Tierna Ficcion

TIERNA FICCIÓN
DIEGO VELASCO ANDRADE

© Diego Velasco Andrade.
® K-oz 2005
Colección Zaguán de Aluminio

PRIMERA EDICIÓN: junio 2005
RDA:
ISBN:
DISEÑO DE PORTADA E INTERIORES: Quark

Juan Larrea N13-59 y Arenas
Teléfonos: 2545526 / 098-562899
Quarkgrafico@yahoo.com
Correo E. autor: diegovelasco10@latinmail.com
OBRA DE PORTADA: Réne Magritte
EDICIÓN: Alfredo Pérez Bermúdez

Pablo Yépez Maldonado
QUITO - ECUADOR
Todos los derechos reservados. No se permite la

reproducción total o parcial de este libro mediante
fotocopias, ni su incorporación a un sistema
informático, ni su transmisión en cualquier forma o
medio, sin el permiso previo.
TIERNA FICCIÓN
LEÑA CIRCULANTE
DIEGO VELASCO
9
ANDRADE /
Un árbol llamado viejo inmundo,

atravesaba la vía 24 cuando de pronto
estalló por las alturas...
Entonces pudo divisar desde las nubes, la

hilera de hormigas que atravesaban la
ciudad; el vapor violeta que asfixiaba el
bosque en donde creció; los cubos de
hormigón en donde odiaban, reptaban,
envejecían, copulaban, seres de un
corazón marchito y hostil.
Vio también comerciantes apostados en

las aceras, vendiendo cubos, mechas,
cuchillos, pájaros tropicales, anteojos,
ganchos... Vio ejecutantes de rock
10 / TIERNA FICCIÓN
danzando en los cables de alta tensión y a

un gato verde que miraba con angustia su
estallido desde un tejado.
Cuando volaba, extrañó la alcantarilla

donde hizo su vida: allí, debajo de los
barrios de cartón que circundaban la gran
ciudad. Recordó su tronco cubierto de
costales, su bonete de lana y sus raíces que
prendían solas por entre basurales,
envases de atún y grillos muertos. Pensó
en su familia: un gato verde, un viejo
bastón y un abrigo ennegrecido y flaco,
raído por el tiempo.
Llevaba colgados en el bolso cartílagos de

mariposas muertas y unas cuantas plumas
de paloma que de tarde en tarde anidaban
en su hombro, para buscar miguitas de
pan.
Cada noche, las cucarachas invadían su

copa, hasta ser destrozadas por un rayo
que las dejaba inertes, maltrechas sobre el
gris urbano. Luego, el tumulto venía en su
DIEGO VELASCO
11
ANDRADE /
búsqueda para extirparle una flor o una

rama y alguien robaba sus hojas para
venderlas como las noticias más frescas de
la tarde, mientras otros serruchaban su
demente tronco para fabricar máquinas de
fuego o guitarras acústicas y algunos
arrastraban con esfuerzo sus ramas hasta
los barrios de cartón para poder encender
su hogar.
Esa mañana despertó con los oídos ciegos

por el tráfico que fluía inhumano a su
costado; la tempestad había congelado su
vieja cáscara de vegetal circulante.
Recogió la moneda que un transeúnte
soltó agriamente en su tarro. Luego,
decidió caminar en busca de sol o de
gente. A las 8 pudo devorar un plátano
fofo y un pan de agua. Más tarde se detuvo
a observar las vitrinas de ECOLOGIA
S.A. Al doblar la calle, la camioneta P20-
30-95 cruzó vertiginosa a su costado,
escupiéndole rojos orines en el rostro. La
vía 24 fue testigo de la descarga del tarro
recoge monedas que colgaba de su rama y
que más que tarro era una bomba de

tiempo esperando ser detonada por un bus
de la
LÍNEA URGENTE.
Yo
observé a árbol inmundo

estallar por las alturas,
miré como su cuerpo se disolvía
lentamente entre las nubes; me abrí paso
rasguñando el tumulto, recogí en mi piel
verde, su sabia roja aún fresca
y la guardé en mi memoria,
para irla a escribir
por los tejados.

MAR Y SOL BAJO UN ÁRBOL
a mar i sol
DIEGO VELASCO
15
ANDRADE /
Recuerdo tanto su pie desnudo

su adorable pie sin zapatos...
Mar i sol, bella como un atardecer

en el mar de la Amazonia,
venía de una selva que alimentaba
con leche y miel
a los pájaros
Y
como era de selva,
quería hacer su nido en un árbol,
un árbol donde pudiese acurrucar
todos sus truenos.
Y mar i sol tan sin poder
encontrar su conejo inesperado,
la hora frugal cuando él llegara

a dejar impresas sus pinceladas
dormida en sus raíces,

quería encontrar su buen espejo
y fundirse como Alicia en maravillas
con la tibia savia
que le fluía del ombligo.
Y al decir la palabra SESAMO:

un algo de color la absorbe
y la revuelve
y la hunde en un laberinto
donde él ya jamás
podrá encontrarla
y mientras él entona
algo de Sabina, ella desciende
por la corteza de aquel amigo
que la acoge
para borrarle miedos y protegerla
de una polvareda de voces
aleteando en sus
espaldas...
Si,
tus rayos
DIEGO VELASCO
17
ANDRADE /
cayeran sobre mi copa

y si tú bucearas en mí cuerpo,
el sol quedaría impreso en nuestras
pisadas y si descorrieras
con tu última mirada el miedo humano
de morir mañana, y mi silencio no sería
más que el asombro
por tu tiempo:
selvícola
musa fugitiva...
Y
si el ufo de pléyades
que planeaba piruetas en el aire (1),
nos descubriera el sentimiento
de volvernos uno
- mi adorable prisionera -
de este mi pie inmóvil,

de alguno de mis brazos,
de cualquiera de mis ramas,
saltaría el conejo apurado que nos trajera
los relojes de Urantia.
Y yo
con mis raíces desencadenadas

tejería el humus que beberíamos
juntos, juntos.
Y tú
con tus dedos de pintora
extraerías de mi vientre
a la reina de corazones
al sombrerero loco
a twilididí y a twilididón
Y ésa tu música tenue

me provocaría a crecer
desnudo y cotidiano
desafiando a la gravedad...
***
Mano y pie, quijada y pierna,

etérea sensación envuelta entre la pulpa
cuando ví que brotaba sangre
de aquel árbol, descubrí las huellas
aún frescas de su pezón impreso
sobre el tronco y uno de sus pies
congelado entre las ramas...
DIEGO VELASCO
19
ANDRADE /
Ahora sé que
llegaste un día
hasta su sombra, y el ser de madera
quiso vivir contigo su estremecimiento
Te quiso suya y te halló tierna

y tu cuerpo aún lloroso
se hundió dulcemente
en su corteza, para beber el agua
que el sol fabrica
entre las piedras
Y
un conejito de savia
se esfumó
de tu ombligo
de repente...
(1) ¿recuerdas ?...

TALLER
DIEGO VELASCO
23
ANDRADE /
... "Cada palabra, aunque esté cargada de

siglos,
inicia una página en blanco
y compromete el porvenir"
J. L. Borges
La primera vez que JL asistió al Taller, lucía

inquieto, temblaba como un mosquito a punto
de aterrizar en un pudín de fresas. Transpiraba,
dirigía sus ojos a todos los rincones, golpeaba
con un estilógrafo el cenicero en forma de
fauce, que lucía sus escombros en medio de la
mesa.
Trajo un poema que por entonces nos pareció

aterradoramente convencional y que fue
tijereteado con placer de antropófagos por el
clan. Conservo aún el original salpicado de
garabatos rojos azules y con huellas de colilla
en el ángulo inferior izquierdo...
Los versos más polémicos sonaban así:

... "A mí sólo me inquietan las sorpresas

sencillas.
Me asombra que una llave pueda abrir una
puerta.
Me asombra que mi mano sea una cosa cierta,
Me asombra que del griego la eleática saeta
Instantánea no alcance la inalcanzable meta,
Me asombra que la espada cruel pueda ser
hermosa,
Y que la rosa tenga el olor de la rosa".
A poco de escucharlo Norah exclamó con

antojo: ! es horrorosamente cursi!. Cómo
pueden inquietar las sorpresas sencillas; las
sorpresas son siempre fatales, deslumbrantes,
pirotécnicas. Recuerdo la sorpresa que me
propinaron a los quince años. Venía yo de
visitar el Centro de Estética Very Well luciendo
un corte de pelo Princesa Liz, cuando de
pronto mis amigos apagaron las luces e
inauguraron el festejo más sensual de mi
existencia.
Y que una llave pueda abrir una puerta, es un

castigo a la libertad poética, -asestó el España-
¿por qué mejor no asombrarse con una llave
que incendie, o que desaparezca la puerta?...
DIEGO VELASCO
25
ANDRADE /
A mí no me asombra que mi mano pueda ser

una cosa cierta; me asombra que mi mano
pueda ser un puñal, un ave a punto del
suicidio, un rito nocturno a los cuervos del
placer, agregó Pablinsky...
Yo por mi parte señalé que la imagen más

lograda era aquella de la espada cruel y
hermosa, aunque reparé en el último verso:
innecesario y común, además de rimar
jocosamente con "rosa".
JL, un tanto molesto en su sensibilidad y

visiblemente turbado argumentó que nunca
había expuesto sus trabajos en un Taller,
musitó algo así como: lo siento o ¿qué hora es?
y aseguró que examinaría cuidadosamente las
observaciones del grupo.
La segunda ocasión que leímos un texto de JL

fue en el cuarto de Fabianus, mientras por el
ambiente transcurría un potente aroma de
palomitas de maíz que Norah, el España,
Pablinsky y yo, habíamos engullido con
fricción.
Se trataba de un relato: recuerdo aún su
nombre: "La forma de la espada"; una historia
corta que desarrollaba la idea del "pesimista"

Schopenhauer: "Yo soy los otros, cualquier
hombre es todos" y en donde el personaje
principal, "un inglés angustiado y desabrido,
al que le cruzaba la cara una cicatriz
rencorosa", relata su traición en tercera
persona: como si el ofensor fuese el ofendido...
Su nombre era John Vicent Moon y la

persecución de la trama se desovillaba a través
de "negros corredores de pesadilla y de
hondas escaleras de vértigo", hasta que en la
penúltima línea, de la mano de JL, el inglés
descubre su ficción y se descubre:
“…¿Usted no me cree? -balbuceó- ¿No ve que

llevo escrita en la cara la marca de mi
infamia? Le he narrado la historia de este
modo para que usted la oyera hasta el fin. Yo
he denunciado al hombre que me amparó: Yo
soy Vincent Moon. Ahora desprécieme..."
El texto encendió calurosas críticas del clan:
Pablinsky propuso cortar la narración luego
de... "la marca de mi infamia", porque los
indicios a lo largo del relato eran harto
evidentes y porque el avisar el final constituía
DIEGO VELASCO
27
ANDRADE /
una feroz subestimación al lector.
Yo opiné que debería cortarse en... "para que

usted la oyera hasta el fin" antes de que
apareciese el pronombre en primera persona y
el lector viese resuelta su cómplice tarea.
El España, como de costumbre, lanzó una de

sus consabidas propuestas harto novedosas: Yo
he denunciado a mi denunciante: cualquier
delator es todos los traidores...
Lo cierto es que JL, sin dejar escuchar ni un

gemido, recogió su texto y salió bruscamente
de la pieza derribando torpemente los adornos
de barro que Fabianus tanto amaba....
Han pasado algunos meses desde el ingreso de

JL al Taller y es muy halagador hablarles de
sus progresos: su estilo literario es cada vez
menos personal y menos universal; hay en él
una nueva vitalidad irónica, transgresora e
iconoclasta. Diré también que Fabianus, el
España, Pablinsky, Norah y yo, notamos en su
ánimo una fervorosa actitud antipoética y un
afán surrealista, poco común en sus antiguos
textos.
Quiero, si me permiten, incitarles a la lectura

de uno de sus más recientes y precisos versos:
“...Alguna vez hubo una dicha. El hombre

Aceptaba el amor y la batalla
Con igual regocijo. La canalla
Sentimental no había usurpado el nombre
Del pueblo, En esa aurora, hoy ultrajada..."
JUDY
DIEGO VELASCO
31
ANDRADE /
Recorría una calle poblada por

perritos verdes y niños que jugaban a
ensartar un caramelo en sus bocas y
haces de diversos colores que el sol
disparaba en la acera como luminosas
insignias de juego. Se detenía a mirar
y a recoger una piedrita extraña,
incrustada de pequeños cristales fríos;
pero más allá hallaba otra con breves
rasguños trazados por la lluvia o
impresa de animalitos unicelulares y
las introducía en su carril con
delicadeza juguetona.
Regresaba de la escuela por la calle

que tantas tardes había recorrido con

su abuelo, ese viejo músico de una
banda de soldaditos azules y
sudorosos, que le enseñó a desplegarse
por el ruidoso mapa de la ciudad, hasta
el día que ya no pudo ir a recogerla de
la escuela...
Cada mancha en la pared o en el cielo,

eran alegres figuritas danzando ante
sus ojos y si encontraba un charco que
la lluvia de horas antes había
abandonado, se ponía a salpicarlo en
sus medias, en sus zapatos, o en su
hebillas doradas y a recoger muestras
de agua en sus piernas morenas y a
seguir avanzando lentamente hacia su
casa.
En una plaza, en donde se levantaba

una espiral de figuras esperando el bus,
la divisó: con una mariposa negra
sobre el pelo castaño que se le
desplomaba en los hombros y que
acariciaba su espalda aún adolescente.
DIEGO VELASCO
33
ANDRADE /
Tenía puesta una blusa roja y una falda

cortita apretándole los muslos.
Esperaba el bus, o a algún personaje
importante de su historia. Dirigía su
mano nerviosamente a la cartera para
sacar un espejito que luego guardaba.
La niña la seguía a unos tres metros de
distancia, imitando todos sus gestos,
sus coqueteos, como representando un
dulce rito de feminidad. Si ella se
llevaba la mano a la cintura, si ella
miraba al hombre que pasaba por la
acera, si ella caminaba tres pasos hacia
el norte o dos hacia el oeste, si ella
jugaba con sus cabellos enredándolos
en una trenza que después deshacía, la
niña ponía en escena esos mismos
actos con la precisión que cualquier
actriz de telenovela hubiese envidiado.
Quería ser como ella, caminar como

ella, llevar su misma falda, arrimarse a
los autos y dibujar corazones de polvo
en el capó, girar despreocupada cuando
un chico pasara insinuándole cosas al
oído y aunque le llevaba como diez años

de distancia, ella era su doble, o su
fantasma, o era simplemente, el futuro
reflejo de su corazón.
La joven y la niña miraban

nerviosamente el reloj de la iglesia
cuando él arribó. Parecía venir muy
agitado y llevaba un saco azul, un
bigotito de seriedad, blue jeans, y una
flor, que las dos aprobaron con un
suspiro... Se besaron, ella se ruborizó;
él la tomó de la mano y subieron las
gradas del pretil; la niña los seguía a
corta distancia, como fijándose en los
puntitos de los adoquines, o como que
a ratos miraba la pileta en donde unos
niños de cara sucia recogían agua en
viejos cubos de lata.
Caminaron como veinte metros y ella

se detuvo; el rozó con la mano su
mejilla y le insinuó algo al oído. Al
terminar la calle, en la otra acera había
un rótulo:
DIEGO VELASCO
35
ANDRADE /
RESIDENCIAL
MARA
Los dos ingresaron presurosamente al

zaguán y subieron las gradas como
sintiendo una mirada impresa en sus
espaldas. La niña se detuvo antes de
entrar y aguardó como 30 minutos
mientras las algodonosas barbas
blancas se replegaban en el cielo.
Después, pensó: seguramente me
estará besa que besa...
LA PRIMERA MUERTE DEL
VIEJO GAVO
al "Viejo Jairo"
DIEGO VELASCO
39
ANDRADE /
El Viejo Gavo encontró la historia de un

tipo de pelo rojizo y ojos melancólicos,
que se acabó un día a sí mismo, cansado
de pintar trigales azules y torbellinos de
agua y se fue a leerla con urgencia y
sobre la mesa colocó un florero repleto
de girasoles, como aquel que ese hombre
pintó hace un siglo y en el extremo del
florero puso una pequeña inscripción
que no decía Vicente, sino Gavo.
Ahí estará ahora, con la naturaleza

muerta de su cuerpo; recostado sobre la
cama, fumando una vieja pipa
encorvada; leyendo la historia de un
pintor rojizo y melancólico que se acabó

a sí mismo un día, como un torbellino de
agua.
Querido hermano Theo "lo que busco

aprender, no es a dibujar una mano, sino
un gesto, no una cabeza
matemáticamente exacta, sino la
expresión profunda. Por ejemplo, el
labrador que recibe el viento cuando
alza un momento la cabeza y habla. En
suma la vida".
Esta enfermedad del color, me ha

sorprendido cuando más solo me
hallaba; me he encerrado en el cuarto y
me he entregado con el alma a sentir lo
que la naturaleza, cuando se impregna
de nuestra presencia y lo hace con tal
intensidad, que no me resulta difícil
retratar flores violentas o mariposas
desoladas; y me he puesto a descubrir
vastas extensiones de un trigo siniestro,
bajo un cielo rojizo y he penetrado en un
estado tal de sensaciones que para mí la
DIEGO VELASCO
41
ANDRADE /
mínima flor tiene la belleza de una

geometría egipcia.
Viejo Gavo: se te ha ocurrido pensar que

tú no eres capaz de crear una brizna de
hierba, que no eres capaz de llorar como
un pino; te has puesto a soñar que no
puedes expresar todo lo que sientes; mas
sigues viviendo de la naturaleza y
alimentándote como una ave de rapiña y
no sabes por cuánto tiempo más. Tu
locura es hermosa cuando la sacas a
corretear por el cuarto como a una
liebre.
Viejo Gavo: el traje de esa paloma que

pasa vertiginosamente es una milésima
de color en la retina; pero tu ambición es
congelarla en el lienzo con tal
irradiación, que las palomas futuras
puedan divisarla aún a cien años de
distancia.
Viejo Gavo es un ángel feo, de pelo

hirsuto, de ojos apolillados por la

intemperie; de viejos blue jeans que han
absorbido mucho polvo; pero es un
ángel, un ángel al fin; un ángel burdo y
sensible, ¡tanto! que pudiera exagerar
con sus pinceles el rubio de la cabellera
de ese niño que pasa, hasta convertirlo
en jugo de limón, y si deseas, es capaz
de pintarte a una hermosa dama
salpicada de viruelas.
A veces tiene días sin inspiración, días

en los que se dedica a recorrer el tugurio,
a beber un poco de "aguardientico", a
visitar a aquellos apasionados que se
juegan la vida en una esquina
cualquiera, agitando sus argumentos
como un cuchillo, hasta que la resaca los
sorprenda en cualquier cielo, digno de
ángeles tan feos como Gavo.
“....Quisiera hacer el retrato de un

amigo artista que sueña grandes sueños,
que trabaja como el ruiseñor, porque su
DIEGO VELASCO
43
ANDRADE /
naturaleza es así"...
Quisiera una pintura verdadera hasta el
absurdo; dirán que ese es mi delirio,
pero lo siento con toda fe y cada día me
ejército a sentir con tal intensidad, que
puedo escuchar el estallido de una
mosca contra el foco de mi cuarto;
escucho ese sonido con detenimiento y
entonces recojo a la pobre y la huelo, la
palpo, la miro como a una burbuja
muerta que de pronto empieza a volar
por el cuarto dejando atrás sus alas y
esas patitas que deposito delicadamente
en mi oreja.
“.... la pintura, tal como hoy la

entendemos, promete volverse más sutil
-más música y menos escultura; -
promete en suma, el color" y mientras
mantenga su promesa, el viejo Gavo y
todos los seres que como él han sentido
la necesidad de crear soles verdes o
cielos amarillos, nos seguirán surtiendo
del bello placer de respirar...
"NIÑA ENTRE LOS ÁRBOLES"

"HILERA DE CHOPOS"
"NATURALEZA MUERTA
CON SOMBRERO DE PAJA"
"MASETA DE AJOS"
"MARTIN PESCADOR"
"JARDIN CON GIRASOLES"
En el jardín de Daubigny hay un gato

negro que avanza por el prado hasta
convertirse en parte de él y saltando de
página, hay un camino en Auvers con
dos niñas vestidas con plumas blancas; y
recorriendo dos láminas más, aparece el
doctor Gachet con sus amplios ojos
azules mirando a ninguna parte,
fluyendo en el jardín que cuida igual que
a su gato azul. Tú, quisieras como Vicent
pintar "un paisaje con cielo oscuro"
serían los tonos fuertes y azules las
vaquitas que pasten en sus orillas y
refulgentes los árboles que rasguen las
DIEGO VELASCO
45
ANDRADE /
nubes con una hoz.

O mejor, te imaginas pintando un paisaje
con cielo tempestuoso, con los chopos
del cielo ejercitando una música suave
hasta desplomarse en un río negro, o
quizás debas intentar un "campo de trigo
con un vuelo de cuervos". Ese capo
angustiado con una carretera girando y
unos pájaros negros que vuelan a
encenderse en un cielo añil; los trazos
serán vigorosos y te prometes que
terminarás la obra pasado mañana: 29 de
julio de 1888.
Dicen que vieron la otra tarde al viejo

Gavo agarrado a una biografía de Van
Gogh; siguiendo como un zombie sus
zapatos con dirección al "jardín de
Freud"; tal vez a retratar flores,
hormigas o cualquier cosa. Que
alucinado con la historia de aquel pintor,
iba, recorriendo minuciosamente cada
página, dibujando pequeñas señales al
margen, haciendo anotaciones difusas y
que a alguien le contó sus intenciones de

acabarse el día en que llegue a la página,
al párrafo, al renglón en que Van Gogh
se acabe.
En el verano de 1887, Gavo se puso el

sombrero de fieltro, miró hacia el espejo
y empezó a delinear su áura, un áura que
giraba en pequeños segmentos
concéntricos y quiso reflejar su risa
agria, su futura oreja muerta, su fiel traje
gris y sus barbas, sobretodo sus necias
barbas color vino. No sería el
autorretrato con sombrero de paja, ni el
de aquél de enero de 1889 con la cabeza
vendada y el abrigo de grandes botones;
ni su pipa de humo naranja. Se sentó en
una silla destartalada y empezó a
reflejarse incesantemente en el lienzo....
Acabada la obra bautizó a uno de sus
amigos con el nombre de Theo, y
empezó a escribirle largas cartas con sus
reflexiones de creación:
DIEGO VELASCO
47
ANDRADE /
.... Theo: "quiero hacer retratos que

dentro de un siglo, a la gente futura,
puedan parecerle como apariciones"....
...el amor de dos seres que se

complementan, puede ser como un rojo
eléctrico que estalla de sus siluetas
engarzadas por la pasión y semejaría a
esos centelleos de la luna cuando está
anocheciendo...
...te has puesto a pensar Theo, ¿qué clase

de hombre podría retratarse junto a un
limonero?...
... me interesa por ahora pintar vastas

extensiones de un trigo solitario; bajo un
cielo de colores brillantes; lo pintaré esta
noche cuando todos los vecinos
duerman...
... he aquí lo que quiero decirte por

color: destellos de claridad en las
paredes de un corazón sin luz...
Nadie ha entrado al café en el que el

viejo Gavo entró la otra noche: un café
azul con paredes azules; cortinas azules;
piso y mesas azules; con hombres y
damas azules; con manteles y platos
azules; con sillas igualmente azules y
jarrones azules en los cuales apenas
alzaban los ojos, unos intensos girasoles.
Y en el café entró de pronto una bella
dama con la cara salpicada de viruelas;
con los senos flácidos por haber
amamantado a tantos bohemios; con el
vientre hinchado como la madre de un
canguro, pero bella, tan bella como un
trigal en el que el viejo Gavo y su dama
fueron a acurrucarse toda la noche hasta
que el sol amarilló de pronto sus
agotados cuerpos.
Mi querido hermano Theo, te describo

brevemente mi cuarto, tal acabo de
pintarlo:
... una vieja cama con colcha roja y
grandes almohadones amarillos; a su
DIEGO VELASCO
49
ANDRADE /
lado una silla con los restos de ceniza

aún humeantes; más acá, la mesa en la
que sueñan objetos diversos; de la pared
cuelgan una toalla, un espejo, una
ventana, que apenas si me da aire;
algunos apuntes y autorretratos a los que
me he entregado con el corazón. El piso
rojizo contrasta con los tonos azules y
verdes que rodean la habitación; un gris
transparente se equilibra en el lado
izquierdo de la cama; del perchero
cuelga mi vieja gorra con la que salgo a
pintar la naturaleza.
Querido Theo: te cuento que la otra tarde

ofrendé a mi amada una de mis orejas y
confieso mis actuales intenciones de ir
como Vincent hasta las últimas
consecuencias. Claro, yo no me
dispararé como él, una bala perdida en el
corazón; ni esperaré mi fin fumando la
pipa, ni mirando al cielo; yo me ataré a
una hebra del tumbado y me lanzaré al
vacío para que cuando lleguen mis
amigos me encuentren danzando en un

gélido vaivén. Entonces descenderán mi
cuerpo y lo colocarán en mi abrigo. Ahí
seguramente, podré otra vez sentir;
luego bajarán las escaleras y dirán a
todos que el viejo Gavo está bien; solo
un poco muerto, pero sin ninguna otra
señal particular....
***
Rugosa, estupefacta, tétrica, la cuerda

colgaba gélidamente del tumbado.
Serían cuarto para las doce y ella lo
miraba como queriendo disculparse de
su sentencia; ¿quién habría colgado
antes de sus agrias hebras de soledad?...
El viejo Gavo apresuró el taburete hacia

el lugar preciso y se encaramó en él con
un gusto de espuma en la boca; colocó
su cabeza en el aro y de pronto
ZAASSSS, la cuerda, el tumbado y el
viejo Gavo fueron a dar hacia el piso.
DIEGO VELASCO
51
ANDRADE /
Entonces, no supo si reír o llorar; desde

una iglesia cercana se escucharon 12
golpes brumosos.
Luego, bajó las escaleras

como un recién nacido
y empezó a caminar por las calles
de la ciudad,
observando,
presintiendo,
palpando,
oliendo, por primera vez,
a todos los seres y las cosas.

ELLA LEE "EL CUENTO
MÁS HERMOSO DEL MUNDO"
DIEGO VELASCO
55
ANDRADE /
"El cuento más hermoso del mundo"

Rudyard Kipling
( Hola
¿cómo estás ?...
desde el otro lado del océano,
algo viene a flotar bajo tu puerta
...)
Llueve
subes al cuento
y divisas por si algún puesto
vacío…
alguna vocal se levanta y te brinda
un asiento; es una flor que se ancla
en tu viaje desde lo alto del
Montserrat; más abajo se rezagan
con prisa las palomas que inhalan
cemento de contacto o bazuco en un
iluminado callejón; el libro al bolso

emerge como una geisha vestida en
zapatillas y besando el aire de la
décima,-en donde hoy bailarían
todos aquellos que están muertos-
,alguien atraviesa la avenida
silbando un viejo son. Jairinho, al
otro lado de la ciudad gris, te llama
como un muchacho tímido; como
un niño asustado en medio de la
guerra
¡paren ya tanta violencia!
Llueve
Bajo sus cabellos negros, sus ojos
tristes y lunares, ella lee el cuento
más hermoso del mundo, en la
banca de un bus bogotano que abre
sus cuchillos al aire de truenos de la
tarde, al triste frío de la ciudad
urbo-cemento.
Llueve,
y el cuento se deshace en las
palmeras humanas, en los haces de
luz artificial, en las flores verdes de
su falda hindú. Ella está tan lejos de
sus padres, de su hábitat, de las
notas lilas de el gato Stevens que
jugueteaban en su mesa; ella flota
DIEGO VELASCO
57
ANDRADE /
sola en una alfombra de palabras y

viaja con los pies en buda y luego
fuma y luego escucha un rock que
la abraza
(y tú estás durmiendo o cantando
allá tan lejos,esperando por su carta
intermitente,
llorando por un algo que se
escurre...)
¿Tomamos una cerveza?
(lástima que no hoy no podamos
tomar juntos una cerveza :es que
estamos tan al otro lado del
océano...)
Llueve
Ella lee un cuento que no tiene
trama, ni desenlace, que se alborota
en el aire de lo inesperado, que vive
en el agua...
¿porqué lloras?...
Suben más pasajeros al cuento, los
vende tiburones y los vende peces
rosados en la ciudad de la muerte; te
cuento que Guns n' Roses ha venido
a Bogotá el mismo día cuando el
dictador y él creyó que las vivas y

flores eran para él,!qué chistoso no!
y ayer soñé que recibía al cartero y
fue en la mañana cuando tu carta
estaba en mi puerta...
¿Has leído alguna vez a Giani
Rodari?
el cuenta del azar, de la
imaginación...
...¿Has leído alguna vez su
"Gramática de la fantasía"? porque
ahora asisto a un taller de
animación a la lectura y acabo de
leer en un bus El cuento más
hermoso del mundo en la Antología
Fantástica de Borges y Bioy...
Leguas después
sigue la lluvia, y ella
viaja apoyada sobre el ventanal
mirando al cielo, está mojada, tirita
y un "te acuerdas de mí", detona el
recuerdo en sus oídos y esa música
la conduce a flotar en nubes de
palabras, mientras la lluvia que
incesa y cae la transmuta en una
lagartija tierna navegando en la
alfombra de los leves sonidos del
DIEGO VELASCO
59
ANDRADE /
70. La música de Carol King irradia

un "you've got a friend" y aquel "no
woman no cry" la descubren en la
oscuridad de su cuarto bailando
frente al espejo. Llueve, y ella se
deja elevar por los sonidos de una
tribu de matapiojos ya dispersa y
delfines verdes le llueven en la
frente, pero ella en su arca urbana
repleta de caracoles y crustáceos
lerdos, solo quisiera leer el cuento
más hermoso del mundo.
La "ciudad imaginada" se desliza

delicadamente entre olas, letras y
dedos que se esfuman en un agua de
medusas; "Guittar man" de Bread y
"We are the champion" de Fredy
Mercury, van allá también al agua,
igual que las burbujas de Queen,
cuando la transportaban enamorada
desde la casa al colegio...
(Oye amigo:
¿todavía siguen cayendo las hojas
de otoño sobre lo que amas?...)
Llueve, y ella está tan mojada aquí
en el bus navegando en el arco iris
del atardecer y danzando espirales
con su cuento ya húmedo y piensa

cuándo podrá regresar a su país del
equinoccio y de su pie mojado en la
lluvia crecen lentamente verdes
nautilus y el sol, el sol de Super
Tramp es como un pez de calor
iluminándole el rostro; "in the rain,
in the rain, lady rain", mujer del
agua ...
Cada vez que la nave se detiene,

fricciones de espuma se mecen de
contravento a flotavento; un áurea
acuática se mece al compás del
buque de ruedas y sal congelada
una marea de cuerdas le danzan en
la mente y le reviene aquella
melodía marina que no ha
escuchado hace tanto...
Y sobre el agua salobre que pasa
debajo de sus remos, vibra la ciudad
de los gamines, tan gris y tan
sencillamente tierna y violenta y tan
roja como una Beirut o alguna
Croacia, como cualquier Palestina o
la Bagdad de las mil y una noches...
Esto que envío hasta tu puerta, no

tiene más sinsentido que la marea
DIEGO VELASCO
61
ANDRADE /
de muertos cotidianos que un día te

tocó vivir (gato de otoño que
cuentas tus maullidos desde otro
lado del océano) en tanto, yo solo
quisiera escribir espumas que te
haga cerrar los ojos y hundirte más
y más en el vértigo del agua...
Llueve
palomas verdes ascienden nadando
hasta las hondas escaleras de tu
nave; palomas contaminadas por el
humo que solo un inmenso río de
smog supo dejar impreso entre sus
branquias...
Y yo desde aquí, oigo tu voz como
un eco tierno, con la intensidad de
un piano incoherente tocando un
vals melancólico que suena sin que
nadie lo toque y escucho el fluir
húmedo de algas meciéndose en ése
mi mar construido de miles de
recuerdos.
Y tú, sigues soñando en mitad del

océano, leyendo y releyendo El
cuento más hermoso del mundo,
como presintiendo aquella burbuja
de luz, que desciende recién mojada

desde el cosmos, para venir
a bullirte en el ombligo.
LITERATON
DIEGO VELASCO
65
ANDRADE /
El poeta narciso del siglo XXI,

buscaba una otra razón aún más
necia para su inmortalidad; no era ya
el poeta dios que siempre pensó
encontrarse en las páginas sociales.
Cansado de crear un poema a su

imagen y semejanza, el poeta con
aires de astro-oso que siempre soñó
llegar a ser un ídolo sensual,
cansado del mesianismo ridículo
del poeta a fines del XX, -aquel que
nunca cesó de extrapolar-, miró que
sus exaltaciones poéticas se habían
infiltrado demasiado entre la
multitud y creyó poder tocar con
las manos el cielo de la gloria, aquel
cielo tantas veces repudiado por los
tontos "poetas de la socialización".

Entonces, Narciso creó su muy
famoso y conocido engendro meta
artístico: el poema SMOG.
SMOG era una máquina de
aleaciones infinitas salida de los
ojos del computador. Y esa era su
paradoja: el crear, porque escribía,
traducía y reflejaba los propios
sueños; y hasta podía leer, criticar,
tener miedo, y convulsionar...
Y,
fue así
como la era de la ciberpoesía
empezó:
DÍA PRIMERO
SMOG dijo que la poesía sea,
y la poesía comenzó a deglutir del
sol, su elemento vital
Y SMOG vio que esto era bueno y
se puso a contar las sílabas sonoras
con sus dedos
Y como no le bastaban los dedos,
inventó el detector ultrasensible
para poesía inusual...
DIEGO VELASCO
67
ANDRADE /
El poeta SMOG entonces, permitió

que sus textos lo arrullen; soñó con
la alquimia del lenguaje en lugar de
la química de la relatividad, o con
aquellos simulacros de gélida
pasión (¿qué otra cosa eran sino los
viejos libros de poesía?)
En lugar de inventar instrumentos
de crítica poética (que técnicamente
medían el nivel poético contenido
en las páginas de un libro) comenzó
a detonar milagros sobre una
pantalla digital, con aquella
compuerta de chips abierta en el
hueco del corazón...
Una vez hecho aquello: todo se

revolvió en poesía.
DÍA SEGUNDO
SMOG dijo que el algoritmo
"poema" SEA y el poema o mejor
dicho la formulación poética
t r a n s p a r e n t e ,
SUPERTRANSPOETICA 3, FUE...
Esta permitía escribir un poema en
forma de impresiones matemáticas
ultrasensibles. Así, el poema

fortramp 3, aparece como una serie
de macro instrucciones que pueden
o no tener referencias matemáticas;
dichas expresiones poéticas estaban
compuestas por variables que
podrían definirse mediante uno a
seis símbolos del alfabeto numérico
La forma de las variables estaba
dada por una expresión MODELO;
ejemplo:
POEMA MODELO F (l8, 02)
designaba una composición de 24
caracteres que contenían 5 palabras
y un número, de las cuales el
adjetivo, se encontraba a la derecha
de una coma, ejemplo:
AYER TUVE 1 ALMA,
IMPERMEABLE
Algunas composiciones tenían
dimensiones tales que se podían
presentar bajo la forma de un grupo
de letras. Ejemplo DIMENSION P
S a la W, definía un poema de 65
sílabas:
AYER TUVE UN ALMA
IMPERMEABLE
DIEGO VELASCO
69
ANDRADE /
PARECÍA UN BIT STANDARD

CON CONCIENCIA ALFA
QUE BIFURCABA
INSTRUCIONES
A TRAVÉS DE TECLAS
SE LLAMABA SPECTRUM
ROOM 935
EL VALOR DE LA VARIABLE
VIVIR
NO MODELO OMEGA:
TABLA ORDENADORA DE MI
AZAR
DETECTORA DE BUCLES DE
VIRUS
EN LA PANTALLA
EN POSICIÓN
EXCELS
AT LL,11-14 ¡AUUG!
LEA ESTE POEMA
HASTA LA LINEA 3
SI LE GUSTA, VAYA AL BUCLE
4,
SINO
REGRESE AL PRIMER VERSO
ENTONCES
AVANCE POR EL SIGUIENTE
TEMA MODELO
F (11, 67 :
AYER TUVE 1 ALMA
IMAGINABLE
PARECIA UN PRINT
ALMACENANDO DRAWS O
UNA LEY CODEC = 24;
REPRODUCIBLE POR VARIOS
ARTIFICIOS
MAGNETO POÉTICOS
S I M U L A C I Ó N
TRIDIMENSIONAL
DE SOFTWARE / SONIDO QUE
SE ESCUCHA EN
REPRODUCCIÓN DE ALTA
FRECUENCIA:
ESTE ES UN POEMA SMOG...
DÍA TERCERO
SMOG leyó su obra y miró que
aquellos algoritmos creados por su
computador eran demasiado bobos
y entonces prefirió:
QUE LA POESÍA SEA
Y ELLA POR
SUPUESTO
NO FUE...
DÍA CUARTO
DIEGO VELASCO
71
ANDRADE /
TURING descubrió que su

computadora podía ser cargada con
millones de palabras; y que sujeta a
manipulaciones, instrucciones,
datos, pretextos o potentes sílabas
como imanes, podía hacer estallar
en la pantalla variedad de
composiciones poéticas que podían
ser verbalizadas; así por ejemplo:
PIRANDELLO MI AMOR DE
PIEDRA
TE PREGUNTO
¿ESTAS CANSADO DE AMAR?
IMÁGENES POSIBLES:
Líneas muy próximas de color
lápizlazuli cuya longitud sea más
alta, cuando la frecuencia del
sonido AMAR llegue a su clímax…
TEXTO
PRUEBA TU SER CON OTROS
DIGITALES
IMAGEN
pantalla lenta de trazos amarillos
incongruentes, remarcados por una
borrosa huella de líneas
entrecortadas y azules, generando
una digital aura estocástica

TEXTO
suena tus algas ronroneando
relativamente alto…
IMAGEN
cantidad de círculos, elipses, óvalos
y lazos magentas, que aspiran a un
cierto valor umbral, sin disminuir
sus rasgos naturales
TEXTO
¿quieres otra vez volver a ser
POETA?...
IMAGEN
cadena de líneas marrones,
cuidadosamente entrelazadas, sobre
una hilacha grisácea con tintes
color naranja
TEXTO
no necesito ya de ti,
URANIA FENIX
IMAGEN
una serie de palabras muertas y
DIEGO VELASCO
73
ANDRADE /
números sin código definido,

girando en una especie de alma
magnética de color celeste, con
apenas unos cuantos puntitos del
color del ámbar, que se disuelven a
medida que el programa se apaga
DÍA CUARTO
SMOG DIJO A LA
POEMA- COMPUTADORA:
VED OLED CRECED
BAILAD
y sobre un plano inclinado de
palabras fue desovado un brutal
ANIMALACRE...
Y ÉSTE VIO OYÓ Y COMENZÓ
A OLER; su memoria se organizó y
pudo dar varios poemas a luz
TEXTO
cada pulsación de mi biorritmo
escrito automáticamente
SOS, señal cambiante a mi pobre
corazón; es normal a los comandos
dirigidos por el teclado triste del
usuario y el explorador de sonidos
de amor hace explosión cuando
llega Búho y dice

EL POETA HA MUERTO
SONIDO
miles de botones chillando en una
cortina de notas de lluvia con
granizo recorriendo el plano
inclinado desde un tejado que van a
llenar un recipiente donde cada
golpeteo provoca la expansión de
burbujas en una colisión de ayes y
de heladas cadenas
alfanuméricas....
IMAGEN
un pequeño ciempiés formado de
rombos azules que semeja un cálido
encuentro en la pantalla,
aproximadamente en las
coordenadas (11, 10) y se disuelve
con la rapidez de un rayo
incandescente
OLOR
sustancias orgánicas que alguna vez
tuvieron consistencia, y de repente
se consumen en una atmósfera de
carbón; metatonos con fuerte
DIEGO VELASCO
75
ANDRADE /
complejidad a azufre rancio; a

hollín mental; a una gama inmensa
de otras sustancias de color.
DÍA QUINTO
SMOG, dijo: QUE EL POETA
AUTOMÁTICO SEA
Y ASÍ FUE...
El quinto día se ha iniciado sin

apenas haber concluido el cuarto;
Gusnar considera que la
poecomputadora no es más que un
autómata tonto, que no sabe ni
podrá jamás escribir LOS MÁS
TRISTES POEMAS ESTA
NOCHE; que para poetizar, tiene
necesidad de métodos algorítmicos
y Gusnar ya sabe que Markov ha
demostrado que para INTI existen
"claves de poemas, que no son
creíbles, sino algorítmicamente", de
modo tal que decide pensar en el
"poeta automático", semejante al
mismo autor, pero que no sabe
todavía cómo poner a funcionar su
cerebro en el momento de crear o de
imaginar
¿qué tipo de poema satisface tus

más elementales deseos? -dice el
computador- y es entonces cuando
se abre una puerta
dimensional en donde
nuestro inefable astropoeta
se revuelca en pura
poesía numerica.
DÍA SEXTO:
SMOG DIJO QUE EL
ALGORITMO POEMA SEA Y EL
POEMA:
FPT: Formulación Poética
Transpuesta
O SUPERTRANSPOETIC 3, emite
un texto en forma de expresiones
matemáticas ultrasensibles.
El poema en mención, aparece
como una serie de macro-
instrucciones que pueden o no tener
referencias reales; aquellas
expresiones poéticas están
compuestas por variables que
pueden definirse mediante 1 a 6
sílabas alfanuméricas.
Pero, Inty sabe que Turing, sabe que
DIEGO VELASCO
77
ANDRADE /
Narciso, sabe que Markov, que

Gusnar, no saben hacer más que
tonto/poemas y decide crear el
CENTRO ALMACENADOR DE
LA MAGIA POÉTICA DE
CIUDAD OMBLIGO, ONG
encargada del estudio sistemático
de los reflejos de la imagen del
poema en sus lectores…
Quiere inventar una máquina que se
diferencie de la poecomputadora
para que "puede equivocarse",
porque vendría dotada de intuición
y de una personalidad poética ya
definida; de un microprocesador de
imaginación volátil que no se
modifique en la transmisión por
medio de disketes, sino que cuente
con una experiencia suya, propia,
irrepetible, y por tanto cumpla con
los siguientes objetivos:
1. que establezca relaciones entre
pseudo-metáforas y
morfopoemas
2. que acumule al mil por ciento un
número infinito de experiencias
de escritura
3. que defina en 33 micro segundos,
la complejidad de un poema
imposible
4. que delimite simultáneamente la
tasa de ripios, cacofonías,
carencias de ritmo, prosodia, y
ortografía elementales
DÍA SÉPTIMO
Y así BAKU 3, en las postrimerías
del siglo 21, refutando a Gusnar,
Narciso, Turing, Markov e Inti, dice
con un ay de parto premonitorio:
hágase el
L I T E R A T O
N:
y este se hace de pequeñísimas
partículas de biolaser, más una
cierta dosis de polvo estelar y tres
gotitas de un líquido raro, extraído
de los más recónditos intersticios
del corazón de varias
personalidades literarias del medio,
especialistas en el canto cósmico, la
música biológica, el diseño de
animalacres, el conocimiento del
sol, el estudio de saltos de agua
marina, el desciframiento de
DIEGO VELASCO
79
ANDRADE /
jeroglíficos egipcios, la
competición de cojinetes atómicos,
las matemáticas del alba, la
superoceanografía, el
procesamiento de la raza germana,
el dominio de la libertad individual,
la filosofía aerobiótica...
Y
en cuestión de 352 micro-segundos,
pudo reposar al 7° día, o por lo
menos, crear un pequeñísimo
insecto más bien inútil, cuyas patas
se sacudían desesperadamente por
entre la agreste niebla de su
universo mental y llamarlo:
i ene ese pe i ere a ce i o
ene
¿cómo?...
I N S P I R A C I Ó
N.
LA BITÁCORA
DE EBE
a EBE, navegante estelar

DIEGO VELASCO
83
ANDRADE /
Arribamos poco antes del

nacimiento del satélite marrón;
usamos la técnica de mimetismo
por cuestiones de sigilo; algunos de
los nuestros debieron transmutarse
en lerdos terrícolas para la misión.
Observamos desde la escotilla al
antiguo planeta azul:hoy convertido
en un paisaje desolador y desértico
...
Muchos herbívoros aún viven en él,

mas el precio que supone nutrir la
materia que constituye su alimento,
resulta imperdonable comparado a
la aridez de otras tierras que no
pueden saciar el hambre de
millones.
Desde la nave vemos asombrados,

una multitud de seres deambulando
en calles repletas de celulosa,
polietileno, toscos metales; algunos
maldicen o murmuran de precios y
valores; otros con el cuello y el
ombligo anudados, discuten ante
papeles con números, sin nunca
despegar de sus oídos pequeñas
máquinas de intercomunicación.
Otros arriban diciendo sonidos
intangibles y armados de cilindros
de fuego, parecen llegar a negociar
con la gente, la luz del gran astro
luminoso que les permite vivir.
Bien entendemos que hemos
llegado a un planeta de seres
difusos, desconfiados, belicistas;
que ignoran o pretender ignorar lo
inminente...
****
Viajábamos sobre un valle,
divirtiendo con nuestras piruetas a
aquellos seres que nos miraban con
asombro y que nosotros
observabamos cada vez minúsculos
hasta verlos desaparecer; de pronto,
un sonido agudo anunció peligros:
DIEGO VELASCO
85
ANDRADE /
la Ciudad del Poder estaba cerca...

Debíamos insertar el código de
sonidos que nuestros ancianos
llaman LPCE "lenguaje primitivo
de civilizaciones en extinción":
conjunto de frases cuidadosamente
articuladas para acordar sus
sentidos con los nuestros.
Ya en medio de sus ruidosas calles,
mientras con sus cuerpos
representábamos nuestra comedia,
muchos terrícolas se agitaban en
derredor, ya contando esferas o
engullendo fibras sintéticas, ya
agitando cuerpos y brazos o
aguardando la llegada de naves de
humo piloteadas por seres que
intermitentemente miraban hacia el
cielo y el suelo...
***
Para mirar, los humanos se sirven
de dos pequeñas esferas protegidas
por membranas táctiles; se
esfuerzan por reproducir su
humanidad en fríos cubículos
hechos de minerales y láminas
grises; cercan siempre el territorio
en donde con sus próximos
conviven... Acostumbran a viajar en
objetos de trayectoria lineal,

provistos de luces fulgurantes, tan
hirientes como su mirada.
Un sucio gas ronda en su torno e
iridiscentes hilos de neón guían sus
naves...
***
...Aquí el nacer o el morir, todavía
son actos que los alegran o aquejan
definitivamente, y no nos es posible
tomar conciencia de lo que en
realidad les sucede cuando
desencarnan...Baste saber que esos
eventos no constituyen más que la
transición hacia otras formas de
energía, que los terrícolas aún no
comprenden.
***
...Hace dos mil años, alguien de
nuestra constelación: Zeta Reticuli,
arribó para hacer posible el salto de
la era de los seres carnívoros,
habitantes de las cuevas y fortalezas
de piedra a aquella de los peces y
del agua mansa, del amor y de la
solidaridad.
DIEGO VELASCO
87
ANDRADE /
Encarnado en una bella joven

terrestre, sus ojos alargados y
acuáticos, su boca casi
imperceptible, sus manos de seis
falanges, sus pequeños lóbulos
auditivos, su nariz convexa, fueron
maquillados fingiendo apariencia
humana, por mandato del Gran
Arquitecto de Urantia...
Nuestra nave era un ovoide de unos
doce cuerpos de giro; había sido
energizada de bioplasma para
cumplir tan singular misión.
Mientras esperábamos
instrucciones de nuestro centro a
30.000 halos luz, perdimos control
por causa de un proyectil terrestre.
Nuestra nave se estrelló con
violencia contra las dunas; fue un
golpe seco; una volatería de chispas
y de gases, de rojos multitonales
que nos alertaron de su traición...
(Un vehículo de barras y estrellas se
acerca primero; luego, dos naves
con aspas iluminan el lugar; a mi
lado yacen los cuerpos de Diol y de
Rama; nuestra estación orbital
debió advertir el fatal impacto)...
En mi cautiverio los miro mientras

me examinan con un aire de
curiosidad; aún llevo en mi cuerpo
el aliento fiero del hombre pelirrojo
que preparó ayer la visita del Gran
Manipulador...
Observándome con desprecio, un
inacostumbrado terror se entretejió
en mí; sus hirientes palabras me
trasmitieron imágenes de su mundo
desolador...
... La tri-dimensión en la que viven

resulta tan limitada para
comprender al universo; es tan
corta su visión; su olfato tan
cercano; sus dedos no han
aprendido a intuir el gemido de las
piedras...Aldeas humeantes
germinan accionadas por su odio
furioso y por sus letales ánimos de
destrucción...
Y yo sigo aquí, agonizando tan lejos
de la matriz de mi constelación...
***
!Escuchen! quiero hablarles de
DIEGO VELASCO
89
ANDRADE /
nuestra misión:
aunque distantes en el universo,
estamos tejidos a su mismo centro;
¡queremos decirles que la Tierra
debe proteger los biomas que aún
restan!; queremos mostrarles la
energía que acciona nuestras naves y
que debería ser usada solo para
compartirla en paz. Sus guerras
periódicas, su hongo radioactivo, su
fuego arrasa bosques, no deberían
volver jamás...
***
Los camiones llegan y levantan los
restos de la nave; el cuerpo especial
para recuperaciones se cierra en
perfecto compás. En el aire, las
naves sobrevuelan el área con
precaución; un pelotón recibe la
orden de borrar toda huella extraña
en el desierto y más allá un jeep con
banderola rojo azul y estrellas
blancas transporta dos entidades
grises, en secreta dirección...
Ya en el Laboratorio del Gran
Manipulador, el cuerpo de EBE,
diseccionado por los responsables
de la secreta misión,se va
difuminando, absorbiendo
transmutando lentamente
en luminosas chispas
de helio e hidrógeno
miientras
un humus cósmico,
va agregándose
lentamente
en abono vital
al agreste territorio
del ayer Planeta Azul.
LUCES CONVERGENTES
DIEGO VELASCO
93
ANDRADE /
"He aquí que la noche

Se aproxima...
Y aquel que fue el Héroe de la fiesta
se halla ahora inerte,
tendido en el suelo, muerto.
Es el anciano de los Días
que guarda la tierra en sus entrañas"
LIBRO DE LOS MUERTOS

Canto LXXXIV
Caminábamos con Hernán en busca

de libros, recorriendo esa calle
arremolinada de turistas y niños
vende flores apostados en las
cafeterías. Bordeábamos la esquina,
desgajando lentamente una
naranja. Eran las doce: una nave
celeste surcaba las nubes con
dirección al norte. Preguntamos por
la calle León Mera en donde se
anunciaba un baratillo en la librería
Orbi Mundi.
Subimos al segundo piso; al fondo
se hallaban una cantidad de colores
ordenados en viejos anaqueles; eran
libros usados, y otros de aquellos

que los libreros llaman "huesos".
Títulos ya gastados o fuera de
actualidad. Tensiones y mutaciones
sociales; Jesús en las tinieblas;
¿Qué pasó en mayo del 68?...
En el tercer estante sobresalía un
lomo amarillo con letras negras: "El
libro de la salida a la luz del día,
Libro de los muertos", lo tomé con
curiosidad mientras la dependiente
me miraba con enigmáticos ojos
egipcios...
"Aquí comienzan los himnos que

relatan
la salida del alma hacia la luz del
día
su resurrección en el espíritu, su
entrada y sus viajes en el más
allá..."
Costaba 15 mil, de modo que lo
coloqué debajo del saco sin más
trámite y tomé otros dos libros sin
importancia, para disimular:
Ecología y crisis sexual y La teoría
de los desencantados. No avisé a
Hernán de mi descubrimiento,
bajamos a la caja, intercambiamos
DIEGO VELASCO
95
ANDRADE /
unas cuantas palabras con Diego

Castredo y pagamos; pero cuando
salía, sentí que el libro iniciaba sus
misteriosos poderes en mi chaqueta.
***
He leído el libro toda la semana y
me han causado vértigo sus
revelaciones; me ha sido difícil
concentrarme en su lenguaje
hermético, lleno de signos y
símbolos divinos; Iris por ejemplo,
es la diosa lunar, esposa y hermana
de Osiris, el sol oculto que prende
misterios; Horus es hijo de Osiris y
luchó contra Seth, asesino de su
padre, hasta vencerlo. Hotep es la
diosa a la que se clasifica como uno
de los espectros femeninos del sol;
Ambis es otra definición de Sepa; el
Duat es el equivalente al Hades de
los griegos o al plano astral de los
teósofos; Seth era el doble negativo
de Osiris como Arimán era de
Ormuzd, como la serpiente pitón el
par dialéctico del Apolo de
Delphos.
Le he comentado a Urania que el
libro que encontré me ha causado
complicaciones en el trabajo, me
siento extraño y acuden a mí las
imágenes de jóvenes egipcias, con
sus manos delicadamente en punta,
con sus túnicas semitransparentes,
con la serpiente diadema en el
rostro y los ojos largos azulados,
que avanzan entonando el himno
hacia el templo en donde serán
sacrificadas.
Imagino el agua del Nilo recorrer
zigzagueando los verdes campos
que se mecen con el viento y las
esferas celestes surcando
vertiginosas, dibujando sus estelas
de humo tras la gran pirámide.
El libro de los muertos, es la
"Biblia del Antiguo Egipto", su
autor fue Thot, conocido por los
griegos como Hermes Trismegisto:
el tres veces grande, él que arribó a
estas tierras desde el Atlante. La
inmensidad de ese legendario
territorio fue la tierra prometida
para aquella raza de hombres sabios
de la isla de Poseidonis que
alertados por las estrellas del
próximo hundimiento, atravesaron
las aguas de África Central, aún
inhóspita, y guiados por misteriosas
DIEGO VELASCO
97
ANDRADE /
señales arribaron a la tierra de

Nubia, habitada por fieras y por
hombres como fieras; allí
florecieron sus antiguos
conocimientos astrológicos, sus
dadivosas leyes y sus dioses.
Thot fue el místico maestro del

ciclo táurico, cima de esplendor
para la descendencia atlante en las
orillas del Nilo, 5000 años antes de
la era; en la cuarta dinastía de los
grandes faraones. Thot nació de
Osiris y de Maya, la mágica niña de
Atlas. Los referentes griegos
señalan que arribó desde una cueva
conocida como La Atlantiáda.
Hasta el momento, mi estadía en
estas tierras ha sido provechosa. He
trabado buena amistad con
Blavatsky; ella se encuentra aquí,
para demostrar sus teorías sobre el
origen atlante de la civilización
egipcia; su ayuda ha sido de
invalorable utilidad para mis
indagaciones. Antes de ayer, fuimos
a visitar la misteriosa esfinge que
según él, construyeron los
emigrados atlantes en el fondo del
océano y que luego de la catástrofe
afloró al delta como un signo de

perennidad.
***
Urania, te escribo estas pocas líneas
esperando que arriben a más tardar
antes de la primavera; el barco
zarpará de Alejandría a la
madrugada, pero antes deberá
atravesar a lomo de mula
kilómetros de desierto; en todo caso
puedes estar segura de que estoy
bien y tener fe en nuestro
reencuentro.
Blavastky me ha descubierto el
magnético monumento de los
iniciados: la inerte y colosal Keops.
En ella dejó Thot su gran sabiduría,
heredera de las leyes cósmicas.
Encerrada en ella están los números
y la geometría, la música y la poesía
de los himnos del Libro de la salida
de los muertos, a la luz del día...
"Soy Kepra, el dios del devenir
eterno
que, oculta en el seno de Nut, su
madre celeste, esculpe y modela su
propia forma..."
DIEGO VELASCO
99
ANDRADE /
"Soy aquel que hace surgir a los

dioses del abismo y que, una vez
completado su círculo se ve
descender hacia la nada".
Himno XXXIII
(Encantamiento para rechazar a los
espíritus de cabeza de cocodrilo)
"La Diosa Serket habita en mi
pecho
Soy la diosa de los ojos de
esmeralda!
Las cosas creadas se hallan al
alcance de mis brazos
En cuanto a los mundos futuros
y a las posibilidades que germinan
se hallan encerradas aquí en mi
pecho..."
Durante días, el viento del valle no

ha dejado de recordarme la
misteriosa música de los himnos; he
imaginado como estos cantos eran
recitados: de forma mágica,
intermitente y vibrante, en medio
del respetuoso silencio de los
iniciados. El músico sacro
interpretaba el sistro y el arpa de las
siete cuerdas que concordaban con
el canto de las siete vocales y de los
10
/ TIERNA FICCIÓN
0
siete planetas, purificando el

ambiente y provocando en el alma
de quienes escuchábamos
luminosas "vibraciones de silencio"
que reverberaban en nuestro cuerpo
astral y convocaban al éxtasis y a la
llegada de los espíritus protectores.
Era el vehículo de ingreso de los
muertos a la luz del día para que no
vivieran su segunda muerte...
Las primeras referencias de esa
música las encontré en las
melodiosas VIDAS PARALELAS de
Plutarco; ella ha quedado grabada
eternamente entre los intersticios de
estas altas cámaras de granito;
interpretada por las manos de
mujeres de ojos almendrados y
mirada profunda; con esa aureola
azul que hacía más larga su
perspectiva y su mirada de la misma
naturalidad del pez que descorre
lentamente las aguas del celeste
delta.
"Soy Thot, Señor de los dos
Cuernos de la Luna.
Mi escritura es perfecta y mis
manos son puras.
Soy el pincel que utiliza el Dios del
Universo".
DIEGO VELASCO 10
ANDRADE / 1
Traducir estas encantadas líneas es

tarea ardua y llena de magia,
imagino a los escribas que las
fueron pincelando en el papiro.
Eran hombres especializados en
cifrar designios ocultos y
jeroglíficos sagrados y sus
delicados juegos de tinta se
extendían a través de metros
fragmentados y ocultos en vastas
cámaras iluminadas tan solo por
luciérnagas; labrados en columnas
polícromas, como las que acababa
de descifrarnos Champoleón en la
pirámide de Sakkara de la cuarta
dinastía. Considero que solo la
antigüedad del capítulo LXIV se
remonta a los 2.700 años antes de la
era y que los papiros Nu y Nebseni,
superan esa fecha.
Estos versos fueron escritos durante
el reinado de Menkara en la ciudad
de Khemenú, 2.700 años antes del
cristo y colocados a los pies de una
estatua de Thot:
"Soy el Hoy
Soy el Ayer
Soy el mañana
10
/ TIERNA FICCIÓN
2
A través de mis numerosos

nacimientos
permanezco joven y vigoroso
Soy el alma divina y misteriosa,
que creó en otro tiempo, a los
dioses,
y cuya oculta esencia nutre
a las divinidades del Duat, del
Aventi y del cielo.
Soy el Timón del Oriente
Señor del doble semblante divino"
...Vigorosa es mi alma
paso, forjando las puertas del más
allá
La luz que raya mi corazón
penetra, a través de mi en las más
distantes Regiones del Cielo,
porque mi nombre es
AQUEL QUE CONOCE LOS
ABISMOS"...
¡Oh Dios¡ tú que sabes del ayer y
del ahora, ésta es tu poderosa
palabra, el enigma que emerge
ahora del océano para señalar el
sitio del continente perdido. Las
naves celestes que anuncian tu
llegada, me señalan que tus hijos
habrán de emigrar hacia el delta de
unas aguas que riegan hostiles
praderas con animales y hombres
feroces, que no conocerán tu
DIEGO VELASCO 10
ANDRADE / 3
imperecedera luz.
Señor Horus en tu nombre
avanzamos y combatimos a los
espíritus extraviados por demonios
y descorremos la región de los
muertos. Las heladas aguas bajan
del cielo arrasando los campos, los
templos y senderos que labraron tus
hijos.
Haré tu voluntad ahora, otras tierras
y otros seres no conocerán de tu
iluminado verbo; las naves de otros
cielos aguardan surcar tus brillantes
jerarquías; que los años de mi vida
se junten a otros años y a la de otros
sacerdotes que como yo veneren tus
palabras. ¡Oh señor¡ que tu espíritu
jamás desaparezca del corazón de
los hombres y que tu luz atemorice
a los demonios de cabeza de
cocodrilo.
La gran catástrofe se aproxima, he
procurado que se cumplan tus
designios, que me sea permitido
ingresar a las regiones de la luz del
día, que no conozca mi segunda
muerte y que nadie pueda
reprocharme ni vicio, ni falta de
voluntad.
10
/ TIERNA FICCIÓN
4
Se que tú eres el signo de poder, la

guía luminosa que me acompañará
a otros mundos. Los últimos hijos
han abandonado las ciudades,
aquellas mujeres y esos hombres
jóvenes, que engendrarán otros
atlantes.
Yo solo soy el anciano de los días;
miro aparecer ante mí el ojo del
divino; su todo poder que
permanece; tú, solo tú, conoces el
Orden del Universo....
Oh espíritu maligno, nunca
la ambición de poder se enquistó en
mí.
Oh tú señor de las nebulosas
regiones
nunca el afán de acumular me
conmovió
Oh tú detestable ser del abismo
nunca mi fe en la amorosa luz del
divino
me abandonó...
Apártate de mí
demonio de faz de cocodrilo
que conozco los cánticos
que me permitirán acceder
a la luz del día...
DIEGO VELASCO 10
ANDRADE / 5
Oh Dios
del devenir
y las innumerables generaciones
aquél al que adorarán los hombres
con distinta faz y distintos nombres
sé que mi final se acerca
Que el eco de tu misión
resuene por siempre
en la profundidad de las aguas.
MOISÉS EN GAMÍNIDES
A Félix y Pilar, en "Gamínides"

DIEGO VELASCO 10
ANDRADE / 9
Colocó nuevamente el seguro en su

objeto de muerte y se esfumó el
ritmo de la urgente multitud. Nadie
reparó en el hilillo rojizo que iba
difuminando en el asfalto, el paso
monótono del Tragaluces.
Sus higiénicas tareas, habían sido
varias veces ensalzadas ante la
opinión social, por la autoritaria
ORDEN DE LA GRAN ESTATUA
para quienes trabajaba y, la
precisión matemática en el ejercicio
de su ocupación, lo había
transformado en un individuo de
temperatura inferior, ausente y
perturbado.
Nadie conocía a ciencia cierta su
11
/ TIERNA FICCIÓN
0
ex-oficio; alguien aseguró haberlo

visto en las profundidades de un
frigorífico, pero él siempre negó tan
gélidos antecedentes.
Mientras doblaba la plaza bajo un
sol geométrico, su respiración se
volvía absurda y apresurada.
Recordaba aún su venida a
GAMÍNIDES y sus apuros como
desarrugador, baulero, ganzúa y
transformista. Luego supo del lugar
en donde un sujeto de rostro rajado
descubriría, su violenta vocación de
frío.
Sobre la avenida, el vértice de calor
enceguecía su mirada en los
ventanales de aluminio y el
Tragaluces friccionando su hosca
barbilla, aceleraba el paso hacia su
próxima ejecución. Le sudaban las
manos y la forzada repugnancia
hacia sus víctimas, recorría su
espinazo como una gélida
sensación...
Divisó en el callejón el objeto que
sería su blanco: el plumaje intenso,
los ojos amapola que denotaban el
avance del mal. Imaginó los
bruscos movimientos que haría la
DIEGO VELASCO 11
ANDRADE / 1
víctima para evitar el ángulo de la

muerte. Imaginó la travesía de la
explosión en el cuerpo; la
contracción sardónica del rostro; el
rechinar tosco de sus alas, los
estertores finales y el hilillo de
sangre que un Tragaluces lleva a
viajar, siempre en su delirio...
***
Ahí está Moisés: vestido con su
escafandra de carne, los ojos de
amapola y el traje de papeles viejos.
Viene siendo agredido por los
gnomos públicos porque lo
encontraron asaltando junto a un
perro fosforescente, las
hamburguesas de la GRAN
ESTATUA.
¿Quién es Moisés?, ¿de dónde vino
a este denso planeta de barro? ¿Por
qué vive ahora en el corazón de la
violencia? ¿Y quién es Marlen y
quién el Vampiro, Tierno Mambrú,
la Llama y el Silencio? Sólo
espumas nocturnas entrelazadas por
un destello de locura; seres
embetunados por el smog, que se
reproducen como estrellas marinas
11
/ TIERNA FICCIÓN
2
al borde de la acera. Con las uñas

llenas de "basuko" y gusanos
luminosos en el pelo; con las
antenas orientadas al sitio en donde
una música feroz y un humo
podrido se desparraman en el
ambiente, coronando de miedo los
tumbados.
Moisés había llegado una noche a
descubrirnos una lengua distinta.
Fueron algunas horas hablando de
aquellas palomas que amanecen en
un portal con el pico amordazado y
las alas trizadas por los Tragaluces:
aquellos fieles verdugos de la
ORDEN DE LA GRAN
ESTATUA.
Moisés era distinto, como si alguna

mueca de antigua felicidad se
hubiera extraviado en su mundo;
como si algún pasado sutil que no
lograba atisbar en su memoria, lo
estuviera esperando en alguna
galaxia distante.
Durante la noche nos dibujó un
mapa de su mundo, desprovisto de
naves de aceite, flores de plástico y
miles de zapatos entrando y
DIEGO VELASCO 11
ANDRADE / 3
saliendo de agujeros sellados por

láminas de vidrio en cuyo interior,
los hombres cuentan y recuentan
los papeles que les ayuda a
sobrevivir.
El nos advirtió que el final estaba

cerca, y que nos fuéramos
acostumbrando a empezar historias
con "Habrá una vez" y durante
horas hizo que nos olvidáramos de
la guerra, escuchando una música
extraña llena de murmullos de agua
y de aire y fabricando frases como:
La mariposa eléctrica
se desparramará en el horizonte.
La nota audaz roncará en el balcón.
El suspiro felino tropezará
brevemente.
Y si los líquenes bailan claros
el pájaro no tendrá vestido.
Y si la poesía resuelve tres
problemas,
su dulce melodía nos levantará.
Y si la flor fuese una pantera, el sol
mugiría
como un trueno.
11
/ TIERNA FICCIÓN
4
Cuando amaneció, Moisés levantó

vuelo sin despertarnos y dejó sobre
la alfombra, un rollo de poemas que
terminaba así:
a mis amigos Félix y Pilar
de MIRALIA.
Cuando la luna amarillenta exprime
su bello olor en el callejón y el
Duende no acaba de bailar
acompañado de la erótica Marlen,
Moisés se sienta a observar el mar
desde su bote de basura. Desde ahí,
inhalando una sustancia luminosa,
escucha el rumor de los gamines
que llegan a guarecerse de la feroz
arremetida de la noche, y entonces,
Tierno Mambrú, el Vampiro, la
Llama y el Silencio, son cuatro
nenes sórdidos danzando al compás
de una música sacrílega que abre
sus tentáculos y besa en un poste
cercano a Gabriela hasta hacerla
humedecer y aparea al Duende con
la niebla y presencia la llegada del
vampiro que muerde el cuello de un
viejo ebrio hasta desfogar una nube
violeta por el cráneo; y la llama se
instala en el atrio a mostrar sus
suculentos muslos a las moscas
DIEGO VELASCO 11
ANDRADE / 5
lujuriosas que arriban cada noche

hacia su cuerpo, desde el
cementerio.
Y al despuntar el sol, los gnomos
públicos vienen a descargar
coléricos alfiles en el callejón y a
descubrir la retirada de los
tragaluces que se marchan dejando
en los portales a sus víctimas,
salpicadas del violento sudor de la
noche...
***
Su febril memoria reapareció un día
en un planeta de agua amarilla y
con su escafandra de humo llegó
solitario a planear sobre los montes
convencido de que su existencia
llevaba siglos de transcurrir en el
aire. El siempre estuvo chocando
contra las chatas convicciones de
los de su mundo y denunciando la
muerte de las palomas que
ofrendaban sus alas al fuego.
La sensación de "SER" se fue
acumulando en su traje de agua y de
su garganta comenzó a fluir un
racimo pálido de insectos que
fueron haciendo en su cerebro una
11
/ TIERNA FICCIÓN
6
redoma cristalina, en donde

empezaron a estacionarse los
recuerdos de sus compañeros
abandonados, en el barro humano
de una lejana galaxia.
Danzando sobre los jardines de
aquel planeta índigo recordó su
primer fin y bebió gota a gota, la luz
que colmaba su existencia, hasta
desintegrarla en un espectro de
color.
MIRALIA era su nombre y cuentan
quienes conversaron con él, la
noche anterior a su partida, que
nadie supo descifrar su rollo de
poemas, ni el nombre del mundo
desde donde había venido, ni la
galaxia tenue, hacia donde un buen
día
se
marchó.
I N D I C E
LEÑA CIRCULANTE 7
MAR Y SOL BAJO UN ÁRBOL 13
TALLER 21
JUDY 29
LA PRIMERA MUERTE DEL VIEJO
GAVO 37
ELLA LEE "EL CUENTO MÁS 53
HERMOSO DEL MUNDO"
LITERATON 63
LA BITÁCORA DE EBE 81
LUCES CONVERGENTES 91
MOISÉS EN GAMÍNIDES
107

Tierna Ficcion

Transféré par

Informations du document

Copyright

Formats disponibles

Partager ce document

Partager ou intégrer le document

Options de partage

Avez-vous trouvé ce document utile ?

Ce contenu est-il inapproprié ?

Droits d'auteur :

Formats disponibles

Tierna Ficcion

Transféré par

Droits d'auteur :

Formats disponibles

TIERNA FICCIÓN

DIEGO VELASCO ANDRADE

Colección Zaguán de Aluminio

DISEÑO DE PORTADA E INTERIORES: Quark

OBRA DE PORTADA: Réne Magritte

EDICIÓN: Alfredo Pérez Bermúdez

Todos los derechos reservados. No se permite la

Un árbol llamado viejo inmundo,

Entonces pudo divisar desde las nubes, la

Vio también comerciantes apostados en

danzando en los cables de alta tensión y a

Cuando volaba, extrañó la alcantarilla

Llevaba colgados en el bolso cartílagos de

Cada noche, las cucarachas invadían su

búsqueda para extirparle una flor o una

Esa mañana despertó con los oídos ciegos

que más que tarro era una bomba de

observé a árbol inmundo

por los tejados.

Recuerdo tanto su pie desnudo

Mar i sol, bella como un atardecer

la hora frugal cuando él llegara

dormida en sus raíces,

Y al decir la palabra SESAMO:

cayeran sobre mi copa

de este mi pie inmóvil,

con mis raíces desencadenadas

Y ésa tu música tenue

Mano y pie, quijada y pierna,

Te quiso suya y te halló tierna

(1) ¿recuerdas ?...

... "Cada palabra, aunque esté cargada de

La primera vez que JL asistió al Taller, lucía

Trajo un poema que por entonces nos pareció

Los versos más polémicos sonaban así:

... "A mí sólo me inquietan las sorpresas

A poco de escucharlo Norah exclamó con

Y que una llave pueda abrir una puerta, es un

A mí no me asombra que mi mano pueda ser

Yo por mi parte señalé que la imagen más

JL, un tanto molesto en su sensibilidad y

La segunda ocasión que leímos un texto de JL

corta que desarrollaba la idea del "pesimista"

Su nombre era John Vicent Moon y la

“…¿Usted no me cree? -balbuceó- ¿No ve que

una feroz subestimación al lector.

Yo opiné que debería cortarse en... "para que

El España, como de costumbre, lanzó una de

Lo cierto es que JL, sin dejar escuchar ni un

Han pasado algunos meses desde el ingreso de

Quiero, si me permiten, incitarles a la lectura

“...Alguna vez hubo una dicha. El hombre

Recorría una calle poblada por

Regresaba de la escuela por la calle

que tantas tardes había recorrido con

Cada mancha en la pared o en el cielo,

En una plaza, en donde se levantaba

Tenía puesta una blusa roja y una falda

Quería ser como ella, caminar como

oído y aunque le llevaba como diez años

La joven y la niña miraban

Caminaron como veinte metros y ella

Los dos ingresaron presurosamente al

El Viejo Gavo encontró la historia de un