is, en 1992 de cos, que habi Ithusser (1918- (edici6n esta- casi simulténea ¢ Pat ‘Sbras como dos textOs autobiografi vrmanecido inéditos, Je on Per vavenir are longtemps y Lés. fait arte y presentada por Olivier Corpet ¥ Yann Fheatier Boutang), ¥ libro de este filtimo Louis Al- Plaster Une biographie. Tomo 1.1 formation di myte (1918-1956), ha ‘vuelto a traer er plano de epneion [a figura del gran pensador dv tanta influen- Gi ejerciera no solo en Francia, sino © muchos otros paises, incluyendo los de nuestro Continente, y cierta- a oa Cuba, Ea Cuba, tn 1964 las Ediciones Vence- sane recogieron en sendos cuadernos sus ensayem "rdetenninacion y Sobre ta dialéctica ‘a en la revista Contradiccion y supe? diciembre de 1962-y agosto de moterialista, aparecidos por vez primer francesa La Pensée en 1963 respectivamente. Conoci a Althusser en persona en enero de 1965: me lo present6 en su Ecole Normale Régis Debray, de tan compleja evolucién ulterior. Cuando empecé a diri- gir la revista Casa de las Américas a partir de marzo de ese aiio, tanto Debray como Althusser colabora* rian en ella. Unos meses después de aquel encuentro, Althusser me envi6, con fraternal dedicatoria, su me- 56 morable Pour Marx (1965), que luego Tn Cubs, asi como Leer El capital tay ES eM ucionarias del Instituto Cubano dere Re wencia de Althusser entre nosotr ‘bros polémica, como todo lo que vale la pent (esenc Piyia sobre todo en la también Them) Sait Pensamiento Critico. (Entre paréntese "vi pono Martinez, quien {uera director de gat’ Fe tomo yo creemos que aquellos er ‘mict if ¢ desangran hoy, pero que no son los gel arduo presenter ¥ eicko menace ae jp nr merecid©- Pickens Capare 9 de dar a conocer estas Por un, cart th in debate Sac es'clato Wenn ‘ 0 contribuil 10 que no M094 9 Reg ir a que sc Conozca ma zh obra de un auténtico maestro, Tumi mas Che, here ‘or descontado, ©, luminoso y do- tal proyecta ea Bee gate YP , contradictorio-. Se im por los hechos fe ree jjnembarB0> algunas aclaraciones para el eee Pediria en sy na eves publi publicara ta &%eén sme me NERO Saya, sth ; ual d& estas paginas. Pe ‘oF otra pare, endl posit ) reabrit ala sentido, sin carta de 25 de octubr re de octubre de 1967 Aihe ewone Se pel pirrafo inicial de su iw), ‘Althusser menciona olra de él. Debray. Sc trata vaci evn ensayo, 7 forma de.carta, sobre el libro de éste Haak wopisto & iRoom Gaus, wotucion et La Reyolucion?, que Ja Casa de las Amé- aS Suanto a Che, no pre ee habia publicado enencro de aquel aio 1967, y que onstage degertaria formentosas discusiones. Copia de cseen- Ello fy = ae ge be possi et ae sgoearta, con fecha primero de marzo de 1967, me francés nies Pos phim css gba través de Jacques Arnault, entonces correspon guemade guerillas. iat a are = sl dd periédico L’Humanité en ‘Cuba. Arnault me Yo Pasajes de la pur soe cee «avid con carta suya del 20. de marzoen que transcribio cional de muchos de es Ba Ja que Althusser adjuntd noes paserior at ‘una excelente compilaciea wanes eo? Asguiente parrafo de otra a sumaterial: ,.do con pasi ye a explicar que 20 mera de las carlas dos con cambio ibaaser aborda candisefpulos. Ello contribu se Spservaciones en la pri aqut recogidas te con éRevolucion fenton mea Mei Cee ere Sr Francia en Cuba, quc me fe is bros de sobre Alter we Poe a ‘Nota”, los cuales en rw d Psion de publicar las cartac st4M ea we GS See eee ee que mantuve entre junio y juny! i NN HO de ogy te ‘ res, con amigos igos como Claudio Lozange® we % ReyALTHUSSER: yo ERNESTO CANTELA ne SUE ARER ARA TE DE set octubre 67 & _jo Retamar: eee ama ytucarta, Te cablegrafié que estoy e wv i nter po carta a Régis, asi como con los términos del Gramente de acverdg re i: peau, En efecto, ae pr . 61a muerte del “Che”. Esa muerte tragica, el proce cunstaneiae ie Ld ever un dolor y una interrogacién lancinantes, No ns 5 at Tame enticndes. tomb eames : ; interto- ang yna pagina O algunas lincas sobre el “Che” para el niinero cyl Cal de Casa, i i simple individuo, pudi ; ye pudicra decir, como simple t , pudicran deci ot sano slo todos los que © ee al “Che”, sino también Beene Y Gertamente mejor . ge, aun sin que lo conocicran: militantes y hombres del pucblo. Toe ara quienes esto ‘grlso y Henle més peso que cl de un simple intelectual. imonio cs infinitamente de Régis yla un dolor, fae sesabsolutamente necesario que me pronuncic (Zpero es absolutamente necesario?), lo haria pooiclectual comunista, cs decir, como intelectual que trata de ser un ieblogo de a dase ee (Lesinemplea esta {6rmula), del que se espera, como de todos los revolucionarios concientes, que aun poco mas allé de su dolor y su cmocidn, cn sintesis, que sca capa, de reflexionar sobre ¢1 eeaploy sobre la mucrtc del “Che”. . He aqui lo que diria, teniendo en cuenta Ia situacién actual, si fuera absolutamente necesatio que tcera una declaracién piblica.— =e me senti sicudido por la muerte del Che” y las circun, “Como millopes de hombres en el mundo, tancias de esa muerte, ocurrida en combate. ‘Che’ dado. Ahora sa Sabemos desde hace mucho tiempo que el ‘Che’ no puede ser inn 'a sabemes lo que nos ha dejado: no sélo su vida, sino también su mucrte, para que meditemos. Con su: vida, el ‘Che’ nos dej6 un admirable ejemplo de concicncia, de eee de coraje y de abnegaci6n revolucioniarios. Su muerte llama a todos los revolucionarios a cumplir con su deber: Revolucién, . El ‘Che’ nos deja una definicién marxista-leninista de la estrategia general de la lucha de las clases revolucionarias en la América Latina! cn su conjunto, 1a lucha revolucionaria de masas de la Amé. rica Latina pasa y pasar necesariamente por la lucha armada. Elejemplo del ‘Che’ impone a los revolucionarios el deber de no olvidar jamas la estr que él definio, : Pero la muerte del ‘Che’ impone a los revolucionarios otro deber. Los revolucionarios deben sobre- Pasar su emoci6n, y cerrar sus filas. Los revolucionarios deben reflexionar sobre las condiciones de la muerte en combate del ‘Che’, sobre las condiciones de la lucha que llevan adelante. Deben pro- fundizar sus conocimienios y sus reflexiones sobre las relaciones de clases existentes en la América Latina, en escala nacional, y en escala internacional; sobre las formas concretas de aplicacién, en cada caso, y en cada etapa de la lucha, de la estrategia general definida por el ‘Che’; sobre las técticas particulares a poner en practica que correspondan concretamente a cada caso y a cada momento, alegia general No se puede reflexionar concretamente fuera de la lucha. Como la lucha de clases ¢s internacional, los revolucionarios del mundo entero pueden contribuir a definir una estrategia gencral, pueden ’ comprenderla, apreciarla y aprobarla. Pero sélo los revolucionarios inmersos en ta lucha en una Tegi6n del mundo estan en condiciones de reflexionar concretamente, pueden analizar objetivamen- te las relaciones de fuerza cconémicas, politicas ¢ ideolégicas de la lucha de clase que libran, para definir las tdcticas adecuadas a su lucha. EL ‘Che’ deja a los revolucionarios, con su vida y con su muerte, ese gran ejemplo, Nunca dejé de unir la reflexion y la lucha. Puso al servicio de su lucha toda su inteligencia, toda su Iucidez. Los revolucionarios seguirdn ese ejemplo. Las condiciones en las que él luchd y murié imponen alos revolucionarios la tarea, indispensable para la victoria de su causa, de profundizar, en la lucha mis- ma, el andlisis de las relaciones de fuerza en las situaciones concretas de la lucha de clases, para definir las tacticas apropiadas a llevar a cabo, en cada caso, y en cada momento, segin la estrategia 4 general de la lucha revolucionaria en la América Latina.” He ahi, en términos generales, lo que diria, Quizds el “Che” no hubiera estado de acuerdo con todas las formulaciones, pero esos desacuerdos parciales forman parte de la lucha por la que se sacrifios. Un verdadero canto finebre no puede dejar de ser al mismo tiempo una reflexion politica, cuando lo que s¢ conmemora es la muerte de un hombre politico. Dich8 esto, no te oculto que preficro que no publiques nada mio. Pero si es absoliutamente indispensable, y si este texto. puede ser publicado, te lo doy. En cuanto al fondo de las cuestioncs, al que simplemente toco de modo alusivo en esas lineas, he aqui mi sentimiento.Laesinonedia de ta tetterion, det andtig © jivly a estrategia pone Sis, de La detinici pela te | ty " : rate a Reneral del “Chom lctinicidn de Actions pewnlrebdn € i a America Latina pasa y pasard sing, p ; sConeretas no it pare wentetal 69 ia eAtrategtia gertendd quer eee eae AMER realizarta, En eatiaacOny et Las forma’ oie ue, enunciada de tal feree ews arMada, Pere ts te reat ce cake gvonent Ue a lucha, Dooaeees ee correspond este astaca Ea enge je y = POP Vanto, se it para . : exige su Aix bis adjetinas conetetos (en una Huck ree eeeOne defini asf cada pals, al contenido de Qavetatesartotto de la lucha, yh ‘evolucionaria de lormas concret . as modifica elas de onganiza- implica poner en a larga duraci : Seas inch eaneae clones en las rela rAci6n esos objeti jos prtodaay dle hicha coneretos que se correspond: s relaciones de clase), las tdci os pavtante dle fa lucha de clase, ‘pondan con los objetivos coneretos de oaleernen? i" ae retos de cada ctapa im- saan diversas definictone : : _ " Ae _ ee § (organtraciones, objetivos, técticas, met a eH eral y sobre: is ‘ s, Métod et ja cotateytia general y sobre el andlsis concreto, conducide de sewed ee een ase Nees feotia marrista, asf como de las relaciones de clay lo de acuerdo con los principios de la veal pais, y en cada momento, © econdmicas, politicas e ideolgicas que existen (Una estrategia general justa no es suficicnte. ci _ deadle lucha correctos y justos, San emI ed organizaciones, abjetivos, tdcticas y méto- eonereto de las relaciones de fuerza que constituyen al cs : fy te eee Fecha do clases on cada pals, yenclconjunodelos pikes ‘ws potenclalkiadcs da Ahora bien, en lo que he podido leer del “Che”, y en el libro de Régis, se encuentra una definicis de la estnategia general, cuya demostracion se basa sobre un anclisis global de la lucha de clases 30 encuentra también la definicidn de wad organizacién militar, de su téctica y de sus métodos de lucha (laguertilla), pero no se encuentra el andlisis concreto sobre el estado de las fuerzas de la lucha de clases en cada caso, : La guerrilla resulta el objeto de una simple afimmacién, y no de ina demostracién basada sobre un ndtsis, o mas bien sobre /os anilisis de clise concretos, Por otra part, se trata de una organizacion vinica, encargada de todas las tarcas, sin que su unicidad esté fundada demostrativamente en anilisis, concretos, En ausencia de anilisis concretos, que en esc nivel lo deciden casi todo, coateteee, eee . goneretos de las relaciones de clases en las situaciones concretas, boy ue a ie p ee sola forma de organizacion (que no es objeto de ninguna demostracion : sada sobr aad tog), por otra parte, se tiene la impresion de un corto’ cireuito. De modo neh 7 sage ee general en relacién con una forma ‘anica de organizacion con ala ee ae corto circuito desaparece Un término importante: la definicion F - aie ee cane necesariamente su caricter gradual, su cambio en funcién de ae arr tos tara de a0. Se remplazan los objetivos coneretos por UF objetivo atobas , eee ai jtivs SoneF10S POF Tira toma del poder. La ausencia Jeane" Goneretga goneral ye a organizacion nica ¥ de etapas van de la mano de ese corto Circuito de la estrateg! su tictica propia. . ff ‘itiva ja vali Ta sabes que todo depende en definitiva de la i 5 raz « porque la tes! entec ta auerrlla y et Partido. Por dos rsz0n% Po ch ral, discutible (que la guerrilla sea el Partido y aac esis de Régis ucenea de las lactones ee ea Ste Régis es, como tesis gene rt gbre todo, porgue # tess deSe ee 2 revolucionaia de ma8as asec Poben. orden de égis. zt fa luch: 7 oblemas complejos de Rees a aa aguerrilla yel Partido. Las cosas nO son tan simples. Considerémoslas en, relaci 1 importancia creciente, ; : i i lla y el Partido) concierne a la relaci6n ent, 1/Latesis de Régis (retacones tr ed y ianay, iene nr, — nas 5 : o Po oad euch ef clases. Es una cuestion muy importante, pero no Ja més importante, . i 2 La euesién mds important, jsiva en diltima instancia, no concierne ala relaci6n entre dos organizaciones, sino a la relacién entre la cs ae fed perahoses y sn ina eats A lat 1 otra. Esta articulacion entre una c ' acer oe ere quiere{n] la teorfa y la experiencia revolucionaria marxistas-leninistas, son las masgy las que hacen la historia en Gltima.instancia. .¢ se desarrolla en la América Latina es necesario, por tanto, tomar e eee Sanaa no una sola. Es necesario tomar en cuenta no solo la articulaci6n entre la organizacion de lucha militar (la guerrilla) y la organizacion de pape ee (a Partido), sino también y al mismo tiempo la articulaci6n entre las organizaciones de luc! ey fas masas popu: lares. Y es preciso no perder nunca de vista que de estas dos articulaciones una es decisiva en Gitima instancia (la articulaci6n organizaci6n / masas) y la otra, a pesar de toda su importancia (ya través de todos los desplazamientos de la dominante), le est4 subordinada. Si se mantienen firmemente estos principios, que yo no invento, os cuales estan inscritos con todas sus letras en la experiencia revolucionaria existente, de ellos se derivan importantes consecuencias te6ricas y practicas. Sisse tienen en cuenta estas dos articulaciones, asf como la primacfa de la segunda con respecto ala primera, se advierte que el concepto de guerrilla no resulta adecuado para designar los caracteres de la lucha en su conjunto, los caracteres del proceso de lucha que, sin embargo, siempre est4 mas ‘0 menos presente en la conciencia de los guerrilleros politicamente més formados. El concepto que reconoce la existencia ¢ importancia de esas dos articulaciones es el concepto de guerra popular, con todas la exigencias que él implica. En la primera fila de esas exigencias: e! pueblo. El pueblo son las masas populares. Las masas son el conjunto de clases y grupos sociales que est4n de un mismo lado en Ia lucha, contra el mismo eneinigo. El contenido-del pueblo varfa segdn las etapas de la lucha de élase: segtin las ctapas de la lucha, una clase o un grupo social dados se une al pueblo olo abandona para pasarse al lado opuesto, De aqui se inficre que es preciso'saber siempre qué es el pueblo, en cada momento de la lucha, donde esté el pueblo, c6mo esté constituido, qué quiere, de qué es capaz, etc. De ahi la necesidad vital de andlisis concretos de la situacién de las clases y de las relaciones de clase puode vivir Snconseguit el apoyo del pueblo, por reducido que Gea atar de obtener répidamente el apoyo del pueblo. Por ello es preciso que la organizaci6n defina objetivos concretos, que ene alo aa quiere el pueblo, y sepa traducirlos en consignas concretas, Ee Es sobre esta b ones, incluse Por parted la guerrilla, Sin objetivos populates concrargt eee mnprenderse acciones “A i 21 pueblo, ae ares concretos, que pued la adhesion del ©, o al menos de ciertas capas populares Para desde ahi oe eee mis ampli 1a Se inficre que ninguna organizacion sea ese pueblo al inicio, sin tratar djon de las organizaciones es estéril, y ci : aiecto del pueblo, pueden desaparecer oser deen e ae A : 0 Ser destruidas.* WU BO pueden vivir sin y fsto no quiere decir que hay que abandonar wir sin cl apoyo iere decir es que en una guerra de clase un solo instante el princi : aps for mila ae fae rd su justo Tiger en enc Te me Drcpars ent lean 30 sper solo puede efercey su funeiee son ae 5 un clemento capac a eee indicadoy Prscas en ta lucha de clases desempciia e1 Dope dennis defini, eee sé que a este esquema general (que No €s mds que un esques instancia. Cuba, donde las cosas no sucedieron de esa forma, En Cuba ae se le puede oponer el ejemplo de facilidad relativa de la simple guerrilla a formas de laguena ‘guerrilla pas6 con gran rapidez y una sas especificas que merccerian ser analizadas la situaciOn dee Meche oa me ca por una parte, la coyuntura internacional por otra (los Estados Unidas laos en Ia misma Cuba ron ese paso rapido y (relativamente) facil. No es se; Inidos no intervinicron), permitie- i 7 i -guro que las cosas sucei: n en os otros paises de la América Latina La situacion interna dela leche de dace panda ceed rente alli (hasta donde. ‘conozco, en Bolivia Jos campesinos tomaron posesién de las tierras al ocurrir la revolucion del MNR; la consigna movilizadora dé los campesinos, la consigna secular de los cam- pesinos, ila Tierra para los Campesinos!, no podia desempeiar alli, a pesar de la atroz miseria cam- pesina, su papel revolucionario); igualmente es distinta la situaci6n de la lucha de clases en el plano internacional (los Estados Unidos intervienen ahora directamente, con métodos que, por el momen- to, desgraciadamente parecen ser relativamente eficaces). La coyuntura que permiti6 ala guerrilla cubana desembocar répidamente en una forma de guerra popular (apoyo y participacion activa de las masas) no existe quiz4s en ningin lugar de la América Latina. Es imposible pronunciarse sobre este punto sin andlisis concretos. No es posible pensar, a prior, que la guerrilla desembocaré répidamen- ey por sus propios medios en una guerra popular. Siello fuera ast (y es posible que yo me equivoque, es posible que se hayan hecho andlisis concre- tos), habria que pensar el papel de la guerrilla, indispensable, en funcion del proceso de desarrollo de la guerra popular, que amenaza ser una guerra prolongada, Si ello fuera at, las exigencias que indiqué (las dos articulaciones y sus consecuencias) deben tomarse en consideracion para asignarie ala guerrilla no s6lo su lugar de intervenci6n en el espacio, sino también sus formas de intervenci i ici i (minimo de apoyo popular, perspectivas de un incre- enel tiempo, y sus condiciones de intervenci6n (mi Ho Ore er ee mdlodoe cnc mento del apoyo de las masas populares), al igual que los oie . _ et Pe ea ‘1 , ist sntos. Poner ér a tos del conjunto de la lucha, en sus ee Aipacel deerminante eae guerra popular, con todas sus cOnSeCUERCHES MT as fms de experiencia egndas Pot culacion (organizaciones/masas). Ello esté e! toc as stad prc el movimiento obrero en las disimiles luchas que éste ha emp! fracaso como las coronadas por ta victoria). . sobre una hoje 2 papel, No tengo en 5 Sé que es fécil decir estas cosas desde lejos y eseribir eae sb una pincios oe forma alguna la pretension de ensefar nada a ee 5 ean rg me permito esta ama i luchas, sca cual forma. perc tener, al mens dos, y probados por innumerables > we un intelectual, que puede ten f mites ente estrechos, en ei fh del movimiento obrero, deiro dlr ints, xem eres de ss expresas N através del estudio,infinitamente mas que él, porque oF a compaferos que hacen infinit i |, Porque cllos sf ausiar con ello 9 compar Aus, Pero denteo de e808 limes eF60 que es mi dabes gh & acer ede et \e a menu {a lucha en la qui esta llamada. / a alti sderaciones a compaieros responsables ~o Si juzgas atil dar a Icer estas ultimas consideraciones 4°" ee eo anode, fo dejo a tu buen juicio. Por mi parte, no dirijo lo a Un abrazo : Althusser! Paris 26 de diciembre 67 querido Retamar: sin noticias tuyas,ni por la Revista, ni por carta, después de tus llamados urgentes de octubre, y mis respuesta. Recibiel tiltimo No. de Casa. nimi carta a Régis ni mi“pégina” sobre el “Che”, ello es, desde mi punto Si puedes no publicarnada, 7 bre el de vista, la mejor soluci6n, Cuando te digo “desde mi punto de vista”, tengo en cuenta lo que imagi- nas: intereses generales, los de nuestra causa comin. fa mucho que ti respondieras mi carta, a titulo personal, y que me dijeras lo que ni ‘es sobre las cuales te doy mi opinion. Ello me es tanto més necesario por realidades latinoamericanas las mismas posibilidades de contacto que ti, Pero me gustar' piensas de.las cuestion cuanto no tengo con las. Sé que ests muy ocupado, sobre todo con vuestro “Congreso” de enero.? Pero aquellas cuestiones son demasiado importantes: debes poder encontrar un momento para responderme. Espero tu carta. Te abrazo Althusser ENS 45 calle de Ulm Paris 5e.3 Traducido del francés por E.R. ce Er Gltimo pétrafo, la despedida y la firma estén manuscritos, (N. de la R) 2. Se refiere al que seria con 1ocido como Congreso Cultural d q 1968), passim: y n. 48 (mayo-junio de 1968), p. MPISL(N dela ae Fd ecArsn eeer 3 Lafirma esté a méqui na, sis ‘uina, Pero estdinicialada a mano. Los datos de la direccién también estén manuscritos. (N. de 12)