Segn Nicolas de Cusa Sobre la teologa negativa Nos ha enseado la
sagrada ignorancia que Dios es inefable; y ello porque es infinitamente
superior a cuanto se puede nombrar; y esto, a su vez, porque es la verdad suprema. Por todo esto es manifiesto que, en teologa, las negaciones son verdaderas, y las afirmaciones, insuficientes, y, sin embargo, las negaciones que remueven del ser perfectsimo las cosas ms imperfectas, son ms verdaderas que las dems, como que es ms verdadero decir que Dios no es piedra que el decir que no es vida o inteligencia, y que no es embriaguez ms que el que no es virtud. Lo contrario sucede en las afirmaciones; pues es ms verdadera la afirmacin de que Dios es inteligencia y vida, que la que de que es tierra, piedra o cuerpo. Del nombre de Dios y de la teologa afirmativa/ En efecto, es evidente que, siendo el mximo absoluto, al cual nada se opone, ningn nombre le puede convenir propiamente. Pues todos los nombres se imponen en virtud de alguna peculiaridad descubierta por la razn, y que permite distinguir una cosa de otra. Pero donde todas las cosas son uno, no puede haber ningn nombre apropiado
Se habla de teologa negativa cuando
la reflexin sobre la divinidad o sobre la trascendencia reconoce la imposibilidad o la incapacidad por parte del hombre de conocer el objeto de su investigacin, y tambin cuando se niega la posibilidad de nombrarlo o de representarlo. Tambin puede afirmarse que la teologa es negativa cuando pone de manifiesto la ausencia de Dios en la historia de los hombres, cuando se reconoce su silencio, cuando no se descubren sus signos. La revelacin cristiana ha ofrecido nuevos argumentos a los defensores de una teologa negativa: el carcter paradjico que asume con frecuencia el discurso de Jess, sus parbolas y sus dichos, la
actitud crtica de una religiosidad
demasiado positivista, y sobre todo el destino de este hombre que, siendo Hijo de Dios, simboliza con su muerte el nivel ms alto del silencio y de la ausencia de Dios. La imagen del crucificado ofrece un argumento indiscutible a los que juzgan el cristianismo como una provocacin, una crisis y un contraste, a los que creen que Dios se manifiesta y al mismo tiempo se oculta en Jesucristo. La llamada ("teologa negativa ha sido siempre una constante en la tradicin teolgica y en la historia de la mstica y de la espiritualidad cristianas. Es posible trazar una lnea en este sentido que parte de Gregorio de Nisa (330-395), que encuentra una de sus expresiones ms originales en Dionisio el PseudoAreopagita (siglo Vl) y que influye en el pensamiento medieval: desde Alberto Magno (1200-1280) y Toms de Aquino (1225-1274), pasando por Duns Escoto (1265-1308), en el terreno teolgico : luego por el Maestro Eckhart ( 1260-
1327) en el terreno mstico, para terminar
en Nicols de Cusa (1401-1464), que describe nuestro conocimiento de Dios con los trminos de docta ignorantia. los telogos posteriores como D. Bonhoeffer (1906-1945) y A. Cox (n. 1929) los que den una forma ms concreta a esta tendencia. En el contexto de una creciente secularizacin social, de una ausencia cultural de referencias religiosas, asume mayor relieve un pensamiento que reconoce al Dios cristiano precisamente en sus ausencias, que sabe sacar ventaja de este ("olvido de Dios. Para ello se critican las estrategias pastorales que intentan identificar demasiado precipitadamente la cercana de Dios a las almas o, peor an, la actitud mezquina de los que se aprovechaban de la negatividad, de los lmites y del sufrimiento de los hombres, para referirse inmediatamente a Dios, que parece hacerse presente en donde hay un vaco. Adems de una falta de respeto y de consideracin para con el misterio de Dios, esto revela una falta de comprensin de la esencia del
cristianismo y de la teologa de la cruz,
que es precisamente una referencia a Dios en su silencio, en su capacidad de salvar sin ejercer violencia alguna ni sobre la razn ni sobre la libertad de los hombres. La sociedad secular nos ofrece una oportunidad de docta ignorantia de la cruz. La teologa afirmativa, va positiva o cataftica, tambin llamada catafatismo (del griego antiguo afirmativo, derivado de afirmar),1 es un mtodo teolgico que admite la posibilidad de conocer a Dios mediante la razn y el contacto con la realidad.2 La creacin, concebida como una obra de Dios, se convierte en el instrumento mediante el cual se pueden identificar los atributos del Creador. Esta teora, as como a travs de declaraciones o afirmaciones,3 es la contraparte del apofatismo.4 Se pueden encontrar sus races en Peri Hermeneias (De Interpretatione) y en Lgica (Organn) de Aristteles. Ms tarde se
desarroll predominantemente en el contexto de la escolstica medieval.
COMUNICACIÓN CON EL MUNDO DE LOS ESPÍRITUS SUS LEYES Y SU PROPÓSITO Experiencias Personales de Un Sacerdote Católico Johannes Greber 1932 by Johannes Greber
Instituto de Estudios Humanitarios Nodo San Cristóbal (IEH) y La Comisión de Bioética Transfronteriza. Por Pascual Mora, Omar Pérez Díaz y Jesús Alfonso Omaña Guerrero