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Presentamos un cuadro en el que aparece un hombre ciego, este pedía limosna para sobrevivir, porque no podía valerse por sí mismo, me imagino que hoy en día hay muchos Bartimeos al rededor del mundo que no pueden valerse por sí mismo aun teniendo la vista de sus dos ojos, me refiero a los que viven sufriendo a causa de las enfermedades, miedos, desempleo, escaseces, hambre y muchas circunstancia más que nos atemorizan, que nos mantiene atados a un sistema mundo y ciegos a creerle a Dios.
Marcos 10:46 Jesús y sus discípulos pasaron por la ciudad de Jericó, y al salir de allí mucha gente los siguió. Junto al camino estaba sentado un ciego que pedía limosna. Se llamaba Bartimeo hijo de Timeo. Podemos ver que este hombre estaba sentado junto al camino, tal vez resignado a su condición, a su enfermedad, a la situación cotidiana que vivía, pero él era ciego, no sordo (muchas a veces nosotros somos sordos no ciegos) me imagino que ya había escuchado de Jesús; porque al escuchar que el pasaba por el lugar tomo una actitud de alguien necesitado, empezó a clamar al que podía ayudarle.
Marcos 10:47 Cuando Bartimeo oyó que Jesús de Nazaret estaba pasando por allí, empezó a gritar: Jesús, tú que eres el Mesías, ¡ten compasión de mí y ayúdame! 48 La gente comenzó a reprender al ciego para que se callara, pero él gritaba con más fuerza todavía: Señor, tú que eres el Mesías, ¡ten compasión de mí y ayúdame! Podemos ver que este hombre al oír de Jesús a de haber pensado, es Jesús el que he escuchado que hace milagros, que sana a los enfermos y echa fuera los demonio, que tiene autoridad y poder sobre todas las cosas, entonces empezó a clamar por su necesidad, ¿Cuándo empezaras a clamar tu por tu necesidad? Muchas veces encontraras gente negativa, no se puede, a eso no tiene cura, no hay trabajo, eso no se vende, levanta tu ánimo y se cómo Bartimeo grita más fuerte, clama porque Dios escucha, Reconoce el señorío de Jesús y declara que él puede ayudarte, confía en él y espera tu ayuda pronto vendrá, para Dios no hay nada imposible.
Marcos 10:49 Entonces Jesús se detuvo y dijo: Llámenlo. La gente llamó al ciego y le dijo: ¡No tengas miedo! Ven, que Jesús te llama. 50 El ciego tiró su manto, y de un salto se puso de pie y se acercó a Jesús. 51 Jesús le dijo: ¿Qué quieres que haga por ti? El ciego respondió: Maestro, haz que pueda yo ver de nuevo. Aquel hombre que salió a pedir limosna, sin esperanza ni consuelo, aquel hombre que salió a su vida rutinaria jamás pensó, que ese sería el día en que Jesús vendría a su vida y le sanaría, el clamo a gran voz y a pesar de la gente negativa, de la gente incrédula, el siguió clamando más fuerte y el resultado: Jesús paro, se detuvo y se tomó de su tiempo para atender la petición de este hombre necesitado, mi amigo, hermano, Dios siempre se tomara un tiempo para atender tu necesidad, lo que debes de entender que él es Dios soberano, muchas veces no nos da lo que pedimos; pero nos da lo que necesitamos, muchas veces se tarda un poco en responderte porque él está pensando la mejor solución para tu problema.
No desesperes por la situación que estas pasando toma la mejor decisión así como hizo Bartimeo, Creyó a lo que la gente decía de Jesús, puso su confianza en Dios y Dios hizo a su favor, aquel hombre que salió de su casa como de costumbre jamás pensó que ese día regresaría viendo, lleno del amor de Dios y que llevaría a Jesús en su corazón eternamente.
Marcos 10:52 Jesús le dijo: Puedes irte; estás sano porque confiaste en Dios. En ese momento, el ciego pudo ver de nuevo, y siguió a Jesús por el camino. Podemos ver que Jesús le dice estas sano, porque confiaste en Dios, recobro la vista, la actitud de este hombre agradecido con Dios; le siguió por el camino. Y te aseguro que jamás se olvidó en todos los días de su vida de agradecer a Jesús por darle una nueva forma de vida.
Hoy es el día en que puedes doblar tus rodillas y clamar a Dios, hoy es el día que puedes decidir dejar todo en manos de Dios com
Presentamos un cuadro en el que aparece un hombre ciego, este pedía limosna para sobrevivir, porque no podía valerse por sí mismo, me imagino que hoy en día hay muchos Bartimeos al rededor del mundo que no pueden valerse por sí mismo aun teniendo la vista de sus dos ojos, me refiero a los que viven sufriendo a causa de las enfermedades, miedos, desempleo, escaseces, hambre y muchas circunstancia más que nos atemorizan, que nos mantiene atados a un sistema mundo y ciegos a creerle a Dios.
Marcos 10:46 Jesús y sus discípulos pasaron por la ciudad de Jericó, y al salir de allí mucha gente los siguió. Junto al camino estaba sentado un ciego que pedía limosna. Se llamaba Bartimeo hijo de Timeo. Podemos ver que este hombre estaba sentado junto al camino, tal vez resignado a su condición, a su enfermedad, a la situación cotidiana que vivía, pero él era ciego, no sordo (muchas a veces nosotros somos sordos no ciegos) me imagino que ya había escuchado de Jesús; porque al escuchar que el pasaba por el lugar tomo una actitud de alguien necesitado, empezó a clamar al que podía ayudarle.
Marcos 10:47 Cuando Bartimeo oyó que Jesús de Nazaret estaba pasando por allí, empezó a gritar: Jesús, tú que eres el Mesías, ¡ten compasión de mí y ayúdame! 48 La gente comenzó a reprender al ciego para que se callara, pero él gritaba con más fuerza todavía: Señor, tú que eres el Mesías, ¡ten compasión de mí y ayúdame! Podemos ver que este hombre al oír de Jesús a de haber pensado, es Jesús el que he escuchado que hace milagros, que sana a los enfermos y echa fuera los demonio, que tiene autoridad y poder sobre todas las cosas, entonces empezó a clamar por su necesidad, ¿Cuándo empezaras a clamar tu por tu necesidad? Muchas veces encontraras gente negativa, no se puede, a eso no tiene cura, no hay trabajo, eso no se vende, levanta tu ánimo y se cómo Bartimeo grita más fuerte, clama porque Dios escucha, Reconoce el señorío de Jesús y declara que él puede ayudarte, confía en él y espera tu ayuda pronto vendrá, para Dios no hay nada imposible.
Marcos 10:49 Entonces Jesús se detuvo y dijo: Llámenlo. La gente llamó al ciego y le dijo: ¡No tengas miedo! Ven, que Jesús te llama. 50 El ciego tiró su manto, y de un salto se puso de pie y se acercó a Jesús. 51 Jesús le dijo: ¿Qué quieres que haga por ti? El ciego respondió: Maestro, haz que pueda yo ver de nuevo. Aquel hombre que salió a pedir limosna, sin esperanza ni consuelo, aquel hombre que salió a su vida rutinaria jamás pensó, que ese sería el día en que Jesús vendría a su vida y le sanaría, el clamo a gran voz y a pesar de la gente negativa, de la gente incrédula, el siguió clamando más fuerte y el resultado: Jesús paro, se detuvo y se tomó de su tiempo para atender la petición de este hombre necesitado, mi amigo, hermano, Dios siempre se tomara un tiempo para atender tu necesidad, lo que debes de entender que él es Dios soberano, muchas veces no nos da lo que pedimos; pero nos da lo que necesitamos, muchas veces se tarda un poco en responderte porque él está pensando la mejor solución para tu problema.
No desesperes por la situación que estas pasando toma la mejor decisión así como hizo Bartimeo, Creyó a lo que la gente decía de Jesús, puso su confianza en Dios y Dios hizo a su favor, aquel hombre que salió de su casa como de costumbre jamás pensó que ese día regresaría viendo, lleno del amor de Dios y que llevaría a Jesús en su corazón eternamente.
Marcos 10:52 Jesús le dijo: Puedes irte; estás sano porque confiaste en Dios. En ese momento, el ciego pudo ver de nuevo, y siguió a Jesús por el camino. Podemos ver que Jesús le dice estas sano, porque confiaste en Dios, recobro la vista, la actitud de este hombre agradecido con Dios; le siguió por el camino. Y te aseguro que jamás se olvidó en todos los días de su vida de agradecer a Jesús por darle una nueva forma de vida.
Hoy es el día en que puedes doblar tus rodillas y clamar a Dios, hoy es el día que puedes decidir dejar todo en manos de Dios com
Presentamos un cuadro en el que aparece un hombre ciego, este pedía limosna para sobrevivir, porque no podía valerse por sí mismo, me imagino que hoy en día hay muchos Bartimeos al rededor del mundo que no pueden valerse por sí mismo aun teniendo la vista de sus dos ojos, me refiero a los que viven sufriendo a causa de las enfermedades, miedos, desempleo, escaseces, hambre y muchas circunstancia más que nos atemorizan, que nos mantiene atados a un sistema mundo y ciegos a creerle a Dios.
Marcos 10:46 Jesús y sus discípulos pasaron por la ciudad de Jericó, y al salir de allí mucha gente los siguió. Junto al camino estaba sentado un ciego que pedía limosna. Se llamaba Bartimeo hijo de Timeo. Podemos ver que este hombre estaba sentado junto al camino, tal vez resignado a su condición, a su enfermedad, a la situación cotidiana que vivía, pero él era ciego, no sordo (muchas a veces nosotros somos sordos no ciegos) me imagino que ya había escuchado de Jesús; porque al escuchar que el pasaba por el lugar tomo una actitud de alguien necesitado, empezó a clamar al que podía ayudarle.
Marcos 10:47 Cuando Bartimeo oyó que Jesús de Nazaret estaba pasando por allí, empezó a gritar: Jesús, tú que eres el Mesías, ¡ten compasión de mí y ayúdame! 48 La gente comenzó a reprender al ciego para que se callara, pero él gritaba con más fuerza todavía: Señor, tú que eres el Mesías, ¡ten compasión de mí y ayúdame! Podemos ver que este hombre al oír de Jesús a de haber pensado, es Jesús el que he escuchado que hace milagros, que sana a los enfermos y echa fuera los demonio, que tiene autoridad y poder sobre todas las cosas, entonces empezó a clamar por su necesidad, ¿Cuándo empezaras a clamar tu por tu necesidad? Muchas veces encontraras gente negativa, no se puede, a eso no tiene cura, no hay trabajo, eso no se vende, levanta tu ánimo y se cómo Bartimeo grita más fuerte, clama porque Dios escucha, Reconoce el señorío de Jesús y declara que él puede ayudarte, confía en él y espera tu ayuda pronto vendrá, para Dios no hay nada imposible.
Marcos 10:49 Entonces Jesús se detuvo y dijo: Llámenlo. La gente llamó al ciego y le dijo: ¡No tengas miedo! Ven, que Jesús te llama. 50 El ciego tiró su manto, y de un salto se puso de pie y se acercó a Jesús. 51 Jesús le dijo: ¿Qué quieres que haga por ti? El ciego respondió: Maestro, haz que pueda yo ver de nuevo. Aquel hombre que salió a pedir limosna, sin esperanza ni consuelo, aquel hombre que salió a su vida rutinaria jamás pensó, que ese sería el día en que Jesús vendría a su vida y le sanaría, el clamo a gran voz y a pesar de la gente negativa, de la gente incrédula, el siguió clamando más fuerte y el resultado: Jesús paro, se detuvo y se tomó de su tiempo para atender la petición de este hombre necesitado, mi amigo, hermano, Dios siempre se tomara un tiempo para atender tu necesidad, lo que debes de entender que él es Dios soberano, muchas veces no nos da lo que pedimos; pero nos da lo que necesitamos, muchas veces se tarda un poco en responderte porque él está pensando la mejor solución para tu problema.
No desesperes por la situación que estas pasando toma la mejor decisión así como hizo Bartimeo, Creyó a lo que la gente decía de Jesús, puso su confianza en Dios y Dios hizo a su favor, aquel hombre que salió de su casa como de costumbre jamás pensó que ese día regresaría viendo, lleno del amor de Dios y que llevaría a Jesús en su corazón eternamente.
Marcos 10:52 Jesús le dijo: Puedes irte; estás sano porque confiaste en Dios. En ese momento, el ciego pudo ver de nuevo, y siguió a Jesús por el camino. Podemos ver que Jesús le dice estas sano, porque confiaste en Dios, recobro la vista, la actitud de este hombre agradecido con Dios; le siguió por el camino. Y te aseguro que jamás se olvidó en todos los días de su vida de agradecer a Jesús por darle una nueva forma de vida.
Hoy es el día en que puedes doblar tus rodillas y clamar a Dios, hoy es el día que puedes decidir dejar todo en manos de Dios com
Presentamos un cuadro en el que aparece un hombre ciego, este peda limosna
para sobrevivir, porque no poda valerse por s mismo, me imagino que hoy en da hay muchos Bartimeos al rededor del mundo que no pueden valerse por s mismo aun teniendo la vista de sus dos ojos, me refiero a los que viven sufriendo a causa de las enfermedades, miedos, desempleo, escaseces, hambre y muchas circunstancia ms que nos atemorizan, que nos mantiene atados a un sistema mundo y ciegos a creerle a Dios. Marcos 10:46 Jess y sus discpulos pasaron por la ciudad de Jeric, y al salir de all mucha gente los sigui. Junto al camino estaba sentado un ciego que peda limosna. Se llamaba Bartimeo hijo de Timeo. Podemos ver que este hombre estaba sentado junto al camino, tal vez resignado a su condicin, a su enfermedad, a la situacin cotidiana que viva, pero l era ciego, no sordo (muchas a veces nosotros somos sordos no ciegos) me imagino que ya haba escuchado de Jess; porque al escuchar que el pasaba por el lugar tomo una actitud de alguien necesitado, empez a clamar al que poda ayudarle. Marcos 10:47 Cuando Bartimeo oy que Jess de Nazaret estaba pasando por all, empez a gritar: Jess, t que eres el Mesas, ten compasin de m y aydame! 48 La gente comenz a reprender al ciego para que se callara, pero l gritaba con ms fuerza todava: Seor, t que eres el Mesas, ten compasin de m y aydame! Podemos ver que este hombre al or de Jess a de haber pensado, es Jess el que he escuchado que hace milagros, que sana a los enfermos y echa fuera los demonio, que tiene autoridad y poder sobre todas las cosas, entonces empez a clamar por su necesidad, Cundo empezaras a clamar tu por tu necesidad? Muchas veces encontraras gente negativa, no se puede, a eso no tiene cura, no hay trabajo, eso no se vende, levanta tu nimo y se cmo Bartimeo grita ms fuerte, clama porque Dios escucha, Reconoce el seoro de Jess y declara que l puede ayudarte, confa en l y espera tu ayuda pronto vendr, para Dios no hay nada imposible. Marcos 10:49 Entonces Jess se detuvo y dijo: Llmenlo. La gente llam al ciego y le dijo: No tengas miedo! Ven, que Jess te llama. 50 El ciego tir su manto, y de un salto se puso de pie y se acerc a Jess. 51 Jess le dijo: Qu quieres que haga por ti? El ciego respondi: Maestro, haz que pueda yo ver de nuevo. Aquel hombre que sali a pedir limosna, sin esperanza ni consuelo, aquel hombre que sali a su vida rutinaria jams pens, que ese sera el da en que Jess vendra a su vida y le sanara, el clamo a gran voz y a pesar de la gente negativa, de la gente incrdula, el sigui clamando ms fuerte y el resultado: Jess paro, se detuvo y se tom de su tiempo para atender la peticin de este hombre necesitado, mi amigo, hermano, Dios siempre se
Cristhofer Villalon Francino
Jess y el ciego Bartimeo
tomara un tiempo para atender tu necesidad, lo que debes de entender que l
es Dios soberano, muchas veces no nos da lo que pedimos; pero nos da lo que necesitamos, muchas veces se tarda un poco en responderte porque l est pensando la mejor solucin para tu problema.
No desesperes por la situacin que estas pasando toma la mejor decisin as
como hizo Bartimeo, Crey a lo que la gente deca de Jess, puso su confianza en Dios y Dios hizo a su favor, aquel hombre que sali de su casa como de costumbre jams pens que ese da regresara viendo, lleno del amor de Dios y que llevara a Jess en su corazn eternamente. Marcos 10:52 Jess le dijo: Puedes irte; ests sano porque confiaste en Dios. En ese momento, el ciego pudo ver de nuevo, y sigui a Jess por el camino. Podemos ver que Jess le dice estas sano, porque confiaste en Dios, recobro la vista, la actitud de este hombre agradecido con Dios; le sigui por el camino. Y te aseguro que jams se olvid en todos los das de su vida de agradecer a Jess por darle una nueva forma de vida. Hoy es el da en que puedes doblar tus rodillas y clamar a Dios, hoy es el da que puedes decidir dejar todo en manos de Dios como lo hizo este hombre ciego y recibi su milagro, as es Dios t no sabes cundo te asombrara y te responder, pero l lo har, este hombre sali a pedir limosna pero jams paso por su mente que Jess vendra a su vida para ayudarle y sanarle. Hoy es tu da la palabra de Dios dice que Dios jams rechaza a ningn corazn contrito y humillado, solo dobla tus rodillas y clama a Dios por tu necesidad y veras como l se toma su tiempo para atenderte y responderte. Dios te bendiga, y que el amor del Padre, el amor de Jesucristo y la uncin de su espritu Santo este siempre contigo, en el nombre de Jess, amen.