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II.
El Seor Jess prometi venir y aunque sabemos que l est con nosotros siempre, lo
necesitamos dentro de nosotros, nuestro corazones estn secos sin su presencia, esa es una
necesidad muy grande y no podemos conformarnos con lo poquito que tenemos en casa,
acabrnoslo y dejarnos morir (1 Reyes 17:12), al igual que las viudas de ambas historias,
necesitamos un milagro.
Dios quiere derramar en nosotros el aceite de su Espritu Santo, pero necesitamos vaciar
nuestro corazn. Cuando una vasija est llena no se le puede echar nada ms porque se
derrama. Tenemos que entregarle a Dios lo que tenemos para que l pueda multiplicarlo,
pero a veces tenemos miedo porque decimos: esto es todo lo que tengo, si yo lo entrego me
quedar sin nada, sin embargo Dios no quiere que entreguemos lo que tenemos para dejar
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nos sin nada sino para mostrarle as nuestra fe en l y nuestro obediente amor y cuando
nosotros lo hagamos l podr derramar su Santo Espritu en nuestra vasija vaca.
Dios es un ser que bendice de manera sobreabundante, no se trata de un dios tacao. l
prometi derramar su Espritu Santo sobre TODA carne (Hechos 2:17) y ese aceite no cesar
hasta que ya no haya ms vasijas vacas para llenar.
De qu est llena tu vasija?
Hay en ella algn resentimiento que no has dejado que Dios sane?
Hay en ella pecados ocultos?
Hay en ella cosas que te producen tanto placer que aunque sabes ofenden a Dios no te
atreves a renunciar a ellas?
Hay vanidad?
Hay orgullo?
Hay ms amor por alguien o por algo ms que por Dios?
Conclusin
Te invito a que medites ahora un poco qu hay en tu vasija?
Eso que hay ah necesitas entregarlo a Dios, si es algo que a l no le gusta, deja que te
limpie, renuncia a eso, si se trata de algo que es a lo nico que te aferras, renuncia tambin a
eso y Dios lo multiplicar, cuando tu vasija est vaca y seca l derramar su espritu en ella y
har que se llene hasta rebosar y una vez que esto suceda necesitars ir y conseguir ms
vasijas vacas para que el aceite se siga derramando.
En nuestra ciudad hay millones de personas con vasijas llenas de resentimientos, de
amargura, de pecados y Dios quiere que vayamos y les pidamos a esas personas sus vasijas
para que nuestro amado Alfarero las lave y las moldee para que estn listas para que el
aceite del Espritu de Dios las llene