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CARTA A LOS CIUDADANOS XIV

ESTADO, NACIÓN Y CIUDADANO


Vs.
ESTADO TOTALITARIO

POR VENEZUELA YO SI VOY

Desde el inicio del presente gobierno en 1999 y en el transcurso de los últimos


años de su administración, como representante de “todos los ciudadanos
venezolanos”, hemos venido observando como las decisiones políticas violan nuestros
Derechos Constitucionales, en su gran mayoría configuran una complicada e inconsulta
conversión de la democracia liberal como modelo de gobierno, en otro de facto,
inaceptable y de contenido totalitario. Figura cimera y principal ejecutor es Hugo
Chávez Frías, que a su vez sigue las fallidas experiencias impuestas bajo represión en
naciones como la Unión Soviética, Corea del Norte, Cuba.1

Lo complicado de esta situación es que los ciudadanos no hemos contado con la


autónoma y constitucional actuación de todos los funcionarios que desde 1999 hasta el
presente han sido constituidos como nuestros representantes en los Poderes del
Estado2, instituciones normativas y autónomas de la administración del gobierno, así
como de otros entes administrativos tales como: el Sistema Jurídico en general, las
Fuerzas Armadas, Fuerzas Policiales y Cuerpos de Seguridad del Estado, que actuando
de manera ilegal, por lo anti constitucional, y por lo tanto ilegítima, se han
transformado en aparatos represivos, que actuando sobre los ciudadanos y
organizaciones, han aceptado, apoyado y favorecido sin la apropiada argumentación
jurídica-política, la flagrante violación del Preámbulo y los artículos: 1, 2 y 3 de nuestra
Carta Magna.

Es conveniente destacar que La Revolución Francesa constituye el punto de


partida hacia la modernidad del concepto de la ciudadanía, desde entonces se inicia un
lento proceso por la recuperación del contenido politológico de ser ciudadano, que lo
refiere como la capacidad de control de la vida pública, al tiempo que se
establece el principio de igualdad que la hacía potencialmente abierta a
todos. La ciudadanía fue vista en aquel momento no sólo como un estatus del que
disfrutar, sino como un modo de vinculación y compromiso. Desde allí, la

1
Derecho constitucional: rama del Derecho público cuyo estudio incluye el análisis de las leyes fundamentales que
definen un Estado. De esta manera, es materia de estudio todo lo relativo a la forma de Estado, forma de gobierno,
derechos fundamentales y la regulación de los poderes públicos, incluyendo tanto las relaciones entre poderes públicos,
como las relaciones entre los poderes públicos y ciudadanos.

2
Existe la tendencia de interpretar como sinónimos Estado, Nación y País. Desde el punto de vista de la organización
social, para existir como Nación o entidad política independiente y soberana, es requisito “sine qua non” que la voluntad
popular en ejercicio de su soberanía, decida organizarse en un determinado territorio, en este caso llamado Venezuela,
(País) con una estructura institucional denominada Estado y, finalmente, acogerse a la forma republicana de gobierno
a objeto de vivir en libertad, paz, trabajar y propiciar su crecimiento. Por ello es importante identificar a la Nación
como la primera organización política en Venezuela cuyos afiliados somos todos sus ciudadanos.

1
tradición republicana toma para sí el concepto político de ciudadano como principio
igualitario de pertenencia de la comunidad política y le convierte en actor de la vida
pública.

La Constitución venezolana de 1999 funda el contenido político que correlaciona


el concepto de “Ciudadano” con el “Estado y La Nación”. Contenidos que sitúan al
residente como centro o punto focal de lo político en Venezuela, que va más allá de lo
que la misma Constitución define en los artículos del 39 al 42, pero que desde el
preámbulo queda interpretado que es el “ciudadano” el actor político por excelencia.

Con el fin supremo de refundar la República para establecer una sociedad democrática,
participativa y protagónica, multiétnica y pluricultural en un Estado de justicia, federal y
descentralizado, que consolide los valores de la libertad, la independencia, la paz, la solidaridad,
el bien común, la integridad territorial, la convivencia y el imperio de la ley para esta y las
futuras generaciones; asegure el derecho a la vida, al trabajo, a la cultura, a la
educación, a la justicia social y a la igualdad sin discriminación ni subordinación
alguna; promueva la cooperación pacífica entre las naciones e impulse y consolide la
integración latinoamericana de acuerdo con el principio de no intervención y autodeterminación
de los pueblos, la garantía universal e indivisible de los derechos humanos, la democratización
de la sociedad internacional, el desarme nuclear, el equilibrio ecológico y los bienes jurídicos
ambientales como patrimonio común e irrenunciable de la humanidad. En ejercicio de su
poder originario 3representado por la Asamblea Nacional Constituyente mediante el voto libre
y en referendo democrático.

Artículo 1. La República Bolivariana de Venezuela es irrevocablemente libre e independiente


y fundamenta su patrimonio moral y sus valores de libertad, igualdad, justicia y paz
internacional, en la doctrina de Simón Bolívar, el Libertador. Son derechos irrenunciables
de la Nación la independencia, la libertad, la soberanía, la inmunidad, la integridad
territorial y la autodeterminación nacional.

Artículo 2.- Venezuela se constituye en un Estado democrático y social de Derecho y


de Justicia, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico y de su
actuación, la vida, la libertad, la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia, la
responsabilidad social y en general, la preeminencia de los derechos humanos, la
ética y el pluralismo político.

Artículo 3.- El Estado tiene como fines esenciales de defensa y el desarrollo de la


persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático de la voluntad popular,
la construcción de una sociedad justa y amante de la paz, la promoción de la
prosperidad y bienestar del pueblo y la garantía del cumplimiento de los principios,
derechos y deberes consagrados en esta Constitución.

Como es conocido, tanto en la República de Venezuela, por sus ciudadanos


como en el extranjero, el ejercicio del gobierno de Hugo Chávez es referido y calificado
como totalitario y al mismo tiempo ilegítimo.

Esta degradación no puede atribuírsele a algún antojo o reacción adversa como


suele ocurrir en aquellas democracias donde existe el ejercicio total de las libertades
ciudadanas y por consiguiente la libre expresión de las ideas como parte del juego y
ejercicio ciudadano, que además, pueda dar lugar a otros calificativos “sui generis”. En
el caso venezolano, luego de 11 años de gobierno, no existe perplejidad alguna de la
ausencia de democracia, prueba de ello la tenemos por represión coactiva en todas las
decisiones del gobierno y la utilización de grupos armados como amenaza colectiva o

3
Poder Originario, reside soberanamente en el pueblo, (ciudadano) del cual es poseedor, intransferible o
jurídicamente no manipulado; con fuerza, valor y decisión, originaria, para rechazar cualquier acto irrito, imposición o
decisión política del gobernante que por su trascendencia e importancia puedan, estas decisiones, menoscabar las
libertades, cultura y tradiciones en la Nación venezolana. Por lo tanto, todo acto o decisión gubernamental que no sea
sometido previamente a consideración, consulta y aprobación mediante referendo, será considerado irrito y por
consiguiente ilegítimo, vale decir, de no obediencia u observancia por los ciudadanos.

2
selectiva contra los ciudadanos en un contexto político caracterizado por la
desaparición del Estado de Derecho.

Todo lo antes expresado configura una situación extremadamente delicada y de


elevado contenido autoritario. „NO‟ existe libertad de ideas y expresión, es por lo tanto
necesario darle la significancia de gobierno “ilegítimo” frente a lo que pueda
argumentarse como “legal” y anticonstitucional en su desempeño en personalización
de actividades que podrían tipificarse como delitos de “traición a la patria” unos y
otros, como de “lesa humanidad”. (Léase Estatuto de Roma de la Corte Penal
Internacional)

Como ejemplo debe razonarse la transformación de la Institución de la Defensa


(FAN) en un cuerpo ineficiente, con el delicado lastre de las milicias populares, la
presencia de cuerpos armados extranjeros y su desarticulación operativa y operacional.

La ideologización e introducción de la doctrina militar cubana con el „remoquete‟


de nuevo pensamiento y doctrina militar, que no es otra cosa, que la entrega de la
Nación al poder político de Cuba4 y la inconstitucional presencia en Venezuela de las
milicias cubanas5.

Esto, no ha sido debidamente analizado e informado al ciudadano, se esconde,


para no alarmar y sigamos ignorando una grave situación de indefensión e
inseguridad de toda la Nación, que también, nos podría converger en conflictos
armados internos y regionales; basta considerar la reciente creación del Movimiento
Continental Bolivariano, (MCB) que agrupa, equipa y entrena a integrantes de los
grupos radicales del continente. Cómo debemos interpretar esto los ciudadanos
venezolanos? y Cuál podría ser la respuesta que están “obligados“ a dar
todos los funcionarios que integran los poderes del Estado y muy
especialmente, la alta jerarquía militar?

Estas citas nos demuestran la responsabilidad que recae sobre el presidente


Hugo Chávez Frías y en los funcionarios ejecutivos de los poderes del Estado y por si
fuera poco, por la ineficiente, improcedente y descompuesta administración de los
recursos del Estado, no solo en el aspecto financiero, también en el ámbito
institucional, económico, cultural social, militar, de seguridad, (pública, ciudadana y
defensa) en lo atinente a la salud, higiene ambiental y sin ser lo último en el respeto a
la constitución y al ciudadano.

Art.-25. Todo acto dictado en ejercicio del Poder Público que viole o menoscabe los
deberes garantizados por esta Constitución y la ley es nulo, y los funcionarios
públicos y funcionarias públicas que lo ordenen o ejecuten incurren en
responsabilidad penal, civil y administrativa, según los casos, sin que les sirva de
excusa órdenes superiores.

Los recientes acontecimientos represivos que han ocurrido, como son: la


detención del Dr. Oswaldo Álvarez Paz, la persecución y amenazas para con el Dr.

4
Fidel manda en las FAN (Elizabeth Burgos; Revista Zeta; N° 1702, del 17 al 23 de abril de 2009. Al relatarnos la
influencia de Fidel Castro Ruz durante los eventos del 11 de abril del 2002 a impartirle ordenes a miembros de la alta
jerarquía militar en Venezuela (pocos comentados y suficientemente explicados por esos militares).
5
Es de todos conocidos, al menos, en los centros políticos e inteligencia de América, en la Unión Europea y en las
Fuerzas Armadas del continente, la acción desestabilizadora de Fidel Castro y sus Fuerzas Milicianas Expedicionarias que
en la década de los 80 y 90 contribuyó con hombres, equipos, participación y dirección política a las guerras intestinas
en el Congo, Mozambique y el Zhaire, con un elevado número de desaparecidos y heridos, especialmente en la
población civil mujeres y niños.

3
Guillermo Zuloaga, la arbitraria violación de la inmunidad parlamentaria del Diputado a
la Asamblea Nacional Wilmer Azuaje, la persecución a periodistas y demás
individualidades, el cierre de importantes medios de comunicación, las violaciones e
invasión de la propiedad privada y las continuas amenazas del presidente a los
ciudadanos venezolanos que en ejercicio de su poder ciudadano y de la ciudadanía,
expresen acusen públicamente al presidente en ejercicio, a sus funcionarios
rechazando y criticando y calificando como ilegítimo.

Debemos ubicarnos como ciudadanos en la justa y real amenaza, además,


definir la “organización colectiva” que debemos adoptar para superar esta absurda
condición de continuar atomizados y fragmentados, y al mismo tiempo, preservarnos
de ser arrastrados anárquicamente por la desorganización a otros estadios.

Este problema y amenaza NO se resolverá, como ruta preliminar, asistiendo


masivamente a las elecciones parlamentarias convocadas para el próximo 26 de
septiembre del año en curso, por ello, entiéndase que la movilización ciudadana
debe ser masiva. Tenemos la experiencia de no tener nada organizado, estamos
huérfanos de dirección política, estrategia y mucho menos de alternativas para las
contingencias en lo electoral y en otras áreas, vitales puedan presentarse. Somos
reiterados en las grandes incoherencias y diferencias de “objetivos”, como por ejemplo,
las que aparecen cada vez que convergemos o somos convidados a un evento
electoral.

Esta vez no podemos soslayar lo que acontece desde octubre del 2009 en
cuanto a la selección de los posibles candidatos a “representarnos” en la Asamblea
Nacional, reconocemos los esfuerzos y consensos, pero no entendemos lo cachazudo y
oscurecidísimo, luego de 11 años o más de “tele política”, no tengamos los ciudadanos
claro de quiénes se merecen la confianza y poseen la credibilidad para “emocionarnos
de nuevo”. Se impone racionalmente una definitiva y frontal posición de la gran
mayoría de los ciudadanos que esperábamos de ellos una conducta afín con el
compromiso que nos reclama la Nación. No es osado considerar, que escribimos
nuestra historia en tiempo presente.

Debemos, por lo tanto y por ahora, obviar la manera como los diferentes
actores y su filiación política han manejado en la oposición los 10 procesos de
participación ciudadana anteriores, debe funcionar con fuerza, volumen y
determinación el voto castigo en ambas direcciones, se debe imponer
definitivamente el concepto de la teoría de juegos “ganar–ganar”. La voluntad
ciudadana debe imponer su libre albedrío y determinación para rechazar
contundentemente la conversión de la Nación venezolana en un Estado socialista,
además de ello, romper o resolver el dilema ancestral en Venezuela donde ha
privado el interés individual o de grupos por encima de los intereses
ciudadanos… Es hora de asumir nuestra tarea.

Una de las debilidades y vulnerabilidades que siempre ha tenido la democracia


como modelo de gobierno es la ausencia del ejercicio de la ciudadanía, algunos nos
hemos conformado solo con asistir a votar, otros ni siquiera cumplen con este
obligante y periódico ejercicio ciudadano, hemos dejado este primerísimo deber
ciudadano en manos de otras formas de organización, que sin ser exagerado han
desplazado al Estado, por ello y por la ausencia del ciudadano se nos ha inhibido y
excluido de las grandes decisiones políticas en Venezuela, también hemos permitido
que los gobiernos actúen sin respetar los compromisos de campañas electorales

4
olvidando inexplicablemente las ofertas, que mediante coherentes y socialmente
legisladas deban presentarnos como políticas públicas, para responder a las demandas
colectivas, no por colores, por un mejor país, mejores ciudadanos, mejor educación,
salud, trabajo y seguridad etc.etc.

YO SI VOY, encierra una decisión, constituye una actitud, expresa


determinación, además, un aporte concreto definido para organizarnos como
ciudadanos originarios, poseedores de la fuerza y valor político sustantivo que nos
otorga la Nación Venezolana, además, por considerar que solo organizados podremos
defendernos de los abusos e impunidad a la que nos someten desde el poder, también
para marcar un hito de LIBERTAD y ORDEN en nuestra historia contemporánea.

No solamente la cuestión política y la grave situación que transitamos


(desconocimiento de la voluntad popular, manipulación electoral, amenazas, ofensas,
impunidad, violación de los derechos humanos, inseguridad, ineficiencia de servicios,
salud, higiene, milicias cubanas, robo, secuestro, invasiones, persecución política, etc.)
nos obliga a organizarnos, también debemos como ciudadanos estar en capacidad de
responder a cualquier contingencia, calamidades públicas, movimientos telúricos,
suspensión arbitraria o accidental de los sistemas de comunicaciones públicas y
privadas (radio, TV, internet, telefonía fija y celular, suspensión arbitraria o accidental
de los servicios públicos.6 (Apagones eléctricos, inundaciones, derrumbes, deslaves
(recuerden 15 dic 1999)

El despertar de Venezuela y su resguardo pasa indefectiblemente por la


organización ciudadana, que hasta el presente ha sido vaciada de su contenido, para
ser solo figuras y números estadísticos, hemos respondido cuando hemos sido
llamados a legitimar gobernantes, pero contrariamente, hemos hecho mutis frente a
las ambiciones grupales y personales, hemos confiado en los funcionarios de los
Poderes del Estado y también favorecimos con nuestra confianza y respeto a las
Fuerzas Armadas como institución del Estado para nuestra defensa, en fin, hemos
subsumido nuestro valor ciudadano a otros intereses, sin pedir nada a cambio, solo
trabajo, respeto, honestidad, administración eficiente de del Poder y del Gobierno, y
seguridad. No siempre lo hemos obtenido, más aún, como dijo „El Libertador‟ Simón
Bolívar… Han abusado de nuestra credibilidad…

Ninguna Nación podrá ser libre, soberana, segura y productiva, si sus


ciudadanos, de manera organizada, no demandan a su gobernante el respeto a la
Constitución y a las Leyes que de ella soberanamente se emanen, ademas, el respeto
de las instancias sociales y otras ofertas (públicas o privadas) por las cuales fueron
favorecidos por la voluntad popular mediante el ejercicio ciudadano del voto… Por esta
incontestable razón ES APREMIANTE organizarnos para salvaguardarnos del
gobierno totalitario.

Hemos, votado, elegido, marchado, exigido, demandado, denunciado, apoyado,


también hemos sido reprimidos, secuestrados, asesinados, ofendidos, desvalijados y
amenazados…

6
Sin pretender ser alarmista, es necesario atender con la delicadeza y preocupación que amerita el tema
de nuestra Seguridad y Defensa ante la nueva e importada arquitectura “geopolítica y geoestratégica” que
mediante alianzas, convenios secretos, materiales estratégicos, uranio, gas, petróleo, militares y de
seguridad adelanta el gobierno, de manera “secretísima”, a espaldas de la Nación, entre otros con Cuba,
Rusia, Irán, Bielorusia e Irak.

5
Hemos sido renuentes para asumir nuestra responsabilidad Ciudadana, no
tenemos organización, carecemos de estrategia y líneas de acción, esto nos hace
vulnerables e indefensos en la preservación de nuestra libertad, hacer valer nuestros
derechos Ciudadanos7 y para responder a cualquier contingencia. Ya es hora de…

ORGANIZARNOS COMO CIUDADANOS…


ES NUESTRA PRIORIDAD…
DESPIERTA, DECÍDETE Y ACTÍVATE…
MAÑANA SERÁ TARDE…

POR VENEZUELA
YO SI VOY

UNA INICIATIVA PARA LA


ORGANIZACIÓN CIUDADANA CON FE,
ESPERANZA, COMPROMISO Y DETERMINACIÓN

Colorado; 3 de abril del 2010


Mario Iván Carratú Molina.
Correos: (micm45@gmail.com), (marioivan09@gmail.com)

Twister: @MICarratu.

7
La situación venezolana se caracteriza, entre otras, por impunidad desde el Poder Presidencial, ausencia del
Estado de derecho, sistemática violación de los Derechos Humanos y aquiescencia en la ONU y OEA. Esto debe ser
analizada tomando en consideración todo lo establecido, declarado y comprometido a cumplir en: La Declaración
de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, (París, 26 ago 1789), Declaración Universal de los Derechos
Humanos, (París 10 dic 1948, Carta de la ONU, Carta de la OEA, Carta Democrática y Constitución República de
Venezuela. (15 dic 1999, aprobada en referendo) Pero mucho más importante y urgente es que sea reconocida
por todos quienes hacemos vida en la República de Venezuela.

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