratorios.
Gracias a los progresos de la cirugía, de la
anestesia y de la reanimación postoperatoria
Esófago del recién nacido, todas estas malformaciones
Atresia y fístula traqueoesofágica pueden corregirse quirúrgicamente, general-
mente con excelentes resultados.
Anomalía que se produce en las primeras
semanas de gestación por alteraciones en la Hendidura laringotraqueoesofágica
emigración del tabique traqueoesofágico.
Es un fallo de la separación completa entre la
En su forma más corriente, la porción proxi- laringe y tráquea superior y el esófago. Su clí-
mal del esófago es un saco ciego, mientras que nica es similar a la fístula traqueoesofágica
la porción distal comunica con la traquea por más afonía. Su diagnóstico es endoscópico.
un trayecto de escaso calibre. La clínica pre-
natal puede ser un polihidramnios, y la pos- Otras anomalías
natal la imposibilidad del paso de la sonda — Compresión extrínseca por teratomas
nasogástrica hasta el estómago o neumonías
— Quistes de duplicación esofágica
aspirativas de repetición en caso de fístula sin
atresia. En la atresia sin fístula destaca la — Estenosis y membranas congénitas
ausencia de aire intestinal con abdomen — Incordinación cricofaríngea
excavado.
— Hernia hiatal que se asocia frecuentemen-
Tipos de atresias y fítula traqueoesofágica te a reflujo gastroesofágico.
(figura 1)
A. Atresia de esófago sin fístula traqueoesofá- Estómago
gica o tipo I.
La clínica más frecuente de las malformacio-
B. Atresia esofágica con fístula traqueoesofá- nes gástricas es el vómito no bilioso y proyec-
gica proximal o tipo II. tivo y su tratamiento es quirúrgico. Las mal-
formaciones más frecuentes son:
C. Atresia de esófago con fístula traqueoeso-
fágica distal o tipos III y IV. Estenosis hipertrófica de píloro
D. Atresia de esófago con fístula traqueoeso- Hipertrofia de la capa muscular circular del
fágica proximal y distal o tipo IV. estómago en la región del píloro. El calibre
E. Fístula traqueoesofágica sin atresia. del píloro se reduce provocando la obstruc-
ción al paso de alimento y los vómitos pro-
La atresia de esófago con fístula traqueoesofá- yectivos que llegan a producir alcolosis hipo-
gica es la malformación más frecuente: esta clorémica. El diagnóstico es ecográfico, y el
malformación debe intentar diagnosticarse en tratamiento, quirúrgico.
el recién nacido antes de alimentarlo por pri-
mera vez pasando una sonda gastroesofágica. Duplicaciones gástricas y tabiques prepilóricos

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Neonatología

Duodeno Onfalocele y hernia umbilical

La clínica de sus malformaciones también son Asas herniadas a través del cordón umbilical
los vómitos, aunque ya biliosos, y el trata- en el caso de onfalocele y herniación de asas
miento es quirúrgico. alrededor del ombligo por ausencia de capas
músculares y piel en las hernias umbilicales.
Se pueden encontrar:
— Obstrucción y estenosis duodenal por pán- Gastrosquisis
creas anular o compresión externa.
Defecto de pared abdominal con eventración
— Atresias. de asas y vísceras.
— Membranas duodenales.
Otras
— Malrotación de las asa intestinales.
Intestino medio
— Duplicaciones intestinales.
Divertículo de Meckel — Atresias y estenosis de intestino.
Es la persistencia del conducto onfalomesen-
Su clínica es preferentemente la distensión
térico que se asienta en el borde antimesenté-
abdominal y puede haber vómitos biliosos
rico del intestino y está vascularizado por una
más tardíos. Suele asociarse ausencia de eli-
rama propia de la arteria mesentérica superior.
minación de meconio.
Su clínica neonatal suele ser fístulas umbili-
cales o hemorragias digestivas, pero también El diagnóstico puede ser con ecografía, tránsi-
pueden aparecer como cuadros de oclusión to gastrointestinal o laparotomía exploradora.
intestinal mecánica, invaginación intestinal El tratamiento es quirúrgico.
aguda o úlcera péptica, hernias o tumeracio-
nes del divertículo de Meckel.
Intestino posterior
Patología del conducto onfalomesentérico
El intestino posterior da origen al tercio distal
A. Persistencia total. Fístulas que antes de la del colon transverso, el colon descendente, el
caída del cordón pueden evocarse por el sigmoideo, el recto y la porción superior del
aspecto dilatado del mismo, que deja ver conducto anal.
una tumefacción oscura del canal onfalo-
mesentérico. Después de la caída del cor- La clínica predominante es la distensión
dón, el aspecto es el de un grueso pólipo abdominal con ausencia de la eliminación de
umbilical, del que pueden salir gases y meconio.
líquido intestinal.
Megacolon aganglónico congénito
B. Persistencia parcial. Puede también adoptar
dos aspectos, el de un ombligo exudativo o Corresponde a una anomalía en la inervación
el de una tumefacción umbilical. intrínseca de la pared intestinal, sobre un seg-

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Protocolos diagnósticos y terapéuticos en pediatría

mento de largo variable que se extiende hacia permite restaurar una secreción biliar eficaz
el esfínter interno del ano. Se manifiesta por en un cierto número de casos.
estreñimiento, que puede llegar a producir un
Uno de los principales factores pronósticos es
cuadro de obstrucción intestinal y una ente-
la fecha del diagnóstico y tratamiento quirúr-
rocolitis necrotizante. Su diagnóstico de sos-
gico, que debe ser antes de la quinta semana
pecha es clínico y por enema opaco, y el con-
de vida, por lo que constituye una "urgencia"
firmatorio por biopsia colónica de la zona
quirúrgica neonatal.
estenótica.
El tratamiento es quirúrgico seccionando el Factores de buen pronóstico son:
segmento patológico agangliónico y restable- • La presencia de vías biliares en la sección
ciendo la continuidad digestiva, respetando el del hilio hepático.
aparato esfinteriano.
• La ausencia de poliesplenia.
Ano imperforado y atresia anal
• La normalidad de la presión portal.
En general las malformaciones anorrectales
• La prevención de la colangitis postopera-
son evidentes desde el nacimiento. Presentan
toria.
una gran variedad anatómica, que abarca
desde la simple malposición anal hasta la La persistencia de colestasis, una hipertensión
atresia anorrectal completa. El diagnóstico portal evolutiva o los signos de insuficiencia
preciso de la variedad y de las eventuales mal- hepatocelular tienen mal pronóstico.
formaciones asociadas orienta el tratamiento
y permite formular un pronóstico.
Esquema orientativo para el
Fístulas rectales manejo del recién nacido con
posible malformación intestinal
Hígado y vía biliar (figura 1)

Dentro de las malformaciones del hígado y la


vía biliar destaca la atresia de vías biliares, sien- Otros aspectos de manejo pre y
do la causa más frecuente de colestasis neona-
posquirúrgicos
tal. La génesis de la atresia se conoce mal y es
probable que tenga un origen multifactorial. • Control metabólico.
El diagnóstico de atresia de las vías biliares • Control hemodinámico y tratamiento del
viene marcado por la colestasis con decolora- shock.
ción progresiva de las heces, y hepatomegalia • Cobertura antibiótica y seguimiento de la
de carácter duro que se suele acompañar de infección.
hipertensión portal.
• Aporte hídrico y calórico adecuado con
El tratamiento es quirúrgico mediante hepa- aporte parenteral mientras el enteral no
toportoenterostomía o técnica de Kasai, que sea posible.

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Neonatología

Nacimiento

Vómitos Distensión abdominal

NO

No biliosos

Biliosos

Obstrucción intestinal alta

Obstrucción intestinal baja

Rx abdomen
Ecografía Rx abdomen
Tránsito esofagogástrico Ecografía
Tránsito gastrointestinal
Enema opaco
Laparotomía exploradora

Figura 1. Esquema orientativo para el manejo del recién nacido con posible malformación intestinal.

Bibliografía
1. Embriología Médica Langman. Panamericana. 3. Manual de Cuidados Neonatales. Cloherty, 3ª
6ª edición. 1993. edición. 2000.
2. Enfermedades del recien nacido: Avery. Pan- 4. Tratado de Pediatría. Nelson Interamericana.
americana. 6ª edición. 1993. 15ª edición. 1999.

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