Alvarado Cortés Daniel E.

Grupo 9993

Actividad 1

Problemas y Métodos de la Historia Económica

Por su mismo nombre, hacer de la Historia Económica una disciplina

tendría que ser necesariamente un punto de encuentro y de conflicto
entre los partidarios de dos ciencias ya probadas y comprobadas: La
Historia y la Economía; así pues, aunque estas dos ciencias, en
especial la historia son ciencias con mucho camino recorrido, la
historia económica puede decirse que es bastante reciente, “no solo
como disciplina independiente y… como esfera de interés científico”1.

Podemos decir que su interés surge cuando en la historia comienzan

a abrirse paso nuevos valores que estaban cambiando las formas de
interacción social, por lo que podemos citar, según Kula, tres fuentes
que motivaron el surgimiento de la historia económica, las cuales
son2:

a) Ascenso de la labor económica al interior de la Historia: Esto en

unión de las relaciones entre burguesía y campesinado.

b) La formación de la economía política: tendiendo a buscar y

encontrar “regularidades” en los fenómenos económicos es por
lo que se exploraba en el pasado, siendo “La Riqueza de las
Naciones” de Adam Smith el parteaguas.

c) Las reformas sociales: La revolución industrial y el

alumbramiento del capitalismo obligo a buscar en el pasado
para entender la formación de dichos fenómenos con el fin de
comprender su desarrollo.

Por lo anterior, es lógico entender que “las historia económica no

podía nacer antes del alumbramiento del capitalismo”…”nace junto
con la economía política, junto con el capitalismo y la Revolución
Industrial”3.

Así pues, hemos visto los inicios de la gestación de la disciplina de la

historia económica, ahora, un asunto de suma importancia es la

1
Witold Kula. Problemas y Métodos de la Historia Económica. España, Ed. Península,
1977. P. 11
2
Cfr. Ibíd., P. 12, 13.
3
Ibíd. P. 13, 14.
1
definición de su objeto de estudio, así como su método de análisis
(elemento indispensable para toda ciencia o disciplina).

Como sabemos, hay dos maneras de aproximación al alcance de una

ciencia, los cuales son el método empírico y el normativo. La naciente
disciplina de la historia económica no podía quedar exenta de probar
ambas formas de aproximación para la definición de su objetivo,
donde dos autores nos ponen de manifiesto la utilización de ambos
métodos, como si nos acercáramos por izquierda y derecha.

El primero de ellos es el polaco Jan Rutkowsi, el cual elige el método

empírico por considerar que “ofrece una mayor garantía de llegar a
unos resultado que tienen verdadera significación para el desarrollo
ulterior de una ciencia determinara”4 (confiando en que la historia
económica estaba destinada a ser una disciplina autónoma y con
propio campo de estudio), llegando a la conclusión de que “solo el
sistema socioeconómico, es decir, los vínculos que de hecho se
establecen entre las gentes para emprender un trabajo económico o
repartir sus frutos, son investigados exclusivamente por la historia
económica y que por esta razón (estas) han de considerarse como el
verdadero objetivo de sus investigaciones”5.

Mientras que, por otro lado, su compatriota Grodek desecha la vía

empírica, haciendo de “el camino deductivo a través de la extracción
del contenido de la historia económica de la moderna teoría
económica”6 su método de análisis, por lo cual llega a una conclusión
completamente distinta a Rutkowsi, diciendo que “la historia
económica tendría que diferenciarse, por supuesto, de la economía
no por su objetivo sino por la forma de tratar los problemas y por sus
finalidades cognoscitivas7.

Considerando ambas posturas, podemos inferir que ambas tienen

debilidades básicas, por ejemplo, Rutkowsi no pudo delimitar
completamente cuales eran esos vínculos socioeconómicos que
deberían ser estudiados por la historia económica; y, por otro lado,
Grodek, haciendo a un lado la historia, llega a una conclusión
meramente económica, simplemente viendo un fenómeno analizado
por la economía “con otros lentes”.

Esto nos trae nuevamente al calce la cuestión marcada al inicio de

este ensayo, la historia económica se debate entre dos ciencias: la
historia y la economía, así pues, nos queda claro, por simple
inferencia, que estamos hablando de fenómenos económicos
sustentados en la ciencia histórica, por lo que hemos de notar que la
historia económica “constituye en igual medida una parte integrante
4
Ibíd. P. 49
5
Ibíd. P. 50
6
Ibíd. P. 49
7
Ibíd. P. 50
2
tanto de la historia como de la economía. Se ocupa parcialmente de
la problemática tradicional de la historia y por otro lado de la
problemática habitual de la economía”8, por lo que el historiador
económico no puede solo enfocarse en los métodos de análisis
económicos o históricos para el análisis de los fenómenos, sino que
debe emplear ambos, en este sentido, el autor nos menciona los
elementos más importantes en los cuales un investigador de la
historia económica ha de basarse, siendo los elementos más
importantes los siguientes9:

i. Una actitud crítica con respecto de las fuentes de información.

ii. Una tendencia hacia las experimentaciones a largo alcance.

iii. Una gran predisposición y aptitud para tomar en consideración

el papel de los factores extraeconómicos en las
transformaciones económicas.

El objetivo y método de la historia económica pues queda

determinado por este axioma: la utilización de métodos de la ciencia
histórica y la ciencia económica para abordar los problemas de la
historia económica, los cuales podemos enfrascar en el análisis de los
hechos económicos del pasado, así como analizar los hechos del
pasado desde una perspectiva económica.

Pero, no todo ha sido tan simple como que un par de teóricos hayan
enunciado sus pronunciamientos al respecto de la naciente disciplina
de la historia económica, desde sus primeros esbozos surgidos por las
necesidades mostradas por las fuentes que le dieron nacimiento, la
historia económica ha tenido un largo caminar, el cual se había
empezado a manifestar desde principios del siglo XIX, donde era ya
“una clara esfera de interés, un campo ya laborado”10.

El primer intento de darle independencia y formación completa a la

historia económica fue realizado por la “Escuela Histórica” a
principios del siglo XIX, con Inglaterra y Alemania a la cabeza, donde
principalmente económicas con mas corte de historiadores
económicos comenzaron a verificar las preocupaciones de la vida
social, por ejemplo, en Alemania el papel de la unificación bajo el
aspecto del problema económico de la unión aduanera le dio forma a
muchos estudios de corte histórico-económico que aun a los
contemporáneos sorprenden por lo ambicioso de estos. Así pues,
vemos que los nacionalismos eran un aliciente para el desarrollo de la
naciente historia económica.

Aunado a lo anterior, el incremento de los Estados europeos y su

constante necesidad de estudios estadísticos fueron una fuente muy
8
Ibíd. P. 53.
9
Cfr, Witold Kula, Op. Cit. P. 54.
10
Witold Kula, Op. Cit. P. 14.
3
importante de datos para realizar estudios con características
histórico-económicos intentando buscar tendencias del desarrollo y
sus características.

Pero, debido a que este tipo de enfoque nacionalista estaba

empezando a mostrar un retroceso ideológico, se empezaron a
generar nuevas corrientes de pensamiento, siendo el marxismo, con
su concepción sintética de la historia, la escuela que vino a dominar
el panorama de las teorías científicas y de la actividad económica,
sobre todo por la fuerza que tenía al contener los elementos de una
teoría aunados a un plan de práctica revolucionaria, como nos lo
marca Kula.

El marxismo al paso del tiempo se convirtió en posición principal en el

pensamiento histórico, ya que “representaba la síntesis de las
adquisiciones hechas hasta entonces en el campo de la historia
económica”11, basándose en “una concepción sintética del desarrollo
económico en la cual la labor económica u la transformación de sus
instrumentos y de sus formas de organización social desempeñan el
principal papel”12, siendo la concepción marxista tan importante que
a partir de su surgimiento, Witold Kula afirma que “las investigaciones
histórico-económicas se han escindido en dos corrientes: la marxista
y la no marxista”13.

Como hemos mencionado, el marxismo como plan de práctica

revolucionaria fue un gran aliciente para el surgimiento y desarrollo
del movimiento obrero, el cual sirvió como detonante para interesar
por la historia económica no solo a marxistas, sino también a sus
detractores.

En este marco vemos el nacimiento de la “Nueva Escuela Histórica”,

los cuales planteaban como punto de análisis principal el desarrollo
económico, adoptando una “postura evolucionista y organicista,
poniendo de relieve la unidad de las ciencias sociales, el historicismo
de sus métodos y creando asimismo una teoría de los niveles de
desarrollo”14, como lo pronunciaban sus creadores: Hildebrand,
Roscher y Knies15.

Por lo anterior, se empezaron a manifestar corrientes históricas en

todo el globo donde los nacionalismos y una línea histórica de
desarrollo aplicada para Estado fueron las principales características
11
Ibíd. P. 17
12
Ibíd. P. 18
13
Ibídem.
14
Ibíd. P. 20
15
No queremos sugerir que ellos trabajan juntos o que llegaron a las mismas
conclusiones o que tenían los mismos postulados, solo los mencionamos juntos con
fines demostrativos y onomásticos.
4
de estas, lo que dio como resultado la demostración de la variabilidad
de los fenómenos económicos en el tiempo y en el espacio, lo cual es
parte fundamental de estas teorías jóvenes del desarrollo.

Estas teorías del desarrollo, el cual conciben a este por etapas,

generaron muchos debates, donde los principales generadores de
ellas eran economistas y los principales detractores eran
historiadores, pero esto no detuvo el crecimiento de la disciplina, al
contrario, gracias a estas nuevas teorías, y sus desacreditaciones, de
produjo “un gran incremento en el conocimiento práctico de la
historia de la economía de todos los pueblos y de todas las épocas” 16,
aunque muchos de estos beneficios eran, muchas veces, en contra de
las intenciones de los investigadores.

En este marco, ya con un camino empezado a recorrer desde el siglo

XIX, la disciplina de la historia económica logro su independencia a
comienzos del siglo XX, apareciendo su nombre por primera ocasión
en la obra de Inama-Sternegg titulada “Deutsche
Wirtschaftsgeschichte”17, siendo adoptado rápidamente, y por lo que
inicia su rápida introducción en los programas universitarios,
emancipándose definitivamente después de la primera gran guerra,
siendo esto reforzado cuando logro entrar a ser enseñada en
universidades tan tradicionales como Oxford y Cambridge, y la
creación de secciones especiales dedicadas a su estudio en los
congresos internacionales y a la asignación de una sección propia en
la bibliografía internacional de las ciencias históricas18.

Así pues, el periodo entre guerras nos muestra un incremento en los

estudios histórico-económicos, apoyados por el incremento de los
estudios regionales, por lo que se encontró un extenso campo de
labor para esta naciente disciplina, esta nueva factografía de corte
masivo nos mostraba un gran inconveniente: no había planeación ni
ordenación, por lo que no había condiciones para empezar a
emprender su desarrollo. Por esto mismo, empezaron a aparecer un
gran cantidad de volúmenes intentando abarcar un periodo específico
de la historia o todo un proceso, pero “a causa de unos vínculos
susceptibles de organizar los materiales acumulados, estas obras
entran más bien en la categoría de compendios” 19, en lugar de
estudios producto de la historia económica, por lo que fue notoria la
necesidad de crear un método de síntesis que ayudara a la historia
económica, donde el tema de análisis principal era la génesis del
capitalismo y su desarrollo.

16
Witold Kula, Op. Cit. P. 24
17
Historia Económica Alemana, Trad. Realizada por Daniel Alvarado.
18
Cfr. Witold Kula. Op. Cit. P. 26.
19
Witold Kula. Op. Cit. P. 28.
5
Así pues, la inclusión de una tercer ciencia en apoyo de la naciente
disciplina marco un punto de inflexión muy importante para su
desarrollo. Nos referimos a la Sociología, de la mano de Max Weber,
la cual implica una nueva interpretación de la economía desde un
punto de vista sociológico.

Otro punto de inclusión del análisis sociológico para el campo de

estudio de la historia económica fue el de la escuela de los “annales”,
la cual mostraba una gran cantidad de métodos para el análisis de los
fenómenos de estudio, y no centrándolos en una sola tipología como
lo hacía Weber.

Después de la segunda gran guerra, la historia económica de

recuperó rápidamente e inicio operaciones casi de inmediato, y con
nuevos estándares, “la democratización de los temas, la introducción
de las masas populares como héroes de la historia se ha conjugado
con la democratización de los sujetos y la expansión del círculo de los
investigadores activos de la historia”20, donde ahora uno de los
principales puntos de análisis era el crecimiento económico, el cual
trajo al campo de análisis el problema de la dinámica y de los
cambios a largo plazo, así como sus variables.

Un ejemplo de lo anterior es la escuela polaca, donde podemos

darnos cuenta que la opinión de las masas populares, debido a las
contradicciones clasistas, es más notoria y tomada en cuenta.

Como hemos notado, el desarrollo de la disciplina de la historia

económica ha ido de la mano de las ciencias de la historia y de la
economía, junto con la sociología incluida; pero, hemos de hacer
notar que como disciplina histórica, está en constante interacción con
otras similares, como lo pueden ser la historia política, la historia del
derecho ó la historia militar, que, aunque Kula desarrolla muchas
más, considero que para efecto del presente ensayo es suficiente con
abordar dos de esas relaciones en específico, con la historia del
derecho y con la historia política.

La historia económica y la historia política, debido a la actividad del

Estado al igual que cualquier fenómeno social, se ven sumamente
vinculados, y sus relaciones y transformaciones en la vida social de
este se reflejan de manera clara en el estudio de la historia
económica.

Ahora, en necesario entender, como nos menciona el autor, que “la

historia política se halla determinada por una inmensa mayoría de
fenómenos extrapolíticos con un predominio por parte de los
fenómenos económicos”21, por lo que podemos inferir que “la materia
financiera es un sector fronterizo entre la historia económica y la

20
Ibíd. P. 39.
21
Ibíd. P. 57.
6
historia política”22, por que el Estado es quien lleva la batuta en el
terreno financiero, y sus disposiciones afecta las relaciones
económicas entre los individuos y la sociedad; así como la actividad
de este siempre será un instrumento de la política económica para la
consecución de resultados, por lo que no es posible realizar una
estricta separación entre las atribuciones de la historia económica y
la historia política, debido principalmente al rango de acción y
concepción de la política económica, lo cual nos hace notar su
considerablemente fuerte interrelación.

Por otro lado, la historia económica en relación con la historia del

Derecho es mas en sentido de una cooperación estrecha, donde “esta
última debería de aprovechar los resultados de las exploraciones
histórico-económicas para esclarecer las causas de la aparición y
desaparición de normas determinadas, mientras que la historia
económica tendría que aprovechar los resultados de las indagaciones
de la historia del derecho y que las reglas vigentes en una sociedad
determinada constituyen en parte el marco en el cual se desarrolla su
vida económica”23.

Como hemos notado, la vertiginosa creación de una disciplina y su

constante crecimiento y desarrollo ha sido un fenómeno que siempre
ha sido de consideración para todos los estudiosos, y la historia
económica no es la excepción a la regla, su creación, emancipación y
ulterior desarrollo ha generado una serie de debates que ha llevado a
desarrollo de nuevas corrientes y teorías explicativas de la realidad,
que, aunque en un campo determinado de acción, nos ayudan a
generar una visión más completa para el estudio de un determinado
fenómenos, el cual podemos visualizarlo desde diferentes puntos de
vista, el cual nos es otorgado por las diferentes ciencias y disciplinas
que se pueden encargar de su estudio, y la historia economía está
ahí, para dar su granito de arena y análisis de cualquier fenómeno
que lo requiera.

22
Ibíd. P. 59.
23
Ibíd. P. 65.
7