Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Lo primero que hay que tener claro es que NO existen reglas fijas a la
hora de decidir cuntos captulos tiene una novela. Algunas cuentan con
cientos de ellos mientras otras no tienen ninguno. Es una divisin ms
artstica y estructural que de contenido y depender de las elecciones del
propio autor.
Ahora bien, como no existen normas para determinar cuntos captulos
ha de tener una novela, resulta extremadamente difcil tomar esa decisin.
Por eso quiero compartir con vosotros las siguientes reflexiones que
espero os ayuden la prxima vez que vayis a organizar las divisiones de
vuestras historias:
enganchado a la trama.
Aceptar el soborno? Dir que s? Explotar la bomba? Todas esas
preguntas al final de un captulo reciben el nombre de cliffhangers y
pueden tratarse de preguntas sencillas o complejas. Lo fundamental es
que provoquen ganas de seguir leyendo.
Estas preguntas no tienen por qu estar escritas tal cual en la narracin,
sino que se las hace el lector segn lo que le hayamos contado. Por
ejemplo, el detective protagonista que cree que su archienemigo est
muerto, recibe una misteriosa carta firmada por este. Ese instante, ese
giro narrativo, es un momento perfecto para cambiar de captulo, mientras
el lector an se est preguntando: Entonces est vivo el
archienemigo?.
2. Estructura: cuando escribes una novela, es til tener un mapa previo
del camino a seguir con las diferentes partes de la historia, tal y como
vimos cuando hablamos sobre las claves para mejorar el proceso de la
escritura.
Cuando crees los diferentes puntos de tu historia, tambin puedes
analizar la estructura y calcular los sitios donde habr giros de la trama,
donde el suspense se quedar en alto, etc. Estos lugares, como vimos en
el punto anterior, funcionan muy bien como cambios de captulo.
3. Perspectiva de lector: si a pesar de los puntos anteriores tienes
dudas, no te preocupes. No tienes que decidir las divisiones de la novela
al comienzo de la escritura. Siempre puedes olvidarte de ello y trabajar en
el primer borrador de tu historia centrndote en las escenas y los
acontecimientos de la misma.
Luego, cuando revises el borrador un tiempo despus (con la distancia
que esto supone), ponte en el sitio del lector y marca aquellos lugares que
crees que funcionarn mejor como cambios de captulo. El propio
manuscrito te ir pidiendo respiros.