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BREVE RESEÑA DEL AUTOR:

NOMBRE: Luis Gildardo Rivera Galindo.

Nacido en Medellín, barrio Arrabal en el año de 1946.

Estudios primarios: Escuela República de Chile.

Estudios secundarios: Liceo Antioqueño. Y Academia Militar


José María Córdoba.

Estudios Universitarios: Universidad de Antioquia. Licenciado


En ciencias de la Educación.

Estudios de Postgrado: MAGISTER OF SCIENCE ( NOVA


UNIVERSITY, (Estados Unidos de América).

EXPERIENCIA ACADEMICA:

 Director del Departamento de Ciencias Sociales. INEM


Felipe Pérez. 1972.1974
 Profesor de tiempo completo dedicación exclusiva.
Universidad Tecnológica de Pereira. Desde 1975 hasta la
fecha. CATEGORIA: PROFESOR TITULAR.
3

 Director de la escuela de Ciencias Sociales de la


Universidad Tecnológica de Pereira. Durante 18 años.
 Profesor De la Escuela de Administración Pública ESAP en
Programas de Formación Universitaria en Administración
Regional y Urbana.
 Profesor En la Especialización: Pedagogía de la cultura
cívica de la Universidad Autónoma de Colombia. Santafé
de Bogotá.
 par académico del ministerio de educación Nacional.
Colombia.
 Profesor Diplomado en Formación ciudadana y liderazgo.
(Convenio alcaldía de la ciudad de Pereira y Universidad
tecnológica de Pereira).

 Autor de los estándares curriculares Ciencias Sociales:


MEN.
 Par evaluador de Conciencias. Desde 21/11/2002 hasta
hoy.
 Par evaluador del ministerio de educación nacional. Hasta
hoy.
 Evaluador del programa ONDAS. Universidad externado de
Colombia.

EXPERIENCIA INTERNACIONAL.

Profesor invitado: UNIVERSIDAD CASTILLA LA MANCHA.


(España).
Profesor invitado: UNIVERSIDAD DE GRANADA. (España).
Profesor invitado: UNIVERSIDAD SAN JAUME I. (España).
Profesor invitado: UNIVERSIDAD DE LA HABANA (Cuba).
Profesor invitado: UNIVERSIDAD DE VARSOVIA (Polonia).
Profesor Invitado: UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES. (Argentina)
4

CONGRESOS INTERNACIONALES:

50 Congreso Mundial de Américanistas: Varsovia (Polonia) julio


7 al 14 de 2000. PONENTE y director del simposio soc13.

Primer CONGRESO INTERNACIONAL SOBRE HISTORIA DE LAS


UNIVERSIDADES EN América y Europa. 10-11-12 de junio 2003.
Córdoba –Argentina. PONENTE.

LIBROS PUBLICADOS.

 Estudios Afrocolombianos y educación intercultural. Libro


I. Ed Papiro. Pereira . 2002. ISBN: 958-9249-66-3

 Estudios Afrocolombianos y educación intercultural.


Nación . Libro II .Ed Papiro. Pereira. 2002. ISBN: 958-9249-
72-8.
 Etnohistoria de la música del Caribe. ¿Afrocubanidad o
salsa?. 1995.
 Axiología y vicariato en Medellín. Ed UTP. 1991.
 Historia de La Música salsa: De las raíces al son. Ed Utp.
Versión en red.
 La historia de la coca en Colombia. Revista Ensayos.
España.
 Las culturas yoruba lucumies y su influencia en la música
afrocaribeña - Universidad Castilla la Mancha España.
 Historia de los desplazados en Colombia. Universidad de
Rioja España.
 Artículos varios para revistas especializadas a nivel
nacional e internacional.
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CONTENIDO:

PAGINA
Breve reseña del autor…………………………………. 2
a manera de prologo…………………………………….. 5

Capítulo uno:
Ubicación histórico –geográfica
Del barrio arrabal

LÍMITES Y PREDIOS DEL BARRIO ARRABAL…...…9

CAPITULO DOS:
LAS FAMILIAS DEL BARRIO ARRABAL

2.1 FAMILIA MILAN CARDENAS…………………………..21


2.2 FAMILIA DE MARTHA PEORRA………………………23
2.3 AGRIPINA LONDOÑO…………………………………….23
2.4 LA FAMILIA MONTOYA RESTREPO………………..24
2.5 LA TIENDA DE DON RUBEN……………………………26
2.6 LA CASA DE LA MONA VELEZ…………………………27
2.7 LA FAMILIA DEL MONO TAMAYO…………………….27
2.8 LA CASA DONDE VIVIÓ DOÑA QUINA. …………….28
2.9 LA FAMILIA DE CAROLA GOMEZ……………………..29
2.10 LA FAMILIA DE LOS CASTRILLONES…….………….30
2.11 LA CASA DE LOS PARIAS……………………………….30
2.12 LA FAMILIA GALINDO CANO………………………………32
2.13 FAMILIA GOMEZ GOMEZ. Y GOMEZ RAMIREZ……..37
2.14 LA FAMILIA DE QUICA CASTRILLON………………….39
2.15 EL ARCA DE NOE………………………………………………40
2.16 LA CASA DE ARGEMIRO…………………………………….40
2.17 LOS GAGOS……………………………………………………..40
2.18 LA CASA DE OTILIA LA GORDA………………………….41
6

2.19 COLORETE Y LA GORDA………………..………………….42


2.20 LA FAMILIA DE RUBEN DURANGO……………………..42
2.21 LA FAMILIA AGUDELO……………………………………...44
2.22 LA FAMILIA ALVAREZ……………………………………….46
2.23 FAMILIA CASTRILLON PAREJA……………………….…47
2.24 LA FAMILIA DE LA GORDA NELLY……………………..48
2.25 OTRAS FAMILIAS PERDIDAS EN EL RECUERDO…..49
2.26 LA FAMILIA CASTAÑO………………………………………..49
2.27 LA FAMILIA DE LOS CORDOBA……………………………50
2.28 FAMILIA AVENDAÑO. LOS CACHONES………………..52
2.29 LA CASA DE MAXIMO EL VOLQUETERO………………53
2.30 LA FAMILIA DE TIRAJURA…………………………………..53
2.31 LA FAMILIA DE LISANDRO Y LA
ESQUINADE CAMEL……………………………………………53
2.32 LA FAMILIA ARCILA Y LA CASA DE ÑINGAS………….54
2.33 OTRAS FAMILIAS DEL BARRIO……………………………54
2.34 LA FAMILIA DE LOS “CION”………………………………..55
2.35 LAS CASAS Y FAMILAS DE LA CARRERA 65…………56
2.36 LAS FAMILIAS DE LA CARRERA 64 LADO DERECHO
DEL SECTOR…………………………………………….………..58
2.37 EL GRUPO FAMILIAR DE LOS GALEANO…………….…60
2.38 LOS VARGAS ……………………………………………………61
2.39 LA CASA DE MISAELITO…………………………………….62
2.40 FAMILIA PIEDRAHITA CASTRILLON……………….…..64
2.41 OTRAS FAMILIAS Y PERSONAJES………………………65

CAPITULO TRES:

CARACTERIZACION DE SUS HABITANTES Y VIDA


COTIDIANA

3.1 PROCEDENCIA DE SUS HABITANTES…………………………..67


3.2 COMO SE VIVIA AYER:……………………………………………….68
3.3 LA NIÑEZ: JUEGOS Y DIVERSIONES……………………………69
3.4 LA EDUCACION………………………………………………………….73
3.5 LAS COSTUMBRES RELIGIOSAS………………………………….74
7

3.6 EL CENTRO CIVICO LOS LIBERTADORES……………………..76


3.7 LOS DICIEMBRES……………………………………………………….78
3.8 LOS BARES………………………………………………………………..81
3.9 PERSONAJES CELEBRES…………………………………………….83
3.10 PROFESIONALES DEL BARRIO ARRABAL……………… ……84

CAPITULO CUATRO:

OTROS RECUERDOS DEL QUEHACER COTIDIANO EN


EL BARRIO ARRABAL…………………………………..…86

CAPITULO CINCO:

LA VIRTUAL DESAPARICIÓN DEL BARRIO…......104

REFLEXIONES FINALES…………………………………..112
8

AGRADECIMIENTOS ESPECIALES A:

MARLENE JARAMILLO: La hija de Maruja y Pacho Gómez, la


cual desde la lejana Bahrein, se motivó con este proyecto y su
colaboración personal fue innegable. Soy testigo de su esfuerzo
porque otras personas se vincularan a enriquecer este libro y
con ellas perdió el tiempo. Muchas fotos de la familia Gómez
Arbeláez son su aporte.

LUIS FERNANDO ALVAREZ C: “PICA” por su interés y sus


palabras amigables y amables con este proyecto.

LUIS FERNADO TRUJILLO: Quien fuera el descubridor en


Internet del borrador sobre la historia de nuestro barrio,
convirtiéndose inmediatamente en su divulgador.

RUBEN DARIO BEDOYA: por el reconocimiento y las


palabras amables para con el escritor, y por sus aportes a la
ampliación del presente libro.

A todos ellos muchas gracias.


9

A MANERA DE PROLOGO.

La mejor manera de
demostrar el amor y mi
querencia por el barrio que
me vio nacer, es escribir
su historia, para sacarlo
del infierno del olvido.
Gildardo Rivera.

D espués de muchos años de haber dejado mi barrio,


abrumado por los años y por los recuerdos, me he dado a
la tarea de compartir con mi gente, gente ausente pero
siempre presente, los añejos recuerdos que fluyen a mi
memoria, a fin que las generaciones contemporáneas conmigo
los recreen, y las nuevas generaciones los afiancen ya que la
modernización puede acabar con las construcciones, pero no
debemos permitir que también asesinen la memoria histórica de
los pueblos y las gentes.

Al auscultar fuentes bibliográficas y virtuales, no pude


encontrar ningún vestigio histórico anecdótico o narrativo de mi
querido barriecito Arrabal. Más bien parece que careciera de
historia y que inclusive esta le negara el derecho a reconocer
su identidad. No existe como barrio a pesar de que siempre se
reivindicó como tal. Aparece en los fríos datos oficiales,
absorbido por el barrio Naranjal, el cual en nuestro lenguaje
cotidiano, siempre lo denominamos peyorativamente: el
“hueco”, y siempre lo consideramos de menor categoría con
referencia a nuestro querido barrio arrabal.

Nuestro barrio se llamaba en la boca y en el corazón de sus


vecinos: ARRABAL, aunque inicialmente para la sociedad de
mejoras públicas de Medellín recibiera el nombre de Barrio los
libertadores.
10

Javier Alexander Macias, al referirse a la historia del barrio San


Joaquín comenta:

“No se llamarían más Los Libertadores. No dependerían,


para tener identidad, del barrio el Naranjal, ni de las tardes
en las que los mecánicos apostados al lado de los
negocios incipientes de la naciente Tejicóndor, se
gastaban el poco dinero que conseguían en los juegos de
azar. Habían dejado de ser el vasto terreno lleno de
mosquitos y zancudos que en 1924 fue rechazado por la
administración de Medellín por ser un barrio cenagoso,
“que quedaba muy lejos de la ciudad” y en el “que la
construcción sería demasiado costosa”.

Lo anterior demuestra como desde tiempos de antaño, lo que


hoy es San Joaquín, estaba adscrito al barrio los Libertadores,
nombre ampuloso y para algunos más decente,
que el de : ARRABAL. El comentario ya citado, también nos
demuestra la urgencia de iniciar esta recuperación histórica
para afianzar la memoria cultural y superar tergiversaciones, ya
que al frente de Tejicóndor había residencias no negocios como
demostraremos posteriormente.

Hoy es tan solo un sector del barrio Naranjal como ya se dijo,


adscrito a la comuna 11 Laureles, quedando de hecho perdida
su identidad que se hace necesario recuperar, siendo esta la
intención fundamental de este breve escrito.

De antemano pido excusas por omisiones u errores de


apreciación, los cuales tienen más la intención de mover y
sensibilizar el espíritu colectivo de sus gentes para mejorar el
escrito, que el de molestar a personas o a instituciones.

Como toda descripción histórica, esta sometida a las


visicitudes del tiempo, a la memoria colectiva y a la
subjetividad del narrador o escritor, y es en ese sentido que
11

efectúo la necesaria observación de dejar claro que mis


recuerdos: diáfanos unos confusos otros, datan del período
comprendido entre 1946 y 1972 fecha en la cual abandoné la
ciudad en búsqueda de futuro ante las ya apremiantes
limitaciones en mi campo laboral; dejando claro que una manera
clara y efectiva de expresar el cariño y profundo afecto por el
barrio y sus gentes, está en iniciar la construcción de su
historia y el reconocimiento a todos aquellos que compartieron
conmigo y aquellos que ya no están con nosotros pero que su
legado fue hacer de las generaciones futuras hombres y
mujeres de bien y no soy nadie para juzgarlos en sus propósitos
y logros .

Traté de efectuar una descripción detallada de las personas que


conformaron nuestro barrio. Muchas de ellas son recordadas
brumosamente, otras sobrevaloradas y porque no, otras
olvidadas. Por ello pido excusas, pero a la vez llamo a la
construcción colectiva de la historia de nuestro barrio a todos
los vecinos que leen este libro, susceptible de mejorar con sus
anécdotas, vivencias y fotos, que legaremos a la posteridad.

Infructuoso fue el intento de localizar personas por medio de los


recursos tecnológicos que nos entrega el mundo de hoy a fin de
que ayudaran en esta empresa, ya que considero de vital
importancia para las generaciones de hoy y las futuras, el
conocer la historia de nuestro barrio moribundo. Quedé
defraudado, al no lograrlo, sin embargo, anoto dos correos
electrónicos a fin que ud lector y vecino me ayuden en esta
empresa con sus fotos, correcciones, vivencias y ampliaciones,
pues este es un proyecto colectivo de todos. Dichos correos
son: gildardorivera@gmail.com y girivera@utp.edu.co su
colaboración será tenida en cuenta y la espero.

He terminado, ahora deléitese con mi libro, y viva sus recuerdos


que son también los míos.
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CAPITULO UNO:

1.0 UBICACIÓN HISTORICA Y GEOGRAFICA DEL


BARRIO ARRABAL.

S i bien Germán Jiménez Morales en un artículo titulado


“tierra de Ambiciones” nos habla de la familia Garcés
como la dueña de casi el 75% de los predios de Naranjal,
es bueno recordar que si bien la citada familia es muy rica, en
arrabal, solo se le consideraba propietaria de algunos predios
ubicados en la carrera 65, cosa que ya solo es historia, pues el
barrio Arrabal como tal, fue construido en predios de la finca
loteada por Don Fernando Echeverri, el cual vivió en una grande
y hermosa casa construida sobre lo que hoy es la avenida
Bolivariana, pero muy cerca al barrio.

Las viviendas más antiguas del barrio fueron:

Las casas de: Emilio Parias. Nena Galindo, José Álvarez


“cacharro” y Misaelito. Ubicada esta ultima en el pasaje y casa
entre las casas de Pedro Piedrahita y Andrés Alberto Gómez,
casas estas consideradas también entre las primeras
construidas en Arrabal.

Hoy el barrio está clasificado como parte del barrio naranjal, el


cual pertenece a la comuna 11 Laureles –estadio.
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Foto 1: Barrio Arrabal. Foto satelital google.

1.1 LÍMITES Y PREDIOS DEL BARRIO ARRABAL.

1.1.1 PREDIOS Y FAMILIAS UBICADOS AL NORTE


PASANDO LA CALLE SAN JUAN.

Es bueno recordar que la apertura de la calle San Juan se hizo


en 1908, y ella servía de comunicación con el sector de la
América, uno de los barrios más viejos de Medellín y el cual
inicialmente se llamó la granja y del cual se empezó su
construcción en el año de 1675 iniciándose la inauguración del
tranvía en el año de 1921, el cual ya pasaba por la calle san
Juan en los terrenos de lo que actualmente es el barrio arrabal
pero que a nosotros no nos tocó ver pasar, a pesar que en
algunos sectores pudimos ver los vestigios de sus rieles.
14

Botero Gómez, comenta al respecto1:

Las líneas del tranvía se identificaban con placas o divisas de


colores, que probablemente resultaron de mucha utilidad para
aquellas personas analfabetas que podrían haber tenido
dificultades con un sistema basado en letras o números. La
línea de La América, contaba entonces con la divisa de color
rojo, llegaba a la plazoleta del corregimiento del mismo nombre
ubicada en la carrera 84, posteriormente se continuó por la
calle 44 hasta la carrera 93 en el sitio de La Puerta un poco
antes de San Cristóbal, con un recorrido total de 4,68
kilómetros. Esta línea fue de particular importancia porque
muestra que para la ciudad su área de expansión urbana natural
era la extensa zona plana al occidente del río Medellín, más aún
cuando toda la presión urbana de la época se ejercía
intensamente sobre la parte nororiental (Botero, 2000, 361).

Anotamos que el tranvía desaparece definitivamente hacia


1951.

El sector de La América fue de particular importancia en el


desarrollo occidental de la ciudad, no sólo por el
establecimiento de esta línea del tranvía, sino por la posterior
pavimentación de la carretera a La América (1930).

Entremos en materia:

Las casas y predios ubicados en este sector, se consideraban


pertenecientes a nuestro barrio, entre los cuales se encontraba
el café que da el nombre al barrio: ARRABAL. También hacían
parte de dicho frente la lavandería la Nieve, la cual tenía como
logotipo un pingüino hablando por teléfono y la bomba de
naranjal que hacia esquina con la carrera 65.

1
Botero Gómez, Fabio. 1989. “Lo que cuentan las calles de Medellín”, Revista antioqueña de
Economía y desarrollo (Cámara de Comercio de Medellín, septiembre-diciembre), pp.
111-122.
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Otros de los pobladores que vienen a mi memoria son:

VICTOR GREGORY Y SU HIJO FANOR:

Este ultimo se casó después con Aura Gómez y tuvieron una hija
de nombre Miryam, gran amiga mía y muy cercana a mis
afectos. Don Víctor es de ancestros Irlandeses como así lo
demuestra el apellido Gregory. El merece lugar especial en esta
historia, pues no solo fue el propietario del local donde funcionó
el bar ARRABAL, el cual le dio nombre a nuestro barrio, sino que
fue precisamente a él al que se le ocurrió llamarlo así :
ARRABAL. Luego fue su primer administrador, como lo fue
posteriormente su hijo.

Confirmado de una fuente de alta credibilidad por ser


descendiente directa de Don Víctor: CARLOS GARDEL estuvo en
el café Arrabal. Esto es de innegable valor histórico dada la
calidad fama y prestigio del visitante.

Horacio y el Mono Luis y su señora madre doña María. El mono


era un conocido electricista, que posteriormente va a vivir con
su familia al pasaje de Etien en la carrera 65. Horacio era más
estudiado, y a su madre la recuerdo porque ella me enseño a
pintar toreros con acuarela.

Recuerdo en ese mismo sector a la fábrica de tuti fruti, hoy


propiedad de Postobón La casa de oliva y sus hijos: el negro
Esperanza, minuto y el ñato Raúl. Oliva fue muchos años
servicio domestico de una casa que quedaba sobre san Juan y
cuya cabeza de hogar eran don Argemiro y doña Grimanesa.
También en este sector, se encontraba la vivienda de Jesús
Mesa, padre de Memo, Alberto “el loco”, y Raúl, luego seguía la
fabrica de tubos, la cual ocupaba toda la manzana. En este
mismo sector Recuerdo a Marina la tía de Jaime “bobo” y
Jorgito, los cuales Vivian con su señora madre en la primera
casa. Luego habitaba : Mariana, Valvanera, “Vanera” y su hijo el
grillo, otra excelente persona y jugador de fútbol que
actualmente vive en el barrio doce de Octubre de esta familia
sobresale en los tiempos de antaño: “Pininino”, el cual era
famoso sobre todo los 31 de diciembre como comentaré luego.
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En este sector también vivía un señor apodado “el manchao” y


su hijo León el cual fue amigo de infancia nuestro.

Posteriormente en la década del 60, muchos vecinos cambian


de residencia y llegan otros. Es así como aparece en este
sector Rodrigo Milán y su familia, y también Jaime Torres
(Jaime Pirra) y Marisela su esposa. En esta casa tuve la
oportunidad de conocer y compartir con el excelente cantante
de Salsa vallecaucano: Piper Pimienta Díaz, el cual como es
sabido fue asesinado en Cali en oscuras circunstancias.

Menciono también, la casa grande que había sobre la 64


diagonal al café arrabal, la cual fue posteriormente destruida
por la explosión de una polvorería, de la cual era propietario
Manuel Ruiz y en ella falleció Teresa Herrera, esposa de José
Cano y mamá de Edgar Cano Herrera (Canito). También en la
parte norte, se encontraba una gran manga que era el solaz de
los muchachos para jugar, la cual se llamaba la “manga de los
novillos” y marcaba límites con el sector del “hueco”, al cual se
llegaba Por un caminito después de pasar un gran pasaje donde
vivía Martín, que era carretillero y sus hermanas; dos de ellas
bobas y la tercera: Maruja (Maruja Chiva) que fue mesera en el
café Moscú y a la vez mamá de “beto” uno de los mecánicos de
arrabal y de “manene”.

Ya que estamos en este sector, se hace obligatorio mencionar


dos casas que hacen parte integral de esta historia y estaban
casi al frente de la plaza de toros la macarena. Ellas fueron las
casas de los Chepos famosos malandrines de la época, Se
cuenta que fueron precisamente ellos quienes mataron a Martín;
y la casa donde inicialmente vivían los Morales: Rodrigo y
Fernando, ambos trabajadores del calzado Chica en la estación
Villa lugar donde se elaboraban los zapatos mocasines para
todos los camajanes de la época, y eran los zapatos que todos
queríamos tener. Recuerdo también a su hermana, la cual
posteriormente se unió en matrimonio a Oscar toro.
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Foto 2: carrera 64, aún era una manga. A la izquierda el café Moscú, al frente
de este, pasando un bus de la época hacia la América por la estrecha calle
san Juan, Se encontraba el café de Arrabal, la vieja casa, destruida por la
explosión de la polvorería de Manuel Ruiz.

De este sector, también recuerdo a:

Oliverio, otro elemento que en compañía de su hermano, “el


bizco”, se dedicaban a actividades no recomendables.

Luis Carlos, Excelente músico el cual hacia parte del conjunto


de Laureano Gómez y el cual ya estando yo en Pereira, me di
cuenta que triunfó con el éxito bailable “Estrella” Al Hablar de
la familia Gómez Arbeláez, nos referiremos a él de nuevo..

Gustavo Cifuentes: excelente persona , caballero y jugador de


fútbol, el cual permanecía más en arrabal ganándose así el
derecho a ser tenido sin discusión como uno más de los
nuestros, en nuestros recuerdos y en nuestros corazones.

Especial recuerdo tiene en mi Julio Estrada Fruko, y Mario


Rincón (Mario Pini), primo de Fruko y excelente ingeniero (sin
serlo académicamente) de sonido de discos Fuentes. También
viene a mi recuerdo un muchacho de nombre: Cristóbal, el vino
del “hueco” a arrabal a enamorar las muchachas y tuvo varias
novias en nuestro barrio: Ruth la hija de Cañola, Temporalmente
amparo Tamayo, y nubia Castrillón entre otras.
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1.1 2 PREDIOS Y FAMILIAS UBICADOS AL SUR.

Nuestro barrio por el sur limitaba con la incipiente avenida


Bolivariana que era solo un camino, ya que se interponía la gran
finca de “Don Gelo” y su mayordomo Don Rosendo, nombres
estos que se interponían uno al otro hasta el punto de no saber
cual en realidad era su dueño. Lo cierto el caso es que ambos
jugaban en las mentes de los vecinos de arrabal como sus
propietarios. Esta finca era inmensa y poseía potreros y una
casona a la antigua, cruzada por la quebrada la Picacha.

Más hacia el sur estaba la finca de Don Habacuh, la cual tenía


gran cantidad de monte y un árbol inmenso llamado
“Quiebrabarrigo”, al cual los vecinos que cuidaban cerdos,
alimentaban con sus hojas. Esta finca también servía de
paseadero de los vecinos, y de búsqueda de varillas para hacer
cometas y elevar en el mes de agosto. Un poco más al sur
estaba la laguna de “Fátima” en la cual nos bañábamos y
pescábamos sardinas con costales para los acuarios.

En este sector menciono también, la Casa de Don Fernando


Echeverri y la gran manga que posteriormente se loteo, y se
asfaltó dando lugar al nombre de “Calle del pecado”. De ella
recuerdo, su alto aviso de madera y lata de pinturas Pintuco, en
el cual jugábamos sabroso todos los muchachos del barrio.
También recuerdo como hacia la derecha de dicha manga se
encontraban matas y árboles grandes, con adormideras, hoja
Santa y muchos cactus, cerca de lo que todos llamábamos la
fábrica de palillos. En estas mangas, muchos se iniciaron en el
arte del amor, y muchos otros, repasaron lo que ya habían
aprendido.
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Foto 3: en ella se encuentra Pedro Galindo nuestro abuelo, con: La mona Hija
de Don José López. En el centro Olga Galindo y a la derecha Aura Gómez. El
lugar; las mangas y arboleda que había al sur del barrio, en lo que se llamó
después “la calle del pecado”.

Particular mención, merece la canchita al frente del aviso de


Pintuco, y a la cual nosotros llamábamos la “caja de Fósforos”.
En ella se jugaban interminables partidos, que duraban todo el
día, y en la cual muchos de nuestros grandes jugadores
construyeron sus habilidades que después los hicieron famosos.
Este sector en la actualidad, hace parte del barrio los
conquistadores.

Posteriormente y muy adentro los años 60, empezó la


urbanización de este sector, el morro de Nutibara 2se convirtió
en lugar de paseo de la muchachada del barrio, sobre todo,
recuerdo las subidas en bicicletas alquiladas; carrera que por lo
regular nos ganaba Omar Tarugo.

También es este sector sur se encontraba el Pasaje de Ernesto


Vélez “tira Jura”, llamado así por los vecinos por su carácter
tacaño.

2
En un principio, en la época de los conquistadores españoles, se llamó Morro de Marcela de la Parra y
luego Morro de los Cadavides; finalmente se rebautizó con el nombre de Cerro Nutibara, que perdura
hasta hoy.
20

Es muy difícil recordar quienes habitaban los diferentes pasajes


o quienes fueron inquilinos de ellos y de algunas casas. Por su
mismo carácter estacionario no permanente, no marcan
identidad barrial. Aquí en esta historia solo mencionaré algunos
de ellos que dejaron huella y por ello merecen ser recordados.

Siguiendo con el detalle hasta donde mis recuerdos lo permiten,


en este sector estaba también la casa del viejito don Luis, la
cual marcaba esquina con la calle del pecado. Este era un
hombre bonachón y aguardientero a morir, que según tengo
entendido era familiar de los Milanes.

También recuerdo que enseguida de don Luis vivía la familia de


Pompilio Herrera: Tato, su hermano y la familia de Estercita,
una linda gordita muy cercana a mis afectos. Esta familia
vendía carbón sino estoy mal, pero además era propietaria de
carros de carga de los cuales obtenían su manutención.

Luego estaba el inmenso local que inicialmente fue el servitax,


y es por ello que dicha esquina se conoce con el nombre de
esquina del “servitax”. En este lugar las gentes de arrabal
contaban como al capitán Franco celebre bandolero liberal de
la región de Urrao y Pabón, trabajo mucho tiempo como taxista.
Posteriormente estuvo en dicho lugar, el depósito de Kolkana
Postobón y finalmente estuvo la fábrica de jabones Camel.

1.1.3. PREDIOS Y FAMILIAS UBICADOS AL ORIENTE.

Para efectos de una mejor comprensión de ubicación


geográfica, aclaro que lo que aquí expongo no es una camisa de
fuerza, sino que, por el contrario, espero que el presente
esfuerzo, sirva de incentivo a otras personas del barrio, para
ampliar y completar esta historia.

Nuestro barrio al oriente, tenía como limites:


21

La fabrica de proleche, y la fabrica de leche san Martín. Estas


empezaban en el antiguo puente de la América, hasta lo que
denominábamos casa grande. Entre estas dos construcciones,
estaba un corredor de pequeñas casas, en las cuales recuerdo
que en los años 60, vivían: la familia de Niras, Minguito y sus
dos hijos, Don Pedro el carretillero, papá de Hita y Rintin,
esposa de Alonso “Gurrimba”. Y mucho más tarde la famosa
casa de la virgen, fue ocupada por los Loaiza los cuales todos
eran carretilleros en Proleche.

A la derecha de la casa de la virgen en un alto estaba un


inmenso pasaje que muy pronto fue desocupado y dejado en
ruinas, el cual en nuestra niñez representaba, el temor mas
grande siquiera acercarnos. De dicho pasaje solo recuerdo a:
Virgelina, su marido Toño “pipa” sus hijas y al “Aguililla”. Me
pregunto, quien de arrabal no lo conoció? Este es otro de los
personajes folclóricos de nuestro barrio, que esta siempre
presente en nuestro recuerdo.

Otro gran pasaje rodeado de mangas, estaba al frente de donde


hoy se encuentra la casa de Nubia Castrillón. De este lúgubre
pasaje recuerdo, que era cuidado por un muchacho amigo
nuestro llamado Absalón y su papá y en el vivió Saturnino Pabón
y su hijo Antonio Pabón “Carraspera”, de grata recordación
entre nosotros. Hombre alegre, buen jugador de fútbol y a todo
momento listo para la parranda. Toño, se casó después con
Ángela Piedrahita.

Detrás del pasaje ya citado se encontraba el pasaje y el gran y


famoso bar “El copero” propiedad de Margarita Pérez, la cual
fue la segunda mujer de José Cano, ella vivía allí con su hijo de
crianza Ovidio y con su amante apodado “Bocanegra”. Es de
anotar que este lugar fue uno de los mas grandes y famosos
centros de diversión de arrabal, el cual hacia los años 60 (como
todos los centros de diversión y casas de lenocinio, entró en
crisis y extinción) En dicho pasaje vivían los “Cenizos”: uno de
ellos Jairo era amigo de infancia nuestro, Emilio Cenizo, el
22

mayor era considerado por nosotros como el rey de “las


mantecas”, pues su diversión consistía en enamorar a las
empleadas del servicio doméstico de San Joaquín y Laureles
que se le atravesaban. La hermana de los cenizos, era Fátima,
una muchachita enamorada de Elkin Vargas.

1.1.4. DELIMITACION DEL BARRIO ARRABAL POR EL


OCCIDENTE.

Indiscutiblemente, el referente de límite del barrio por el


occidente es la carrera 65. (De ella hacia arriba el barrio tiene
influencia y relación, aunque el sector en mi época no lo
reconociera o se avergonzara de hacerlo). Prueba de dicha
relación es el hecho de depender de la iglesia “madre del verbo
divino”, la cual territorialmente, no está ubicada en el barrio. En
este sector, también se encontraba la cancha de fútbol, la cual
con la de la macarena fueron las más utilizadas por nosotros.

Mencionaremos algunas familias que a pesar de encontrarse al


otro lado de la carrera 65, tuvieron nexos con el barrio. (Para
efectos de orden, quiero anotar que en este numeral, no son
materia de análisis los predios ubicados en la 65 entre la
cantina del negro Raúl y san Juan, por considerarlos parte
integral del barrio, los cuales citaremos posteriormente.

Recuerdo la gran influencia que tuvo sobre el barrio la tienda de


Don Rafael Guerra dicho establecimiento se llamaba “la María”,
y en ella muchas personas del barrio mercaban y recibían fiados
de don Rafael, el cual también movía a partir de dichos fiados
las simpatías de su allegado familiar y político Bernardo Guerra
Serna. Dicha tienda estaba ubicada exactamente en la esquina
de San Juan con la 65. de don Rafael solo recuerdo a Miriam
Guerra su hija, la cual luego se casó con uno de los Acevedo
(Dueños de Haceb).

Siguiendo por la 65 hacia el sur, encontramos que enseguida de


la tienda de don Rafael, se encontraba la carnicería de don
Gerardo Moscoso, el cual vivía en la calle del talego. De esta
23

familia insigne recuerdo a: Don Alfredo Moscoso, padre de


Gerardo, a Candelaria y Horacio, (uno de los profesionales que
logró producir el barrio), y con el cual intercambiaba
conocimientos cuando estábamos estudiando, y del cual guardo
gratos recuerdos.

Luego había una casa de balcón en la cual vivían los Toro. De


ellos recuerdo a Iván Toro y a Jairo Toro, los cuales fueron
compañeros de infancia nuestra. Pero recuerdo especial me
merece su tío Leopoldo “poldo”.

POLDO: fue el enfermero y colocador de inyección oficial de


Arrabal, gordiflón, buena persona y sencillo, con su pequeño
maletín de cuero, en el cual cargaba las temidas jeringas, era el
terror de nosotros los muchachos, pero a decir verdad y gracias
a lo enfermo que era cuando niño, tengo mucho que agradecerle
a Poldo, el cual no paraba en horas, y lloviendo o haciendo frío,
cumplía con su compromiso para conmigo.

Luego de la casa de los Toro, en una casa de dos pisos, en el


piso de abajo vivía, Ramiro Cardona y su mamá. Este fue el
marido de Martha “Piña” y padre de Marisela, Javer y Bernardo
Cardona Álvarez.
De la calle del talego, Solo recuerdo a los Moscoso, A chucho
“negro” y su familia, y especialmente a su hijo Fernando
Cardona. Chucho fue chofer de san Javier la Puerta muchos
años. Compañero de mi papá: Honorio Rivera. A finales de los 60
tuve la posibilidad de trabajar en el colegio San Ignacio, donde
Chucho era conductor de uno de los buses del colegio.
Excelente persona y gran padre y amigo.

He tenido el placer de reconstruir esta historia y en ella hacerle


mención especial a “pica”. Siempre estuvo ahí, en la jugada y
sobresaliendo como líder del barrio aún siendo muy joven.
Fernando merece como blanquita, Rubén y la mujer de Elkin
churumbelón, etc, nuestro reconocimiento por su compromiso
permanente para que sus hijos sean los profesionales que la
sociedad se merece.
24

También en la calle del talego, vive un personaje al cual en su


momento dedicaré más espacio. El es Mario “El pisco Muñoz”,
excelente persona y gran líder del barrio, el cual merece aquí su
reconocimiento especial. En dicho sector vivía también su
señora madre y hermana. Memoria especial a su hermano
Salvador villanamente asesinado.

Mario es reconocido como el líder y guía por excelencia del


barrio. Tiene autoridad y generosidad suficiente para exigir y
para colaborar. Con él y muchos más de este estilo nuestro
barrio tiene quien lo represente.

Mario pisco: sin lugar a dudas el mas importante líder barrial de Arrabal.
Fueron parte de este sector: los Beltrán. De ellos recuerdo a
Gustavo, a Milica y a Tolosa. Y en épocas posteriores vivió
Jaime “coca- Cola” y su mujer Nancy.

También vivieron unos familiares de los Parra (los cuales


habitaban una casa sobre la calle san Juan) de ellos recuerdo a
un compañerito de infancia: Tavi y su hermanita una flaquita
bonita. Por ultimo en este sector vivía una muchachita llamada
Maria Elena, la cual es en mi concepto una de las niñas más
lindas que vivió en Arrabal, la cual con su familia se fue a vivir a
Venezuela y cuyo padre era Antonio Yarce, el cual fue no de los
primeros boxeadores de Antioquia conocido como el “Pibe
Yarce”, el cual después fue volquetero antes de emigrar del
país.
25

Este sector cerca de la esquina al frente del bar del negro Raúl,
había dos casas, una de un solo piso donde vivían los López.
Nosotros recordamos especialmente a William, al cual le
decíamos, “mula vieja” este era hijo de Amanda López obrera de
Tejicóndor. Su hermano Jairo, fue bachiller del Marco Fidel
Suárez, el cual luego se graduó como físico de la Universidad
nacional, Universidad en la cual es profesor titular.

En la casa contigua de dos pisos, exactamente en la esquina,


que era de inquilinato vivía La Señora Mariela Gómez, hermana
de Luis Carlos Gómez, y su esposo de Apellido Laurens, los
cuales tenían una fabrica de zapatos de muy buena calidad. De
esta familia recuerdo al Costeño David Laurens, que según
parece era hermano del esposo de Doña Mariela, el cual
formaba equipos con la muchachada de esa época y nos servía
de entrenador.

Siguiendo con nuestro relato, mezcla de gratos recuerdos y


añoranzas, viene a mi mente, en la década de los 60 en este
sector, la fabrica de industrias Amo. Recuerdos especiales
llegan a mi mente con la bella esposa del Dueño.

Finalmente: debo mencionar a Maria “la Coja” Galeano, la cual


tiene relación con el barrio arrabal, por ser hermana de Paulina
Galeano, mamá de los churumbelones, y en cuya casa (al frente
de la casa de los Madrid en 66), vivían: Amparo Toro, Oscar Toro
(el bizco) y Fernando Toro su hermano. Con Oscar estudié en el
Liceo antioqueño, y es él otro producto ilustrado del barrio.
Emigró con su esposa hacia Cartago a trabajar con la ESSO y
según entiendo ya jubilado, regresó a Medellín.
26

CAPITULO DOS.

2.0 LAS FAMILIAS DEL BARRIO ARRABAL.

“Las personas se mueren


solo cuando nadie se
acuerda de ellas”
(Gildardo Rivera)

Y a hemos elaborado una delimitación barrial a fin de tener


un orden de desarrollo. A continuación iniciaré un
recorrido por el resto del barrio, recordando las familias y
sus componentes y pidiendo excusas por las omisiones, ya que
el tiempo no pasa en vano.

2.1 FAMILIA MILAN CARDENAS.

Ya cité tomando como referente la calle san Juan a la casa de


Don Argemiro y Grimanesa. Continuando en dirección este –
oeste encontramos, la casa de la familia Milán Cárdenas. Esta
es una distinguida familia de grato reconocimiento en el barrio.
De esta familia recuerdo: a Jesús Milán Padre, a Rosa Cárdenas
su esposa y su prole conformada por: Domingo Alberto Milán,
Jesús Milán, Rodrigo y Gonzalo. Famosas eran las Cárdenas,
recuerdo gratamente a Beatriz, Sarita, Rosa, Helena, La tía
Alicia, recordada por sus grandes trenzas, Teresa y Maruja.

Esta era una altruista familia, a la cual muchos de los que


estudiamos especialmente mi hermano y yo, tenemos mucho
que agradecer, ya que ayudaron a nuestra formación,
regalándonos los libros que sus hijos dejaban. Gracias
imperecederas y un eterno Dios las bendiga a Todas las
Cárdenas.
27

Los milanes, Rodrigo y Jesús “Suso” buenos estudiantes y


deportistas y excelentes amigos, aunque compartí más con
Rodrigo al cual tengo entre uno de mis mas preciados amigos;
Recuerdo gratamente a Todos y especialmente a “Suso”,
trabajador, luchador y hombre de Bien, quien en busca de
futuro, no sufrió temores para abandonar el lar materno, cuando
se trataba de afrontar las responsabilidades del trabajo, que le
exigía Postobón, la empresa a la cual sirvió toda su vida. Fue
así como generosamente él y su esposa Lucelly e hijos me
abrieran las puertas hospitalarias de su casa y la mano fraterna
de su amistad en Pereira, cuando llegué allí en búsqueda de
mejores perspectivas. Su casa en la 32 con 8ª bis, fue un lugar
donde siempre fui acogido con cariño. De “suso” , resaltamos su
alta capacidad para jugar fútbol de calidad, siendo de los
Milanes el mejor en este deporte, sin dejar por ello de
mencionar a Rodrigo, inigualable como defensa de los equipos
donde militó, recuerdo a su esposa Teresa y “campo Elías” y
Alberto y Gonzalito sus hijos..

En esta foto se encuentra Gonzalito y Alberto dos de la descendencia de los


Milanes.(foto cortesía de Ftrujillo).

Las Cárdenas son todos unos personajes de nuestro barrio.


Tenían su microempresa especializada en ricos quesitos que
competían con otros de igual calidad: los elaborados por los
“piñas”, se caracterizaron por ser caritativas, amables y
altruistas con todo el mundo sin distingo de carácter político o
económico. Vivían en función de los demás. En mi concepto
eran personas pudientes comparadas con muchas otras familias
pobres de nuestro barrio.
28

Quizás fueron ellas, Con Blandina Gómez y posteriormente José


Cacharro, las primeras en tener un televisor, cuando rojas
Pinilla en 1954 los trajo al país. Ese televisor en manos de las
Cárdenas, era para su familia y para toda la muchachada que
sentada en el suelo en la sala de su casa, sin humillaciones, se
deslumbraba viendo a Lassie, a Alvaro Monroy Guzmán, gloria
Valencia de Castaño, los Tolimenses y nos deleitábamos con
Paladín protagonizada por Richard Boone.

Foto: Tv de la época.

Particularmente famoso era el pesebre de las Cárdenas. Era


hecho con todo esmero para que lo disfrutara la comunidad. Sus
santos eran los más grandes del barrio a su casa acudían todos
los muchachos a las novenas de aguinaldos.

A esta familia, pertenecen también: Jhon Cárdenas su esposa


sara y su hermano Hernán y su distinguida madre Doña Maruja.
Excelentes caballeros y personas de bien que también son
dignos de mencionar ya que son protagonistas directos en esta
historia de nuestro querido barrio, los cuales vivieron en la
casita ubicada enseguida de la de “ñingas”, hasta que cada uno
formó su respectivo hogar. De ellos ha vuelto al barrio Jhon.
Hernán y su esposa Rosario viven en la actualidad en otro barrio
de Medellín.
29

2.2 FAMILIA DE MARTHA PEORRA.

Muchas de las actuales generaciones so saben de su existencia


en nuestro barrio, Martha y sus hermanas, de las cuales no
recuerdo el apellido, ya que eran más famosas por su apodo,
tenían una casa de lenocinio, la cual era famosa en todo
Medellín. De ello hablaremos más tarde

2.3 AGRIPINA LONDOÑO.

Siguiendo riguroso orden, vivía Agripina Londoño, su hija Sonia


conocida como “la revoltosa”. Es de anotar que hacia honor al
nombre, por las continuas peleas en que era protagonista.
Conocido en el viejo Arrabal, era su hermano: Ovidio, “el hombre
quieto”, cuyo apodo le fue colocado debido a un derrame que lo
dejó semi – paralizado. Ovidio era el esposo de Doña Rene, con
ella tuvo una bonita hija, llamada Aydeé. A esta última, muchos
de las generaciones maduras de arrabal la recuerdan.

2.4 LA FAMILIA MONTOYA RESTREPO.

Esta es otra querida familia que aunque no hace parte de las


familias más antiguas del barrio, y no participaba abiertamente
en la vida barrial como otras, Gonzalo “el flaco”, se encargo de
que fuera tenida en cuenta, ya que este ha sido un personaje de
primera línea en la historia de arrabal, y uno de mis mejores
amigos.

Esta familia estaba compuesta por don Roberto, Doña maría y


sus hijos. El mayor Jaime, el cual era linotipista en la imprenta
departamental, “se mantenía del trabajo a la casa”.

Diego, “luntín”, el mayor, compañero de infancia de muchos de


nosotros, el cual murió muy joven.

Nubia, la niña de la casa, la cual sufría problemas mentales,


pero era una excelente persona, caracterizada por ser una
30

furibunda hincha del atlético Nacional, hasta el punto de


intentar dejar en herencia las propiedades dejadas por el padre,
cosa que afortunadamente, para los intereses de la familia logro
parar Gonzalo el más “vivo” de ella, y el único vivo hoy ya que
todos incluidos sus padres fallecieron.

Don Roberto Montoya, era un viejo paisa bonachón y muy


querido. Campeón antioqueño de billar tres bandas,
comisionista y ahorrador por excelencia. Fue así como logró
amasar una fortuna considerable, la cual invirtió en casas y
locales especialmente en el sector de la estación Villa, y otros
en el sector de Laureles.

Gonzalo, merece historia aparte: heredero de la fortuna de sus


padres, convirtió en herederos a todos sus amigos y miembros
del barrio. A pesar de que siempre ha vivido en Laureles o en
san Joaquín, su residencia es solo para dormir, porque su
corazón, sus vivencias y su accionar, está en Arrabal al cual
quiere con el alma.

En la foto de izquierda a derecha: Mario Pisco, Gonzalo milán, Gonzalo Flaco


“el chato” Rubén Darío Bedoya entre otros.
31

Gonzalo es otro de los profesionales que ha producido arrabal.


Luego trataré este tema en capitulo aparte. Sus cualidades, el
altruismo, el desinterés por lo material y la capacidad de
recuperación para salir de la adversidad, lo cual lo coloca como
un ejemplo a seguir, para aquellos que una vez han caído en las
garras destructoras del vicio y creen imposible hacerlo. Su
fuerza de voluntad y su capacidad de lucha están a toda prueba.

Hombre guapo, generoso, excelente jugador de fútbol, gran


bebedor y salsero, pero hoy dedicado a su hogar con su mujer y
gurí – gurí.

Gratos recuerdos vienen a mi mente, cuando con Gonzalo, el


mono hijo de Pedro Justo el detective y el brother, amigos de
universidad y residentes en la carrera 80, tratábamos de
colaborar, para que Guayaquil erradicara el tango y afianzara la
salsa, pues estábamos seguros que en ese mundo que vivíamos,
no se trataba de: “sufrir me tocó a mi en esta vida, sino de
Agúzate que te están velando” como lo decía claramente
Ricardo Ray y Bobby Cruz.

2.5 LA TIENDA DE DON RUBEN.

Recuerdos gratos llegan a mi mente al recordar la tienda de don


Rubén. Viejito alto mono y famélico que pacientemente
soportaba nuestras bromas de niños. En su tienda colgaba el
salchichón cebudo, protegido por un papel especial rociado de
un aceite atrapa moscas, de las cuales había miles. Allí en el
mostrador tenía algarrobas, las cuales recuerdo porque al
romperlas con una piedra o contra el suelo, esparcían un
terrible olor a pecueca. Allí con cinco centavos uno podía
conseguir cinco grandes biscochos o todo tipo de golosinas. Era
la época en que un centavo valía y el país aún se daba el lujo de
tener monedas de 50 centavos de plata ley 30.

Para la historia de Medellín es importante el siguiente dato: de


los personajes típicos como Pedro Rimales, cosiaca, etc en
arrabal solo se dio la oportunidad de conocer a uno de ellos, el
famoso “GUINEO”. Este visitaba la tienda de Don Rubén, y
32

cuentan los más viejos que cuando las mujeres iban a comprar
revuelto y pedían así:

-Don Rubén déme cinco de yuca, déme cinco de papá, etc


guineo intervenía diciendo:

“hay te vas acercando vieja hijueputa”.

Que tiempos aquellos en que María Feliz por 50 pesos, ¡que era
un platal!, ofrecía dejarse besar a beneficio de una obra de
caridad para la ciudad, y cuantos frustrados rabiaban ante el
imposible para conseguirlos y así poder besar a la mujer
considerada en su momento la más bella del mundo. Esta tienda
mucho tiempo después, fue vendida por don Rubén al mono
Octavio de santa Bárbara. Este la adecuó como cantina granero,
pero estas son ya otras épocas quizás los años 60, lo cierto el
caso es que jamás volvimos a saber de don Rubén.

Recuerdo también como en todas las tiendas de arrabal y me


refiero especialmente a la de Don Rubén, Ernesto “tirajura” y el
mono Tamayo, nunca faltó el cuadro insignia que las
caracterizaba:

Es de anotar que junto a dicho cuadro no podía faltar la penca


de sábila, la herradura y la piedra de imán para la buena suerte
33

del negocio así como la famosa tira atrapamoscas la cual ya ha


desaparecido.

2.6 LA CASA DE LA MONA VELEZ.

Al llegar a la esquina se encontraba la tienda de Don Rubén , de


la cual hablaremos posteriormente, para seguir en orden
riguroso hablando de las familias que llegan a mis recuerdos y
que quiero compartir con todos los que de una u otra manera
llevamos en nuestro corazón el barrio que nos vio nacer.

Después de la tienda de don Rubén, en una casita pequeña


pintada de verde, recuerdo que vivía la mona Vélez. Esta era
una jubilada de Tejicóndor, la cual se mantenía muy acicalada y
puesta en orden como su casa. Ella era Hermana de Candida
Vélez esposa de Vinicio Mesa. De Candida recuerdo sus bromas
sobre todo el 28 de diciembre, fecha en la cual elaboraba
enpanadas con algodón por dentro para hacer pasar por
inocentes a las gentes del barrio.

La mona Vélez atraía a los muchachos de Arrabal, más


maduritos que nosotros de manera inusual. No me meto en
especulaciones; lo que si es claro es que la mona también fue
un personaje importante del viejo arrabal Querida por todos,
persona solidaria y excelente vecina. Posteriormente emigró del
barrio y su casa fue ocupada por el Mono Octavio y su extensa
familia. Este venía de santa Bárbara y había comprado la tienda
del viejito don Rubén.

2.7 LA CASA DONDE POSTERIORMENTE SE CONSTRUYO


EL PORTACOMIDAS:

 JUAN CORDOBA Y FAMILIA.

En seguida de la casa de la mona Vélez, había una casa de la


cual vivió Juan Córdoba y su esposa Elcy, comadre de mi mamá.
34

Sus hijas fueron: Maria Eugenia, Martha Cecilia, Olga Adriana y


Bibiana.

Foto: Olga Adriana Córdoba hija de Juan Córdoba y Doña Elcy en la casa de
Carola Gómez.

 EL MONO TAMAYO:

Al desocuparla ellos a principios de los años 60, vino a vivir en


ella, el mono Tamayo y su mujer doña Gilma procedente de san
Pedro Antioquia. Este compro el lugar, demolió y construyó una
casa de tres pisos siendo el primer piso la tienda. Dicha
construcción la llamaron jocosamente los vecinos: “El
portacomidas”. Esta era una construcción, fea y antiestética en
un sector caracterizados por construcción de casas de una
planta. Pero gustos son gustos.´

 CASA UBICADA ENTRE EL MONO TAMAYO Y DOÑA QUINA.

En la siguiente casa, solo recuerdo que vivieron en ella: Suso


Milán y familia, y posteriormente mi madre, Olga Galindo ya en
los años 60.

2.8 LA CASA DONDE VIVIÓ DOÑA QUINA.

Siguiendo en riguroso orden hacia la calle 42 nos encontramos


la casa de Doña Quina y su esposo. Esta sencilla mujer, hace
35

también parte de la historia de nuestro barrio. Quien podrá


olvidar su adornado pesebre, las estrellas de papel dorado y la
devoción y cariño con que nos recibía en sus novelas de
aguinaldo. Su marido era chofer de un carro de trasteos marca
Indiana. Posteriormente se mudaron a la casa que esta situada
antes de llegar al café del negro Raúl. De doña Quina
recordamos que tenía un kinder al cual los niños de la época le
tenían miedo ya que castigaba el mal comportamiento
encerrando a los niños en el baño o amenazándolos con brujas y
diablos. Sobra comentar que dicho kinder con esa pedagogía
duró muy poco.

Posteriormente y buscando en mis recuerdos me acuerdo como


esta casa pasó a ser ocupada por la familia de Don Ulpiano,
doña rosa y sus hijas de las cuales recuerdo el nombre de
Martha a la que todos conocíamos como “Martha la de Piano” y
Rita. Don Ulpiano trabajaba en la policía nacional. Luego se
pasó al frente a la casa que antes habitaba Emilia Galeano y
don Ramón.

Ya en los inicios de los 60, si no estoy mal, se pasaron los


Chocoanos a vivir a esta casa. Estas personas en mi concepto
son también patrimonio del barrio, gentes de buena catadura y
cuyo padre cabeza de familia era don Lizandro, ex trabajador de
tejidos Leticia la esposa se llamaba Rosita. Aunque traté muy
poco con ellos, siempre guardo un grato recuerdo de este señor
y sus hijas.

Siguiendo en mi reseña, recuerdo que enseguida de la casa de


los Chocoanos, había una casa donde hace muchísimos años
vivía una familia, en la cual había una muchacha muy bonita, la
cual se casó con un futbolista extranjero llamado “Gabino”.
Posteriormente quedó solo el lote.

2.9 LA FAMILIA GOMEZ ARBELAEZ.

Compuesta por Don Marco Aurelio Gómez más conocido como


“marquitos” y su esposa la Señora Carmen Rosa Arbeláez la
cual era hermana del Obispo Arbeláez de Medellín., don Marco
36

era de Remedios Antioquia también trabajador del ferrocarril de


Antioquia, el perdió una pierna en la guerra de los mil días.
Cuando se jubilo se gastaba todo el salario en dulces y luego se
sentaba en la puerta de la calles a darle dulces a todos los
niños y muchachos y muchachas que pasaban, cierto día fue
robado y lanzado a una cañada, prueba de que en esta época ya
habían ladrones. Ellos tuvieron sus hijos: Carolina “Carola” la
mayor que era Supervisora de hilados en Tejidos Leticia una
compaña de Judíos que hacia cobijas y productos de lana; luego
Francisco Gómez Arbeláez “pacho viejo” que era contador
publico juramentado, era una persona muy educada; Efraín el
cual tenia un taller de mecánica, Rita era ama de casa y murió
de cáncer (tenia un lunar en la nariz que era canceroso) y el
más pequeño Luis Emilio.

Foto: Marquitos y Pacho viejo. Recordemos que Marquitos Junto a mi abuelo,


Pedro Galindo, fueron los únicos habitantes de Arrabal que combatieron en la
guerra de los mil días. Marquitos Conservador, mi abuelo liberal.

PACHO VIEJO: era el padre de los Bogotanitos: Había navidades


en las cuales venían a casa de Carola los hijos de pacho viejo y
Carmelita su esposa los cuales vivían en Bogotá. Con ellos
jugábamos, y nos íbamos a bañar a la laguna de Fátima a hacer
pilatunas. Ellos eran: Francisco que lo llamábamos Kiko, Yeyo
llamado Marco Aurelio por su abuelo, Dieguito y Martha Maria de
Los Ángeles y Rafael Baltasar que lo llamábamos con cariño el
mono, de ellos se decía que eran mellizos.

Innegable, otra de las familias más antiguas del barrio Arrabal


era la de Carola. En ella vivían sus hijos, Pacho (quien luego se
37

fue a vivir a Bogotá), Miguelito quien trabajaba en Tejicóndor y


Maruja Jaramillo y Marlene su hija. De los hijos de Carola, tengo
gratos recuerdos, especialmente de Miguelito, con el cual
compartí junto a Amelia Castrillón, noches de salsa en la acera
de sus casas.

Pacho Pabón. Miguelito y Carola.

Especial remembranza debo hacer de MARLENE JARAMILLO: De


Marlene supe después que se había ido a vivir a Londres, y
actualmente está viviendo en Bahrein. Excelente muchacha,
cercana a mis afectos a la cual recuerdo con mucho respeto y
cariño. Marlene Es hija de Francisco, “Pacho Negro” o pacho
“Pabón”,el hijo mayor de Carola y Maruja Jaramillo Agudelo.
Pacho negro, fallecido. 3

3
La elaboración de esta historia, permitió volver a recuperar amigos que se creían perdidos. Uno de ellos
es Marlene, la cual desde muy lejos me envío y refrescó los datos de la familia Gómez Arbeláez..
38

Foto: Marujita y su hija Marlene. En la acera de los Tamayo.

Además con ellos vivía un mecánico industrial, excelente


persona y gran amigo: Guillermo Báez Niño: “LoLo”. Procedente
de Málaga Santander, el tenia su propio taller de mecánica, más
tarde se convirtió en pequeño empresario al inventar y patentar
un aparatito que usan los mecánicos para los frenos de los
carros. A la muerte de “lolo” quedó encargado del negocio su
hijo Miguel Ángel Báez.

Su hermana Adelina Báez, vivía con su esposo el Sr. Jairo


Gómez y sus hijos en la casa siguiente o vecina a la familia de
Jesús Mesa, padre de los mesas. Entre los hijos de esta familia
que también vivió en arrabal varios años tenemos: Javier,
Adolfo, Ximena, y Marcela. Luego ellos se mudaron a vivir a
Manrique y en total ellos tuvieron 7 hijos. El Sr. Guillermo Báez
tenía un hermano llamado Demetrio Báez. Y otro hermano
llamado Daniel Báez, fotógrafo muy famoso en Medellín, y padre
de Natalia ahora viviendo en España.

Carola también sobresalió por ser del grupo de personas


emprendedoras, que estaba siempre lista cuando se trataba de
servir al barrio.
39

Foto: de izquierda a derecha: casas de Carola, las Castrillones y los Tamayo.


El otro hermano de Carola EFRAIN, también es conocido en
arrabal. Este vivió un tiempo en arrabal, y para refrescar la
memoria de algunos de los viejos que leen esta historia, basta
comentar que, Efraín era el padre de Jaime “guarapo” y de
Estela Gómez, hermosa mujer que se casó con el futbolista
Edgar Mallarino. Estelita ya falleció.

Otra de las hermanas de Carola era Rita, de ella solo


mencionamos a su hijo, Memo ·”chicania” conocido por muchos
de nosotros y su hermana Nora Palacio, casada con Luis Carlos
Gómez el músico y dueño de la orquesta: The new star club, el
cual se inició con Laureano y su grupo de gomosos en la década
del 50. Esta familia de primos de Miguel “poma” y Pacho
“negro”, tuvieron 12 hijos casi todos profesionales. Actualmente
viven en la floresta.

2.10 LA FAMILIA DE LOS CASTRILLONES.

Fortunato Castrillón e Inés Martínez su mujer y sus hijos: Jairo,


Heroína, Ofelia, lucia, las Mellizas Amelia e Isnelia,
conformaban esta distinguida familia. En esta familia los más
longevos recodamos con cariño a Pastorita la abuelita de todos
los anteriores y madre de Fortunato.
40

Fortunato jubilado del ferrocarril de Antioquia, y famoso como


“pescado de línea”, pues este era su hobby predilecto, al punto
que los muchachos por molestar decían que los peces que traía
cada ocho días Fortunato, los compraba en la Plaza de Cisneros
y que una vez borracho los llevó a la casa fritos.

Sus hijas estaban casadas así: Heroína con jorge torres


“popillo”, gran caballero, persona y amigo. Lucia, con oscar
Gómez. Es de anotar que murió muy joven. Ofelia, esposa de
Gabriel Ospina, otra excelente persona y caballero. Del
recuerdo que en una navidad siendo nosotros muy pequeños, en
una pelea con un homosexual, le fue cruzada la cara de una
cuchillada que lo marcó para siempre. Las mellizas, casadas
con dos grandes muchachos y amigos de infancia: Gustavo
“pava” y Leonel Cano el narigón de la floresta. Isnelia, cuyo
Marido era Javier Ochoa, el boquiabierto. y finalmente: La única
solterona :Amelia.

Recuerdo a las Castrillones por ser personas muy alegres,


cordiales, amantes del baile y buenas vecinas.

2.8 LA CASA DE LOS PARIAS.

Emilio Parias, otro jubilado del ferrocarril de Antioquia era el


dueño de la vivienda que colindaba con la casa de los
Castrillones. Estos eran nuestros vecinos directos. En dicha
casa vivía sin ninguna duda la persona más anciana que ha
tenido arrabal: Adelina Parias, la cual murió ya en la época del
70. Además componía este núcleo familiar, Adelina Parias y su
mamá, Arcela Parias, casada con Obdulio Tamayo y sus hijos:
Rosalía, Amparo, Javier, las mellizas; Liiria y Gladys, Oswaldo
Victoria y Euler.
41

Foto: tres grandes matronas de Arrabal: Arcelita, Doña Elcy(esposa de


Cordobita y Carola Gómez.

De Adelina puedo comentar que fue esposa de un cómico


Salvadoreño: “El cantinflas Salvadoreño, con el cual tuvo una
hija, posteriormente y una vez separada de este caballero, se
unió a Pompilio Herrera. Adelina con Inesita Duque bailaban
muy bien y pertenecían al grupo de danzas folclóricas de
Medellín, además se desempeñaba eficientemente como
modista.

Rosalba Tamayo, desde muy joven se unió a “rayo” un artista de


circo Peruano. Victoria, y una de las mellizas se encuentran
también en el exterior.

Infortunadamente, falleció Oswaldo, el cual era un muchacho


bueno y del cual guardo gratos recuerdos. Cariñosamente le
decíamos el “ovejo”.

Javier, es quizás el miembro de esta familia con mayor


presencia en el barrio gracias a sus logros deportivos,
excelente jugador de Fútbol, con recorrido completo desde la
selección Antioquia hasta la selección Colombia. Hombre
42

altruista, buen vecino y compañero, servicial con sus amigos


durante sus épocas de gloria. A el y a su familia, los llevo en el
corazón y les deseo lo mejor.

Es de anotar que en la casa de los Tamayo, fue donde vi por


primera vez un televisor a colores en el barrio arrabal, enviado
por las hijas que se encontraban en el exterior.

Aquí merece especial mención Arley Giraldo esposo de


Amparito, el cual en mi concepto es el mejor dominador de
pelota y el más ágil jugador que conocí en mi barrio, lastima que
no hubiera tenido las suficientes oportunidades para haber sido
jugador profesional.

2.12 LA FAMILIA GALINDO CANO.

Como ya se dijo antes esta familia a la cual tengo el honor de


pertenecer, es con los Parias, y con Cacharro y Misaelito, las
más antiguas del barrio.

Foto 4: Casa de Nena de Galindo en la foto: mi esposa, Nena y Emilio.

Conformada Inicialmente por Pedro Antonio Galindo, también


jubilado del ferrocarril de Antioquia y Magdalena cano “nena”.
Sus hijos Martín Emilio Galindo y Olga. Estos recibieron el
estudio necesario en la Escuela Rémington a pesar de que no
43

ejercieron sus conocimientos en contabilidad mercantil,


mecanografía y taquigrafía.

Foto: Nena Cano, Pedro Galindo, Olga y Honorio Rivera.

Emilio construyó familia en el barrio campo amor en la década


del 60. Quizás el único hijo de Emilio que vivió una temporada
en Arrabal, fue Orlando “pambiche”.

Por su parte Olga mi madre, era la esposa de Honorio Rivera


chofer de carretera y posteriormente chofer de san Javier la
Puerta hasta su muerte sus hijos fueron: Gildardo, Gabriel,
Magdalena (la cual vive en arrabal hoy con mi otro hermano
Álvaro: “amba”), lucia, gloria, Patricia, Honorio, y León ya
fallecido. Ella vivió no solo en la casa de nena la abuela, sino
que lo hizo también en: una casa de Jesús Mesa, cerca de la
fabrica de tubos, en piezas en casa de Agripina Londoño y en la
casa enseguida de la tienda del mono Tamayo.
44

Foto 4: Se encuentran en la foto: Honorio Rivera y Gabriel Rivera, Pedro


Galindo y Amba y Honorio “el negro”.al fondo Emilio Galindo, Nena Cano y
Nubia castrillón . Esta foto tiene 57 años de tomada.

También en esa casa que tantos recuerdos nos trae, vivió el


hermano de mi abuela nena, José Cano, el cual era conocido por
todos. Albañil de profesión, era un hombre nómada capaz de
irse años a trabajar a Urabá, y aparecer de repente en Arrabal
para quedarse. Hombre amante del aguardiente y del fútbol,
buena persona y buen amigo, amante de la poesía de Julio
Flórez y de la música ranchera y el tango. Sus hijos fueron:
Pedrito y Edgar Cano. Este último es quizás más digno de
mención, por hacer parte de nuestra niñez y de la vida del barrio
ya que era conocido como excelente portero de fútbol, a pesar
de su poca contextura física. Actualmente vive en el barrio doce
de Octubre.

Foto: Emilio Galindo y posiblemente Aura Gómez, José Cano Olga Galindo y
Pedro Galindo, Nena y desconocido.
45

En cuanto a mis abuelos maternos es bueno dar a conocer que


Pedro Galindo, junto con Marquitos el papá de Carola Gómez,
fueron quizás los únicos habitantes de arrabal que Pelearon en
la guerra de los mil días. En las tropas liberales de Rafael Uribe
Uribe para el caso de mi abuelo, y a ello debía su cojera, al
sufrir una herida de bala. Marquitos, combatió en las tropas
conservadoras.

Por su parte mi abuela Nena, fue una mujer pobre pero


excesivamente trabajadora y comprometida con su barrio y su
gente fue una de las fundadoras del centro cívico del cual
hablaré más tarde. El mayor reconocimiento es haberme
apoyado siempre, siendo ella la persona a la cual le debo todos
mis logros profesionales y todo lo que soy hoy tanto yo como mi
familia. Que Dios le haya premiado tanto esfuerzo y dedicación
para conmigo.

Recuerdo que mi casa sobresalía, porque según los muchachos,


tenía piscina. Y allí nos íbamos a bañar en barra.

Baño casa de Nena Galindo.

Recuerdo como en la sala había un gran cuadro de rojas Pinilla,


el cual también se encontraba en muchas casas. Como
anécdota tengo la siguiente: el dichoso cuadro estuvo desde el
13 de junio de 1953 hasta el 10 de mayo de 1957. Apenas
derrocaron a Rojas Pinilla, como por arte de magia
desaparecieron los cuadros de este de las salas de las casas.
46

Cuadro de rojas
Gracias a la pobreza, entre otras cosas gran erosionador de la
estabilidad familiar y barrial de Arrabal, mi casa, como muchas
otras, no estuvo exenta de tener que alquilar algunas “piezas”
para poder sobrevivir. Esto permitió que pasaran por nuestros
domicilios cantidades de gentes trashumantes y tan pobres
como nosotros.

En mis recuerdos voy a citar las personas que vivieron como


inquilinos en mi casa, y que de una manera u otra fueron
conocidos por las gentes del barrio, o querámoslo o no, hacen
también parte de esta historia; en la cual no cabe el chisme, el
resentimiento, la envidia o el odio que puede acompañar solo al
corazón del ruin.

Ellos fueron entre otros:

Gran cantidad de payasos, domadores, trapecistas y


saltimbanqui de los circos que llegaban a las mangas de la
plaza de toros la Macarena. Recuerdo al Capitán Joaquín
Maluenda, a su esposa, la cual fue la inspiradora de la canción
de Agustín Magaldi la muchacha del circo. A Pirinola, el payaso
tío de esta ultima, a Joaquina, hija del capitán y muy cercana a
mis afectos.

Recuerdo de manera especial a chepito, un humilde hombre de


San Pedro, el cual dormía en un rinconcito del comedor de mi
casa.
47

Vivió también José “Patalán”, un sencillo hombre, carretillero


de una fuerza descomunal, que era una ánima bonachona sin
licor y una bestia cuando tomaba.

También vivió Alonso Bedoya “Gurrimba” y rintin, así como


Máximo el volquetero, el canoso, un chofer de carretera que les
gustaba mucho a las mujeres de arrabal.

Recuerdos gratos me traen Dora, Marina y Ledy que eran


hermana y esposas respectivamente de Roberto y Alfredo, los
cuales eran meseros en la 70 en el restaurante Manhatan y
después dueños del restaurante Zorba en la 80.

Vivió también Chavela con su hermano y su mamá. Este


posteriormente se convirtió en el marido de la nena mi hermana,
siendo el papá de las dos hijas de esta.

Vivió también Nando Candela un chofer de San Javier con


Aurora, la cual después de los años se organizó con Pepe Mesa.

Vivió Blanquita y doña Laura.

Especial mención efectúo de Pepe Mesa, de la gran familia de


los Mesas, vivió muchos años en mi casa, este viejo era un
bacán en el amplio sentido de la palabra, lo conocí siendo muy
niño como administrador del café Arrabal, aunque según
entiendo, también fue carnicero en la plaza de Cisneros. Tacaño
y gran fumador y bebedor de aguardiente, guardador de cosas
para vender. En su afán de conseguir plata recogía desde tapas
de gaseosa, huesos y periódicos hasta cueros” de cigarrillos
Pielroja para venderle a los muchachos que les gustaba la
bareta. Su fiel compañero fue Kaiser su adorado perro que
siempre le vigilaba sus rascas, se convertían en especiales
cuando venía su hermano Alberto Mesa de Bogotá.

Ahhhhhhsssssssss era la exclamación cuando veía una mujer


que le gustaba. Su comentario siempre era el mismo: “esa si es
una maquina bien pesada”. Otra de sus famosas expresiones
era: ¡!! Déjemelo estar!!!
48

Pepe también acompañaba los equipos de fútbol del barrio y


estaba en todas las rumbas callejeras que se armaban. Que
descanse en paz Pepe ese gran caballero, dotado de una gran
cultura general, gracias a su acuciosa lectura diaria del
periódico el colombiano y de las revistas Selecciones.

Otro personaje digno de recordar fue Juan J Vélez: Juancho o


“salchichón” como le gritaban los muchachos para poder verlo
furioso. Este hermano de “Ernesto “tirajura” vivió muchos años
entre nosotros, nos ayudaba con dinero para ir a cine o comprar
cuadernos. En mi concepto era uno de los hombres más cultos
que conocí en el barrio Arrabal. Por medio de él conocí la
música clásica y las operas, operetas y zarzuelas españolas, las
cuales colocaba los fines de semana y nos explicaba su
contenido. Con fama de tacaño como su hermano, Opino lo
contrario, pues fue un hombre generoso dotado de una gran
sensibilidad, infortunadamente marcado hasta su muerte por la
infidelidad de su mujer y el abandono de sus hijos. Paz en su
tumba.

Recuerdo también a la Campirana, Aura, una dama en el barrio y


en la casa, pero que se rebuscaba en guayaquil donde era
asediada por los muchachos del barrio especialmente por Dimas
Piedrahita. Vivía con ella su hija una bella muchacha que siguió
posteriormente la profesión de su madre.

Otra de las personas dignas de mencionar y con la cual también


guardo muchos y buenos recuerdos es Nubia castrillón conocida
en el barrio con el apodo injusto de “la maletona”. Entre otras
cosas dicho remoquete nunca me lo pude explicar, ya que en
realidad no lo merecía y subjetivamente creo que le fue puesto
más por envidia que otra cosa. Nubia como comentaré luego al
analizar la familia Castrillon –Pareja, era ahijada de mi abuela
Nena y su madre la dejó a su cargo mucho tiempo, siendo una
hermana más nuestra y por lo tanto muy cercana a mis afectos.

Otros inquilinos fueron: Ismenia la madre de Arley Giraldo, y


Conrado el bombero, Teresa la bizca y los trovadores de la
pintada.
49

También vivió con nosotros el mocho el indio Rincón, el cual


vivía de pedir limosna en el centro de Medellín. Profesión esta
que hizo que fuera uno de los inquilinos más solventes que vivió
en nuestra casa.

Personajes que aunque no dejaron huella, pero que también


hacen parte de esta historia son los llamados COSTEÑOS.
Recordamos como en una época, 1961 más o menos, muchas de
nuestras casas alquilaron cuartos a estudiantes costeños y de
Barrancabermeja que estudiaban en la bolivariana, pero a todos
los llamábamos: los costeños. Recuerdo entre tantos a Ovidio
Beleño, que fue el primer novio de Edilma Vargas y a William
Aldana el novio de Miriam Gregory; todos ellos y los demás que
en el barrio vivieron pasaron desapercibidos a pesar de que le
caían mal a toda la muchachada, por el hecho de haberse
convertido en el centro de atracción de las niñas del barrio y
por ocuparnos la calle jugando béisbol con tapas de gaseosa o
por creerse todos boxeadores.

Quizás el único que no pasó desapercibido, ya que entro a hacer


parte del barrio fue: Tico- Humberto Spitalettta, este fue el
único que logró casarse con una muchacha del barrio una de las
hijas de blandina.: Albita. Tico, siempre ha sido gran caballero y
excelente profesional.

Vale la pena mencionar a dos costeños que aunque no vinieron


a estudiar sino a trabajar en Tejicóndor, también hacen parte de
la historia del barrio ellos son: Nelson willy y otro negrito
menudito que como el anterior vivían en la casa de Teresa
Pareja y los cuales eran a la vez jugadores de Béisbol.

Debemos de reconocer que los “costeños” trajeron nuevos


ritmos, nuevos bailes y mucha alegría al barrio a pesar de
caerles a muchos tan mal, disfrutamos compartiendo con ellos
su alegría y su música.
50

2.13 FAMILIA GOMEZ LOPEZ. Y GOMEZ RAMIREZ.

Esta familia tenía como cabeza de hogar a Jorge Gómez y su


esposa Blandina López, eran sus hijos: Álvaro Diego Nicolás
“papo”, blanca casada con Gabriel “chano”, Guerty, esposa de
Walter Castaño Alba, Esposa de Tico, estela, Esposa del
hermano de Mario Muñoz, Susa. Gloria, la mujer del “patisucio”,
Lida, la mas bonita de todas según mi concepto Janeth y
Mireya. Buenos recuerdos tengo de mis vecinos. Don Jorge,
hombre integro, nadie tiene que sentir en Arrabal de ese
caballero, aunque cuando se enojaba, cuentan algunos sacaba
revolver. Blandina con fama inmerecida de chismosa, gran
dama.

En la casa de Blandina como ya quedó dicho, existía uno de los


primeros televisores que llegaron a arrabal, desde su ventana
veíamos los programas de esa época, la diferencia con las
Cárdenas consistía en que cuando no soportaba la bulla de la
muchachada cerraba las ventanas y no nos quedaba más que
mirar por las hendijas de la ventana o irnos para donde las
Cárdenas. También eran las famosas paletas de blandina, las
cuales cuando había, comprábamos los muchachos con avidez.

A este núcleo familiar, corresponde también la familia Gómez


Ramírez, compuesta por Andrés Alberto Gómez: “berto” y Evelia
Ramírez. Sus hijos fueron: Aura, Oscar “lampara”, esposo de
Lucia castrillón, Juan Casado con Aura Córdoba. Tanto Juan
como Oscar eran detectives del SIC (servicio de inteligencia
Colombiano, en antecesor del Das). Jairo “huevito”, Ofelia y
Laureano. Este excelente músico, quien lograra ser figura del
conjunto los graduados de Gustavo Quintero.

Foto 5: Evelia la esposa de Berto Gómez.


51

Familia, Como todos los Gómez, de raigambre conservadora, al


punto que Humberto colocó el nombre de Laureano, a su hijo a
fin de rendirle honores al presidente conservador: Laureano
Gómez.

En su casa se reunían periódicamente una gran cantidad de


personas adscritas a la sociedad mutual de Cristo Rey, con la
cual Humberto brindaba oportunidades de exequias a una gran
cantidad de gente pobre de Medellín. Con esta familia y
especialmente con Ofelia y con miryam la hija de Aura, tuve
unos nexos especiales de amistad y afectos y siempre las
recuerdo con mucho cariño y respeto ya que fueron
protagonistas de mi infancia y adolescencia en nuestro querido
barrio.

Familia muy representativa en el barrio eran los Gómez. A ella


también pertenecía: Esperanza Gómez. Vieja jubilada de la
colombiana de tabaco, la cual elaboraba sus propios cigarros a
su gusto y para su consumo. Aún recuerdo los buenos consejos
de Esperanza cuando conversábamos en su ventana. Con ella
Vivian: Carlos Garavito y su mujer Emma, excelente persona
esta última.

También vivieron mucho tiempo en este hogar en el viejo


arrabal, su hermano José “Jalea” y su esposa Ligia, la cual era
modista sus hijas la mayoría de ellas bonitas eran: Rosalba,
Nubia, Nancy y Cruz Ana. Se me escapa en estos momentos el
nombre de la mayor aunque si no estoy mal su nombre era
Adelina. La hija menor de esta familia era Elizabeth.

De este núcleo familiar destaco su espíritu altruista y cristiano,


comprometido con el bienestar del barrio como veremos
después.

Para efectos de ubicación anoto que estas familias vivían


exactamente al frente de la casa de Blandina de Gómez y la
nuestra.
52

2.14 LA FAMILIA DE QUICA CASTRILLON.

Muy pocos en el barrio arrabal se acuerdan de Quica, ella es


precisamente una de las mas antiguas pobladoras del sector. Su
pronta salida del barrio, puede ser la causa de su olvido, sin
embargo muchos recuerdan a su hijo Octavio “el Ojón” y su
hermana Blanquita, una flaquita esbelta y bonita, que era
azafata de Avianca, y a la que las malas lenguas – que nunca
han faltado- en nuestro querido barrio, le achacaban de amantes
a todos los pilotos habidos y por haber. Con ellos también vivía
una niña de nombre Amparito, la cual fue compañera de
estudios primarios de muchas de las muchachas de la época.
Cuentan que cuando se le preguntaba a Quica donde estaba
Blanquita, ella respondía: “Está volando mija”.

Después de desocupar la casa Quica, pasó a ocuparla doña


Benilda, una mujer bonita de hermosas piernas, la cual despertó
la admiración y las ganas en todos nosotros. Ella y su esposo e
hijos, también fue fugaz en nuestro barrio. Luego llegó una
negrita, simpática llamada Celina, de Apellido Cossio, según me
han comentado. Ella es aún la propietaria de dicho inmueble.
Recuerdo brumosamente, que era la novia de “Costaleja”, uno
de los hijos habidos en otro matrimonio de don Rafael Guerra, el
cual también hizo parte de nuestra gallada de amigos.

2.15 EL ARCA DE NOE.

Así llamábamos a la casa de dos pisos ubicada en la esquina de


la 64 con 42, a una casa, en mi concepto la más mal construida
de todo el sector. Sus escalas al segundo piso, eran
francamente desastrosas y terribles de subir. Estas escalas
fueron clausuradas posteriormente con un muro. Todos
recordamos la risa que nos daba cuando llegaban encomiendas
o cartas y los carteros empezaban a tocar en la pared donde
antes había estado la puerta.

Esta casa fue habitada por muchas famillas entre ellas


sobresalen en mi memoria las siguientes:
53

2.16 LA CASA DE ARGEMIRO.

Recuerdo que en el primer piso Vivía un lechero de origen


campesino llamado Argemiro el cual vivía con su mujer y sus
dos rollizas hijas de las cuales solo me acuerdo de Georgina.
También me acuerdo de su hijo al cual nosotros llamábamos
“pilón”, el fue un compañero de infancia nuestro.

Posteriormente vivió Doña luz, una señora gordita y blanca que


colocó una tienda donde comprábamos helados. Ello ocurrió
exactamente en 1954.

2.17 LA CASA DE LOS “GAGOS”.

Después de Doña Luz pasaron a habitar las dos casas (la de


arriba y la de abajo) los Gagos. Llamamos así cariñosamente a
la familia de don Guillermo Valencia y su esposa de ancestros
Manizaleños sino estoy mal. Sus hijos eran: Guillermo, Mario,
Olga, rubí y otra muchacha que se me escapa su nombre. En
esta familia casi todos exceptuando a Rubí, sufrían del mal de
la gaguera. Vivían del trabajo de su padre en proleche y de su
gran capacidad para rebuscarse por medio del negocio. Fue así
como colocaron en el piso de abajo una tiendita, que se
convirtió en el “parche” del momento para la muchachada de
Arrabal. Creo que ha llegado el momento de pedir perdón,
especialmente a Olguita, por tanta impertinencia y cansonería
por parte de nosotros, a la vez que se hace necesario felicitarla
por su paciencia, su capacidad de aguante y por no haber
perdido nunca la compostura.

Recuerdo como durante mucho tiempo, permaneció un carro de


leche viejo, de propiedad de don Guillermo, en el cual todos los
niños del barrio hicimos nuestro primer viaje como “chóferes”
dejando volar nuestra imaginación al mover su dirección y su
palanca. Que tiempos aquellos, donde todo era tan sano e
ingenuo. Razón tenía el poeta al decir: “todo tiempo pasado fue
mejor”.

En la esquina recuerdo la refresquería de Parra. Bernardo Parra


para ser más precisos. Esposo de Libia la hija de Tirajura. Este
54

armó un ventorrillo, donde vendía frescos a la muchachada.


Todos tomamos frescos de Parra, elaborados no con mucha
higiene, pero sabrosos.

2.18 LA CASA DE OTILIA LA GORDA.

Después que los gagos se fueron, la casa quedó desocupada


mucho tiempo, convirtiéndose sus vidrios en el tiro al blanco de
todos nosotros, quienes desde la esquina de Camel nos
encargamos que no quedara uno solo.

Esta casa fue luego alquilada por Otilia la Gorda y sus hijas de
las cuales solo recuerdo el nombre de Rosalba. Una de sus
hijas, era la compañera de Carlitos “Barragán”. Entre sus hijos
había un “pelado” el cual se mantenía metido en problemas,
haciendo sufrir a la gorda, que buena persona es y la cual
siempre me recibió en su casa con ganas. Cuando hablo de
ganas me refiero a los deseos, simpatía y gentileza, con que era
recibido uno en algunas casas de Arrabal, en contraste con
otras, en la cuales aunque entraba “todo el mundo”, uno notaba
rápidamente que no era bien recibido. Gratos recuerdos tengo
entonces de esta sencilla mujer, que se manejó siempre bien
conmigo.

Una anécdota de dicha casa es la siguiente: la puerta que daba


a unas escaleras fue clausurada y sellada con cemento y
nosotros gozábamos cuando llegaban los carteros elevados a
tocar en la supuesta puerta.

La última familia que conocí viviendo en dicha casa fue la de


Eleuterio, el cual también tenía su tienda de víveres. Este tenía
también varios hijos, uno de los cuales le dio muchos dolores de
cabeza al pobre viejo.
55

2.19 COLORETE Y LA GORDA.

En la casa siguiente al voltear la esquina en dirección oriente,


queda una casita de la cual recuerdo poco. Solo se que allí
vivieron Colorete (un habitante mas o menos reciente del barrio,
el cual por su coloración rojiza, las gentes le colocaron ese
apodo) y su mujer una flaca que también tomaba aguardiente
con él. Luego de esta fallecer; se rejunto con una gordita que
vivió en mi casa un tiempo antes.

Dicha casa también fue ocupada por Iván hermano de Jaime


Pirra y Gisela.

2.20 LA FAMILIA DE RUBEN DURANGO.

Esta es una de las familias más antiguas de arrabal, según mi


concepto. Ella muestra el ancestro campesino de muchos de
sus habitantes, a la vez que marca la transición del campo a la
ciudad.

Innumerables montañeros poblaron el barrio Arrabal en sus


inicios. Esta familia sencilla y buena fue una de ellas.

Conformada por Don Rubén Durango y su esposa doña Ana. Su


prole estuvo conformada así: Eduardo, Santiago, Un bacán el
cual desde niño me inspiró confianza y al cual recuerdo con
cariño. El era uno de los técnicos eléctricos del barrio junto al
Mono Luis, Luz la cual contrajo matrimonio con Antonio
Bedoya, el cual era hermano de Alonso “gurrimba”, esposo de
Diosa, hermana de Ita, son sus hijos: “la loca luisa” uno de los
personajes típicos del barrio, Es de anotar que uno de sus hijos,
al cual conocí siendo él demasiado niño, logró ser un futbolista
profesional .Ello me alegró mucho cuando me enteré, ya que
estoy seguro que este muchacho, cambió la situación
económica de su familia. El otro hijo de luz al cual recuerdo es
Diego “el gago”·
56

En la foto Rubén Darío Bedoya y su esposa Rossy Molina, Arrabalera por


adopción.

Susa, era otra hija de Don Rubén, ella era la esposa de “Mayey”
un chofer de la bus del barrio la América, el cual era amigo
personal de mi padre, y me tenía gran estima. No recuerdo
cuantas veces esperé el bus de Mayey para ganarme el pasaje
cuando iba para la Universidad.

De esta familia, estas son las personas que recuerdo, pero en


mi es imborrable la escena mañanera, en la cual las vacas de
Don Rubén eran ordeñadas. El olor a campiña era innegable. En
este ambiente sano y agradable transcurrieron nuestros
primeros años, y es por ello que a todas estas humildes gentes
siempre llevo en mi y recuerdo con cariño.

2.21 LA FAMILIA AGUDELO.

En esta vivienda vivía ancestralmente la familia de Víctor


Manuel Agudelo, otro de los más antiguos miembros del barrio.
Este personaje es en la historia de arrabal, el primer asesinado
en su barrio en lo que yo conozco. En la mitad de la calle, de la
64 con 43, cayó asesinado a cuchillo, por un inquilino a quien
supuestamente, fue a cobrar el arriendo de malas maneras y
con humillaciones.
57

Cuentan las “lenguas “de arrabal, que había noches oscuras en


las cuales después de las doce de la noche, muchos vecinos
que llegaban tarde a la casa, veían al espanto de Don Víctor
Manuel, revolcándose en el suelo. Como ven esto hace parte del
mito, pero históricamente hay que contarlo.

Carlos “Cañola y su esposa son los mas conocidos por los


arrabaleros de antaño. Chofer ordinario bebedor y tahúr, al cual
las mujeres de bien le tenían terror por su abierta vulgaridad.
“Cañola”, no paraba en mientes para mostrar sus genitales sin
importarle mujeres y niños. Después esta familia se fue a vivir a
la floresta: Los hijos que recuerdo de esta familia son: Yolanda
la mayor, casada con Hernán el tío de Darío Gil. Ruth, en mi
concepto la más bonita, Manuel, ahijado de mi abuela y junto
con Mario, su hermano menor, compañeros de Infancia. Tuve
oportunidad hace varios años de conversar con Manuel, en el
seguro Social, donde trabajaba como portero. Recordamos
épocas y compartimos anécdotas y recuerdos gratos e ingratos.
De las otras hijas de Cañola, aunque las recuerdo, no tengo
claro su nombre.

Uno de los recuerdos que me quedan con esta familia es el


saber que en un baile en dicha casa, fue la primera vez que
bailé, lo hice con Ruth Cañola y la canción fue Roberto Ruiz.
Creo que esto ocurrió en 1958.

Posteriormente vivió en esta casa un viejo muy querido y un de


los peluqueros nuestros el cual tenía su negocio al frente de la
puerta de Tejicóndor. Don Abelardo, conocidos por los viejos
arrabaleros como: “Chispín”. Este y su esposa eran los padres
de Hernán ya mencionado, de Fabiola y de Yolanda “la
matadora”, madre de dos amigos de infancia: Hernán Darío Gil y
su Hermano, Jorgito. Compartí más con Hernán, este muchacho
era un excelente jugador y amigo y hace parte de aquellos
preferidos. El apodo de matadora, lo recibió por haber matado a
su marido en la galería de la plaza de mercado de Medellín,
después de cansarse de los ultrajes y malos tratos que de él
recibía.
58

Ya a mediados de los 60 se pasó a vivir la familia de don Pedro


el carretillero(Pedro Hilachas) y doña Laura y sus hijas Hita, y
Diosa “rintin” y Gustavo su hijo adoptivo a esta vivienda.

Si no estoy mal en dicha casa también vivió Jhon Cárdenas y su


familia. Pues en esa vivienda recuerdo el Celebre puñetazo que
le dio el “maravilloso” un famoso peleador del barrio Antioquia a
Jhon, en una pelea que a todas luces perdió.

2.22 LA FAMILIA ALVAREZ.

Esta es también una de las familias más representativas del


barrio arrabal, por ello que aunque las denomino: familia
Álvarez, por razón de orden las subdividiré a continuación.

2.22.1 LA FAMILIA DE JOSE “CACHARRRO”.

Familia antiquísima en arrabal, mi abuela comentaba como José


Álvarez “cacharro” había sido también uno de los primitivos
pobladores de arrabal. Su mujer era la negra Emilia, y su cuñada
era la negra Alicia “la Cigarra”, aunque nunca supe quien fue su
marido, esta tenía una hija llamada Dora, la cual a su vez, tuvo a
Marlenny, otro personaje típico de arrabal.

Particular mención hay que hacer en este escrito de Alvarito “el


quemao”, hijo de Dora y al cual recuerdo con cariño.

Sin lugar a dudas uno de los mejores quesitos de arrabal, se


elaboraban en la casa de “cacharro, allí trabajaban todos los
Álvarez. Pues recordemos que las cárdenas no se quedaban
atrás. Los Álvarez, combinaba su trabajo con la polvorería, la
cual Ejercían con maestría.
59

Cacharro junto con Rubén Ramírez, fue uno de los mejores


polvoreros de Medellín. En su casa entraba el “perro y el gato”,
Su televisor blanco y negro, fue con el de Blandina y las
Cárdenas, los tres primeros televisores del barrio. Allí íbamos
especialmente los domingos a ver las carreras del 5 y 6 el juego
de moda.

Cacharro tuvo un hijo, llamado Octavio, el cual murió muy joven,


llevándose la alegría a esta familia.

Años más tarde la casa fue transformada por nuevos


propietarios en casa de dos pisos, en el primer piso vivo la
familia de Mario Montoya. En el segundo piso un señor muy
amigo de los “gagos” a quien le decían el Bogotano, el cual vivió
allí varios años, aunque esta familia no fue tan permanente
como la familia de Mario Montoya. Con el Bogotano vivía un
muchacho apodado también el Bogotano, el cual le trae
recuerdo a muchos.

 FAMILIA DE MARIO MONTOYA Y DOÑA AURA:

Esta familia es bien especial en Arrabal. No existe en nuestro


barrio una familia que haya llegado a tantas uniones
matrimoniales con arrabaleros como esta.

Muchachas muy bonitas formaron esta apreciada familia. Entre


ellas recordamos a:

Doris, casada con Rubén Darío Arcila, Nora casada con Jairo
mecánico del barrio, Silvia soltera; Piedad, Gloria esposa de
pica, Zulima casada con Rodrigo Rendón quien también se
afinco en el barrio, Jackeline casada con León hijo de Alberto
Churumbelón. Claudia casada con Mario "gafitas" del talego y
Nena casada con el hijo del Boquiabierto e Isnelia.4

Recuerdos especiales tengo de Mario “pomponio”, el cual fue


compañero de juegos, aunque mas pequeño. Los cabeza de
familia eran don Mario y doña Aura. Relevo a Don Mario por ser

4
Datos aportados por Luis Fernando Cardona A “pica”
60

una persona que siempre reconocí como una de las más


decentes del barrio.
2.22.2 LA FAMILIA DE ADELINA ALVAREZ Y ROBERTO PIÑA.

Javer Cardona y Diego Bedoya.

Al declinar la producción de quesitos donde cacharro, continuó


en la otra casa de la familia Álvarez, representada en Adelina y
Roberto “piña”, otra de las celebridades del barrio. Sus hijos
son: Gabriel con residencia en Bogotá, el cual venía muy poco a
Medellín. Martha, mujer de Ramiro Cardona, cuyos hijos eran:
Marisela, Javer, Bernardo. Gilberto, mecánico. Gustavo y
Conrado “chiviche”, los cuales eran jinetes famosos en su
tiempo del hipódromo San Fernando y luego del nuevo
hipódromo en Itagui. Horacio “Chacho” , del cual recuerdo a la
“mocha” su mujer, la cual era “muy buena moza” como dicen los
viejos . De este matrimonio recuerdo la puñalada que le pegó
con una lesna, “quinua” a chacho supuestamente por líos de
faldas ocasionados por la “mocha”.

También recordamos en esta familia a: Amantina la mujer de


Nectalí Álvarez, el cual con José patalán, eran los encargados
de trastear la leche para los quesos, en carretilla desde
Proleche Recuerdo a Gisela y Neno, hijas de Conrado e Hita y a
Héctor ·”terra”el hijo de Amantina.
61

En la foto: de derecha a izquierda: casa de tirajura, casa de los piñas, casa


de Máximo y casa de los Avendaños.

También recuerdo, José Zeppelín, el cual tenía un gran tumor,


producto de un golpe dado en su cabeza por la policía.

Especial lugar ocupa Morrongo, uno de los sastres mas viejos


de arrabal. Amante del fútbol y miembro activo de nuestras
galladas.

A morrongo fue el primero que le conocí una maquina de aplanchar como


esta: que trabajaba con carbón.

La casa de los Piñas sigue siendo famosa hoy por ser


considerada sin lugar a dudas como el club social de arrabal.

2.23 FAMILIA CASTRILLON PAREJA.

Su casa es la que hace esquina mirando hacia la avenida


bolivariana. Familia que llega de Barrancabermeja donde tenían
como propiedad el famoso bar. “palmeras”, podríamos decir que
62

para la época eran personas adineradas que compraron dos


grandes lotes, construyeron dos grandes casas: una donde
habitaron y la otra donde actualmente vive Rodrigo Milán.

En la gran casa de la esquina, vivía, Teresa Pareja, mujer de


Fernando Castrillón “cañitas”, el cual era oriundo del municipio
de concepción y venía a Medellín muy poco. Con el vivían sus
dos hijas adoptivas: Nubia y Mery, la cual posteriormente
emigró donde su verdadera familia. En esta casa vivió un
hermano de Nubia: Alfonso Blanco, el cual también es conocido
por los arrabaleros de nuestra generación.

En la pieza de abajo, contigua a la caza de cacharro, vivió en


alquiler chano y su mamá. Luego se encontraba localizado el
bar. TBC.

Al llegar a la esquina y volteando en dirección a san Juan,


estaban ubicadas las casas de Rodrigo Milán el pasaje de
Cacharro y una casa de las Cárdenas , en la cual vivió Olga
Galindo mi mamá. En ella nació mi hermana Lucia “la ñata”.
Recuerdo de estas casas la explosión de la polvorería de
cacharro a principios de los años 60 un 8 de diciembre.

De estas casas es digna de mencionar la casa donde


actualmente vive Rodrigo porque en ella vivió inicialmente:

2.24 LA FAMILIA DE LA GORDA NELLY.

Esta es otro personaje típico de Arrabal, casada con Horacio el


papá del mocho y de Horacio Tata, el cual marcó historia en
Arrabal. A esta familia pertenecía también la hermana de Nelly,
la cual fue mesera en varios de nuestros bares y es la madre del
mariquita “Julia” también, otro pintoresco personaje del barrio y
de Julio Rave, otro muchacho digno de mencionar en esta
historia. Recuerdo también a la “negra Rosalba” la cual en su
juventud era muy atractiva, después fue también mesera del
bar. Moscú.
63

2.25 OTRAS FAMILIAS PERDIDAS EN EL RECUERDO.

ontinuando con nuestro viaje por las familias del barrio,

C nos ubicamos ahora al frente del bar TBC, y encontramos


una serie de casas viejas que ya no existen, pero que en
el arrabal de principios de los años 50, albergaban en su orden
a: Doña Rita, una ancianita que vivía sola y se caracterizaba por
darle golosinas a los muchachos.

La familia de FELISA. Esta era la mamá de Hita mujer de


Conrado piña. entre sus hijos recuerdo a Carmelo “Melo”, un
mecánico de barrio triste, a Orlanda y al “mudo” el cual era
compañerito de infancia nuestro. Vivieron un tiempo en el viejo
Arrabal y luego sentaron sus reales en el Barrio Antioquia.

Las casitas donde habitaba estas gentes, fueron demolidas y


dieron paso a las casas de una familia nueva en el barrio.

2.26 LA FAMILIA CASTAÑO.

Compuesta por Sebastián Castaño y Doña Celia su mujer. Esta


era en mi concepto una familia pudiente, que construyó dos
grandes casas de dos pisos, bonitas y cómodas. Los hijos que
recuerdo de esta familia son: Tian, el cual fue otro de nuestros
peluqueros, Dagoberto, del cual tengo más recuerdos y su hija
menor la novia de siempre de Héctor Córdoba y Walter.

Que yo recuerde, fue Sebastián castaño el primero en Arrabal a


quien conocí automóvil particular. Ello marca la solvencia
económica de esta familia tan importante en nuestro barrio
como trataré luego.

La casa de la esquina de esta familia, fue ocupada después por


la familia de don Guillermo Valencia, padre de los “gagos”.
Anoto que posteriormente y en la casa contigua vivía Fernando
Lampión.
64

2.27 LA FAMILIA DE LOS CORDOBA.

Esta es otra importante familia, que llegó a nuestro barrio como


la anterior, procedente del barrio Antioquia, y a pulso y con
participación activa en el progreso del barrio, se ganó un puesto
bien merecido en su historia.

El jefe de familia era Juan Córdoba, su esposa una excelente


dama: Melita. Sus hijos según me acuerdo hoy fueron:

Antonio Córdoba. Épico jugador de fútbol del deportivo


municipal, posteriormente el Atlético Nacional, tuvo a su haber
el honor de haber pasado a la historia al marcar gol en la
inauguración del estadio Atanasio Girardot, gran entrenador y
mecenas de jugadores del barrio así como excelente persona.
Casado con doña Elsy, comadre de mi mamá, al ser la madrina
de Lucía mí hermana. Excelente dama que merece todo mi
reconocimiento.

Alfredo: luchador y persona comprometida a nivel sindical en la


defensa de los intereses de los trabajadores. Fue una de las
pocas personas que conocí en el barrio con una abierta posición
política de izquierda, ya que estaba influenciado por el Moir.

Mariela: toda una institución. Líder popular y política a morir en


sus ideas liberales, siempre pensando en como servir desde sus
influencias al bienestar del barrio. Casada con Alberto Olaya;
sus hijos fueron:

Sonia: de la cual guardo imperecedero recuerdo, ya que fue la


primera bachiller y posteriormente la primera profesional del
barrio. Logró ser representante a la cámara por el partido
liberal, excelente líder también como su madre comprometida
con los más necesitados. Aun recuerdo su grado de bachiller. La
vi. De toga y fumando tabaco, ello me impresionó mucho, y
desde ese momento afianzó mi compromiso de seguir
estudiando para igualarla y de pronto superarla. Creo
sinceramente que no fui inferior al reto que me propuse, pero
reconozco en este escrito, que fue mi ejemplo a seguir, y estoy
seguro que ella nunca lo supo hasta ahora que lo escribo.
65

De Sonia otras personas del barrio recuerdan como entretenía a


la muchachada contándoles cuentos en la acera. Todos
recordamos el cuento de Maria Chunchurria.

Imperio, Betty y Gloria así como su hermano, completan esta


familia emprendedora y de grata recordación en nuestro barrio.

Otros de los hijos de don Juan fueron:

Héctor: con el cual he compartido más y lo considero parte de


mi círculo de amigos que dejé en el barrio. Buen Jugador de
fútbol, buen amigo y parrandero por excelencia.

Lilia y Nora, la esposa de Alberto mesa. Y finalmente:

Aura, con la cual tengo un afecto especial, ya que fue la


persona – de las mujeres- con la cual mas traté y siempre me
demostró amistad y cariño desinteresado. La recordaré
siempre. Casada con Juan Gómez. Recuerdo con cariño a su
hijo Fernando y a su hija Diana.

Papel importante ha desempeñado como protagonista de esta


historia: 25 VEINTICINCO. Hombre callado y tranquilo pero listo
a servirle a quien lo necesite.

Porque no recordar también en estos momentos de nostalgia y


gratas reminiscencias a su perro negro, “DIABLO” quien con el
perro de cacharro y con NERON el perro nuestro, NEY y LA
ZARCA, se convirtieron en el terror de toda la muchachada de
Arrabal al ser los perros mas bravos. Se hace necesario
mencionar otra vez en este párrafo dedicado a la historia
perruna a KAISER, el perro de Pepe.

Como veremos mas tarde, Juan Córdoba, fue uno de nuestros


grandes líderes y un ejemplo a seguir por las futuras
generaciones.

Esta familia alquilaba un apartamentito que tenía y uno de sus


inquilinos fue el negro Lampión. En toda la muchachada de
Arrabal, se encuentra vivo el recuerdo de un diciembre, en el
cual el negro lampión alegraba todos los días la cuadra con su
66

radiola recién comprada, con los acordes de Gustavo Quintero


con los Teen agers: “yo no bailo con Juana”, “la pachanga del
fútbol”,”se te quemó la casa”, eran entre otras, las melodías que
aun recuerdo y que escuchamos sentados en la acera de la
casa de los Córdoba.

2.28 FAMILIA AVENDAÑO. LOS CACHONES.

Vecinos a los Córdoba se encontraba la familia de los


Avendaño. Compuesta por Ramiro Avendaño y Doña Fanny su
esposa. Me parece estar viendo el carrito de Bestia con el cual
esta familia se ganaba el sustento diario. Don Ramiro viejo
amable, querido y buena gente. Aun en mi recuerdo se
encuentra vivo el trauma que me ocasionó la noticia de su
muerte.

Entre sus hijos están: Nury la mayor, Ramiro, gran persona y


caballero, siempre pendiente por estudiar y ser mejor como en
realidad lo logró.

Omaira, la eterna novia de Miguelito y la gran bailadora de


cuanta fiesta había en Arrabal.

Rosalba: la más agraciada de las Avendaño. Muy cercana a mis


afectos, ya que compartí mucho con ella. Recuerdo También a
Nubia, Noemí y Beatriz.

Javier y Napoleón “cachón”, sus otros hijos los cuales junto a


una hermanita que no recuerdo el nombre también hacen parte
de esta historia. Napoleón fue compañero de estudios en
Primaria en la escuela República de Chile.

A esta casa vinieron hace muchos años, los Perea, unos


negritos del Chocó, Tuci, pío Ciro, Hita y Nilda sus hermanas.
Ellos fueron compañeros nuestros de infancia. Su padre era don
Abigail Perea. Luego se pasaron a vivir en la casa contigua a la
de los Avendaño.

Particular Recuerdo dejó pío, el cual representó al barrio en un


torneo interbarrios, quedando subcampeón, aunque todos
sabemos que le robaron la pelea al negro. Esta familia volvió al
67

Chocó, y allí Hita desempeño el cargo de Abogada, Tuci en


Bogotá, alcanzó a ser el entrenador de la selección juvenil de
Colombia de básquetbol y Pío en la actualidad es el director de
la defensa civil del Chocó. Ellos pasaron al olvido, pero estoy
seguro que después de refrescarles la memoria a las gentes del
barrio, los recordaran con cariño.

2.29 LA CASA DE MAXIMO EL VOLQUETERO.

La casa contigua a la de los Avendaño, fue ocupada por muchas


familias. De estas solo recuerdo a la familia de Ivan “caquita”, y
a máximo el volquetero y su hija.

2.30 LA FAMILIA DE TIRAJURA.

Ya en la esquina se encontraba la casa grande de dos pisos de


Ernesto Vélez alias “Tira jura”, casado con Pachita. Los vecinos
le colocaron este apodo debido a su tacañería. Era además
dueño del pasaje de inquilinato ya mencionado, además era
padre de la flaca Libia, esposa de Bernardo Parra. Se cuenta
que malos negocios conllevaron posteriormente a la perdida de
sus propiedades, quedando tan solo el recuerdo de este
personaje, el cual con su sombrero y su permanente tabaco,
despachaba en su tienda, mientras nosotros molestábamos la
vida afuera. Tengo entendido que dicho local, todavía es una
tienda de abarrotes y licor.

2.31 LA FAMILIA DE LISANDRO Y LA ESQUINA DE CAMEL.

Cualquier “arrabalero” que haya tenido la esquina de Jabones


“Camel” como jugadero recuerda a Lisandro. Este personaje,
era el celador de la jabonería, el cual vivía en una pieza en la
esquina. Pobre Lisandro, quien tuvo que soportar las pilatunas,
la grosería y altanería nuestra. “el bobo Lisandro” salía a poner
orden y se tenía que entrar con el rabo entre las patas. Este
personaje fue otra de las victimas nuestras, como también lo
fue Modesto Araque, ya que la esquina donde vivía, era otro
sentadero de una gallada de pelados bien altaneros. Los
recordamos con Cariño.
68

En la esquina de Camel jugábamos pelota, y otros juegos de la


época, en ella también hicimos el primer sancocho de
celebración del día del barrio los 28 de diciembre.

2.32 LA FAMILIA ARCILA Y LA CASA DE ÑINGAS.

Al terminar la acera de la jabonería, se encontraba la casa de


los Arcila. Recuerdo al abuelito, un viejito bonachón regordete y
de sombrero, que siempre vestía “de cachaco”.también al resto
de la familia, pero al fin joven, mis recuerdos se centran en
Rubén, el cual compartió niñez con nosotros y su hermana
Cecilia, la cual aunque de baja estatura era muy bonita. Según
he conocido, ella se encuentra en los EE. UU. Rubén se casó
con una hermana de Mario Montoya “pomponio”, con la cual
tiene varios hijos.

Recuerdo especial viene a mí un 24 de diciembre, al darle una


vuelta al barrio, me encontré en la casa de los Hernández que
Vivian cerca de la casa de las Cárdenas; pues vaya sorpresa,
me llevé al hablar con Justo Betancourt el cantante de la Fania
en persona, ya que este era casado con una hermana de Héctor
Hernández el ex marido de Cecilia la bella hermanita de Rubén.
Departí un buen rato con él, y queda para el recuerdo, otro
personaje artístico de fama internacional que estuvo en Arrabal.

En el primer piso de esta vivienda, recuerdo particularmente a


Humberto García “ñingas”, su hermano y sus hermanas, sobre
todo a Isabel la esposa de Barragán mayor. Humberto fue
compañero de infancia y lo recuerdo con nostalgia.

2.33 OTRAS FAMILIAS Y PERSONAS DEL BARRIO. (CALLE 43)

Al frente de la jabonería camel estaban ubicadas las siguientes


familias o personas que recuerdo:

 LA CASA DE GABRIEL “PICHÓN” Y LIGIA, ubicada después


del solar de los Piedrahitas. En esta casa vivían también El
mono, su hermano Jesús y la hija menor de Ligia. La mayor
69

falleció en un accidente. Es de anotar que antes, estas


personas vivían en el pasaje de “tira jura”.

Recuerdo con Cariño a una familia que era artista de un


circo en el cual actuaban con el nombre de “los hermanos
Persa”. Ellos vieron en arrabal varios años, y Alfonso el
mayor de los hermanos fue compañero nuestro de juegos.
Su hermana mayor, fue una de las muchachas mas bonitas
que tuvo esa época.

 La En el piso de arriba vivía una señora a la cual llamaban


las gentes del barrio: la evangélica.

 En la casa contigua y en dirección a la carrera 65, vivía la


familia de LUIS “PEPO” : su señora madre. Su esposa, su
hermano Martín y los hijos de estos. Luis “pepo” fue otro
personaje del barrio que junto al aguililla y otros “chicos
díscolos merece mención a parte.

En esta casa vivió una señora la cual tenía una niña muy
bonita llamada Lucelly.

También vivió en la casa de “ñingas”, mucho antes que


ellos la ocuparan.

 EL PASAJE DE MOSCOSO: en este lugar recuerdo como


sus habitantes a Moscoso Padre – Gerardo, recuerdo a
Blanquita y su señora madre doña Laura, las cuales
siempre han vivido en nuestro barrio, caracterizándose por
ser personas trabajadoras, del hogar y responsables.
Siempre Admiré en Blanquita su responsabilidad para con
su mamá, una vez murió su padre, don Tomás. No hubo
ciudad de hierro que no tuviera a Blanquita trabajando
honradamente.

 LA CASA DE EUCARIS. Esta es otra de las familias más


viejas de Arrabal, las cuales luego emigraron a otros
barrios. Recuerdo a Norela su hermana y a ella, ya que
tiempo después laboró en el almacén Caravana.
70

 LA CASA DE ALEJANDRO CARRILLO. Este celebre jugador


de fútbol vivió en Arrabal hace ya muchos años. Aunque no
hace parte de los habitantes más antiguos, también ocupa
espacio en nuestro recuerdo. Obviamente sobresalió en el
campo deportivo. Siempre he sido un buen amigo de
Alejandro, el cual terminó como jubilado de la Universidad
de Antioquia. Su mujer estela de nacionalidad
Costarricense fue la segunda persona extranjera que vivió
en el barrio.

2.34. LA FAMILIA DE LOS “CION”:

Inicio su descripción con: Raúl negro y su bar. Este vivía en la


casa del lado con su esposa y sus hijos. Hombre dedicado al
trabajo y al hogar. Al menos uno de sus hijos fue siempre su
dolor de cabeza. Su esposa, estaba directamente emparentada
con la familia Álvarez como hermana de Nectalí cuya cabeza
era Concepción “Cion”.

Ción, vendía carbón en una casa grande y vieja, donde


cuadraban caballos de “bestia”, a esta familia pertenecen:
Gabriel Álvarez, “pichón, Nectalí Álvarez, Carlos Álvarez el papá
de Jesús y el mono y ex marido de Ligia. Menciono también al
mono Álvarez, al cual lo mató un carro en una feria de las flores.

2.35 LAS CASAS Y FAMILAS DE LA CARRERA 65.

Los habitantes de este sector, aunque pertenecen al barrio, no


tuvieron una presencia tan activa en el desarrollo del barrio, tal
vez con la excepción de los muchachos que se integraron a
nosotros.
Menciono a las personas o familias d este sector que aún
recuerdo:

 LA CASA DE RAFAELA.

Rafaela es otro personaje bien antiguo en el barrio, ella


era otra de las modistas. Conocida como la patrona de
Mario Cano y madre del “negro” Enrique, el cual fue otro de
71

los que tengo entendido, tienen un cierto nivel de estudio;


aunque yo lo recuerdo como agente de transito azul.

 LA CASA DE LOS CORREA.

Familia compuesta por Pedro Correa y su señora: Ifigenia. De


esta familia recuerdo a: Javier, quien fue compañero de
Infancia, a su hermano memo el cual vive en Cali, y a su
hermana Martha.

 LA FAMILIA DE MARIO FLACO.

Localizada en el pasaje de Etien. Esta familia, compuesta por su


madre Luzmila, León su hermano y el, llegó al barrio procedente
del barrio Robledo. En la historia del barrio, tiene más huella
Mario. Como futbolista, amigo de barra y de jolgorio de toda la
muchachada. Sastre de profesión. Inicialmente él y su familia
vinieron a vivir al pasaje de Moscoso. Mario, Es otra de las
personas que pude considerar amigas cuando viví en Arrabal.

Mario es también un personaje. Todos conocen las abundantes


anécdotas de la mamá, buscándolo en todas las casas y en
todos los bares del barrio. Los equipos de arrabal y
especialmente, “carrocerías Abarco” tienen mucho que
agradecer a Mario, cuando de defender los colores del barrio se
trataba. En su momento hablaremos más en extenso de Mario.
72

Mario Cano: otro personaje del barrio y uno de mis grandes amigos.

En el pasaje de Etien también vivió el mono luis y hace muchos


años vivió el ex técnico del América de Cali Gabriel Ochoa
Uribe.

Ya sobre la calle san Juan estaban ubicadas una serie de casas


habitadas por varias familias de las cuales recuerdo:

 LA CASA DE LAS PARRA.

De ellas ya mencioné en su momento a las personas que tengo


mas presente.

 LA CASA DE HERRERA EL ZAPATERO.

Herrera, fue otro personaje más o menos viejo en el barrio.


Inicialmente vivió en un pasaje grandísimo que existió donde
estaba el llamado edificio de Tejicóndor. El su esposa e hijas
vivieron varios años en la casa que se encontraba entre el solar
donde funcionó el taller de Natanael y la casa de un señor
trabajador de Tejicóndor, el cual tenía una hija que se llamaba
Marley Mejía, sino estoy mal.

Con Herrera, jugamos fútbol, ya que hacia parte de nuestra


gallada de muchachos para divertirnos en la cancha de la
“macarena”. Tuvo muchas hijas. De ellas recuerdo a una de
ellas, especialmente por ser la esposa de Jaime “bobo”.

 EL TALLER DE NATANAEL.

Recuerdos especiales me trae este taller, ya que en él


trabajaban: Horacio “tola”, otro histórico del barrio, gran
persona y gran jugador de fútbol, el cual según conozco falleció
de un infarto.

El otro personaje, era Orlando Maya, excelente persona y


caballero, al cual con Germán “Garra” y Chepito, tengo mucho
que agradecer, ya que siempre fueron generosos conmigo.
73

 LA CASA DE BARBARA.

Ubicada antes del bar. El Moscú, por la calle San Juan. Según lo
que conozco, el Local contiguo, que era antes un solar y el lugar
donde se encontraba el café Moscú, eran propiedad de Bárbara.
Ella si se puede considerar una persona bien antigua en el
barrio. A su muerte heredó su hijo, el cual vendió todas estas
propiedades. Es así como posteriormente, el solar de Bárbara se
convierte en un taller de mecánica, marcando con otros hechos
que comentaré luego, el principio del fin del barrio como tal.

2.36 LAS FAMILIAS DE LA CARRERA 64 LADO DERECHO DEL


SECTOR.

n la esquina del sector, se encontraba el café Moscú, del

E cual hablaré luego. Siguiendo en estricto orden tenemos:

 LA FAMILIA DE CARMEN LA DEL MOSCU.

Compuesta por ella, su marido y una niña llamada socorrito, que


nació con problemas y era ciega de nacimiento. Carmen la del
Moscú le decíamos todos, ya que ella y su marido eran los
propietarios del bar. Después de vivir mucho tiempo en el barrio,
emigraron al valle del Cauca.

A esta familia, vino a visitarla unos amigos los cuales se


quedaron viviendo con ellos. Los viejos arrabaleros recordamos
especialmente a HELICOPTERO, un muchacho “corrido”
decíamos nosotros que; nos hacia reír con sus anécdotas locas.
Helicóptero, fue el primer vicioso corrido que conocí en arrabal.
Este se consideraba un súper héroe capaz de competir con
batman y superman. Su nombre como tal era el del “Avispón
Verde”. Era de reír oírlo contar sus súper hazañas en la luna y
Marte.
74

 EMILIA GALEANO Y DON RAMON.

Familia de la cual hacían parte dos personajes del viejo arrabal:


EL loco Ramiro y el loco Iván., ambos tapiceros. En esta casa
posteriormente vivió Rosa Piano.

 CASA DE CONSUELITO.

En la casa de enseguida vivía consuelito su mamá y su abuela


doña María. Consuelito era una niña muy linda que solo
recordamos los más viejos del barrio. Posteriormente en esta
casa vivió Aurora y creo que en ella murió Pepe Mesa.

 CASA DE LA FAMILIA LOPEZ CANO.

Los López Cano, vivieron enseguida de la casa que


posteriormente ocupó Aurora. Enseguida de la casa que
inicialmente Ocupó Luz de Paérez para ser más exactos.

Esta familia estaba compuesta por Gregoria Cano (fallecida) y


su Marido don José López Rodríguez. De nacionalidad Española,
Asturiano para mas señas, el llegó a Medellín a instalar las
máquinas de la Colombiana de tabaco. Sus hijos fueron: Carlos,
Rafael, el Mono (del cual no recuerdo el nombre) blanca,
consuelo y Ángela. Esta última, se casó con Pedro Galeano, tío
de los churumbelones y hermano por consiguiente de Paulina. El
cual era carnicero de profesión. Ello vivieron varios años en
Arrabal, pues algunos trabajaban en Tejicóndor; y luego se
fueron a vivir a Bello.

Según lo que conozco, Don José López Rodríguez y Estela


Carrillo, fueron los únicos extranjeros con que vivió varios años
en Arrabal. No confundir lo anterior, con extranjeros de circo
que estuvieron de “pasada” por el barrio.

Esta casa fue ocupada después por Inesita Duque, su hermano


Alfonso “cantinazo” y su señora madre.
75

En ella también vivió Ernestina Torres, madre de Oscar, Jorge,


Jaime torres, excelentes personas y amigos a los cuales
recuerdo con cariño.

También vivieron unas señoras a las que llamaban las


Bogotanas, las cuales eran especialistas en jugar tute con
paulina Galeano mamá de los Churumbelones.

2.37 EL GRUPO FAMILIAR DE LOS GALEANO.

Conformado por varias familias:

Inicialmente, en la casa que colinda con la de Paulina y también


propiedad de Paula su mamá, vivió Lola Galeano y Fernando
Toro, padres de Oscar Toro Y Amparo., en ella vivió luego:
Gilberto “pespunte” el marido de otra de las Galeano y papa de
Norman, el cual fue “pato” de arrabal, también vivió en dicha
casa, Jesús Galeano otro hijo de Paula galeano, el cual
posteriormente se fue a vivir a Guayabal.

Casas del núcleo familiar de los Galeano.

Una vez los Galeano dejaron de ocuparla, fue habitada por


Vinicio Mesa, su mujer Candida y su hijo Hernán Darío Mesa, hoy
medico de prestigio en Medellín.
76

 LOS PAERES. Luego fue ocupada por Luz Paerez, Hernado


Paerez y los hijos de Luz: Sonia, Luis y Caliche. Esta
familia tiene nexo directo con los Vargas Galeano, gracias
a que su hijo caliche contrajo matrimonio con Fanny
Vargas, y El churumbelón mayor: Alberto se casó con
Sonia. Particular afecto tuve siempre por Hernando
Paerez, el cual siempre nos aconsejó para seguir
estudiando. Su frase predilecta era: “es de ley estudiar
mijo”. Hombre caballeroso, y excelente persona y amigo. A
él le conocí el segundo carro particular de arrabal. Anoto
de una vez que a la tercera persona que le conocí carro
particular, fue a Javier Tamayo. Con la familia de Paeres
vivía Nohelia una muchachita que se fue a vivir con Jesús
el hijo de Ligia la de Pichón.

2.37 LOS VARGAS GALEANO.

Familia conformada por: Carlos Vargas y Paulina Galeano.


Fueron sus hijos: Alberto el “churumbelon”, Elkin, Edilma,
Magdalena y Fanny.

Alberto y Fanny, relacionados maritalmente con los Paéres -


(Uribe). Elkin, con los Gallego, mas conocidos como los
barraganes, de los cuales recuerdo a Aycardo Ramírez Gallego,
como compañero de infancia Casado con Teresita la cual
también vivió en el pasaje de etien y trabajaba en el almacén
caravana. Edilma con los Ochoa al ser la viuda de Sigifredo
Ochoa.

Las vargas.
77

Particularmente, recuerdo esta familia de gentes buenas, en las


cuales en sus hijos reconozco con Gonzalo flaco y Rodrigo Milán
a mis mejores amigos.

Los hombres, mecánicos de profesión, grandes amigos, guapos


en la pelea, pero leales en el trato, siempre ocuparán un lugar
especial en la memoria colectiva del barrio.

Alberto Vargas, aparentemente atravesado e ignorante para


muchos, es una persona en mi leal saber y entender, valiosa.
Hombre abierto a las ideas, motivado por la buena lectura y
amante de la justicia, se aproximo solo a beber en las fuentes
de las ideas de izquierda, que por esa época estaban en boga.

Con excelente gusto musical, fue con el que me apropié del


gusto por los Grandes de la salsa: Hector Lavoe e Ismael Rivera,
los más grandes. El compraba los LP ya que en mi calidad de
estudiante, no podía hacerlo yo, pero nos deleitábamos todos.

Elkin, fue mi compañero de cada ocho días para la casa de


Miryam Londoño en la floresta, a pesar de su poco estudio, lo
inserté en un grupo de estudiantes compañeros míos, y siempre
estuvo a la altura. Paz en su tumba.

Hoy desde aquí evocó las veladas en la casa de Paulina, vieja


bacana y sencilla que siempre me acogió como nadie en
Arrabal. También en su casa vivió Germán “garra” un mecánico
humilde pero con el corazón rico en bondad. Como olvidar a
Germán y la bondadosa ayuda que siempre me dio?. Dios Le
conceda con sus hijos toda la bondad que se merece.

Enseguida de la casa de Paulina, vivieron los Gómez ya


descritos en esta crónica. La casa que estaba ubicada
enseguida de la de Berto Gómez, merece especial mención:
78

2.38 LA CASA DE MISAELITO.

Una de las tres casas más viejas de arrabal: de bahareque,


pintada de amarillo y azul, daba albergue a Misaelito, su hijo y
sus hijas Pastora y Lola. Esta casa marca la transición entre lo
rural y lo urbano en el barrio. Es en síntesis, la vieja estructura
agraria que no acepta a la urbe y se empecina en no
desaparecer.
Recuerdo gratamente, los alumbrados del 7 y 8 de diciembre:
nunca se ha vuelto a ver este tipo de alumbrados, donde más de
100 faroles iluminaban la casita.

Misaelito hijo, esta vivo en nuestro recuerdo cuando en la 43


que era una extensa manga, elevaba sus barriletes, cuya fuerza
nos arrastraba.

Que bellas épocas aquellas, que gente tan buena conocimos y


que personas tan sencillas poblaron este barrio condenado a
desaparecer.

Una vez estas gentes vendieron a Luis Mañé sus tierras, se


fueron a vivir a la Loma por San Javier.. En su lugar se
construyó un pasaje y una casa. En la casa vivía Dolly, la mujer
de Luis hijo de mañé.

En el pasaje vivió mucha gente. Particularmente recuerdo a:

 ELKIN Y LA LOCA AMANDA.

Elkin, era hijo de la hija de la loca, la cual tenía otro hijo


llamado Álvaro, el cual era ingeniero agrónomo y según me
enteré está desaparecido. Casado con Amanda, la cual venía de
Barrio triste, con sus dos hermanos y su mamá. En la actualidad
Amanda se encuentra viviendo en Venezuela.

 OMAR TARUGO Y NANDO CAMBALACHE.

Otros grandes amigos de infancia, de los cuales guardo gratos


recuerdos; jugadas de fútbol, trepadas al morro de Nutibara en
bicicleta, etc son parte de la colección de recuerdos que tengo
79

con estos personajes, de los cuales nadie volvió a saber de


ellos.

 JAIRO “CALAVERA” SALDARRRIAGA.

Otro personaje amigo de infancia y adolescencia, con el cual


jugamos bastante basketbol y nadamos en cuanto charco y
piscina encontramos es Jairo Saldarriaga, conocido como
“calavera”, muchacho que llegó muy niño a Arrabal procedente
de Bogotá donde vivía con el papá. Su madre, lo acogió y
trabajó en cuanto ofició le aparecía para mantener a su hijo.

Todos recordamos la infortunada pelea entre el primo de


calavera y Nectalí, en la cual recibió una puñalada de su primo,
al ponerse a separarlos, la cual lo dejó cojo de por vida. Según
parece, Jairo en la actualidad está residenciado en los Estados
Unidos.

 ESTER LA CHANCERA.

Otro personaje inolvidable fue esta sencilla mujer, que


desempeñó en arrabal todos los oficios habidos y por haber:
desde mesera hasta chancera oficial. Buena vecina y servicial
con todos.

2.39 FAMILIA PIEDRAHITA CASTRILLON.

Compuesta por Pedro Piedrahita “Pedrope”, e Inés Castrillón su


mujer. Fueron sus hijos:

Dimas: El mayor, quien como su padre trabajaba en el


ferrocarril de Antioquia. Su mujer y sus hijos, hombre
dicharachero, buena gente y bohemio conocido como el
“cienero”, ya que tenía fama de dar a las mujeres que le
gustaban hasta ¡cien pesos! , que era un platal en esa época. Se
imaginan estimados lectores como era entonces la vida en esos
bellos tiempos?
80

El “mono” casado con una de las hijas de Dimas. Al fondo en lo que quedó la
jabonería Camel.

Dimas, es quizás el primer habitante del barrio al cual a nuestra


generación, le tocó el inmenso dolor de verlo asesinar en
oscuras circunstancias, por mano de un celador de la jabonería
Camel. Algunos atribuyen el hecho a problemas de faldas, lo
cual no se pudo comprobar. Amigo de esquina y mi primer
compadre al cual recuerdo con nostalgia.

Pablo: su otro hermano. Este siendo muy pequeño recibió una


quemada en su cuerpo que indiscutiblemente influyó en su
personalidad. Hombre retraído y solitario, muy poco amigo de
las barras de muchachos, excelente dibujante y excelente
persona. Vivía en la casa en mención con la mona su esposa y
sus hijos.

Pedro Nel y Ángela: los menores. Con el primero compartimos


toda nuestra infancia. Ángela luego se casó con Carrraspera
(Antonio Pabón), con el cual tuvo varios hijos. Los dos se fueron
a vivir a otros lares.

La casa de los Piedrahita, era conocida por sus palos de mango


y árboles de brevas, los cuales aromatizaban de un agradable
olor todos sus rincones, innumerables eran las peleas que
teníamos los muchachos para que se nos devolvieran las
pelotas que continuamente caían a su solar. También es
momento de pedir excusas por tanta molestia que le
81

ocasionamos a esta buena familia con nuestro comportamiento


y la constante algarabía en su esquina, que no los dejaba
descansar, especialmente a:

Modesto Araque, excelente y paciente caballero, compañero de


todos en las jugarretas de fútbol que continuamente hacíamos o
en la calle o en las canchas “oficiales” del barrio.

2.40 . OTRAS FAMILIAS Y PERSONAJES:

tra familia que hace parte de esta historia es la familia

O de los JERINGAS U OCHOAS: de ellos fui amigo personal


de Javier “boquiabierto”, y de Jairo “Jeringa”. Los otros
dos hermanos, Sigifredo y Jesús, fueron más distantes; los dos
primeros si se integraron a la muchachada de arrabal. Los
cabeza de esta familia fueron: Doña Raquel López y don Jesús.

Recuerdo a El chapín y a “hueso” su hermano. A Jaime Guarapo


y al “rayao” arquero del equipo palestino.

También recuerdo a Luis Cárdenas “luis Tostada”, excelente


persona y amigo, re cargado en decencia.

Hemos realizado hasta aquí un viaje de recuperación histórica


de los añejos habitantes del barrio, recordados más por sus
cualidades y por sus virtudes, que por sus defectos, ya que no
soy el llamado a juzgarlos. Reconociendo que todos son
protagonistas de primera línea en esta su historia.
82

CAPITULO TRES:

CARACTERIZACION DE SUS HABITANTES Y VIDA


COTIDIANA.

3.1 PROCEDENCIA DE SUS HABITANTES.

a procedencia de los habitantes de arrabal, como ya

L quedó expuesto, es de origen campesino, ya que todos


procedían de ancestros ubicados en algún lugar de
Antioquia.

La ciudad que poco a poco se va abriendo paso a la modernidad,


acoge inicialmente a jubilados del ferrocarril de Antioquia,
muchos de ellos nacidos en Sopetrán, Hato viejo (hoy Bello),
Santo domingo, etc. Estos compran terrenos a Don Fernando
Echeverri e inician la construcción de sus viviendas.

Posteriormente, ya a finales del 40 y comienzos del 50, el


desarrollo de la violencia partidista y su entronización en la
ciudad, conllevo al desplazamiento de familias provenientes de
barrios donde esta tenía mayor intensidad; caso del barrio
Antioquia (hoy barrio Trinidad). Fue así como nuestro barrio da
abrigo a familias liberales que se ubican en casas construidas
en la calle 43 y allí van a crecer sus hijos como arrabaleros y
allí van a vivir en paz.

La movilidad poblacional, estará sujeta a la llegada de otros


hijos y familiares, los cuales, unos se afincarán en el barrio por
periodos más o menos largos; quedándose unos emigrando
otros, pero teniendo siempre nexos con el barrio.

La situación económica en los años 60, va a marcar


definitivamente no solo la procedencia y movilidad del barrio
sino que va a incidir de forma determinante en su extinción,
83

como se analizará más tarde. La gran mayoría de las casas van


a dar paso al inquilinato, y ello va a diversificar la procedencia.

Los grupos étnicos poblacionales, son también diversos; la


pluriétnia es la determinante, ya que todas las gamas y colores
de piel ve vieron representadas en nuestro barrio, siendo
mayoritario el mestizaje y minoritario la raza negra.

En los inicios de la época que estoy historiando, se podría decir


que los niveles socioeconómicos eran medio altos en un 70 %
de la población y medio bajo el restante. La anterior afirmación
parte del hecho que las personas que inicialmente entran a
poblar el barrio, son propietarios de la vivienda, pero además
muchos de ellos por su carácter de jubilados, bien de la
Colombiana de Tabaco, bien del ferrocarril de Antioquia, tienen
como subsistir sin afugias. Lo anterior se comprueba con la
inexistencia de casas que tuvieran sus piezas o cuartos
utilizados bajo la modalidad de inquilinato en el período
comprendido entre 1930 - 1960; modalidad esta cuyo desarrollo
es muy posterior, como luego lo veremos.

3.2 COMO SE VIVIA AYER:

Gratos son los recuerdos de infancia. En el barrio los adultos se


dedicaban a sus trabajos. Vale la pena recordar que muchos de
ellos desempeñaban oficios clásicos: carretilleros, chóferes,
zapateros, albañiles, talabarteros, tapiceros y mecánicos, eran
los más comunes.

Posteriormente, aparecieron algunos, (muy pocos),


desempeñando oficios en las empresas publicas o como obreros
de las empresas textiles de la ciudad, especialmente
Tejicóndor.

Las mujeres se dedicaban más a las labores hogareñas. Ya en


los años 60, los cambios acontecidos en la economía familiar,
84

conllevó a estas al trabajo en almacenes, o como secretarias,


previo curso de mecanografía, taquigrafía y contabilidad. Esto
permite que, paradójicamente las mujeres tuvieran un mayor
contacto con el estudio que los hombres. Ya que estos
abandonaban la escuela muy rápido para incorporarse al
trabajo, por lo regular a ejercer el mismo oficio del padre. En
referencia a lo anterior, fueron muy pocas las excepciones.

La religión predominante era la católica, un 80% de sus


habitantes tenían su matrimonio consolidado, muy pocos vivían
en unión libre. Las familias oscilaban entre tres y cinco hijos
promedio.

Solo recuerdo a Martha “piano” como protestante o testigo de


Jehová.

Con la excepción de los jubilados, los cuales tenían garantizada


su mesada, los habitantes no obreros, vivían al “día”. Ello de por
si impacta progresivamente a la familia y a la economía
familiar, y a aquellas familias donde la costumbre del padre
cabeza de familia, era el licor semanal o inclusiva diario antes
de llegar a casa.

Característica digna resaltar en el antiguo habitante de arrabal


era: su compromiso comunitario y su espíritu de ayuda para con
los demás como lo desarrollaremos mas adelante.

3.2.1 LAS CASAS DE AYER.

La casa de ayer, tenía como elementos básicos: la sala, las


alcobas, los patios y el solar.

En la sala siempre estuvo el cuadro de los viejos abuelos,


acompañado por el protector sagrado, al cual se le había
consagrado y encomendado la protección del hogar, en
ceremonia oficial realizada por el párroco.
85

Se encontraba también en la sala la radiola, y los discos LP, 45


y 78 que alegraban los fines de semana o amenizaban el aseo
diario o las tareas cotidianas de lavar y aplanchar.

Foto del recuerdo: la Radiola y los discos de acetato. Si ud recuerda


estos artefactos y otros que verá en el desarrollo de este aparte de
nuestra historia. Ello indica amable lector que se encuentra en la
tercera edad.

EL TELEFONO: También se encontraba en la sala el teléfono. El


radio y la televisión. El primero era negro. Que yo recuerde la
primera casa de Arrabal que tuvo teléfono fue la casa de
Esperanza Gómez. Uno allí pagaba por la llamada.
Posteriormente lo instalaron en la casa de Blandina López, José
Cacharro, Los Milanes y las piñas. Este era un artículo de lujo
que no todos podían tener, pero que al igual como ocurre con el
celular hoy, todo el mundo consigue.
86

Recién instalado el teléfono en mi casa, Canito, llamaba a


preguntar la hora y le respondía una grabación. Una vez la
escuchaba, canito le decía:”gracias señorita”. Y nosotros todos
largábamos la carcajada.

Otra anécdota con el teléfono es la siguiente: Churumbelón


estaba todo atareado arreglando un carro al cual no le había
podido pillar la falladera, además necesitaba arreglarlo rápido
pues necesitaba dinero. Entonces empezó a repicar el teléfono
y Alberto no quería responder pues estaba histérico con el
arreglo del dichoso carro. Ya cansado de escuchar el repicar
contesto:

“a la orden homme”
Y le preguntaron: “oiga con Pablo Escobar?
A lo que contesto churumbelón todo enojado: “Ojala Hijueputa”.

Foto: Teléfono de la época.

LOS CHINCHES: Particularmente recuerdo, como


periódicamente en muchas de las casas, se hacia aseo de
colchones y tablas de las camas, las cuales aparecían como si
tuvieran nieve a causa de los chinches. Estos parásitos tenían
un olor peculiarmente asqueroso y proliferaban en las camas
donde los niños se orinaban. Estos se combatían con flit (fli
decíamos nosotros).
87

Foto: recuerda cuantas veces utilizó este aparatito en su casa?.

LA COCINA. Gratos recuerdos me traen las cocinas de antaño,


sin tantos adminículos que nos trae hoy la economía de
consumo. Las gentes se levantaban temprano. Lo primero que
prendía era el radio: rosario y música Colombiana. Cuantas
mañanas no nos alegró el dueto de antaño con “la lancha” y
“corazón antioqueño”?

“Tengo una novia en la tierra,


Tengo una madre en el cielo
Tengo un alma de poeta y un
Corazón antioqueño”

Luego se prendía el fogón para hacer los tragos (porción de café


mañanera que sabía mejor si aún no nos habíamos lavado los
dientes), mientras en la hornilla de carbón se hacían las arepas
para el desayuno. Recordemos que en esa época se comian
frijoles casi diario e inclusive calentados en el desayuno y
jamás nos cansaron. Hoy son artículos suntuarios por costosos.

El fogón era de leña, posteriormente nos modernizamos y


llegamos al fogón de petróleo. No conocimos el aceite de
cocina, solo utilizamos manteca gravetal o la grasa que nos
dejaba de ganancia los gordos que fritábamos para acompañar
los suculentos frijoles diarios.

Parte imprescindible de la cocina era la maquina de moler.


Muchos permisos para salir a jugar, pasaron en nuestras casas
por la condición de tener que moler el maíz para las arepas.

Los ayudantes de cocina, la cocina integral. El extractor de


olores, etc no existían sino en la imaginación de Julio Verne.
88

Eso si recordamos con afecto el poyo de la cocina, la piedra de


moler, la piedra de amolar, los estropajos, el yesquero la olleta
y el molinillo. Esta ultima vilmente asesinada por la moderna
licuadora cuando de hacer jugos se trata. La siguiente gráfica
rememora recuerdos gratos:

Que gratos recuerdos nos trae la infancia: maquina de moler. Tarro de


manteca y fogón de petróleo.

EL SOLAR: Una casa valía más si tenía buen patio y sobretodo


buen solar. El ancestro campesino de la gran mayoría de
nuestras familias, tenía aún presente el referente del campo.
Sobretodo las abuelas nuestras, tenían su era. En ella
sembraban productos de primera necesidad en el hogar como:
tomate, cebolla, cilantro, coles y repollo entre otras. También
era común el encontrar algunos frutales y por supuesto el
infaltable árbol de brevas. Algunos animales, hacían parte del
solar familiar: cerdos y gallinas eran las más frecuentes.

El solar tenía un espacio especial, para la “botica de la abuela”


o farmacia botánica familiar. Allí se encontraban todas las
hierbas de emergencia para curar a los hijos y nietos. Recuerdo
especialmente al PAICO, así en mayúsculas, creo que ninguno
de nuestra generación se escapó a tomar como purgante
mezclado con aguardiente esta porquería. Lo mismo ocurrió con
el famoso quenopodio y el aceite de ricino. Había penca sábila,
89

no solo para curar el asma y los bronquios sino para atraer la


buena suerte. Apio, mejorana. Toronjil, limoncillo, rosa amarilla,
etc son entre otras las hierbas que hacían parte de la botica
familiar. Lo que no podían estas pócimas mágicas se dejaba en
manos del Dr Morales, del doctor Vinicio Echeverri, del doctor
Abundio Posada o del doctor Ospina ya en la próxima clínica
san Joaquín.

En mis recuerdos están también los medicamentos que


ayudaban en nuestras casas a evadir en lo posible el gasto del
medico. Recuerdo para los ojos el eye-mo solucionaba todo
aquello que el agua de rosa amarilla colocada al sereno no
había podido arreglar. Posteriormente cuando llegó la bareta al
barrio, directamente de barrio triste, este fue reemplazado por
la “Visina” la cual aclaraba la vista quitando la traba por fuera
pero dejándola por dentro.

Recuerdo la leche de magnesia Phillips, la cual no solo servía


para curar los problemas de estomago como la gastritis, sino
que también untada con cuidado en las axilas, combatía la
“chucha”.
Para los dolores de cabeza, “mejor mejora mejoral”
ya que en esos tiempos jamás oímos hablar de la migraña y el
estress, que según parece son enfermedades de la post -
modernidad. Estas son enfermedades “nuevas, recientemente
aparecidas”, ya que es bueno anotar que hubo otras
enfermedades que desaparecieron y solo fueron de nuestra
época, por ejemplo era común preguntar u oír a alguien
anunciando una muerte; al preguntar la causa se nos decía:
“murió de repente”

El merthiolate, solucionaba con el agua oxigenada las caídas.


Para calmar los efectos de la infección se utilizaba sulfatiazol,
y para limpiar el hígado: píldoras e vida del Doctor Ross. Para
las afecciones gripales el mentol no faltó en ninguna de
nuestras casas. Que vida tan poco complicada aquella, que
recuerdos tan gratos estos.
90

LA EMULSION DE SCOTT. Todos pusimos alguna vez a volar


nuestra imaginación con el pez de la emulsión de Scout. Este
brebaje blancuzco y agradable era para nuestros padres la
panacea para superar la flacura, el desaliento, la anemia y
quien sabe cuantas enfermedades más. Pero eso si, era
delicado tomar la emulsión de Scout, ya que ella exigía al
paciente que tenía que bañarse diario y ahí estaba el problema
con algunos amiguitos que le tenían aversión a este vital
liquido. Según nuestros abuelos y padres, quien no se bañara y
tomara emulsión, se le rompía la piel y se le llenaba de granos;
hoy esto causa risa al ver la ingenuidad de nuestros
progenitores.

LA POMADA PEÑA: sitio especial ocupó en el gusto de nuestras


mujeres la pomada peña. Esta era utilizada para limpiar el cutis,
quitar las manchas que deja el embarazo, acabar acné, barros y
espinillas, etc. Hoy los centros de estética, los spa, acabaron
con la pomada Peña de tan grata recordación entre nosotros.
91

EL ASEO PERSONAL Y FAMILIAR: Iniciaré comentando como en


los cuartos debajo de las camas hasta hace muy poco aún se
veían las bacinillas. Estas servían para evitar la visita al baño
en la noche. A propósito del baño, en mis recuerdos no está el
papel higiénico ni en mi casa ni en las que conocí o visité con
mayor frecuencia. Lo que si recuerdo muy bien es el garabato
de alambre con el papel periódico cuidadosamente recortado
que servía para tales menesteres.

Foto: la bacinilla.

Es de anotar que en nuestra época desconocimos: los pañales


desechables y las toallas higiénicas. Solo se utilizaban pañales
de tela y se complementaban con otros llamados “ombligueros”
los cuales también desaparecieron. Las mujeres por su parte
utilizaban unas toallitas pequeñas las cuales lavaban
permanentemente y hoy fueron reemplazadas por las toallas
higiénicas.

Muchos de nosotros y quizás ud amable lector, no conocimos


los famosos teteros “Evenflo”, ni los esterilizadores de teteros.
En nuestra época un chupo grande comprado donde don Rubén
y una botella de gaseosa esterilizada con agua hervida servía de
tetero.
Nuestra generación conoció el jabón de tierra, el jabón
palmolive y el jabón luz. A muchos nos tocó limpiarnos los
92

dientes cuando no había dentífrico con hojitas de limoncillo.


Aún recuerdo como en la casa de Eucaris enseguida del pasaje
de Moscoso, el papá de esta empleaba la jofaina para colocar el
agua para afeitarse. Muchas otras casas también tenían jofaina.
Estábamos aún lejos de las cuchillas de afeitar desechables o
de las rasuradoras eléctricas. Que bellos tiempos aquellos en
que aún se utilizaba la brocha la cuchilla de afeitar y el old
spice para después de la afeitada.

Foto: Jofaina y utensilios para la afeitada.

En esa bella época, no existía el gel Snott gorila (moco de


gorila) o la gel “ego”. Nuestras madres utilizaban unas la
lechuga: que era una especie de engrudo rosado que fijaba muy
bien el cabello. Las más pudientes compraban glostora, y para
todos había, pues las más pobres utilizaban agua panela y lo
curioso era que el resultado era el mismo.

El tricofero de Barry solucionaba el problema de la caspa.


El estropajo, reemplazaba en esa época a las más sofisticadas
masajeadoras. Hoy sigue siendo insuperable para la limpieza de
la piel.

EL CONTRABANDO CAMBIO LOS GUSTOS: cuando algunas


mujeres de Arrabal entre ellas mi madre Olga, viajaron a san
Andrés, empezó el barriecito a conocer cosas nuevas y
aparecieron gustos nuevos. Por primera vez vimos un radio
portátil forrado en cuero, ¡que descreste!; radio grabadoras,
increíble uno podía grabar la música que estaba escuchando,
pero el mayor aporte del contrabando de san Andrés, fue que
nos puso a oler bueno: Llego el agua de Vetiver y el pino
silvestre, en loción y desodorante; posteriormente llego Brut, la
mejor de todas. En los bailes se percibía un mejor ambiente y
mejor olor. Las mujeres a su vez tambien mejoraron en olor
93

gracias a channel Número 2 al 5. Algunas utilizaban un


desodorante llamado topacio. Este venía en un potecito con una
piedra en la tapa. Era muy apetecido. Se untaba en las axilas y
listo, cuando no había buen aseo previo y no se afeitaba el
“sobaco”, se formaba con el dichoso topacio, un olor a chucha
refinada que no lo soportaba nadie especialmente en los buses,
cuando le tocaba a uno parado al lado de una señora con los
brazos abiertos y el dichoso “sobaco casi en la nariz de uno.

QUE SE FUMABA: recordemos los cigarrillos de la época, pues


recordar el vivir, y esta historia trata principalmente de recoger
todas esas bellas vivencias para la posteridad.

Entre nuestros vecinos muchos fumaban tabaco. Esperanza


Gómez se daba el lujo de elaborar los suyos. Nena mi abuela y
Emilio mi tío también fumaban tabaco, igual que tirajura y
muchos más. En cuanto a los cigarrillos, estos estaban más
generalizados. Los jóvenes no podíamos fumar, solo lo
hacíamos los 24 y 31 de diciembre, fechas en las cuales había
una licencia para fumar y beber algún licor. Los cigarrillos
preferidos de la gente del barrio eran: cigarrillos 114, y cruz,
94

que se vendían en paquetes cuadrados super grandes ya que


contenían más de cien cigarrillos. Cigarrillos Ginebra, cigarrillo
Nacional y el más popular cigarrillo Pielroja. Posteriormente con
la llegada de la bareta al barrio, se popularizó el cigarrillo Lucky
Strike, el cual servía de matador o Asentador de la marihuana.
Que bello barrio este. En el tuvimos de todo

Foto: cigarrillo Piel roja antiguo y propaganda 1950.


3.3 LA NIÑEZ: JUEGOS Y DIVERSIONES.

De esta etapa de desarrollo destaco, los juegos infantiles, los


cuales se encuentran muy distantes a los juegos de hoy.
Recuerdo como ayer, practicábamos los siguientes juegos que
llegan a mi memoria:

 La rueda. Construida de llantas de carros desechadas por


los dueños, las cuales con la ayuda de un palito servían
para apostar carreras por las aceras de la 64.

 Las carreras dando vuelta a la manzana.

 Construcción de carritos con caucho retorcido, carreteles


de hilo y un pedazo de vela.

 Pelota envenenada: juego que consistía en la elaboración


de huecos en el piso, asignados cada hueco a un jugador,
luego se lanzaba una pelota y el jugador al cual le caía
esta a su hueco, podía, dirigirla a golpear a el jugador que
quisiese. Después de ser golpeado determinadas veces el
95

mismo por distintos tiradores, este se colocaba en la


pared y los demás lo “fusilábamos”.

 Juego, con bolas de cristal: esta se lanzaba a un hueco y


el que acertaba tenía derecho a “matar” a sus
contrincantes. Solo se exceptuaba a su “compa”, escogido
previamente por él. Este juego recibía el nombre de
“mazotes”. La medida utilizada para medir distancias la
llamábamos “ñeris”. Uno super efectivo para este juego
era Manuel “Cañola.

 Vuelta a Colombia: Esta era una modalidad del juego de


bolas. Se hacia varios huecos y se iniciaba en riguroso
turno el recorrido por ellos hasta llegar a la meta.

 El trompo. Juego divertido donde se lanzaba a un círculo


con fuerza el trompo para exterminar el trompo de los
contrincantes. Los trompos cambiaban de nombre según
su calidad. A los brincones los llamábamos “Sangarrietas”
a los suaves: “Seditas”. Los mejores trompos los hacia un
señor que era conocido por todos; lo llamábamos: Canuto.
De él, todos decíamos lo siguiente: “canuto viejo bruto
hizo un trompo en un minuto”.

La foto ilustra: los juegos de trompo, bolas de cristal yo-yo y catapis que
jugaban las niñas. Que gratos recuerdos nos traen.
96

 La chucha: se sorteaba quien era el encargado de


perseguir a los otros niños y a quien tocaba, este la
llevaba, y así sucesivamente.

 También jugamos chaparro y hacíamos todo tipo de


piruetas con el yo-yo russel de Coca-cola.

 El escondidijo: uno de los jugadores se tapaba, contaba


hasta 20 y los demás se escondían. Al primero en
encontrarse, se castigaba, tocándole iniciar el conteo y la
búsqueda de nuevo.

 Policías VS ladrones.

 Pistoleros Vs indios. En este juego muchas veces


utilizábamos “sacol” (hoy pegante boxer), para untarle a
las flechas las cuales encendíamos con fósforos.

 Jugábamos a tocar puertas y timbres y salir todos


corriendo y riendo a carcajadas.

 Ya un poco más grandecitos y hasta entrada la


adolescencia, se privilegió el futbolito, máxime que la
pavimentación de las calles lo permitía.

 Jugábamos a la guerra, tirándonos cadillos o pepas de


higuerilla.

 Jugábamos botellón. Unos se agachaban y los otros


saltábamos.

 Otro de nuestros juegos preferidos era irnos a jugar


“función” o escondidijo en las casas desocupadas de
Tejicóndor sobre la 65. Viene a nuestro recuerdo la “pela”
que en una de esas casas le pegaron las pulgas a Gonzalo
“flaco”. Este tipo de bichos era tal en número que
oscurecía las baldosas.

 Jugábamos intercambiando “vistas” de cine, de las cuales


había dos clases: Cuadro, las mejores donde se veía de
97

frente al actor. “ñapa”, aquella donde se veía mucha gente


o representaban paisajes.

 ADIVINANZAS: Este era otro de nuestros juegos


preferidos. En las aceras nos sentábamos y uno de
nosotros proponía la adivinanza y los demás tratábamos
de responder correctamente. Entre las que recuerdo
están:

“agua pasó por aquí cate que no la vi” Aguacate.


“en una torre muy alta dicen misa” altamisa.
“entre peña y peña perico sueña” El pedo.

Con las muchachas, jugábamos:

 Materile rile ron.

 Pisingaña.

 Que pase el rey: decíamos todos: “que pase el rey que ha


de pasar que el hijo del conde ha de quedar”.

 La marisola. “estando la marisola sentada en su vergel,


etc etc.

 Esconde el anillo.”esconde el anillo escóndelo bien que no


te lo encuentre tu taita Javier”.

 Las muchachas también jugaban “a la rueda rueda de pan


y canela” y catapis, que era un juego que se realizaba con
una pelotita y unas estrellitas de caucho.

 También jugábamos papá y mamá y este era uno de los


juegos mixtos más divertidos.
98

Juego de catapis-

Particularmente, recuerdo otras diversiones que practicábamos


cuando niños y que hoy a mí y a los que leen estas notas nos
llenan de nostalgia. Veamos:

Con hojas de cubierta de palma seca o cartones nos íbamos a


deslizar a un inmenso hueco que había cerca de la macarena,
dicho hueco después fue rellenado acabando definitivamente
con el juego.

Nuestros bañaderos mas apreciados eran:

 La quebrada la iguana, en la mini represa de la 70.


 La piscina del cabezón en la floresta.
 El río Medellín en el cual nos bañábamos desde un puente
de madera que había debajo del actual puente de la 33.
Como anécdota comento que allí sacábamos del río
sardinas.
 El charco de la peña.
 Y después que empezó a desmontarse la finca de don
Habacuth, convertimos en bañadero la laguna de Fátima.
Sobra decir que esa época no existía el actual barrio
Fátima. Lo anterior, también facilitó la subida al morro de
nutibara, el cual se convirtió en lugar de caminadas y
pilatunas.
 La quebrada la picacha. En la cual antes de su
canalización nos divertíamos saltando de una orilla a otra,
con la consiguiente embarrada de quien no llegaba con su
99

salto a la otra orilla. Una vez canalizada la quebrada, nos


deslizábamos por la canalización como si fuéramos
barcos. Recuerdo que a quien más le gustaba hacerlo era
a Canito mi primo.

Otra particular diversión era: el irnos a robar mangos al lugar


donde se encontraba la fábrica de sombreros fieltrosa, la cual
estaba ubicada casi llegando al Liceo Antioqueño.

3.10.1 LA EDUCACION.

Particulares recuerdos nos trae la escuela. A esta llegamos


muchos llenos de ilusiones por ser profesionales cuando
fuésemos mayores. Otros llegaron a ella y simplemente la
consideraron un pre requisito para poder trabajar rápido a fin de
ayudar a sus casas, pues en ella aprenderían los elementos
primarios para defenderse en la vida tales como: saber leer y
escribir, saber firmar y saber contar, restar multiplicar y dividir.
Personalmente creo hoy que la motivación a estudiar en nuestro
tiempo, partiendo de las anteriores premisas, fue un fracaso,
que castró el futuro de muchas generaciones de muchachos y
solo llevó a la repetición de los oficios del padre y a la
perpetuación de la pobreza.

Por lo regular los hombres estudiábamos en la Escuela


República de Chile o en la Pedro J ubicada en la florida y las
mujeres en el mater Dei, en la escuela Policarpa ubicada al
frente de Tejicóndor. En dicha escuela solo había hasta cuarto
de primaria y en las teresitas en la América en lo que respecta
a la educación primaria.

Los más pudientes por ejemplo los Milán, lo hicieron en


instituciones privadas como el colegio Cristóbal Colón hoy fray
Rafael de laserna.

Claro en mi recuerdo están los maestros de esa época: La


señorita Ángela, la señorita Lilian, don Iván, don orlando Arenas
y don Gonzalo Giraldo. Particularmente me veo en la grata tarea
de reconocer a “Carleya”: Carlos Escobar Montoya, el cual fue el
100

maestro que me enseño a leer y escribir y muchas cosas más


que hacen que tenga hacia el y hacia todos mis maestros,
especial reconocimiento y agradecimiento perenne.

En esta escuela primaria, a la cual ingresamos de siete años.


También ingresaron otros muchachos del barrio que
prácticamente tenían una edad pero para estar ya en la
universidad. No los menciono porque pueden molestarse, pero
hoy explica ello muchas cosas, entre otras la falta de
compromiso de los padres por que sus hijos fueran diferentes a
ellos.

Después de trasegar largo tiempo por la educación, me atrevo a


decir que: esa educación era muy rica en contenidos, pero
millonaria en compromiso por parte de los docentes.

De esta escuela primaria recuerdo: los libros la alegría de leer


de Evangelista Quintana. En el libro primero aprendimos muchos
a leer. Pero recordamos del libro segundo a la bruja Clotilde. El
catecismo astete, fue otro útil indispensable en nuestra
formación. Al catecismo Astete, le debo mi primer trofeo como
estudiante, ya que concursé por las escuelas de la América y
me gané la medalla de plata Marco Fidel Suárez. La
competencia consistía en saberse de memoria el catecismo.
Recuerdo tambien que en esa bella época nos obligaban a tener
una buena caligrafía y a escribir desde muy temprano con tinta
y encabador de pluma. Que difícil era esto, y ni punto de
comparación con los lapiceros de hoy.

Encabador y plumas de la época. Se que muchos de mis lectores los


recuerdan.
101

En lo que hace referencia a la educación secundaria, ya el nivel


de participantes desciende notoriamente y tan solo unos pocos
logran culminar el bachillerato. Los colegios preferidos por
nuestro barrio eran: El liceo Marco Fidel Suárez, liceo
Antioqueño, Instituto Fray Rafael de la Serna, ubicado en la
estación Villa. Academia militar José María Córdoba, para los
hombres. Las mujeres por su parte preferían: El Cefa, el
instituto Antioquia las Teresitas (privados) y el colegio Miguel
de Aguinaga. De esta institución fueron bachilleres: Marlene
Jaramillo, Amparo Tamayo y Martha Correa (hermana de Javier
Correa y dueña de la marquetería donde trabaja Luis Cárdenas
“tostada”). Si bien muchas de las muchachas del barrio no
terminaron bachillerato, es de anotar que se capacitaron para el
trabajo, estudiando por ejemplo comercio.

Del bachillerato muchos recordamos el algebra de Baldor y la


regla de calculo, la cual era un instrumento indispensable para
estudiar matemáticas. Estábamos lejos de soñar con las
facilidades de la calculadora de hoy. Ello hizo nuestro trabajo
más difícil, pero nos ayudo a formar en el compromiso y el
esfuerzo a muchos de nuestra generación.

Foto que compendia algunos libros de nuestra época de estudiantes.


Recordar es vivir.
102

Hablando del esfuerzo, las actuales generaciones han contado


con recursos que nosotros ni soñamos. En el viejo arrabal muy
pocas personas contaban con máquina de escribir. Solo
aquellas familias que tenían hijos estudiando las tenían.
Además era dificultoso obtenerlas por su costo. Es de anotar
que quienes las tenían, las facilitaban a los demás y en ella se
elaboraban solicitudes, peticiones y tareas. Recordemos que si
la hoja de dañaba producto de un error, habia que repetirla.
Todavía no tenemos el dato exacto quienes estudiamos, de
cuantas veces nos tocó repetir y amanecer repitiendo los
errores cometidos.

Tipo de máquina de escribir de nuestra época aunque las había más viejas.

Como dijimos antes: los que culminaban estudios secundarios


eran contados con los dedos de la mano, tanto hombres como
mujeres. Para mi el recorrido por los años de primaria y
bachillerato, parecía una competencia por ser mejores, en la
cual cada año uno veía cada vez menos muchachos de su
barriada HASTA TERMINAR SOLO. Confieso que eso siempre me
ha dolido. Sin embargo muchos hombres y mujeres logramos
salir adelante gracias al estudio.

3.10.2 LAS COSTUMBRES RELIGIOSAS.

Particularmente religioso y temeroso de Dios eran todos los


primeros pobladores de nuestro barrio. Inicialmente adscritos a
la iglesia del sagrado corazón de Jesús (ubicada en Guayaquil –
sector de Barrio Triste hoy), de esta parroquia es inolvidable
para nosotros el Padre Ríos. Pasa posteriormente nuestro
103

barrio, a hacer parte de la feligresía de la iglesia del Verbo


Divino ubicada prácticamente en el barrio conquistadores cuyo
párroco era el padre Francisco Knoblauch de nacionalidad
alemana.. Recordemos que antes que esto ocurriera, el barrio
fue adscrito a la parroquia de san Juan Bautista, la cual queda
al frente del actual Éxito de Colombia.

Nuestra gente, nunca protestó por esto: se trasladaba la sede


religiosa del barrio al antojo de no se sabe quien y sin consultar
a la comunidad, y esta profundamente respetuosa de la
autoridad religiosa, acepta.

En estos ir y venir, acudía también la gente del barrio a la


naciente iglesia de san Joaquín, la cual fue construida por el
padre González, pero es de reconocer que esta por encontrarse
ubicada en un sector de “ricos” como creía la gente de nuestro
barrio, era menos frecuentada que las otras ya mencionadas.

Posteriormente, se nos asigna la parroquia “madre del verbo


Divino” como oficial y al padre Hugo (otro Alemán muy querido
por la feligresía), como su párroco.

Los bautizos y matrimonios, se celebraban como en cualquier


lugar del país. Después de la fiesta religiosa, se hacia en la
noche la fiesta profana o baile.

El padrino se escogía preferiblemente entre los padres o en su


lugar, los mejores amigos. Recuerdo que los muchachos de la
época al ver al padrino o a la madrina le decían: “Sacramento
del altar padrino”, a lo cual el padrino respondía con la
bendición y algunas monedas de regalo. Ya esta tradición se ha
perdido.

Particular mención efectúo de las costumbres de semana santa:

En esta época, se guardaba un completo recogimiento durante


toda la semana. En las emisoras solo se escuchaba música
clásica (tétrica diría churumbelón). Solo se cambiaba a otra
música el domingo de resurrección.
104

Todas las familias por pobres que fuesen, estrenaban el jueves


santo. Ese día se asistía a la ceremonia de lavatorio de los pies
y sermón del prendimiento. Los muchachos por su parte, salían
en grandes galladas a “visitar monumentos”, que no era otra
cosa que salir a enamorar muchachas y a estrujar a la gente y
hacer recochas hasta el amanecer en la calle. Estoy seguro que
criados en una estructura familiar cerrada, y autoritaria, que
inclusive empleaba los castigos de dolor contra los hijos, este
tipo de salidas en esta fecha religiosa eran un pequeño
desborde a las pilatunas reprimidas.

Todos participábamos en las ceremonias de viernes y sábado


santos: asistíamos a las procesiones y a la misa de gallo.

Especial mención efectúo de la procesión de viernes santo en el


Barrio Robledo, la cual se hacia en “vivo” con actores, era
espectacular y todos querían asistir. Todavía recuerdo una
procesión en robledo a la cual asistí con Carola Gómez.
Esperanza Gómez e Inés Martínez y en la cual casi me matan
unos zapatos nuevos que me estaba estrenando. Ese día la
pasión la vivimos dos.

Entre los actos religiosos del barrio recuerdo:

 la santa misión, la cual llenó de piedad a todos los


pecadores del barrio.
 Los grupos de oración. Uno compuesto por las Cárdenas y
otro compuesto por Carola Gómez, Nena Galindo,
esperanza Gómez, Inés Martínez y las hijas de Moscoso.
 La venta de empanadas por parte de las antes
mencionadas para construir la parroquia la madre del
verbo divino.
 Las procesiones a Cristo Rey organizadas por Berto
Gómez y su sociedad mutuaria.

En esta época, había gentes que creían que en semana santa


esta prohibido: jugar cartas (se estaba jugando a Cristo),
escupir al suelo, (se estaba escupiendo a cristo), bañarse en
charcos o quebradas, ya que se podía la persona convertir en
105

pez, y mucho menos hacer el amor, ya que las parejas podían


quedarse pegadas.

3.11 EL CENTRO CIVICO LOS LIBERTADORES.

Como ya expresamos antes, una de las características más


importantes de los habitantes de arrabal de ayer, era su
compromiso comunitario y barrial.

Fue así como las gentes se organizaron para crear una junta
cívica que permitiese recoger fondos para mejorar el barrio, a la
vez servir de interlocutora con las autoridades municipales para
el logro inmediato de la pavimentación del barrio y la
construcción del respectivo alcantarillado.

Se reúnen los vecinos en sección solemne y bajo acta de


fundación en el año de 1955 fundan el “centro cívico los
libertadores”. Observe estimado lector, que, se evade colocarle
el nombre de Arrabal al centro cívico, debido a la ya existente
estigmatización del barrio.

La primera junta directiva del barrio estuvo compuesta por:


Antonio Córdoba (Padre), Sebastián Castaño, Carlos Vargas,
Alberto Gómez, Ramiro Avendaño, Esperanza Gómez y Nena
Galindo. Se nombró como secretario a Emilio Galindo por tener
una letra muy bonita.

Actividades del centro Cívico:

Efectuar rifas venta de empanadas cada ocho días, y bazares, a


fin de lograr la mejora del barrio.

Con los primeros fondos se compro un amplificador y una


corneta comunicadora, a fin de amenizar la venta de empanadas
los sábados, colocando música y vendiendo a 10 centavos
dedicatorias para amigo, esposos, familiares y novios.

La hornilla y la venta de empanadas funcionaba en la acera de


la casa de Esperanza Gómez; y la música se colocaba desde la
casa de Nena Cano de Galindo. Como trabajadoras de las
106

empanadas recuerdo a las Cárdenas, a Nena Galindo a


Esperanza Gómez, a Carola, a Inés Castrillón a Inés Martínez y
a Paulina Galeano.

Recuerdo como jugando cuando niños en el lugar que se hacían


las empanadas, se cayo prácticamente dentro de la paila, Iván
“caquita”, un querido amigo de infancia, sufriendo así graves
quemaduras.

Ya hable de las dedicatorias, en las cuales algunos tímidos solo


entregaban las iniciales, entonces el locutor Emilio Galindo
decía: “para LF de GM con todo cariño, con todo afecto o con
todo amor (como escogiera el comprador) escuche la bella
canción……

Allí siendo muy niño, escuché al dueto de Antaño con toda su


gama de canciones, tangos y milongas, pero más boleros del
trío los panchos. Recuerdo cosas como tú y como un rayito de
luna, los cuales me marcaron para siempre.

También recuerdo el pasodoble, sobretodo a Juan Legido con


temas como “doce cascabeles”, “la morena de mi copla”, tres
veces guapa”, “mi jaca”, etc. En España, al visitar algunos
lugares y revivir esta música, me di cuenta que la tenía grabada
en el corazón y eso lo habían hecho en mi barrio cuando era
niño gracias a un puñado de gentes buenas.

Los bazares: estos se hacían con los objetos donados por los
vecinos, los cuales o se vendían es subasta, o se envolvían en
sorpresas. Había baile popular, licor y diversión por doquier. En
el bazar había una “cárcel” a la cual se llevaban las novias,
esposas o novios o esposos de los participantes. El cónyuge o
novio debía con dinero ir al rescate. Obviamente todo lo
recolectado se utilizaba para los logros propuestos por el
centro cívico.
Recordemos que estamos aún muy lejos de la creación oficial
de la acción comunal, y ya nuestras gentes buenas de arrabal
las habían creado con el nombre de centro cívico.
107

El centro cívico, fue la institución que logró por primera vez que
un alcalde de la ciudad visitara oficialmente el barrio. Ese
alcalde fue: Jorge Ortiz Rodríguez al final del año 1953.

3.11.1 LOS DICIEMBRES.

Los diciembres siempre están en mi recuerdo. Las gentes del


barrio celebraban los días de las velitas, alumbrando el frente
de sus casas; particularmente recuerdo el alumbrado de
Misaelito por ser el más vistoso.

En los días cercanos al inicio de la novena de aguinaldos,


salíamos de paseo con las Castrillones a recoger musgo a
boquerón. También íbamos a Caldas. De allí se traía este
elemento para hacer los pesebres.

Grande o pequeño, casi todas las casas elaboraban el pesebre,


o al menos la gente participaba de las novenas. Para asistir a
ellas nos preparábamos con sonajeros hechos de tapas de
gaseosa, e íbamos de casa en casa, disfrutando las novenas.

Los mejores pesebres eran sin duda los de: las Cárdenas, el de
mi casa y el de doña Quina. En las novenas, cantábamos
villancicos, y en algunas casas daban sorpresas a los niños
participantes. También recuerdo en tiempos muy remotos la
participación en las novenas, amenizadas con toques de
guitarra de unas negras gordas y buenas personas, a las cuales
llamaban las “Antioqueñas”. Ellas Vivían en una casa de dos
pisos con balcón abierto que estaba ubicada enseguida del
pasaje donde vive actualmente Mario Cano, pero en dirección a
san Juan. No volví nunca más a saber de las famosas
“antioqueñas”.

En la navidad, el 23 las gentes elaboraban las viandas de noche


buena: Natilla, buñuelos, hojuelas, manjar blanco, tamales, etc
los cuales eran compartidos e intercambiados entre vecinos.
Algunos mataban marrano, pero esto era muy escaso.
108

En cuanto a la música que se oía en esa época, vale la pena


mencionar a: Guillermo Buitrago. Lucho Bermúdez y Pacho
Galán y todo aquello que sonara como éxito para cada
diciembre, desde los corraleros de Majagual, hasta la sonora
matancera, de la cual recuerdo como hubo un diciembre que
solo se bailó: en el cachumbambé, ave maría Lola, y sin
corazón en el pecho.
Recuerdo como también el conjunto de Laureano Gómez,
ensayaba donde Esperanza Gómez, y aún retumba en mis oídos
el cántico sabroso de Luis Carlos Gómez:
“Ay mamacita no se asuste cuando vea,
El alacrán chupando caña., pom pom, pom,
El carbonero”.

FOTO: A la derecha Luis Carlos Gómez acompañado de Miguel y pacho


Gómez.
El 24 de diciembre y el amanecer de año nuevo, parece que
había licencia social, para que las mujeres bailaran en el café.
Allí acudían todos los que no tenían baile en la casa, o así lo
tuvieran querían divertirse con todos. Que recuerde eso se hizo
en el bar TBC, no en los otros bares del barrio (en los cuales los
parroquianos bailaban con las meseras).

El TBC se preparaba en estas fiestas navideñas, tirando viruta


en el suelo, y colocando en el piano música para bailar.
Recuerdo la música de Matamoros: el que siembra su maíz y de
donde son los cantantes, la billos caracas boys, y sus temas:
guarachona, mimí pinzón, rapsodia de cueros, la música de celia
cruz y la matancera, y a lucho Macedo y su disco
“guapachando”. Con este disco, aprendieron la caída de la hoja:
“Canito y el Negro Pedro Nel Piedrahita.
109

En esta bella época, nosotros elaborábamos los globos de papel


multicolor. Recuerdo particularmente los cojines y los rombos,
ya que los globos recibían un nombre de acuerdo a su forma.
También quemábamos pólvora: totes, luces de bengala,
chorrillos, busca niguas, papeletas, soplonas, pilas, eran las
preferidas. Los adultos quemaban voladores. Aún recuerdo la
guerra de silbadores, que de manera irresponsable
efectuábamos cada año. Comento todo lo anterior, porque tanto
los globos, como la pólvora están prohibidas y de seguro muy
pronto pasarán al olvido.

Ya en la década del 60, Mario pisco, los milanes, Mario flaco, los
churumbelones, Fernando Cardona el hijo de Chucho, y yo,
institucionalizamos el día 28 del diciembre el sancocho del
barrio. Este se elaboraba con la participación de todos los
habitantes del barrio. El 28 de diciembre del año pasado, al
pasar por el barrio, no vi movimiento de nada que fuera fiesta,
pero luego se me explicó que se había celebrado el sábado que
antecede al 28; luego la tradición sigue.

También vale la pena mencionar al menos un 31 de diciembre,


en el cual la coreografía de la viuda, y los familiares del muerto,
la hacían: Pininino, el pisco, (papá de Mario Pisco) y cacharro
colocaba la pólvora, A las 12 de la noche parecía que se fuera a
explotar el barrio. ¡! Que tiempos aquellos!!

El 31 de diciembre, se sigue celebrando el partido de solteros


contra casados; aunque lo difícil es verdaderamente saber el
estado civil de algunos miembros del barrio.

3.11.2 LOS BARES.

 EL CAFÉ ARRABAL. Arrabal como barrio, debe su nombre al


gran café Arrabal. Tenía un gran espacio en el cual había
billares y obviamente mesas para expender licor. Solo
recuerdo como administrador a Pepe Mesa, aunque su primer
administrador dueño y quien lo bautizó fue don Víctor
Gregory. Su música era el Tango. Recuerdo que el café era
centro obligado de remate de corridas de toros. Allí conocí a
110

Montecristo, a muchos políticos Antioqueños y a un


personaje típico: El cura Burgos, el cual nos regalaba su
revista llamada “la cátedra”. Como lo expresé al comienzo de
esta historia, está confirmado la visita de CARLOS GARDEL,
a nuestro querido café. Con él; que yo conozca, lo visitaron:
ARMANDO MORENO, ANDRES FALGAS Y JULIO MARTEL.

Con el paso del tiempo, el café se fue encogiendo, hasta


terminar en un tinteadero, antes de desaparecer
definitivamente.

 EL MOSCU: en mi concepto el bar más importante del barrio.


Inicialmente se llamó bar. Palestino. Dicho nombre en su
momento también fue dado al barrio, e influyó tanto en
nosotros, que el equipo de fútbol nunca se le colocó el
nombre de arrabal, sino de Palestino. De el conocí varios
administradores: a Carmen y su marido, ya mencionados en
esta historia. A Lorenzo, excelente persona y caballero, el
cual siempre tuvo gran deferencia y respeto por los
muchachos del barrio que estudiábamos. Y posteriormente a
Evelio.

Evelio. Vivía en la casa contigua al café, con su mujer y su


hija la flaca “Vitola”.Creo que su nombre era Yolanda, una
esbelta niña, que como lo expresé antes, es en mí concepto
la muchacha más bonita de esa época; familia rebuscadora y
digna de admirar. Este café, era el sitio de reunión de todos
nosotros. Pacientemente Evelio y el ñato Raúl nos
soportaban todo tipo de fastidios. Todos los tangos que nos
gustan, los aprendimos allí. Que época tan agradable y que
bueno es recordarla. Después el café pasó a ser tapicería, y
empezó el principio del fin del barrio, como lo desarrollaré en
el ultimo capitulo de esta crónica histórica.

De las meseras del Moscú recuerdo a: La hermana de Nelly


Rave, a Rosalba Rave, a Maruja Chiva, a Esther y a Leonila
“la matraca”.

 SOPA Y SECO BAR: este es el nombre un poco desconocido


del café que después se llamó LA VIEJA GUARDIA el cual era
111

administrado por el negro RAUL ALVAREZ al cual recuerdo


con cariño. Allí se combinaba el licor con el tinto al compás
de Daniel Santos o del tango de moda. A la vez que se ganaba
el pan diario Raúl.

De las anécdotas con Raúl recuerdo esta: cuando estando


apurado el equipo de fútbol del barrio por ir a jugar, se le tocó
insistentemente la puerta de su casa para que entregara los
carné, y el botiquín. Ante el afán que se tenía y al ver que
Raúl no respondía a los llamados, se optó por meter por la
parte de arriba una manguera, la cual al ser accionada desde
afuera, sonaba como una estrepitosa corneta. El resultado:
salió Raúl enguayabado muerto de susto y rabia y tiró a la
mitad e la calle el botiquín y los carné. ¡! Métanse su equipo
por el culo! Fue su exclamación.

 EL TIBIRI TABARA. Las actuales generaciones y muchas de


las anteriores, no lo conocieron. Este lugar, según mis
brumosos recuerdos, estaba situado enseguida de la casa de
ción, por la 65. En mi concepto era más un bailadero en el
cual había mucho personal femenino. Existió cuando Arrabal
tenía lugares donde venía la gente a divertirse. Este era uno
de ellos. Desde afuera se podía escuchar su música.
Desapareció y se convirtió en una casa de familia.

 EL BENITIN Y ENEAS: El cual quedaba exactamente al frente


de la tienda la María. Este es uno de los bares mas viejos de
arrabal, y de el nos recordamos muy pocos.

 EL AGUILA. Aunque este café no pertenece a Arrabal ya que


quedaba en la Esquina de Todelar, muchos de nuestra
generación íbamos hasta allá a jugar billar. Su dueño era
Jaime al cual le decíamos: Jaime “Águila” y del cual muchos
lo recordamos con cariño.
112

Foto: nena Galindo cargando a Gildardo Rivera de 8 meses, el papá de Jaime


“águila”, consuelo y la “la mona” dos hijas del español don José López, Alicia
Cano y su hijo Jaime águila.1946.

3.12 PERSONAJES CELEBRES:

on innumerables los personajes celebres del barrio.

S Trataré de recordar a algunos de los más típicos:

 ROBERTO PIÑA: Personaje conocido por todos, el cual bebía


todos los sábados y el día de la semana que tuviera dinero,
producto de su artesanal zapatería. Ya borracho salía por la
cuadra chasqueando los dientes y gritando: ¡!! Roberto Piña ,
todavía!!. Sobrio ni hablaba de lo decente Roberto. Borracho
era tenido por la gente como Cansón.

 CONRADO CHIVICHE: Hijo del anterior, inicialmente jinete,


luego chancero. Conradito, borrachito, le daba la juma por
desafiar a todo el mundo y creerse guapo. Nosotros los
muchachos lo buscábamos para molestarlo y reírnos un rato
a su costa. Le decíamos:

-“Conrado que hubo?!


Respondía Conrado: “que hubo de qué o qué.
-nosotros: entonces le decíamos: que de que o que?
- ¿Qué? , ¿Póngala como quiera o qué? , ¿Vos que? Respondía
Conrado. Este Era el cómico dialogo de Conrado cada ocho
días o con nosotros o con cualquier extraño que llegara al
café Moscú, o a la tienda del mono Octavio. Precisamente en
113

dicha tienda, un sábado en la tarde llegaron unos señores a


caballo a tomar aguardiente. Conrado se la “monto” a uno de
los desprevenidos jinetes, el cual ante los desafíos volteó el
caballo el cual le puso las posaderas en la cara y al suelo.
Nosotros en broma le decíamos: Conradito a ud ha sido el
único que en Arrabal lo ha tumbado un culo, y a atacarnos
todos de la risa.

 CARE MIERDA: Este era un vendedor de Periódicos que al


pasar por el barrio los muchachos le decían: ¡! Care mierda!!,
a lo que respondía el aludido: ¡ gete mierda hijuepu!! ,
acompañado lo anterior con la respectiva piedra.

 LA LOCA TULIA: Creo que a ciencia cierta, nadie en el


barrio arrabal sabe, cuando y como llegó la loca Tulia a los
puentes de la canalización a vivir. Lo que si sabemos todos,
es que se convirtió en un personaje querido por todo el
mundo, a la cual la gente del barrio ayudaba. Su hijo Emilio
se crió con muchos de los jóvenes de hoy. Tampoco nadie
sabe quien fue el papa de Emilio (de pronto uno de los
lectores de esta historia), el cual a diferencia de su madre
es un hombre cuerdo y “demasiado vivo”.

 LA LOCA LUISA: Esta niña, siempre está presente en


nuestro recuerdo, como una bella persona, frentera,
grosera, cómica, y querida por todos nosotros. Nunca nos
estorbó ni molestó la presencia de Luisa.

 EL NEGRO ESPERANZA Y LA MARICA JULIA: estos dos


personajes son el dúo de mariquitas muy estimados en el
barrio, los cuales eran a “las malas” súper groseros, pero a
las buenas excelentes personas. Sería injusto no tenerlos
en cuenta en esta historia.

 OTROS PERSONAJES: Hubo innumerables personajes que


también hicieron historia: solo citaremos algunos:
Morrongo. Carrique, carraspera, Paéres Héctor Córdoba, El,
churumbelón Mario pisco, Mario flaco, Sonia la mujer de
churumbelón, Esther la chancera, etc
114

3.13 PROFESIONALES DEL BARRIO ARRABAL:

En este aparte solo voy a citar inicialmente a aquellos que se


formaron en universidades de la ciudad y estaban graduados al
momento de mi salida hacia otra ciudad. Ellos son:

 Sonia Olaya. Abogada. Universidad de Medellín.


 Hernán Darío Mesa. Medico. Universidad de Antioquia.
 Gabriel Rivera Galindo. Ingeniero Químico. Universidad de
Antioquia.
 Gonzalo Montoya Restrepo. Ingeniero Civil. Universidad
Nacional.
 Gonzalo Milán Cárdenas. Se encontraba estudiando
contaduría.
 Rubén Darío Arcila, el cual es economista y terminó
posteriormente a nosotros.

Hoy para sorpresa de todos, la quinta generación de arrabaleros


se da el lujo de tener ingenieros de sistemas, médicos y toda
gama de profesionales. Esto nos llena de satisfacción ya que
sus logros benefician sin duda a familias que anteriormente les
tocó luchar con todo para sacarlos adelante. Entre estos
profesionales cito a: Paúl Cardona, José Fernando Trujillo el hijo
de blanquita y uno de los hijos de Elkin Vargas. Entre las
mujeres, tenemos a Diana la hija de Juan Gómez y Aura
Córdoba, la cual es arquitecta.
115

CAPITULO CUATRO:

OTROS RECUERDOS DEL QUEHACER COTIDIANO EN


EL BARRIO ARRABAL.

A CRECIENTE DEL RIO MEDELLIN. En mis recuerdos mas

L remotos esta la creciente del río Medellín. El río


prácticamente se salió de madre hasta la carrera 65.
Como anécdota se tiene que muchos peces al bajar las aguas
se quedaron varados en la tierra y fueron recogidos por los
vecinos. ¡Que tiempos aquellos! Cuando aún nuestro río tenía
vida y aún no había sido convertido en la cloaca que es ahora.
Sin temor a equivocarme esto ocurrió en 1951.

LA VUELTA A COLOMBIA: Otro acontecimiento que paralizaba


no solo a nuestro barrio sino a todo Medellín, era la llegada de
la vuelta a Colombia. Los corredores eran nuestros ídolos; en
las carreras a la manzana que era uno de nuestros juegos
preferidos, todos llevábamos con orgullo el nombre de alguno de
nuestros corredores más famosos. Ramón Hoyos, Francisco luis
Otalvaro, El negro Mesa, Conrado Tito Gallo, Honorio Rua,
Aureliano Gallón Cañas, y posteriormente, Hernán Medina,
Álvaro Pachón, pedro Jota Sánchez “El león del Tolima”, Rubén
Darío Gómez “el tigrillo de Pereira” y muy acá en el tiempo
Cochise Rodríguez.

En esa época, la gente se agolpaba en las calles a la espera de


los ciclistas. Aun recuerdo la rabia que nos ocasionaba el hecho
que siempre entrara en primer lugar a Medellín Jorge Luque, ya
que en esos tiempos la rivalidad era con los Bogotanos, los
cuales nos caían a todos muy mal.

Apodos deportivos tales como: El sastre de envigado, El potrillo


de Don Matías, el príncipe estudiante, estaban al orden del día
en todos nosotros, y todos escuchábamos la narración realizada
116

por los trans moviles, siendo nuestro Preferido Julia arrastia


Bricca.

LAS TOMADAS DE LECHE EN LA FINCA DE DON GELO: Algunas


madres d Arrabal llevaban a sus hijas o hijos a tomar leche
recién ordeñada a la finca de don gelo entre ellas recordamos a
Arcelita la cual levaba a amparo Tamayo y a las mellizas,
Maruja Jaramillo llevaba a Marlene. A la leche se le echaban
gotas de ruibarbo para que las muchachas cogieran color y
perdieran la palidez.

LOS CIRCOS Y CIUDADES DE HIERRO. La cercanía del barrio


con el sector de la macarena, permitió que nosotros,
conviviéramos, compartiéramos con las gentes de estos
espectáculos, a la vez que fuéramos asiduos asistentes o
colados o invitados oficialmente. Fue así como conocimos el
“coney Island”, infinidad de circos, de los cuales recuerdo los
mejores: el Royal Dumbar circus” y El circo Tianny.

Las ciudades de hierro por su parte, daban trabajo a muchas


muchachas del barrio, y dichos lugares de diversión junto a los
circos, permitían, el ingreso de algún dinero extra a las casas,
ya que se alquilaba a los artistas o trabajadores, los cuartos por
un precio un poco más alto al normal.

LA RADIO Y LAS RADIONOVELAS: la radio de ayer, desempeñó


el papel imprescindible en la vida cotidiana que desempeña la
televisión hoy. Desde muy tempranas horas se encendía la
radio. Las mujeres elaboraban por la mañana primero “los
tragos” de café, luego se hacia el desayuno al compás de la
música Colombiana. Desfilaba por nuestros oídos, el dueto de
Antaño. Espinosa y Bedoya, Garzón y Collazos En la emisora
Ecos de la montaña. Sin lugar a dudas la música Colombiana y
paisa, escuchada permanentemente en la casa y reforzada en
canto en la escuela son los dos referentes más claros de la forja
de la identidad paisa: el compromiso y orgullo por su tierra, que
no se ve de manera tan clara como en nuestra querida
Antioquia, en otras regiones del país.

A las doce del día recuerdo que en nuestras casas se


escuchaba “mundo al día” el cual enteraba de las noticias a
117

todas nuestras gentes. A la una de la tarde se sintonizaba la


emisora Ecos de la montaña, para escuchar a “Martinete” en su
programa “la media hora del pueblo”. Ya en la década del 60, a
la una y media exactamente, la Voz de Antioquia, iniciaba el
show de Montecristo:

“Se abren las puertas del buen humor”………..

En la noche, recuerdo el rosario, luego las novelas del momento


por la voz de Medellín o la voz de Antioquia. De dichas novelas,
recuerdo: Lejos del nido, Genoveva de Bravante, el derecho de
nacer, las aventuras del detective chino Chang li po, y
finalmente “el reporter Esso” con las noticias de la noche.

Foto: los radios de la época.


También en nuestras casas recuerdo un programa cómico que
antecedió a montecristo y que todos oíamos este era el
programa de Jorgito (Raúl Echeverri). Luego vivieron otros
programas también del agrado de las gentes de nuestro barrio y
dignos de mencionar, ellos son: La escuelita de doña Rita y el
programa de Evert castro el coloso del humorismo, los
tolimenses y los haparrones.

Las emisoras Eran de suyo demasiado importantes, en ellas se


hacían presentaciones en vivo, para lo cual tenían escenarios.
Muchos de nosotros fuimos a Juan del Corral, a la voz de
Antioquia a ver en vivo a Montecristo, pochocha y todo su
elenco. Así mismo algunos patrocinadores pagaban las
presentaciones del payaso “chalupin” de grata memoria entre
nosotros.
118

La emisora Todelar, la recuerdo porque en ella conocimos por


primera vez, en los bajos de Todelar, al padre Camilo Torres el
cura guerrillero, el cual después se enrola en el ELN, y pierde su
vida en los primeros combates. También recuerdo la rifa de la
lotería de Medellín, la cual era amenizada todos los viernes por
la orquesta de Pacho Galán, y éramos espectadores
permanentes los muchachos de arrabal. Particularmente
recuerdo aun cantante de apellido Barceló y a Tomasito
Rodríguez.

EL CATECISMO DE LOS SALESIANOS .Todos recordamos como


uno de los programas más agradables de los domingos en la
tarde, era, salir en gallada al catecismo de los salesianos. Era
así como nos íbamos para San Benito donde quedaba el colegio
Pedro Justo Berrio, sede del famoso catecismo. Para llegar más
fácilmente, cruzábamos el puente que estaba justo mal frente
de los bomberos de Medellín. Allí se participaba en juegos, nos
daban una especie de algo después del catecismo, el cual era
obligatorio. Uno no veía la hora de que se acabara para poder
entrar al cine. Allí vimos excelentes películas, las series de la
calavera, el pirata hidalgo, el capitán América e invasión a
Mongo entre otras. Creo que toda nuestra generación de una u
otra manera participó en el catecismo, o bien donde los
salesianos o en casa grande en la 65 donde hoy está makro.

LA FERIA DE GANADO: Esta se encontraba a la derecha de la


estación de bomberos de la avenida del río. Recuerdo que todos
los miércoles había feria y la gente arreador en mano iba a
comprar o vender sus animales. Por su cercanía al barrio, era
muy común que a Arrabal, llegaran toros grandotes y bravos que
convertían el barrio en un despelote: la gente corría
aterrorizada a esconderse, las madres entraban a los niños,
otros nos subíamos en lo mas alto de las rejas de la ventana y
los mas atrevidos intentaban convertirse en toreros, hasta que
llegaban jinetes con lazos a amarrar al huidizo animal. Que
recuerdos tan agradables aquellos en que arrabal era
verdaderamente un barrio o un centro de negocios y talleres y
Medellín era una ciudad en ciernes.

LA FERIA DE LAS FLORES. Se celebró la primera en mayo


primero de 1957, todos salíamos siendo muy niños, solos a las
119

casetas cercanas como la ubicada en la Macarena o


acompañados de nuestros padres a las diferentes actividades
en el centro de la ciudad y en el estadio. De ellas recuerdo, las
cabalgatas, las gentes tomando licor y bailando en el tablado
publico de la macarena al ritmo del conjunto Miramar. Quedaron
grabadas en mi mente canciones que todavía escucho con
nostalgia:

“ya soy feliz mujeres, ya soy feliz


Porque ha empezado la diversión
Para mí.
La diversión que hacia falta en mi país,
Porque ya me voy caramba;
¡! Pa Los carruseles!!

Se escuchaba, “Chela”, pachanga Miramar, y mi pregón. Entre


otras deliciosas canciones que todos oíamos y que los viejos
bailaban:
“Este es mi pregón mi pregón o madre,
Que lo canto aquí para ti porque tú sabes,
Que lo canto aquí para ti por que bien sabes”.

Recuerdo las hornillas, donde se vendían empanadas y horchata


a la cual acudían los borrachos, y de las cuales muchas gentes
del barrio empezando por mi mamita, mejoraban sus ingresos.

En una de estas ferias, se quedó dormido borracho, uno de los


Álvarez, hijo de una de las hijas de Cion, al cual le decían “el
mono”, pues bien fue el primer muerto de Arrabal en una feria
de las flores, porque según parece, “le pasó un carro por
encima” y nadie se dio cuenta hasta que se escucharon sus
lamentos, pero ya no había nada que hacer por su vida.

LOS BAILES: A la gente de nuestro barrio le gustaba bailar. Así


se celebraban primeras comuniones, matrimonios y otras
celebraciones sociales. Muchachas como la hermana de Dago,
Omaira y la hermana menor de los cachones, eran invitadas o
estaban en todos en primera línea. Entre los hombres, recuerdo
como bailarines a Rodrigo Milán y su baile de manos
extendidas, a Mario y sus sacos pequeños parecidos a los que
usan los bailarines andaluces, a Carraspera, excelente bailarín,
120

a Gurrimba, otro bueno para bailar y otros que se me escapan


de mi memoria, aunque en estos momentos me acuerdo de
Héctor “terra” el hijo de Amantita el cual era un gran aficionado
al baile.

En la foto Héctor ”terra” Otro con quien compartí mi vida en arrabal .

Estas fiestas se amenizaban con Aguardiente, ron o cerveza por


parte de los más pudientes. Los demás hacían la vaca para
comprar el alcohol marca Lilly, los tamarindos, la leche
condensada y así poder preparar el cocol o “pipo” entre los
pobres, pues los ricos también lo toman pero lo llaman cóctel.
Este era sin duda alguna el licor oficial de casi todas las fiestas
de arrabal. Muchos nos divertimos tomándolo y a el le
agradecemos muy buenos ratos que pasamos.

Casi siempre, en un noventa por ciento, todas estas fiestas


terminaban en pelea. Aparecía el lucido y se tiraba la sana
convivencia. Aquí se refleja precisamente un elemento bien
preocupante en la convivencia barrial, el cual es uno de los
detonantes de la violencia que aqueja hoy gran cantidad de
barrios populares de todo Colombia; ya que si no somos
capaces de compartir con quienes nos criamos, crecimos y
convivimos; mucho menos lo podemos lograr con los extraños o
los diferentes.

En referencia a las fiestas recuerdo que lo que llaman plato frío


o cena era bien escaso en ellas. Una anécdota que nunca
olvidaré y que cuando recuerdo me ataco de risa, tiene que ver
con la fiesta de quince años de Magdalena la hermana de los
121

churumbelones. Estos sin mucho dinero para realizarla,


aceptaron la propuesta de una barra de muchachos entre los
cuales estaba Héctor Córdoba según recuerdo. Se compró el
alcohol y los tamarindos para hacer el cóctel de cocol, y se
prendió la parranda.

Ya hacia la una de la mañana la gente empezó a preguntar por


el plato frío de la fiesta de cumpleaños. A la gente se le
respondió que tranquilos que esto sería más tarde, como en
efecto ocurrió. A la gente se le entregó a cada uno su plato de
rica lechona Tolimense. Es decir apareció de todo y sin dinero.
Hubo hasta para cena.

En la cabeza de todos giraba la pregunta: ¿pero de donde se


sacó plata para lechona? La respuesta era la carcajada batiente
de muchos de nosotros que sabíamos de donde había aparecido
la bendita lechona.

Resulta que por la época se celebraba la famosa feria de


exposición de ganados en la feria cerca de Bello. A dicha feria,
lo mismo que a la de las flores, venía un tolimense amigo de
Hernando Paéres y al cual le alquilaban una pieza donde los
churumbelones, durante el tiempo que durara la feria. Este
señor fabricaba allí las lechonas, las cuales llevaba a asar a una
panadería, pero previendo buena venta siempre dejaba una lista
en su pieza, y esta fue precisamente la que sirvió de cena en el
cumpleaños de Magdalena. Parece que fue Héctor Córdoba,
quien abrió por detrás un roto a la lechona con un cuchillo, por
allí la vaciaron y nos la comimos. Cual seria la sorpresa del
Tolimense, al día siguiente ver que su lechona no pesaba nada y
era solo cabeza y cuero. Que risa nos da aún después de tantos
años cuando nos acordamos de este cómico suceso. Así era el
Arrabal que recordamos.

EL TANGO: Pegado al alma del barrio se encuentra el tango,


sensual y dormilón, narrador de amores y desamores, historia
de guapos y matones. Precisamente su nombre Arrabal,
rememora al tango cuando Gardel nos dice:
122

“Arrabal amargo metido en mi vida,


como la condena de una maldición.
Tus sombras torturan mis horas sin sueño,
tu noche se encierra en mi corazón.
Con ella a mi lado no vi tus tristezas,
tu barro y miserias, ella era mi luz.
Y ahora, vencido, arrastro mi alma,
clavao a tus calles igual que una cruz.

Rinconcito arrabalero, con el toldo de estrellas


de tu patio que quiero. Todo, todo se ilumina,
cuando ella vuelve a verte y mis viejas madreselvas
están en flor para quererte”.

Toda nuestra generación amó sufrió sus penas de amor y bebió


al compás del tango. Echagüe, inspiró muchas borracheras de
churumbelón, el cual era fanático de este cantante. Pablo
Piedrahita escuchaba a podestá, porque…”yo vivo lo que canto
y canto lo que sueño en mi pobre alma de bohemio”. “Cuando te
fuiste”, “pasional” de Oscar barroca y rondando tu esquina de
charlo, eran mis preferidos.

Cada ocho días se oía más duro el retumbar del bandoneón en el


Moscú, en el café arrabal y en la Vieja Guardia. A su vez el
centro cívico, con su bullicioso parlante nos llevaba el bello
mensaje de Falgás:

“Tibio está el pañuelo todavía,


Y tu adiós me repetía desde el
Muelle de las sombras”…..

Arrabal era tango y hay que reconocerlo. Y es aquí donde mi


madre OLGA GALINDO ocupa un lugar especial: así como Mario
Pisco no falla a ninguna corrida de la feria de la candelaria, mi
mamá Olga no se perdió ningún festival del Tango. Conocedora
como ninguno, se daba el gusto de intercambiar música con
Hernán Restrepo Duque y eso ya es mucho decir. Fotos con
todos: Larroca, Armando Moreno, Lavorde, Falgas, Echagüe y no
se cuantos más.
Debo aquí reconocer su versatilidad musical, pues saltaba
fácilmente del tango a la salsa, siendo sus preferidos: Lavoe el
conde monguito y papaito. Antes de morir fue necesario llevarla
123

a la discoteca el Corzo para morir tranquila después de


escuchar al mejor de todos Héctor Lavoe.

LOS VELORIOS: Las gentes de nuestro barrio siempre fueron


solidarias y muy unidas, pero nada los unía mas que la
enfermedad o la muerte de un vecino. Una vez se conocía el
fallecimiento, se avisaba a todos, la gente se preparaba para
acompañar a los deudos. La amanecida era casi obligatoria, ya
que no se podía dejar solo al difunto, pues se conocía de casos
donde este no dejaba salir de la sala a quien quedara solo con
él. Por lo regular se daba merienda o consomé a altas horas de
la noche; los hombres llevaban aguardiente y en bandejas se
regalaban cigarrillos a los presentes. El velorio tiene dos
momentos uno profano, en el cual se desarrolla todo lo anterior.
Es por ello que los mejores cuentos y los mejores pedos se
cuentan y se tiran en los velorios. El segundo momento es el
ritual sagrado ante la muerte, que consiste en el rezar la novena
de las animas y los rosarios. En esta actividad sobresalía Carola
Gómez, las Cárdenas, Esperanza Gómez, etc. Para mi caso
particular, siempre me sobrecogía la muerte, pero me aterraban
las novenas:

“ ay de mi hay Dios severo,


Ay llama voraz activa, hay justicia que no cesa,
Ay cuando se ha de acabar”

Después de enterrado el difunto se acompañaba la familia


durante nueve días, en los cuales ante un altar hecho en una
mesa con una cruz, un cuadro de la virgen del carmen y un vaso
con agua para que bebieran las animas, se rezaba la novena
diariamente.

LOS SOBANDEROS: En arrabal solo conocí dos sobanderos. Uno:


el ñato marido de Ción, el cual rezaba las descomposturas y
además sabía sobar. El otro vivía en el hueco y se llamaba
Zacarías, el cual curaba animales y mejoraba descomposturas
con misteriosos rezos.

LOS GITANOS: El sector donde está ubicado nuestro barrio, por


sus extensas mangas y su ubicación rápida con el transporte
urbano, fue un lugar preferido por los gitanos. Estos ubicaban
sus grandes carpas en los terrenos que actualmente ocupan las
124

casas que son vecinas al pasaje de cacharro hasta llegar a san


Juan. También ocupaban mangas que actualmente ocupa la
avenida Bolivariana. Estas personas vivían del trabajo artesanal
del cobre, del cual hacían pailas y las mujeres se regaban por
Medellín a ganar dinero adivinando la suerte.

Entre las pilatunas de niño que hacíamos con los gitanos,


estaba que cuando pasaban nosotros les decíamos: ¡gey daza
mabule!! , que según nos habían dicho, en su dialecto
significaba : ¡Hijueputa!. Salíamos entonces corriendo y
riéndonos a carcajadas, y los gitanos si se daban por
entendidos.

LA HUELGA DE TEJICONDOR. En el año de 1958 se desató una


huelga en Tejicóndor que duró varios meses. Los trabajadores
armaron sus carpas sobre la calle San Juan en el vecindario del
frente sobre todo la hilera de casas que estaba entre la 65 y 66.
Allí se hacían comidas comunales, y los miembros del barrio le
sacábamos jugo a todo eso. Esta huelga fue una verdadera
comunión entre un barrio pobre y solidario con los obreros en
conflicto.

En esta huelga recuerdo que los obreros hicieron uso de toda su


estrategia y todas sus capacidades para mantener a las gentes
en la calle llamando la atención sobre el conflicto: sus grupos
de danzas folclóricas hacían presentaciones diarias y la
orquesta de Tejicóndor bajo la dirección de “pandequeso” nos
deleitaba todos los días, hasta el punto de no querer ir a
estudiar por estar en las carpas con los obreros viendo bailar a
excelentes bailarines como eran los Piedrahita, dos negros uno
de ellos marica, que eran junto a sus hermanas profesionales
bailarines. También había presentaciones diarias de Alonso
Galdini, el imitador de Agustin Magaldi, el cual nos deleitaba
con canciones como: quien eres tú, Dios te salve mi hijo, etc.
Que huelga tan buena y que recuerdos tan agradables, ya que a
todos nos llenó de nostalgia el arreglo laboral, que nos privaba
de gozar con los obreros y su agenda de variedades y
entretención.
125

LA PLAZA DE TOROS LA MACARENA. Nuestro barrio, siempre


había tenido una influencia grande por parte de los diferentes
espectáculos que llegaban a la plaza de toros la macarena. En
la época que describo, era relativamente fácil entrar a ella,
bastaba decir las palabras mágicas que también utilizábamos
para entrar al estadio, ellas eran: “señor me entra?” ; y fue así
como logramos asistir a una gran cantidad de corridas y otras
actividades que allí se desarrollaron. Fue así como vimos y
conocimos a: el cordobés, al Viti, a Antonio Ordóñez, a los
Dominguin, a Silverio Pérez, el bombero torero, el empastre,
gitanillo de Triana, Carlos Arruza, y una lista interminable de
rejoneadores en los cuales recuerdo a Ángel Peralta.y a
conchita Cintrón. No se puede negar que nos tocó presenciar a
los mejores toreros del mundo, lo anterior también ayudado por
Juan Gabriel Arango “Aranguito”, el cual vivía en la plaza ya que
era hijo del conserje Aranguito padre y estudiaba con nosotros
en la escuela República de Chile.

En mi caso, me actualice, con los toreros contemporáneos, en


mi visita como profesor invitado a España. Allí tuve la
oportunidad de acudir a corridas de toros en Albacete,
Castellón, Madrid, Granada y Sevilla; aunque confieso que lo
hice más por conocer que por afición a los toros.

La plaza se prestaba también para otro tipo de espectáculos


diferentes al toreo; fue así como los muchachos de la época
conocimos a: Cantinflas, Sarita Montiel, Maria Félix, Tony
Aguilar y muchos más que se escapan a la memoria.

Nos gustaba de la plaza, cuando había embolado: ello consistía


en que se soltaba un toro con los cuernos forrados en algodón,
para que lo toreara el público. Esto era una delicia, ya que todos
nos metíamos al ruedo y a correr hacia los burladeros cuando
llegaba.

Una anécdota de la plaza de toros, tiene que ver con Toño


“Pipa”, el padre del aguililla, el cual era monosabio en la
Macarena, y nos contrato como a 20 centavos cada uno, para
que cuando terminara la corrida, corriéramos a subir en
hombros a Pepe Cáceres, el torero Colombiano y lo lleváramos
en hombros hasta el hotel Nutibara. En efecto así lo hicimos y
126

de ello creo que todos nos acordamos aún hoy día del cansancio
tan berraco con que llegamos a nuestras casas. Recuerdo en
esa caminata a Alberto churumbelón a pichón y al aguililla.

En nuestros recuerdos también se encuentra la participación de


las gentes de nuestro barrio en la procesión nocturna de la
virgen de la macarena, la cual sino estoy equivocado se
celebraba el 2 de febrero. A ella acudíamos con velas y era una
procesión majestuosa y solemne.

También esta presente en nuestra gente más vieja del barrio la


historia de: MIGUEL PRIETO. Este era un muchacho Bogotano
que de un momento a otro apareció en boca de todo el mundo
en arrabal, ya que había sitiado la plaza de toros la Macarena, y
hasta que no le dieran una oportunidad no se retiraría de dicho
lugar. Las viejas de arrabal le llevaban comida, empezando por
mi abuela, y las muchachas le lavaban la ropa. Todo el mundo
quería a Miguel prieto, el cual también se mantenía en arrabal
comiendo y con disimulo enamorando las muchachas. La cosa
llego a tal difusión que los medios como el periódico el
colombiano le hicieron reportajes, y la gente pedía una
oportunidad para Miguel prieto; y esta llegó. En la primera
corrida, le fue excelentemente bien, hasta el punto que se
planificó otra, donde Miguel Prieto envalentonado y creyéndose
“el Cordobés”, esperó a su primero de la tarde en Puertagayola5,
pero con el agravante que no dejaba espacio al pobre y
asustado animal para salir al ruedo, no quedándole otra a este
que, salir de frente arrastrando a nuestro torero hasta la mitad
de la plaza, con las consecuentes peladuras, golpes y
moretones. Esta corrida fue un fracaso y así no fue tenido más
en cuenta Miguel Prieto, y lasa viejas de arrabal lo curaron de
sus golpes y heridas y le dieron comida hasta que se fue
suponemos que para su tierra natal.
De esta historia siempre nos preguntamos: ¿Cuál fue o
fueron los vivos que se robaron la plata de las dos corridas
de Miguel Prieto?, ¿donde terminó Miguel Prieto? Lo que si
nos quedó claro a todos fue que muchas familias se
escaparon que Miguel Prieto les hubiera dejado toreritos
en la barriga de las hijas.

5
Suerte de la faena de toreo, donde se espera al toro a la salida de la puerta de toriles.
127

LOS CINES. En nuestra época, todos asistíamos cuando


teníamos la oportunidad al cine. Recuerdo que nuestros teatros
preferidos eran: el Rivoli, el América y el Santander por la
cercanía y el hecho de encontrarse en la América. Después se
abrió el tropicana, al cual acudíamos con frecuencia. En nuestra
época no existían aún los teatros ubicados en el sector de la
carrera 80. Todavía recuerdo a Taborda el portero del Rivoli, al
cual le gritábamos cuando no nos dejaba entrar por la edad a la
película: ¡ Taborda el de la gueva gorda!

También concurríamos a los teatros de guayaquil aunque a


estos lo hacíamos con un poco de temor a lo que pudiéramos
encontrar adentro, especialmente pervertidos, pues se
encontraban en plena zona de tolerancia de Medellín los teatros
de esta zona eran: el Granada, el Guayaquil, El Medellín, el
Balcanes; y subiendo hacia el barrio Buenos Aires estaba
ubicado el teatro Buenos Aires y el Roma.

Otros teatros visitados por nosotros eran el Olimpia el alameda


y posteriormente el sinfonía, aunque este se convierte en teatro
XXX y allí no podíamos entrar Los menores, ya que en los
periódicos de la época, aparecía un aviso de la curia en el cual
se encontraba la clasificación moral de las películas y había
desde las películas para todos, hasta las películas con grandes
reservas morales y las prohibidas para todo católico; siendo las
ultimas nuestras preferidas.

Fue al teatro Mariscal en el barrio Belén uno de nuestros


preferidos. La muchachada, salía a pie por lo que es hoy la
avenida Bolivariana hasta llegar al mariscal. No nos perdíamos
los dobletes de películas mexicanas los lunes y los dobletes de
terror o aventuras los miércoles. Recuerdo que cuando tocaban
la canción: “el ferrocarril de los altos”, todos decíamos: sentate
guevón que va a empezar la película.

Para todos nosotros eran conocidos: Cantinflas, que era lo


máximo. Tintan y su carnal Marcelo, viruta y capulina, lalo
González “piporro”, Andrés Soler, “chaflán”, borolas, resortes
nuestro ídolo, ya que era un bailarín sin igual, y al cual todos
queríamos imitar: Rumba caliente y el dengue del amor con
128

Pérez Prado eran mis preferidas. También veíamos las películas


de Luis y Tony Aguilar, Pedro Infante y Jorge Negrete; y
obviamente las que tuvieran que ver con los luchadores
enmascarados que eran nuestros ídolos: el enmascarado de
plata ( el mejor), blue demón, la sombra vengadora, el jinete sin
cabeza, los tigres del ring, etc

Una de las películas que todos vimos y lloramos, y al año


siguiente volvíamos a ver y a llorar, fue: El Mártir del Calvario,
con Francisco Rambal. Caso similar ocurrió posteriormente con
los 10 mandamientos y Ben Hur, las cuales uno repetía cada
año como si no las hubiera visto nunca.

Toda nuestra generación a través del cine, suspiro y tuvo malos


pensamientos por primera vez al ver en las películas a: María
Félix, Ana Luisa Peluffo, María Antonieta Pons (¡que culote!
Tenía esa mujer!), Sarita Montiel, Carmen Sevilla, Ana Bertha
Lepe la tongolele, Miroslava y Lorena Velásquez.

LAS REVISTAS QUE LEIAMOS: Las gentes de nuestra época les


gustaba la lectura. Quizás la gran influencia de los románticos
del siglo XIX en todo el país. Recuerdo que muchas personas
leían especialmente a Vargas Vila y a Julio flores. También se
leía en esa época una excelente revista Norteamericana, que
traía todas las noticias del frente de combate en la segunda
guerra mundial, y también la revista selecciones. Ya hacia
mediados del 50, se convirtió en Bestseller, el libro: “el diablo
estuvo aquí” de Hemel Ramirez, en el cual se contaban todas
las tropelías convertidas por los pájaros en la violencia,
específicamente en Antioquia.

Los muchachos un poco más adolescentes y los que ya


trabajaban, recuerdo que leían libritos de vaqueros cambiables
por otros en algunos lugares. Entre los autores recuerdo a
Marcial la fuente Estefanía y keyt Luger. Las muchachas leían
revistas de amor españolas y Mejicanas y especialmente “Corin
Tellado” la cual unas a otras las intercambiaban.

Por su parte nosotros leíamos con avidez las llamadas revistas,


hoy llamadas comics. En muchas casas había alquiladeros.
129

Nuestras preferidas eran: Roy Rogers, El halcón negro, Tarzán,


el llanero solitario, Tom y Jerry, Pato Donald toda la Gama de
Disney y el Halcón negro. El enmascarado de plata, era quizás
nuestra preferida, la cual una vez leída, por 20 centavos se
podía cambiar en guayaquil, y así continuar la secuencia del
episodio tratado.

Foto: las revistas que leíamos.


OTROS RECUERDOS: Los que vivieron esta historia,
particularmente recuerdan lo sana y barata que era la vida.
Hasta las gaseosas y las cervezas cambiaron. En mi memoria
recuerdo que tomamos malta marca “Gallo”, cerveza
Certamayo, en gaseosas recuerdo la Freskola, la Ginger Luz y la
Kolkana. Proleche y San Martín distribuían su producto en
botellas de vidrio, aun recuerdo la botellita tamaño miniatura
que todos llevábamos a la escuela. Que buenos tiempos
aquellos.
130

Foto: todavía esta en nuestros recuerdos la famosa frase: “yo no pago paga
Kolcana”.
GUAYAQUIL Y LOVAINA. Es innegable que estos dos sectores
del Medellín de antaño tuvieron influencia en todos nuestros
barrios. El ancestro campesino que tiene como referente la zona
de tolerancia6, ve en la gran zona de Guayaquil la reproducción
de dicha zona en sus pueblos de origen. Ello crea una división
invisible entre el barrio y la legalidad y la llamada zona y la
ilegalidad legalizada. Bien todos mirábamos con mezcla de
temor y deseo a Guayaquil. Nuestra formación machista, nos
decía que tarde o temprano deberíamos ir allí a legitimarnos
como hombres. Quizás a muchos de nosotros, nos tocó una
etapa más avanzada de Guayaquil en lo que hace referencia a
su desaparición como sector que representa el tango y la
prostitución, y su paso a su nuevo significado representado en
la Salsa (el vallenato posteriormente) y la diversión.

Acudimos a Guayaquil ya siendo estudiantes universitarios


muchos de nosotros y trabajadores consolidados el resto; a
escuchar amenizada por el aguardiente, la salsa que tanto nos
gustaba y de la cual muchos nos consideramos impulsadores en
Medellín; y porque no en nuestro barrio, donde peleábamos en
los bailes porque nos pusieran un disco de Richie Ray, ante las
mayorías adictas a los Hispanos , los graduados y los golden

6
Paradójicamente en Colombia a las zonas de prostitución, juego, y otras actividades no santas o ilegales,
en vez de darles el nombre de zonas de intolerancia, se llaman por el contrario, zonas de tolerancia.
131

Boys, los cuales eran los manda callar de la música tropical en


la época.

Asiduos clientes del BAR ARISTI, en guayaco éramos: Gonzalo


flaco, Mario Flaco, Mingo y Rodrigo Milán, los Churumbelones y
Jaime Pirra. Allí Jaime su dueño nos atendía y a algunos como a
Gonzalo hasta les fiaba. Otro de este combo de salseros de
Guayaquil, era Javier Tamayo, el cual cuando tenía la
oportunidad nos acompañaba, aunque este prefería más el
bebedero del “suave” en Juan del Corral, donde escuchaba
hasta cansarse a Roberto Lugo y Ray Hierrezuelo . Fue en el
aristi y en guayaquil, donde me autoevaluaba como salsero, es
por ello que cuando dicté una conferencia sobre la música del
Caribe, en la Universidad de la Habana en su facultad de
filosofía y letras en la cual trabajé; obligatoriamente me acorde
de arrabal y de los amigos que tengo allí unidos a mi mas por el
corazón que por la presencia real.

Otro de los lugares de rumba y diversión nuestra, eran EL


TETERO y EL TROPICANA en la curva del bosque. Allí íbamos a
bailar salsa y a divertirnos viendo bailar a Mario flaco Pancho
Cristal de Ricardo Ray. Que bueno pasábamos y que sano era ir
a esos lugares que después nos ahuyentaron cuando empezó ya
a verse la violencia impuesta por aquellos que creen que
pueden acabar a bala con la felicidad de los otros.

EL FUTBOL. Sin lugar a dudas, el deporte preferido de Arrabal.


Todos nacimos y nos criamos con el fútbol, reconociendo que
algunos no teníamos las habilidades que otros tenían desde
Muy pequeños.

Recuerdo las continuas entradas al estadio Atanasio Girardot,


en el cual entrando por la puerta de “gorriones” o con la ayuda
de algún aficionado, logramos ver y conocer a lo mejor del
mundo en ese deporte para la época.

Nuestros jugadores jugaron en muy buenos equipos, los que


mas recuerdo son: Equipo Palestino. Equipo carrocerías abarco
y equipo arrabal ínter barrios. También personas como el Grillo
jugaban en el equipo de Coca cola.
132

EL EQUIPO BARCELONA: Indudablemente el mejor equipo que


ha tenido Arrabal fue el BARCELONA. Patrocinado por el
costeño, un tapicero amante del fútbol. Este equipo de
muchachos pobres y escasamente equipados venció en la final
al flamante equipo del Sena, siendo el primer equipo de arrabal
campeón reconocido en este deporte.
Entre sus jugadores recuerdo a Canito, Darío Gil, Hector “terra”
Álvarez, Gonzalo flaco, Iván caquita,el costeño, Javier Tamayo,
Javier correa, Fernando Morales, ñingas y creo que Mario Pisco
y pica.

Balón y guayos de la época nuestra año 1953.


Nuestras canchas preferidas fueron: la de la Macarena, la del
verbo Divino, la cajita de fósforos y las canchas Marte de la
unidad deportiva Atanasio Girardot.

Decir quien fue el mejor jugador del barrio Arrabal, es bastante


difícil, pero decir quien fue el mas representativo no lo es ya
que todos reconocemos como tal a JAVIER TAMAYO.

A pesar de lo anterior, fueron muchos los que sobresalieron.


Menciono entre otros a:

OSCAR LÓPEZ, el hijo de José “Largo” López, el cual vivía en la


casona al frente de la entrada de Tejicóndor, y el cual llegó a
jugar fútbol con los viejos de Arrabal. En mis tiempos de niño
venia frecuentemente al barrio. Oscar que actualmente vive en
Cali, tiene el merito de haber sido el único jugador casi de
nuestro barrio, que llegó a jugar un mundial de fútbol (Chile
1962) recuerdo que en ese mundial, todos sentíamos que el
barrio estaba allí representado.
133

GUSTAVO CIFUENTES: Excelente jugador de fútbol y gran


persona. Conversando en Pereira en su negocio de Carne con
Isaac Bobadilla, me hablo de Gustavo con reconocimiento al
jugador, al amigo y a la persona.

Gustavo Cifuentes y Luisa. Personajes muy queridos del barrio.

RUBEN DARIO BEDOYA. Hijo de Luz y hermano de la “loca”


luisa. De el tengo fresco el matrimonio de su mamá con un
muchacho que trabajaba en Camel y que no volví a ver, ya
mencionado cuando hablé de la familia Durango. Con su
esfuerzo y tesón escaló reconocimiento desde la selección
Antioquia hasta equipos de prestigio como América de Cali el
deportivo Pereira en el cual militó durante cinco años, el
deportes Tolima,Santa fé, Cucuta, real Cartagena, DIM, y dos
equipos de la primera B: Deportivo Antioquia y Rionegro).

Rubén Darío Bedoya , junto a Ochoa Uribe, el cual vivió en el


pasaje de etien han sido los únicos habitantes de barrio que
después de haber sido jugadores profesionales, han logrado
convertirse en profesores de fútbol es decir llegar al máximo en
este deporte: ser entrenadores. Para su caso en la actualidad
Rubén Darío, es el entrenador del envigado fútbol club. Es por
ello que a pesar de ser el barrio tradicionalmente hincha del
DIM y del nacional, estamos con él y le deseamos que triunfe
porque es de los nuestros y su entrega responsabilidad y
sacrificio lo merecen.
134

7
Rubén Darío Bedoya y Gonzalito Milán.

En el cuadro de honor futbolístico del barrio estarían entonces:


Javier Tamayo, Oscar López, Toño Córdoba Gustavo Cifuentes y
Rubén Darío Bedoya.

Se hace necesario mencionar a Jaime “velitas Pérez”, el cual


sin ser de arrabal también hace parte por “cercanías” a
nosotros que se le reconozca; además su hermano siempre fue
compañero de fútbol nuestro.

Otros buenos futbolistas de nuestro barrio fueron: Toño


Córdoba, ya mencionado en esta historia, Jhon Cárdenas, Los
Milanes (suso y Rodrigo), Carraspera, El grillo, Jaime Pirra,
Alberto Churumbelon el cual confundía jugar con arrasar al
contrario, Mario Cano, Oscar Toro, Arley Giraldo, Horacio Tola
pichón Javer y Nectalí Álvarez completarían esta remembranza
de los jugadores de mi época.

Al anterior grupo le seguían otros excelentes jugadores, mas


jóvenes y por ello no menos eficientes: Gonzalo Flaco, Javier
Correa, Darío Gil, Jorge su hermano, Gabriel Rivera, Iván
caquita, Mario pomponio, Edgar Canito, Mario Pisco entre otros.
De esta camada los malitos para jugar este deporte éramos:
Jairo Calavera, Nando cambalache, Omar tarugo, Oswaldo
Tamayo Elkin Vargas y yo.

7
Dejamos consignado que muchas de las fotos son propiedad de José Fernanddo Trujillo y su blog sobre
el barrio. Pero el libro histórico de Arrabal, las hace propiedad de todos.
135

Todavía tengo viva la anécdota en un partido de recocha en la


cancha del verbo divino, donde Nectalí me grita: “Flaco cojéla”
y yo la cogí con la mano. Resultado: penalti, gol y casi me
linchan todos los de mi equipo. Hoy esto solo nos trae risas y
carcajadas al recordar el ayer, y demostrarme a mi mismo que
estaba más para escribir que para jugar fútbol.

Todos recordamos la anécdota de Churumbelón el cual por


hacer una chilena, se pegó tremendo golpe en la boca con la
rodilla, y salio gritando: ¡ mi dentadura , mi dentadura!. Nosotros
nos reíamos mucho y nos preguntábamos con asombro: Cual
dentadura por Dios!

De las más recientes generaciones se hace necesario destacar


a: Fernando Montoya quien no solo llegó a la selección
Antioquia sino que inclusive llegó a ser fichado por el Deportivo
independiente Medellín.

LAS BARRAS:

Continuación trataré de ubicar las barras de nuestro

A barrio por generaciones hasta donde la memoria me lo


permite. El hecho de pertenecer a una barra
generacionalmente, no limitaba la amistad y fraternidad con
todas las demás. Lo cito aquí más que para tener un referente
del recuerdo que otra cosa.

 BARRA DE LOS MAS VIEJOS: José Cano, Carrique,


Morrongo, Roberto Piña. José Patalan, Chucho negro.

 BARRA PRIMERA GENERACION: Beltrán, Alberto Mesa,


Pininino, cherry, Mario Pisco padre y Gabriel Piña, El grillo.

Las barras de la segunda generación, las diferenciamos en una


y dos, de acuerdo con los miembros que compartían en cada
una a pesar de ser la misma época. Es de anotar que todas las
barras de arrabal era una sola cuando se trataba de jugar fútbol
o compartir determinadas actividades. Prueba de ello es que
nunca hubo rivalidades entre ellas, exceptuando la barra de la
136

cuarta generación la cual en muchos casos fue rechazada por


los aquí citados y por los vecinos en general.

 BARRA SEGUNDA GENERACION 1: chacho, Hector


Córdoba “camello”, Dago, carraspera, Ramiro Avendaño,
pichón y Nectalí, Conrado piña y hermanos. El “ojon”
Octavio. Jaime Pirra, Oscar Torres, Jorge Torres,

 BARRA SEGUNDA GENERACION 2: Alfonso “cantinazo”,


Dimas, Oscar Toro, Norman Galeano, Pablo Piedrahita.
Mario flaco, el loco Ramiro (no confundir con el loco
Ruperto y su hermano, los cuales hacia la década del 50
también vivieron en Arrabal.) Alberto Vargas, Rodrigo
Milán, Jesús Milán, Mingo Milán, Leonardo “el aguililla”,
luis “pepo” “Milica”.

 BARRA TERCERA GENERACIÓN: Gonzalo Flaco, Darío Gil,


Fernando Morales, Diego “luntin”,Javier Tamayo, Javier
Correa, Manuel “cañola”, Elkin Vargas, Gildardo Rivera,
Ruben arcila, Gabriel Rivera, Iván “caquita”, Omar Tarugo,
Jairo “calavera”,Nando Cambalache, Napoleón y Javier
Avendaño , Jorgito Gil, Mario Cañola, Edgar cano “canito”,
los gagos, Arley Giraldo, Gonzalo Milán, Mario pisco,
costaleja Tavo y Tolosa. Un poco mas jóvenes recuerdo a
Mario “pomponio” y a Fernando el hijo de Chucho, Oswaldo
Tamayo, Javer y Bernardo Álvarez.

 BARRA DE LA CUARTA GENERACION. Emilio el hijo de la


loca Tulia, Tata, “Manene” el hijo de Maruja chiva, los hijos
de Luis Pepo, Los hijos de Otilia la gorda, los hijos de las
Rave, los hijos de Eleuterio, los hijos de Raúl y Pablo
Piedrahita.
 Inclasificables: Hueso, el chapín, Máximo, Modesto
Araque, lolo, Germán garra, chepito,
 y otros más que aunque no nacieron en Arrabal, hacen
parte de esta historia.
137

CAPITULO CINCO:

LA VIRTUAL DESAPARICIÓN DEL BARRIO.

scribo en febrero de 2010, y lo hago con una mezcla de

E deseo y temor. Deseo de reencontrarme con mis


ancestros, con mis amigos y con mis querencias; y temor
de no tener con quien compartir la resurrección de estas
vivencias, temor a encontrar el silencio como interlocutor,
temor a que la muerte del barrio condene a muerte mis
recuerdos.

El barrio tiene al momento poca vida, está agonizante y herido


de muerte por el progreso de la ciudad y por la falta de
coherencia barrial y comunitaria de sus habitantes los cuales,
espacio temporalmente, permitieron que la evolución no se
diera hacia su consolidación, sino a su descomposición, al
convertir sus casas en talleres y al derrumbar las puertas del
hogar que nos vio nacer para dar paso a todo tipo de negocios y
bisutería que hirió desde hace mucho tiempo al barrio al
convertirlo en un mercado Persa.

Con razón al comentar con alguien, sobre la motivación que


tenía de plasmar los recuerdos de mi barrio, como una forma de
rendirle tributo y reconocimiento, me dijo:

“que bella idea pero ¿para que? Para que leamos la historia vos
y yo?, El barrio no existe, las familias que quedan son ya
pocas”.

Escribamos le repliqué, para que al menos los que se fueron y


los pocos que quedan la lean, pues ese es mÍ mínimo
compromiso con lo que siempre he amado: El barrio que me vio
nacer.
138

Grata sorpresa me llevé al encontrar las voces de mi barrio a


través de los correos electrónicos de aquellos que encontraron
en mi voz su voz, en mis recuerdos los suyos y en mis vivencias
nuestra comunicación con lo que queremos.

ANTECEDENTES Y CAUSAS DE LA DESAPARICIÓN BARRIAL.

Entre los antecedentes y causas de la desaparición del barrio


Arrabal considero las siguientes, obviamente abiertas al debate.

 MEDELLÍN OBRERO: ARRABAL, BARRIO SIN OBREROS:


Nuestra ciudad ha sido por excelencia el centro obrero
más importante del país, cerca de nuestro barrio y en su
área de influencia, siempre hubo grandes empresas y en
cuyo seno la clase obrera, obviamente eran su razón de
ser.

Si observamos detenidamente la composición social y laboral


de los habitantes de nuestro barrio, nos llevamos una sorpresa:
Inicialmente los primeros pobladores, fueron personas que
procedían o bien de la clase obrera, o de sectores campesinos
que habían amasado algún patrimonio que les permitió comprar
terrenos en lo que hoy es arrabal, y construir su vivienda. Es de
anotar que estos sectores, tienen estabilidad y seguridades que
le brinda por ejemplo una pensión.

Lo anterior en las primeras décadas de desarrollo del barrio


permitió, ampliación del barrio y relativa tranquilidad en sus
habitantes, fortaleciendo la coherencia barrial y los lazos de
vecindario y la motivación y preocupación por el progreso. La
anterior generación de los viejos habitantes del barrio, no
generó el estimulo hacia el estudio en sus hijos, y mucho menos
ante la falta de interés por este, la motivación por el trabajo
organizado en la empresa o en la fabrica. Desconociendo a este
como único elemento de brindar a una familia desprotegida,
seguridades en el futuro.

Sobre las primeras generaciones, se propagan los oficios, los


cuales característicos del país siglo XIX, enmarcan una
sociedad precapitalista.
139

Dichos oficios, se actualizan en plena época de fin de la


violencia y pleno auge del desarrollo capitalista en Colombia;
generando de hecho un salto atrás. Nuestro barrio es un
ejemplo: Proliferación de sastres, peluqueros, albañiles,
talabarteros, “coge goteras”, fontaneros, chóferes de bus,
carretilleros etc. Estas eran las profesiones de nuestros jóvenes
de las primeras generaciones, (con algunas excepciones),
generando con ello una mano de obra barata, inestable y
profundamente insegura frente al futuro que, en muchos casos
repetía el oficio del padre. Lo peor estaba por venir.

 FALTA DE COMPROMISO CON LA EDUCACION:

La observación de los datos y las personas nos sigue dando la


razón en cuanto a las causas del progresivo desmoronamiento
barrial; es innegable que hubo mayor compromiso con el estudio
en las viejas generaciones. Fue así como había muchos
muchachos y muchachas con titulo de bachiller y de estos,
algunos ingresaron a la universidad y fueron profesionales. Con
título de bachiller Recuerdo a: Tan solo: los Milanes, Gonzalo
Montoya, Gildardo, Gabriel Rivera, Rubén Darío Arcila, Fernando
el hijo de chucho y Oscar Toro8 De las mujeres recuerdo a: las
Córdoba. Sonia, Imperio, Gloria, Bettty; recuerdo a Marlene
Jaramillo Miryam Gregory y Amparo Tamayo, así como lyda la
hija de Blandina entre las que recuerdo. También había
muchachas capacitadas en educación comercial y secretariado.
A pesar de lo anterior, son superiores en número los que
abandonaron los estudios para trabajar prematuramente.

Aclaro. Al visitar el barrio recientemente encontré un sinnúmero


de profesionales muchos hijos de mis amigos lo cual me llena
de satisfacción y orgullo, los cuales pertenecen a una quinta
generación que no conocí y que solo ahora me aproximo a ella y
me permite así un nuevo análisis para llegar a las mismas
consecuencias como veremos.

En otro aparte de la presente historia, se comentó como los que


entramos a estudiar a la escuela primaria, cada año veíamos
como nos quedábamos solos sin compañeros del barrio, a los

8
Nótese que los bachilleres con excepción de los Milanes y Oscar Toro, son todos de la tercera
generación, la cual fue la que produjo a las personas mas estabilizadas económicamente.
140

cuales luego los veíamos cubiertos de grasa o de pintura y


fumando cigarrillo porque ya ganaban para ello. Al
preguntárseles, el porque el abandono del estudio, en la gran
mayoría la respuesta era la misma: ·”Mi papá me sacó para que
le ayudara”,

Muchos continuamos y logramos coronar los estudios


profesionales. Otros podrían aducir a la pobreza, la
imposibilidad de continuar. A estos les respondemos que
conocimos los esfuerzos de personas más pudientes que
nuestras familias que no lograron que sus hijos continuaran
estudiando. Pero también conocimos la falta de compromiso de
sus hijos los cuales estudiaban con nosotros y su compromiso
era mínimo. Conocimos también el hecho que, muchas familias,
ante el primer fracaso, sacaban a los muchachos de la escuela,
e inmediatamente eran puestos a trabajar, por lo regular en el
mismo oficio del padre.

Lo anterior, permitió que: “quien gana” dinero, toma aún más


distancia con la educación, anotamos también que; la pronta
llegada a algunos vicios tales como el licor, por lo poco de los
un los ingresos, genera irresponsabilidades familiares, que van
a repercutir en la estabilidad familiar.

En conclusión no hubo compromiso familiar y seguimiento


permanente a los hijos, los cuales fueron posteriormente a
engrosar las filas de los trabajadores estacionarios y
temporales, sin seguridad para si y para sus hijos, sin formación
educativa y axiológica fuerte lo cual va a dar como resultado:
los muchachos de la cuarta generación, a los cuales amigo
lector, no soy el llamado a evaluar, aunque mas adelante me
atreveré.

 PERDIDA DE IDENTIDAD BARRIAL PRODUCTO DE LA


POBREZA.

Los anteriores elementos aunque no son únicos, son


determinantes en la desaparición del barrio: la inestabilidad
económica producto de la inexistencia de un trabajo estable, la
falta de gente preparada para avanzar desde la educación, a fin
141

de mejorar la calidad de vida; colocó a la comunidad barrial en


un alto estado de indefensión frente a la supervivencia en
primera instancia y en segunda instancia frente al desarrollo de
la ciudad. Será en última instancia esta variable, la liquidadora
definitiva del barrio en menos de tres años?.

ETAPAS DE LA DESAPARICION DEL BARRIO:

PRIMERA ETAPA: La CONVERSION DEL BARRIO EN


INQUILINATO.9

agamos un poco de historia: La situación económica

H asfixiante, los bajos ingresos, el desempleo permanente


y la agobiante situación a que sometían los caros
servicios públicos y las famosas “valorizaciones” que cobraban
a precio de estrato 5 a sectores pobres de estrato 0 al 2,
obligaron a los habitantes del barrio a alquilar “piezas “de sus
casas a fin de paliar la terrible situación económica.

Llegaron gentes nuevas, buenas la inmensa mayoría; pero este


no es el problema. Así empezó a derrumbarse la cohesión
barrial. Por lo anterior pasamos casi todos: nuestras casas
perdieron intimidad, perdieron fuego al perder sentido de hogar,
llegaron nuevos hábitos y costumbres a convivir con lo que en
nuestras residencias, antes era solo nuestro.

La existencia como barrio lo determina la existencia de una


comunidad de vecinos que lo ama, lo construye, lo reconstruye
permanentemente y lo defiende. Pero este no era nuestro caso.
Poco a poco fuimos cayendo en la nausea: ya el barrio no
significaba nada para nosotros. Lo anterior se sustenta hoy con
la existencia de algunos lideres que no renuncian a perder su
esencia de ser Arrabaleros.

9
Nota: No confundir lo anterior que en esencia se refiere a lo que acontecía en las casas , con lo que
acontecía en los pasajes , lo cual es normal, pues su esencia es servir de inquilinato.
142

Lo anterior, desarrolló según mi concepto la etapa uno de su


desaparición cual es: La CONVERSION DEL BARRIO EN
INQUILINATO.10

ETAPA DOS: CONVERSION DEL BARRIO EN TALLER.

osteriormente y de buenas a primera, vimos como

P nuestro barrio sufría una nueva etapa de evolución: poco


a poco vimos como todos los miembros del barrio que
antes laboraban en los talleres de Barrio Triste, el corazón de
Jesús, San Benito etc comenzaron a trasladar sus talleres a las
calles del barrio. En esto hay que decirlo, fueron los precursores
los Churumbelones. Ya los vecinos no tenían por donde caminar
libremente, o cuadrar sus vehículos, el desaseo y los residuos
de llantas, gasolina y grasa empezó a herir el barrio; luego se
progresó hasta tumbar las puertas del hogar materno para
convertir los cuartos de la familia en tapicerías, venta y cambio
de aceite, talabarterías, etc.

De esta hecatombe no se escapó ni nuestro querido café Moscú,


el cual de un día para otro pasó de ser el solaz y el
descansadero barrial, a ser la talabartería de “trompechucha” y
sus amigotes.

Por otra parte, como ya lo enunciamos a esta altura de la


evolución de la desaparición del barrio, no hay coherencia
barrial ni amor por el. La delincuencia empieza a sentirse como
nunca. Los ciudadanos empiezan a ver que la inseguridad ya
llegó; es claro para todos como, los muchachos de la ultima
generación aquí descrita, no están en las universidades, pero si
están muchos de ellos en las cárceles y ya empiezan a llegar
algunos a los cementerios. El irrespeto barrial está al orden del
día: pues ya hay entre estos jóvenes, algunos elementos
quienes violando la más elemental norma “ética” delincuencial,
roban en el barrio y someten a quienes los vieron nacer a la
incertidumbre a la amenaza, al robo y al terror. Este elemento
no fue generalizado en todos los jóvenes. Como ha ocurrido en

10
Nota: No confundir lo anterior que en esencia se refiere a lo que acontecía en las casas , con lo que
acontecía en los pasajes , lo cual es normal, pues su esencia es servir de inquilinato.
143

todos los barrios, son tan solo unos pocos, pero su accionar es
fuerte e intimidador y los resultados son los mismos.

Ya no había centro cívico, ni junta de vecinos que reclamara


frente al atropello, máxime que los autores eran tenidos como
unos de los más bravos del barrio; y fue así como el barriecito
que muchos dicen querer más que yo, pasó a la etapa dos de su
desaparición: CONVERSION DEL BARRIO EN TALLER Y CLOACA.

ETAPA TRES: CONVERSION DEL BARRIO EN


ALMACENES.

espués de lo anteriormente expuesto, el barrio se

D transforma: muchos de sus habitantes ancestrales ya se


han ido o se van a otros lugares y otros barrios van a ser
su asilo, porque el “vividero” de un ser humano esta claramente
determinado por ciertas variables que lo hacen único: espacio
social, espacio urbano claramente delimitado, espacio de
esparcimiento, espacio de seguridad social, etc. Y en nuestro
barrio lo anterior no existe.

El último proceso evolutivo hacia su desaparición, lo da el


barrio cuando empiezan a derrumbarse construcciones para dar
paso a distribuidoras de llantas, ventas de colchones, etc. Esto
consolida la etapa definitiva de desaparición del barrio.

Los nuevos profesionales todos jóvenes, poco a poco


abandonan el barrio. Han adquirido un nuevo status, su nexo
con el Arrabal de ayer es: sentimental y está arraigado en el
corazón. Este se refrenda cada ocho días jugando cartas en la
casa de los Piñas o compartiendo con los amigos y vecinos para
emigrar luego a sus casas ubicadas en la periferia barrial.

Hoy, solo quedan unas pocas familias que soñando en la gallina


de los huevos de oro, esperando que el sufrimiento de la
pobreza es soportable, cuando al final con sus casitas van a
salir multimillonarios del sector, sin tener por contado el valor
que el municipio tiene a esas tierras destinadas a servir de
144

construcción de grandes bloques multifamiliares de


apartamentos.

Solo me resta una pregunta si en otras épocas no pudimos


luchar todos contra arbitrarios impuestos y valorizaciones
injustas; como se podrá luchar ahora solos contra el terrible
monstruo del urbanismo pos moderno y el progreso? De todas
maneras les deseo lo mejor.
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REFLEXIONES FINALES:

Son las seis de la tarde en la calurosa Pereira de hoy sábado 13


de marzo de 2010. Estoy solo acompañado de un café y mi
computador, acabo de terminar esta crónica histórica de mi
querido barrio, al cual llevo siempre conmigo, y el cual no solo
en América y Europa he hecho conocer, y del cual me
enorgullezco al mencionarlo. Espero que al menos los viejos que
la lean, se deleiten recordando los tiempos que se fueron, pero
que a la vez les sirvan de reflexión para construir con nuestros
nietos los hombres buenos y preparados para los tiempos que
vienen.

Este pequeño esfuerzo, que me puso a volar sobre las alas de la


memoria llevándome a mis ancestros ya idos, mis amigos unos
vivos y otros muertos, mis amigas que siempre recuerdo, mis
amores de juventud, mis aciertos y mis errores; permitió valorar
el trabajo que acabo de realizar, y por ello quiero que mi gente
lo conozca, lo mejore, lo fortalezca y lo corrija porque es de
ellos y para ellos y con esa intención lo escribí.

Finalmente: Reitero la necesidad de fortalecer el presente


escrito con su ayuda, si nuestro barrio desaparece no podemos
permitir que desaparezca de nuestros recuerdos y nuestra
memoria.
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