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Nº11 -- Año
Año 2/
2/ Abril
Abril 2010
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quier contexto, el diamante será más escaso precio y costo, tiene implicaciones monu-
y valioso que el pan, más abundantemente mentales para la comprensión de los fenó-
disponible … pero no siempre!. menos “micro” y “macro” de la Economía.
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Observando la Gran Depresión, Lord Ke- ta y demanda en todas las industrias. A Hoover/F.D.R.) aún no habían creado
ynes plantea que es la economía libre lo que sí se refiere la Ley de Say es al un recetario intervencionista basado
(de mercado, capitalista, etc) la que es hecho de que la producción agregada en un diagnóstico errado, el mercado
capaz de causarse a sí misma crisis por genera al mismo tiempo (al crear ri- había hecho su trabajo. Los malos ban-
un conjunto de vicios propios del sector queza pero también generar ganancias cos quebraron o fueron absorbidos, las
privado. En su visión, la trampa de liqui- e interés) una capacidad de demanda malas empresas quebraron y liberaron
dez (no hay dinero para gastar y “mo- igual y equivalente. Es decir que la ofer- recursos humanos, terrenos y maquina-
ver” la economía) era el resultado de un ta global es igual a la demanda global. ria para usos que sí creen riqueza para la
ahorro “excesivo”; la demanda agregada Puede haber sobre o sub producción en sociedad. Este proceso de saneamiento,
(total) de una economía podía ser insu- una empresa o industria, pero ese error de liberación de recursos es connatural
ficiente para mantener el pleno empleo; genera oportunidades y libera poder ad- al mercado. La posibilidad de salvatajes
o en caso de crisis, era preferible hacer quisitivo equivalente en las demás, por estatales genera riesgo moral a lo largo
uso de la inflación monetaria en vez de lo cual el todo siempre está balanceado. de todo el sistema económico y su con-
permitir que los salarios bajen natural- En el edificio conceptual keynesiano, los creción genera incentivos perversos al
mente, y demás diagnósticos y recetas mercados (el sector privado) no se bas- premiar a ineficientes a costa del poder
fiscales y monetarias del economista tan a sí mismos para demandar el total adquisitivo de los más prudentes y efi-
“moderno”. Utilizar el gasto público aun- de lo producido cada cierto tiempo. Es cientes.
que la deuda se dispare y utilizar la in- decir, que de vez en cuando habría -por
flación aunque los actores se acostum- una serie de factores que no es necesario Pero más fundamentalmente, la Gran
bren y necesiten nuevas dosis mayores detallar aquí5- un efecto de subconsumo Depresión de los 1930’s así como simi-
a dicho estimulante, son herencias cla- o sobreproducción. En ese momento, lares pánicos7 (se vuelven depresiones
ramente keynesianas, y se proponen re- los capitalistas detendrán su deman- gracias a la aparición de bancos cen-
activar una economía o actuar contra- da de factores (tierra, trabajo y capital) trales en cada país) fue causada por un
cíclicamente (supuestamente) cuando dejando en el desempleo a millones de incremento del crédito por encima del
los (supuestamente a su vez) inevitables trabajadores y subutilizandose los re- ahorro disponible en la sociedad, me-
ciclos económicos nos coloquen en una cursos de toda índole en un territorio. diante un descalce de plazos entre de-
recesión o depresión. Estas crisis podían ser incluso financie- pósitos/ahorros y crédito disponible. Es
ras en su origen (los “espíritus animales” decir que a un problema causado por
de los especuladores) y era necesario malos comportamientos privados (y
El núcleo del keynesianismo proviene de la no- “actuar” desde el Estado porque si bien falta de supervisión adecuada) multipli-
ción de Keynes de que había refutado exitosa- en el mediano o largo plazo el mercado cados o directamente generados por la
mente la llamada Ley de Say de los mercados. se re-ajustaría solo, “en el largo plazo to- inyección monetaria desde los bancos
Nada está más lejos de la verdad. dos estaremos muertos”, en palabras de centrales, Keynes nos ofrecía una cura
Keynes. Incluso abrir zanjas y volverlas a peor que la enfermedad. La inyección
cubrir era una labor preferible al desem- de circulante para “salvar” a la economía
Keynes no llega a conocer la Ley de Say pleo: desde entonces esa muy keynesia- de una recesión en realidad posterga y
sino en una forma caricaturizada a tra- na fijación con el “pleno empleo” como profundiza la resolución de problemas
vés de sus mentores en Cambridge (A.C. un fin en sí mismo. Nuevamente es la causados por intervenciones previas
Pigou, A. Marshall y otros). Nombrada mala comprensión de la esencial Ley de del Estado sobre la economía. Buscar
en honor del economista francés Jean Say lo que lleva a estas conclusiones. que los actores económicos “salgan a
Baptiste Say y originalmente expresada gastar” con la esperanza de que la de-
por James Mill (mentor de Adam Smith Pero siempre hay que recordar, como se- manda incrementada genere oferta, es
y padre de J.S. Mill), puede ser resumi- ñaló Henry Hazlitt, que un buen econo- una posición miope pues dicha deman-
da en su forma ordinaria como “la oferta mista es aquél que se fija en el efecto de da (consumo presente) vendrá a costa
crea su propia demanda”, y es sin lugar una medida estatal o acontecimiento no del ahorro, inversión y consumo futuros.
a dudas la ley macroeconómica más im- sólo para un grupo sino para todos los Además, las distorsiones en el sistema
portante4 que se puede encontrar. Como grupos y no sólo en el corto sino tam- de precios causan severas desconexio-
podemos advertir enseguida, dicha ley bién en el largo plazo. nes en el proceso de imputación provo-
no puede referirse a un productor o per- cándose -ahí sí- sobreproducción y sub-
sona en particular en el sentido de que Resulta que una Gran Depresión pudo consumo. Poner la carreta de la deman-
“todo lo que uno produzca, se venderá ocurrir 10 años antes6, pero precisa- da por delante del caballo de la oferta y
en el mercado”. Existen los errores em- mente porque Keynes (o sus coidearios confundir problemas con soluciones no
presariales y desde luego existen cons- puede traer sino consecuencias gravísi-
tantes desajustes y re-ajustes entre ofer- 5 Se recomienda la lectura de The Failue of the ‘New’
Economics de Henry Hazlitt, una refutación punto a punto
mas para cualquier país.
y en ocasiónes párrafo a párrafo a la Teoria General de J.M.
4 Para una exposición correcta de la Ley de Say, vease el Keynes
capítulo 13 de Capitalism de George Reisman, titulado 6 Vease “The Forgotten Depression of 1920”, por Thomas 7 Vease “The Panic of 1819” de Murray N. Rothbard Ph.D.
“Productionism, Say’s Law and Unemployment”. Woods Jr. Ph.D., disponible en http://mises.org/daily/3788 Disponible en http://mises.org/rothbard/panic1819.pdf
Conclusiones
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SECCION PARA ESTUDIANTES
La globalización:
un mundo complejo con más ganadores
Priscila Vera - pris_vj919@hotmail.com
Estudiante de la USFQ
FECHAS Y HORAS:
Jueves 22 y Viernes 23 de Abril de 4 a 6.30
Sábado 24 de Abril de 9 a 1
PROFESORES:
Dr. Wilson Pérez
Dra. María Belén Freile
Miembros del Instituto de Economía de la USFQ