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10004434 NATHANIEL BRANDEN El poder de la autoestima Cémo poten> NATHANIEL BRANDEN recu Pe Biblioteca Nathaniel Branden Titulos publicados La autoestima dia a dia La psicologia del amor romntico Cémo mejorar su auioestima Lacautoestima de la mujer La autoestima en el trabajo Los seis pilares de la autoestima Elpoder dela autoestima Nathaniel Branden EI poder de la autoestima Cémo potenciar este importante recurso psicolégico ® PAIDOS eon te ‘Mecca ‘Titulo original: The Power of Self Extcom. An Inspiring Look at our Most Important ‘Psychological Resource de Nathaniel Branden Publicado en inglés por Health Communication, Ine, Florida ‘Traduosion de Maria V. Arauz Cubierta de idee Ltediciin, 1993 {L*edicin en esta colecclén, octubre 201 No se permite a eproduccin toto pacia e ext bo, ns ncorporcin un sistema informiico, is tansmsin en cualquier forma o po eulguer meio, sea te electric, ‘mecinice por foocpia, pr grabaciénu os métdos, sin el peo previo y por exe ‘el ete La infaccn eos derechos mencionados puede se conta de elo cons In propiedaditlecual Ar. 270 ysguenes del Cio Penn). Dias a CEDRO. (Cento Espafol de Derechos Reprogrifins) si necesita ftocepao escane sign fag esta obra, Puede comactar con CEDRO avs dea web www.conlcenincom ‘por telefono ene 91702 19 70/93 2720447 (© 1992 by Nathaniel Branden (© 1993 de todas las ediciones en castellano, Espasa Libros, 8. L.U, ‘Avda, Diagonal, 662-664. 08034 Barcelona Paidés es un sllo editorial de Espasa Libros, S.L. U. ‘worwpaidos.com ISBN: 978-84.493-2614-1 Depésito legal: B-32436-2011 limpreso en Liberdiplex (Cra, BV.2248, km. 74 Pol nd, Torrentfondo -08791 Sant Lloreng d'Hortons El papel utlizado para la impresion de este libro es cin por cen libre de claro est califcado como papel ecol6gico Impreso en Espafie- Printed i Spain Sumario Prefacio . Introduecién . Is {Qué es la autoestima?. . 7 ¢Por qué necesitamos la auto B Autoestima y logro........ 31 Reflexiones sobre las fuentes ae Ja autos . 65 El poder de la autoestima en el lugar de trabajo. 87 Recomendaciones para un mayor estudio . 99, Bibliografia . 5 105 AUTOESTIMA. UNA DEFINICION La autoestima es una poderosa fuerza dentro de cada uno de nosotros. Comprende mucho mas que ese sentido innato de auto- que presumiblemente es nuestro derecho al nacer, esa chispa que los psicoterapeutas o maestros intentamos avivar en aquellos con quienes trabajamos, y que es sélo la antesala de la autoestima, Querria que cuando comience a leer este libro sepa exactamen- te qué entiendo por «autoestiman. Existen muchas definiciones que considero confusas, menos fuertes o menos utiles que la que yo propongo. Si la autoestima pierde su significado preciso y des- ciende al nivel de mera palabra de moda, puede que no la tomen en serio aquellos a quienes intentamos llegar: precisamente las per- sonas que més la necesitan, La auloestima es la experiencia de ser aptos para la vida y para las necesidades de la vida. Mas especificamente, consiste en: 1. Confianza en nuestra capacidad de pensar y de afrontar los, desafios basicos de la vida. 2. Confianza en nuestro derecho a ser felices, el sentimiento de ser dignos, de merecer, de tener derecho a afirmar nuestras necesidades y a gozar de los frutos de nuestros esfuerzos, Mis adelante perfeccionaré y condensaré esta definicién, pero esto es esencialmente lo que quiero decir cuando trato el concepto de autoestima. Introduccién LA IMPORTANCIA DE LA AUTOESTIMA Una perspectiva histérica Hoy hay en todo el mundo una concienciacién sobre la impor- tancia de la autoestima. Reconocemos que asi como un ser huma- no no puede esperar realizarse en todo su potencial sin una sana autoestima, tampoco puede hacerlo una sociedad cuyos miembros no se valoran a si mismos y no confian en su mente. En consecuencia, quiero tratar el tema de su significado con- ereto y cémo y por qué afecta tan profundamente nuestra vida Sélo sobre esta base podremos comprender cémo los principios de la psicologia de la autoestima pueden aplicarse a la psicoterapia y ‘a nuestras escuelas, organizaciones e instituciones sociales de toda indole. Recientemente reflexioné acerca del dia en que escribi, casi cuatro décadas atrés, mis primeras notas sobre la autoestima. Fue en 1954; yo tenia 24 afios, estaba estudiando psicologia en la Uni- versidad de Nueva York y ya tenia alguna practica. Las notas no eran para ser publicadas sino simplemente para ayudarme a acla- rar mis pensamientos. Escribi: a Empiezo a pensar que la clave més importante para la motiva- cién humana es la autoestima. Sin embargo, aparentemente nadie escribe ni habla de ella. Quiero llegar a comprender: a) ;Qué es la autoestima? b) gDe qué depende? ©) Por qué su presencia o ausencia marca una diferencia tan ‘enorme en la vida de las personas? d) sCémo puedo comprobarla? ‘Cuando fui por primera vez a la biblioteca en busca de informa- cién sobre el tema, apenas encontré alguna. Los indices de los li- bros de psicologia no mencionaban la palabra. Sigmund Freud habia sugerido que la causa de! poco «amor propio» era que el nifio descubria que no podia tener relaciones sexuales con su ma- dre o padre y esto conducia al sentimiento de impotencia: «No puedo hacer nada». Esta explicacién no me parecié persuasiva ni iluminadora, Alfred Adler sugirié que todos experimentamos desde el co- mienzo sentimientos de inferioridad porque, en primer lugar, veni- ‘mos al mundo con alguna desventajafisica o «inferioridad orgénica», y luego, porque los demas (es decir, los adultos 0 los hermanos mayores) son més grandes y fuertes. En otras palabras, nuestro problema es que no nacemos siendo adultos maduros perfecta- ‘mente formados. Esto tampoco me resulté itil, Algunos psicoanalistas escribieron acerca de 1a autoestima, pero en términos muy diferentes de lo que yo entiendo por el con- cepto, asi que practicamente era como si estuvieran estudiando otro tema. Mi primer esfuerzo importante por tratar los temas ¢ interro- ‘gantes que presenta la autoestima lo constituye el libro La psico- logia de la autoestima, que escribi en los afios sesenta y se pul 6 en 1969. (Siento la satisfaccién y el orgullo de decir que la 27*edicin esta funcionando muy bien.) 18 Culturaimente, la autoestima cobré fuerza en la década de los ochenta. No s6lo empezaron a publicarse cada vez més libros que hacian referencia a la palabra y se extendian sobre el tema en gra- do diverso, sino que comenzaron a aparecer estudios més cientifi- cos. Sin embargo, atin hoy no hay consenso en cuanto a qué signi- fica el término. A fines de los afios 80 no se podia encender el televisor en Es- tados Unidos sin escuchar frases como: «{Me ha dejado plantado y mi autoestima se ha hecho pedazos!» 0 «jCémo has podido de- jar que te trate asi? {Dénde esté tu autoestima?», En una popular Pelicula histérica sobre el amor y la seduccién en la aristocracia francesa, escuchamos el anacronismo de que un personaje le dije- aa ot7o algo asi como: «Te quise desde el primer momento en que te vi, Mi autoestima me lo exigian, Si en un principio el desafio fue lograr que se comprendiera la importancia de la autoestima, hoy el peligro es que la idea se vuel- va trivial. Si esto sucediera, la tragedia es que las personas dejarian de comprender su importancia. El valor de una definicién pri Es de gran importancia comprender que la autoestima tiene un significado-especifico. Seria poco sensato desechar las definicio- nes afirmando que son sélo una cuestién de seméntica 0 la preocu- pacién por la exactitud tildéndola de pedanteria. El valor de una definicién precisa es que nos permite distinguir un aspecto par- ticular de la realidad de todos los demés, de tal forma que poda- mos pensar y trabajar con él con claridad y concentracién. Si queremos saber de qué depende la autoestima, cémo fomentarla ‘en nuestros hijos, respaldarla en las escuelas, alentarla en las orga- nizaciones, fortalecerla en la psicoterapia o desarrollarla en noso- ‘ros mismos, necesitamos saber precisamente a dénde apuntamos. ‘No daremas en un blanco que no podemos ver. 19 Si nuestra idea al respecto es vaga, los medios que adoptemos refiejardn esta vaguedad. Si nuestro entusiasmo por la autoestima no se combina con un apropiado rigor intelectual, corremos el riesgo no sélo de no obtener resultados valiosos, sino también de desacreditar la materia, Por desgracia, casi todos los que len sobre el tema proponen una definicion diferente. Este es uno de los problemas de la inves- tigacién, Se miden distintas caracteristicas o atributos, pero a to- dos se los denomina colectivamente «autoestiman. Examinaremos algunas definiciones representativas para aclarar mas mi enfoque. Primer intento de definir la autoestima El «padre» de la psicologia norteamericana es William James, y en su libro Principles of Psychology, cuya primera edicién se publicé en 1890, hallamos el primer intento que conozco de defi- nir la autoestima. Yo, que para la época he arriesgado todo para ser psicélogo, me siento mortificado si otros saben mucho més sobre psicologia que yo. Pero me alegra revolverme en la mas grande ignorancia de la lengua griega. Mis deficiencias en esta materia no me producen ninguna sensacién de humillaci6n personal. Si tuviera «pretensio- nes» de ser lingiista se habria producido el efecto inverso [..] Sin intento no puede haber fracaso; sin fracaso no hay humillacién. Lo {que sentimos con respecto a nosotros mismos en este mundo de- pende enteramente de lo que apostemos ser y hacer. Esté determi- nado por la proporcién entre nuestra realidad y nuestras supuestas potencialidades; una fraccién en la cual el denominador son nues- tras pretensiones y el numerador, nuestro éxito: por lo tanto, Autoestima = to __ Pretensiones 20 Dicha fraccién puede aumentarse tanto disminuyendo el deno- minador como aumentando el numerador. Lo primero que James nos dice sobre si mismo es que basa su autoestima en cémo se compara con los demas en cualquier tema que elige. Si nadie mas puede estar a la par de su pericia, su autoes- tima queda satisfecha. Si alguien lo supera, se destruye. Nos esta diciendo que en cierto sentido coloca su autoestima a merced de los demas. En su vida profesional, esto le genera el interés crea- do de rodearse de inferiores; le da razones para temer al talento en lugar de acogerlo, admirarlo y complacerse con él, Estano es Ja formula para una autoestima positiva sino una receta para'la ansiedad. Atar nuestra autoestima a cualquier factor fuera de nuestro control volitivo, tal como las elecciones o acciones ajenas, es pro vocar angustia. La tragedia de muchas personas es que se juzgan a si mismas de esta manera, Si «autoestima equivale a éxito dividido por pretensiones», entonces, como sefiala James, puede protegerla aumentando el propio éxito o bajando las propias pretensiones. Esto significa que uuna persona que no aspira a nada, ni en el trabajo ni en su cardcter, y lo logra, y una persona triunfadora y con cardcter son iguales en autoestima, No creo que alguien que preste atencién al mundo real legue a esta conclusién. Las personas que tienen tan escasas aspi- raciones que las satisfacen de forma impensada y sin esfuerzo no sobresalen por su bienestar psicolégico, Lo bien que vivamos de acuerdo con nuestros estindares y va- lores personales (que James desafortunadamente denomina «pre- tefigibnes») tiene un’claroipeso para nuestra autoestima. El valor de la discusién del tema en James es que atrae la atencién hacia este hecho. Pero es un hecho que no puede comprenderse correc- tamente en un vacio, como si el contenido de nuestros estindares y valores fuera irrelevante y no hubiera nada més que la formula 21 neutra que propone. Literalmente, no es tanto una definicién de la autoestima como una afirmacién.en cuanto a cémo cree. que se determina el nivel de ésta, no en algunos individuos desafortuna- dos; sino en todos. Contribucién de Stanley Coopersmith Uno de los mejores libros que se han escrito sobre la autoesti- ma es The Antecedents of Self-Esteem, de Stanley Coopersmith. Su investigacién sobre la contribucién de los padres sigue siendo incalculable. Escribe: Entendemos por autoestima la evaluacién que efectiia y gene- ralmente mantiene el individuo con respecto a si mismo. Expresa una actitud de aprobacién o desaprobacién e indica en qué medi- da el individuo se cree capaz, importante, digno y con éxito. En resumen, la autoestima es un juicio personal'de'dignidad, que se expresa en las actitudes del individuo hacia sf mismo. Esta afirmacién representa un gran paso adelante con respecto fa James, Se acerca mucho més a lo que es nuestra experiencia de la autoestima. Sin embargo, ain plantea interrogantes y los deja sin responder. «Capaz», {de qué? Todos somos capaces en algunas éreas y en otras no. ,Capaces en cuanto a cualquier tarea que emprendamos? Entonces, ,toda falta de competencia adecuada debe disminuir la autoestima? No creo que Coopersmith quisiera sugerir esto, pero Ja idea queda flotando en el aire. Ua sonnoe sazopaduros ‘ordord oysazap sod sayesneo saiua8e sowiog uoj9 asiejuaysns apand ou oxpour onsanu uiaiap & sopeuiios souoad ayuattajduits sowos Jeno e| unos ugro0u &7] ajduin anb ordod o1 oaistoep un sowsauay, ‘of fwioo spuu so euia) [ “BUUsaoMne exysanU ap JaAtu Jo BUIWLIBIOP souped soxysonu waren sou owioo euLi0j v| anb stoap osainb ON sofajdwioo sazojoej ueujussayap ve] ewnsaoyne eAsanN ZePIA e| preqUOYZE oWgD? “eII9 lus 4 geumsaome euang Bun xe}joxzesap apand owgo? “esopnp so e1ouajod ns onb o ‘aqusiodut s9 aquou ns anb sonpap Bute B| 1S ({soxeytuns seouayrodxa 10d sonosou 9 euoseu e| opesed sowlay oN?) ‘offouzesap ns uo oAreMUMoe O ~2eduur un "ez91190 uoo Iseo “upspua spor orad ‘ope seu sou ou oni iu apronoad ou eUTU By aquOWE|qeqoNE “Sare]tUUIS soUDLU O SEL 1w 1od aqueprout asa anbrydiynyy [Hany so oquaruresuad ja & ayqey 109 so ou ugrodsoxed vj apuop ajqisuasduioou! opunur un Ud dALA anb ap uorsasduit e eyru vj & wep 2 ‘pepifvar ojduns e| seo 0d tedo je o194 “seanronysop souojouajut sod sopeanow ugisa souped So] anb epeurdeun ape “soqqedno uis unWoD euoIsIy Bun, saygedino uys esoysiy eun, o¢ emBas so won -29 by anb £ osouBijad so son anb snuas e uaonpur vy anb 6 BULI0J ap asreyroduioo 10d soxped sopeuorsuaru uarg sns & sowredino? “pjjipesad eun uo epedene 1eiso j9 donpoad anb 10310) ap ugtowsuas 2] ap sedeose wred plousiosuooM e| visey any BUTE Bl IS x “sou -o1odaozad X soqwarwunuas opuarunidar ‘aqqisod ayuaueprdes seus fo e1ueprout Jap opranoar opoy 1e110q opueyuart ‘reBnf gnb woo 0 -oey gnb o8e aquoureonpuayy opuvosng ‘iax109-opand eat. {uotovmuis e] rapuasdutoo eure 2 apand wg? ‘serouanBuoour a1qos sejouonsSuoout ‘sepeneide sauorootpenitog “wytu v8 opipuaidar exey anb ajopugyoosdas ‘ap ed ye eyui3 9] aspeur ej “eutu vy v spur mpmye wred ‘eioYY aupeuI | aiuarur anb sod & xeyunBaud oyoaui0out sa gnb sod? ‘oisin yas Ig gewungaud ajdurts eun eyeysajour grb sod? “aysin vise ou aspeut By Ig “UoloENNS eI ap UoISRJUCD B] OpuEaUINe “eUTU By v apuosdas ‘aupeut e] ap ezeisin ap wsneo e] wod 194 anb auan anbiod edjno anes Jod yzinb o arpeut pj & «aaSaroud» ered zan ye ‘asped 1s, so}op te pepryews opeyinb biqey 9] :2Oop [9 BIDEN BuUeS pryOe eUN aigos owuEOdw! 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Le sobreprotegen y en consecuencia obstaculizan su normal aprendizaje y creciente confianza en si mismo. + Educan al nifio sin ninguna norma, sin una estructura de apo- yo, 0 con normas contradictorias, confusas, indiscutibles y opresivas. En ambos casos inhiben el crecimiento normal. Niegan la percepcién de su realidad ¢ implicitamente le alientan a dudar de su mente. ‘Tratan hechos evidentes como irreales, alterando asi el senti- do de racionalidad del nifio; por ejemplo, cuando un padre alcohélico se tambalea hasta la mesa, no acierta a sentarse en la silla y cae al suelo mientras la madre continiia comiendo 0 hablando como si nada hubiera sucedido. ‘Aterrorizan al nifio con violencia fisica 0 con amenazas, in- cculcando agudo temor como caracteristica permanente en el alma del nifio. + Tratan a un nifio como objeto sexual. + Leensefian que es malvado, indigno o pecador por naturaleza. Hoy millones de hombres y mujeres que han tenido experien- cias similares en la infancia buscan cémo curar sus heridas. Reco- nocen que han ingresado a la vida adulta con una desventaja: un déficit de autoestima. Cualesquiera que sean las palabras que uti- 32 licen para deseribir el problema, saben que sufren algiin sentido inefable de no ser «suficienten, 0 algin sentimiento perturbador de vergiienza o culpa, o una desconfianza generalizada en si mis- ‘mos, 0 un sentimiento difuso de indignidad. Sienten su falta aun cuando no sepan con precisién qué es la autoestima, y menos ain c6mo alimentarla o fortalgcerla en su interior. Una definicién de autoestima Los psicoterapeutas o maestros intentamos avivar una chispa ¢en aquellos con quienes trabajamos, ese sentido innato de autova- lia que presumiblemente es nuestro derecho al nacer. Pero esa chispa es sélo la antesala de la autoestima. Si hemos de ser justos con las personas con quienes trabajamos, necesitamos ayudarlas a desarrollar ese sentido de autovalia hasta aleanzar la experiencia plena de la autoestima. La autoestima es la experiencia de ser aptos para la vida y para ‘sus requerimientos. Mas concretamente consiste en: 1. Confianza en nuestra capacidad de pensar y de afrontar los, desafios de la vida. 2. Confianza en muestro derecho a ser felices, el sentimiento de ser dignos, de merecer, de tener derecho a afitmar nuestras necesidades y a gozar de los frutos de nuestros esfuerzos. Una poderosa necesidad humana La autoestima es una necesidad muy importante para el ser ~humano. Es basica y efecnia una contribucién esencial al proceso de la vida; es indispensable para el desarrollo normal y sano; tiene valor de supervivencia, 33 EI no tener una autoestima positiva impide nuestro crecimiento psicolégico. Cuando se posee actia como el sistema inmunolégico de la conciencia, dandole resistencia, fortaleza y capacidad de rege- néracion. Cuando es baja, disminuye nuestra resistencia frente a las adversidades de la vida. Nos derrumbamos ante vicisitudes que un sentido més positivo del uno mismo podria vencer. Tendemos a estar mis influidos por el deseo de evitar el dolor que de experimentar la alegria. Lo negativo ejerce més poder sobre nosotros que lo positivo. Adiccién y autoestima Estas observaciones nos ayudan a comprender las adicciones, ‘Cuando nos volvemos adictos al alcohol o a las drogas 0 a relacio- nes destructivas, la intencién inconsciente es invariablemente ali- viar la ansiedad y el dolor. Nos volvemos adictos a tranquilizantes y calmantes. Los «enemigos» de los que intentamos huir son el temor y el dolor. Cuando los medios elegidos no funcionan y em- peoran nuestros problemas, nos vers impulsados a tomar cada ‘vez mas del veneno que nos esta matando. Los adictos no son menos temerosos que otros seres humanos, Jo son mas. Su dolor no es mas leve, es mas severo. Al igual que no podemos comprar la felicidad con relaciones ‘nocivas, tampo- ‘co podemos conseguir nuestra autoestima con la bebida o la droga porque son priicticas que evocan odio hacia uno mismo. Sino creemos en nosotros mismos —ni en nuestra capacidad ni en nuestra bondad— el universo es un lugar atemorizante. Valorarnos a nosotros mismos Esto no significa que necesariamente seamos incapaces de al- canzar valores reales, Algunos poseemos el talento y el impulso 34 para lograr mucho, a pesar de poseer una autoimagen pobre: por ejemplo, el adicto al trabajo altamente productivo que se siente impulsado a probar sus méritos a, digamos, un padre que predijo que no legaria a nada. Pero si significa que seremos menos efica- ces —menos creativos— de lo que podemos llegar a ser, y signifi- ca que nos veremos impedidos de gozar de nuestros logros. Nada de lo que hagamos nos pareceré ®uficienten. Si tenemos confianza objetiva en nuestra mente y valor, si nos sentimos seguros de nosotros mismos, es probable que peusemos que el mundo esté abierto pars nosotros y que respondemos apro- piadamente a los desafios y oportunidades. La autoestima for- talece, da energia, motiva. Nos impulsa a alcanzar logros y nos permite complacernos y enorgullecernos de nuestros logros: ex- perimentar satisfaccién. En medio de su entusiasmo, algunos autores parecen sugerir que lo Unico que necesitamos para asegurar la felicidad y el éxito es un sentido positivo de autovalia. El tema es més complejo ‘Tenemos més de una necesidad y no hay una solucién tnica a todos los problemas de nuestra existencia. Un sentido bien desa- rrollado del uno mismo es una condicién necesaria pero no sufi- ciente para nuestro bienestar. Su presencia no garantiza satisfac- cién, pero su falta produce indefectiblemente algiin grado de ansiedad, frustracién, desesperacién. La autoestima se proclama como necesidad en virtud de que su auseneia (relativa) traba nuestra capacidad para funcionar. Por eso decimos que tiene valor de supervivencia. Y nunca mas que hoy. Hemos legado a un momento de la his- toria en que la autoestima, que siempre ha sido una necesidad psicolégica sumamente importante, se ha conver una necesidad econémica de la misma importancia, atributo impe- rativo para adaptarnos a un mundo cada vez més complejo, com- petitivo y lleno de desafios, = Le oquen “owusuenittdsa “eanwaro ‘Teuo!ooU ue zeouE ode sourezadso anb oj 8 ojeno ua ous ‘oartu9tI099 © euoIsayoxd opnuas ua oquaurenress99u ou ‘sosoloiqure spur sourosas ‘oaanu ap zezusuloo ered sowraspua} ejSiaua spur ‘epyeo eun ap sgndsop Sousaqueag] sou opidys spur oyueno ‘sa[euosiad sepra sensonu ua & souotsajoud sensenu uo pepisiaape e| e sousequoujua exed sowie -Pis9 sopedinbs sofeu ‘eumseojne exsanNU vas we SPU OBEN) -euysaoqne | BUTIGap O[jo e aszEyUT] ‘oIUaBIX o9od £ oprooucd o| ep pep -uinas e] vosng eumsoomne vfeq ew] “eyuSUME e] SopsexOy [9 £ UD], -nuinse vy attb 89ius8}ite soarafqo vosng wanisod eumysoorne &] ‘anjeSou ugroenyeAdoIne ENsanu SOULAreULIYUOD anb of woo ‘ojunin ja anb oseowy jo aquanoayy spur pias “erousno -asu0o ug “soULaNIptas sou sjusUrEsngos sws9A—si0d ap Z2A uD ‘0} -uaturesuad onsonu ap sowayuoosap A saquau sexsonu ap viowoyo 8] 2p Sowspnp spur oJUeND ‘oLENMOD [2 Jog “elokya ap opnuds onsanu jsv opueuiyeas opuewmyuod soseoey anb sojuntn spur sowiaspuoygo aquouteinBas ‘sajteisto9 sowIOs Ig ‘soLa]dut09 0 $2I10 YIP soyesep v souaiua1jua sou opueno seiaAasiad e sowareptiar —repuaiduto ‘sopuaide ‘sesuad ap pepioedeo exisonu uo— sai oUt sezisanu ap vlovaya &| Ua somryuoo anb us epipaw v] ua ap popisavou vaysanu puas aqua8un spi ‘auawiaquato sbuio} sowayise2eu sauojs}oap « sauo}ooaja spui spjuonD “oanalqo vista ap ound un apsap sowisitu somosou ua 19010 ‘9p “Heyuod ap pepiseoou JoXeU wun ‘septa sensanu v eULIO} Lep anb souorooe X sazojea ‘souoto99I9 se] a1qos sapeprtiqesuodsay snwunse ap & sosingai soidoud sonsonu xeanqno ap ‘ojuampuodaput seorafs op pepissceu JoAew wun vorjdum oisq “euIOUOIe ap opeaaya ‘SPUI JOAIU UN SoWTeSaDaU ‘soMIaIUE apuop vIOeY UOIDdaNp JaInb Teno ua sepeyut! sapeprjiqisod woo sourewusyjua sou anb je Uo £ vounu anb sauotodo A sauoroaya spur Key anb jo uo optus un ug eusaoine uasaynbaa sajuadyjaquy sou01>0919 se] 9€ (Cp opnaydes yo uo osuarxe ut pyen as ofeqen ap zeny Jo uo euNsoome vy ap BIOTEC “Unt BT) “OAanU OUDLIOUIY UN so aIS9 aIUOUIRDLIOISIHY “BUINSBOINE ‘2p opesopour [ert un wos seuosied ap oxouINU uex8 un ‘soorul -uooe soarjour sod ‘eyisaoau as peprrenyoe e uo onb voyrudis oisg “eumsoomne “exqejed eu ua ‘Sean xaua} ap peproedeo 1 £ ous js to ezueyuod “Teuosrod vywouoIne ap UpIqUIEA OUIS ‘uvdioysed onb seuosiad se] sepoy ue seprande £ soquaruoouco 9p opeAa|e a]uaUTEEMTprOB}XO [9AqU UN O}9S OU UEyISO9OU SatOID -ezrue8i0 sey of{ “(rey jonuos A uapso 9p jeuoLoIpeN ojepout Jp) eorpur sof 98 onb of uaoey onb seuosiod seyonur £ wesuaid onb seuosiod seunge v[siSurp uopand ou eX eusopour esaxdure wun) ‘souesado soj une £ sopefivous so] visey elouar8 ¥] apsop ‘esordura eun ap Se[2Atu So] Sopo} Ua OUTS «UqLED O]9S aB1xa as OU OISg “PIOUSP -uadoput 9 jeuosiad yesuodsas “eywiouomne ‘uo!oeaouu op pepiovdeo sofeur wun ajuauesytoadse ua81xo $o|]o1sesap sors “300189] -ooisd sosmoar soxsonu & sepuewiap seAan UgIquIE) UBazO S30 -ueav soiso anb s@ pepr]toey eusiur ej uoo apuardusoo as ou anb o} oxog “wages 0} jerresazdua eamyno v woo uo!oejos touen anb sou -osiod se] Sepo],‘saroliayue souo1oeroue8 1x9 98 anb Soy ‘ap uotovjioedeo K ugtovonpa ap sopeaajo Seu sajeatu ap sepuewiap ‘uvo1o ‘soquapaoaid uis peprannaduzoo ap jaatt un sod K soarjou -0a1 & sooypiuato somrejape sopeia[oe sod ‘opides olquies jo sod epezuiaioereo [eqo[S vjutouose kun ap owua!uTBIs [2 < sopeleq ey [op oqmeuturopard pepranoe owroo jeuow je ooIsy ofequn [op ‘uoroewuoyur op BUN v [eLUSNPUT pepe!dos BUN ap UOIONIOAS eT oanyny j9 vexed soosB9jo1sd sosanzay mis baja es nuestra autoestima, a menos aspiramos y menos logros obtenemos. Los dos caminos tienden a reafirmarse y a perpetuarse. Si nuestra autoestima es alta, més dispuestos estamos a entablar relaciones positivas y a rechazar las nocivas. Los similares se atraen, la salud atrae a la salud y la vitalidad y la apertura a los ‘otros son naturalmente més atractivas para las personas con una autoestima positiva que la vacuidad y la dependencia Atraccién hacia aquellos cuyo nivel de autoestima estd a la par del nuestro Segiin un importante principio de las relaciones humanas, ten- demos a sentimos més cémodos, mas «como en casa», con perso- nas cuyo nivel de autoestima es similar al nuestro. Los individuos con una autoestima alta tienden a ser atraidos por individuos con alta autoestima. Los individuos que la poseen de un nivel medio lo son por aquellos con autoestima media. La baja autoestima busca baja autoestima en los demds. Las relaciones més desastrosas son aquellas que se dan entre dos personas que se subestiman; la unién de dos abismos no formar una cima. Recuerdo a una mujer a quien traté en una ocasién que crecid sintiendo que era «mala» e indigna de carifio, respeto o felicidad. Como era previsible, contrajo matrimonio con un hombre que «sabia» que no era digno de ser querido y que se sentia consumido por el odio hacia si mismo. Se protegia tratando a los demas con crueldad antes de que ocurriera lo inverso. Ella no se quejaba de sus malos tratos, ya que «sabia» que ése era su destino. A él no le sorprendi6 que ella se alejara cada vez més, ya que «sabia» que nadie podria quererlo nunca, Habian pasado veinte afios de tortura juntos, «probando» cudn- ta razén tenfan con respecto a si mismos y a la vida. Cuando le ‘comenté a Ia esposa que ella no habia sido muy feliz, me miré 38 asombrada y me pregunté: «Acaso las personas son realmente felices?». ‘Cuanto més alta es nuestra autoestima, mis inclinados estamos a tratar a los demds con respeto, benevolencia, buena voluntad y Justicia, ya que no tendemos a percibirlos como una amenaza y el respeto a nosotros mismos es la base del respeto a los demi. o La bomba de relojerfa de una baja autoestima Si bien una autoestima inadecuada puede limitar en gran medi- da las aspiraciones y logros de un individuo, las consecuencias del problema no son necesariamente tan obvias. A veces las conse- cuencias se presentan de forma més indirecta. La bomba de relo- jeria de una baja autoimagen puede funcionar silenciosamente durante afios mientras un individuo, impulsado por una pasi6n por el éxito y aplicando una auténtica capacidad, asciende mas y mas en su profesién. Ansioso por brindar demostraciones més profi de su destreza y sin una necesidad real, comienza a trabajar mis descuidadamente, moral y/o legalmente. Luego comete delitos més flagrantes, diciéndose que esté «mas alla del bien y del mal», como si desafiara al destino a que lo hunda. Sélo al final, cuando su vida y su profesién caen en la desgracia y la ruina, podemos ver durante cudntos afios ha estado avanzando inexorablemente hacia el Ultimo acto de un guidn de vida inconsciente que puede haber comenzado a escribir cuando tenia 3 afios. ‘Autoeficacia y autodignidad La autoestima tiene dos aspectos interrelacionados: 1. Un sentido de eficacia personal (autoeficacia). 2. Un sentido de mérito personal (autodignidad). 39 Como experiencia psicolégica realizada plenamente, es la suma integrada de estos dos aspectos. Autoeficacia significa confianza en el funcionamiento de mi ‘mente, en mi capacidad de pensar, en los procesos por losguales jjuzgo, elijo, decido; confianza en mi capacidad de comprender los hechos de la realidad que entran en la esfera de mis intereses y necesidades; confianza cognoscitiva en mi mismo. Autodignidad quiere decir seguridad de mi valor; una actitud afirmativa hacia mi derecho de vivir y de ser feliz; comodidad al expresar apropiadamente mis pensamientos, deseos y necesida- des; sentir que la alegria es mi derecho natural. Partamos de la premisa de que si un individuo se sintiera inepto para enfrentar los desafios de la vida, si careciera de la confianza, fundamental en si mismo, en su mente, reconoceriamos una defi- ciencia de autoestima, sin importar qué otras ventajas poseyera. O si careciera de un sentido basico de autodignidad, se sintiera indigno del amor o respeto de los demas, sin derecho a la felicidad, temeroso de expresar pensamientos, deseos o necesidades, nueva- ‘mente reconocerfamos una deficiencia de autoestima, sin importar qué otros atributos positivos exhiba. Los pilares duales de la autoestima ‘Autoeficacia y autodignidad son los pilares duales de la autoes- tima positiva, La falta de cualquiera de ellos la menoscaba. Son las caracteristicas que definen al término debido a que son fundamen- tales. No representan significados derivados o secundarios sino la esencia de la autoestima. La experiencia de la autoeficacia genera/el: sentido de control sobre la propia vida, que asociamos con el bienestar psicolégico, la sensacion de estar en el centro vital de la propia existencia, a dife- rencia de ser un espectador pasivo o victima de los acontecimientos. 40 — La experiencia de la autodignidad posibilita un sentido bene- volente no neurético de comunidad con otros individuos, la frater- nidad de la independencia y la consideracién mutua, a diferencia del aislamiento del resto de los humanos, por un lado, o del hundi- miento en la tribu, por el otro. Dentro de una persona, habré fluctuaciones inevitables en los niveles de autoestima, asi como las hay en todos los estados psico- lbgicos. Necesitamos pensar en términos del nivel promedio de autoestima de una persona. £Cémo experimentamos nuestra autoestima? Sibien a veces hablamos de la autoestima como de una convie- cién sobre uno mismo, es més exacto hablar de una predisposicién a experimentarse de una manera particular. :De qué manera? Re- capitulando: 1. Como fundamentalmente competente para afrontar los de- safios de la vida; en consecuencia, confianza en la propia mente y en sus procesos; autoeficacia, 2. Como digno de éxito y felicidad; en consecuencia, la per- cepcién de nosotros mismos como personas para quienes el logro, el éxito, el respeto, la amistad y el amor son apropia- dos; autodignidad. Una defini n formal de autoestima Resumiendo en una definicién formal: La autoestima es la pre- disposicién a experimentarse como competente para afrontar los desafios de la vida como merecedor de felicidad. Obsérvese que esta definicién no especifica las influencias del ambiente durante la infancia que sustentan la autoestima positiva 41 geujsaojne ey sowe}isazau anb 10g? ww “epia e| B sourenoape ap oyesop qe souseiuogjue onb soureSuai ou [eno e| ua pepatoos o wunyjno Bun aisixo onb soureutSeutt 1s souistw sonosoU B soUIeYEBUa SON “opuaans By as ows \uapt990 O14 nue» un so ou (seueuny souotoeyar sel ua wouaredwi0d e] aXnjour anb) [eruowrepury opruss aiso us wloeoye ap eapt v7 ‘soueUNY 2198 So] 9p opunus fe & ezoqemyeu e] & epeidosde ugronidepe vy ap “sapepisooau sns JooRysnes ap SoyeSap so] UatUaljtO Ou SoAquIaTU sono eum asiiqouoo apand wromnbis tu ‘eizatye] ua peparoos Key, we femyjno «aoyea un 10d upisdo» eun ap oronposd ja Busi ezajemyeU e] e OUeIE ‘HOOP Sz 9 uoloruyap fu UD opeZiqHN «ersUareduOO» ap oidsou09 [aL ap ootun ojsadse [9 ugysioard spur woo anbyruapr ani opetounua un axmmoo aut as ou ‘soursasod Koy anb oqattutoouc [pp orxaquoo jap onuap o1ag “euosiad exo oj120ey apand Q ‘oxdoo -t09 Jop elowasa ey re\deo op ‘ejoexe seul ‘repo spur ‘1OfoUI BULIOY ‘eum reuoou® “epiA Tu ap osmo ja wa ‘opand e}Aepoy,‘sestooud spUL asreuso} B WapuoKy ‘20019 O}LaTUTTIOUOD [a onb epIpeut & ‘oyuaTUTIO -ou0o ap JeAlt opeuTUMZa}ap uN oD UeUOLOB|ar ag “OIXsTUOD UN UO ugiso souororuyep se “eroueur eunsulu aq {asreuotooay.ed apand ou Aop anb eumsaoine ap uptoruyap ¥] anb opuainsns dois? 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Existen diversas opciones: buscar la conciencia, no intentar buscarla 0 eludirla activamente; pensar o no pensar. Esta es la raiz de nuestra libertad y de nuestra responsabilidad. Podemos efectuar elecciones racionales ‘Somos la tinica especie capaz de formular una visién de qué valores merecen perseguirse y luego elegir lo contrario. Podemos decidir que un curso de accién es racional, moral e inteligente y, tras ello, suspender la conciencia y realizar otra accién. Podemos controlar nuestro comportamiento y preguntarnos si es coherente ‘con nuestro conocimiento, conviceiones e ideales, y podemos, también, eludir plantearnos esa pregunta. La opcién de pensar 0 no pensar, Si sé que el alcohol es peligroso para mi y sin embargo bebo, primero debo apagar la luz de la conciencia, Si sé que la cocaina ‘me ha costado mis tiltimos tres empleos y sin embargo elijo esni- farla, primero debo borrar mi conocimiento, debo negarme a ver lo que veo y a saber lo que sé. Reconozco que tengo una relacién {que destruye mi dignidad, menoscaba mi autoestima y es peligro- sa para mi bienestar fisico. Si a pesar de ello escojo mantenerla, debo ahogar la conciencia, sofocar el cerebro y volverme funcio- nalmente estipido. La autodestruceién es un acto que se realiza ‘mejor en la oscuridad. Nuestras elecciones afectan nuestra autoestima Las elecciones que realizamos en relacién con las operaciones de nuestra conciencia tienen consecuencias importantes para rnuestras vidas en general y para nuestra autoestima en particular. 48 Piense en el impacto sobre nuestras vidas y sobre nuestro sentido del uno mismo de las siguientes opciones: Enfocar versus no enfocar. Pensar versus no pensar. Conciencia versus inconsciencia. Claridad versus oscuridad 0 vaguedad, Respeto a la realidad versus evasi6n de la realidad, Respeto a los hechos versus indiferencia ante los hechos. Respeto a la verdad versus rechazo de la verdad. Perseverancia en el esfuerzo por comprender versus abandono del esfuerzo. Lealtad a nuestras convicciones en la accién versus deslealtad: el tema de la integridad. Honestidad con uno mismo versus deshonestidad. Autoenfrentamiento versus autoevasién, Receptividad a nuevos conocimientos versus aislamiento. Predisposicién a ver y corregir errores versus permanencia en el error. Preocupacién por la congruencia versus despreocupacién por Jas contradicciones. Razén versus irracionalidad; respeto a la logica, coherencia y evidencia versus despreocupacién o desafio de ellas. Lealtad a la responsabilidad de la conciencia versus tra dicha responsabilidad. ona Si deseamos comprender las bases de la autoestima genuina, esta lista es un buen punto de partida. Nadie podria sugerir seriamente que el sentido de nuestra com- petencia para afrontar el desafio de la vida 0 nuestro sentido de nuestra bondad puedan permanecer inalterados, a través del tiem- Po, segiin el patrén de nuestras elecciones con respecto a las op- ciones anteriores. 49 0480] A eusa0jny 0s ‘reysauarg onsanu eprA exysanu ua81xe Oo] OW opuEL -o1ouiry soureyse anb soqes ap pepissoau B so anb ‘eumnsaomne ap pepisaau exisenu vaio “elouaatAtadns op sorpeut soxisanu Bs1t109 sremoe £ seuororen ap zedvo stoadsa wort ¥] 198 ep ‘ezayemaeU P| ap ovadse ono unBuu u9 sourenuooua ou anb sauorooajo v sou ua!2U0) €s operodio.uy uey aiuawoluapina o1ad “seonpwiarewi sages ou Uap -and sours yaweayou sayuerpnysa $0} sone} e oUa!9 Jod gg aqueuoIs. -arduir un woo se8nj sawiid ua UoLeIANsa soURDaWeSLOU $07 «seonpuiaiewi ua ouang kos» :aseyje} garuejd 59] 25 soul so} e sau0}2en99 A sojnBupin sayseluasoid ap spwapy ‘vIonoU ejew 2] aualA inbe 4 “ppeue? 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Las criticas a los «curriculos de autoestima» que efectiia el autor de este articulo se justifican dentro de los limites de esta ‘comprensién ingenua y primitiva. En consecuencia, cuando escri- bo sobre autoeficacia y autodignidad, lo hago en el contexto de la realidad, no en el de los sentimientos generados por deseos o afir- maciones. Una de las caracteristicas de las personas con autoes- tima positiva es que tienden a evaluar sus habilidades y logros de forma objetiva, sin negarlos ni exagerarlos : {Podria a un estudiante irle mal en la escuela y sin embargo tener una buena autoestima? Por supuesto. Existen diversas razo- nes por las cuales un nifio o nifia puede no ir bien en la escuela, incluyendo la falta de desafios y estimulacién. Es dificil que las calificaciones sean un indicador fiable de la autoeficacia y auto- dignidad de un individuo. Pero, por lo general, los estudiantes con autoestima no se engafian a si mismos diciéndose que les va bien cuando les va mal . Las escuelas deberian introducir los principios y précticas de la autoestima en sus curriculos y, actualmente, hay algunos progra- mas excelentes en vigencia. Pero no contribuimos al desarrollo sano de los jovenes cuando decimos que la autoestima puede lo- grarse repitiendo «Soy especial» todos los dias, acariciandose la ejilla y diciéndose «Me quiero», o identificando la autovalia con ser miembro de un grupo en particular («orgullo étnico»), en lugar de identificarla con el cardcter personal. Eneste tiltimo punto, recordemos que la autoestima correspon- dea aquello que depende tinica y exclusivamente de nuestra elec- cién volitiva. No puede estar en funcién de la familia en la que nacimos, o de nuestra raza o del color de nuestra piel, o de los lo- gros de nuestros ancestros. Estos son valores a los cuales a veces las personas se aferran para eludir la responsabilidad de lograr una 54 autoestima auténtica. Son fuentes de lo que yo denomino «pseu- doautoestiman. {Se puede experimentar placer legitimo con algu- no de estos valores? Por supuesto. ,Pueden brindar apoyo provi- sional a egos fragiles y en desarrollo? Probablemente. Pero no reemplazan a la conciencia, responsabilidad o integridad. No son fuentes de autoeficacia 0 autodignidad. Incluso pueden conver se en fuentes de autoengafio. Pero jes auténtica? ‘A veces vemos a personas que gozan de popularidad o de esti- ‘may que tienen una apar‘encia piblica de seguridad; sin embargo. se sienten profundamente insatisfechas, ansiosas o deprimidas. Pueden proyectar la apariencia de autoestima, pero no poseerla en realidad. ,Cémo podriamos comprenderlas? Obsérvese en primer lugar que las consecuencias que se des- prenden de no tener una autoestima auténtica son grados varia- bles de ansiedad, inseguridad y duda de si mismo. Esta es la sen- sacién de ser, en efecto, inapropiado para la existencia (aunque nadie piensa en estos términos, si puedo creer que hay algo malo en mi). Este estado es sumamente doloroso. Y por ello intentamos evadirnos de él, negar nuestros temores, racionalizar nuestro com- portamiento y fingir una autoestima que no poseemos. Podemos desarrollar lo que yo denomino «pseudoautoestiman. La pseudoautoestima es la ilusién de la autoeficacia y autodig- nidad sin la realidad. Es un medio no racional, una autoproteccién para disminuir la ansiedad y brindar un falso sentido de seguri- dad, para aplacar nuestra necesidad de autoestima auténtica mien- tras nos permitimos eludir las causas reales de su falta. Esta basa- da en valores que pueden ser apropiados o inapropiados, pero que en cualquier caso no estin intrinsecamente relacionados con lo que exigen la autoeficacia y la autodignidad. 55 Por ejemplo, en lugar de buscar la autoestima a través de la conciencia, responsabilidad e integridad, podemos hacerlo a tra- -vés de la popularidad, prestigio, adquisiciones materiales 0 proe- zas sexuales, En lugar de valorar la autenticidad personal, pode- mos valorar el hecho de pertenecer a los clubes adecuados, a la iglesia adecuada o al partido politico adecuado, En vez de practi- car la autoafirmacién apropiada, podemos sustituirla por una leal- tad ciega a un grupo en particular. En vez de buscar la autodig- nidad a través de la honestidad, podemos hacerlo a través de la filantropia. (Debo de ser una buena persona, realizo «buenas obras».) En lugar de luchar por obtener capacidad, podemos per- seguir el «poder» de manipular o controlar a otras personas. Las posibilidSties de engafiarse a uno mismo son casi ilimita- das: todos los callejones sin salida en los cuales podemos perder- nos, sin advertir que lo que deseamos no puede comprarse con dinero falso. La autoestima es una experiencia intima; habita en mi alma. Es Jo que yo pienso y siento respecto a mi mismo, no lo que otra per- sona piensa o siente respecto a mi, Este hecho tan simple cuesta muchisimo que se recalque lo suficiente, que quede bien claro. Pueden quererme mi familia, mi pareja y mis amigos, y a pesar de ello no quererme yo mismo; puedo ser admirarado por mis so- cios y sin embargo considerarme indigno; proyectar una imagen de seguridad y aplomo que engaie pricticamente a todos y por el contrario temblar secretamente por sentirme inseguro e inadapta- do; satisfacer las expectativas de los demas pero no satisfacer las, propias; obtener todos los honores y sin embargo sentir que no he conseguido nada; ser adorado por millones de personas y aun ast despertarme cada mafiana con una enfermiza sensacién de engafio yvacio. Alcanzar el «éxito» sin alcanzar una autoestima positiva es condenarse a sentirse un impostor que espera ansiosamente ser descubierto. 56 Aclamacién no es autoestima La aclamacién de los demas no crea nuestra autoestima. Tam- poco lo hacen el conocimiento, las aptitudes, las posesiones mate- riales, el matrimonio, la paternidad, los esfuerzos filantrépicos, las conquistas sexuales ni la cirugia plistica facial. Estas cosas pue- den hacernos sentir mejor con nosotros mismos temporalmente 0 ‘mas cémodos en situaciones particulares. Pero la comodidad no es autoestima, Desafortunadamente, los tedricos de la autoestima no son me- nos impermeables que cualquier otro a la adoracién a falsos dio- ses. Recuerdo haber asistido a una conferencia de un hombre que imparte seminarios sobre la autoestima, Anuncié que una de las mejores maneras de elevarla es rodearnos de personas que tengan un alto concepto de nosotros. Pensé en la pesadilla de la baja autoestima para las personas que estin rodeadas de alabanzas y adulaciones, como es el caso de las estrellas de rock que no ti nen idea de cémo llegaron a donde estin y que no pueden sobre- vivir un dia sin drogas; en la futilidad de decirle a una persona que tiene un bajo concepto de si mismo que se siente afortunada si cualquier persona la acepta, que la forma de elevar la autoestima es buscar sélo la compafia de admiradores. Es mucho més inteligente buscar compaiiias que sean amigas cen lugar de enemigas de nuestra autoestima, Las relaciones bene- ficiosas son mas idéneas que las nocivas, Pero es peligroso ver en Jos demés una fuente primaria de autoestima: en primer lugar, porque no funciona; en segundo, porque corremos el riesgo de cor vertirnos en adictos a la aprobacién, algo nefasto para el bienestar ‘mental y emocional. No deseo sugerir que una persona psicolégicamente sana no se vea afectada por la realimentacién que recibe de los demas. Somos seres sociales y con certeza los demas contribuyen a nuestras auto- percepciones. Pero hay enormes diferencias entre las personas en 357 6s “rook sourasonb onb o} ap ‘epipou wes8 uo ‘epuadap eumsoome exson “omarueyioduo £ souoiooe sexisanu 8 aloyes 9s anb o] uz 4a0ey sowiasanb anb :eanijoa ug1399 “aluouryeex sowios souginb wefayor ou anb soxrepunsas sazojea ap uotonsasiad v] sod sopeyuaysns reIs9 tapand vusnszoane ey ru o[fn8io Jo IN “«zioUayUE ns Uo ,o;uEIOd “Ur On0,, un8[e ap zoA B 0 parsyy? {seroul sns ~tejunoud [9 opeyinso1 sep apand ‘sou30] sns uoo opezipear asmnuas ou apand uamaje sayena sej 1od souozes sesioap ey anbuny “<«gowistur yur ap osoy1ni0 Spur o1uays aut ou anb 10g? ‘sofa Anus opeBoI{ af) :1100p sowyo S2924-¥ anbiod sepuasdutoo aqueyzodun so anb owund un sa ais “ataisod ugio 3S B}qRY OU ‘o}I20°Y ap JoWD) je asrEUaYUD v £ UoHoEMNIS eso Pyesep v oxsandsip wiotanisa ou anb eiseH “souwoje ns ap long Uegeise uorooeysnes vy £ ojinfio ja ‘oareul 289 ap oxuop eqens 98 [9 seauaiz9 “sepunyoud seus sopepisooau sns wqeiago anb oad Hq euo1sacen Bun UoD eprA wun eqefayar uosaidap ng “ugfoejnyideo CUSIP gatrow souNoIue euNssoINe 9p euta|qoxd un anb o1e|9 BIS «a2oouatsad) ap & copeure» asunues ap oasap ns sod ‘spuiap so] ap Soasop so] v sazojea £ aquaw ns opeurpiogns wiqey epta ns ap elu) “od spur wonsono oy ug -oanout [2 seoyRUDpE [oMTP B1a ON ‘epewep eqeisa eumsoome Us anb ous ‘soudo] sis 10d yeroysedns ofjnBio un anb spur suas ¥pod ou 0198 ON “so!08au so} ap opunuL fo ud erOLseO BUN B18 touestndu o] anb soaped sns v etouazayap 10d oasap nse orounual anb osed ‘ooy;nuayo sopeBnsoaut 198 opuionb ejqey axduots |p anb Soutiqnosaq ‘oanow [9 1apuosduioa uls opeyoipsap £ 8s yd usa ‘esnud oo ong atone um Oe GB SF 2 : jw eun ap syuapisel 2 ‘onbiod oxjnsuoo our eureypour wsoudl prea yo ensonu oj ouloo ‘oquouretres209u ON 0110810 sel outs seradns 2 -mequwoye op By as anb oyeA un = OIA un $9 oN “o1Boy fe fouoIOOUS onUHadd [2 S9 O[NBIO [a vre2od anne wrogain ap By ON "UOIODESTICS e] OUIS OORA [9 $9 OU =. ‘ng “eysondo zyes Bj ap austAdig "woUNONE vO seoriems 1 ow oj{n10 oonugine I; 2] ‘exoueqoe! e] uoo uNUIOD ws epeU aUDR OU O}I a puntos fa “«opang> orp :201p A opesfoj vy as anb o| ne 9 - = 15 wore : “Ipovy SOUT 1b of ejdurayuoo erowud ey + roorp & s200y soureyssa0au ant sd wre 2 1gep sourejuourtrodxo enb oy 1 roto soe waiayarorodso o's eANEpUY TK -uoUt omedeyeavan ap fououndn €2!9) 9S ENSPOIE |S ‘oyn10 osnuainy ] soUwsiut 289 sonosou sod sesuad © & sauoioouo su # & odsano fe s0yoma89 $9 01109 “2 ‘ miopy oradsa4 17 w9 1910 ‘ sopuasde ‘oustw oun 24 yoo U3 n spur soy asrezqytinba v wap o1sq ‘sousayx9 s2yeues eu Ye sp ontend mnjon [9 soureyowuN yas sesisanul ap woUn oa -eaaje $9 9830109] © 2 sont ua efouatoU09 9p [PAIK |? 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' + Serenidad al hablar de los logros y fracasos direota y hones: tamente, ya que mantenemos una relacién amistosa con los hechos. + Comodidad al dary recibir cumplidos, expresiones de afecto, aprecio, etcétera : + Apertura a las eriticas y comodidad para reconocer errores porque nuestra autoestima no esta atada a una imagen de «perfeccién», ' - + Nuestras palabras y acciones tienden a ser serenas y espont reas porque no estamos en guerra con nosotros mismos. + Armonia entre lo que decimos y hacemos y nuestro aspecto y gestos. - + Una actitud abierta y de curiosidad hacia las ideas, experien s. . cias y posibilidades de vida nuevas «Si surgen sentimientos de ansiedad o inseguridad, es menos probable que nos intimiden o abrumen, ya que no suele ser dificil aceptarlos, dominarlos y superarlos. ‘ + Capacidad para gozar los aspectos humoristicos de la vida, en nosotros mismos y los demés. ' + Flexibilidad para responder a situaciones y desafios, movida por un espiritu inventivo e incluso Iidico, ya que confiamos en nuestra mente y no vemos la vida como una fatalidad 0 derrota, : + Comodidad con una actitud positiva (no beligerante) en no- sotros mismos y en los dems. ' . + Capacidad para preservar la armonia y dignidad en condicio- nes de estrés. Lugo, a nivel puramente fisico, se pueden observar caracteris- ticas tales como: 62 *+ Ojos despiertos, brillantes y vivaces. * Rostro relajado que (salvo en caso de enfermedad) suele tener color natural y vitalidad en la piel. + Mentén en posicién natural y alineado con el cuerpo. + Mandibula relajada. + Hombros relajados aunque erguidos. + Manos que tienden a estar relajadas, graciles y quietas. Brazos relajados y en posieién natural. + Postura relajada, erguida, bien equilibrada, * Modo de caminar decidido (sin ser agresivo ni altanero). ‘Voz modulada, con intensidad adecuada a la situacién y con pronunciacién clara. Observe que el tema de la relajacién se repite una y otra vez. Esta implica que no nos estamos escondiendo de nosotros mismos ¥ que no luchamos contra quienes somos. La tensién crdnica trans- mite un mensaje de alguna forma de divisién interna, de autoeva- sin y de autorrepudio o de que se est negando o reprimiendo algin aspecto de uno mismo. Les pregunté a varios psicoterapeutas de diferentes orientacio- nes teéricas segin qué criterios intuirian la autoestima de'un pa ciente. Fue interesante comprobar que coincidiamos en muchos aspectos. 4Cudnta autoestima es suficiente? 2Es posible tener demasiada autoestima? No, no lo es; no es més posible que tener demasiada salud fisi- ca. A veces se confunde autoestima con vanagloria, jactancia o arrogancia; pero estos rasgos no refiejan demasiada autoestima sino demasiado poca. Reflejan una falta de autoestima. Las perso- znas con una autoestima alta no se ven impulsadas a mostrarse su- 63 BUUN}sa0}Ne ey ap sa}uany se] a1qos sauOIxajoy 4 sexofntw a1uays somnsosuTt SFL teyanpor asunuas upjons ‘ojdurafa sod “sosnosty sazqutoy SO°L act jsooyne pppisouap woual}> «wesejoap £ oyuoruUAsas weTays caapaped $0] ow anb seuosiod ap ejouaseud vj aru sepowoaus Uo) arajqoxd 09 seosiad Sey and O1A19 SA -uats as wumsaomne ap se _ sounfas souauu so] uo oqoyurjuaso4 se4puaBe -euosiod vzjo anb soxofout 198 ap ou ‘uos onto 05 9p ueATaje ag “oameredusoo sepupASe Un unos asopupyprus soyea ns zoqosd ueasng ot 'SPUIAP SOl P souopiod 19 “1oJop 0 sow) ns oD URDYHHUAPI a8 ON “UaUaNHEP se] OU seI9 sodxo seyso o1od “waaey of 1g “Peparsue uoquouHTZOdxo ou s9994 Bo unyns ou eatyisod eumsaomne Hoo seuOsrad sv] anb So ON guouf -ap Sou somawow sapo) anb sownfocy? :s9 wunBaxd vy “UoId Ul © wIousTOdwT ap UgLoWsUaS LSoLOJOp v| A UgIOLIEd -sosop op ‘pepifajcliod op sowowiour souruouiedxe sopoy, “ugtsajoud tur ap uoroaaja ef uo JUHI Jos un OAM! UOIDOLAUOD vISO LPNp Ug “PepruOLDS K 21g unpI4499 ‘PEPLNRas ‘sopod sa oqtraruutdOUOd Jo onb ap UOIdO1AUOD ua} Jaqey ap ogap “eueiduroy ayueiseg pepo nun w ‘onuoK 1 ap zw8nj ung]e Uq “woUBU Uso ep EgeLOdUIOD as soMBUINY so10s -to9 uy onbune sayuaioduut 9 sopipiad ueruas 9s anb op “wey -Py anb o] ueIqes ou ojuoUITeIOUDs SoyMpE sot anb op orowstes euopeuunage vy & sopapanye tu & B1aysoUUNe ey ap oured wes zesnyes vyoamd anb peparsue eun ‘sonuaituntias sns X seaqejed sns nua fanuIuod ap vypey ¥| ‘SaI0]eA sns ap pepryeIaysodns vf A pepLset] -noad vy owto eiqioiad of anb of ‘soyjnpe so] ap cquorumtzodiros | aitioureuLioUs equiquiose our our Ia opuENd anb opiensay jgual que sise pusieran enfermas no se identificarian con su enfer- ‘medad, No ven el sufrimiento como la esencia de la vida. con integridad, consciente y responsablemente Lanecesidad de la autoestima surge del hecho de que el funcio- namiento de nuestra conciencia es volitivo, lo cual nos confiere tuna tarea tniea: hacernos capaces para afrontar los desafios de la vida, Lograremos esto viviendo con integridad, conscignte y res- ponsablemente. Como ya he resaltado, deberiamos juzgarnos segin lo que se encuentra bajo nuestro control volitivo; hacerlo segtin aquello que depende de la voluntad 0 las elecciones ajenas es muy peligroso para nuestra autoestima, La tragedia de millones de personas es que hacen precisamente esto. La autoestima se refiere al tema de nuestra adecuaci6n funda~ mental a la vida y, en consecuencia, a las operaciones mentales que yacen detras de nuestro comportamiento, Si comprendemos sto, podemos apreciar fécilmente el error de medir nuestro més to segiin baremos tales como nuestra popularidad, influencia, ri- queza, posesiones materiales o apariencia fisica Dado que somos seres sociales, necesitamos algin grado de estima de los demas. Pero ligar nuestra autoevaluaci6n a la buena opinién de los demis es ponernos a su merced de fa forma més hnumillante. El deseo de «agradar» (y evitar la desaprobacién) puc- de conducirnos a hacer cosas que traicionen nuestra autoestima. ZY qué hemos de hacer cuando las personas euya autoestima de- usw] aBins v, sunpat ‘od axjouapuadapty twos sesuad> ap sejqey jn «opez agey ou apepuasdios agop ou ‘saouonusp :alip af OK “OND :orpuodsax ofan] arueysu un stiod ey oto elouapuadapur ey osndut as ‘otarpuadaput Jos os¢nb ‘opuatoais wquise parsn opueng» :;unfiard 3] oR. o «seuosiad sexo ap souor se] ap opuadap ardurais anb sod sapuasdutos opand ony» :20A olip au eidesos ean eas onb auaioed wun anb opssnooy bh uorouoyut vy] 9p vu} [5 ‘pepHLIg¥SOd vse EP S99 2 soyjanbe ap vl & souistut Js zod sesiznf ap “souster 16 10d sesuad ‘op ‘soutistt 4s sod sesoa se] sopuaudutod ap trees anb soqjanbe ap Goyoaisd e] ana voroUnsIp bun wysIx9 onb fa KaytpoUE ou BILAN soup tis souosiod seno weAngut sou $9994 v anb ep OL}O>H TE sa]e19nU9 Uos soUO!DUDPUE a SEIU SET soureaat] anb epta ap odn jp wxed & souistur somosou t sown -uos Sow oto extLzoy B] BTUd yeIONID s9 soULaM|aaJ9 aNb UOID99I9 Py] “Seasosas urs souDU o spur soroipazoa sns seidaoe & “Up!oen| -vaa & omtaqwtsoucs Jap pepyiqesuodsay v] sono & aitaut vidoad vaisanu euos0fo sowapod “t aioUIBIott OU “UgISUAIGMOD ¥: ap soun rapusud: soulapog “e120 ap sTuoUH ow euosiod wu sapuosduroa ap pom osttosduroo fa uo eHoyiduur vise yem9 aquaurajuaipuadaput sesuag -peprtena & ssousig ap ousonuy ojuartu us j9 Uo erouo1ggip wun eXey anb vayrutis ou OIse osag “BAO ef argos sel -U9\ seUOTD ap UZOH vu anb s1Dap SoULApod “IOUAIXO [9 OPSOCT “9904, apand ou eno e] anb sesoo 120ey apand arouroy duis wun :091syp 22) -soutoig ap oye sur jor un eUoUULIadKe ou a}ONY SpLU VT] “BO nb auiong spt so dun oxod ‘sede owoureoisyy A seues aiuouuonst 419s uapand seuosied so “19 seynses apand eFoyeu eu) ‘sopour Seu viouo8ifanit 2 eUISsoINE FoLUYpE wo eOSted eA onb pepfatjay op wuBip spur o epra vy used wide spe aquats os OU Baye Cuando un nifio descubre que sus percepeiones, sentimientos 0 juicios estan en conflicto con los de sus padres u otros miembros ide la familia y surge la cuestion de escuchar la voz. del uno mismo «o negarla en favor de la de los otros. Cuando una mujer eree que su marido esti equivocado en algtin tema importante y surge la cues tin de expresar sus pensamientos o reprimirlos y en consecuencia proteger la «estabilidad» de la relacién. Cuando un artista 0 cien- tifico ve de repente un camino que puede alejarlo de las teorias y valores consensuales de sus colegas de las principales corrientes de orientacién y opinién contemporineas, y surge la cuestién de seguir ese camino solitario a donde quiera que conduzea o volver atras. El tema y el desafio en todas estas cuestiones es el mismo, {Deberiamos respetar las sefiales internas 0 negarlas? Independencia versus conformidad, autoexpresion versus autorrepudio, autoafirmacién versus autorrendicién El heroismo de la conciencia er necesario, normalmente no disfruta- Si bien a veces puede mos de largos petiodos de alienacién del pensamiento y creencias de quienes nos rodean, especialmente de aquellos a quienes respe~ tamos y amamos. Una de las formas mas importantes de heroismo es el de la conciencia, el del pensamiento; la voluntad de tolerar la soledad. ‘Al igual que en el resto de rasgos psicolégicos, hay grados de independencia. Aunque nadie es del todo independiente ni nadie es dependiente siempre, cuanto mas alto sea el nivel de nuestra independencia y mas deseemos pensar por nosotros mismos, més alto tender a ser el nivel de nuestra autoestima. 16 Aprender a discriminar Nadie puede sentirse eficaz de una manera adecuada (es decir, capaz de enfrentarse a los desafios de la vida) si no ha aprendido a diferen : por otra, los hechos de los deseos por una parte y los temores La tarea es a veces dificil porque los propios pensamientos es- tan siempre teflidos o aun saturados de sentimientos. Sin embargo. en muchas ocasiones podemios reconocer que el deseo de realizar alguna accién no prueba que deberiamos realizarla, Salir corrien- lo de una habitacién en medio de una discusién cuando estamos Uisgustados, por ejemplo, Y el hecho de que temamos realizar al- guna accién no prueba que deberiamos evitar realizarla. Ir al mé- dico para someterse a una revisién cuando hay sintomas de enfer- medad es otro ejemplo. Si efectuamos una compra que sabemos que no podremos cos- tearnos y evitamos pensar en las facturas pendientes que no podre- mos pagar, hemos subordinado nuestra conciencia 2 nuestros dleseos. Si ignoramos las sefiales de peligro en un matrimonio y luego admitimos estar perplejos y consternados cuando el matri- monio finalmente explota, hemos pagado el precio por sacrificar la coneiencia al temor, Nuestra intencién subyacente Enllo que se refiere a nuestra autoestima, la clave no es i somos perfectos al distinguir entre hechos, deseos y temores y optar por la conciencia por encima de alguna forma de evasién. La clave es. en realidad, la intencién subyacente. Cuando decimos que una persona es «bi icamente honest», en el sentido explicado aqui, no queremos decir que sea imper- meable a la influencia de los deseos y temores, sino que tiene un 7 deseo y una intencién marcados y evidentes de ver las cosas como son, No siempre podemos saber con certeza si somos racionales u hhonestos, pero podemos preocuparnos por ello, puede importar- nos, No siempre somos libres para triunfar en nuestro pensamien- to, pero siempre lo somos para intentarlo. La suma acumulada de nuestras elecciones en esta materia da una sensacién interior de honestidad o deshonestidad bésica, una responsabilidad o irresponsabilidad fundamental con respecto a la existencia. Desde la infancia, algunos individuos estin mucho ‘més interesados y respetan mucho més las cuestiones relativas a la verdad que otros. Algunos actian como si los hechos no fueran tales necesariamente si no optamos por reconocerlos, como si la verdad fuera irrelevante y las mentiras fueran mentiras sélo si al- guien las descubriera. : ' La tarea de la conciencia es percibir lo que existe, segin nues- tra maxima capacidad, Respetar la realidad —la percepcién de lo que existe— es respetar la conciencia; respetar la autoestima. Integridad Reconocemos a la autoestima donde vemos un comportamien- to coherente con los valores, convicciones y creencias que profesa cl individuo. Vemos integridad. ‘Cuando nos comportamos de forma que esté en conflicto con los juicios de lo que es apropiado, nos desprestigiamos a nuestros propios ojos. Nos respetamos menos a nosotros mismos. Si esta actitud se vuelve habitual, confiamos menos en nosotros mismos, © dejamos de hacerlo. Los psicélogos, ansiosos por disociarse de la filosofia en gene- ral y de la ética en particular, suelen sentirse incdmodos con todo Jo que parezca referirse a la moral en el contexto de la psicoterapia © del bienestar psicolégico, En consecuencia, pueden omitir el 8 hecho evidente de que la integridad es, en efecto, uno de los guar- dianes de la salud mental y de que es cruel y confuso alentar a las personas a creer que practicar la «consideracién positiva incond: cionab» hacia ellas mismas las conduciré a un amor propio consis tente, sin tener en cuenta el tema de su integridad personal. Valores, principios y normas © A veces una persona intenta eludir el peso de Ia integridad des- conociendo, o manifestando desconocer, todos los valores o nor- mas. Lo cierto es que los seres humanos no pueden retroceder a un nivel inferior de la evolucién sin fracasar; no podemos volver antes de que fuera posible pensar en principios y planificacion it largo plazo. Somos seres conceptuales, ésa es nuestra naturaleza y no podemos funcionar bien si no es asi. Menesitamossvalores que Bulen.nuestras, acciones, -principios :que-pufen-nuestras vidas Nuestras normas pueden ser apropiadas 0 no para lo que nuestr vida y bienestar requieren, pero es imposible vivir sin normas de ningtin tipo. Una rebelién tan profunda contra la naturaleza como el intento de abandonar todos los valores, principios y normas es. Porsi sola, una expresién de autoestima empobrecida y una garan tia de que el deterioro sera constante Reconozeamos que el tema de vivir de acuerdo con normas ino siempre es simple. ;Qué sucede si las muestras son erréneas 0 irracionales? Un cédigo de valores Podemos aceptar un c6digo de valores en desacuerdo con nues- tras necesidades como organismos vivos. Por ejemplo, determina- das ensefianzas religiosas implicita o explicitamente condenan el ‘sexo, el placer, el cuerpo, la ambicién, el éxito material; condenan 19 (para todos los fines précticos) el goce de la vida humana. La acep- tacion de normas que niegan aspectos humanos es un enorme problema que he tratado en mis libros La psicologia de la autoes- tima y El respeto hacia uno mismo. [ ‘Aqui, simplemente comentaré que si !legamos a la conclusion de que vivir de acuerdo con nuestras normas puede estareondu- ciéndonos a la autodestruccién, ha Hlegado obviamente el momen- to de cuestionarlas en lugar de resignamnos simplemente a vivir sin integridad. Puede que necesitemos reunir coraje para desafiaral- {gunas de nuestras suposiciones mas profundas en cuanto a lo que nos han ensefiado a considerar como bueno. Autoaceptaci6n La autoaceptacién ests implicita en la autoestima. Los indivi- duos con una autoestima positiva tienden a evitar caer en una rela- cién de enemistad con ellos mismos. ‘Si hemos de crecer y cambiar, debemos empezar por aprender a aceptarnos a nosotros mismos. Segin mi experiencia, la auto- aceptacién no es un concepto facil de comprender para la mayoria de las personas. (En Cémo mejorar su autoestima, el capitulo mas largo esta dedicado a este tema.) Suele considerarse Ia autoacepta- cién como equivalente a la aprobacién de todas las facetas de nuestra personalidad (0 aspecto fisico) y negar que sea necesario algin cambio 0 perfeccionamiento. ' ‘Autoaceptarnos no significa no desear cambiar, mejorar, evolu- cionar. Significa no estar en guerra con nosotros mismos, no negar nuestra realidad actual, en este momento de nuestra existencia ‘Tratamos aqui el tema del respeto y la aceptacién de los hechos; en este caso, los de nuestro propio ser. ‘Aceptarnos a nosotros mismos es asumir el hecho de que lo que pensamos, sentimos y hacemos son todas expresiones de! uno 80 mismo en el momento en que suceden. No podremos cambiar hasta que no aceptemos el hecho de lo que somos en cualquier momento de nuestra existencia, permitamos ser plenamente conscientes de la naturaleza de nuestras elecciones y acciones y admitamos Ia verdad de nuestra conciencia, Aceptar lo que soy me exige contemplar mi propia experiencia con una actitud que haga irrelevantes los conceptos de aprobacién 0 desaprobacién: Wades eonttiontt Autoaceptacién incondicional Existe un nivel atin més profundo en el que necesitamos com- prender la autoaceptacién, En su sentido iiltimo, se refiere a una actitud de autovalia y autocompromiso que deriva fundamental- mente del hecho de estar vivo y ser consciente, Sstifiés profunda ‘que'la autoestima:als un acto de autoafirmacién que antecede a lt moral y a la razén, una especie de egoismo primitivo que es el derecho de existir de todo organismo consciente. No obstante, los seres humanos tienen el poder de actuar en contra de esta profunda autoafirmacién o incluso de anularla. Un psicoterapeuta que sea eficaz apela o pugna por despertar una actitud de autoaceptacién, aun en una persona con un nivel ce autoestima muy bajo. Esta actitud puede inspirar a un paciente a enfrentar lo que mas teme afrontar en su interior, sin caer en cl odio a si mismo, en el repudio al valor de su persona o en el aban- dono del deseo de vivir. En consecuencia, uno podria ser desdi- chado porque experimenta una autoestima baja y, sin embargo, aceptarla junto con las dudas sobre si mismo y los sentimientos de culpa, «Los acepto como parte de cémo me experimento a mi mi mo en este momento.» En este nivel, la autoaceptacién es incondicional. Jsa-autoesti- 81 £8 “ojarurepioduioo A sepia sensonu ua soyesneo soquade toutad otto outs “edna 0 emsus9 ap soyafns OW0D ON “Sot -o1ooe & soutorooaye sesisanu ap soqqestodsax sowios pepryeas tel cagjuouine & gzaduo ewunsdoINe TW A "TEIqUIRO v re00r0 v goUILHOD +—aquatoed un ap spur o4oIp By au— epIA 1uu sod pepitiqesuod a1 vidoad 1w siwaureuoyd wiwasgue puted ow anb us OWwsutoU! oBo|] s1usurfeutgy ‘opswrvasas papuon azpou anb aY:OIApe 2 tojond [9 opttend a1anoo [worpes spur uOFoBULIOysUEN v| anb 19A O| ‘ountiadai ojuatutgax9 un asitonposd soazed anb ua oquawowt doo vsaxaiut au “eidesooorsd uo sayuaraed woo sefeqen Ty ows oun ap pepijiqesuodsa4 e| ap 4apod [3 “o8je sepaons v ezuatuos ‘oxdaoe { seyny ap ofap oweno ug ojreidase w opnisisar ay aus anb ose tod vas Ezind ‘saiuE|[IUNY Wos anb sesod ‘ogarudesap anb sesoo foloey smn89s ‘Nap $0 ‘OjopupIoeY reNUNUOD [LOYIP Se OYD ‘prey]nsaa aut Is owH09 So ‘OptatA ay ow99 ap ‘opustaey operse a4 anb of ap pepuyeas v| sedooe ozotdure onb wprpaut © A— “eaneoytuais spur asexy e] oftp o8an]— eudip sew BIONUIS aul IS OWIOD oIUEIS OBIequUIO niques ey oN “ouopepiea ousoa operdaoe ay 0] aquauupeas “Zaqus? 1s ‘eaqiejed ap 0198 ON “oozouoda1 07] ‘oyDay Un sa osad “wisn ON “pepiteal eun ““oquawarduns sq ‘eustN ju v owTENL8 ap ‘eua19s sput o1u9ts auH orag “BULa|qord J2 OBUAI wIAEPOL, opeiquies vy ON “—gruawWos— oUeNIKS UR) so oIsy— ‘0s tain op a1sed BULIO} OYS9 EpIA Tut ap OWLAWIOUI 9189 LI ‘nb anuas eisey asiefejar e gzaduig ‘wuisiun ys BuO EYON] 2P [2 jopuegy ‘so1wetwunues ap orquieo un gsaxdxe ‘oduon un ap sgnd “soq ‘nioyp vqeyse jsv anb zeyuaunLIadxe e vlsepncE U9 UEHSISUOD Jourjerouiasg “JemIov Orisa ns ap uoVoedade BI JepIoRS w UEG unde anb soo1ojo01sd sorarasafe sosseaip op spre & 918 BT cay guip unSe zeiqureo seradso apand owgs? ‘seouowug— sqqunBaid 97 jeuosrad ap odx 989 Aos onb seydooe & 082qu 9! — epeuBiput oftp £ ‘asreou expod ou anb sofnus gun eqeiepistioa 2s anb s290u0004 Te EDEN ‘nus ejyuas os anb woo opranae ap eqerso 1s guunaxd a] 08307 “epatsy— -orpuodsat ej “089 s109p fe enuas as oxrgo grundaid a} opuEND “ou anb s109p 2p and ow anb sofaur eum osapisuos aur anb ap oysey jo o1daoy— solip ordtoutd un uo asmsisos ap sendsaq. gepsooui0ges © K pepran eso zeidaoe e wisandsip wqeiso? “Baus ‘eso ap eUstUl {S @ B9A 9s on pepraA exe anb OpEP anb ofip 77 po oT!— “oyoay asa sexdace v eisandsip wqease 1s guunBaud 27 -opuvo] oipuodsas— 1s— -asieou vypod ow anb safnur eun eqesapisucd 2s anb pupion v1 ‘aquousjeas 1s gqunBard a7] “aquroy un 2p safenxes sauorsisodosd so rezeyoau ezed peproodeour ns e opiqap euusits Js w1dey o4po en pu myuas expod ou anb uo ensisut auajoed wun anb opsanooy oujuies jp enp9e) ug}serdadzoine &7 -souseuoisoapiod & seiqueo sowapod ou anb K sonosou & 010491 ‘9s anb 0} opoy soutazeqoide ‘soutos anb £ sauginb sourerdooe 1s ‘nb 12019 :sepeuotouau eX seloerey Sop sv sowtozens9sqo ]NbY uy un 49s send00e eqsoqap arb 104? 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Fortalece a uno mismo el declarar (jy proponérselo!): «Soy responsable del cumplimiento de mis deseos y metas.» «Soy responsable de mis elecciones y acciones.» «Soy responsable de cémo me relaciono con las personas.» «Soy responsable del nivel de conciencia y atencién con que afronto mi trabajo.» «Soy responsable de las decisiones segtin las cuales vivo.» «Soy responsable de mi felicidad personal.» Queda mucho més por decir acerca de las condiciones de Ia autoestima positiva, mas de lo que puede abarcar este libro. Lo que he apuntado aqui son algunas observaciones generales sobre los fundamentos. Las raices de la autoestima son internas La autoestima esta arraigada mas bien en las operaciones men- tales internas @psmmslasséxitasconfracasosrenteriis. Es esencial comprender este punto. No comprender este principio nos causa una dosis incalculable e innecesaria de angustia y duda sobre uno mismo. Si nos juzga- ‘mos a nosotros mismos segiin criterios que se refieren a factores fuera de nuestro control volitivo, el resultado es inevitablemente 84 una autoestima precaria que esté en peligro cronico. Pero sia pesar de nuestros mejores esfuerzos fracasamos en una empresa particu- lar, nuestra autoestima no necesita verse afectada o menoscabada, aun cuando no experimentemos el mismo orgullo que hubiéramos sentido de haber tenido éxito. Mis atin, es necesario que recordemos que el uno mismo no es una entidad estética, acabada, sino una creacién en constante evo- lucién, un despliegue de nuestro potencial, expresado en nuestras elecciones, decisiones, pensamientos, juicios, respuestas y accio- nes, Vernos a nosotros mismos como buenos o malos basica e inal- terablemente —al margen de nuestra manera de actuar presente y futura— es negar los hechos de libertad, autodeterminacién y res- ponsabilidad de nosotros mismos. Siempre tenemos dentro de nosotros mismos la posibilidad de cambiar. ‘No necesitamos ser prisioneros de las elecciones del pasado, 85 ‘ywoudojneg 11.205 fof20§ ueauoULy B 9p sesMIDEEEOW OPS “1661 © ‘OUDSOWY BunonsaNy ged “uapuerg [UREN = YSHEY TUM ap eiIAaNUD Eun ap UoIBELEPY 4 xofeqeay ap 4e8n] ja ua Buu}sa0}Nne e] ap sapod |7 La autoestima puede ser el recurso psicolégico mas importante gue tenemos para ayudarnos a afrontar los desafios del futuro, Estos son especialmente evidentes en el lugar de trabajo, donde empieza a verse claramente que la autoestima no es ua lujo emo- cional sino un requisito para la supervivencia. Las investigaciones recientes contribuyen a esclarecer el im- portante rol que juega la autoestima en nuestra capacidad para asumir riesgos, adquirir nuevas aptitudes, ser creativos, recibir realimentacién, relacionarnos con los demas con justicia y bene- volencia, ser productivos y positivos. Necesitamos cultivar estos rasgos tan importantes para funcionar realmente bien en nuestras familias, organizaciones y comunidades. Hemos llegado a un momento de la historia en el que la autoes- tima, que siempre ha sido una necesidad psicolégica para la super- vivencia sumamente importante, también es una necesidad econ ‘mica para esa supervivencia, Hemos sido testigos de la transformacién de una sociedad in- dustrial a una sociedad de informacién y de una economia interna una global. Vivimos en una época de cambios extraordinaria- ‘mente rpidos, de adelantos cientificos y psicolégicos fabulosos. El trabajo fisico se esta convirtiendo en una parte cada vez mas 89 pequefia de la actividad econémica; el intelectual esta creciendo, Este es el momento del trabajador del conocimiento. Deben desa- rrollarse nuevas técnicas de administracién que sean apropiadas para dirigir una fuerza de trabajo mejor educada, més indepen- diente y creativa. Incluso los psicoterapeutas y asesores necesitan tener mas conciencia de estos temas, ya que ven cada vez mas pacientes con estrés relacionado con el trabajo. Aiosidesatrolios.en el-lugar.de:trabajorentesterépocacdereambia, acelerado, elecciones y desafios exigen una mayor capacidad de innovacién, autonomia, responsabilidad personal ¢ independen- cia, todas‘ellas'cualidades-de la autoestimna positive: ° Confiar en usted mismo El significado mas importante de la autoestima es la confian- za en su propia mente, en sus.propios:procesos intelectuales, En consecuencia, la confianza en su capacidad de aprender, de juz- gar, de decidir. Para los seres humanos, la mente 0 conciencia es el medio bisico de supervivencia en el que confiamos para man- tenernos en contacto con la realidad y orientar nuestro compor- tamiento de forma apropiada. Esta es la forma primaria en que podemos considerar a la autoestima como una necesidad de su- pervivencia, Un individuo que desconfia de su propia mente esté en grave desventaja para enfrentarse a las elecciones y opciones que pre- senta la vida. Considere a la autoesti ico de la conciencia, que proporciona resistencia, fuerza y capa- cidad de regeneracién para enfrentar los desafios de la vida. 1 positiva como el sistema inmunolé- 90 La capacidad de tomar decisiones Estudios realizados entre ejecutivos sugieren que (nade: principales-causas:delfraeasoves la incapacidad para tomar deci- siones. Esa ineapacidad se-debe a una autoestima con problemas. la desconfianza en la propia mente y juicio. En muchas situaciones, debe obtenerse y analizarse mucha in- formacién a fin de que los gerentes tomen decisiones acertadas, y Jo que aportan los dems es un factor que contribuye a ello. Se ha escrito mucho acerca del valor de tomar decisiones «equilibra- das», pero eso debe significar algo més que reunir adhesiones. La biisqueda de consenso puede en realidad desviarnos de elecciones innovadoras. Pautas para tomar decisiones A mi juicio, el tomar decisiones se refiere a observar el contex- to mis amplio posible en el momento de hacerlo. Se trata de p guntarse: 1. @Cudles son todos los factores que, presumiblemente, puc- den atafier a mi decisién? 2. {Cuales son todas las consecuencias predecibles de mi deci sién? 3. {Quién puede verse afectado y como? En otras palabras, una persona muy consciente busca la mayor cantidad de aportaciones relevantes que pueda encontrar par: orientar el proceso de tomar decisiones. No se trata de mi decision versus la de otra persona, Es una cuestién de respeto por los he chos, de respeto a la verdad. Unowlelostdistintivos dela autoesti _anaepositivares una fuerte orientacién hacia la realidad y luego la confianza en que su mente tomard la decisién correcta, 1 En algunos contextos la autoestima positiva incluye o, aun exi ge, las aportaciones de otras personas, aunque esto no implica ne- ccesariamente realizar encuestas de opinién. Alguien puede estar muy adelantado al resto de personas involucradas y ver cosas que ‘otros no pueden ver. Los hemanos Wright, por ejemplo, no se mo- lestaron en realizar una encuesta. El modelo del consenso en la toma de decisiones tiene su lugar, esiistisionarioxparalogranque secuniprendan’ suvrideas. Algu- nos no pueden explicar su visién de forma suficientemente clara ‘como para obtener el respaldo para la que podria ser la mejor de- cisién, Algunas ideas muy importantes se pierden debido a esta incapacidad. Un nivel alto de autoestima es de inestimable valor para que un innovador logre levar adelante el nuevo producto o técnica o mé- todo de gerencia. Acercarse a los demas con espiritu benevolente Las personas que estan felices de ser como son, que confian en si mismas y que estin en paz consigo mismas, son libres emocio- nal y psicolégicamente para acercarse a los demas con espiritu benevolente. Quienes tienen una autoestima positiva tienden a generar cooperacién, entusiasmo compartido y consenso més fé- cilmente que aquellos que dudan mas de si mismos, son inseguros y piensan en términos de un modelo de relaciones humanas de! tipo yo versus ti, ganador/perdedor. ‘Ya sea que se piense en las personas en el contexto de una orga- nizacién grande o de sus propias vidas, las que confian en si mis- ‘mas suelen tratar a los demas con mucho més respeto y benevolen- cia que aquellas que no lo hacen, con resultados predecibles en cuanto a su capacidad de lograr consenso. 92 La conviccién de que somos dignos de éxito Esto se relaciona también con el componente de dignidad de la autoestima, esa conviccién de que somos dignos y merecemos éxito, felicidad, confianza, respeto y amor. Toda la vida consiste en perseguir valores. Para ello tengo que valorar al tltimo beneficiario, es decir, a mi mismo. Si en mi inte- rior no me siento digno de éxito o felicidad, lo mas probable es que no los alcance y si lo hago seguramente no los disfrute. Soleinos ver a personas que trabajando se sienten capaces pero no dignas. En consecuencia, trabajan y trabajan y nunca se sienten con dere- cho a descansar y disfrutar de lo que han hecho. 3 Los que dudan de su eficacia y dignidad tienden a experimentar temor hacia otras personas y, en consecuencia, pueden Hegar a caer en relaciones de enemistad con ellas. Perciben a los dems como una amenaza. Si, por el contrario, confiamos en nuestra eficacia y dignidad. tendremos menos posibilidades de caer en una mentalidad del tipo ‘ayo versus tin, Es mas probable que formemos relaciones coope- rativas y que seamos habiles para crear consenso. Altos niveles de cooperacién social Allan S, Watterman, un psicélogo de Nueva Jersey, realiz6 una amplia revisién de toda la literatura que existe acerca de la coope- racién social y lo bien que se correlaciona con una individualidad muy desarrollada, Descubrié que los resultados eran muy positi- vos y no sdlo con respecto a la cooperacién social, sino también a las cualidades de benevolencia, generosidad y compasi6n: Las personas con autoestima alta no se ven impulsadas a ser superiores a los demis; no intentan probar su valor midiénidose segin un estindar comparativo. Se alegran de ser quienes son, no de ser mejores que otra persona. Ey Sentir que usted marca una diferencia En una ocasién trabajé con un equipo bastante improductivo ‘Una de las principales causas era que muchos de sus miembros no sentian que marcaban una diferencia, No pensaban que su contri- bucién fuera relevante. A medida que comenzaron a creer que su aporte valia la pena, cooperaron mas ficilmente unos con otros. Se trataba claramente de un tema de autoestima. Es un deseo humano basico ser visible para los demés, ser visto y apreciado por ser quien se es. Y es natural querer trabajar en un ambiente que nos apoye a nosotros, a nuestra autoestima, que nos haga ver que nuestro aporte puede marcar y marcaré una diferencia, ‘Como los ciclos econémicos cambian, hay perfodos en los cua- les las personas pierden su empleo o temen que lo perderdn. Los momentos dificiles pueden sobrellevarlos mejor aquellos cuya autoestima y sentimientos de competencia y autovalia no derivan exclusivamente de sus empleos. Competencia: seguridad interna RREHUS*Potcompatensieeht seguridad interna que deriva de confiar en sus propios procesos mentales, no de basar sus senti- mientos de autovalia en resultados que no siempre dependen slo de usted mismo, Hace ya tiempo imparti un seminario sobre la autoestima en Detroit cuando el gobierno se hallaba aiin en el proceso de decidir cl futuro de Chrysler. Habia varios ejecutivos de Chrysler en el curso y les dije: «He aqui lo que tiene de malo basar su autoestima cen el desempefio per se 0 en la capacidad de ganar dinero per se. Ahora mismo algunas personas a quienes ustedes ni siquiera co- nocen estan intentando decidir el futuro de Chrysler. ,Tiene senti- do que ustedes deseen poner su autoestima en manos de ellas? Si 94 la idea los ofende, bien; me ofende a mi también, No tiene ningéin sentido que su autoestima esté a merced de factores sobre los cua- les ustedes no ejercen absolutamente ningin control». Es un concepto muy dificil de comprender y aceptar para mu- cchas personas. Para los hombres de nuestra cultura y cada vez mis para las mujeres, tener dignidad esta ligado a tener un cheque de salario o un empleo donde usted hace algo bien. ‘Autoestima basada en nuestra capacidad de aprender Debido a que el conocimiento se esta expandiendo tan répida- mente, todos nosotros, para seguir siendo eficaces, necesitamos comprometernos con él aprendizaje permanente, Para muchos, ‘cambio significative de actitud. No es facil lograr un enfoque ms abstracto en el cual la autoestima no esté basada en Jo que tenemos 0 sabemos sino en nuestra capacidad de apren- der. Esto no s6lo es importante en periodos de inestabilidad eco- némica. Cualguier cambio impredecible pugde forzartariécesidad de aprender algo-nuevo y-unapersona deberia pensar en términos Ae sus propios procesos;-no dedas aptitudes per'se. Por ejemplo, es més titil preguntar: «;Cémo llegué de no saber nada de ingenieria (o ventas o ensefianza, etcétera) a saber bastan- tede ello? {Qué es lo que ya sé sobre aprender cosas desconocidas que pueda incorporar a este nuevo desafio®». Elevadas expectativas de éxito ‘Aquellos que se hallan en posicién de ensefiar o capacitar a otros, necesitan cultivar un aprecio a la capacidad de aprender. En el lugar de trabajo, los gerentes necesitan mantener expectativas de éxito elevadas en ellos mismos y en aquellos a quienes dirigen, 95 y al mismo tiempo crear un ambiente donde sea seguro cometer errores responsables. Es muy dificil crear un ambiente disciplina- do, audaz, no punitivo, No es una contradiccién exigir a las perso- nas elevados niveles de expectativa y al mismo tiempo permitirles ‘recer y aprender, pero para ponerlo en prictica se necesita pen- sarlo cuidadosamente. Se podria partir de la premisa de que tendran algo valioso ¢ in- teresante para decir. Y si usted no cree que la persona puede pensar y que su opinién vale, imagine cémo actuaria si si lo creyera. ¥ luego practique esos comportamientos entre treinta a sesenta {as y observe los cambios que se produzcan. Con respecto a establecer elevadas expectativas, al delegar tra- bajo, preginntele a la persona si puede cumplir la tarea, si desea hacerse responsable de realizarla, etcétera. Trabaje para lograr un acuerdo firme en cuanto a lo que se ha prometido. Y luego reviselo una vez que se haya realizado la tarea. Siempre que sea posible es deseable tener un equipo que esta- blezca sus propias expectativas y metas dentro del marco de los objetivos de la organizacién. Esto fortalece la experiencia de la autonomia personal. Y segin algunas investigaciones, cuando los grupos fijan sus propias metas tienden a ser més altas que cuando lo hacen otros. Los gerentes con autoestima positiva tienen menos dificultades para entregar el control del establecimiento de metas y otras ta- reas, Para poner en practica técnicas de administracién como ésta, probablemente valga la pena incorporar a un experto en autoesti- ‘ma que realmente pueda aclarar qué diferencias puede marcar el lugar de trabajo y por qué. Inicialmente, los seminarios de ensefianza de autoestima con- 96 tribuyen a integrar la informacién a las practicas diarias. Una vez que las personas comprendan cémo opera la autoestima en la psique humana, reconocerin oportunidades para su aplicacién que un extrafio no haria. Un gerente no es un psicoterapeuta ni se puede esperar que lo sea, Nunca he sostenido que deban serlo. Mas ain, los empleados no contratan la psicoterapia de su gerente aun cuando esté dis- puesto aello. Desafiar, estimular y ex Los estudios sugieren que obtenemos lo mejor de las personas cuando les pedimos algo mas de lo que piensan que pueden dar En otras palabras, les exigimos. Fijemos nuestras miras altas, pero no tanto que resulten paralizantes. Creo que el mismo principio puede aplicarse a nosotros mismos. Los gerentes necesitan esta blecer sus expectativas con respecto a ellos mismos con objetivi- dad, sin duda, pero lo suficientemente elevadas como para desa- fiar, estimular y exigir. Por cada individuo cuyo problema es que sobreestima sus capacidades, hay cien personas que subestiman las suyas. Si yo fuera el director ejecutivo de una empresa, pondria mu- cho énfasis en fomentar en mi mismo y en mis empleados el saber que las personas pueden hacer todo tipo de cosas que no creen que pueden hacer, La expectativa positiva puede ayudar a las personas a ver mas alla de sus propias limitaciones. Al formar a gerentes para que ayuden a sus empleados a crecer, les contaria historias y les daria todo tipo de ejemplos con la esperanza de avivar la crea- tividad del gerente. Esto no puede reducirse a un manual de entre- namiento. 97 olpnjsa soAew un vied sauolepuawiosay 86 “souisyur sonosou ‘aque sowrousigo anb uotoemndar v aqusueas so eUIRSOOINE e “sonosou v o1sad S01 too 2qua1s A esuaid euostad eno anb oj ou ‘souistut sox}0sou ojoedsax woo soumuas & sommesuiad anb o] sa ‘eutu} elousiodxa ‘vun auduiois so eumsoomne ey “eumsaomneopnasd sousupuot o]9s ‘rod ‘sopensope saqnyo soy sopos e 190au=0d K sous ‘saremndod 428 ‘0}1x9 1ouay sourazpod ‘pepLsBoqut 0d & ajqesuodsar * ‘squatosuoo euLog ap SOWAIA ou Ig “pepl[ear eI B ETE -opod ou ‘eanisod eumsaomne ef wroey sofere dey ou syuowsyeay YWUS3OLNY V1 VIDVH SOMAV AV ON El enfoque central de mi trabajo como psicélogo ha sido el es- tudio de Ia autoestima, su rol en la vida humana y, mas conereta- ‘mente, su impacto en el trabajo y el amor. Si el libro que ha leido le resulta de valor, le sugiero los siguientes libros para profundizar sobre el tema. La psicologia de la autoestima (Paidés). Esta es mi primera exploracién tedrica y revisin importante de toda la materia. A diferencia de mis libros posteriores, pone un fuerte énfasis en las bases filos6ficas de mi trabajo, Trata preguntas tales como: {Qué es la autoestima y por qué la necesitamos? {Por qué es la autoesti- ma una fuerza tan poderosa en la vida humana? {CuAl es el signi- ficado —y la justificacién— de la idea de libre albedrio? {Qué relacién existe entre razén y emocién? ,Cémo se relacionan la racionalidad y la integridad con la autoestima? {Qué valores mo- rales sustentan la autoestima y cuales la socavan? {Por qué es la autoestima la clave para la motivacién? Breaking Free. Esta es una investigacién sobre los origenes en la infancia de las autoimégenes negativas, dramatizadas a tra- vés de una serie de secuencias tomadas de mi prictica clinica. 101 01 “uaquasap as anb svo1uo9) st] too seyuouutrodxe & eyaut as souatnb v seinodosaiooisd ‘ouut ‘saiped @ & ojjouresap o1doad ns ua uefeqen anb seu ‘osiod e upiquiei eprSiup sq “wotode B] BIOeH pPEIUALIO SPUI MSO qousoyute sb1qo stu ta anb vyas0u09 Spur So UO'SMAsIp wis “PUN -soomne 0] sva19 exed seayjoadso serBayenso 10329} je xeuoroxodord 12 ousodosd 1g “(sopted) Duysaoynn Dy trA0fow owe outa vonggad eidosd ns wa sezian ap wey anb se 1e1i04 soy semadesaqooisd f sososase so] e sojrepurig e tunde {ure A upesiaar UofoIpe wISsa MOUY J YA MOU PUD 29S 7 roy44 22g 0] ofnan [9 uod Opeor|gnd awwameUFBLG YouNTUE wou “njon jap ofeqea fa yfdure oxqyt aise Canonsir-fias fo My OL -ypuos «tod oquarurtaar9 & uproeuno ‘ug}suaxdus0d up}aex0|dxe B] U9 BIOS opuefegen gise anb euosiod wun wjzezan apand owgo & seuoro =uio zee dus09 wed voruo9) tur ap SomuaUTEpUNY SO] EYES °SO1010 ciofo ap oagyy un $9 sg dng souunD J HOUMA 40H PIED ROL St “(2661) BYDAS P| BISEY EUMHSeO}NE | aagos oworuresuod tur ap woumnsar sofour {9 sq ‘oanonpoxd of -equn [a £ ewnysaoyne e] anu9 woroepos B BeIL"wdyno e] ap wIFO|OO -isd py eurtuexg “Bursaomne erdoud wnsanu ap jaatu [> reasye exed soynpe owtoo sozjosou 12084 sowepod anb A ouu un ap owsTu oun fap oanisod opnuss [ap o1weruIjoaxo Jo wera!Aqns O WEyLOU! qe anb soxnpe so] ap sauotooe se] exopdxg “uoroezyjenprArpu 2p sopenato spt stuaurentsaxfoad sudeya op spaen v aAanut 9s & BuO} -njona ‘oBims owsyur oun Jo oULg9 wzifeMry “ooytoadsa BUroN [9 Sy vijouresap £ waarsg-fjag fo

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